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El chico que se metia por mi ventana (james maslow y tn pena)
O W N :: Archivos :: Novelas Abandonadas
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Re: El chico que se metia por mi ventana (james maslow y tn pena)
holaaa!!! :DD no me odies!!! D: jajajajajajaj tampoco me ames tanto *momentos lesvis* jejejeJuLy de Maslow escribió:
Hola!!!
Como te odio!:wut:
Como te atreves a dejar el cap asi osea What?!?!
Tn esta embarazada?! que paso no puede ser no te conectas por unos cuantos dias y BAM!
te encuentras con esto! es tan woow! y tan Zap y tan tan tan wooow
Te amo tanto!!!!
Siguela o le dire a Elmo que vaya por ti
Muahahahahahah!!!!!!!:jajajaj::bye:Chao chao!
NO , NO LE DIGAS A EL MO DONDE VIVO D: AHORA LA SIGO
valeerusher
Re: El chico que se metia por mi ventana (james maslow y tn pena)
CAPITULO 36.
(TN) :
Oí el coche estacionar, así que di un salto y corrí hacia la ventana. Me estremecí cuando lo vi salir del coche y caminar furioso hacia la casa. Me sentí enferma. No podía dejarlos hacer esto, se iban a meter en tantos problemas. No podría soportar perder a ninguno de ellos.
No quería que Carlos se metiera en problemas, pero en serio me mataría si James estaba en problemas por esto.
Mordí mi labio, pensando. Tal vez podría ir y ser otro testigo, entonces de esa manera cuando él empiece algo primero podría decir que fue en defensa propia también. Otro testigo ayudaría sin duda a su caso. Oh, mierda, ¡James me va a matar por esto! Salí corriendo de su casa hacia la mía. Podía oír gritos provenientes de adentro y me detuve, sentí el temor familiar que siempre sentía cuando era una niña. No podía moverme del lugar, era como si estuviera congelada. Podía oír su voz, gritando, y me helaba la sangre —pero esos eran Carlos y James allí, siempre estaban cuidando de mí, siempre. Podía hacer esto por ellos, todo lo que tenía que hacer era presenciar como él lanzaba el primer golpe.
Me acerqué a la puerta, no estaba cerrada, sólo la empujé.
— ¡Esto es todo por tu maldita culpa! Tú y (tn) tenían que abrir sus sucias bocas y decirle a Logan lo que pasó. Has arruinado todo para mí, todo, pedazo de mierda. Debería haber empujado a tu madre por las escaleras o algo así, cuando me dijo que estaba embarazada de ti —gritó mi padre enojado.
Gemí a causa de las horribles palabras que acababa de decirle a mi hermano. Mi padre siempre fue desagradable pieza, pero eso fue bajo, incluso para él.
Escuché una explosión y un gemido, así que abrí la puerta, para ver a James sosteniendo a Carlos, tratando desesperadamente de mantenerlo lejos de mi padre, que estaba parado contra la pared, mirándolos con rabia.
— ¡Así no! Carlos, ¡así no! —gritó James, a Carlos mientras lo sujetaba en sus brazos.
Mi hermano no estaba calmándose. Su rostro estaba rojo de ira, lo único que podía detenerlo cuando estaba así, era yo. Odiaba verme alterada ni algo, era tan sobreprotector.
— ¡Carlos, cálmate! —supliqué desesperadamente.
Él dejó de moverse, James lo apartó y me miró sorprendido y un poco asustado. Se movió hacia mí y vi a mi padre, moverse al mismo tiempo, estaba mucho más cerca de mí que James, y estaba bloqueando su camino. Ni siquiera tuve tiempo de alejarme antes de que agarrara mi muñeca, apretándola fuerte, su cara enojada y roja. Me estremecí mientras me apretaba más fuerte haciendo al dolor disparar por mi brazo. Intenté sacar mi brazo con rapidez, pero él no lo soltaba.
— ¡Tú! ¡Tú maldita arruinaste todo! —me gritó, hundiendo sus uñas en mi piel. No podía respirar.
— ¡Déjala ir, ahora! —ordenó James, luciendo tan enojado que realmente me asustó.
Mi padre se volvió hacia él, aun sujetándome con fuerza.
— ¡Vete a la mierda! Es mi hija —le espetó él, tirando de mi brazo, haciéndome perder mi equilibrio y tropezar más cerca suyo. Podía oler el alcohol en su aliento, haciéndome sentir enferma. Giré y tiré de mi brazo, tratando de liberarme. Todavía no me dejaba ir, así que puse mi mano sobre su pecho y lo empujé tan fuerte como pude. Él no se movió ni un centímetro. Vi su mano moverse y cerré los ojos sabiendo que me iba a golpear.
Su mano conectó con mi cara, haciéndome sentir como si mi cabeza hubiera explotado. Me caí hacia atrás y me estrellé en el aparador. Dolor como nunca había sentido en mi vida se disparó a través de mi estómago y mi espalda baja. Era como si alguien me hubiera apuñalado. Me aferré al aparador, tratando de mantenerme en pie mientras siseaba a través de mis dientes. Carlos pasó por encima y me agarró tirando de mí hacia abajo sobre el piso, sentándonos abajo apoyándonos en el aparador.
—Mierda. (ta), ¿estás bien? —preguntó con desesperación, acunando mi cabeza contra su pecho.
Envolví mis brazos alrededor de mi estómago, tratando de respirar a través del dolor.
—No —gruñí. ¡Oh, no, estaba perdiendo el bebé!— ¿James? ¿Dónde está James? — pregunté, abriendo los ojos y mirando alrededor por él, pero apenas podía ver nada, porque mis ojos estaban llenos de lágrimas. Podía oír ruido gruñidos y gemidos. Oh Dios, él no está... ¡Por favor, dime que no está haciendo eso! Parpadeé y miré para ver a James golpear a mi padre una y otra vez, su rostro era la viva imagen de la rabia. Él no iba a parar hasta que ya no respiraba. Esto era todo. James me iba a ser arrebatado, y yo estaba perdiendo su bebé. Sentí mi corazón rompiéndose en mil pedazos.
—Ve a detenerlo —susurré, apenas capaz de hablar.
—No. Deja que lo mate —gruñó Carllos enojado.
Negué con la cabeza. ¡Oh, Dios mío, por favor!
—Carlos, ¡ve a detenerlo! Por mí, ¿por favor? Lo necesito. Dile que estoy herida. Lo necesito —jadeé mientras una oleada de náuseas se apoderaba de mí, haciéndome vomitar—. ¿James? —grité desesperadamente, pero fue apenas un susurro. Carlos se movió.
—Iré a buscarlo —dijo rápidamente mientras se ponía de pie de un salto. Rodé hasta ponerme de lado, llevando mis rodillas al pecho, sosteniendo mi estómago.
¡Oh por favor, no me dejes perder este bebé! Cerré los ojos con fuerza contra el dolor; un par de segundos después James acarició mi mejilla haciéndola arder de nueva.
— ¿Ángel? —susurró, sonando tan preocupado que me rompía el corazón una vez más. ¿Cómo podía decirle que estaba perdiendo el bebé? Él estaba tan feliz por eso, ¿cómo demonios iba a decir las palabras? Quería envolverlo con mis brazos y hacer que me abrazara y que hiciera que todo esto se fuera. James podía hacer que todo estuviera bien, él podía hacer que todo estuviera bien.
Me moví para levantarme pero una oleada fresca de dolor me golpeó, haciéndome jadear.
—Duele, James. Por favor, duele tanto —murmuré, levantando la Mirada hacia su perfecto rostro. Él lucía tan preocupado por mí. Yo estaba perdiendo todo. ÉL iba a ir a la cárcel y yo estaría sola. ¿Cómo iba a vivir sin él?
— ¿Qué duele, Ángel? —preguntó, mientras inclinaba su cabeza y besaba mi mejilla.
—Mi estómago. —No pude mirar su rostro cuando se dio cuenta que estaba perdiendo el bebé, no quise ver el dolor y la devastación allí. Volví me rostro hacia la alfombra y sollocé. Esto era completamente mi culpa. Debería haberme quedado en su casa como me dijo. Si estuviera allí ahora el bebé estaría a salvo, y James no estaría enfrentándose a la cárcel. Él sólo había golpeado a mi padre porque yo estaba allí, no lo hubiera hecho si yo sólo me hubiera quedado. ¿Por qué no podría haberme quedado allí como él me había dicho?
— ¡Carlos! ¡Llama una ambulancia! —gritó James desesperadamente. Estaba acariciando la parte de atrás de mi cabeza suavemente—. Shh, todo está bien. Está bien, Ángel —me arrulló. Sentí su brazo envolverme, así que volví mi rostro hacia él. Estaba acostado junto a mí. ¿Cómo demonios todavía me estaba consolando?
Esto era todo mi culpa; ¿por qué no me gritaba?
—Lo lamento tanto —dije honestamente. Esto iba a arruinar todo; él no me querría ahora que había matado a nuestro bebé.
Él inclinó la cabeza y besó mi frente.
—Ángel, no tienes nada que lamentar —susurró, acercándose a mí. Su mano frotaba círculos en mi estómago, tan suavemente que apenas podía sentirlo.
—Esto es mi culpa —exclamé, sollozando una vez más. Él sacudió la cabeza ferozmente y se alejó de mí de un empujón. Sentí mi corazón romperse. Lo sabía; él me iba dejar ahora. Se puso de pie y fue hacia mi padre quien estaba intentando levantarse del suelo y comenzó a golpearlo de nuevo, gritando una retahíla de improperios.
Carlos lo lanzó al piso.
— ¡Détente! ¡Ve con (tn), ahora! —ordenó, mirándolo con ira.
James asintió y corrió de vuelta hacia mí.
—Voy a levantarte, ¿de acuerdo? —dijo suavemente.
Sacudí la cabeza, no quería moverme.
—No. Por favor no —susurré. El dolor era tal que me sentía enferma. Él lucía como si también estuviera sufriendo mientras se movía sobre mí, apartando el cabello del mi rostro, besándome suavemente, murmurando palabras tranquilizadoras.
— ¿Dónde está la maldita ambulancia? —le gritó a Carlos.
—En camino. ¿Qué le sucede? —preguntó mi hermano, arrodillándose junto a mí. Apreté la mano de James, sin querer verlos pelear por esto si Carlos se asustaba por lo del bebé.
—Está embarazada Carlos —explicó James, besando mi mejilla.
— ¿E…embarazada? —tartamudeó. James asintió, mirándome con preocupación.
—Voy a hacerte pagar por esto, ¡pequeña mierda! —gritó mi padre desde la puerta. Carlos y James ambos se movieron para levantarse pero yo tomé la mano de James, no quería estar sola de nuevo.
—Sal de aquí antes de que te mate yo mismo, y si ella pierde su bebé lo juro por Dios, estás muerto —gruñó Carlos venenosamente.
—Carlos, por favor —susurré, sin querer más problemas.
— ¿Bebé? ¿Está embarazada? La pequeña zorra —gruñó mi padre.
James estaba tan enojado que todo su rostro estaba rojo cuando se movió para levantarse una vez más. Justo en ese momento pude oír las sirenas aumentando haciéndose más intensas. El rostro de James voló al mío, sonrió débilmente.
—Está bien ahora, Ángel, la ayuda llegó. Todo va a estar bien —dijo suavemente.
Levanté la mirada para ver que mi padre se había ido; Carlos estaba de pie en la puerta esperando la ambulancia.
James me estaba mirando, sus hermosos ojos apretados con preocupación.
Lo amaba tanto, ¿cómo me las voy a arreglar cuando él me deje y se vaya a la universidad, y todo lo que me quede sea lo que podría haber sido?
El paramédico se acercó con Carlos.
— ¿Qué sucedió? —le preguntó a James.
—Está embarazada. (tn) , ¿te golpeaste el estómago o algo? —preguntó James, sosteniéndome la mano con fuerza. Asentí, asustada de moverme en caso de que el dolor se pusiera peor, no podía soportar mucho más.
— ¿Cuán avanzado está el embarazo? —preguntó el paramédico.
—Cinco semanas —respondió James, mirándolo en forma suplicante.
—De acuerdo. Bueno, te llevaremos al hospital; te revisaré en la ambulancia. ¿Te duele en otro lugar, (tn) ? —preguntó el paramédico.
—Me duele la espalda, y las caderas. —Hice una mueca cuando me guió para que yaciera sobre la espalda.
Él asintió.
—Eso puede suceder a veces. Parece que podrías tener un aborto —dijo en tono de disculpas. Asentí mostrando mi acuerdo. Ya sabía eso, no había manera que no estuviera teniendo un aborto, esto era demasiado doloroso para ser otra cosa. James sostuvo mi mano todo el camino, sólo mirándome, sin hablar. Su rostro era la imagen del dolor. Él estaba sufriendo mucho; podía ver el dolor en sus rasgos mientras me miraba. No me iba a perdonar.
Cuando llegamos allí fui llevada en una camilla a un pequeño cubículo y un doctor vino casi inmediatamente.
—De acuerdo, (tn), voy a tener que mirar y ver si tu cérvix está abierto —explicó, poniéndose unos guantes.
Miré horrorizada a James, apretando su mano con más fuerza.
—Shh, todo está bien. Estoy aquí. Todo está bien —me calmó, frotando su mano libre suavemente contra mi rostro. Grité cuando el dolor me atravesó, hacienda que nuevas lágrimas cayeran mientras el doctor hacía su examen. James las besó suavemente, mirándome, con el corazón roto.
—Lo lamento, pero tu cérvix está abierto, estás teniendo un aborto. Necesitamos hacer un procedimiento para apresurar las cosas. Sólo tienes cinco semanas así que ésta es la manera las rápida y segura —dijo el doctor, arrojando lejos sus guantes manchados de sangre.
— ¿Qué procedimiento? —preguntó James.
—Se llama EPCR. En un proceso quirúrgico. Necesitará ser hecho bajo anestesia general y retirará todos los rastros del embarazo —explicó, mirándome con un poco de tristeza.
¿Proceso quirúrgico?
— ¿Eso es seguro? —preguntó James apretando mi mano con más fuerza.
El doctor asintió.
—Es la forma más segura. Podríamos dejar que se expulsara solo durante la siguiente semana aproximadamente, pero eso podría tener un alto riesgo de infección. Es mejor para (tn) si lo sacamos rápidamente.
Asentí. Quería que esto terminara; no quería estar sangrando abundantemente por una semana, especialmente si era así de doloroso todo el tiempo. James me miró, esperando porque yo tomara la decisión.
—De acuerdo —murmuré, cerrando los ojos.
—De acuerdo, bien, iré y me aseguraré de que haya un quirófano libre. Es un proceso muy rápido. Volverás aquí después —afirmó el doctor, asintiendo hacia James mientras se iba rápidamente.
Sorbí por la nariz y me volví hacia James.
—Lo lamento tanto,James, esto es todo mi culpa.
Él jadeó, y sacudió la cabeza con fiereza.
— ¡Podrías dejar de decir eso! No es tu culpa, Ángel. Deja de culparte. Ese imbécil te hizo esto, no tú. —Si inclinó y me besó la frente con suavidad.
—No. No debería haber dejado tu casa. Me dijiste que me quedar allí. Debería haberte escuchado, y ahora he matado a nuestro bebé —sollocé, sintiendo mi corazón romperse una vez más.
Él salió cuidadosamente de la cama y me envolvió con sus brazos, intentando no moverme.
—Nada de esto es tu culpa; tú no mataste al bebé, Ángel. Es sólo una de esas cosas. Sabes que soy un firme creyente en que todo sucede por una razón; no se suponía que tuviéramos este bebé. No tienes la culpa. Si alguien tiene la culpa, ese soy yo, si no le hubiera dicho que saliera de encima de ti él podría no haberte golpeado —dijo quedamente. Sacudí la cabeza y sepulté mi rostro en su pecho, aferrándome a él con fuerza, esto no era su culpa, nada de esto era su culpa—. Te amo —susurró una y otra vez en mi oído, hasta que el doctor volvió y me llevó al quirófano.
James caminó junto a mi cama hasta que llegué al cuarto y no se le permitió entrar más. Me besó suavemente, los ojos brillantes con tristeza y dolor.
—Estaré aquí cuando despiertes. Te amo más que a nada —me prometió.
Sonreí ante sus palabras. Él todavía me amaba, todavía me quería. Sólo esperaba que no estuviese diciendo esas cosas porque yo estaba disgustada o dolorida. Recé porque él realmente todavía me quisiera después de lo que había hecho.------------------- hasta ahi capi de hoy besos
(TN) :
Oí el coche estacionar, así que di un salto y corrí hacia la ventana. Me estremecí cuando lo vi salir del coche y caminar furioso hacia la casa. Me sentí enferma. No podía dejarlos hacer esto, se iban a meter en tantos problemas. No podría soportar perder a ninguno de ellos.
No quería que Carlos se metiera en problemas, pero en serio me mataría si James estaba en problemas por esto.
Mordí mi labio, pensando. Tal vez podría ir y ser otro testigo, entonces de esa manera cuando él empiece algo primero podría decir que fue en defensa propia también. Otro testigo ayudaría sin duda a su caso. Oh, mierda, ¡James me va a matar por esto! Salí corriendo de su casa hacia la mía. Podía oír gritos provenientes de adentro y me detuve, sentí el temor familiar que siempre sentía cuando era una niña. No podía moverme del lugar, era como si estuviera congelada. Podía oír su voz, gritando, y me helaba la sangre —pero esos eran Carlos y James allí, siempre estaban cuidando de mí, siempre. Podía hacer esto por ellos, todo lo que tenía que hacer era presenciar como él lanzaba el primer golpe.
Me acerqué a la puerta, no estaba cerrada, sólo la empujé.
— ¡Esto es todo por tu maldita culpa! Tú y (tn) tenían que abrir sus sucias bocas y decirle a Logan lo que pasó. Has arruinado todo para mí, todo, pedazo de mierda. Debería haber empujado a tu madre por las escaleras o algo así, cuando me dijo que estaba embarazada de ti —gritó mi padre enojado.
Gemí a causa de las horribles palabras que acababa de decirle a mi hermano. Mi padre siempre fue desagradable pieza, pero eso fue bajo, incluso para él.
Escuché una explosión y un gemido, así que abrí la puerta, para ver a James sosteniendo a Carlos, tratando desesperadamente de mantenerlo lejos de mi padre, que estaba parado contra la pared, mirándolos con rabia.
— ¡Así no! Carlos, ¡así no! —gritó James, a Carlos mientras lo sujetaba en sus brazos.
Mi hermano no estaba calmándose. Su rostro estaba rojo de ira, lo único que podía detenerlo cuando estaba así, era yo. Odiaba verme alterada ni algo, era tan sobreprotector.
— ¡Carlos, cálmate! —supliqué desesperadamente.
Él dejó de moverse, James lo apartó y me miró sorprendido y un poco asustado. Se movió hacia mí y vi a mi padre, moverse al mismo tiempo, estaba mucho más cerca de mí que James, y estaba bloqueando su camino. Ni siquiera tuve tiempo de alejarme antes de que agarrara mi muñeca, apretándola fuerte, su cara enojada y roja. Me estremecí mientras me apretaba más fuerte haciendo al dolor disparar por mi brazo. Intenté sacar mi brazo con rapidez, pero él no lo soltaba.
— ¡Tú! ¡Tú maldita arruinaste todo! —me gritó, hundiendo sus uñas en mi piel. No podía respirar.
— ¡Déjala ir, ahora! —ordenó James, luciendo tan enojado que realmente me asustó.
Mi padre se volvió hacia él, aun sujetándome con fuerza.
— ¡Vete a la mierda! Es mi hija —le espetó él, tirando de mi brazo, haciéndome perder mi equilibrio y tropezar más cerca suyo. Podía oler el alcohol en su aliento, haciéndome sentir enferma. Giré y tiré de mi brazo, tratando de liberarme. Todavía no me dejaba ir, así que puse mi mano sobre su pecho y lo empujé tan fuerte como pude. Él no se movió ni un centímetro. Vi su mano moverse y cerré los ojos sabiendo que me iba a golpear.
Su mano conectó con mi cara, haciéndome sentir como si mi cabeza hubiera explotado. Me caí hacia atrás y me estrellé en el aparador. Dolor como nunca había sentido en mi vida se disparó a través de mi estómago y mi espalda baja. Era como si alguien me hubiera apuñalado. Me aferré al aparador, tratando de mantenerme en pie mientras siseaba a través de mis dientes. Carlos pasó por encima y me agarró tirando de mí hacia abajo sobre el piso, sentándonos abajo apoyándonos en el aparador.
—Mierda. (ta), ¿estás bien? —preguntó con desesperación, acunando mi cabeza contra su pecho.
Envolví mis brazos alrededor de mi estómago, tratando de respirar a través del dolor.
—No —gruñí. ¡Oh, no, estaba perdiendo el bebé!— ¿James? ¿Dónde está James? — pregunté, abriendo los ojos y mirando alrededor por él, pero apenas podía ver nada, porque mis ojos estaban llenos de lágrimas. Podía oír ruido gruñidos y gemidos. Oh Dios, él no está... ¡Por favor, dime que no está haciendo eso! Parpadeé y miré para ver a James golpear a mi padre una y otra vez, su rostro era la viva imagen de la rabia. Él no iba a parar hasta que ya no respiraba. Esto era todo. James me iba a ser arrebatado, y yo estaba perdiendo su bebé. Sentí mi corazón rompiéndose en mil pedazos.
—Ve a detenerlo —susurré, apenas capaz de hablar.
—No. Deja que lo mate —gruñó Carllos enojado.
Negué con la cabeza. ¡Oh, Dios mío, por favor!
—Carlos, ¡ve a detenerlo! Por mí, ¿por favor? Lo necesito. Dile que estoy herida. Lo necesito —jadeé mientras una oleada de náuseas se apoderaba de mí, haciéndome vomitar—. ¿James? —grité desesperadamente, pero fue apenas un susurro. Carlos se movió.
—Iré a buscarlo —dijo rápidamente mientras se ponía de pie de un salto. Rodé hasta ponerme de lado, llevando mis rodillas al pecho, sosteniendo mi estómago.
¡Oh por favor, no me dejes perder este bebé! Cerré los ojos con fuerza contra el dolor; un par de segundos después James acarició mi mejilla haciéndola arder de nueva.
— ¿Ángel? —susurró, sonando tan preocupado que me rompía el corazón una vez más. ¿Cómo podía decirle que estaba perdiendo el bebé? Él estaba tan feliz por eso, ¿cómo demonios iba a decir las palabras? Quería envolverlo con mis brazos y hacer que me abrazara y que hiciera que todo esto se fuera. James podía hacer que todo estuviera bien, él podía hacer que todo estuviera bien.
Me moví para levantarme pero una oleada fresca de dolor me golpeó, haciéndome jadear.
—Duele, James. Por favor, duele tanto —murmuré, levantando la Mirada hacia su perfecto rostro. Él lucía tan preocupado por mí. Yo estaba perdiendo todo. ÉL iba a ir a la cárcel y yo estaría sola. ¿Cómo iba a vivir sin él?
— ¿Qué duele, Ángel? —preguntó, mientras inclinaba su cabeza y besaba mi mejilla.
—Mi estómago. —No pude mirar su rostro cuando se dio cuenta que estaba perdiendo el bebé, no quise ver el dolor y la devastación allí. Volví me rostro hacia la alfombra y sollocé. Esto era completamente mi culpa. Debería haberme quedado en su casa como me dijo. Si estuviera allí ahora el bebé estaría a salvo, y James no estaría enfrentándose a la cárcel. Él sólo había golpeado a mi padre porque yo estaba allí, no lo hubiera hecho si yo sólo me hubiera quedado. ¿Por qué no podría haberme quedado allí como él me había dicho?
— ¡Carlos! ¡Llama una ambulancia! —gritó James desesperadamente. Estaba acariciando la parte de atrás de mi cabeza suavemente—. Shh, todo está bien. Está bien, Ángel —me arrulló. Sentí su brazo envolverme, así que volví mi rostro hacia él. Estaba acostado junto a mí. ¿Cómo demonios todavía me estaba consolando?
Esto era todo mi culpa; ¿por qué no me gritaba?
—Lo lamento tanto —dije honestamente. Esto iba a arruinar todo; él no me querría ahora que había matado a nuestro bebé.
Él inclinó la cabeza y besó mi frente.
—Ángel, no tienes nada que lamentar —susurró, acercándose a mí. Su mano frotaba círculos en mi estómago, tan suavemente que apenas podía sentirlo.
—Esto es mi culpa —exclamé, sollozando una vez más. Él sacudió la cabeza ferozmente y se alejó de mí de un empujón. Sentí mi corazón romperse. Lo sabía; él me iba dejar ahora. Se puso de pie y fue hacia mi padre quien estaba intentando levantarse del suelo y comenzó a golpearlo de nuevo, gritando una retahíla de improperios.
Carlos lo lanzó al piso.
— ¡Détente! ¡Ve con (tn), ahora! —ordenó, mirándolo con ira.
James asintió y corrió de vuelta hacia mí.
—Voy a levantarte, ¿de acuerdo? —dijo suavemente.
Sacudí la cabeza, no quería moverme.
—No. Por favor no —susurré. El dolor era tal que me sentía enferma. Él lucía como si también estuviera sufriendo mientras se movía sobre mí, apartando el cabello del mi rostro, besándome suavemente, murmurando palabras tranquilizadoras.
— ¿Dónde está la maldita ambulancia? —le gritó a Carlos.
—En camino. ¿Qué le sucede? —preguntó mi hermano, arrodillándose junto a mí. Apreté la mano de James, sin querer verlos pelear por esto si Carlos se asustaba por lo del bebé.
—Está embarazada Carlos —explicó James, besando mi mejilla.
— ¿E…embarazada? —tartamudeó. James asintió, mirándome con preocupación.
—Voy a hacerte pagar por esto, ¡pequeña mierda! —gritó mi padre desde la puerta. Carlos y James ambos se movieron para levantarse pero yo tomé la mano de James, no quería estar sola de nuevo.
—Sal de aquí antes de que te mate yo mismo, y si ella pierde su bebé lo juro por Dios, estás muerto —gruñó Carlos venenosamente.
—Carlos, por favor —susurré, sin querer más problemas.
— ¿Bebé? ¿Está embarazada? La pequeña zorra —gruñó mi padre.
James estaba tan enojado que todo su rostro estaba rojo cuando se movió para levantarse una vez más. Justo en ese momento pude oír las sirenas aumentando haciéndose más intensas. El rostro de James voló al mío, sonrió débilmente.
—Está bien ahora, Ángel, la ayuda llegó. Todo va a estar bien —dijo suavemente.
Levanté la mirada para ver que mi padre se había ido; Carlos estaba de pie en la puerta esperando la ambulancia.
James me estaba mirando, sus hermosos ojos apretados con preocupación.
Lo amaba tanto, ¿cómo me las voy a arreglar cuando él me deje y se vaya a la universidad, y todo lo que me quede sea lo que podría haber sido?
El paramédico se acercó con Carlos.
— ¿Qué sucedió? —le preguntó a James.
—Está embarazada. (tn) , ¿te golpeaste el estómago o algo? —preguntó James, sosteniéndome la mano con fuerza. Asentí, asustada de moverme en caso de que el dolor se pusiera peor, no podía soportar mucho más.
— ¿Cuán avanzado está el embarazo? —preguntó el paramédico.
—Cinco semanas —respondió James, mirándolo en forma suplicante.
—De acuerdo. Bueno, te llevaremos al hospital; te revisaré en la ambulancia. ¿Te duele en otro lugar, (tn) ? —preguntó el paramédico.
—Me duele la espalda, y las caderas. —Hice una mueca cuando me guió para que yaciera sobre la espalda.
Él asintió.
—Eso puede suceder a veces. Parece que podrías tener un aborto —dijo en tono de disculpas. Asentí mostrando mi acuerdo. Ya sabía eso, no había manera que no estuviera teniendo un aborto, esto era demasiado doloroso para ser otra cosa. James sostuvo mi mano todo el camino, sólo mirándome, sin hablar. Su rostro era la imagen del dolor. Él estaba sufriendo mucho; podía ver el dolor en sus rasgos mientras me miraba. No me iba a perdonar.
Cuando llegamos allí fui llevada en una camilla a un pequeño cubículo y un doctor vino casi inmediatamente.
—De acuerdo, (tn), voy a tener que mirar y ver si tu cérvix está abierto —explicó, poniéndose unos guantes.
Miré horrorizada a James, apretando su mano con más fuerza.
—Shh, todo está bien. Estoy aquí. Todo está bien —me calmó, frotando su mano libre suavemente contra mi rostro. Grité cuando el dolor me atravesó, hacienda que nuevas lágrimas cayeran mientras el doctor hacía su examen. James las besó suavemente, mirándome, con el corazón roto.
—Lo lamento, pero tu cérvix está abierto, estás teniendo un aborto. Necesitamos hacer un procedimiento para apresurar las cosas. Sólo tienes cinco semanas así que ésta es la manera las rápida y segura —dijo el doctor, arrojando lejos sus guantes manchados de sangre.
— ¿Qué procedimiento? —preguntó James.
—Se llama EPCR. En un proceso quirúrgico. Necesitará ser hecho bajo anestesia general y retirará todos los rastros del embarazo —explicó, mirándome con un poco de tristeza.
¿Proceso quirúrgico?
— ¿Eso es seguro? —preguntó James apretando mi mano con más fuerza.
El doctor asintió.
—Es la forma más segura. Podríamos dejar que se expulsara solo durante la siguiente semana aproximadamente, pero eso podría tener un alto riesgo de infección. Es mejor para (tn) si lo sacamos rápidamente.
Asentí. Quería que esto terminara; no quería estar sangrando abundantemente por una semana, especialmente si era así de doloroso todo el tiempo. James me miró, esperando porque yo tomara la decisión.
—De acuerdo —murmuré, cerrando los ojos.
—De acuerdo, bien, iré y me aseguraré de que haya un quirófano libre. Es un proceso muy rápido. Volverás aquí después —afirmó el doctor, asintiendo hacia James mientras se iba rápidamente.
Sorbí por la nariz y me volví hacia James.
—Lo lamento tanto,James, esto es todo mi culpa.
Él jadeó, y sacudió la cabeza con fiereza.
— ¡Podrías dejar de decir eso! No es tu culpa, Ángel. Deja de culparte. Ese imbécil te hizo esto, no tú. —Si inclinó y me besó la frente con suavidad.
—No. No debería haber dejado tu casa. Me dijiste que me quedar allí. Debería haberte escuchado, y ahora he matado a nuestro bebé —sollocé, sintiendo mi corazón romperse una vez más.
Él salió cuidadosamente de la cama y me envolvió con sus brazos, intentando no moverme.
—Nada de esto es tu culpa; tú no mataste al bebé, Ángel. Es sólo una de esas cosas. Sabes que soy un firme creyente en que todo sucede por una razón; no se suponía que tuviéramos este bebé. No tienes la culpa. Si alguien tiene la culpa, ese soy yo, si no le hubiera dicho que saliera de encima de ti él podría no haberte golpeado —dijo quedamente. Sacudí la cabeza y sepulté mi rostro en su pecho, aferrándome a él con fuerza, esto no era su culpa, nada de esto era su culpa—. Te amo —susurró una y otra vez en mi oído, hasta que el doctor volvió y me llevó al quirófano.
James caminó junto a mi cama hasta que llegué al cuarto y no se le permitió entrar más. Me besó suavemente, los ojos brillantes con tristeza y dolor.
—Estaré aquí cuando despiertes. Te amo más que a nada —me prometió.
Sonreí ante sus palabras. Él todavía me amaba, todavía me quería. Sólo esperaba que no estuviese diciendo esas cosas porque yo estaba disgustada o dolorida. Recé porque él realmente todavía me quisiera después de lo que había hecho.------------------- hasta ahi capi de hoy besos
valeerusher
Re: El chico que se metia por mi ventana (james maslow y tn pena)
Holaholahola capitulo hermoso aaw q ternura Jame *-*s q lindo el amor de ellos q lata q la rayis lo dude :/
Lamento no pasarme antes pero estoy castigada y con suerte pueda leer espero poder comentar pero buano eso.
"."
Lamento no pasarme antes pero estoy castigada y con suerte pueda leer espero poder comentar pero buano eso.
"."
MaJoRojas_
Re: El chico que se metia por mi ventana (james maslow y tn pena)
HOLAA :D thanks :niña: :3 la verdad me cuesta subir los capis seguido pero los hago ! jejeje tengo que subirlo a escondidas tambien y tengo la computadora en mi cuarto :DD! emvidienme jajaja okayno .MaJoRojas_ escribió:Holaholahola capitulo hermoso aaw q ternura Jame *-*s q lindo el amor de ellos q lata q la rayis lo dude :/
Lamento no pasarme antes pero estoy castigada y con suerte pueda leer espero poder comentar pero buano eso.
"."
ahora sigo el capi besos. :arrastro:
"."
valeerusher
Re: El chico que se metia por mi ventana (james maslow y tn pena)
CAPITULO 37.
JAMES:
Tan pronto como ella pasó esas puertas y estuvo fuera de mi vista, me hundí en el piso y puse la cabeza en mis manos. Todo mi cuerpo dolía. Ella tenía tanto dolor y no había nada que yo pudiera hacer. Habíamos perdido al bebé, y por alguna estúpida razón ella se culpaba porque ese idiota lo hiciera. Apreté mis manos en puños, presionándolos contra los ojos, intentando no pensar en él. Más pensaba en él, más quería salir de aquí y arrancarle la cabeza; pero no podía hacer eso.
Necesitaba estar aquí para mi chica cuando ella despertara. Ella no necesitaba nada más de que preocuparse ahora mismo.
Creía lo que le había dicho antes. Si se suponía que debíamos tener ese bebé, entonces así hubiera sido. Ella no lo hubiera perdido si así hubiera debido ser.
Siempre había creído que todo sucedía por una razón – pero eso no hacía que perder este bebé doliera menos. Un pequeño, perfecto bebé que había imaginado luciría justo como su mamá en todos los aspectos. Cerré los ojos y apoye la cabeza contra la pared, esperando que ella saliera. Apenas noté cuando Carlos vino y se sentó junto a mí, pasando un brazo por mi hombro.
—Lo perdió —murmuré.
El brazo de Carlos se apretó alrededor de mis hombros.
—Sí. Estará bien James —me aseguró, apretando mi hombro.
Estaba sorprendido de que no me estuviera pateando por haber dejado embarazada a su hermanita, pero para ser honesto, no podía importarme menos. Él no podía causarme más dolor del que ya sentía, la única que podía lastimarme así era mi Ángel. Ella era la única que tenía el poder de matarme.
Después de alrededor de cuarenta minutos la sacaron de la cirugía, todavía dormida por la anestesia. Me puse de pie de un salto, mirándola.
— ¿Está bien? —pregunté desesperadamente, dando saltos alrededor de la cama mientras la empujaban por el corredor.
—Todo salió bien. Sacamos todo. Estará bien. Podría comenzar a despertarse de la anestesia en una hora. La mantendremos aquí durante la noche, y la dejaremos ir mañana en algún momento de la tarde. Tendrá que estar tranquila por unos días—confirmó el doctor. Asentí y la seguí hasta su cuarto, sentándome junto a su cama, sosteniendo su mano con fuerza. Carlos y yo nos sentamos en silencio junto a la cama, no había nada que decir, nada que pudiera mejorar esto.
Después de alrededor de media hora, ella movió su mano en la mía. Di un salto mientras sus ojos aleteaban. Ésta era la segunda vez en tres días que había despertado así conmigo y le pedía a Dios que nunca fuera así de nuevo, porque ya no podía soportar más de esto.
—Hola, Ángel —murmuré, acariciando suavemente su rostro, lucía dolorida y ya estaban comenzando a formarse un moreton donde él la había golpeado.
Ella volvió la cabeza hacia mí pero no abrió los ojos.
—Te quedaste —exhaló, una pequeña sonrisa en la esquina de su boca. ¿Honestamente pensaba que la dejaría?
—Por supuesto que me quedé. —La besé suavemente. Ella lloriqueó y tomó débilmente el frente de mi camisa mientras me devolvía el beso.
—Te amo tanto James —susurró.
—Sé que es así, pero yo te amo más —respondí. Nunca nadie había amado tanto a alguien como yo la amaba a ella.
Caros se aclaró la garganta para que me apartara, todavía sosteniendo su mano con fuerza. Él se inclinó sobre ella y la abrazó.
—Lamento que hayas perdido a tu bebé, (ta) —dijo, luciendo como si realmente lo sintiera.
Ella asintió y sonrió con tristeza.
—Sí, yo también —contestó ella, su voz rompiéndose mientras hablaba.
—Voy a ir a llamar a Ruby y a Logan. También llamaré a tus padres James —dijo Carlos, besando su mejilla antes de desaparecer detrás de la cortina, dándonos algo de privacidad.
— ¿Te acostarías conmigo?
Asentí y me metí cuidadosamente a la cama con ella.
— ¿Te duele algo? —pregunté mientras suavemente pasaba un brazo sobre ella.
—No realmente. Estoy dolorida, pero no tanto como antes. —Hizo una mueca mientras se movía en la cama.
Cerré los ojos y sepulté el rostro en el costado de su cuello.
—Necesitas dejar de asustarme de esta manera. Realmente me vas a causar un ataque al corazón pronto —bromeé, intentando aligerar la situación.
Ella rió sin humor.
—Estoy tan cansada, James. —Volvió la cabeza, acariciando la mía con su nariz.
—Duerme, Ángel —la arrullé, subiendo las sábanas para mantenerla tibia.
Ella se durmió y se despertó varias veces por unas pocas horas. Le dieron más medicinas para el dolor, pero dijo que estaba bien. Después de un par de horas le permitieron salir de la cama para ir al baño mientras que fuera acompañada por dos enfermeras; lo cual ella no apreció en lo absoluto.
Una enfermera vino a las nueve, sonriéndome con tristeza.
—Lo siento, pero las horas de visita han terminado. Voy a tener que pedirte que te vayas —dijo en tono de disculpas mientras acomodaba a Amber en su cama.
— ¿En serio? ¿No puedo quedarme? No causaré problemas, ¿por favor? Dormiré en la silla, ni siquiera sabrá que estoy aquí —rogué, dándole la expresión que parecía funcionar tan bien con (tn).
Ella suspiró y puso los ojos en blanco.
—De acuerdo. Pero si alguien pregunta, te escabulliste aquí. ¿Entiendes? — preguntó, sonriendo y sacudiendo la cabeza.
Sonreí.
—Gracias. —Wow, ese rostro también funcionaba en otra gente.
Carlos se despidió, prometiendo volver a primera hora de la mañana, y traernos a (tn) y a mí una muda de ropa. Una vez que se hubo ido, ella se movió en la cama, haciendo una ligera mueca pero intentando no mostrarme que le dolía.
—Dormiré en la silla, Ángel —protesté, haciendo una mueca ante de la idea de darme vuelta y aplastarla o algo.
— ¿Por favor? —rogó.
Maldición, ¿por qué no podía decirle que no a esta chica? Suspiré y me saqué las zapatillas, metiéndome en la cama con ella. Ella se acurrucó contra mi pecho y lloró hasta quedarse dormida.
Desperté muy temprano en la mañana con alguien sacudiendo mi brazo. Levanté la mirada para ver a dos hombres de pie allí, ambos mirándome severamente. ¿Qué demonios? Oh maldición, ¡me voy a meter en problemas por dormir aquí!
— ¿James Maslow? —preguntó uno de ellos.
Asentí y me senté en silencio.
—Sí —susurré, intentando no despertar a (tn). Demasiado tarde, se movió y dio un salto cuando vio a los dos hombres de pie allí.
—James Maslow estoy arrestándolo por sospecha de Daños Físicos Graves. No tiene que decir nada, pero cualquier cosa que diga puede ser usada en su contra en una corte. Tiene derecho a un abogado. Si no puede pagarlo, uno le será facilitado — afirmó, mientras tomaba mi brazo.
¿Daños Físicos Graves? ¿Ese imbécil está presentando cargos?
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Perdió el bebé :c Bueno, era chica todavía D:
ATENCIÓN este fue el capi de hoy besos
JAMES:
Tan pronto como ella pasó esas puertas y estuvo fuera de mi vista, me hundí en el piso y puse la cabeza en mis manos. Todo mi cuerpo dolía. Ella tenía tanto dolor y no había nada que yo pudiera hacer. Habíamos perdido al bebé, y por alguna estúpida razón ella se culpaba porque ese idiota lo hiciera. Apreté mis manos en puños, presionándolos contra los ojos, intentando no pensar en él. Más pensaba en él, más quería salir de aquí y arrancarle la cabeza; pero no podía hacer eso.
Necesitaba estar aquí para mi chica cuando ella despertara. Ella no necesitaba nada más de que preocuparse ahora mismo.
Creía lo que le había dicho antes. Si se suponía que debíamos tener ese bebé, entonces así hubiera sido. Ella no lo hubiera perdido si así hubiera debido ser.
Siempre había creído que todo sucedía por una razón – pero eso no hacía que perder este bebé doliera menos. Un pequeño, perfecto bebé que había imaginado luciría justo como su mamá en todos los aspectos. Cerré los ojos y apoye la cabeza contra la pared, esperando que ella saliera. Apenas noté cuando Carlos vino y se sentó junto a mí, pasando un brazo por mi hombro.
—Lo perdió —murmuré.
El brazo de Carlos se apretó alrededor de mis hombros.
—Sí. Estará bien James —me aseguró, apretando mi hombro.
Estaba sorprendido de que no me estuviera pateando por haber dejado embarazada a su hermanita, pero para ser honesto, no podía importarme menos. Él no podía causarme más dolor del que ya sentía, la única que podía lastimarme así era mi Ángel. Ella era la única que tenía el poder de matarme.
Después de alrededor de cuarenta minutos la sacaron de la cirugía, todavía dormida por la anestesia. Me puse de pie de un salto, mirándola.
— ¿Está bien? —pregunté desesperadamente, dando saltos alrededor de la cama mientras la empujaban por el corredor.
—Todo salió bien. Sacamos todo. Estará bien. Podría comenzar a despertarse de la anestesia en una hora. La mantendremos aquí durante la noche, y la dejaremos ir mañana en algún momento de la tarde. Tendrá que estar tranquila por unos días—confirmó el doctor. Asentí y la seguí hasta su cuarto, sentándome junto a su cama, sosteniendo su mano con fuerza. Carlos y yo nos sentamos en silencio junto a la cama, no había nada que decir, nada que pudiera mejorar esto.
Después de alrededor de media hora, ella movió su mano en la mía. Di un salto mientras sus ojos aleteaban. Ésta era la segunda vez en tres días que había despertado así conmigo y le pedía a Dios que nunca fuera así de nuevo, porque ya no podía soportar más de esto.
—Hola, Ángel —murmuré, acariciando suavemente su rostro, lucía dolorida y ya estaban comenzando a formarse un moreton donde él la había golpeado.
Ella volvió la cabeza hacia mí pero no abrió los ojos.
—Te quedaste —exhaló, una pequeña sonrisa en la esquina de su boca. ¿Honestamente pensaba que la dejaría?
—Por supuesto que me quedé. —La besé suavemente. Ella lloriqueó y tomó débilmente el frente de mi camisa mientras me devolvía el beso.
—Te amo tanto James —susurró.
—Sé que es así, pero yo te amo más —respondí. Nunca nadie había amado tanto a alguien como yo la amaba a ella.
Caros se aclaró la garganta para que me apartara, todavía sosteniendo su mano con fuerza. Él se inclinó sobre ella y la abrazó.
—Lamento que hayas perdido a tu bebé, (ta) —dijo, luciendo como si realmente lo sintiera.
Ella asintió y sonrió con tristeza.
—Sí, yo también —contestó ella, su voz rompiéndose mientras hablaba.
—Voy a ir a llamar a Ruby y a Logan. También llamaré a tus padres James —dijo Carlos, besando su mejilla antes de desaparecer detrás de la cortina, dándonos algo de privacidad.
— ¿Te acostarías conmigo?
Asentí y me metí cuidadosamente a la cama con ella.
— ¿Te duele algo? —pregunté mientras suavemente pasaba un brazo sobre ella.
—No realmente. Estoy dolorida, pero no tanto como antes. —Hizo una mueca mientras se movía en la cama.
Cerré los ojos y sepulté el rostro en el costado de su cuello.
—Necesitas dejar de asustarme de esta manera. Realmente me vas a causar un ataque al corazón pronto —bromeé, intentando aligerar la situación.
Ella rió sin humor.
—Estoy tan cansada, James. —Volvió la cabeza, acariciando la mía con su nariz.
—Duerme, Ángel —la arrullé, subiendo las sábanas para mantenerla tibia.
Ella se durmió y se despertó varias veces por unas pocas horas. Le dieron más medicinas para el dolor, pero dijo que estaba bien. Después de un par de horas le permitieron salir de la cama para ir al baño mientras que fuera acompañada por dos enfermeras; lo cual ella no apreció en lo absoluto.
Una enfermera vino a las nueve, sonriéndome con tristeza.
—Lo siento, pero las horas de visita han terminado. Voy a tener que pedirte que te vayas —dijo en tono de disculpas mientras acomodaba a Amber en su cama.
— ¿En serio? ¿No puedo quedarme? No causaré problemas, ¿por favor? Dormiré en la silla, ni siquiera sabrá que estoy aquí —rogué, dándole la expresión que parecía funcionar tan bien con (tn).
Ella suspiró y puso los ojos en blanco.
—De acuerdo. Pero si alguien pregunta, te escabulliste aquí. ¿Entiendes? — preguntó, sonriendo y sacudiendo la cabeza.
Sonreí.
—Gracias. —Wow, ese rostro también funcionaba en otra gente.
Carlos se despidió, prometiendo volver a primera hora de la mañana, y traernos a (tn) y a mí una muda de ropa. Una vez que se hubo ido, ella se movió en la cama, haciendo una ligera mueca pero intentando no mostrarme que le dolía.
—Dormiré en la silla, Ángel —protesté, haciendo una mueca ante de la idea de darme vuelta y aplastarla o algo.
— ¿Por favor? —rogó.
Maldición, ¿por qué no podía decirle que no a esta chica? Suspiré y me saqué las zapatillas, metiéndome en la cama con ella. Ella se acurrucó contra mi pecho y lloró hasta quedarse dormida.
Desperté muy temprano en la mañana con alguien sacudiendo mi brazo. Levanté la mirada para ver a dos hombres de pie allí, ambos mirándome severamente. ¿Qué demonios? Oh maldición, ¡me voy a meter en problemas por dormir aquí!
— ¿James Maslow? —preguntó uno de ellos.
Asentí y me senté en silencio.
—Sí —susurré, intentando no despertar a (tn). Demasiado tarde, se movió y dio un salto cuando vio a los dos hombres de pie allí.
—James Maslow estoy arrestándolo por sospecha de Daños Físicos Graves. No tiene que decir nada, pero cualquier cosa que diga puede ser usada en su contra en una corte. Tiene derecho a un abogado. Si no puede pagarlo, uno le será facilitado — afirmó, mientras tomaba mi brazo.
¿Daños Físicos Graves? ¿Ese imbécil está presentando cargos?
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Perdió el bebé :c Bueno, era chica todavía D:
ATENCIÓN este fue el capi de hoy besos
valeerusher
Re: El chico que se metia por mi ventana (james maslow y tn pena)
que da 4 capis mas!! D:
valeerusher
Re: El chico que se metia por mi ventana (james maslow y tn pena)
buano chicas subire todo el viernes por que el sabado no tener tiempo :c
valeerusher
Re: El chico que se metia por mi ventana (james maslow y tn pena)
Hola!!
Nooooo
como puede pasar esto
te odio tanto como la dejas asi?
porque que que:ay:
Pd:Soy Bipolar :jajajaj:
bueno me voy te leo luego
te amo :omg:
Pd2:Momento lesbi XD
Pd3:No soy lesbi
Nooooo
como puede pasar esto
te odio tanto como la dejas asi?
porque que que:ay:
Pd:Soy Bipolar :jajajaj:
bueno me voy te leo luego
te amo :omg:
Pd2:Momento lesbi XD
Pd3:No soy lesbi
limbo.
Re: El chico que se metia por mi ventana (james maslow y tn pena)
HOLA! como de que un momento me odias y luego me amas ok eso es raro pero lo entiendo eres biporlar jejejejejejej buano mi tio es bipolar y esta en un manicomio :D (enserio ) ahora sigoo besos jejejeJuLy de Maslow escribió:Hola!!
Nooooo
como puede pasar esto
te odio tanto como la dejas asi?
porque que que:ay:
Pd:Soy Bipolar :jajajaj:
bueno me voy te leo luego
te amo :omg:
Pd2:Momento lesbi XD
Pd3:No soy lesbi
valeerusher
Re: El chico que se metia por mi ventana (james maslow y tn pena)
CAPITULO 38.
(tn):
Me senté rápidamente.
—¿Qué demonios?
James puso su mano en mi hombro.
—No te levantes —dijo severamente. Jesús, ¿el condenado chico estaba siendo arrestado y todavía estaba preocupado por mí?
—¡Esto es *beep*! ¡No pueden arrestarlo, no fue su culpa! —grité desesperadamente, mirando a los dos hombres que estaban observando a James ponerse sus zapatos.
¿Por qué demonios está tan calmado con esto? ¿Esperaba que algo así sucediera?
—Ha habido un serio reclamo, Señorita. Necesitamos investigarlo —declaró el hombre, sin siquiera molestarse en mirarme.
—Ángel, todo está bien. No te preocupes —me aseguró James. ¿Bien? ¿Cómo esto está bien? Se giró para mirar al hombre que sostenía su brazo—. ¿Puedo besar a mi novia? Acaba de tener un aborto espontáneo —rogó. El rostro del hombre se suavizó levemente y soltó su brazo. James se inclinó y me besó suavemente en los labios—. Te amo, Ángel. No empieces a estresarte por mí. Necesitas descansar —ordenó, acariciando suavemente mi rostro.
Mientras se alejaba, entré en pánico. No podía dejarlo ir, lo necesitaba. Lancé mis brazos alrededor de su cuello y me negué a soltarlo.
—Por favor no se lo lleven, ¿por favor? Esto no fue su culpa, todo fue mi culpa. Debería sólo haberme quedado en su casa. No debería haber ido a casa, ¿por favor? —rogué, agarrando mis manos en el cabello de James, sollozando en su hombro.
—Señorita, tiene que dejarlo ir ahora —declaró el mismo hombre. Tensé mi agarre en James, probablemente lastimándolo pero él no se quejó—. ¡Señorita! —ladró el hombre.
James frotó sus manos por mis brazos suavemente, desenganchando mis manos de su cabello. Cuando estuvo libre de mis brazos, se alejó para mirarme.
Estaba estresado y preocupado, podía decirlo por sus ojos.
—Te amo —prometió, besándome suavemente en los labios de nuevo.
—También te amo —susurré, no confiando en mi voz para hablar de nuevo.
Liam se puso de pie y el hombre inmediatamente llevó sus manos detrás de su espalda, esposándolo. Los ojos de james no dejaron los míos mientras sentía mi corazón rompiéndose de nuevo. Pensé que después de perder al bebé que nada podría ser más doloroso. Estaba equivocada.
Observé mientras lo llevaban hacia afuera de la habitación dejándome sola. Me sentí enferma. No podía dejarlos hacer esto, esto no era su culpa. Podría presentar cargos también, entonces verían que mi padre me golpeó primero, y luego James sería liberado porque estaba defendiéndome. Pero no lo dejarían libre por eso, ¿no? Defenderme es una cosa, pero él se volvió loco, nunca creerían que lo que hizo fue en defensa propia.
Pongo mis manos sobre mi rostro, intentando pensar en algo. En cualquier manera, james se metería en problemas por esto porque mi padre había presentado cargos, aún si presentaba cargos contra mi padre, los cargos de james seguirían en pie. Autodefensa o no, aún sería acusado de LCG4 porque lo hizo a pesar de que fue provocado. No puedo tomar el riesgo de que fuera liberado. ¿Y si no lo era? ¿Y si era enviado a la cárcel por esto y lo perdía?
En la única cosa que podía pensar era en conseguir que mi padre quitara los cargos. Tomé mi teléfono y llamé a Carlos. Contestó en el segundo tono.
—Carlos, James fue arrestado —dije simplemente.
—¿Qué demonios? ¡No hay manera! —gritó, haciéndome encogerme lejos del teléfono levemente.
—Carlos, mira me dejarán salir esta tarde, ¿así que puedes traerme algo de ropa limpia para ese momento? —pregunté, intentando mantener la calma.
—Sí, estaré allí en como veinte minutos —accedió. Podía escucharlo haciendo un estrépito en el fondo, probablemente lanzando todas mis cosas en un bolso o algo.
—Gracias. —Cerré mi teléfono, presionándolo contra mi frente, pensando. ¿Había otra manera? Sólo no podía ver otra opción.
Mis manos estaban temblando, estaba asustada como el infierno, pero marqué el número de teléfono de la casa de mi padre. Sonó por un largo tiempo. Justo cuando me iba a rendir, contestó. Su voz estaba gruesa de sueño; envió un estremecimiento por mi columna. Cerré mis ojos con fuerza.
—¿Hola? —De alguna manera se las arregló para sonar aterrador con una palabra.
4 LCG: Lesiones corporales graves.
—Soy (tn)—dije, tragando el nudo en mi garganta.
Él rió.
—¿Y qué puedo hacer por ti, (tn)?
—Quiero que quites los cargos contra James —contesté, intentando sonar segura.
Rió de nuevo.
—No voy a quitar los cargos, ¡ese *beep* rompió mi nariz! Deberías ver lo que le hizo a mi rostro —gritó, haciéndome estremecer. ¿Cómo es que aún me asusta, y tan sólo estaba al teléfono?
—Por favor, por favor no hagas esto, ¿por favor? —rogué, intentando no llorar.
Él suspiró.
—¿Quieres que quité los cargos?
—Sí —contesté, secando las lágrimas de mi rostro.
—Ven a mi casa y hablaremos sobre eso —declaró, sonando entretenido.
¿Ir a su casa? Oh Dios mío, ¿está bromeando?
—Por favor quita los cargos. Sabes que me golpeaste primero, ¿por favor? —rogué, sintiendo la bilis subir por mi garganta, le encantaba mantener esto en mi cabeza podía notarlo.
—Ven a mi casa y hablaremos sobre eso —repitió.
Levanté la mirada al reloj; Carlos estaría aquí en como diez minutos.
—¿Puedo llevar a Carlos? —pregunté, sabiendo que era la pregunta más estúpida que había preguntado en mi vida. ¿Por qué en la tierra podría llevar a Carlos? Si estaba algún lugar cerca de él entonces no tendríamos que preocuparnos por cargos, porque estaría enterrado a un lado de una carretera en algún lugar.
—No. ¡Deja a ese *beep* fuera de esto! —gruñó.
Oh Dios, ¿puedo hacer esto? ¿Realmente puedo ir allí y hablar con él? ¿Era lo suficientemente fuerte? Sabía la respuesta a esa pregunta. Haría cualquier cosa por James, aún si tenía que matar a mi padre yo misma para detenerlo de presentar cargos. Sin víctima, no hay crimen.
Me tragué mi miedo.
—Bien, estaré allí en una hora —dije silenciosamente mientras cerraba mi teléfono, desesperadamente intentando no tener un ataque de pánico. Necesitaba ser fuerte ahora.
Me recosté en la cama e intenté calmarme. No podía demasiado alterada cuando carlos viniera, de otro modo no querría dejarme sola. Yací allí, contando las losas de espuma en el techo, intentando no pensar en algo más. Llegué a 867 antes de que carlos entrara corriendo a la habitación. Lucía realmente cansado y estresado. Apostaría mi último centavo que no había dormido muy bien anoche. Me atrajo a un abrazo suavemente e intenté no estremecerme mientras lastimaba mi estómago y caderas.
—****, (ta), esto es malo. —Sacudió su cabeza, luciendo ambos enojado y preocupado al mismo tiempo.
Asentí; necesitaba sacarlo de aquí rápido.
—Carlos, necesito que vayas a la estación de policía y veas si hay algo que puedas hacer por James. No me dejarán salir hasta esta tarde, así que no puedo ir —ordené, presionando su mano.
Él asintió, luciendo preocupado.
—¿Estás segura de que no quieres que me quedé aquí contigo por un rato? ¿Estás bien?
Asentí y sonreí débilmente.
—Sólo necesito que James esté bien. Así que si puedes hacer eso por mí, carlos —pedí, asintiendo hacia la puerta.
Me abrazó de nuevo.
—Bien. Te llamaré si escucho algo. —Besó la parte superior de mi cabeza y puso un bolso con mi ropa en el suelo junto a mi cama—. Si te dejan salir, llámame y vendré a buscarte y te llevaré a casa —dijo severamente.
Asentí y lo atraje a otro abrazo para no tener que mentirle a la cara.
—Bien. Por favor anda a ver si puedes hacer algo —rogué.
—Cierto. Te veré en un rato. —Sonrió de modo tranquilizador antes de girarse y correr fuera de la habitación.
Le di un minuto para irse antes de que apretara el botón de llamada en la muralla. Una enfermera entró en un minuto.
—Hola, ¿cómo te estás sintiendo hoy? ¿Necesitas más analgésicos? —preguntó, sonriendo amablemente.
Sacudí mi cabeza.
—No, necesito darme de alta. Mi hermano fue a buscar el auto. Mi mamá ha tenido un accidente. Necesito irme —mentí, balanceando mis piernas fuera de la cama.
—(tn), no puedes sólo irte, tuviste una cirugía ayer —frunció el ceño.
—El doctor dijo que podía irme a casa esta tarde. Son sólo unas pocas horas antes —repliqué, agarrando el bolso que Carlos trajo y comenzando a ponerme mi ropa, estremeciéndome levemente mientras me movía.
—¡(tn), no deberías salir de la cama todavía! Aún si eres dada de alta esta tarde sería para estar en cama por un par de días —explicó, frunciéndome el ceño.
—Mira, aprecio tu preocupación, pero me iré de este hospital ahora. No puedes mantenerme aquí en contra de mi voluntad. Conozco mis derechos. Puedo darme de alta temprano siempre que firme una forma diciendo que me voy contra las órdenes del doctor para que no pueda demandarlos después —dije severamente. Ella comenzaba a molestarme; no tenía tiempo para esto.
Me miró un poco sorprendida antes de asentir.
—Iré a buscar un doctor —murmuró, dirigiéndose a la puerta.
—Dígale que traiga las formas con él, no tengo tiempo para esperar —solicité, mordiendo mi labio. Estaba ansiosa para terminar con esto; necesitaba a james fuera de problemas, ahora. Terminé de vestirme y guardé mis cosas y me senté en la cama, impacientemente observando la segunda manilla del reloj avanzando.
Finalmente, luego de lo que se sintió por siempre pero probablemente como tres minutos, un doctor entró mirándome severamente.
—(tn) , no recomiendo que dejes el hospital todavía —declaró.
Sacudí mi cabeza.
—Mi mamá ha tenido un accidente; necesito ir con mi hermano. Está en el auto esperándome, necesito irme ahora. Sólo muéstreme dónde firmar. —Asentí hacia el sujetapapeles en su mano.
Él suspiró y me pasó la forma apuntando el final.
—Básicamente es un permiso, diciendo que te he recomendado quedarte en el hospital y te estás yendo en contra de mis órdenes —explicó mientras firmaba mi nombre en los tres lugares que apuntó. Asentí y se lo devolví, agarrando mi bolso—. Necesitas tomarlo con calma, (tn). Si comienzas a sentirme mareada o débil, regresa. Si comienzas a sangrar mucho o tienes dolores fuertes, más fuertes que los normales calambres menstruales, tendrás que volver inmediatamente —ordenó, mirándome preocupado.
Asentí confirmando.
—Lo haré. Necesito irme. Gracias por cuidarme —repliqué, ya haciendo mi camino hacia la puerta. No me detuve para mirar atrás; caminé lo más rápido que pude hacia la parada de taxis y salté en el primer taxi disponible, dándole la dirección de mi padre.
Tomé mi teléfono y revisé la batería, haciendo un nuevo grupo familiar con Carlos, James, Logan, Ruby, y el teléfono de mi mamá en él.
Escribí un mensaje para Carlos, listo para enviarlo cuando llegara allá. Adiviné que serían como quince minutos de manejar rápido de la estación de policía a la casa de mi padre, lo que sería lo suficiente para hacer que mi padre quitase los cargos y que Carlos llegase antes que algo sucediera. Al menos, esperaba que lo fuera.
Cuando el taxi se detuvo afuera de su casa estaba tan nerviosa que mis manos estaban temblando.
—¿Estás bien allí, cariño? —preguntó el conductor, mirándome preocupado.
—Sí, estoy bien. Gracias —murmuré, pasándole el dinero, tomando profundas respiraciones para intentar y calmarme.
Cierro la puerta del taxi y le envío a Carlos el mensaje que tenía ya escrito:
“Estoy en lo de papá. Por favor ven a buscarme, ahora. NO ME REGRESES LA LLAMADA.
(tn) x”
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¿Que hiciste Amber!? ._.
ATENCIÓN
Solo faltan 2 capítulos y el epílogo para que esta hermosa novela finalice :c yyyy soy malota les dejo con la intiga y no me odien y me amen por que si lo hacen (odiar) serian malas personas y si me aman emm bien eso ya seria lesvi equisde equisdedede xd xddd besos disfruten los ultimos capitulos :3
(tn):
Me senté rápidamente.
—¿Qué demonios?
James puso su mano en mi hombro.
—No te levantes —dijo severamente. Jesús, ¿el condenado chico estaba siendo arrestado y todavía estaba preocupado por mí?
—¡Esto es *beep*! ¡No pueden arrestarlo, no fue su culpa! —grité desesperadamente, mirando a los dos hombres que estaban observando a James ponerse sus zapatos.
¿Por qué demonios está tan calmado con esto? ¿Esperaba que algo así sucediera?
—Ha habido un serio reclamo, Señorita. Necesitamos investigarlo —declaró el hombre, sin siquiera molestarse en mirarme.
—Ángel, todo está bien. No te preocupes —me aseguró James. ¿Bien? ¿Cómo esto está bien? Se giró para mirar al hombre que sostenía su brazo—. ¿Puedo besar a mi novia? Acaba de tener un aborto espontáneo —rogó. El rostro del hombre se suavizó levemente y soltó su brazo. James se inclinó y me besó suavemente en los labios—. Te amo, Ángel. No empieces a estresarte por mí. Necesitas descansar —ordenó, acariciando suavemente mi rostro.
Mientras se alejaba, entré en pánico. No podía dejarlo ir, lo necesitaba. Lancé mis brazos alrededor de su cuello y me negué a soltarlo.
—Por favor no se lo lleven, ¿por favor? Esto no fue su culpa, todo fue mi culpa. Debería sólo haberme quedado en su casa. No debería haber ido a casa, ¿por favor? —rogué, agarrando mis manos en el cabello de James, sollozando en su hombro.
—Señorita, tiene que dejarlo ir ahora —declaró el mismo hombre. Tensé mi agarre en James, probablemente lastimándolo pero él no se quejó—. ¡Señorita! —ladró el hombre.
James frotó sus manos por mis brazos suavemente, desenganchando mis manos de su cabello. Cuando estuvo libre de mis brazos, se alejó para mirarme.
Estaba estresado y preocupado, podía decirlo por sus ojos.
—Te amo —prometió, besándome suavemente en los labios de nuevo.
—También te amo —susurré, no confiando en mi voz para hablar de nuevo.
Liam se puso de pie y el hombre inmediatamente llevó sus manos detrás de su espalda, esposándolo. Los ojos de james no dejaron los míos mientras sentía mi corazón rompiéndose de nuevo. Pensé que después de perder al bebé que nada podría ser más doloroso. Estaba equivocada.
Observé mientras lo llevaban hacia afuera de la habitación dejándome sola. Me sentí enferma. No podía dejarlos hacer esto, esto no era su culpa. Podría presentar cargos también, entonces verían que mi padre me golpeó primero, y luego James sería liberado porque estaba defendiéndome. Pero no lo dejarían libre por eso, ¿no? Defenderme es una cosa, pero él se volvió loco, nunca creerían que lo que hizo fue en defensa propia.
Pongo mis manos sobre mi rostro, intentando pensar en algo. En cualquier manera, james se metería en problemas por esto porque mi padre había presentado cargos, aún si presentaba cargos contra mi padre, los cargos de james seguirían en pie. Autodefensa o no, aún sería acusado de LCG4 porque lo hizo a pesar de que fue provocado. No puedo tomar el riesgo de que fuera liberado. ¿Y si no lo era? ¿Y si era enviado a la cárcel por esto y lo perdía?
En la única cosa que podía pensar era en conseguir que mi padre quitara los cargos. Tomé mi teléfono y llamé a Carlos. Contestó en el segundo tono.
—Carlos, James fue arrestado —dije simplemente.
—¿Qué demonios? ¡No hay manera! —gritó, haciéndome encogerme lejos del teléfono levemente.
—Carlos, mira me dejarán salir esta tarde, ¿así que puedes traerme algo de ropa limpia para ese momento? —pregunté, intentando mantener la calma.
—Sí, estaré allí en como veinte minutos —accedió. Podía escucharlo haciendo un estrépito en el fondo, probablemente lanzando todas mis cosas en un bolso o algo.
—Gracias. —Cerré mi teléfono, presionándolo contra mi frente, pensando. ¿Había otra manera? Sólo no podía ver otra opción.
Mis manos estaban temblando, estaba asustada como el infierno, pero marqué el número de teléfono de la casa de mi padre. Sonó por un largo tiempo. Justo cuando me iba a rendir, contestó. Su voz estaba gruesa de sueño; envió un estremecimiento por mi columna. Cerré mis ojos con fuerza.
—¿Hola? —De alguna manera se las arregló para sonar aterrador con una palabra.
4 LCG: Lesiones corporales graves.
—Soy (tn)—dije, tragando el nudo en mi garganta.
Él rió.
—¿Y qué puedo hacer por ti, (tn)?
—Quiero que quites los cargos contra James —contesté, intentando sonar segura.
Rió de nuevo.
—No voy a quitar los cargos, ¡ese *beep* rompió mi nariz! Deberías ver lo que le hizo a mi rostro —gritó, haciéndome estremecer. ¿Cómo es que aún me asusta, y tan sólo estaba al teléfono?
—Por favor, por favor no hagas esto, ¿por favor? —rogué, intentando no llorar.
Él suspiró.
—¿Quieres que quité los cargos?
—Sí —contesté, secando las lágrimas de mi rostro.
—Ven a mi casa y hablaremos sobre eso —declaró, sonando entretenido.
¿Ir a su casa? Oh Dios mío, ¿está bromeando?
—Por favor quita los cargos. Sabes que me golpeaste primero, ¿por favor? —rogué, sintiendo la bilis subir por mi garganta, le encantaba mantener esto en mi cabeza podía notarlo.
—Ven a mi casa y hablaremos sobre eso —repitió.
Levanté la mirada al reloj; Carlos estaría aquí en como diez minutos.
—¿Puedo llevar a Carlos? —pregunté, sabiendo que era la pregunta más estúpida que había preguntado en mi vida. ¿Por qué en la tierra podría llevar a Carlos? Si estaba algún lugar cerca de él entonces no tendríamos que preocuparnos por cargos, porque estaría enterrado a un lado de una carretera en algún lugar.
—No. ¡Deja a ese *beep* fuera de esto! —gruñó.
Oh Dios, ¿puedo hacer esto? ¿Realmente puedo ir allí y hablar con él? ¿Era lo suficientemente fuerte? Sabía la respuesta a esa pregunta. Haría cualquier cosa por James, aún si tenía que matar a mi padre yo misma para detenerlo de presentar cargos. Sin víctima, no hay crimen.
Me tragué mi miedo.
—Bien, estaré allí en una hora —dije silenciosamente mientras cerraba mi teléfono, desesperadamente intentando no tener un ataque de pánico. Necesitaba ser fuerte ahora.
Me recosté en la cama e intenté calmarme. No podía demasiado alterada cuando carlos viniera, de otro modo no querría dejarme sola. Yací allí, contando las losas de espuma en el techo, intentando no pensar en algo más. Llegué a 867 antes de que carlos entrara corriendo a la habitación. Lucía realmente cansado y estresado. Apostaría mi último centavo que no había dormido muy bien anoche. Me atrajo a un abrazo suavemente e intenté no estremecerme mientras lastimaba mi estómago y caderas.
—****, (ta), esto es malo. —Sacudió su cabeza, luciendo ambos enojado y preocupado al mismo tiempo.
Asentí; necesitaba sacarlo de aquí rápido.
—Carlos, necesito que vayas a la estación de policía y veas si hay algo que puedas hacer por James. No me dejarán salir hasta esta tarde, así que no puedo ir —ordené, presionando su mano.
Él asintió, luciendo preocupado.
—¿Estás segura de que no quieres que me quedé aquí contigo por un rato? ¿Estás bien?
Asentí y sonreí débilmente.
—Sólo necesito que James esté bien. Así que si puedes hacer eso por mí, carlos —pedí, asintiendo hacia la puerta.
Me abrazó de nuevo.
—Bien. Te llamaré si escucho algo. —Besó la parte superior de mi cabeza y puso un bolso con mi ropa en el suelo junto a mi cama—. Si te dejan salir, llámame y vendré a buscarte y te llevaré a casa —dijo severamente.
Asentí y lo atraje a otro abrazo para no tener que mentirle a la cara.
—Bien. Por favor anda a ver si puedes hacer algo —rogué.
—Cierto. Te veré en un rato. —Sonrió de modo tranquilizador antes de girarse y correr fuera de la habitación.
Le di un minuto para irse antes de que apretara el botón de llamada en la muralla. Una enfermera entró en un minuto.
—Hola, ¿cómo te estás sintiendo hoy? ¿Necesitas más analgésicos? —preguntó, sonriendo amablemente.
Sacudí mi cabeza.
—No, necesito darme de alta. Mi hermano fue a buscar el auto. Mi mamá ha tenido un accidente. Necesito irme —mentí, balanceando mis piernas fuera de la cama.
—(tn), no puedes sólo irte, tuviste una cirugía ayer —frunció el ceño.
—El doctor dijo que podía irme a casa esta tarde. Son sólo unas pocas horas antes —repliqué, agarrando el bolso que Carlos trajo y comenzando a ponerme mi ropa, estremeciéndome levemente mientras me movía.
—¡(tn), no deberías salir de la cama todavía! Aún si eres dada de alta esta tarde sería para estar en cama por un par de días —explicó, frunciéndome el ceño.
—Mira, aprecio tu preocupación, pero me iré de este hospital ahora. No puedes mantenerme aquí en contra de mi voluntad. Conozco mis derechos. Puedo darme de alta temprano siempre que firme una forma diciendo que me voy contra las órdenes del doctor para que no pueda demandarlos después —dije severamente. Ella comenzaba a molestarme; no tenía tiempo para esto.
Me miró un poco sorprendida antes de asentir.
—Iré a buscar un doctor —murmuró, dirigiéndose a la puerta.
—Dígale que traiga las formas con él, no tengo tiempo para esperar —solicité, mordiendo mi labio. Estaba ansiosa para terminar con esto; necesitaba a james fuera de problemas, ahora. Terminé de vestirme y guardé mis cosas y me senté en la cama, impacientemente observando la segunda manilla del reloj avanzando.
Finalmente, luego de lo que se sintió por siempre pero probablemente como tres minutos, un doctor entró mirándome severamente.
—(tn) , no recomiendo que dejes el hospital todavía —declaró.
Sacudí mi cabeza.
—Mi mamá ha tenido un accidente; necesito ir con mi hermano. Está en el auto esperándome, necesito irme ahora. Sólo muéstreme dónde firmar. —Asentí hacia el sujetapapeles en su mano.
Él suspiró y me pasó la forma apuntando el final.
—Básicamente es un permiso, diciendo que te he recomendado quedarte en el hospital y te estás yendo en contra de mis órdenes —explicó mientras firmaba mi nombre en los tres lugares que apuntó. Asentí y se lo devolví, agarrando mi bolso—. Necesitas tomarlo con calma, (tn). Si comienzas a sentirme mareada o débil, regresa. Si comienzas a sangrar mucho o tienes dolores fuertes, más fuertes que los normales calambres menstruales, tendrás que volver inmediatamente —ordenó, mirándome preocupado.
Asentí confirmando.
—Lo haré. Necesito irme. Gracias por cuidarme —repliqué, ya haciendo mi camino hacia la puerta. No me detuve para mirar atrás; caminé lo más rápido que pude hacia la parada de taxis y salté en el primer taxi disponible, dándole la dirección de mi padre.
Tomé mi teléfono y revisé la batería, haciendo un nuevo grupo familiar con Carlos, James, Logan, Ruby, y el teléfono de mi mamá en él.
Escribí un mensaje para Carlos, listo para enviarlo cuando llegara allá. Adiviné que serían como quince minutos de manejar rápido de la estación de policía a la casa de mi padre, lo que sería lo suficiente para hacer que mi padre quitase los cargos y que Carlos llegase antes que algo sucediera. Al menos, esperaba que lo fuera.
Cuando el taxi se detuvo afuera de su casa estaba tan nerviosa que mis manos estaban temblando.
—¿Estás bien allí, cariño? —preguntó el conductor, mirándome preocupado.
—Sí, estoy bien. Gracias —murmuré, pasándole el dinero, tomando profundas respiraciones para intentar y calmarme.
Cierro la puerta del taxi y le envío a Carlos el mensaje que tenía ya escrito:
“Estoy en lo de papá. Por favor ven a buscarme, ahora. NO ME REGRESES LA LLAMADA.
(tn) x”
||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||
¿Que hiciste Amber!? ._.
ATENCIÓN
Solo faltan 2 capítulos y el epílogo para que esta hermosa novela finalice :c yyyy soy malota les dejo con la intiga y no me odien y me amen por que si lo hacen (odiar) serian malas personas y si me aman emm bien eso ya seria lesvi equisde equisdedede xd xddd besos disfruten los ultimos capitulos :3
valeerusher
Re: El chico que se metia por mi ventana (james maslow y tn pena)
Hola nueva lectora " alt="" title=""> ¿Como han estado?
¿Porque no haz subido ningun cap?
¿Te gusta verme sufrir?
waaaaaaa
Bueno Sube pronto porfa Niña sube pronto
limbo.
Re: El chico que se metia por mi ventana (james maslow y tn pena)
perdona por no comentar antes....
ha sufrido un abortoespontaneo!!!! nooooooooooo
su padre.... a ese c**** le habria quitado al vida...
ays, es decir, me has dejado con la intriga, muuuucha intriga, pero lo peor que has dicho es que quedan dos capitulos y el epilogo, despues del cual, morire porque o se si sobrevivire sin tu nove :misery:
siguela plis!!!
besos <3
ha sufrido un abortoespontaneo!!!! nooooooooooo
su padre.... a ese c**** le habria quitado al vida...
ays, es decir, me has dejado con la intriga, muuuucha intriga, pero lo peor que has dicho es que quedan dos capitulos y el epilogo, despues del cual, morire porque o se si sobrevivire sin tu nove :misery:
siguela plis!!!
besos <3
laura_33426
Re: El chico que se metia por mi ventana (james maslow y tn pena)
hi!
estoy haciendo audiciones para nove 1D y BTR quien quiera estar es la de mi sexy firma, pasense por fas :)
Mystery.
Re: El chico que se metia por mi ventana (james maslow y tn pena)
:P alguien se me adelanto :O queria empezar a subir esta misma pero adaptandola con kendall entonces primero busque si habia alguien que la hubiera adaptado y siip :P... :3 jajaaaj yo estaba leyendo el libroo po esooo wii! aunque no termine de leerlo :P jaaja okey nosee... suerte! *justsayin'... ;)
andreeejan
Re: El chico que se metia por mi ventana (james maslow y tn pena)
Hola july!! que bien que te hayas pasado jejeje sorry por no subir capi pero hoy subí todo :3 pruebo no tuve tiempo el día viernes por que así todo el día luego el sábado estuve en el cumple de una amiga en un parte de diversiones ahh D: creo que me quebré la columna y el cuello no me puedo mover pero eso no significa que no suba capi .
Hola lau!! no te preocupes! perdón por dejarte con la intriga ;3 dentro un rato la subo para que sobrevivas ! :))
Hola andree yo la adapte con tn por que estaba con Amber jajaja si quieres le puedes poner otro título y lo adaptas con kendo jejeje bye! besos ! en un rato subo los capis
Hola lau!! no te preocupes! perdón por dejarte con la intriga ;3 dentro un rato la subo para que sobrevivas ! :))
Hola andree yo la adapte con tn por que estaba con Amber jajaja si quieres le puedes poner otro título y lo adaptas con kendo jejeje bye! besos ! en un rato subo los capis
valeerusher
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