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Gráficos por y codes hechos por Kaffei e Insxne.
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мσяє тнαη α вαd вσу |HarryStyles|
O W N :: Archivos :: Novelas Abandonadas
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Página 2 de 3. • 1, 2, 3
Re: мσяє тнαη α вαd вσу |HarryStyles|
Ola nueva lectora PORFA SIGUELAAAAAAAAAAAAAAAANO LA DEJES ASI ESTA SUPER INTERESANTE PORFA SUBEEEEEEEEEEEWWWWW
||Hazzy||
Re: мσяє тнαη α вαd вσу |HarryStyles|
Ola nueva lectora PORFA SIGUELAAAAAAAAAAAAAAAANO LA DEJES ASI ESTA SUPER INTERESANTE PORFA SUBEEEEEEEEEEEWWWWW
||Hazzy||
Capítulo 3 ♥
Me había quedado en su oficina sin saber que hacer ¿Debía salir y actuar normal, como si no fuera la gran cosa estar secuestrada? ¿O debía salir corriendo hasta donde sea que llegara?
-Maldito Zayn, mira de meterme en esto, ni siquiera sé que es lo que está pasando.- Gruñí mientras caminaba de un lado a otro, suspiré pesadamente mientras me recostaba en una de las paredes, no quería llorar pero mis ojos parecían humedecerse por sí solos.
-¿Puedo entrar?- Se escuchó una voz suave desde afuera, una chica castaña, la misma que estaba corriendo en el patio minutos atrás estaba aferrada a la puerta entreabierta. Asentí quitando mis lágrimas de mis ojos. -Uh ¿Estas bien?- Me preguntó tímidamente, la verdad es que parecía muy tierna.
Quería responderle pero no encontraba mi voz por lo que simplemente negué. Ella se acercó a mí y me abrazó cortamente.
-Lo siento, ya verás que todo irá bien. Harry no es malo, enserio.- Me dijo con una media sonrisa.
-Quiero irme a mi casa.- Mascullé casi en un sollozo. -No conozco a nadie aquí, quiero volver.- Solté tratando de controlar mi respiración.
-Ahora me conoces a mí.- Susurró la chica mirándome con tristeza. -Me llamo Karen, pero puedes decirme Kary.- Dijo mientras me tomaba del brazo entrelazándolo con el suyo. -Le diré a Harry que te quedarás conmigo en mi habitación.- Comenzó a hablar más animada mientras me arrastraba por el lugar.
-Pero yo no quiero quedarme.- Repliqué soltándome de ella.
-Tranquilizate.- Me pidió observando a todos lados.
-¿Tranquilizarme? QUIERO IRME.- Grité perdiendo el control, ella me tapó la boca y me arrastró hasta un cuarto realmente bien decorado.
-Si das una escena como esa de nuevo van a matarte.- Me retó. -Ahora anda bañate, te dejaré ropa en la cama y luego iremos a cenar. Mira Annie, me caes bien, pero desde que estoy acá sé que estos chicos no se caracterizan por misericordiosos.- Soltó ella antes de señalarme el baño.
Sabía que hablaba enserio, debía portarme bien por lo menos un tiempo hasta que encontrara la manera de escapar... Lo que me traía a la cabeza ¿A Karen también la habían secuestrado o formaba parte de aquella organización clandestina?
* * *
Karen me guió hasta el salón, donde se encontraba Louis, Harry, Kevin y dos hombres más. La chica castaña que venía a mi lado se sentó junto a Louis tomando de su mano. El único puesto libre era entre Kevin y Harry; El chico de rulos sentado en la punta de la mesa me indicó el lugar con un movimiento de cabeza.
Suspiré y me senté en silencio, todos me observaban y eso me molestaba enormemente. Uno de los desconocidos me miró casi con odio antes de levantarse.
-No debería de estar acá.- Gruñó. -Debería estar encerrada.
-Quieto y sentado Dan.- Lo retó Kevin. -No es un perro, es una señorita.- Afirmó el chico, él estaba empezando a caerme muy bien.
-Es prima de Malik.- Me acusó.
-Sentate.- Ordenó Harry con voz potente que me hizo estremecer, el hombre bajo la atenta mirada del chico de ojos verdes lo hizo.
Fuera de aquel sucedido todo paso a normalmente normal; los integrantes de la mesa charlaban y reían. Había descubierto que Louis era el más gracioso, Paul también mientras que Dan y Harry se mantenían callados. Kevin por otra parte se había pasado la cena ladrandome y haciéndome reir.
Cuando todo hubo terminado Dan salió disparado vaya a saber donde, el siguiente en irse fue Paul.
-Vamos.- Me dijo Harry parándose, sus ojos clavados en los míos no me dejaban tiempo de duda por lo que en segundos estaba parada a su lado, sentí su mano tomando de la mía para ya luego estar caminando vaya a saber donde.
No sabía que hacer en realidad, su mano presionando la mía podía ser un toque de lo más re confortable pero sabía que no era así.
Abrió una puerta mostrándome un dormitorio de lo más ordenado. Sus manos tomaron mi rostro casi de la nada y sus labios se pegaron a los míos, nunca antes había sido besada con tanta avidez, nunca antes nadie me había tomado de la manera en la que Harry lo hacía, tan despreocupada y sin pedir permiso en ningún momento.
Mi espalda recibió el frío de la pared al tener un vestido descubierto, las manos del ruludo se colaron bajo el mismo, sus caricias sobre mi piel parecían quemar. Los roces frenaron por un minuto y así quito la prenda de color negro que tenía en ese momento. Se alejó unos centímetros observando mi cuerpo, haciendo que mis mejillas se tornaran rojas.
Él sonrió de lado, tomó de mi mano atrayéndome a su cuerpo. Tomó de mi cintura antes de cargarme como a un bebé, me sorprendí un poco y me aferré a su cuello. Lo escuché reír entre dientes antes de dejarme sentada en el borde de su cama. Se acuclilló frente a mí así para quitar mis zapatos y dejarlos a un lado. Esto, por más que se sintiera de la mejor forma estaba mal, me deslicé hacía atrás alejándome de él pero sabía que no serviría de nada.
-No me temas Annie, no voy a hacerte daño.- Dijo fríamente pero pretendía no serlo. Su manera de tratarme era casi inverosímil.
Vi como su remera se despegaba de su cuerpo, él comenzó a acercarse a mí su cuerpo poniéndose sobre el mío. Su respiración en completa armonía con la mía. Sus labios ocupando los míos, su lengua enredada con la mía.
Pase mis brazos tras su cuello atrayéndolo a mí. Sus manos bajando por mi cuerpo. Sentía que nuevamente el se escurría, su cuerpo descendía por el mío, sus manos bajando mis bragas fue de lo último que fui consiente por que cuanto su mano comenzó a incursionar por aquella zona solo podía gemir y dejar mi consciencia lejos de allí.
-Harry.- Entre grite cuando su lengua entro en acción, nunca antes me había sentido de esa manera, tan cansada de algún modo pero sin tener intención de parar. Él tomó mis caderas con más fuerzas elevándolas más a su rostro yo solo podía seguir su juego.
Mis manos tomando las sábanas en mis puños, tirando de ella al sentir mi espalda arqueándose. -Harry.- Gemí con mucha más fuerzas, sintiendo como esta vez uno de sus dedos entraba y salía de mi interior, sus dientes rozando mi clítoris. -Dios.- Jadeé desesperada no quería que parase pero me sentía cada vez cerca de querer explotar.
Mordí mi labio con tanta fuerza que sentí el sabor metálico de mi sangre. Mi cuerpo sudado yaciendo entre las sábanas negras mientras trataba de regular mi respiración. Él frente a mí, ya parado, observándome con una sonrisa socarrona en sus labios. -Suficiente por hoy linda.- Me dijo mientras se quitaba los pantalones y se acostaba a mi lado. -Descansa. Estuviste perfecta.- Me dijo mientras se ponía de costado mirándome, cierta advertencia brillaba en sus ojos haciendo que me mantuviera lejos de el. -Y deliciosa...- Susurró a mi oído.
-Quería saber si está bien que sean capítulos largos o los acorto? Besos.
-Maldito Zayn, mira de meterme en esto, ni siquiera sé que es lo que está pasando.- Gruñí mientras caminaba de un lado a otro, suspiré pesadamente mientras me recostaba en una de las paredes, no quería llorar pero mis ojos parecían humedecerse por sí solos.
-¿Puedo entrar?- Se escuchó una voz suave desde afuera, una chica castaña, la misma que estaba corriendo en el patio minutos atrás estaba aferrada a la puerta entreabierta. Asentí quitando mis lágrimas de mis ojos. -Uh ¿Estas bien?- Me preguntó tímidamente, la verdad es que parecía muy tierna.
Quería responderle pero no encontraba mi voz por lo que simplemente negué. Ella se acercó a mí y me abrazó cortamente.
-Lo siento, ya verás que todo irá bien. Harry no es malo, enserio.- Me dijo con una media sonrisa.
-Quiero irme a mi casa.- Mascullé casi en un sollozo. -No conozco a nadie aquí, quiero volver.- Solté tratando de controlar mi respiración.
-Ahora me conoces a mí.- Susurró la chica mirándome con tristeza. -Me llamo Karen, pero puedes decirme Kary.- Dijo mientras me tomaba del brazo entrelazándolo con el suyo. -Le diré a Harry que te quedarás conmigo en mi habitación.- Comenzó a hablar más animada mientras me arrastraba por el lugar.
-Pero yo no quiero quedarme.- Repliqué soltándome de ella.
-Tranquilizate.- Me pidió observando a todos lados.
-¿Tranquilizarme? QUIERO IRME.- Grité perdiendo el control, ella me tapó la boca y me arrastró hasta un cuarto realmente bien decorado.
-Si das una escena como esa de nuevo van a matarte.- Me retó. -Ahora anda bañate, te dejaré ropa en la cama y luego iremos a cenar. Mira Annie, me caes bien, pero desde que estoy acá sé que estos chicos no se caracterizan por misericordiosos.- Soltó ella antes de señalarme el baño.
Sabía que hablaba enserio, debía portarme bien por lo menos un tiempo hasta que encontrara la manera de escapar... Lo que me traía a la cabeza ¿A Karen también la habían secuestrado o formaba parte de aquella organización clandestina?
* * *
Karen me guió hasta el salón, donde se encontraba Louis, Harry, Kevin y dos hombres más. La chica castaña que venía a mi lado se sentó junto a Louis tomando de su mano. El único puesto libre era entre Kevin y Harry; El chico de rulos sentado en la punta de la mesa me indicó el lugar con un movimiento de cabeza.
Suspiré y me senté en silencio, todos me observaban y eso me molestaba enormemente. Uno de los desconocidos me miró casi con odio antes de levantarse.
-No debería de estar acá.- Gruñó. -Debería estar encerrada.
-Quieto y sentado Dan.- Lo retó Kevin. -No es un perro, es una señorita.- Afirmó el chico, él estaba empezando a caerme muy bien.
-Es prima de Malik.- Me acusó.
-Sentate.- Ordenó Harry con voz potente que me hizo estremecer, el hombre bajo la atenta mirada del chico de ojos verdes lo hizo.
Fuera de aquel sucedido todo paso a normalmente normal; los integrantes de la mesa charlaban y reían. Había descubierto que Louis era el más gracioso, Paul también mientras que Dan y Harry se mantenían callados. Kevin por otra parte se había pasado la cena ladrandome y haciéndome reir.
Cuando todo hubo terminado Dan salió disparado vaya a saber donde, el siguiente en irse fue Paul.
-Vamos.- Me dijo Harry parándose, sus ojos clavados en los míos no me dejaban tiempo de duda por lo que en segundos estaba parada a su lado, sentí su mano tomando de la mía para ya luego estar caminando vaya a saber donde.
No sabía que hacer en realidad, su mano presionando la mía podía ser un toque de lo más re confortable pero sabía que no era así.
Abrió una puerta mostrándome un dormitorio de lo más ordenado. Sus manos tomaron mi rostro casi de la nada y sus labios se pegaron a los míos, nunca antes había sido besada con tanta avidez, nunca antes nadie me había tomado de la manera en la que Harry lo hacía, tan despreocupada y sin pedir permiso en ningún momento.
Mi espalda recibió el frío de la pared al tener un vestido descubierto, las manos del ruludo se colaron bajo el mismo, sus caricias sobre mi piel parecían quemar. Los roces frenaron por un minuto y así quito la prenda de color negro que tenía en ese momento. Se alejó unos centímetros observando mi cuerpo, haciendo que mis mejillas se tornaran rojas.
Él sonrió de lado, tomó de mi mano atrayéndome a su cuerpo. Tomó de mi cintura antes de cargarme como a un bebé, me sorprendí un poco y me aferré a su cuello. Lo escuché reír entre dientes antes de dejarme sentada en el borde de su cama. Se acuclilló frente a mí así para quitar mis zapatos y dejarlos a un lado. Esto, por más que se sintiera de la mejor forma estaba mal, me deslicé hacía atrás alejándome de él pero sabía que no serviría de nada.
-No me temas Annie, no voy a hacerte daño.- Dijo fríamente pero pretendía no serlo. Su manera de tratarme era casi inverosímil.
Vi como su remera se despegaba de su cuerpo, él comenzó a acercarse a mí su cuerpo poniéndose sobre el mío. Su respiración en completa armonía con la mía. Sus labios ocupando los míos, su lengua enredada con la mía.
Pase mis brazos tras su cuello atrayéndolo a mí. Sus manos bajando por mi cuerpo. Sentía que nuevamente el se escurría, su cuerpo descendía por el mío, sus manos bajando mis bragas fue de lo último que fui consiente por que cuanto su mano comenzó a incursionar por aquella zona solo podía gemir y dejar mi consciencia lejos de allí.
-Harry.- Entre grite cuando su lengua entro en acción, nunca antes me había sentido de esa manera, tan cansada de algún modo pero sin tener intención de parar. Él tomó mis caderas con más fuerzas elevándolas más a su rostro yo solo podía seguir su juego.
Mis manos tomando las sábanas en mis puños, tirando de ella al sentir mi espalda arqueándose. -Harry.- Gemí con mucha más fuerzas, sintiendo como esta vez uno de sus dedos entraba y salía de mi interior, sus dientes rozando mi clítoris. -Dios.- Jadeé desesperada no quería que parase pero me sentía cada vez cerca de querer explotar.
Mordí mi labio con tanta fuerza que sentí el sabor metálico de mi sangre. Mi cuerpo sudado yaciendo entre las sábanas negras mientras trataba de regular mi respiración. Él frente a mí, ya parado, observándome con una sonrisa socarrona en sus labios. -Suficiente por hoy linda.- Me dijo mientras se quitaba los pantalones y se acostaba a mi lado. -Descansa. Estuviste perfecta.- Me dijo mientras se ponía de costado mirándome, cierta advertencia brillaba en sus ojos haciendo que me mantuviera lejos de el. -Y deliciosa...- Susurró a mi oído.
-Quería saber si está bien que sean capítulos largos o los acorto? Besos.
BuzzLightyear_
Re: мσяє тнαη α вαd вσу |HarryStyles|
que capitulo me GUSTO MUCHO si esta bien que los capitulos sean largos porfa sube pronto si besos xx
||Hazzy||
Re: мσяє тнαη α вαd вσу |HarryStyles|
magic directioner forever escribió: que capitulo me GUSTO MUCHO si esta bien que los capitulos sean largos porfa sube pronto si besos xx
Gracias me alegra que te haya gustado :) Besos.
BuzzLightyear_
Re: мσяє тнαη α вαd вσу |HarryStyles|
Me encanto y ami también me gustaría que fueran largos =D
Karen Horan :*
Re: мσяє тнαη α вαd вσу |HarryStyles|
ME E-N-C-A-N-T-O EL CAP SIGUELA
QUE LOS CAPITULOS SEAN LARGOS
QUE LOS CAPITULOS SEAN LARGOS
fer1DIRECTION
Capítulo 4 ♥
Al día siguiente desperté más tarde de lo que acostumbraba, siempre había sido un tanto madrugadora inclusive los fines de semana, pero luego de la noche anterior estaba más que agotada; De solo pensar en el muchacho de ojos verdes mis mejillas se sonrojaban, y mi corazón comenzaba a palpitar con más fuerza, nunca antes había participado en nada igual y la verdad es que se sentía genial... Pero a pesar de todos esto no podía quedarme mucho tiempo más, mis abuelos estarían más que preocupados, al igual que mis tíos y ni hablar de Zayn que, pues por su culpa termine metida en lo que sería el secuestro más emocionante de mi vida.
-Señorita ¿Bajará a desayunar o se lo traigo?- Cuestionó una señora de mirada dulce, desde que había llegado era la primera vez que la veía.
-Uh, estoy bien no se preocupe.- Le dije con una sonrisa.
-El Señor Styles me pidió que me asegurará de que usted desayunara.- Dijo la mujer más seria, no podía negarselo así que prontamente le dije que bajaría.
Me levanté de la cama y me arrime al baño, que era gigante, noté que había unas bolsas con ropa...¿Tan lejos era capaz de llegar el Harry detallista? La verdad es que me causaba escalofríos encontrarme en esta situación. ¿Qué es lo que pretendía el ruludo al secuestrarme, comprarme ropa y regalarme sensaciones nunca antes experimentadas?
Tenía que hallar una manera de salir de ahí, en el fondo no quería hacerlo pero debía de, si no... La verdad ni siquiera podía pensar en lo que llegaría a ocurrirme si escapara o aún peor si me quedara.
Me bañe y me cambie casi en segundo, la verdad es que no tenía ganas de desayunar nunca me había gustado prefería comer algo a media mañana como mucho y luego hasta el almuerzo. Me aventuré en los desconocidos pasillos preguntándome si aquel lugar era su base Zayn también estaría en una parecida.
Pasé por frente de la puerta gigante de madera, donde la noche anterior Kevin me había llevado a lo que identifique como la oficina de Harry, pegué mi oído a la puerta y escuche el simple pasar de unas hojas, respiré hondo antes de abrir el cuarto.
El chico de ojos verdes se encontraba sentado en aquella silla giratoria, no podía ver su rostro a causa de que estaba de espaldas, solo notaba el verde musgo resaltar. Al sentir mi interrupción el volteó y me observó con una pequeña sonrisa, en sus largos dedos sostenía un libro de tapa azul y un título destacado en dorado. -Ven Annie.- Me llamó mientras, aún marcando la página por donde iba hacía a un lado sus brazos, me acerqué a él sin decir ninguna palabra ¿Qué más podía hacer? De algún modo termine sentada en sus piernas, mi espalda recostada en su pecho y sus brazos rodeándome, nuevamente abrió el libro. Su cabeza recostada en mi hombro parecía perdida en la lectura que tras pasar unas hojas noté se trataba de "El Gran Gatsby"
-¿Ya desayunaste?- Me preguntó. Asentí sin mucho interés no quería llevarle la contraria ahora que estábamos tan tranquilos. -No sos buena fingiendo Annie.- Susurró sobre mi cuello. -Pero si he de ser justo tampoco yo desayune...- Comenzó a decir mientras cerraba el libro. -Y tengo antojos de una linda chica de bonitos ojos.- Afirmó sonriendo, sus labios se deslizaban por mi piel, delineando mi hombro desnudo ya que traía una musculosa. Sus manos jugando en mi estomago comenzaron a ir más abajo.
-Espera.- Musité casi desganada, no sinceramente no tenía ganas de encontrarme en aquella situación. -No quiero.- Dije suspirando, me encantaba la manera en la que él me tocaba pero no me sentía bien.
Él hizo que me parara para luego el mismo ponerse enfrente mío, verlo así tan grande y firme a mi lado era casi humillante puesto que a mí podría derrumbarme una simple brisa. Sus ojos clavados en los míos. -Vamos a desayunar.- Sentenció el chico.
-No quiero desayunar Harry, me hace doler el estómago.- Me quejé en cuanto sentí que su mano tomaba la mía ara llevarme al comedor, me planté en el pasillo. -No quiero.- Repliqué enojada.
Sentí unas cuantas miradas sobre nosotros, aquellos pasillos nunca estaban desiertos.
-Vas a hacerlo Anne, si no te enfermarás.- Siseó entre dientes.
-No quiero.- Solté cruzándome de brazos, él bufó y me tomó como saco de papás. -Harry bájame.- Le gruñí furiosa.
-Tenes que desayunar y punto.- Me dijo inmutable, caminaba firmemente y sin parecer ser consiente de todos los movimientos que realizaba para que me soltara.
Llegamos a la cocina donde la señora que me había ido a despertar estaba terminando de preparar algo pero no vi que puesto que Harry me volteó hacía el otro lado. -Retirate Martha.- Dijo autoritario, en segundos quedamos solos.
Él me bajo y me sentó en la encimera. -No me gusta desayunar.- Me quejé nuevamente, él sonrió y se acercó a mí, se puso entre mis piernas y sus manos en mi cintura.
-Ahora va a empezar a gustarte.- Afirmó sonriendo pícaramente, sus manos se colaron bajo mi remera la cual empezó a ser retirada de mi cuerpo, al finalizar sus manos rondando por mi espalda dieron con el broche de mi brasier también quitandolo de mi cuerpo.
Tomó un tazón que parecía contener chocolate, quitó mi cabello hacía atrás y con una cuchara me acercó así lo probara. -¿Qué tal esta?- Me preguntó cuando trague.
-Rico.- Afirmé sonriendo un poco.
-Uhmjum- Sonrió mientras sacaba un poco más de chocolate pero en vez de acercármelo lo regó por una parte de mi cuello hacía el valle de mis senos. -Es mi turno de probar.- Dijo riendo.
Se inclinó hacía mi y con su lengua empezó a quitar el chocolate, tire mi cabeza hacía atrás al sentir sus besos en mi cuello y bajando, rápidamente acabó con la crema chocolatosa y puso más, está vez sobre mis pechos, el frío preparado sensibilizó mis pezones aún más de lo que podría soportar haciendo que soltara un gemido, ese chico me volvería loca. Sus labios quitando el chocolate con una lentitud desbordante me ponía de los pelos, su lengua paseándose por la aureola de mis pezones parecía quemar y a la vez congelar, sentía todo junto cuando el ruludo me tocaba y más aún cuando succionó de mi pecho. -Harry.- Entre grite clavando mis uñas en sus hombros.
-¿Qué pasa linda?- Me preguntó pacientemente, esa actitud me daba ganas de golpearlo pero no podía hacerlo. Un nuevo lametón me hizo estremecer por completo ¿Qué tenía ese chico que me ponía de esta manera?
De pronto su teléfono comenzó a sonar. Él con una mueca no muy feliz se separó. -¿Que?- Cuestionó al otro lado de la línea. -Uh, Malik ¿Que tal estas?- Dijo con una sonrisa escondida, presté más atención a lo que decía, estaba hablando con mi primo. -No te preocupes, la estoy cuidando muy bien.- Afirmó.-Quédate acá.- Me dijo apartándose del auricular del teléfono y solo sonrió con tranquilidad, luego se dio vuelta para alejarse, me puse tan solo la remera para poder seguirlo ya que había salido de la cocina. -Diré a Louis que te llame y prepararán todo, quiero a mi hermana en perfectas condiciones, y sí solo tiene un rasguño, voy a matarte con mis propias manos, a vos y a todo tu equipo. Estas advertido.- Amenazó de una manera que me hizo poner la piel china, sabía que Harry era capaz de cumplir aquella promesa y me preocupaba por mi primo.
Guardo su teléfono en uno de sus bolsillos y volteó, al verme se mostró sorprendido. -Te dije que te quedaras en la cocina.- Me retó enojado.
-¿Para qué? Para que no escuchara como amenazas a mi primo.- Pregunté casi a gritos.
-No lo entendes.- Me acusó cruzándose de brazos.
-Solo tengo que entender una palabra Harry, y esa es matar. ¿Por que tanta rivalidad?- Pregunté sin entender a que conllevaba todo esto, por que tanto odio hasta llegar al punto de hablar de muerte.
-Ellos tienen a mi hermana Anne y no voy a permitir que nadie la toque sin que yo le corte los brazos.- Siseó arrastrando las palabras. Lo miré horrorizada.
-Por Dios.- Gemí asustada. -¿Por qué sos así?-Musité temblando un poco.
-Por que sí y punto.- Me gritó, mis ojos comenzaron a humedecerse.- Lo siento, yo...- Empezó a decir pero salí corriendo.-Annie.- Sentí que me llamaba pero no pare, no lo haría.
-Hey Annie ¿Qué pasa?- Me preguntó Kevin que salía de uno de los cuartos, entré a ese casi empujándolo a él conmigo. Cerré la puerta. -¿Estas huyendo de Harry?- Preguntó confundido.
-Algo así.- Musité mientras me deslizaba por la pared para tomar mis rodillas al pecho y rodearlas con mis brazos. -No entiendo por que tanta maldad en él.- Susurré escondiendo mi rostro entre mis rodillas.
-Señorita ¿Bajará a desayunar o se lo traigo?- Cuestionó una señora de mirada dulce, desde que había llegado era la primera vez que la veía.
-Uh, estoy bien no se preocupe.- Le dije con una sonrisa.
-El Señor Styles me pidió que me asegurará de que usted desayunara.- Dijo la mujer más seria, no podía negarselo así que prontamente le dije que bajaría.
Me levanté de la cama y me arrime al baño, que era gigante, noté que había unas bolsas con ropa...¿Tan lejos era capaz de llegar el Harry detallista? La verdad es que me causaba escalofríos encontrarme en esta situación. ¿Qué es lo que pretendía el ruludo al secuestrarme, comprarme ropa y regalarme sensaciones nunca antes experimentadas?
Tenía que hallar una manera de salir de ahí, en el fondo no quería hacerlo pero debía de, si no... La verdad ni siquiera podía pensar en lo que llegaría a ocurrirme si escapara o aún peor si me quedara.
Me bañe y me cambie casi en segundo, la verdad es que no tenía ganas de desayunar nunca me había gustado prefería comer algo a media mañana como mucho y luego hasta el almuerzo. Me aventuré en los desconocidos pasillos preguntándome si aquel lugar era su base Zayn también estaría en una parecida.
Pasé por frente de la puerta gigante de madera, donde la noche anterior Kevin me había llevado a lo que identifique como la oficina de Harry, pegué mi oído a la puerta y escuche el simple pasar de unas hojas, respiré hondo antes de abrir el cuarto.
El chico de ojos verdes se encontraba sentado en aquella silla giratoria, no podía ver su rostro a causa de que estaba de espaldas, solo notaba el verde musgo resaltar. Al sentir mi interrupción el volteó y me observó con una pequeña sonrisa, en sus largos dedos sostenía un libro de tapa azul y un título destacado en dorado. -Ven Annie.- Me llamó mientras, aún marcando la página por donde iba hacía a un lado sus brazos, me acerqué a él sin decir ninguna palabra ¿Qué más podía hacer? De algún modo termine sentada en sus piernas, mi espalda recostada en su pecho y sus brazos rodeándome, nuevamente abrió el libro. Su cabeza recostada en mi hombro parecía perdida en la lectura que tras pasar unas hojas noté se trataba de "El Gran Gatsby"
-¿Ya desayunaste?- Me preguntó. Asentí sin mucho interés no quería llevarle la contraria ahora que estábamos tan tranquilos. -No sos buena fingiendo Annie.- Susurró sobre mi cuello. -Pero si he de ser justo tampoco yo desayune...- Comenzó a decir mientras cerraba el libro. -Y tengo antojos de una linda chica de bonitos ojos.- Afirmó sonriendo, sus labios se deslizaban por mi piel, delineando mi hombro desnudo ya que traía una musculosa. Sus manos jugando en mi estomago comenzaron a ir más abajo.
-Espera.- Musité casi desganada, no sinceramente no tenía ganas de encontrarme en aquella situación. -No quiero.- Dije suspirando, me encantaba la manera en la que él me tocaba pero no me sentía bien.
Él hizo que me parara para luego el mismo ponerse enfrente mío, verlo así tan grande y firme a mi lado era casi humillante puesto que a mí podría derrumbarme una simple brisa. Sus ojos clavados en los míos. -Vamos a desayunar.- Sentenció el chico.
-No quiero desayunar Harry, me hace doler el estómago.- Me quejé en cuanto sentí que su mano tomaba la mía ara llevarme al comedor, me planté en el pasillo. -No quiero.- Repliqué enojada.
Sentí unas cuantas miradas sobre nosotros, aquellos pasillos nunca estaban desiertos.
-Vas a hacerlo Anne, si no te enfermarás.- Siseó entre dientes.
-No quiero.- Solté cruzándome de brazos, él bufó y me tomó como saco de papás. -Harry bájame.- Le gruñí furiosa.
-Tenes que desayunar y punto.- Me dijo inmutable, caminaba firmemente y sin parecer ser consiente de todos los movimientos que realizaba para que me soltara.
Llegamos a la cocina donde la señora que me había ido a despertar estaba terminando de preparar algo pero no vi que puesto que Harry me volteó hacía el otro lado. -Retirate Martha.- Dijo autoritario, en segundos quedamos solos.
Él me bajo y me sentó en la encimera. -No me gusta desayunar.- Me quejé nuevamente, él sonrió y se acercó a mí, se puso entre mis piernas y sus manos en mi cintura.
-Ahora va a empezar a gustarte.- Afirmó sonriendo pícaramente, sus manos se colaron bajo mi remera la cual empezó a ser retirada de mi cuerpo, al finalizar sus manos rondando por mi espalda dieron con el broche de mi brasier también quitandolo de mi cuerpo.
Tomó un tazón que parecía contener chocolate, quitó mi cabello hacía atrás y con una cuchara me acercó así lo probara. -¿Qué tal esta?- Me preguntó cuando trague.
-Rico.- Afirmé sonriendo un poco.
-Uhmjum- Sonrió mientras sacaba un poco más de chocolate pero en vez de acercármelo lo regó por una parte de mi cuello hacía el valle de mis senos. -Es mi turno de probar.- Dijo riendo.
Se inclinó hacía mi y con su lengua empezó a quitar el chocolate, tire mi cabeza hacía atrás al sentir sus besos en mi cuello y bajando, rápidamente acabó con la crema chocolatosa y puso más, está vez sobre mis pechos, el frío preparado sensibilizó mis pezones aún más de lo que podría soportar haciendo que soltara un gemido, ese chico me volvería loca. Sus labios quitando el chocolate con una lentitud desbordante me ponía de los pelos, su lengua paseándose por la aureola de mis pezones parecía quemar y a la vez congelar, sentía todo junto cuando el ruludo me tocaba y más aún cuando succionó de mi pecho. -Harry.- Entre grite clavando mis uñas en sus hombros.
-¿Qué pasa linda?- Me preguntó pacientemente, esa actitud me daba ganas de golpearlo pero no podía hacerlo. Un nuevo lametón me hizo estremecer por completo ¿Qué tenía ese chico que me ponía de esta manera?
De pronto su teléfono comenzó a sonar. Él con una mueca no muy feliz se separó. -¿Que?- Cuestionó al otro lado de la línea. -Uh, Malik ¿Que tal estas?- Dijo con una sonrisa escondida, presté más atención a lo que decía, estaba hablando con mi primo. -No te preocupes, la estoy cuidando muy bien.- Afirmó.-Quédate acá.- Me dijo apartándose del auricular del teléfono y solo sonrió con tranquilidad, luego se dio vuelta para alejarse, me puse tan solo la remera para poder seguirlo ya que había salido de la cocina. -Diré a Louis que te llame y prepararán todo, quiero a mi hermana en perfectas condiciones, y sí solo tiene un rasguño, voy a matarte con mis propias manos, a vos y a todo tu equipo. Estas advertido.- Amenazó de una manera que me hizo poner la piel china, sabía que Harry era capaz de cumplir aquella promesa y me preocupaba por mi primo.
Guardo su teléfono en uno de sus bolsillos y volteó, al verme se mostró sorprendido. -Te dije que te quedaras en la cocina.- Me retó enojado.
-¿Para qué? Para que no escuchara como amenazas a mi primo.- Pregunté casi a gritos.
-No lo entendes.- Me acusó cruzándose de brazos.
-Solo tengo que entender una palabra Harry, y esa es matar. ¿Por que tanta rivalidad?- Pregunté sin entender a que conllevaba todo esto, por que tanto odio hasta llegar al punto de hablar de muerte.
-Ellos tienen a mi hermana Anne y no voy a permitir que nadie la toque sin que yo le corte los brazos.- Siseó arrastrando las palabras. Lo miré horrorizada.
-Por Dios.- Gemí asustada. -¿Por qué sos así?-Musité temblando un poco.
-Por que sí y punto.- Me gritó, mis ojos comenzaron a humedecerse.- Lo siento, yo...- Empezó a decir pero salí corriendo.-Annie.- Sentí que me llamaba pero no pare, no lo haría.
-Hey Annie ¿Qué pasa?- Me preguntó Kevin que salía de uno de los cuartos, entré a ese casi empujándolo a él conmigo. Cerré la puerta. -¿Estas huyendo de Harry?- Preguntó confundido.
-Algo así.- Musité mientras me deslizaba por la pared para tomar mis rodillas al pecho y rodearlas con mis brazos. -No entiendo por que tanta maldad en él.- Susurré escondiendo mi rostro entre mis rodillas.
BuzzLightyear_
Re: мσяє тнαη α вαd вσу |HarryStyles|
ME ENCANTO EL CAP SIGUELA POBRE RAYIS HARRY LE GRITO
fer1DIRECTION
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