Radioactive Love. *One Direction* *Harry Styles*

-Nunca está en los planes de nadie, tan solo sucede y la gente nunca lo ve- dije.

El solo calló, no dijo nada más y ahora me preocupaba haber hablado demasiado… habia pasado la mayor parte de mi vida convenciéndome que la gente estaba destinada a herirme, pero como no? Durante toda mi vida habia tenido que cumplir un patrón, un protocolo de hacer las cosas siguiendo reglas paternales y sociales para ser aceptada, para que a la final un simple error provocara la destrucción total de todos los parámetros y pase de ser la chica más deseada, admirada, controlada y sobretodo falsa a ser una perra. Nunca habia deseado eso, nunca pensé que pasaría… vivir siendo así no es vida, no es que cuestione su forma de vivir, pero todo era, falso. Y él seguía allí, de pie, seguramente sin saber que hacer pero seguía ahí. Aunque lo haya corrido, aunque el probablemente ni me conozca, aunque haya gente mejor en mejores circunstancias con mejor mente… el confiaba en mí, el no huía, eso lo hacía importante, eso era lo que me impresionaba… el vio más allá de mis caracteres, quizás vio más allá de mi misma –Aun estas aquí- dije casi en silencio, sentía mi puño tan apretado.

El hizo silencio por un momento –Chloe Flewills, aun dudas en que me voy a ir y te voy a dejar así?- era sincero, el realmente… realmente era sincero. Ya basta Chloe, basta. Cambiar, a eso venias… a cambiar. Cerré los ojos recopilando todo.

-Pasa- abrí la puerta un poco más, él no se movió… lo miré –Harry- suspiré –Estoy bien, pasa- insistí, ahora pedía que él estuviera aquí. Y se movió, pero solo acarició mi cabello con su mano y me miró expectante –Eres un idiota- dije.

Él sonrió –Un idiota que te comprende en parte- y me dio la espalda entrando por completo –Tienes películas?-

-Películas?-

-DVD Chloe creo que sabes qué es eso- por supuesto que sabía.

-Tengo algunas viejas…- en cajas, podía durar años sin terminar de desempacar –Las buscaré-

-No has comido?- preguntó dirigiéndose a la cocina con tanta confianza que el sitio parecía suyo.

-No tengo hambre-

-No has comido mucho hoy que yo sepa- me miró negando con el ceño fruncido –Prepararé algo- y comenzó a revisar cada gabinete de la cocina.
 
La película era tan vieja, era una especie de comedia… una comedia antigua, Harry estaba sentado a mi lado con los pies montados en la mesita del medio al frente del sofá y poco a poco me fui apoyando en su hombro hasta que mi cabeza cayó allí y él no se movió, no me pidió que me alejara, me lo permití. En un momento entre la película el movió el brazo colocando mi cabeza sobre su pecho, su brazo sosteniendo parte de mi espalda y acariciándola con pequeños toques con sus manos, los toques se desvanecieron con el tiempo. Para cuando la película terminó el no se movió, levanté la vista y el tenía la respiración tan pacifica que lo envidiaba, se habia quedado dormido, en mi sofá, conmigo allí. Estando tan cerca podía verlo mucho mejor, podía observar cada pequeño detalle de su rostro, podía ver que tenia una piel tan suave y su cabello estaba mas revuelto que de costumbre… sus pestañas eran largas y su nariz tan perfecta, sus labios… sus labios delineaban algo específico, eran rosados tan… deseables… no. Me levanté enseguida, mi respiración se habia tornado rápida y podía sentir el calor en mi rostro, el se movió y para cuando su brazo cayó de nuevo al sofá abrió los ojos –Que ocurre?- se estaba restregando el rostro con sus manos y se volteo a mirarme –Nisiquiera noté cuando terminó- bostezó –Lo lamento- 

-Debes estar cansado- era lo único que podía decir.

-Por qué estas sonrojada?- aún estaba? Para colmo esto solo hacía que estuviera cada vez más.

-Ehh… nada… no crees que es tarde?- el miró su celular.

-Tampoco es que me está esperando alguien en casa- dijo, eso me llamó la atención, yo decía lo mismo hace dos años –Pero tengo que irme- comenzó a levantarse, nos dirigimos hacia la puerta y la abrí, miraba mis pies, sus pies se colocaron al frente y el me miraba nuevamente y se acercó mucho más cerca de mi oído –Sé que soy hermoso, pero para la próxima que me mires tan cerca podría reaccionar de otra manera- y mi corazón se paralizó, estaba despierto. Me abrazó fuertemente y ni pude moverme, antes de soltarse rápidamente se movió hacia mi nariz depositando un beso, quizás el más dulce, solo sé que no podía hablar –Buenas noches Birdie- y reaccioné.

-Birdie?-

Él ya estaba afuera y volteo mientras seguía caminando hasta las escaleras –Estaba buscando un buen sobrenombre todo este tiempo, creo que ese queda bien- y se fue.

 
Entre el frio del próximo invierno y la pequeña lluvia que ya comenzaba llego el otoño mas rápido que nunca, solo tenia que levantar la vista para leer los resultados de las audiciones. Quería ser Aurora, quería interpretar su personaje… ella era una chica sensible pero alejada del mundo, me parecía conforme con mi personalidad… Louis estaba delante de mi, la costumbre del teatro es no poder demostrar emoción hilarante al conocer los resultados, nos respetábamos unos a otros y eso lo hacia cómodo para todos, pero a Louis se le olvidó en ese instante cuando gritó “SOY FRANCHESKO” y se volteo para agarrar a la primera persona que tenía, a mí. Después de tantos giros besó mi frente mientras seguía festejando –Felicidades- dije mientras me reía, él era gracioso y aunque era mayor que todos nosotros se comportaba como un niño, ahora solo faltaba saber mi papel… Aurora era la protagonista junto con Franchesko, una obra donde se demostraba los sentimientos navideños conjugados con una historia de amor imposible, di unos pasos y encontré “Aurora” en negrita, cerré los ojos deseándolo con todas mis fuerzas pero cuando abajo leí “Chloe Flewills” mi sonrisa se ensanchó –Lo hice- pero no expresé nada, solo reí y escuché muchas felicitaciones seguidas de abrazos de mis compañeros… Cuando logré salir del montón de gente la euforia entro en mi cuerpo y como si fuera también una niña corrí, Louis no tardó en adaptarse a mi euforia y ambos estábamos haciendo una especie de baile frenetico.

-Eso quiere decir que eres Aurora?- ambos nos paralizamos y volteamos a ver a un mini grupo de personas viéndonos en el pasillo, no eran de teatro pero los conocía bien.

-Soy Aurora- la euforia nisiquiera me dejaba pensar y corrí a abrazarlo, el extendió sus brazos y me dio vueltas estando en el aire.

-Felicidades Birdie- dijo cerca de mi oído, para cuando me bajó el me sostenía con su brazo encima de mi hombro y su mano traspasando mi espalda –Y supongo que también a ti Louis- Louis y el se saludaron, después prosiguió Niall… cuando estábamos a punto de audicionar Louis y yo practicábamos juntos casi todos los días para obtener los papeles, no tardaron mucho tiempo en hacerme amigos con confianza.

-Bueno pero tenemos que festejar- dijo Niall al instante –Club o Bar?-

-Bar- dije inmediatamente, los clubes no me gustaban.

-Le avisaré a todos- Niall comenzó a usar su celular rápidamente y el tiempo pasó volando.

La noche habia llegado y el bar estaba con menos gente que antes, y todos estábamos animados. Festejábamos por nuevas ofertas, nuevas oportunidades y por algunos contratos, tan solo festejábamos. Cuando Aria me saludó pude ver a sus amigas con tanta piel de sobra, mis ojos se dirigieron directo a su pecho, demonios –Pink Pink- dijo Neidy, por un momento casi me ahogo con el segundo trago mientras reía recordando, juntamos dos mesas y ya todos cabíamos, la música estaba fuerte y el calor se sentía en el espacio. Louis habia traído a una compañera, su nombre era Claudia, su novia… y por el otro lado podía ver a Neidy coqueteando con Zayn, no eran absolutamente nada, pero desde lejos se veía se gustaban pero no lo admitían. Harry estaba del otro lado platicando o discutiendo con Andy que ya llevaba su tercer trago, Niall se juntaba a esto y aquellas chicas se unían a cualquier conversación, me sentía… feliz. Cómoda. –AHH- gritó Aria –LA CANCIÓN- volvió a gritar, todos la miramos por un instante y reconocí la canción.

-Who’s That Boy?- pregunté, era de Demi Lovato, adoraba a Demi. Como si fuera dicho un hechizo Aria se levantó y me sostuvo por el brazo.

-Bailar. Ahora.- vi la pista de baile y no estaba tan abarrotada y no hacia nada malo con bailar un poco, dí un último gran sorbo a mi trago y las dos nos arrastramos hasta la pista de baile, voltee por un segundo para ver a Taylor sentándose en mi asiento que ya lo habia especializado para quedar imposiblemente más cerca de Harry, bien… supongo que puedo jugar, no necesitaba mostrar mucha piel. Esa noche me habia puesto un short con unos botines tacones altos, el cabello alborotado y una camisa azul eléctrico, cuando todos vieron mis piernas quedaron impresionados… Gracias al baile. Llegamos a la pista de baile y tardé solo 3 segundos para acomodar el ritmo de música a mi cuerpo, Aria me seguía. Cuando el ritmo era interminablemente lento curvé mi cuerpo hasta más no poder, lo moví como solía hacerlo mi cabello junto a este y recordé aquella noche. Eso me iba a perseguir hasta el fin de los tiempos, el no quería parar y yo tomé una mala decisión… nunca pudiera pensar que un trago me traería tan malos problemas –Chloe?- Aria seguía bailando pero me miraba, habia parado completamente de hacerlo y todos a mi alrededor se seguían moviendo.

-Necesito un trago- sonreí y me fui a la barra dejándola a ella sola bailando, al voltear para verla ella ya habia conseguido acompañante. Me senté justo en la barra –Mal día?- iba a contestar, pero cuando vi a Liam de nuevo sonriéndome apoyado en la barra mi vista solo se fue a sus brazos, era, muy, atractivo.

-Ahora no tan malo- hice lo mismo que el apoyándome a la barra –Me das un Cosmopolitan?- el hizo una mueca, eso necesitaba. Alcohol puro. Sin jugo.

-Cortesía de la casa- puso el trago sobre la mesa y sonreí al verlo.

-Puedo pagarlo-

-Mientras que esté trabajando aquí no pagaras nada cariño- y me guiñó el ojo y fue a atender a otras personas. Por un momento mi vista se quedó en Harry, él estaba aún sentado y ya habían bebido otras cervezas, Taylor habia abandonado mi puesto para posicionarse en las piernas de Harry y él no se lo impedía, era un hombre, nunca lo haría. Cuando pude ver el trago ya se habia acabado y pedí otro rápidamente, Taylor le susurraba cosas a él y se reían, ambos lo hacían. Por un momento sentí algo, rabia? O si, mucha. Taylor era una puta y el permitía que lo puteara. Últimamente estábamos mas cerca, no dudaba en abrazarme o besar mi rostro con excepción de mis labios, pero siempre habia una pared que ninguno de los dos traspasaba, esa pared me estaba haciendo añicos –Wow wow wow- voltee para ver a Liam con el ceño fruncido –No estas bebiendo tal vez demasiado rápido?- miré mi trago, acabado. 

-He bebido cosas peores- el solo rió.

-Estudias en Julliard no? Que especialidad?- 

-Baile y Actuación- el abrió los ojos.

-Yo estudié baile allí- y ahora la sorprendida era yo.

-Oh, eres graduado-

-Trabajo en una empresa de baile… pero este es el negocio familiar asi que ayudo en mis noches libres- explicó.

-Entiendo, eso es completamente genial- el hizo un silencio corto y luego volvió a apoyarse sobre la mesa.

-Cariño te importaría mostrarme tu calidad en baile?- lo miré divertida.

-Es como una prueba?- pregunté.

El rio –Posiblemente- dijo. Mi vista se fue otra vez a Harry, aquella chica… Taylor, estaba prácticamente encima de él, sus labios en su cuello y sentí mi decisión aferrarse a la idea de arriesgarse.

-Ok- dije, el solo sonrió y se alejo sin mirarme, me puse de pie a un lado de la barra y en menos de 5 minutos el ya estaba afuera, tenia una camisa pegada blanca, tan pegada que podía ver sus músculos y unos jeans negros, cuando se acercó a mi tomó mi mano sin dudarlo y me apretó contra el… comenzó a caminar hacia el dj y susurró algo, nunca soltó mi mano. Luego mientras que caminábamos hasta el centro de la pista la música se detuvo de la nada haciendo sentar a algunas personas, otras se quedaron de pie esperando la siguiente canción. Liam tomaba mi mano con tanta delicadeza, y me acercó mucho más a él, su cuerpo pegado al mío, mis pies de casualidad sintieron el piso y ya tenía su boca cerca de mi oído –Hermosa- dijo. Reconocí la canción inmediatamente, Señorita de Justin Timberlake, salsa. No aparté mis ojos de los suyos, nuestros pies comenzaron a moverse al ritmo de la música, cuando Justin comenzó a cantar sentí las manos de Liam sobre mi estómago estando de espaldas a el y bajando, sostuvo mi mano nuevamente y me dio vueltas, nos movíamos al ritmo de la música sin dejar de mirarnos, mi cuerpo dando todo lo que podía. En una de esas el se agachó y recorrió con su mano desde mi tobillo hasta mi muslo desnudo, subiendo mi pierna y bajándola sin dejar de seguir el ritmo, sus ojos se oscurecieron. Me levantó y mi cabello dio varias vueltas, cuando perdí su mirada nadie más bailaba en la pista, solo nosotros y mucha gente observaba la escena, Liam tocaba mi rostro y recordé porque lo habia hecho, Harry estaba a un lado de la pista observando todo, Taylor estaba al frente de el con sus brazos alrededor, destaca Chloe. Al final del baile tomé el control de este dejando a Liam sin movimientos y mi cuerpo siguiendo en si, para cuando Liam me volvió a atraer hacia el la canción termino y nuestras caras quedaron cerca, él sonrió y se acercó mucho mas dejando un beso justo al lado del labio, besando el límite, se apartó tan solo un poco y siguió mirándome, esta vez su mirada me reflejaba una pregunta, podía besarme? Pero no pude contestar…

-Entiendo- dijo, sin soltarme aun con sus manos en mis caderas susurró en mi oído –Me gustaría ir a una cita contigo Chloe- podía ver a la gente volver a la pista de baile mientras y me hablaba –Me encantaría que aceptaras- una… cita? No habia tenido ningún tipo de cita desde que terminé con mi último novio… si como a los 15 más o menos –Chloe?- lo miré alejándome un poco, el sonreía por lo bajo.

-Puedo pensarlo?- pregunté, el cerró los ojos y asintió, me ponía nerviosa.

-Piensa, pero no mucho- volvió a dar un beso rápido en mi mejilla –Tengo que ir a atender- y se fugó, para cuando mi cuerpo pudo reaccionar casi todos estaban sentados pero Harry habia desaparecido, también Taylor… tragué saliva.

-Wow aquí va la chica bailarina- Niall estaba de pie con unos tragos –Dios Chloe si fuera sabido que bailabas así me fuera metido en danza contemporánea- todos rieron en unisonido y pude alcanzar a ver a Andy golpearlo con el codo antes de recibir un beso de su parte y ponerse románticos, asqueroso.

Uno de los tragos de Niall estaba destinado a ser mío, y así fue… tomando el trago busqué a Harry por toda la zona y el realmente no estaba allí –Se fue con Pinky- dijo Neidy, la miré… ella me miraba fijamente.

-Se fue?-

Ella levantó los hombros con tranquilidad –Estaba algo apurado y Taylor dijo algo de llevarla a casa- no le dio mas importancia.
-El debía llevarme- dije. Zayn me miró por un momento.

-Yo te llevaré- aunque realmente no me gustaba nada de esto y mi mente estaba suficientemente llena de Harry y Taylor en la misma habitación… haciendo… esas cosas. No debía pensar en eso, no. Harry solo era un amigo en el cual sentía cierto aprecio, mas nada, el trago como llegó se fue y pedí otro, quería borrarme por un día sin pensar en nada, eso quería. Memorias llegaron rápidamente mientras me encontraba aun sentada bebiendo otro trago, Harry era… una especie de… hermano, así lo veía, tal vez era extraño para cualquier persona pero para mí no, mi hermano y yo éramos tan unidos, inseparables. Era la única persona que realmente siempre estaba allí y era tan dulce… podía recordar su cara blanca mirándome mientras me abrazaba, o su sonrisa que me tranquilizaba, o sus deliciosa comida mexicana que nunca supe como aprendió a hacerla… siempre era agradable –Es hora de irnos- susurraron tan cerca de mi oído que me hizo cosquillas y mi cuerpo solo rio sin mirar quien era, no recordé mucho después de eso, todo estaba en movimiento y hasta habia pensado en que habia dicho alguna tontería que causaba gracia, o era solo yo la que reía? Realmente era solo yo, nadie se reia, vergüenza. –No me cargues- susurré al que me sostenía.

-Tenemos que subir estas escaleras y dudo que puedas sola- sentí un frio en mi piel y para cuando pisé mi piso decía palabras para que él se fuera, pero era llevada a otra parte –Tengo que asegurarme que estés bien-

-Lo estoy- mentira, no podía ver nada, solo sentía su piel.

-Duerme-

-Pero…-

-Duerme-.
 
Estaba tan pegada a la sabana que realmente estaba cómoda y o que rico frio estaba en la habitación, pero nada es perfecto. Nuevas ganas de vomitar entraron en mi sistema haciéndome correr como pude hasta llegar al baño y llenarlo de bebidas ligadas y algo que ni sabia que habia comido, que patética me podía ver, apoyada del inodoro, tratando de recordar como llegué a casa y con la ropa sucia de anoche puesta, mi cabello hecho un desastre, suficientemente patética para formar un escándalo. Una ducha después y ahí seguían las ojeras y mi rostro pálido, demasiado pálido, por lo menos ya olía bien… Maldito infierno, el clima seguía igual, habia empezado a llover desde temprano y ya era de tarde y seguía lloviendo, la cabeza me dolía infernalmente y encontrar mi celular era una especie de juego… Lo habia dejado en la cocina, que demonios hacia yo en la cocina borracha? Negué con la cabeza tratando de no pensar en nada, debía ir a clases, con deber se refería a debía y no quería. Mi auto estaba estacionado en el mismo sitio y corrí a él mojándome tan solo un poco, ya adentro realmente no parecía que iba a escampar pronto.

Personas corriendo para poder llegar secos a la universidad y yo cuestionando porque habia asistido a un bar anoche, ah sí, habia olvidado el factor Harry, un nuevo dolor apareció más el resentimiento de beber tanto la noche anterior, apoyé mi cabeza al volante tratando de mantener todo adentro, me perdí en mis pensamientos. Un golpeteo de puertas me despertó nuevamente y al voltear era la figura de un hombre con algún tipo de sombrilla y muchas gotas cayendo sobre el. Salí para encontrarme con Louis que traía tal vez una cara peor que la mia –Resaca-

-Maldito infierno- respondí, el colocó su brazo por mis hombros tensándome por su toque pero dejándolo pasar.

-Anoche Claudia terminó conmigo- voltee desesperadamente para mirarlo, el estaba normal, lo que me parecía raro porque Claudia habia sido su novia desde… desde que tengo memoria.
-Es una perra Louis- coloqué un brazo a su alrededor y nos adentramos en la universidad, entre tanta gente no podía reconocer a nadie, tampoco es que quería hacerlo, quería solo dormir en mi cómoda habitación. La mente nisiquiera me daba para pensar en el y en su maldita manera de desaparecer con Taylor, tampoco para pensar como volví a casa, lo dejaría para después. Mi celular se habia descargado dejando cualquier rastro fuera de este, por alguna razón sentía que todos me miraban, estaba cansada de esas costumbres que empezaba a tener, era normal ser mirada siendo parte de un grupo de personas técnicamente reconocidas. La primera clase habia sido cancelada por las lluvias, la rabia se mantuvo en mi interior, por lo menos vería baile. Louis me dejó sola después de eso y quede sentada en una de las escaleras, apoyada a la pared, las ganas de vomitar no se habían ido –Cenicienta- dí un brinco de susto, Neidy y Andy estaban ya a un lado de mi, Neidy se sentó con las mismas ganas de vivir que yo y Andy solo nos miraba sorprendidas –Te ves algo pálida-

-No he parado de vomitar- dije con esfuerzo, sentí a Neidy apoyarse de mi hombro y la vi durmiendo.

-A decir verdad deberían prohibirles a las dos que beban con exceso- Andy estaba manejando su celular –Ayer llegaste a casa bien?- abrí los ojos por un momento para verla, ella me estaba detallando.

-Eso creo- tenía la voz ronca, la garganta rasposa y nada de energía.

-Liam fue el que te llevó por si preguntas- vi que ella contestó una llamada que pronto fue abandonada –Harry estaba preocupado-

-Debería estarlo, me dejó sola anoche- traté de levantarme y el dolor de cabeza volvió así que opté por dejar mi cuerpo en esas escaleras, podía pasar el tiempo y Neidy no se movería, yo nisiquiera quería abrir los ojos y Andy, bueno, todo lo que escuchaba eran las teclas de su celular.

-Se ven horribles-  escuché, sabía quién era.

-Shh Zayn- dijo Neidy.

-Shh? Tenemos clases cariño, debemos irnos-

-Pero… quiero saltarme las clases-

-Para que viniste hoy entonces? Vamos- abrí los ojos por un momento para ver a Zayn cargando a Neidy con sus brazos, reí un poco.

-Vergonzoso- sonreí.

-Ese podría ser tú mismo destino- sentí un cuerpo sentado a mi lado, aquellas escaleras se habían vuelto el centro de estudiantes.

-Tu no hables- me voltee para pegar la cabeza contra la pared y cerré los ojos.

-Tomaste aspirina?-

-De casualidad estoy aquí-

-Oh- por alguna razón sentía tensión en el aire –Disculpa por dejarte anoche sola… debía ir al hospital- y perdí todo orgullo que quedaba, me voltee tan rápidamente para mirarlo que me maree y para cuando el me sostuvo ya el me habia tocado, habia perdido.

-Que… que ocurrió?- el me miraba seriamente, mi cuerpo habia quedado en una posición extraña, el tan solo apoyó su cabeza a sus piernas que tenían una especie de abrigo encima, quedando acostada y sentada al mismo tiempo, el no dijo nada y mis parpados pesaban tanto que comenzaban a cerrarse, sentí su mano en mi cabello que ni habia recogido.

-Mi hermana sufrió un desliz- dijo, abrí los ojos un poco y el no me miraba, estábamos solos.

-Tu hermana?-

-Mi hermana tiene Cáncer Chloe, Cáncer en un pulmón- explicó, mantuve la respiración… esta era el tipo de información personal que necesitaba saber, pero a la vez no. El siguió acariciando mi cabello y no podía decir nada –Ella estaba en casa anoche y se desmayó de la nada… mi mamá la llevo al hospital y la estabilizaron, me notificaron y tuve que irme-

-Lamento haber pensado lo contrario, ella está bien? Digo, que haces aquí? Digo tu hermana-

-Shhh- sonrió un poco y bajó la mirada clavando sus ojos en los mios –Ella está bien, no es la primera vez que pasa… vine porque necesitaba saber que habia pasado con esta personita que no se fue anoche con Zayn- y su mirada era dudosa, algo dura y dulce a la vez.

-Liam me llevó a casa creo- frunció un poco el ceño, tan levemente que no podría ser notado desde una distancia más lejana –No recuerdo nada- el hizo silencio y dejó de acariciar mi cabello, subió su cabeza. En ese momento me sentía como la peor persona, la peor. Pero aun asi faltaba algo por saber. –Anoche Taylor se fue contigo y pensé otras cosas- el bajó de nuevo su mirada y cerré los ojos.

-Que pensaste esta vez?- que habia pensado? Que el prefería a una rubia puta en su cama que llevarme a casa, eso habia pensado.

-Nada en especifico- voltee mi cabeza mirando la pared de al frente, se podía ver a varias personas pasando por el pasillo. El hizo silencio y comenzó a acariciar mi cabello nuevamente, ahora no podía dejar de pensar en la hermana de Harry, no sabia nada de su familia tampoco…

-No pasó nada con Taylor, Birdie.- explicó, sus dedos en mi cuero cabelludo –No creo que ninguna otra persona me haga sentir como tu- aunque sus dedos seguían en ese movimiento continuo sobre mi cabello lo sentía mas cerca, una curva de mis labios se elevó un poco y seguí con los ojos sellados.

-Si sigues haciendo esto me quedaré dormida-

-Entonces seguiré haciendolo...- dijo.

Habia visitado tantos hospitales a través de mi vida que este me parecía normal, habia visto tantas personas con batas blancas y con expectativas sobre las demás vidas que realmente era normal, y habia visto tanta gente morirse y nacer al mismo tiempo que estaba acostumbrada, habia olvidado como se sentía ser parte de esto –Ella está aun dormida- Harry volvió a tomar asiento a mi lado, tan solo habia pasado un dia y el habia insistido en que debía conocer a su hermana menor, Gemma, estaba nerviosa. Realmente lo estaba –Estas fría- dijo de la nada y lo miré, el habia tocado mi mano que estaba por encima de mi muslo, apreté su mano un poco.

-No es que me encanten los hospitales- admití.

-Se el sentimiento- comenzó a jugar con mis dedos calmándome un poco.

-Cuando tenia como 14 comencé a sufrir una baja de organismos, y… entre todo esto llegué a sufrir serias enfermedades- tenia tiempo sin contar esto, el me miraba atento –Anorexia era una de ellas, pronto me recuperé pero era obligada a pasar tiempo en psicólogos y hospitales- Dejó de jugar con mis dedos para dar una pequeña caricia en mi cabeza con esta.

-Todo pasó- dijo sin esfuerzo, volvió a tomar suavemente mi mano y la puso en su regazo, lo permití. No sabía por qué lo permitía pero me lo permitía a mi misma. Miraba muchas personas pasar y detenerse, otras llorar levemente y otras alegrarse mientras esperábamos, pero llegó una señora muy hermosa que estaba cerca de nosotros, se nos quedó mirando con sus dulces ojos y una pequeña sonrisa se elevó –Mamá- y soltó mi mano, el se levantó enseguida y por lo tanto también me puse de pie, sostuvo a aquella señora y la abrazó como si fuera de cristal, era su madre, tenia tanto parecido que era indiscutible –Ella es birdi… Chloe- corrigió –Chloe Flewills y birdie ella es Anne Cox, mi madre-

-Flewills- la mamá estrecho su mano con la mia mientras que seguía hablando –Hija de Josh Flewills y Samantha Flewills?- preguntó inocentemente, los reconocia.

-Un placer, si, hija de ellos dos- sonreí políticamente ella solo me miro detenidamente y ensancho una sonrisa –Lamento no saber nada de usted, Harry no es un experto comentando sobre su vida- ella miró detenidamente a Harry y luego volvió a sonreir.

-Me sorprende que estés aquí, el no suele traer invitados… a veces Zayn, pero más nadie- podía sentir el rubor sosteniéndose en mis mejillas, era especial, realmente lo era. Oh basta Chloe, no vas a caer en eso tampoco. Despues de una pequeña charla Gemma despertó y cuando entramos ella tan solo nos miraba, no podía hablar para evitar cualquier oxigeno fuera de lugar y tenía un aparato que le daba respiración artificial, Harry comenzó a hablarle mientras le tomaba la mano y yo la saludé tímidamente, no podíamos estar mucho tiempo allí pero Gemma era hermosa, una adolescente fuerte por lo que podía decir. Ella se parecía a Harry, mas bien, era una muestra femenina de Harry sonreí un poco notando ese dato. Para cuando debíamos partir a clases me despedí dejando una pequeña flor en el florero, habían muchas flores y peluches y muchos regalos, pero ninguna orquídea, la flor de la vida y nos marchamos. Seguía lloviendo y tuvimos que esperar justo en la entrada antes del estacionamiento y el silencio se extendió, sabía que debía darle espacio ya que ver a su hermana en ese estado debía ser algo nada agradable, opté por callar.

-Nunca parará de llover- dijo después de un tiempo, nuestros hombros chocaban y a pesar de estar en un techo teníamos parte de los zapatos mojados –Que tal si usas la chaqueta y voy a buscar tu auto- habíamos usado mi auto esta vez, pero el lo manejaba.

-Prefiero esperar- no me quejaba de estar cerca de el en silencio, no habia ningún drama con ello. El esperó sin decir nada –Asi que nadie viene a visitar?- pregunté, me habia sentido especial pero tenia que saber lo contrario para asegurar de que no era real lo que pensaba, el no respondió al instante.
-No me gusta compartir mi vida personal-

-Usualmente lo haces conmigo- nisiquiera lo miré.

-Tu tienes ese algo… ese algo que hace que confíe en ti- sabia de que hablaba.

Guardé silencio –Te gusto- dije, quería sacarlo de quicio y que lo negara y despertar de este maldito cielo que estaba sintiendo con el, que me destrozara el corazón pero hizo lo contrario.

-Posiblemente- mi corazón latió tan fuerte que nisiquiera escuchaba la lluvia, porque le gustaba? No habia nada en si que hiciera que le gustara. Oh claro Chloe, le gustas porque no sabe todo sobre ti, ni tus errores, ni tu familia, ni tus pensamientos. Es eso –Deja de pensar- dijo nuevamente, esta vez voltee a mirarlo y él me miraba fijamente.

-Te gusto?-

-Posiblemente- volvió a responder esta vez con una media sonrisa.

-Que determina esa posibilidad?- pregunté. Él se puso un poco más cerca de mí.

-La determina si tu sientes lo mismo, si es lo contrario supongo que dejaría de ser una posibilidad- un trueno hizo temblar mi cuerpo, voltee para mirar la lluvia volverse mas fuerte –Asi que, te gusto?- preguntó.

-Posiblemente- respondí, realmente porque no tenia ninguna respuesta, por supuesto que me gustaba pero aceptar cualquier sentimiento era destrozarlo y convertirlo en odio.

-No es tan difícil birdie, tampoco estas enamorada, yo no estoy enamorado… tan solo pienso que eres agradable y me gustas, eso es todo, podría gustarme cualquier persona…- y allí estaba lo que esperaba, mi corazón desilusionarse de un tiron, no dudé en comenzar a caminar hasta el auto sin importarme la lluvia.

El me siguió –Chloe- me detuve a mitad de la lluvia, su voz era dura, me voltee a mirarlo.

-Posiblemente nisiquiera me gustes, posiblemente tan solo me agradas pero gustar? No- expliqué, posiblemente mentía, odiaba todas las posibilidades que mi cabeza estaba enfrentando en este momento.

El me miró y la lluvia ya nos habia empapado lo suficiente como para no tener que bañarnos en un mes –Tú me gustas Chloe- admitió, pero realmente valía de algo?.

El silencio nos inundó a ambos –Yo no sé lo que siento, tan solo quiero volver a casa- realmente quería hacerlo.

 
Caminaba por los pasillos deseando que llegara el fin de semana para desaparecer de todo, debía ver canto a primera hora y no estaba en total animo. Esa noche dejé a Harry en su casa y procedí a la mia, no hablamos mas de ese tema y el dia anterior a este habia sido normal, todo habia vuelto a la normalidad con la única diferencia de que ignoraba a todos y me concentraba en lo mio, la lluvia habia parado pero el clima seguía tan oscuro como si estuviera lloviendo. Me senté en el mismo asiento de siempre, sorpresivamente el no estaba a mi lado, nisiquiera adentro del salón y para mas sorpresivo aun tampoco lo habia visto esta mañana, en algún momento aparecería.

Pero no fue asi, practicamos la obra de teatro y almorzamos juntos y nadie sabia de el, absolutamente nada, Zayn llamaba a su celular y no contestaba e inmediatamente pensé en Gemma, quizás habia caído nuevamente –A donde vas?- me habia puesto de pie antes de terminar la clase de teatro, ya mi parte estaba hecha, pero parte del respeto es ver las demás practicas –Excuse me- dije hacia Louis, el guiñó un ojo y salí rápidamente de la universidad, comenzó a llover mientras iba camino hasta el hospital y para cuando llegué comenzó a llover mas fuerte, antes de poder entrar hasta la habitación de Gemma, Anne tenia una bandeja de comida en su mano y verla tan tranquila me tranquilizo en parte –Anne- dije, ella voltió y sonrio como si fueramos mejores amigas.

-Chloe… que haces aquí?- preguntó –Y porque estas mojada?-

-Sigue lloviendo- expliqué –Harry no fue a clases hoy y no lo vi en todo el dia y pensé que habia ocurrido algo porque es raro que falte y me preocupé y entonces…-

-Respira respira- rio un poco –Ustedes los jóvenes y su amor- negó con la cabeza –Harry está enfermo, el quería asistir a clases pero no se lo permití asi que está en casa, no podía dejar a Gemma sola asi que el se quedó solo…- me miró por un instante –Quizas quieres ir y ver como esta? Ten…- extendió un juego de llaves –No se si vaya a ir esta noche para allá, puedes… como se dice… cuidarlo o algo- pero esa sonrisa la conocía bien, Anne tramaba otro tipo de cosas. No pude decir que no y ella debía volver con Gemma. Harry enfermo, cosas extrañas y esas, nunca habia visto a Harry enfermo o decaído o triste.

Cuando llegué a su casa la lluvia seguía sin parar y ya mi ropa estaba muy mojada, estacioné el auto y jugué con el juego de llaves hasta encontrar la correcta, nunca habia entrado. Era… hogareña, era familiar y sobretodo cálida, al entrar olía bien, y los colores combinaban con la paz y la diversión, y un juego de fotos se extendían por toda la sala, no habia casi obras, habían mas fotos que otra cosa, una gran tos me sacó de mis pensamientos haciéndome adivinar en donde se encontraba Harry, la puerta estaba abierta –Harry?- pregunté, escuché otros sonidos mas fuertes y me acerque a la gran cama que habia, el estaba tapado por completo con una sabana y solo podía ver parte de su cabello –Harry te encuentras bien?-

No contestó, me acerqué rápidamente quitando parte de la sabana para verlo sudar mucho, demasiado. Su cabello se pegaba contra su frente y sus ojos seguían cerrados, lo moví un poco –Mamá?-

-No, disculpa por no ser ella- no respondió, toqué su frente y estaba ardiendo en fuego –Oh por dios- lo destapé mas para que agarrara fresco y no tardé en buscar como pudiese pañitos mojados para colocarle. Parte de no tener a nadie que te cuide es tenerlo que hacer tu sola, sin ayuda de nadie, por lo tanto sabia que medicinas servían y cuales no. Una vez puestos los pañitos mojados busqué medicina y agua para beber –Harry bebe- me senté en la cama y coloqué su cabeza sobre mis piernas –Bebe- el levantó como pudo la cabeza y bebio lo que le di. Luego cayó nuevamente en mis piernas, estaba mojada, mi ropa estaba mojada y no ayudaba, talvez tenia ropa en el auto… sostuve su cabeza con ambas manos y la coloque sobre la cama, cuando intenté levantarme su mano me sostuvo fuertemente –No te vayas- dijo y su mano se soltó, ya yo me habia quedado paralizada –Acercate- dijo nuevamente –Por favor- volvió a decir, estaba rogando, mi cuerpo se acercó sin pensarlo y me senté cerca de el en la cama –Chloe lamento…- susurraba cosas, pequeñas cosas que me fueran gustado oir, pero no tenían sentido, no para mis oídos. Sus dedos rozaron mi brazo y entendí lo que pedia, quería que me acostara a su lado, me acosté poco a poco hasta quedar justo a su lado, el estaba de cabeza y cuando toque la cama y podía mirarlo el se volteo a mirarme –Nunca…- volvia a susurrar otras cosas sin sentido, su mano subió hasta mi rostro y la depositó ahí, nisiquiera la movia, estaba tan caliente. Se movió mas y mas quedando justo al frente de mi, sentía su calor –No te vayas-

-No me iré- dije.

-Nunca- dijo, y se acercó mas, dejando solo centímetros de distancia entre nuestros labios…

Saben esos momentos en lo que todo parecía estar aparentemente bien? Cuando el único problema que tenían era solo los suyos y ninguna persona te echaba mierda encima para que cayeras? Esos momentos no duraban mucho tiempo en mi vida, tenia aproximadamente meses sin ver o hablar con mi madre, ella estaba demasiado ocupada para tan solo contestar una llamada y su secretaria escribía los mensajes que recibia que eran supuestamente de ella, conocía su manera de escribir, no era ella. Camine por esos pasillos que cada vez se hacían mas largos hasta llegar a la oficina, atrás de una pared estaba la grandiosa sala de espera, en la esquina de la puerta para entrar habia un guardia, era nuevo ya que no lo habia visto, era grande y fornido, mi madre era exagerada con el tema de protección, mi padre quizás era lo contrario pero era obligatorio que tuviera guardias, aquel hombre arrugó la frente colocándose justo en el medio –Eres nuevo, soy Chloe Flewills su hija- crucé los brazos, el asintió y me dejo pasar, mi mamá era la única que podía transformar un sitio publico en privado en pocos minutos, suspiré –Mamá- ella dejo de mirar el ventanal que estaba en la habitación para mirarme de pie a cabeza cambiando su rostro fácilmente.

-Dios Chloe te ves asquerosamente horrible-

-Soy una universitaria enferma, nisiquiera estoy en un desfile de modas- sabia que no debía acercarme o que no recibiría un abrazo, estaba acostumbrada ya a eso.

-Aun asi, el público lo es todo para una imagen- mi mamá se sentó en uno de los sofás cruzando sus largas piernas, ella era hermosa, tenia el cabello por los hombros, se lo habia pintado de rubio y por la ropa podía decir que acababa de llegar de Suecia, estaba lista para ir a alguna alfombra roja o algo parecido –Sientate- hizo un movimiento de manos asi que me senté en el sofá de al frente –Solo quería venir aquí para saber sobre ti-

Por supuesto, si ya fuera no rechazado la invitación para aquella cena familiar para aquella recaudación de fondos me la fuera creído –Existen los celulares, aunque creo que mi numero ha sido borrado-

-Oh Chloe no comiences, vengo en paz-

Suspiré colocándome derecha –No pienso ir-

-Chloe, hemos ido cada año… que te hace pensar que puedes faltar esta vez? Tu papá está en la cima y daría de que hablar, yo también, acaso no puedes pensar en nosotros?-

Respiré tan fuertemente, no quería discutir no quería ir –Mamá que he hecho yo durante todo este año? Has asistido a algún evento por mi? No me necesitan, ustedes brillan por si solos- Ella se quedó callada pero moviéndose incómodamente, podía ver sus tacones, hermosos por supuesto, suspiré en rendición –Iré-

Ella sonrió tan abiertamente que me dio asco –Dios eso es bueno- e hizo silencio –Supe que te habían escogido como protagonista para una obra navideña o algo asi- la mire extrañada.

-Si, eso fue la semana pasada-

-Iré a esa obra como recompensa, es un trato- no quería ningún trato, quería que ella fuera solo porque quería ir, pero ningún argumento saldría.

-Ok-.
 


La semana habia transcurrido con normalidad o supuesta normalidad, no habia tenido ningún encuentro cercano con Harry, solo en las prácticas en canto para presentarnos hoy en la fiesta de Halloween, si, 31 de Octubre y habia un disfraz que me habian regalado una chica de Teatro, Anais. Ella pasaba últimamente mucho tiempo con Louis y se reía de sus idioteces, ambos hacían bonita pareja… ambos eran unos idiotas. Reí al recordar su cabello enrollado en mi camisa el día anterior, era agradable hablar con ella ya que no tenía que ver con el grupo de Harry como solía llamarlo y siempre me escucha y luego me hace reir, Blanda maulló, cuando me di cuenta su agua estaba acaba así que lo llené más, seguía caminando por todo el apartamento en ropa interior pensando si debía ponerme ese vestido o no. Para cuando arreglé mi cabello dejándolo en suaves ondas y decidí ponerme el vestido blanco solo faltaban las alas y la aureola, veía los lentes y no combinaban nada con el atuendo así que pasé por alto ponérmelos. Después de ver que el vestido no se veía tan mal como parecía solo faltaba y que mi pecho no se vería demasiado y que la linda falda con seda caía un poco mucho más debajo de mi trasero no podía esperar para salir de aquí, cargaba unos tacones con tiras que llegaban hasta mis rodillas y al verme en el espejo, era como si fuera retrocedido 5 años, me veía como la viva imagen de Chloe Flewills, la popular, retorcida y sobretodo famosa adolescente. Suspiré, la única diferencia de eso era mi mente, debía tenerlo claro.

Mi auto insistió en no encender esa noche, sabía que estaba un poco viejo, pero no quería cambiarlo. Tomé un taxi y los carros estacionados llegaban tan lejos que era imposible que cupiera tanta gente adentro de ese salón. La tradición de la universidad si era verdadera, era difícil encontrar a alguna persona que no estuviera disfrazada o a medio vestir, ya que las putas nunca faltan –Demasiada gente- entré e inmediatamente me aferré hacia la pared, habia mucha gente y debía evitarla a toda costa, Neidy me habia enviado un mensaje con la ubicación, se suponía que debía buscar una mesa en alguna esquina de color verde fluorescente, pero debía pasar por toda esa gente así que tan solo obvié la idea. Habia música buena, eran varios grupos y cantantes con canciones originales y canciones que casi todo el mundo conocía, cuando la gente comenzó a sentarse era mi turno de ir a buscar el sitio. Caminé por toda la zona escuchando piropos de borrachos sin sentido, tratando de no ser casi tocada por ellos, para cuando logré ver la supuesta mesa no reconocía a ninguno de los que estaban sentados, entre Brujas, Sexys y espantos se encontraban mis amigos… eran mis amigos no? –OH POR DIOS- cuando desperté pensando en aquello Neidy ya estaba de pie mirándome completamente, todos voltearon e hicieron la misma expresión, abrieron la boca y me miraron de arriba, abajo y viceversa –Angel? Dios Chloe eres la chica mas sexy que he visto- miré a un lado y estaba el grupo de Taylor junto con Aria, ambas mostrando mas de lo debido en pequeños vestidos rojos –Es solo un disfraz-

-Te ves… dios, no soy lesbiana y quiero llevarte para el baño- la mano de Andy me tiró hacia la mesa haciendo que me sentara y su comentario hizo reir a todos.

-Muy hermosa-

-Demasiado- dijeron Zayn y Niall, sabia que ya estaba lo suficientemente roja, pero por la oscuridad no iba a ser notado.

-Gracias- miré a los lados buscando a Harry –No ha llegado? Harry digo, no ha llegado?-

-Nope- Neidy ya estaba bebiendo y habian varias mesas –Estaba haciendo unas cosas y dijo que vendría hace poco…- Se suponía que debíamos cantar de 5tos y al ver al escenario solo faltaban 2 presentaciones para ello, debía respirar, debía hacerlo. Entre tragos, la gente bailando y viendo putas en acción me entretuve, pero los nervios no trataron de  desaparecer, mas bien, aumentaban. Por cada minuto que pasaba y cada presentación o canción que seguía mis nervios se hacían fuertes. Varios del grupo se pararon a bailar y entre ellos Neidy y Zayn estaban haciendo una demostración de una pareja bailando sensualmente, muy a lo lejos podía ver a Louis con Anais, el la tenia acorralada contra la mesa y ella no tenia ninguna objeción, y a mi lado estaban besándose Niall y Andy, realmente una solterona a mi edad era un desperdicio. Harry nunca llegó asi que tuve que ponerme de pie y explicar el caso a la profesora que debía estar atrás del escenario, caminé por las orillas evitando nuevamente a la gente que estaba mas borracha aun y pude llegar –Señorita Flewills, que bueno que llega...- ella miró a los lados –Y el señor Styles?-

-No tengo ni la menor idea- ella arrugó la frente.

-Lo llamaste?-

-Por supuesto- un chico se acercó a nosotras, parecía el que controlaba todo.

-El acto de Styles y Flewills queda cancelado- dijo la profesora, la chica que estaba en el escenario habia parado de cantar.

-No podemos parar, tenemos esto… ella debe ser profesional- exigió el. Y comenzaron a hablar muchas cosas que la bulla de los aplausos y gritos no me dejaron escuchar, solo veía bocas moviéndose, exigiendo y discutiendo, me recordaba tanto a algo…

-Ella no puede hacerlo sola-

-Es una profesional no? Ultimo año, Hola- dijo el.

-Ella no, ella es diferente, sencillamente no puede, no puede hacerlo sola, nunca lo ha hecho sola, ella no es capaz de…- no escuché lo demás, habia confundido su imagen con la imagen de mi madre diciendo lo mismo cuando estudiaba danza, no era capaz y no se me era permitido intentarlo o demostrar lo contrario, desde siempre haciendo lo que me pedían y moviéndome según la corriente, siguiendo las normativas de mis padres como si sirviera para algo, ellos seguían discutiendo, vi el piano sobre el escenario, lo iluminaba una gran luz blanca que estaba sobre este y recordé todas las clases de piano que me hicieron tomar… pero yo era demasiado timida, demasiado no talentosa, no era suficiente para lo que me exigían, no era necesario un intento ya que no podría hacer las cosas a media o demostrar lo que sabia, tenia que ser perfecta y lograr la perfección para honrar a la familia, sentí mis pies moverse  por si solos, aquella perfección nunca fue lograda, lo único que podía hacer era encajar en un grupo bastante popular para ser llamativa y famosa y por lo tanto respetada, tenia que asistir a todos esos eventos y comportarme como aquella chica, la dama, la perfecta. Mis pies seguían moviéndose, escuché algunos gritos atrás pero no dejaron de moverse, pero no se puede confiar de la gente ya que de eso no se vive, y los decepcioné, un solo error y todo mi mundo perfectamente falso se vino abajo quedando yo allí, destrozada, juzgada, sin ser escuchada, sin decir nada, sin lagrimas, sin sonrisas, sin personas a mi alrededor, escondida… sin aliento.

Mi dedo tocó una tecla del piano y aquellos murmullos que habia estado escuchando desde que mis pies no dejaron de moverse desaparecieron, ajusté mi postura y me senté en el banco al frente del piano, puse ambas manos en este tocando teclas con mis dedos al son de una canción que tenia en mi mente, la habia practicado tanto, cerré los ojos porque no quería que nadie estuviera mirándome, solo era yo y la música, yo y mi talento, yo y mis sentimientos. Mis dedos se movieron mas allá rápidamente y el micrófono estaba a mi estatura puesto en el piano, comencé a cantar, como si fuera a perder la voz con ese nudo en la garganta, mis dedos y mi voz en sincronía, Teenage Dream. Siempre practicaba, no dormia o jugaba practicando para que ella no asistiera a ningún recital, estaba demasiado ocupada Chloe, como podía asistir? No me habia dado cuenta que ya estaba de pie tocando aun el piano moviéndome al ritmo de este y el micrófono ya lo habia ajustado a mi, mi voz llegó a un punto en que si no la soltaba lloraría, pararía, grité pero no sonó mal, mis dedos dolían, estaba apretando las teclas con tanto ardor que dolían dulcemente, era un dolor agradable y se calmaron, mi voz bajó y la ultima nota del piano salió delicadamente, abrí los ojos, veía la luz en el piano y al voltear todos me miraban fijamente como si fueran visto lo peor de noche de brujas, mi corazón se paralizó. Una persona, solo una empezó a aplaudir y mis ojos no se desviaron de el, Harry habia llegado y no sonria, pero su cara era sorpresiva, ese aplauso dio la bienvenida a otro y luego a otro mas hasta que todo el salón comenzó a aplaudir, gritar y aullar desesperadamente y nisiquiera se calmaban, me moví hasta el centro del escenario y sequé las lagrimas que se habian quedado en mis mejillas y bajé mi cabeza en forma de agradecimiento, cuando voltee para dirigirme fuera del escenario la profesora también estaba aplaudiendo y el chico atrás de ella me miraba con asombro, sonreí.

-Un Angel en desarrollo- dijo un señor atrás de ellos dos, no lo conocía, pero su traje podía darme un indició.

-Disculpe?- dije.

-Cual es tu nombre?-

-Chloe Flewills- el señor colocó un dedo en su barbilla y se la frotaba pensativo.

-Flewills, no me sorprende- odiaba esto, odiaba esto definitivamente –Tienes un gran futuro Chloe, estoy seguro de ello… si no le molesta pediré su información a la academia y podría tener algunos negocios interesantes- mi piel se erizó, tenia. Una. Oferta. De. Trabajo. Dios, mi primera oferta de trabajo, quería brincar y gritar eufórica.

-Gracias- pero extendí mi mano, aunque mi sonrisa ensanchada me delataba.

-Seria un placer verla de nuevo señorita Flewills, eso fue… asombroso- y se marchó, salí de aquella zona y nisiquiera podía agarrar bien aire cuando Harry me cogió en sus brazos y me alzó dando vueltas en el aire.

-ESO FUE GENIAL- gritaba –ERES TAN ASOMBROSA- volvía a gritar, estaba riéndome, realmente riéndome, totalmente feliz, no habia nada que me podría detener.

-VOY A VOMITAR- dije jugando, el dejó de girar y aun estaba arriba, mis manos apoyadas en sus hombros y comenzó a bajarme, cuando me bajó nuestros cuerpos estaban completamente pegados uno con el otro y se frotaban, mis pensamientos convulsionaron con millones de sensaciones adjuntas a esto y mi rostro pasó cerca del suyo, mi corazón comenzó a salir sin un ritmo especifico, mis pies tocaron el suelo pero aun sentía sus brazos aferrados a mi cintura y mis manos en sus hombros, mirándonos fijamente como si fueramos a derretir algo que no existía, nisiquiera pestañábamos, su boca se movió pero no escuché por el ruido –Que?- pregunté, el sonrió un poco y acercó su boca a mi mejilla para quedar cerca de mi oído.

-Quiero que tengamos una cita Chloe, pronto- explicó.