Speed and Love |HARRY STYLES FANFIC| Parte I

Espero la sigas pronto, en serio...me gustaría estar siempre como antes pero mi estúpido novio (la escuela) no me deja, haré todo lo que pueda...algundia terminare con el, pinky promise...

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CAPITULO 15

Parte II

-Ven vamos-Dijo Harry agarrando mi mano y llevándome detrás suyo sin ningún tipo de dificultad.

Me tomó tan solo un segundo mirar a mi alrededor y encontrarme inmersa nuevamente en la belleza del paisaje. El cielo estaba de un azul perfecto, tan perfecto como solamente puede verse en las pinturas o películas. La brisa soplando y moviendo suavemente las hojas de los árboles.

Me vi obligada a traer mis pensamientos de nuevo a la realidad cuando Harry se sentó en el prado y tiró de mi mano para que también lo hiciera, arrojé la mochila a un lado y con cuidado de que mi vestido no se levantara, me senté junto a él apoyando la espalda en el gran tronco que teníamos detrás.

-¡Dorothy!-La llamé al ver que seguía a lo lejos acostada cerca del puente.
-Déjala Sky-Susurró Harry a mi lado.

Con su pesado brazo rodeó mis hombros y me atrajo más cerca de su cuerpo. Vi a Dorothy colocándose en sus cuatro patas y estirarse antes de empezar a caminar hacia nosotros pero se detuvo a mitad de camino cuando una pequeña mariposa paso a su lado, me reí al verla tratar de coger la mariposa sin tener muchos éxitos.

-¿Te he dicho ya lo mucho que me gusta escucharte reír?

Giré mi cabeza para encontrarme con él y su sonrisa torcida. Lo miré a los ojos tanto como pude y el calor asaltó mis mejillas.

Su mano ascendió al encuentro con mi piel enrojecida y me acarició suavemente. Sus ojos verde azulado se veían incluso más claros debido a la luz del sol, éstos se fijaron en mis labios por un momento para luego volver a mis ojos. Rompí la cercanía cuando vi sus claras intenciones de besarme y giré la cabeza mirando a ambos lados, encontrándome repentinamente paranoica por el hecho de estar ahí con él en lugar de estar en el colegio como se suponía debería ser en primer lugar.

-Tienes que relajarte Sky-Habló tomándome de la barbilla y haciendo mi rostro voltear nuevamente hacia el suyo.

Sus labios chocaron con los míos al instante, haciendo silenciar mis pensamientos como solo él podía. El movimiento de su boca era lento pero preciso contra la mía y sus labios se sentían suaves y cálidos.
Abrí la boca ante la insistencia de su lengua la cual se adentró rápidamente encontrando a su compañera.

Me encontré a mí misma un poco perturbada cuando Harry se alejó. Mi pecho subía y bajaba más veces de lo normal y mi cabeza daba vueltas debido a la falta de oxígeno. Harry quitó su gorro negro y lo dejó a un lado para después pasar sus manos a través de su cabello despeinándolo y luego volviéndolo a poner en su sitio. Me forcé a mí misma a apartar la mirada de su perfecto rostro para tomar la mochila y sacar el libro que tenía que terminar para el siguiente día.

-¿Enserio Skylar?-Preguntó Harry soltando una fuerte risa-¿Vas a leer justo ahora?
-No me digas Skylar-Murmuré abriendo el libro en la página en la que había quedado-Y si. Tengo que terminar esto para mañana.
-¿Por qué no puedo llamarte por tu nombre?

Dirigí mi mirada hacia él y abrí la boca para decir algo pero la volví a cerrar al no encontrar la respuesta acertada.

-No lo sé, simplemente no me gusta-Respondí finalmente y volví a concentrarme en el libro.

“La República”

Filosofía no era mi materia favorita pero aun así tenía cosas interesantes y Platón era sin lugar a dudas mi filósofo favorito. Sus ideas sobre la libertad, el bien y el mal, la realidad, las perspectivas y el amor, todas ellas me parecían fascinantes.

-Por lo menos déjame abrazarte mientras lees ese estúpido libro.

Fruncí el ceño hacia él por su elección de palabras.

-Los libros no son estúpidos-Repliqué sintiéndome en la obligación de defender una de las cosas que más amaba en la vida.

Puso los ojos en blanco y tomó mi brazo para hacerme mover delante de él. Me senté dándole la espalda pero en menos de un segundo los brazos de Harry me abrazaron por detrás haciendo que mi espalda se pegara a su pecho. Me tensé por la posición en que estábamos, las largas piernas de Harry envueltas en esos jeans tan ajustados yacían a cada lado de mi cuerpo y su pecho subía y bajaba acompasándose con mi propia respiración. Traté con todas mis fuerzas de ignorar la descarga de miedo y adrenalina que corría por mis venas y levanté el libro para empezar a leer de una vez por todas.

Sus labios no tardaron en encontrar el costado de mi cuello y rozarlo, mandando un escalofrío por todo mi ser. Tuve que leer el mismo párrafo cuatro veces porque era incapaz de concentrarme en lo que decía el texto.

Finalmente solté un suspiro y giré mi rostro hacia él.

-De verdad necesito terminar esto-Hablé tímidamente temiendo su posible reacción.

Pude percibir la molestia en él, no fue muy difícil por como su mandíbula se tensó y sus fosas nasales también lo hicieron. No se necesitaba ser un genio para darse cuenta de que Harry no era un chico que acostumbrara a recibir un no como respuesta.

Sus ojos no abandonaron mi cara, evaluando mi expresión durante unos minutos hasta que finalmente me dio un rápido beso y se puso de pie.

-¡Ven aquí Dorothea!
-Dorothy-Le corregí silenciosamente provocando una fuerte risa de su parte.

Ver a Harry así me resultaba tan extraño, se veía tan alegre, tan joven, tan relajado, muy diferente a como normalmente luce alrededor de sus amigos o en las carreras. A la luz del sol Harry parecía ser una persona completamente diferente a cuando la luna salía y la oscuridad se apoderaba de todo a su paso, incluyéndolo a él.  

Mis nervios siempre saltaban de su lugar cuando Harry tomaba bruscamente a Dorothy y ésta vez no fue la excepción.

-La vas a aplastar con tus enormes manos-Refunfuñé desde mi sitio apoyada contra el gran árbol.
-No te preocupes por eso, le quedarían seis vidas más.

Torcí los ojos. Se acostó en el pasto frente a mí, colocando a Dorothy sobre su abdomen. Sonreí momentáneamente y luego volví a concentrarme en mi libro.

***********

“Seamos felices”

Cerré el libro y alcé la cabeza luego de haber estado completamente inmersa en él, no era mucho lo que me hacía falta por lo tanto no había pasado demasiado tiempo.

-¡Harry!-Exclamé riendo suavemente al ver a Dorothy acostada sobre él, llevando puestas las gafas negras de Harry y su gorro también del mismo color-¿Qué le hiciste?

Dejé el libro a un lado y me moví hasta llegar hacia ellos.

-¿Ya terminaste de leer?-Preguntó.
-Sí.