World that we live in {One Direction} NC.

- ¿Están seguras que no se van a arrepentir? - preguntó Bethany, esperando a que todas asintieran.

Como si su deseo se volviera realidad, las cuatro muchachas asintieron con la cabeza, una mas segura que otra, pero era Keila la mas insegura de todas, preguntándose que tipo de hija sería si se marchaba y dejaba a sus padres con el corazón en la boca. Aún así, no podía negar que la idea de la rubia le atraía demasiado como si fuera un pecado completamente tentador, el cual le rogaba porque hulla con sus amigas. Quizás, las cinco no eran tan unidas entre si, pero compartieron clases, una que otra fiesta y, en ese momento, la complicidad de huir por las vacaciones.

La mas decidida, ademas de Beth, era Lily; gran parte de su infancia había sido reprimida debido a que tuvo que crecer de repente. Una aventura no le vendría nada mal, salir de lo monótono y estructurado que era su vida. Este mismo pensamiento lo tenia Stephanie, la pelirroja que desprendía optimismo por donde quiera que la vieran. Brianna acompañaba aquel sentimiento; sabia que su padre estaría como loco por su rebeldía y la satisfacía el pensar que le daría su merecido así. En cuanto a Beth, ella amaba a su madre y a su abuela, pero la vida en Londres le chupaba toda la inspiración e ideas nuevas que podrían surgir; viajar la haría reencontrar consigo misma y su imaginación volaría para crear mas novelas.

Keila se aclaro la garganta, quitando a cada una de sus pensamientos.

- ¿En que iríamos? - pregunto con timidez.
- Podemos ir en mi auto - se ofreció Lily. - O podemos juntar dinero entre todas para comprar una minibús.
- Tu idea me gusta - aplaudió Stephanie con emoción - Una minibús es mucho mejor, ¿y que tal uno de esos que son tan grandes que caben bastantes personas y...?
- Pensemos en algo mas pequeño - le aconsejo Beth - Una minibus esta bien.
- ¿Y con que dinero nos manejaríamos? - insistió una vez mas la tímida del grupo.
- ¿Nunca has ahorrado en tu vida? - bromeo Brianna - Podemos también tomar cosas y venderlas.
- ¿Nuestro destino? - esta vez, fue Lily quien pregunto.

Beth saco un mapa de su bolsillo trasero. Si bien, no había tenido una idea muy directa de donde irían, tampoco sabia porque les había pedido a ellas que le siguiera con ese loco sueño; quizás, porque eran las únicas chicas con las que hablaba en toda la escuela y se llevaba bien. No las conocía a fondo, pero creía que si las cuatro se habían reunido en su casa, dispuestas a escuchar su disparatada propuesta, era por algo muy importante. Quizás, ellas también querían huir de algo, sanar en algún aspecto y luego enfrentarse al destino que sus padres les había impuesto.
Abrió el mapa y marco el primer punto, el cual era Bradford, lugar donde se residía su primo Zayn, el cual siempre había tenido una perfecta relación. Le paso el mapa a Lily, quien solo marco una ciudad de Italia: cuidad en la que había nacido. A su vez, esta le paso a Brianna, marcando París. Fue el turno de Keila decidir el destino, y con inseguridad, marco Roma. Por ultimo, fue Stephanie quien marco Irlanda como ultimo destino.
- Stephanie, no quiero contradecirte, pero ¿enserio tendremos que ir del otro lado de Europa a lo ultimo? - pregunto Brianna, alzando las cejas un tanto incrédula.
- No me molesten, ustedes me dijeron que elija - la pelirroja levanto sus manos al aire, defendiéndose de las acusaciones.
Beth soltó una pequeña carcajada mientras Lily solo negaba con la cabeza, sonriendo con mediación; pero Keila seguía tan insegura, tan dudosa de realizar aquel viaje. ¿Y si no lo hacía y se arrepentía? ¿Y si cuando estaba lejos de su hogar querría volver y no le era posible?
- Kei - la llamo Steph, quien colocaba una sonrisa tierna y comprensiva - Hakuna Matata.
Keila soltó una risita nerviosa, acompañada por las demás.
- Bien, hagamoslo.
- Perfecto, en una semana nos iremos - sonrió Bethany en grande, entusiasmada.


Lo que ninguna sabía, es que se verían en situaciones donde no les quedaría de otra que aceptar a cinco chicos en su aventura por toda Europa.