Esssssssssssssssssssssssssssenciaaa

deja decirte algo querida Escritora :D lo siento no revise tu nombre y me da flojera regresar :S

me encanta como escribes !!!!!!!

y espero ansiosa cap!! por q para subirte los animos ya he llegado a la pagina 4!!!!!

yaya lo tengo te llamas saris xD
pues dejame decirte saris que eres muy muuyy buena escribiendo !!!!!!!
haha y q espero con muchas ganas que nos subas cap!!!

wooow!!! o.O cuando pasaron a la pag 4 jejeje
bueno sariss!!!! ya sube cap!!!!

SIIIIIIIIIIII GRACIAS A ANED TENDREMOS 4 CAPIS!!!!!!!!!!!1
SISISISI QUE BIEN JEJEJE
SOY FELIZ!!!!!!!!!!! :D QUE
BIEN Y WOOW MUCHO TRABAJO 1 1/2 BUENO NO TANTO
KJEJEJE S
SUBE PRONTO!!!

aaaa iia kiero cap

CAPITULO 7
ACOMPAÑANTE INESPERADO.
Skandar estaba parado de espaldas a mi en posición protectora, el hombre al que no pude verle la cara murmuro algo Y
y desapareció por la ventana.
Skandar estaba inmóvil, tenia los puños apretados. No se volteaba. Yo estaba tirada en el piso, trate de levantarme y esperaba que el me ayudara. Pero no lo hacía.
De repente alguien mas entró a la habitación. Voltee la mirada hacia el, se detuvo en seco en el marco de la puerta. Era el mismo chico que había visto hablar con Skandar antes. Me miro rápidamente y abrió mucho los ojos y dio un paso hacia atrás tambaleante.
Su mirada y la de Skandar se cruzaron.
-No te muevas _________, -.Me dijo volteándome a ver.-no te muevas por tu bien, buscare a alguien que te ayude.- Su mirada reflejaba dolor.
-Skandar.- Dije débilmente estirándole mi mano.
-No te muevas!.-Me dijo el chico . Yo no lo mire, seguía con mi vista fija en Skandar, el cerro sus ojos y volteo su cara hacia otro lado.
-Tu aroma… El aroma de tu sangre.- Me dijo Skandar secamente. Notaba el dolor en su voz.
Skandar caminó hacia la puerta.
-¡ Que olor….- Dijo el chico para si mismo. -¿Qué demonios paso?.- Preguntó a Skandar. Mientras se iban del departamento.
Yo me sentía muy débil y empezaba a ver menos. Cai de lado en el piso y en pocos minutos observe varios pies acercándose a mi. Solo alcanzaba a oir murmuraciones. Mi vista se torno completamente negra y perdí la conciencia.

Mis ojos se abrieron lentamente observe un destello de luz y luego mi vista se aclaro y distinguí el techo de mi cuarto iluminado por una luz proveniente de la pequeña sala.
Me sentía débil. No quería pensar pero inevitablemente llegaron a mi todo los recuerdos de lo que había pasado la sombra atacándome, el golpe con la pared, mi sangre cayendo como agua, la asquerosa lengua de aquel hombre saboreando la sangre que caía sobre mi hombro, el miedo.
Grité al recordarlo todo y dos lagrimas recorrieron mi mejilla.
Escuche pasos acercándose al cuarto y murmuraciones, entro la señora Elizabeth, Skandar y el chico detrás de el. Pero ambos se quedaron en el marco de la puerta.
-Shhhh… ______ mírame, ya paso. Tranquila, estas bien.- Me dijo la señora Elizabeth sosteniendo mi cara mientras me calmaba. Empecé a calmarme lentamente tratando de convencer a mi cuerpo de que ya no había ningún peligro. Que todo estaba bien.
Mire a Skandar. Su expresión de culpa y tristeza me partió el alma ¿Tanta lastima daba? El no tenia porque verse tan afectado por mi…
Aunque esta era la segunda vez que me salvaba, debía de importarle algo. Skandar le murmuro algo al chico que estaba detrás de el me miro un instante y luego se dio la vuelta y camino hacia la sala. La señora Elizabeth trajo unas pastillas y me las dio. Me dijo que mientras estaba inconsciente había venido un amigo doctor de ella, porque el hospital quedaba retirado. Me dio indicaciones de cada cuanto tomarlas. Vi el reloj y eran las casi las nueve. Había pasado inconsciente casi cinco horas! Tenía hambre y el dolor de cabeza disminuía a medida que las pastillas hacían efecto.
Le agradecí sinceramente por todo lo que había hecho.
-Oh no tienes que agradecerme pequeña.- Dijo.- Para eso estamos, sabes que aunque te conozco poco te aprecio. Además en vez de agradecerme a mi, deberías de agradecerle a Skandar, el corrió a buscar mi ayuda y junto con Jace trajeron las medicinas que el doctor pidió en un abrir y cerrar de ojos. Ah… ahora vuelvo te prepare algo de comer.
Le agradecí y ella salió de la habitación, luego oia la puerta de mi departamento cerrarse. Iba al suyo, supuse. Mire a Skandar esperando una explicación. ¡¿Qué demonios había pasado?! pero el permaneció inmóvil en el marco de la puerta mirándome con expresión triste. Ya no me dolía la cabeza y podía pensar pero nada parecía lógico y no lograba entender nada.
Toque donde tenia mi herida en mi cabeza y sentí la venda que la cubría.
-Lo siento tanto _________...- Dijo Skandar rompiendo el silencio y sorprendiéndome cuando lo hizo. ¿Lo sentía? El me había salvado!
-Skan… no tienes nada de que disculparte… tu me salvaste por segunda vez. Lo que paso no fue tu culpa.- Afirme.
El se quedo callado. Y yo también. Solo nos miramos durante varios segundos.
-¿Cómo te sientes?.- Pregunto acercándose un poco. Solo un poco. Por alguna extraña razón se mantenía alejado de mi.
-Pues con un poco de dolor de cabeza. Pero sobreviviré gracias ti.-Dije sonriéndole. Queria hacerle sentir bien y quitarle esa tristeza de la cara. Y la culpa que lo invadía.
- ____________, se que estas muy confundida y quieres una explicación para esto. Y que también estas molesta con migo por no decirte las razones y tienes todo el derecho. Pero quería mantenerte al margen de la verdad.- Bajo la mirada para continuar.- Lo cual te puso en peligro… Debes saber la verdad.- Continuó.
Yo me quede fría en esos momentos después de tanto querer saber, no estaba segura se de verdad quería…
-Skan… yo no… si tu no quieres…- Mis palabras salieron atropelladas de mi boca.
-Mereces una explicación.- Me interrumpió.-Y te la daré. Pero no ahora. Necesitas descansar y recuperarte.- Volteo la vista hacia atrás a la sala y luego se volvió hacia mi.- Me preguntaba si querías pasar un momento a solas con migo mañana, para poder explicarte. Claro si te sientes mejor.
Eso de a “solas” hiso que me sonrojara. Y baje la mirada.
-Me gustaría pero mañana tengo que ir a la universidad y por la tarde tengo taller de Ingles y…
-La señora Elizabeth.- Intervino.- Llamo a tu universidad, buscó el numero en tu agenda telfonica, y les explico que tuviste un accidente y tal vez no podrías asistir debido a que te tendrías que recuperar. Pero si quieres ir…
-Entonces mañana esta bien.- Le interrumpí.
El me miro y sonrió ligeramente. Oí el sonido de la puerta de mi departamento abrirse. Entró la señora Elizabeth a la habitación con una sopa que olía a gloria. Me ayudo a sentarme en la cama y a comer y Skandar no se separo de la habitación. Se hizo un poco tarde y la señora Elizabeth se tuvo que ir, pero antes le agradecí de nuevo. Ya me levantaba y podía andar sin marearme. Al parecer el chico, Jace se fue junto con ella.
Eran las 10:30 y Skandar aun seguía en mi apartamento. No sabia como decirle que se fuera. En realidad no quería que lo hiciera, no quería estar sola en mi apartamento después de lo que había pasado. Pero no podía forzarlo a acompañarme o a que durmiera en el sofá o algo así. Seria egoísta de mi parte.
-Skandar…- No me dejo terminar la frase.
-No me iré.- Afirmó.- Se que aun estas asustada, te acompañare. Y no puedo darme el lujo dejarte después de lo que pasó.- Le sonreí.
-Gracias. Muchas gracias. Cuando te de sueño puedes tomar estas sabanas y acostarte en el sofá, no es muy cómodo pero…- Me interrumpió de nuevo.
-Shhhh… __________... No tienes que preocuparte por mi estaré bien. Descansa. Yo te cuidare.- Dijo tiernamente. Me sentí mal por haberlo tratado tan cruelmente esa tarde. Me arropé y me dispuse a dormir.

En la mañana desperté. Me levante y no vi a Skandar. “Talvez se fue” me dije a mi misma. Me metí al baño y me di una ducha. Cambie la venda de mi cabeza. Y me puse ropa fresca. Cuando Salí, Skandar estaba parado en el marco de la puerta de mi habitación. Se quedo mirándome. Me acosté de nuevo en mi cama y el desapareció por la puerta. Volvió con una bandeja con un delicioso desayuna. Olía fantástico. Me lo dejó al frente con una sonrisa en sus labios.
Me alegré al verlo sonreír después de esa cara tan trágica de anoche.
Le agradecí con una sonrisa y comencé a comer. Al terminar deje la bandeja a un lado. Skandar se sentó a un lado de mi. Y nos miramos.
Había llegado el momento de la verdad. En el cual el me explicaría todo. Como lo había prometido.
-Bueno… ____________.. Debes estar preparada mentalmente, esto sonara tan raro e ilógico que…
-Solo dilo, no te preocupes por mis reacciones.
-OK. Mira… ¿No sabes nada sobre tus antepasados?
-Mis antepasados?...
.-De la Ruet…. - Comenzó.- ah sido una familia que habia prevalecido durante siglos,pero tu familia, tu familia de Francia, quiero decir, se extinguió. Solo quedaron los familiares de otros continentes, como tú.
Todo eso ya lo sabia. ¿Qué tenia que ver con lo que estaba pasando?
-Tu familia creció con una maldición… Por asi decirlo…- Dijo tomando aire.- Tu no eres humana…
-No soy humana?.- Repetí sorprendida. Esperaba que se comenzara a reír. Esto no era enserio ¿Verdad?...
-Bueno… lo eres. Pero no al 100%... Me preguntaste si yo era un Nefilim.- Dijo con una sonrisa torcida.- Y no, no lo soy .-Continuó.- Pero tu… sí…


CAPITULO 8
LA RESPUESTA.
Sus últimas palabras sonaron con eco dentro de mi cabeza.
¿Qué?! En ese momento miles de cosas comenzaron a pasar por mi cabeza. Yo tenia algún antepasado que había sido un angel… ¡Un angel! Oh por Dios!
Abrí mucho los ojos.
-Pero solo tienes una pequeña cantidad de esa sangre, Digamos una centésima parte de ti.- Dijo bajando la mirada.- Tu familia… De la Ruet, eran descendientes mas directos, por eso se creía con la misión divina de acabar con los demonios, como ellos los llamaban…
-¿Los demonios?.- Pregunté.
-Vampiros.- Dijo secamente. Viéndome fijamente a los ojos.
-Vam..piros?.- Trate de sonar tranquila pero mi voz se quebró. Tenia que estar bromeando…
El asintió con la cabeza.
-Tambien a criaturas de las profundidades.- Ladeé mi cabeza a un lado, el entendió que no sabia de que hablaba.- Hadas, hombres lobo…
Sabia como debía de ser mi expresión. Histerica y con asombro…
Una vez me desperté con un balde de agua fría. Mu cuerpo por unos instantes simplemente no reccionaba. Asi se sentía ahora.
-Estas bromeando verdad?.- Dije con voz algo histérica. Estaba esperando que el se hechara reir y que me dijera que si. Pero negó con la cabeza.
-No bromeo ____________...- Dijo tristemente
-Osea que todos los cuentos y leyendas… ¿Son reales?....- Pregunté, las palabras se atropellaron en mi boca.
-No todos… Pero si una gran mayoría…- Volteo la cabeza hacia un lado y dejo su vista fija en la ventana..- Te decía sobre la “maldición”. Ellos querían acabar con todas estas…- Se quedo pensativo buscando la palabra correcta.- Especies… por así decirlo. Alguien. No se sabe quien. Puso una maldición sobre ustedes. Ustedes eran la familia iniciadora del levantamiento. Aunque había otras familias de nefilim en el levantamiento claro, pero ellas se retiraron frente a la advertencia, por lo cual quedaron libres. La maldición era que cada miembro de ustedes, resultara sumamente apetecible para los vampiros. Asi se extinguirían rápidamente. Y eso pasó… Solo sobrevivieron unos pocos, los que huyeron a América y África. Son mas apetecibles durante su adolescencia asi que… eso dificultaba su reproducción.
-Esta broma ya llegó muy lejos.- Dije poniéndome de pié.
-No bromeo.- Dijo mirándome con tristeza.
Aun me costaba respirar, no podía aclarar mis ideas. Eso no podía ser verdad. Los… no existían. Ninguna de las otras criaturas existían. Skandar debía de estar mintiendo.
-¿Por qué debería de creerte? Por favor! Hadas, hombres lobos… ¿Vampiros!?.- Bufé pero aun nerviosa.
El se levanto y se puso frente a mi.- Los ataques fueron de la misma persona. El era un vampiro. Sin contar con los que te has topado accidentalmente.- Dijo. Se quedo quieto esperando mi reacción. Me recargue sobre la pared y me deslice hacia abajo lentamente. Necesitaba pensar.
- Skandar..- Lo mire. Y el me vio fijamente.- No puedes venir y decirme que todos los cuentos son reales. Decirme que tengo sangre de Ángel y que hay una maldición sobre mi familia. Que los vampiros si existen y soy muy apetecible para ellos. Y pretendas que te crea. Sin ofender.- Explique mirándolo aun fijamente.
-¿Cómo explicas entonces lo que ha pasado?.- Retó con expectación.
-No lo se. Pero esa no es la explicación que esperaba.- Afirme.
-Muy bien. Necesitas una demostración. Te la daré.- Se puso en el centro de la habitación. Levantó la mano y las cosas de la habitación comenzaron a temblar. Vi varias cosas, perfumes y maquillajes flotar por la habitación, suspendidas en el aire. Me quede fría.
Tenía que estar alucinando. O podía ser un truco o algo. De pronto Skandar con un dedo comenzó a hacer círculos en el aire y todas las cosas comenzaron a dar vueltas.
Me asuste a morir. Miedo no era por lo que veía.
Si no porque todo lo que Skandar me decía era verdad…
-Skandar detente. Ok te creo.- Dije asustada.- Estoy controlándome para no gritar.- Advertí.
- Muy bien.- Dijo colocando todas las cosas en su sitio.
-Y como sabes tu todo esto?.- Le cuestioné. El bajo la mirada. ¡Oh no ¡ A mi mente vinieron las imágenes del ataque en mi apartamento. El no se acerco a mi, dijo que no lo haría por mi bien… por mi sangre…- Tu eres un… un…- Traté de preguntar pero la frase no surgió completa estaba temblando.
-Relativamente.- Respondió. ¿Relativamente? Lo era o no?
- No entiendo. ¿si o no?.- Repetí
-Relativamente _______.- Contestó.- Soy un Anixous. Una especie de vampiros. No me alimento de humanos. Si no sangre de animales y de la de otros vampiros. Estoy encargado de cuidar a otros vampiros. Que no se expongan y que no tomen demasiadas vidas en una zona. Claro, solo para aquellos que es necesario matar. Varios saben controlarse y solo toman lo necesario de la victima y la dejan vivir.
Ahora si que estaba en shock. Skandar hablándome de todas esas cosas, hablándome de los… como si fueran cualquier cosa. Y no ni siquiera era capaz de decir la palabra…
- Y… Jace?....es un…?- Pregunté, mi voz era apenas audible. El había estado poco después del accidente. Y recordé su reacción con mi sangre. El era también un…?
-El si es un vampiro…
Me explico mientras yo me hundía con mi cabeza entre mis rodillas. Sudaba frio.
-Estas bien?.- Me pregunto. Negué con la cabeza. Fue ala cocina y me trajo un vaso chocolate caliente.- Toma.- Me dijo amablemente. Poniéndose a mi altura. Yo lo tomé y la mano me temblaba.
El se alejo al darse cuenta que le temía. No sabía que decir, así que tome un sorbo tratando de tranquilizarme.
-Esto… no se qué decir.- Admití.
-Lo has tomado bien. Esperaba gritos y lagrimas.- Admitió.
Lo que él no sabía es que yo estaba a punto de entrar en coma por la información. Ni siquiera quería pensar en eso.
-Para ti no debería ser apetecible. ¿No lo soy verdad? Porque tu no te alimentas de los humanos. Pero… ¿Por qué reaccionaste asi con mi sangre?.- Pregunté con curiosidad. El bajo la cara.
-Te equivocas. La maldición también nos afecta a nosotros. Ustedes son los únicos humanos apetecibles para nosotros.- Se me detuvo la respiración.- Tu eres el doble de apetecible para los de mi especie que para un vampiro.
Me congelé el miedo corría por mi cuerpo.
-No me tengas miedo. Se controlarme. No es mi intención hacerte daño.- Me dijo alejándose hasta el marco de la puerta.
Yo no sabia que mas decir o hacer. Eran muchas cosas a la vez.
-Hay muchas otras cosas que debes saber, pero no quiero saturarte. Veo que estas muy confusa ya. ¿Quieres que me vaya?.- Preguntó.
En realidad no quería que se fuera. Pero necesitaba pensar y no podría hacerlo con un… en mi cuarto.
-Si. Lo siento. Necesito estar sola.- Afirme.
- De acuerdo. Estaré al pendiente. Si me necesitas di mi nombre fuerte y vendré. Adios ________.- Hizo un gesto con la mano de despedida y se fue.
Me subí a mi cama y me acoste con cuidado de mi herida, me quede mirando el techo con esas ideas dándome vueltas en la cabeza. La verdad me había trastornado.
¿Qué acaso no quería saber? Ahí tenía el resultado de mi curiosidad. Mi familia que se creían en una misión divina por ser descendientes de angel y terminamos con una maldición que nos hace sumamente apetecible para los vampiros. Y el doble de apetecible para los Anixous.
¿Mis padres sabrían esto?
¿Habrian lidiado con algún Anixous durante su adolescencia? Miles de pregutas como estas rondaron en mi cabeza. Hasta que me dolio. Miré la hora. Eran las 8:45am era temprano…
Tome las pastillas que me dio la señora Elizabeth y en unos momentos ya estaba profundamente dormida.

oh woow!!!!!
estan genialesss!!!!!!!!
sube ya los otroz 2 }!!!!!!!!!!!!!!!!!!! siiiiiiiiiiii---!!!!!!!!!*_*

Capitulo 9
ACEPTACION A LA VERDAD.

En mi mente mis pesadillas se tornaban cada ve mas reales. Abrí mis ojos y me quede mirándo el techo por un buen rato. Deseaba que todo hubiera sido una pesadilla, pero sabia que no lo era, mi herida en la cabeza estaba para recordármelo.
Analice muchas cosas, claro ahora tenían sentido. El chico del callejón que me atacó olfateó mi cuello, no porque quería violarme como supuse, si no porque quería mi sangre... Se me puso la piel de gallina al pensar en eso.
Al igual que cuando me atacó la segunda vez, lamio mi sangre.
Esto era perfecto, resultaba que yo nací para ser un aperitivo de una criatura que solo existía en las películas de terror y claro. Ahora también en mi vida.
¿Por qué mi madre nunca me había mencionado esto? A mi parecer merecía mencionase. Que tu hija pueda ser encontrada por criaturas que ni sabia que existían. Asi que supuse que mi madre no tenia ni la mas remota idea. ¿O sí?
Muchas preguntas rondaron por mi cabeza. ¿Por qué nunca me había topado con un vampiro? ¿Acaso en mi país no había?
Eso sería realmente relajante, solo tenía que regresar y ¡Listo! No mas historias de terror o bueno eso creía yo.
Necesitaba más respuestas, pero ver a Skandar no figuraba en mi lista de cosas que quería hacer hoy. Pero ¿Por qué él me protegía si el realmente deseaba tomar mi sangre?
Me levante de mi cama y sentí un pequeño mareo. Me acerque a mi ventana y pude notar como el sol comenzaba a ocultarse. Las pastillas sí que funcionaron, dormí casi todo el día.
Hacía mucho que no veía el sol. Asi que realmente disfrute verlo ocultarse.
Recordé las palabras de Skandar “El tipo que te ataco dos veces era un vampiro, sin contar con los que te has topado accidentalmente” ¿Con quien mas me había topado accidentalmente? ¿Qué quería decir? ¿Habia conocido mas vampiros a parte del que me ataco, el y Jace?
Las únicas otras personas con las que había tenido contacto eran Amy. Pero no ella no era un vampiro. Elizabeth ni pensarlo, menos el señor Jonh. Me quedé fría cuando vi la imagen de Logan en mi mente…
Recordé cuando el me jalo al cuarto oscuro… ¡Oh no! El también me olfateó.
Sacudí mi cabeza. No, no el no era un vampiro. Pero debía de admitir que si actuaba de manera muy extraña.
Me estaba volviendo paranoica, pronto pensaría que todo el mundo eran vampiros.

Cayó la noche y yo cerre todas las ventanas, no por frio. Si no por miedo a toparme con otra sombra como la de la noche anterior. Me prepare la cena y después llamé a mi madre. Me contestó mi papa y pregunte por ella. Aunque ¿Qué se suponía que le hiba a decir?

“Oye mamá me contaron la historia sobre nuestros antepasados. Se que somos descendientes de ángeles y que por una especie de maldición ahora soy un aperitivo para los vampiros. Los cuales por cierto si existen. Ah y también las Hadas, los hombres lobo y esas cosas.”

No, definitivamente no.
Afortunadamente mi mama no estaba asi que hable con mi padre. Tiempo después colgué. Necesitaba algo que hacer. Encendí mi laptop y me conecte a internet. Abrí mi cuenta y comencé a hablar con todos mis amigos de mi país.
Al día siguiente iría con Amy por ahí a dar la vuelta. Pero por lo pronto tenia un respiro de normalidad hablando con ellos. Que bien se sentía hablarles. En eso sonó el teléfono. Dejé la laptop a un lado y corrí a atenderlo.
-¿Si?.- Contesté con la respiración un poco acelerada por la pequeña carrera.
-Hola Ángel.- Dijo con tono tranquilo. Solo había una persona en el mundo que me había dicho Ángel…
-Logan?- Pregunté atónita. Yo no le había dado mi número.
- El mismo. Vaya vaya... Ya hasta me reconoces la voz. Sabía que te interesaba, pero no sabia que llegaba tan lejos.- Dijo y se hecho a reír.
-Muy gracioso.- Dije secamente.- ¿Cómo…?-Me interrumpió.
-Tengo mis contactos, estas en mi territorio recuerda eso.- Casi podía ver su sonrisa arrogante al otro lado de la línea.
-¿A qué se debe el honor de tu llamada?.- Pregunte sarcásticamente.
-Pues… quería saber si seguías viva, como hoy no fuiste a la universidad…- Dejo la frase en el aire como esperando a que yo explicara porque no había ido.
-Bueno tuve un pequeño accidente en el departamento pero todo bien.- Aclaré
-¿Accidente?.- Preguntó como esperando mas información.
Logan si que era extraño. Un día actúa como si no le importara para nada y me trataba mal. Y al siguiente se preocupaba por que no había ido a la universidad. Vino a mi mente de nuevo la idea de que Logan fuera un... Pero sacudí mi cabeza y traté de no pensar en eso.
-Pues… un asaltante entro al departamento y me atacó al verse descubierto, Skandar, mi vecino me ayudo al igual que otros dos amigos del edificio. Solo tengo un golpe en la cabeza pero estoy bien.- Expliqué.
Definitivamente no sabía mentir. Mi tono de nerviosismo se había notado en toda la explicación.
-Un asaltante… Y claro, Skandar tan bueno! ayudándote como siempre ¿No es asi?.- Replico.
-Pues si. Supongo.- Afirmé.
Hubo un momento de silencio en la línea.
-¿Iras mañana a la universidad?.- Preguntó.
-Por supuesto que iré. Solo fue un pequeño golpe.- Murmuré con cierto enfado. Estaba perfectamente bien.
-Mmmm… Ok… Que descanses Ángel. Por favor no sueñes con migo.- Dijo riéndose y colgó.
Ese chico tenia serios problemas de egocentrismo. Y de múltiple personalidad también. Entre otras cosas.
No dejaba de pensar que su comportamiento en el cuarto fue muy extraño, y muy parecido al del… del callejón. Debía de dejar de pensar en esas cosas...
Cuando me dí la vuelta vi a Skandar ahí parado frente a mi. Tenia unos ligeros círculos oscuros bajo sus ojos, parecía cansado.
-¡Que susto me has dado! Deberías usar las puertas ¿sabes?.- Le comenté dándole la espalda.
-Umm… Veo que estas mejor.- Afirmó sentándose en el sofá.
- Así es- Dije sonriente.
Aunque por dentro mi instinto de supervivencia no me dejaba dejar de sentir cierto miedo hacia Skandar.
-Skan… Hay muchas preguntas rondando por mi cabeza y sé que no es tu obligación pero necesito saber. – Dije sentándome en el sofá frente a él.
-Pregunta.- Dijo el. Con sus codos apoyados sobre sus rodillas y sus manos sosteniendo sus mejillas.
-¿Duermes en un ataúd? ¿Por qué puedes salir de día?- Las preguntas salían solas de mi boca.
-Lo del ataúd es mentira.- Dijo una voz desde el marco de la puerta.- No dormimos.
Skandar y yo volteamos al instante y ahí estaba el chico de la noche anterior. Jace. Estaba recargado en el marco con los brazos en sus bolsillos.
-Vaya, si que eres silencioso.- Dijo Skandar. Parecía sorprendido.- Oh si… ___________, el es…
-Jace.- Dijo el caminado hacia mi. Y me extendió su mano. – Un placer.
El debía de tener unos 18 o 17 años. Tenía el cabello de un color marrón claro. Su piel era extremadamente pálida. Y ahora que estaba más cerca notaba sus ojos verde oscuro. Era un poco más bajo que Skandar, pero aun así seguía siendo alto. Y bastante apuesto a decir verdad.
-Lo mismo digo.- Dije mientras estrechaba su mano sonriéndole. El me devolvió la sonrisa.
-Y Jace, tú ya sabes quién es ella.- Dijo Skandar.
Jace sonrió. –Si, ____________. Skandar me dijo que te contó de nosotros. Asentí con la cabeza.- Si que lo tomaste bien.
- Y No es necesario.- Dijo Skandar.
-¿No es necesario?.- Pregunté. No sabía a que se refería.
-Dormir.- Dijo Jace. Sentándose a un lado de Skandar.- No es necesario dormir para nosotros, aunque podemos hacerlo por mantener conductas humanas, aparentarlo. O algunos por placer. Pero no, no es necesario.
-Y pues… yo soy un Anixous.- Continuó Skandar.- El sol no me hace ningún daño, solo puede molestarme. Pero a los vampiros como Jace, si los daña. Incluso puede matarlos.
Yo escuchaba atentamente. Observe a Jace. El me miró y me sonrió.
-Pero como habrás notado.- Dijo el tranquilamente.- El sol no se aparece mucho por aquí.
-¿Esas eran las muchas preguntas que tenias? .- Preguntó Skandar.- Porque a mí me parecen pocas.- Sonrió al culminar la frase.
- Como se alimentan exactamente? ¿Han matado a alguien?.- Pregunté.
- No eh matado a nadie.- Explico Skandar.- Como te dije los humanos no me apetecen. Me alimento de vampiros recién alimentados. Ellos mismos a veces me dan un poco para darme sustento. Sin tener que forzar nada. También existen unas especies de restaurantes, ahí venden sangre. Tengo que beber sangre de vampiro, al menos una vez al mes. El resto de las veces puedo mantenerme con sangre de animales.
Vaya! Eso si que me sorprendió ¿Había restaurantes donde servían sangre? ¿Por qué nunca había visto uno?
-Restaurantes donde sirven sangre?.- Pregunte atónita. Skandar y Jace se miraron y sonrieron entre ellos.
-Bueno si, los hay.- Dijo Skandar mirándome.- Ahí venden no solo comida para nosotros. También para hombres lobo, hadas…
Yo estaba con la boca abierta. Tenia que estar bromeando. Skandar me dedico una sonrisa torcida.
-Y no creo que los hayas visto jamás. Hay una especie de… ¿Cómo llamarlo?.- Dijo Skandar quedándose pensativo.- Digamos una especie de hechizo, que los mantiene ocultos para los ojos humanos. Nosotros los llamamos glinnt.
-Oye…- Interrumpió Jace.- ¿Deberíamos decirle esto? Ella es… humana… y ya sabes esta contra la ley.
Genial! Ahora me convertiría en un delincuente. Skandar negó con la cabeza.
-Ella no es humana, no al cien por ciento. Es un nefilim ¿Recuerdas?
Aun no me hacia esa idea… No soy humana entonces?... Jace se quedo unos segundos con la cabeza hacia arriba, como olfateando el aire. Skandar y Jace se miraron.
-Vampiros.- Murmuro Jace.
Deje salir un pequeño grito ahogado. Skandar miro Jace, el asintió y salió del departamento.
-¿Qué pasa?- Pregunte mirando a Skandar.
-Nada, tranquila.- Dijo poniéndose de pie.
Tranquila?! Habia mas vampiros cerca y yo soy su bocadillo. Como quiere que me calme!
-¿Nada?! Skandar hay mas vampiros! Por favor! No me digas que me calme.- Dije empezando a caminar por la habitación. Skandar solo me miraba ir de aquí para allá. Mientras yo murmuraba cosas por lo bajo en mi idioma antal.
-Oye. -Dijo Skandar, hice caso omiso.- Oye- Dijo tomándome del brazo haciéndome detenerme en seco.- Mírame. ¿Ok? Jace bajo para advertirles que se alejaran.
Hubo un momento de silencio.
Skandar me miro directo a los ojos. - Yo no voy a dejar que nada te pase.
Yo me quede pensando unos instantes…
-¿Por qué me proteges?- Solté.- Tu deseas mi sangre, el doble que el del resto de los vampiros. No tiene sentido ¿Por qué me proteges? En vez de….- Trague saliva.- Tomar mi sangre.
Otro minuto de silencio pasó por la sala, yo lo miraba esperando una respuesta y el bajo la mirada al suelo. Y libero mi brazo.
-No quiero que mueras.- Afirmo.
Y me quede sorprendida al ver que se sonrojaba. No podía creerlo… Skandar se sonrojo.
Pero yo seguía con dudas en mi cabeza.
-¿Por qué? Apenas me conoces.- Le acusé.
El seguía con la mirada en el suelo. La verdad no tenia ni idea de cual era la respuesta a eso.
-No lo se.- Dijo secamente. El me había salvado dos veces de un vampiro loco, me estaba protegiendo de otros vampiros, no había tomado mi sangre que de verdad el deseaba y el no sabia porque me había protegido. Tenia que estar mintiendo.
-Mientes.- Bufé. El se quedo inmóvil sin pronunciar ninguna palabra. Tenia que haber una razón. El no hacia todo eso por que si.
-¿Skandar? Lo llame para recordarle que me debía una respuesta.
El me volteo a ver.
-Bueno ________...


CAPITULO 10
CAMBIOS...

-Bueno ____________... Lo siento, esa es la única pregunta que no tengo respuesta para ti. Lo siento.- Admitió levantándose del sofá y caminando hacia la puerta.- Y no te preocupes, los vampiros se fueron.
Deje salir un suspiro de alivio.
-¿Te vas?- Hice una pregunta bastante obvia. Lo seguí hasta la puerta y cuando ya iba a cerrar la puerta detrás de el, se volteo y me quede fría al ver sus ojos dorados sobre los míos. Nunca había estado tan cerca de Skandar.
-Buenas noches _________. Dijo tomando un mechón de mi cabello y acariciandolo.
-Buenas noches Skandar.- Respondí agregando una sonrisa. El no se movia. Finalmente dio la vuelta y camino hacia el ascensor. Cuando llego a el se giró hasta mirarme de nuevo.
-¿Sabes algo ___________?.- Pregunto alborotando mi curiosidad.
-¿Qué?- Respondí, la curiosidad me estaba matando.
-Tal vez si hay una razón para que no tome tu sangre ni deje que lo hagan. Es solo que no soy lo suficiente valiente como para decírtelo. Descanza _________.- Dijo entrando al elevador y las puertas se cerraron tras el.
Genial. ¿Qué había querido decir con eso?
Cerré mi puerta y revise que todas las ventanas estuvieran bien cerradas.

A la mañana siguiente todo se desarrollo con tranquilidad en la universidad, alfin había llegado el dia de la salida con Amy. Estuvimos juntas en clase. Varios compañeros me preguntaron amablemente sobre mi bienestar. Y muchos otros querían saber la historia de cómo me había herido con detalles, como viejos curiosos. Yo deseaba que ya terminaran las clases para irme con Amy. Necesitaba distraer mi mente.
Amy tendría libre el resto del dia, pero yo aun tendría una clase más. Así que decidimos vernos mas tarde, ella pasaría por mi. Nos despedimos en la cafetería. Yo iba bajando las escaleras un poco animada por conocer la cuidad.
Cuando noté que Logan venia caminando hacia mí. Lucia desvelado, sus ojos azules reflejaban cansancio pero aun así lucia bastante bien. No sé por qué razón me atemoricé y me desvié. Tomé un pasillo que jamás había visto y solo gracias a mi rapidez llegue poco antes que el profesor. Tomé asiento y escuche atentamente la clase. Sin prestar atención a Logan que estaba sentado unos cuantos asientos detrás de mí. Cuando la clase terminó prácticamente corrí a la salida. Iba caminando sumamente rápido hacia la parada cuando de pronto Logan estaba ahí frente a mi deteniendo el paso. Me estremecí y el lo noto.
-Vaya, vaya… ¿Se puede saber por qué la señorita infantil está huyendo de mi?- Mantuvo su sonrisa mientras hablaba.
-No estoy huyendo de ti.-Respondí. Aunque si huía de él.
Lo que no sabía era porque. ¿Acaso de verdad pensaba que Logan era un….?
-No mientas. No sabes mentir.- Afirmó. Yo trague saliva.
-No miento, no huyo de ti. Solo que estoy apurada.-Me explique tratando de sonar convincente.- Me tengo que ir Logan.- Me moví y cuando lo pase, el tomo mi brazo derecho y me puso frente a él.
-¿Por qué huyes de mi ______?- Repitió.- ¿Acaso Skandar te regaña?.- Bufó.
- No seas absurdo Logan. Y por tercera vez, no estoy huyendo de ti.- Su mano acarició mi muñeca, tocando mi pulso. Me estremecí y el notó el miedo en mis ojos.
-Lo sabes…-Dijo molesto.- Skandar te conto todo ¿No es asi? Claro!
-No se de que me hablas Logan. Suéltame. Es una costumbre para ti estarme maltratando no es cierto?.- Dije tratando de desviar la conversación.
-Solo cuando tratas de mentirme. ¿Me temes? ¿Es por eso que huyes de mi?- Cuestionó.
Yo no sabía que decir, si Logan admitía que no era humano. El era un…?
Baje la mirada y solté mi mano de su agarre.
-No miento Logan. Y no sé de qué me hablas. Debo irme.- Caminé dejándolo atrás.
Esto agregaba nueva información a mi cabeza. Oh por dios Logan era un… ¿Es que acaso yo tenía una especie de imán para seres extraños? ¿O es que esta ciudad estaba llena de ellos?

woow!! Saris me as dejado asi --> o.O
estan geniales los caps!!!!!!!!!!!!!!!!!
siguela en cuanto puedas...
pero no tardes mucho jejeje!!!!!
AMO TU NOVE!!!!!!

hahaha aww graciasss! :3
subireeee capss depende de que
tantoo comentennn :)

Pagg 6!! ----------------->
:D