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Gráficos por y codes hechos por Kaffei e Insxne.
Gráficos por y codes hechos por Kaffei e Insxne.
Halloween town | Louis Tomlinson y _____ |.
O W N :: Archivos :: Novelas Abandonadas
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1, 2, 3
Re: Halloween town | Louis Tomlinson y _____ |.
por XimeLoveNutella Jue 17 Oct 2013, 6:27 pm
La idea se oye buenísima linda :shimi:
Espero con ansias que inicies pronto! :BAM:
Besos! xx 
:(L):
:(L): XimeLoveNutella
Re: Halloween town | Louis Tomlinson y _____ |.
por Shaggy. Jue 17 Oct 2013, 7:11 pm
Helou!:BAM: Mi nombre es Shaggy y soy de Argentina 
Me encanta la idea! ¡PORFÍN UN ESPECIAL DE HALLOWEEN QUE VALGA LA PENA!
Bueno, ya hice mi ficha, espero que te guste :) Besos!!:bye:
Me encanta la idea! ¡PORFÍN UN ESPECIAL DE HALLOWEEN QUE VALGA LA PENA!
Bueno, ya hice mi ficha, espero que te guste :) Besos!!:bye:
Shaggy.
Re: Halloween town | Louis Tomlinson y _____ |.
por happy drug. Vie 18 Oct 2013, 11:10 am
pamm182 escribió:I mean, ahora traes una nueva idea? Chequeah tu tienes flow! En cualquier momomento te mando mi ficha. Ya quiero leer este especial de jaloguin jajaja jaloguin xD.
Love you.
My chequetetah volviooooooooo
and now exigo que sigas the wedding planer :meh: ahque (?yeah amore una nueva idea
you know, yo acepto tu ficha fichosa y en cualquier momento ya estas en la novela (? 
así es esta mafia you know.<333Tu ingles is per-fect Feliz Jaloguin.
ilysm.
happy drug.
Re: Halloween town | Louis Tomlinson y _____ |.
por happy drug. Vie 18 Oct 2013, 11:11 am
Jellouvicstyles escribió:Hola Effy! La idea es muy ... como decirlo ...GENIAL! Realmente la amé, necesito el primer cap, siento que será una historia very atrapante
entre hoy y mañana te mando mi ficha, voy a audicionar por una de las gemes
Gracias vic, srsly.
happy drug.
Kissha Schmidt
XimeLoveNutella
Re: Halloween town | Louis Tomlinson y _____ |.
por happy drug. Vie 18 Oct 2013, 2:36 pm
Hoy primer capi del especial 
happy drug.
Especial de Halloween | PART 1: ''Welcome to Halloween town''
por happy drug. Vie 18 Oct 2013, 3:39 pm
Capítulo 1.
WELCOME TO HALLOWEEN TOWN...
Bienvenido a Georgetown leí el gran cartel pegado a un tronco de madera a las afueras del pueblo. Este se encontraba en muy malas condiciones, el tronco estaba a punto de caerse de lado mientras el cartel estaba cubierto en polvo. Normalmente nadie suele salir o entrar al pueblo, es por eso no hay mucho mantenimiento. Ladee mi cabeza un poco sin parar de caminar, mire por la comisura de mi ojo el pueblo al cual acabo de abandonar.
«Mi mama nos matara» pensé mientras veía como me alejaba cada vez más del pueblo. Se supone mi hermana y yo iríamos a una fiesta de té con Ángela, pero al parecer mi hermana cambio de planes. Fuimos a la casa de Stephanie y mi hermana entro para dejarme sola en media calle. Justo cuando creí que ya no saldría decidí volver a casa pero fue cuando al fin mi hermana decidió salir. Ahora éramos tres Stephanie, mi hermana y yo. Caminábamos sin rumbo alguno, o al menos eso creía yo quien no sabía a donde me llevaban. Creo que es un buen lugar ya que desde que salimos del pueblo sus enormes sonrisas no se les borra de la cara.
Podía jurar que ya llevábamos más de dos horas caminando y aun no llegábamos a ningún lugar. Me detuve por un minuto y di media vuelta, ya no se veía el pueblo, ya nos habíamos alejado demasiado de él. Mire a mi alrededor, no era más que tierra con mazorcas cosechadas. Me preguntaba a donde iríamos, volví a dar media vuelta y trote un poco para alcanzar a mi hermana la cual ya se había adelantado más de cinco metros. Comencé a sentir como una gota de sudor caía sobre mi frente, no era porque tuviera calor, al contrario era de noche y el viento helado calaba mis huesos, pero sudaba por miedo más que nada. Recuerdo las historias que mi madre nos contaba sobre este tipo de sitios, decía que por la noche había personas las cuales salían de las mazorcas y mataban a sus víctimas, así como un león que se esconde entre los pastizales y de la nada sale atacando a su presa. Tenía miedo de que saliera un león y yo fuera su presa, no literalmente.
Después de quince minutos de seguir caminando levante mi mirada y a lo lejos pude ver una gran carpa de circo iluminada por fuera con luces destellantes de todos los colores. En realidad era gigante, nunca antes había visto montar una carpa de circo, ni siquiera había visitado un circo. Sabía lo que era gracias a las historias de mi abuela, debido a su gran don para narrar cualquier cosa era posible imaginarte el escenario casi idéntico al que ella contaba.
-¡Al fin! –Suspiro Stephanie-.
Debido a su comentario supuse que aquí era a donde querían llegar « ¿Un circo? » para qué diablos vienen a un circo. Yo no caminaría por horas solo para ver un show de circo, patético. Cada vez me sentía más imbécil, como no lo supuse antes, Amy no es de ir a fiestas de té, de hecho las aborrece.
-¿A dónde vamos? –Cuestione. No me había animado hablar todo el camino desde que salimos del pueblo pues Amy me había callado justo antes de saludar a Stephanie-.
Tanto Stephanie como Amy se hicieron la de los oídos sordos y seguían caminando. Una vez más me ignoraron, aunque prefería eso a que Amy me callara.
Tan solo diez pasos y llegábamos al circo, podía escuchar perfectamente el sonido hueco de la música dubstep. Mi abuela nunca me había contado que solían poner esa música en cada uno de sus shows. Tal vez no quiso asustarme.
Nos detuvimos en la entrada, había varias personas haciendo fila y mostrándole un cuadro de papel a la persona que estaba de seguridad. Este examinaba a las personas, después al papel y se ladeaba un poco para quitar la correa que les limitaba el paso. Él era gordo, alto y su piel era oscura.
En donde vivo los únicos que tienen piel oscura es el pastor de la iglesia y su familia. Nunca antes había conocido a alguien más de ese color, me agradaban. Recuerdo cuando iba con mi padre al campo para «broncearme» pero en realidad eso nunca ocurría, parecía que yo fuera inmune al sol pues no me causaba ni una quemadura. Creo que hasta me blanquee un poco más.
-Credencial –Escuche la voz del guardia de seguridad. Lo que yo creía que antes era un pequeño cuadro de papel, parece ser es una identificación-.
Tan solo faltaba dos personas más para que nos tocara a nosotras.
-¿Trajiste las credenciales? –Pregunto Amy-.
-Por supuesto –Respondió Stephanie- Excepto la de tu hermana…
Si no me equivoco una credencial la dan solamente cuando eres mayor de edad, no más. No entendía por qué Stephanie tenia credencial si apenas tiene 17 años. Tampoco entendía porque pedían credencial, ¿también mi abuela tenía una credencial falsa cada vez que iba al circo?
-No te preocupes –Hablo Amy. Dio media vuelta y quedo justo enfrente de mí-.
Era la primera vez que le veía la cara, después de haber salido del pueblo no hizo más que darme la espalda al igual que Stephanie.
-Yo lo arreglo –Continuo diciendo. Hizo una especie de sonrisa malévola, esa que hace siempre que piensa hacer algo no muy bueno.
Me tomo de los hombros y jalo de las mangas de mi suéter, desgarrándolas. La tela cayó rápidamente hasta mis muñecas dejando al descubierto mis brazos.
-¡¿Qué hiciste?! –Exclame- Era mi suéter favorito.
No podía creer lo que acababa de hacer, rompió mi suéter favorito, el suéter que papa me había regalado. El único recuerdo que tengo de el…
Ahora mi suéter no era más que tela desgarrada encima de mí. Mis ojos por unos momentos se llenaron de lágrimas, no es que fuera alguien muy delicada pero ese suéter tenía mucho valor sentimental para mí.
-No seas exagerada, te regalo el mío –Respondió Amy quien se puso en cuclillas para también desgarrar mi falda, haciéndola casi tan corta que se podían ver mis muslos, incluso más corta que la de Stephanie-.
-¡Es horrendo! –Dije refiriéndome al suéter-.
-Vaya –Exclamo Stephanie, mientras me miraba de pies a cabeza- Así pareces una tremenda puta.
Me limite a responder, nunca en la vida había dicho groserías y no tenía por qué hacerlo ahora y manchar mi perfecto historial de educación. Un historial que no existe, que acabo de inventar.
Sus palabras si dolieron un poco, haberme dicho que me parecía a ella fue una fuerte ofensa pero como suele decir mi mama «las palabras se toman de quien vienen» y no puedo ponerme hacerle caso a una puta que me tacha de puta.
-Cállate Steph… -Dijo mi hermana.
Mientras tanto Stephanie volvió a mirarme una vez más de arriba hacia abajo y volvió a la posición que estaba hace unos segundos, al igual que mi hermana.
-Credenciales –Volví a escuchar la voz del guardia de seguridad. Ahora se encontraba a nuestro lado izquierdo pidiéndonos nuestras credenciales.
Stephanie alzo el brazo y le entrego las credenciales, el señor hizo lo mismo que con todas las personas que entraban, miraba la credencial y después nos miraba fijamente a la cara. Aunque ahora que lo noto no nos está mirando la cara, le está mirando los senos a Stephanie, quien lleva un top que apenas le queda. No le importa si la credencial es falsa o no, aparenta hacer su trabajo mientras se aprovecha a mirarnos fijamente las tetas.
-¿Y la credencial de ella? –Por fin se dignó hablar después de varios minutos mirando los senos de Stephanie.
-Ella… -Musito, Amy- Ella es mi hermana pequeña.
Mi hermana me toco con una mano en mi hombro izquierdo, solo tocándome con las yemas de los dedos y después quitando su mano. Su tono de voz me parecía que estuviera pujando, aunque en realidad creo que ella intento sonar «sensual».
Mientras tanto el hombre que hace unos segundos miraba los senos de Stephanie ahora se encontraba mirándome fijamente, no una mirada tierna, graciosa, tímida o cualquier otro adjetivo que tenga que ver con lindo. Al contrario, su mirar era de lujuria, lo decían sus ojos oscuros, incluso comenzaba a intimidarme un poco.
-Bien –Dijo el señor, después de que se moviera un poco y dejara caer la correa que nos limitaba el paso al circo- Pueden pasar…
Antes de seguir caminando, Amy y Stephanie dieron unos pequeños brinquitos y soltaron un par de gemidos, yo solo deje rodar mis ojos y las seguí en cuanto comenzaron a caminar. La música dubstep conforme mientras más me acercaba era más fuerte el sonido y la molestia en mis oídos. Nunca antes había escuchado música tan fuerte…
De repente sentí un golpe en mi muslo izquierdo, y por reflejo volteé inmediatamente. Ahí estaba el guardia de seguridad justo detrás de mí con una sonrisa en su cara y guiñándome el ojo, era obvio que él fue el imbécil que se atrevió a tocarme. Baje mi mirada y seguí caminando hasta perder de vista al guardia, me estremecí un poco al saber que me había tocado, pero no podía hacer nada. Tal vez si me defendía podría hacer algo peor.
Mientras tanto perdí de vista a mi hermana, no la encontraba por ningún lado, ni ella ni a su mejor amiga. «Buen momento para dejarme sola» pensé, pudiéndome dejar sola en el camino, y se le ocurre dejarme sola en medio de un circo de gente pervertida, genial. Sinceramente no quería salir de ahí, no quería volverme a encontrar con aquel señor así que seguí caminando, ahora estaba en un pasillo largo y oscuro, no podía ver nada, solo caminaba. Al final de este pasillo había una puerta, la cual en sus contornos dejaba ver una luz destellante que se prendía y apagaba. Suponía que es hasta ahí donde tenía que llegar.
La música no dejaba de sonar, cada vez aumentaba el ruido que provenía del circo. Estaba a punto de entrar, realmente este era el dichoso circo del que hablaba mi abuela. El gran circo al que iba cada medio año a ver su shows espectaculares.
Gire la perilla después de haberla buscado por toda la puerta pasando mi mano en ella. Al fin entre. Una vez más me convencí de que el circo que describía mi abuela no era el que yo me imaginaba. Cientos de personas de pie moviéndose al ritmo de la música, algunos bebiendo, otros fumando. Incluso algunos devorándose a besos. Era una nueva escena para mí, nunca había visto a una pareja besarse en público, en el pequeño pueblo donde vivo serias criticado por el resto de tu vida.
Me detuve por un momento, comencé a toser, nunca antes había olido el humo de un cigarrillo, esta era mi primera vez. No solo estaba oliendo uno, si no cientos. No solo tabaco, si no también marihuana. Una vez termine de toser tape mi nariz y seguí caminando, entre la gente pude visualizar a varias chicas las cuales llevaban una falda mil veces más pequeña que la mía, después de todo no me sentía tan desnuda al ver la falda de las demás.
De lejos pude notar la cabellera rojiza de Stephanie hacerse notar entre todas las personas y fui detrás de ella. Me abría paso entre la gente hasta que llegue con Stephanie y por supuesto a un lado estaba Amy.
-¿Dónde se habían metido? –Bufe justo detrás de ellas, muy cerca del oído de Amy para hacerme escuchar.
-¡Lo siento! –Grito Amy- Te estábamos buscando…
Volvió a gritar, con la música a reventar era imposible poder mantener una conversación. Giro enfrente de mi aun sentada en la silla pegada a la barra del bar. En su mano tenía un pequeño vasito con una bebida transparente. Fruncí el ceño, se supone me estaban buscando y están ahí pidiendo bebidas. Levante mi mano y la choque contra el vasito, haciendo que este cayera aun lado de nosotras y se rompiera en mil pedazos derramando la bebida que contenía.
-¡¿Por qué hiciste eso?! –Grito furiosa, Amy-.
-Por haberme dejado sola…
Antes de que Amy gritara para responderme algo la música y luces se apagaron. Se escucharon unos gritos ahogados después de que esto sucediera, y tal como ocurrió en el pasillo, no veía nada. Todos guardaron silencio y de vez en cuando se escuchaban unos pequeños chiflidos…
-¡Bienveidos sean todos! –Se escuchó de repente un eco en la habitación-.
Era la voz de una mujer que, creo, hablaba por micrófono. Hizo una leve pausa de no más de ocho segundos y continuo…
-¡Bienvenidos una vez más al treintagésimo aniversario de… -Hizo otra pausa- Halloween town! –Exclamo esto último casi gritando, algo tonto ya que tenía un micrófono en sus manos. Mientras tanto toda la gente a mi alrededor gritaban exaltados-.
Las luces volvieron a prender, esta vez no eran luces destellantes que prendían y apagaban. Ahora era solo una luz normal la cual iluminaba todo el lugar. Comencé a buscar con la mirada a alguien que sostuviera un micrófono, quería saber quién estaba hablando, pero simplemente no la encontré. De repente una de las grandes pantallas pegadas por encima de la pared se prendió, era gigante, tuve que ladear mi cabeza un poco para ver mejor la pantalla de hasta el fondo.
En el video aparecía una señora, no más de 50 años de edad, no tenía canas. Su cabello era rubio y lo tenía garrado en una coleta. No podía ver muy bien, estaba demasiado lejos la pantalla, así que era lo único que pude distinguir, de ahí en más, nada.
-Las puertas de Halloween town se han cerrado –Comenzó hablar otra vez. La señora que aparecía en la pantalla era realmente la señora que hace unos minutos buscaba-.
-Esta vez si alcanzamos –Musito Stephanie-.
Ella y mi hermana murmuraban cosas mientras la señora hablaba, al parecer después de las nueve de la noche se cerraban las puertas del circo y ya no podía entrar más gente, así llegaran tarde por solo unos segundos. A lo que escuchaba de los murmullos de Stephanie, Amy y ella ya habían venido antes pero no habían llegado a tiempo. Es su primera vez aquí, al igual que yo.
Deje de prestarles atención y volví mi vista a la pantalla donde estaba la señora. Ella seguía hablando:
-Si están aquí es porque les gusta la diversión, las fiestas –La audiencia gritaba conforme ella decía cada palabra- el peligro…
¿Peligro? Que tanto peligro puede haber en una fiesta, nunca he ido a una pero a lo que me han contado lo último que tienen es peligro.
-Los que nos han visitado año tras año sabrán las reglas de principio a fin. –Hizo una pausa- Los que no, por favor pasen al salón B.
Bienvenido a Georgetown leí el gran cartel pegado a un tronco de madera a las afueras del pueblo. Este se encontraba en muy malas condiciones, el tronco estaba a punto de caerse de lado mientras el cartel estaba cubierto en polvo. Normalmente nadie suele salir o entrar al pueblo, es por eso no hay mucho mantenimiento. Ladee mi cabeza un poco sin parar de caminar, mire por la comisura de mi ojo el pueblo al cual acabo de abandonar.
«Mi mama nos matara» pensé mientras veía como me alejaba cada vez más del pueblo. Se supone mi hermana y yo iríamos a una fiesta de té con Ángela, pero al parecer mi hermana cambio de planes. Fuimos a la casa de Stephanie y mi hermana entro para dejarme sola en media calle. Justo cuando creí que ya no saldría decidí volver a casa pero fue cuando al fin mi hermana decidió salir. Ahora éramos tres Stephanie, mi hermana y yo. Caminábamos sin rumbo alguno, o al menos eso creía yo quien no sabía a donde me llevaban. Creo que es un buen lugar ya que desde que salimos del pueblo sus enormes sonrisas no se les borra de la cara.
Podía jurar que ya llevábamos más de dos horas caminando y aun no llegábamos a ningún lugar. Me detuve por un minuto y di media vuelta, ya no se veía el pueblo, ya nos habíamos alejado demasiado de él. Mire a mi alrededor, no era más que tierra con mazorcas cosechadas. Me preguntaba a donde iríamos, volví a dar media vuelta y trote un poco para alcanzar a mi hermana la cual ya se había adelantado más de cinco metros. Comencé a sentir como una gota de sudor caía sobre mi frente, no era porque tuviera calor, al contrario era de noche y el viento helado calaba mis huesos, pero sudaba por miedo más que nada. Recuerdo las historias que mi madre nos contaba sobre este tipo de sitios, decía que por la noche había personas las cuales salían de las mazorcas y mataban a sus víctimas, así como un león que se esconde entre los pastizales y de la nada sale atacando a su presa. Tenía miedo de que saliera un león y yo fuera su presa, no literalmente.
Después de quince minutos de seguir caminando levante mi mirada y a lo lejos pude ver una gran carpa de circo iluminada por fuera con luces destellantes de todos los colores. En realidad era gigante, nunca antes había visto montar una carpa de circo, ni siquiera había visitado un circo. Sabía lo que era gracias a las historias de mi abuela, debido a su gran don para narrar cualquier cosa era posible imaginarte el escenario casi idéntico al que ella contaba.
-¡Al fin! –Suspiro Stephanie-.
Debido a su comentario supuse que aquí era a donde querían llegar « ¿Un circo? » para qué diablos vienen a un circo. Yo no caminaría por horas solo para ver un show de circo, patético. Cada vez me sentía más imbécil, como no lo supuse antes, Amy no es de ir a fiestas de té, de hecho las aborrece.
-¿A dónde vamos? –Cuestione. No me había animado hablar todo el camino desde que salimos del pueblo pues Amy me había callado justo antes de saludar a Stephanie-.
Tanto Stephanie como Amy se hicieron la de los oídos sordos y seguían caminando. Una vez más me ignoraron, aunque prefería eso a que Amy me callara.
Tan solo diez pasos y llegábamos al circo, podía escuchar perfectamente el sonido hueco de la música dubstep. Mi abuela nunca me había contado que solían poner esa música en cada uno de sus shows. Tal vez no quiso asustarme.
Nos detuvimos en la entrada, había varias personas haciendo fila y mostrándole un cuadro de papel a la persona que estaba de seguridad. Este examinaba a las personas, después al papel y se ladeaba un poco para quitar la correa que les limitaba el paso. Él era gordo, alto y su piel era oscura.
En donde vivo los únicos que tienen piel oscura es el pastor de la iglesia y su familia. Nunca antes había conocido a alguien más de ese color, me agradaban. Recuerdo cuando iba con mi padre al campo para «broncearme» pero en realidad eso nunca ocurría, parecía que yo fuera inmune al sol pues no me causaba ni una quemadura. Creo que hasta me blanquee un poco más.
-Credencial –Escuche la voz del guardia de seguridad. Lo que yo creía que antes era un pequeño cuadro de papel, parece ser es una identificación-.
Tan solo faltaba dos personas más para que nos tocara a nosotras.
-¿Trajiste las credenciales? –Pregunto Amy-.
-Por supuesto –Respondió Stephanie- Excepto la de tu hermana…
Si no me equivoco una credencial la dan solamente cuando eres mayor de edad, no más. No entendía por qué Stephanie tenia credencial si apenas tiene 17 años. Tampoco entendía porque pedían credencial, ¿también mi abuela tenía una credencial falsa cada vez que iba al circo?
-No te preocupes –Hablo Amy. Dio media vuelta y quedo justo enfrente de mí-.
Era la primera vez que le veía la cara, después de haber salido del pueblo no hizo más que darme la espalda al igual que Stephanie.
-Yo lo arreglo –Continuo diciendo. Hizo una especie de sonrisa malévola, esa que hace siempre que piensa hacer algo no muy bueno.
Me tomo de los hombros y jalo de las mangas de mi suéter, desgarrándolas. La tela cayó rápidamente hasta mis muñecas dejando al descubierto mis brazos.
-¡¿Qué hiciste?! –Exclame- Era mi suéter favorito.
No podía creer lo que acababa de hacer, rompió mi suéter favorito, el suéter que papa me había regalado. El único recuerdo que tengo de el…
Ahora mi suéter no era más que tela desgarrada encima de mí. Mis ojos por unos momentos se llenaron de lágrimas, no es que fuera alguien muy delicada pero ese suéter tenía mucho valor sentimental para mí.
-No seas exagerada, te regalo el mío –Respondió Amy quien se puso en cuclillas para también desgarrar mi falda, haciéndola casi tan corta que se podían ver mis muslos, incluso más corta que la de Stephanie-.
-¡Es horrendo! –Dije refiriéndome al suéter-.
-Vaya –Exclamo Stephanie, mientras me miraba de pies a cabeza- Así pareces una tremenda puta.
Me limite a responder, nunca en la vida había dicho groserías y no tenía por qué hacerlo ahora y manchar mi perfecto historial de educación. Un historial que no existe, que acabo de inventar.
Sus palabras si dolieron un poco, haberme dicho que me parecía a ella fue una fuerte ofensa pero como suele decir mi mama «las palabras se toman de quien vienen» y no puedo ponerme hacerle caso a una puta que me tacha de puta.
-Cállate Steph… -Dijo mi hermana.
Mientras tanto Stephanie volvió a mirarme una vez más de arriba hacia abajo y volvió a la posición que estaba hace unos segundos, al igual que mi hermana.
-Credenciales –Volví a escuchar la voz del guardia de seguridad. Ahora se encontraba a nuestro lado izquierdo pidiéndonos nuestras credenciales.
Stephanie alzo el brazo y le entrego las credenciales, el señor hizo lo mismo que con todas las personas que entraban, miraba la credencial y después nos miraba fijamente a la cara. Aunque ahora que lo noto no nos está mirando la cara, le está mirando los senos a Stephanie, quien lleva un top que apenas le queda. No le importa si la credencial es falsa o no, aparenta hacer su trabajo mientras se aprovecha a mirarnos fijamente las tetas.
-¿Y la credencial de ella? –Por fin se dignó hablar después de varios minutos mirando los senos de Stephanie.
-Ella… -Musito, Amy- Ella es mi hermana pequeña.
Mi hermana me toco con una mano en mi hombro izquierdo, solo tocándome con las yemas de los dedos y después quitando su mano. Su tono de voz me parecía que estuviera pujando, aunque en realidad creo que ella intento sonar «sensual».
Mientras tanto el hombre que hace unos segundos miraba los senos de Stephanie ahora se encontraba mirándome fijamente, no una mirada tierna, graciosa, tímida o cualquier otro adjetivo que tenga que ver con lindo. Al contrario, su mirar era de lujuria, lo decían sus ojos oscuros, incluso comenzaba a intimidarme un poco.
-Bien –Dijo el señor, después de que se moviera un poco y dejara caer la correa que nos limitaba el paso al circo- Pueden pasar…
Antes de seguir caminando, Amy y Stephanie dieron unos pequeños brinquitos y soltaron un par de gemidos, yo solo deje rodar mis ojos y las seguí en cuanto comenzaron a caminar. La música dubstep conforme mientras más me acercaba era más fuerte el sonido y la molestia en mis oídos. Nunca antes había escuchado música tan fuerte…
De repente sentí un golpe en mi muslo izquierdo, y por reflejo volteé inmediatamente. Ahí estaba el guardia de seguridad justo detrás de mí con una sonrisa en su cara y guiñándome el ojo, era obvio que él fue el imbécil que se atrevió a tocarme. Baje mi mirada y seguí caminando hasta perder de vista al guardia, me estremecí un poco al saber que me había tocado, pero no podía hacer nada. Tal vez si me defendía podría hacer algo peor.
Mientras tanto perdí de vista a mi hermana, no la encontraba por ningún lado, ni ella ni a su mejor amiga. «Buen momento para dejarme sola» pensé, pudiéndome dejar sola en el camino, y se le ocurre dejarme sola en medio de un circo de gente pervertida, genial. Sinceramente no quería salir de ahí, no quería volverme a encontrar con aquel señor así que seguí caminando, ahora estaba en un pasillo largo y oscuro, no podía ver nada, solo caminaba. Al final de este pasillo había una puerta, la cual en sus contornos dejaba ver una luz destellante que se prendía y apagaba. Suponía que es hasta ahí donde tenía que llegar.
La música no dejaba de sonar, cada vez aumentaba el ruido que provenía del circo. Estaba a punto de entrar, realmente este era el dichoso circo del que hablaba mi abuela. El gran circo al que iba cada medio año a ver su shows espectaculares.
Gire la perilla después de haberla buscado por toda la puerta pasando mi mano en ella. Al fin entre. Una vez más me convencí de que el circo que describía mi abuela no era el que yo me imaginaba. Cientos de personas de pie moviéndose al ritmo de la música, algunos bebiendo, otros fumando. Incluso algunos devorándose a besos. Era una nueva escena para mí, nunca había visto a una pareja besarse en público, en el pequeño pueblo donde vivo serias criticado por el resto de tu vida.
Me detuve por un momento, comencé a toser, nunca antes había olido el humo de un cigarrillo, esta era mi primera vez. No solo estaba oliendo uno, si no cientos. No solo tabaco, si no también marihuana. Una vez termine de toser tape mi nariz y seguí caminando, entre la gente pude visualizar a varias chicas las cuales llevaban una falda mil veces más pequeña que la mía, después de todo no me sentía tan desnuda al ver la falda de las demás.
De lejos pude notar la cabellera rojiza de Stephanie hacerse notar entre todas las personas y fui detrás de ella. Me abría paso entre la gente hasta que llegue con Stephanie y por supuesto a un lado estaba Amy.
-¿Dónde se habían metido? –Bufe justo detrás de ellas, muy cerca del oído de Amy para hacerme escuchar.
-¡Lo siento! –Grito Amy- Te estábamos buscando…
Volvió a gritar, con la música a reventar era imposible poder mantener una conversación. Giro enfrente de mi aun sentada en la silla pegada a la barra del bar. En su mano tenía un pequeño vasito con una bebida transparente. Fruncí el ceño, se supone me estaban buscando y están ahí pidiendo bebidas. Levante mi mano y la choque contra el vasito, haciendo que este cayera aun lado de nosotras y se rompiera en mil pedazos derramando la bebida que contenía.
-¡¿Por qué hiciste eso?! –Grito furiosa, Amy-.
-Por haberme dejado sola…
Antes de que Amy gritara para responderme algo la música y luces se apagaron. Se escucharon unos gritos ahogados después de que esto sucediera, y tal como ocurrió en el pasillo, no veía nada. Todos guardaron silencio y de vez en cuando se escuchaban unos pequeños chiflidos…
-¡Bienveidos sean todos! –Se escuchó de repente un eco en la habitación-.
Era la voz de una mujer que, creo, hablaba por micrófono. Hizo una leve pausa de no más de ocho segundos y continuo…
-¡Bienvenidos una vez más al treintagésimo aniversario de… -Hizo otra pausa- Halloween town! –Exclamo esto último casi gritando, algo tonto ya que tenía un micrófono en sus manos. Mientras tanto toda la gente a mi alrededor gritaban exaltados-.
Las luces volvieron a prender, esta vez no eran luces destellantes que prendían y apagaban. Ahora era solo una luz normal la cual iluminaba todo el lugar. Comencé a buscar con la mirada a alguien que sostuviera un micrófono, quería saber quién estaba hablando, pero simplemente no la encontré. De repente una de las grandes pantallas pegadas por encima de la pared se prendió, era gigante, tuve que ladear mi cabeza un poco para ver mejor la pantalla de hasta el fondo.
En el video aparecía una señora, no más de 50 años de edad, no tenía canas. Su cabello era rubio y lo tenía garrado en una coleta. No podía ver muy bien, estaba demasiado lejos la pantalla, así que era lo único que pude distinguir, de ahí en más, nada.
-Las puertas de Halloween town se han cerrado –Comenzó hablar otra vez. La señora que aparecía en la pantalla era realmente la señora que hace unos minutos buscaba-.
-Esta vez si alcanzamos –Musito Stephanie-.
Ella y mi hermana murmuraban cosas mientras la señora hablaba, al parecer después de las nueve de la noche se cerraban las puertas del circo y ya no podía entrar más gente, así llegaran tarde por solo unos segundos. A lo que escuchaba de los murmullos de Stephanie, Amy y ella ya habían venido antes pero no habían llegado a tiempo. Es su primera vez aquí, al igual que yo.
Deje de prestarles atención y volví mi vista a la pantalla donde estaba la señora. Ella seguía hablando:
-Si están aquí es porque les gusta la diversión, las fiestas –La audiencia gritaba conforme ella decía cada palabra- el peligro…
¿Peligro? Que tanto peligro puede haber en una fiesta, nunca he ido a una pero a lo que me han contado lo último que tienen es peligro.
-Los que nos han visitado año tras año sabrán las reglas de principio a fin. –Hizo una pausa- Los que no, por favor pasen al salón B.
Continuara...
happy drug.
Re: Halloween town | Louis Tomlinson y _____ |.
por happy drug. Vie 18 Oct 2013, 3:42 pm
¡Listo! es el primer capítulo, tal vez es uno de los capítulos mas largos de la historia (?)
Se que esta suuuuuuper aburrido but quise que entendieran mejor el trama, en el segundo capítulo ya apareceran las que audicionaron y ya sera super interesante (?) love ya.
Se que esta suuuuuuper aburrido but quise que entendieran mejor el trama, en el segundo capítulo ya apareceran las que audicionaron y ya sera super interesante (?) love ya.
happy drug.
Re: Halloween town | Louis Tomlinson y _____ |.
por Kissha Schmidt Vie 18 Oct 2013, 3:52 pm
Primera en comentar AMAME :3 Te lo promite no es asi?
Me encanto el cap y si es superhipermega largo
Shiguela beiby
Me encanto el cap y si es superhipermega largo
Shiguela beiby
Kissha Schmidt
Re: Halloween town | Louis Tomlinson y _____ |.
por Invitado Vie 18 Oct 2013, 4:26 pm
HIJA DE TU MAMÁ! Aburrido? Qué te dieron de comer? Popó? :duh:
El capítulo estuvo super genial, ahora me dan MAS ganas de audicionar pero no sé jajja tengo que subir por lo menos dos capítulos de mi nove :( ESTOY EN UNA COMPU POR FIN!! :D.
A la mierda todo, voy a audicionar para aparecer...aunque veo complicado quedar.
LOVE YOU CHEQUETAAHH
PD: quiero más capítulos tan lindo mi Louis.
El capítulo estuvo super genial, ahora me dan MAS ganas de audicionar pero no sé jajja tengo que subir por lo menos dos capítulos de mi nove :( ESTOY EN UNA COMPU POR FIN!! :D.
A la mierda todo, voy a audicionar para aparecer...aunque veo complicado quedar.
LOVE YOU CHEQUETAAHH
PD: quiero más capítulos
Invitado
Invitado
Re: Halloween town | Louis Tomlinson y _____ |.
por Shaggy. Vie 18 Oct 2013, 4:32 pm
¡Tercera en comentar! Me encanta!! Es tan agsnksnfkandla *-* Mucho misterio... me gusta :chkt: ¿Viste mi ficha? Sí me salió horrenda, srsly. Bueno, si no quedo, seguiré siendo lectora, me gusta MUCHO esta novela. Aparte que es de Halloween, el día en que nací 
Bueno, besoos!
Bueno, besoos!
Shaggy.
Re: Halloween town | Louis Tomlinson y _____ |.
por XimeLoveNutella Vie 18 Oct 2013, 4:34 pm
Linda!
¿Como lo digo? el cap fue...
el cap fue... 
*Baile del irlandés*
No fue aburrido, estuvo muy muy bueno! :shakeitbb: :shakeitbb:
Siguela pronto linda! :shimi:
Besos! xx
XimeLoveNutella
Re: Halloween town | Louis Tomlinson y _____ |.
por Invitado Vie 18 Oct 2013, 5:29 pm
holaaa nueva vieja lectora en comentr nuva porque resien cometo y vieja porque audicione antes AME EL CAPITULO
PD:SIGELA!!!
PD:SIGELA!!!
Invitado
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