O W N
¡Conéctate y ven a divertirte con nosotr@s! :)
Si no estás registrado, hazlo y forma parte de nuestra gran comunidad.
¡La administración ha modificado otra vez el foro, y los Invitados ya pueden ver todas las secciones! Aún así, para comentar y crear temas debes tener una cuenta.

Cualquier duda, queja o sugerencia que quieras darle al staff, éste es nuestro facebook: https://www.facebook.com/onlywebnovels

¡IMPORTANTE!, los Mensajes Privados de los Invitados no serán respondidos por la administración. Te esperamos en nuestro facebook (:

Atte: Staff OnlyWns.

Unirse al foro, es rápido y fácil

O W N
¡Conéctate y ven a divertirte con nosotr@s! :)
Si no estás registrado, hazlo y forma parte de nuestra gran comunidad.
¡La administración ha modificado otra vez el foro, y los Invitados ya pueden ver todas las secciones! Aún así, para comentar y crear temas debes tener una cuenta.

Cualquier duda, queja o sugerencia que quieras darle al staff, éste es nuestro facebook: https://www.facebook.com/onlywebnovels

¡IMPORTANTE!, los Mensajes Privados de los Invitados no serán respondidos por la administración. Te esperamos en nuestro facebook (:

Atte: Staff OnlyWns.
O W N
¿Quieres reaccionar a este mensaje? Regístrate en el foro con unos pocos clics o inicia sesión para continuar.
Conectarse

Recuperar mi contraseña

Últimos temas
» Discord OWN (❁ᴗ͈ˬᴗ͈) ༉‧
Un Angel Caido y Un Amor Prohibido (Finale IV Temporada) Joe y _Tn. (TERMINADA) - Página 11 EmptyHoy a las 1:42 pm por mishel

» Novela sobre The Vampire Diaries
Un Angel Caido y Un Amor Prohibido (Finale IV Temporada) Joe y _Tn. (TERMINADA) - Página 11 EmptyHoy a las 1:38 pm por mishel

» Sayonara, friday night
Un Angel Caido y Un Amor Prohibido (Finale IV Temporada) Joe y _Tn. (TERMINADA) - Página 11 EmptyVie 04 Oct 2024, 5:22 pm por lovesick

» — i don't need the force, i have you.
Un Angel Caido y Un Amor Prohibido (Finale IV Temporada) Joe y _Tn. (TERMINADA) - Página 11 EmptyMiér 02 Oct 2024, 2:51 pm por zuko.

» amanhã vai ser outro dia.
Un Angel Caido y Un Amor Prohibido (Finale IV Temporada) Joe y _Tn. (TERMINADA) - Página 11 EmptyMar 01 Oct 2024, 9:39 pm por kesshoku.

» monmouth manufacturing
Un Angel Caido y Un Amor Prohibido (Finale IV Temporada) Joe y _Tn. (TERMINADA) - Página 11 EmptyDom 29 Sep 2024, 11:12 am por zuko.

» blog! these violent delights have violent ends.
Un Angel Caido y Un Amor Prohibido (Finale IV Temporada) Joe y _Tn. (TERMINADA) - Página 11 EmptyDom 29 Sep 2024, 11:04 am por zuko.

» life is a box of chocolates
Un Angel Caido y Un Amor Prohibido (Finale IV Temporada) Joe y _Tn. (TERMINADA) - Página 11 EmptyMiér 25 Sep 2024, 9:44 pm por 14th moon

» drafts & drafts
Un Angel Caido y Un Amor Prohibido (Finale IV Temporada) Joe y _Tn. (TERMINADA) - Página 11 EmptyLun 23 Sep 2024, 7:07 pm por hange.

novedades

00 . 01 Anuncios del mes febrero.
00 . 02 Actualización del PROTOCOLO, nueva medida obligatoria de avatares.
00 . 03 Remodelación del foro febrero del 2017.
00 . 00 Lorem ipsum dolor sit amet, consectetur adipiscing elit.
administradora
Rumplestiltskin. ϟ Jenn.
miembros del staff
Beta readers
ϟ hypatia.
aka Kate.
MP ϟ Ver perfil.
ϟ dépayser
aka Lea.
MP ϟ Ver perfil.
ϟ youngjae
aka .
MP ϟ Ver perfil.
ϟ Stark.
aka Cande.
MP ϟ Ver perfil.
Equipo de Baneo
ϟ Ariel.
aka Dani.
MP ϟ Ver perfil.
ϟ ceonella.
aka Cami.
MP ϟ Ver perfil.
Equipo de Ayuda
ϟ Ritza.
aka Ems.
MP ϟ Ver perfil.
ϟ Charlie.
aka idk.
MP ϟ Ver perfil.
Equipo de Limpieza
ϟ Legendary.
aka Steph.
MP ϟ Ver perfil.
ϟ chihiro
aka Zoe.
MP ϟ Ver perfil.
ϟ Kurisu
aka Teph.
MP ϟ Ver perfil.
ϟ Calore
aka idk.
MP ϟ Ver perfil.
Equipo de Eventos
ϟ ego.
aka Kalgh/Charlie.
MP ϟ Ver perfil.
ϟ Asclepio.
aka Gina.
MP ϟ Ver perfil.
ϟ mieczyslaw
aka Alec.
MP ϟ Ver perfil.
Equipo de Tutoriales
ϟ Kida.
aka Ally.
MP ϟ Ver perfil.
ϟ Spencer.
aka Angy.
MP ϟ Ver perfil.
Equipo de Diseño
ϟ bxmbshell.
aka Mile.
MP ϟ Ver perfil.
ϟ yoongi.
aka Valu.
MP ϟ Ver perfil.
créditos.
Skin hecho por Hardrock de Captain Knows Best. Personalización del skin por Insxne.

Gráficos por y codes hechos por Kaffei e Insxne.

Un Angel Caido y Un Amor Prohibido (Finale IV Temporada) Joe y _Tn. (TERMINADA)

Página 11 de 47. Precedente  1 ... 7 ... 10, 11, 12 ... 29 ... 47  Siguiente

Ver el tema anterior Ver el tema siguiente Ir abajo

Un Angel Caido y Un Amor Prohibido (Finale IV Temporada) Joe y _Tn. (TERMINADA) - Página 11 Empty Re: Un Angel Caido y Un Amor Prohibido (Finale IV Temporada) Joe y _Tn. (TERMINADA)

Mensaje por kathytha_14 Sáb 02 Feb 2013, 8:13 pm

demi me somprende que rudaa y sigo la intriga del collar pero no te voy a decir que mes esxplicaciones y entiendo a demz en cuanto a esos chicos ojala que el nombre de joseph le aya echo efecto a la rayis espero :P
kathytha_14
kathytha_14


https://twitter.com/kathytha_14

Volver arriba Ir abajo

Un Angel Caido y Un Amor Prohibido (Finale IV Temporada) Joe y _Tn. (TERMINADA) - Página 11 Empty Re: Un Angel Caido y Un Amor Prohibido (Finale IV Temporada) Joe y _Tn. (TERMINADA)

Mensaje por chelis Dom 03 Feb 2013, 7:31 pm

OOOTROOOOO
chelis
chelis


http://www.twitter.com/chelis960

Volver arriba Ir abajo

Un Angel Caido y Un Amor Prohibido (Finale IV Temporada) Joe y _Tn. (TERMINADA) - Página 11 Empty Re: Un Angel Caido y Un Amor Prohibido (Finale IV Temporada) Joe y _Tn. (TERMINADA)

Mensaje por andreita Mar 05 Feb 2013, 3:02 pm

capppppppp
andreita
andreita


Volver arriba Ir abajo

Un Angel Caido y Un Amor Prohibido (Finale IV Temporada) Joe y _Tn. (TERMINADA) - Página 11 Empty Re: Un Angel Caido y Un Amor Prohibido (Finale IV Temporada) Joe y _Tn. (TERMINADA)

Mensaje por chelis Mar 05 Feb 2013, 4:03 pm

Otroooooooo
chelis
chelis


http://www.twitter.com/chelis960

Volver arriba Ir abajo

Un Angel Caido y Un Amor Prohibido (Finale IV Temporada) Joe y _Tn. (TERMINADA) - Página 11 Empty Re: Un Angel Caido y Un Amor Prohibido (Finale IV Temporada) Joe y _Tn. (TERMINADA)

Mensaje por andreita Miér 13 Feb 2013, 12:54 pm

cuando la sigues????
andreita
andreita


Volver arriba Ir abajo

Un Angel Caido y Un Amor Prohibido (Finale IV Temporada) Joe y _Tn. (TERMINADA) - Página 11 Empty Re: Un Angel Caido y Un Amor Prohibido (Finale IV Temporada) Joe y _Tn. (TERMINADA)

Mensaje por ElitzJb Miér 13 Feb 2013, 3:49 pm

mañana maraton okis :)
ElitzJb
ElitzJb


Volver arriba Ir abajo

Un Angel Caido y Un Amor Prohibido (Finale IV Temporada) Joe y _Tn. (TERMINADA) - Página 11 Empty Re: Un Angel Caido y Un Amor Prohibido (Finale IV Temporada) Joe y _Tn. (TERMINADA)

Mensaje por kathytha_14 Miér 13 Feb 2013, 5:39 pm

esperando la maraton jjajajaj
kathytha_14
kathytha_14


https://twitter.com/kathytha_14

Volver arriba Ir abajo

Un Angel Caido y Un Amor Prohibido (Finale IV Temporada) Joe y _Tn. (TERMINADA) - Página 11 Empty Re: Un Angel Caido y Un Amor Prohibido (Finale IV Temporada) Joe y _Tn. (TERMINADA)

Mensaje por DanieladeJonas Miér 13 Feb 2013, 7:35 pm

maraton!!!!!!!!
ahhhhh yeiiiii yeiiiii!!!!!!!!!!!
:enamorado:
DanieladeJonas
DanieladeJonas


Volver arriba Ir abajo

Un Angel Caido y Un Amor Prohibido (Finale IV Temporada) Joe y _Tn. (TERMINADA) - Página 11 Empty Re: Un Angel Caido y Un Amor Prohibido (Finale IV Temporada) Joe y _Tn. (TERMINADA)

Mensaje por JB&1D2 Jue 14 Feb 2013, 11:31 am

Esperando Maraton :D
JB&1D2
JB&1D2


Volver arriba Ir abajo

Un Angel Caido y Un Amor Prohibido (Finale IV Temporada) Joe y _Tn. (TERMINADA) - Página 11 Empty Re: Un Angel Caido y Un Amor Prohibido (Finale IV Temporada) Joe y _Tn. (TERMINADA)

Mensaje por chelis Jue 14 Feb 2013, 12:32 pm

:imdead: un capis
chelis
chelis


http://www.twitter.com/chelis960

Volver arriba Ir abajo

Un Angel Caido y Un Amor Prohibido (Finale IV Temporada) Joe y _Tn. (TERMINADA) - Página 11 Empty Re: Un Angel Caido y Un Amor Prohibido (Finale IV Temporada) Joe y _Tn. (TERMINADA)

Mensaje por ElitzJb Vie 15 Feb 2013, 10:20 am

Un Angel Caido y Un Amor Prohibido (Finale IV Temporada) Joe y _Tn. (TERMINADA) - Página 11 2angelito5

III TEMPORADA

Capitulo 13
(parte dos)

1/4


NUESTROS PADRES INTERCAMBIAN MÁS QUE SALIVA, GRAN TONTA.

Lo mismo que tú, pensé.

Cerré el teléfono y le di mi atención de nuevo a Demi.

—¿Puedo hacerte una pregunta estúpida?

—Mi clase favorita.

—¿Fui a una fiesta en casa de Marcie durante el verano?

Me preparé para una ronda de carcajadas, pero Demi simplemente mordió un
pedazo de rosquilla y le dijo:

—Sí, lo recuerdo. Me arrastraste a ella también. Todavía me debes una, por
cierto.

No era la respuesta que había anticipado.

—Pregunta aún más extraña. ¿Era yo —aquí va— amiga de Marcie?

Ahora llegó la reacción que había estado esperando. Demi casi tosió su donut en
la mesa.

—¿Tú y la zorra, amigas? ¿He oído bien? Sé que estás pasando por todo eso de
la pérdida de memoria temporal, pero ¿cómo podrías olvidarte de los peores
once años de la Pequeña Señorita Horrible con lo que tú sabes?

Ahora estábamos llegando a alguna parte.

—¿Lo que me estoy perdiendo? Si no éramos amigas, ¿por qué me invitó a su
fiesta?

—Ella invitó a todo el mundo. Ella estaba recaudando fondos para la nueva
indumentaria de las animadoras. Nos pidió veinte dólares en la puerta —explicó
Demi—. Casi nos marchamos en ese momento, pero tú tenías que espiar. —Ella
cerró la boca de golpe.

—¿Espiar a quién? —empujó.

—Marcie. Fuimos a espiar a Marcie. Eso es lo que fue. —Ella asentía con la
cabeza un poco demasiado fuerte.

—¿Y?

—Queríamos tomar su diario —dijo Demi—. Íbamos a publicar todas las partes
jugosas en el eZine. Bastante épico, ¿verdad?

Yo la observaba, sabiendo que algo andaba mal con esta imagen, pero sin saber
el qué.

—Te das cuenta de cómo de preparado suena eso, ¿verdad? Nunca habríamos
obtenido el permiso para publicar su diario.

—Nunca está de más intentarlo.

La apunté con un dedo.

—Sé que estás ocultando algo.

—¿Quién, yo?

—Suéltalo, Demi. Me prometiste no ocultarme nada otra vez —le recordé.

Demi agitó sus brazos.

—Está bien, está bien. Fuimos a espiar a… —pausa dramática—…Anthony
Amowitz.

Anthony Amowitz y yo compartimos la misma clase de educación física el año
pasado. De altura media, apariencia mediocre. La personalidad de un cerdo. Por
no hablar que Demi ya había jurado que ya no había nada entre ellos.

—Mientes.

—Yo… estaba enamorada de él. —Se ruborizó furiosamente.

—Estuviste enamorada de Anthony Amowitz —repetí dudosa.

—Un error de juicio. ¿Podemos no hablar de ello, por favor?

Después de once años, Demi podría todavía sorprenderme.

—En primer lugar, jura que no estás ocultando nada. Porque toda esta historia
suena poco sólida.

—Honor de Chica-Scout —dijo Demi, ojos amplios, expresión determinada—.
Fuimos a espiar a Anthony, fin de la historia. Sólo un favor, mantén el abuso
verbal a un mínimo. Ya me siento lo suficientemente humillada tal como lo es.
Demi no me mentiría más, no después de que acabáramos de superar esto, así
que a pesar de algunos detalles inestables que atribuí a la vergüenza, yo estaba
contenta con el conocimiento que me había conseguido.

—Está bien —cedí—. Volvamos a Marcie, entonces. Ella me arrinconó en la
última noche de Coopersmith y me dijo que su novio, Joe, me dio un collar
que se suponía que debía ser para ella.

Demi se atragantó con su bebida.

—¿Ella dijo que Joe era su novio?

—Creo que el término exacto que usó fue ―aventura de verano‖. —Ella dijo que
Joe era amiga de ambas.

—Huh.

Di golpecitos con mi dedo impacientemente sobre la mesa.

—¿Por qué me siento como si estuviera en la oscuridad de nuevo?

—No conoces a ningún Joe —dijo Demi—. De todos modos, ¿no es nombre de
perro? Tal vez ella lo inventó. Si Marcie es buena en una cosa, es en jugar con
las mentes de la gente. Lo mejor es olvidar todo sobre Joe y Marcie. ¿Madre
mía, no están estos donuts para morirse? —Ella empujó uno hacia mi cara.

Tomé el donuts, poniéndolo a un lado.

—¿Te suena el nombre de Adam?

—¿Adam? ¿Sólo Adam? ¿Es la abreviatura de algo?

Por el sonido de ello, Demi nunca había oído su nombre antes.

—Me encontré con un muchacho —expliqué—. Creo que nos conocíamos, tal
vez durante el verano. Su nombre es Adam.

—No puedo ayudarte, cariño.

—Tal vez es la abreviatura de algo. Adamin, Adamon, Adamro...

—No, no, y nope.

Abrí mi teléfono móvil.

—¿Qué estás haciendo ahora? —preguntó Demi.

—Enviándole un mensaje de texto a Marcie.

—¿Qué le vas a preguntar? —Ella alzó la voz—. Escucha, (tn)…

Negué con la cabeza, adivinando los pensamientos de Demi.

—Este no es el comienzo de una cosa a largo plazo, confía en mí. Te creo, no a
Marcie. Este será el último mensaje de texto que la envíe. Voy a decirle que
buen intento con sus enormes mentiras.

La expresión de Demi perdió su tensión. Ella asintió sabiamente.

—Díselo, nena. Dile que intentar engañar con sus mentiras son inútiles conmigo
observando detrás.

Escribí mi mensaje y pulsé enviar.

MIRÉ EN TODAS PARTES. NINGUN COLLAR. BOOMER.

Menos de un minuto más tarde, su respuesta llegó.

BUSCA CON MAYOR INSISTENCIA.

—Alegre como siempre —murmuré.

—Esto es lo que creo —dijo Demi—. Tu mamá y Hanky Panky podría no ser tan
malo. Si te da una ventaja sobre Marcie, yo apoyaría el promover la relación con
toda la fuerza.

Le lancé una mirada astuta.

—Por supuesto que sí.

—Hey ahora, nada de eso. Sabes que no tengo un hueso malvado en mi cuerpo.

—¿Sólo doscientos seis de ellos?

Demi sonrió.

—¿He mencionado lo bueno que es tenerte de vuelta?
ElitzJb
ElitzJb


Volver arriba Ir abajo

Un Angel Caido y Un Amor Prohibido (Finale IV Temporada) Joe y _Tn. (TERMINADA) - Página 11 Empty Re: Un Angel Caido y Un Amor Prohibido (Finale IV Temporada) Joe y _Tn. (TERMINADA)

Mensaje por ElitzJb Vie 15 Feb 2013, 10:27 am

Un Angel Caido y Un Amor Prohibido (Finale IV Temporada) Joe y _Tn. (TERMINADA) - Página 11 3angelcaidoiii

III Temporada

Capitulo 14
parte uno

2/4

Después de almuerzo, conduje a casa. En menos de un minuto
luego de que aparcar el Volkswagen en el trozo de cemento
junto al camino, mamá llevó su Taurus al camino. Ella había

estado en casa cuando me fui más temprano, y me pregunté si ella ido para
almorzar con Hank. Yo no había dejado de sonreír desde cuando dejé Ezno,
pero mi ánimo se enfrió de repente.

Mamá se estacionó en el garaje y salió para encontrarse conmigo.

—¿Cómo estuvo el almuerzo con Demi?

—Lo mismo de siempre. ¿Y tú? ¿Cita de almuerzo interesante? —pregunté
inocentemente.

—Más trabajo que otra cosa. —Dejó salir un suspiro sufrido—. Hugo me pidió
que viajara a Boston esta semana.

Mi mamá trabaja para Hugo Renaldi, dueño de una empresa de subastas del
mismo nombre. Hugo realiza selectas subastas de bienes raíces, y es el trabajo
de mi mamá asegurarse de que las subastas vayan bien, algo que no puede
hacer a larga distancia. Está constantemente viajando, dejándome sola en casa,
y ambas sabemos que no es la situación ideal. Ha considerado renunciar en el
pasado, pero siempre se reduce al dinero. Hugo le pagaba más (bastante más)
de lo que ella ganaría en cualquier lugar dentro de los límites de la ciudad de
Coldwater. Si ella renunciara, varios sacrificios tendrían que ser hechos,
comenzando por vender con la granja. Ya que cada recuerdo que tengo de mi
padre está envuelto en la casa, podrías decir que me sentía sentimental acerca
de ella.

—Lo rechacé —dijo mamá—. Le dije que voy a necesitar encontrar un trabajo
que no requiera que deje mi casa.

—¿Le dijiste qué? —Mi sorpresa se desvaneció rápidamente, y sentí una alerta
arrastrándose en mi tono—. ¿Estás renunciando? ¿Has encontrado un nuevo
trabajo? ¿Eso significa que vamos a tener que mudarnos? —No podía creer que
ella hubiera tomado esta decisión sin mí. En el pasado, siempre habíamos
adoptado la misma posición: mudarse estaba fuera de cuestión.

—Hugo me dijo que vería qué puede hacer para darme una posición local, pero
que no me hiciera ilusiones. Su secretaria ha estado trabajando para él por años
y hace bien su trabajo. Él no va a dejarla ir sólo para hacerme feliz.

Miré la granja, anonadada. La idea de otra familia viviendo dentro de sus
paredes hizo girar mi estómago. ¿Qué sucedía si la remodelaban? ¿Qué sucedía
si destrozaban el estudio de mi papá y arrancaban los pisos de cerezo que
habíamos instalado juntos? ¿Y qué había de sus estantes de libros? No estaba
perfectamente derechos, pero habían sido nuestro primer intento genuino de
carpintería. ¡Tenían carácter!

—No estoy preocupada por vender todavía —dijo Mamá—. Algo surgirá.
¿Quién sabe? Tal vez Hugo se dé cuenta de que necesita dos secretarias. Si
debe ser, sucederá.

Me enfrenté a ella.

—¿Estás tan relajada sobre renunciar porque estás contando con casarte con
Hank y que él nos salve? –La cínica observación se escapó antes de que pudiera
detenerla, e inmediatamente sentí un retorcimiento de culpa. Esta clase de
grosería estaba debajo de mí. Pero había hablado desde ese vacío lugar de
miedo que escondía profundo en mi pecho y que había dominado todo.

La postura de mamá se volvió rígida. Luego atravesó el garaje haciendo ruido
con sus tacones, presionando el botón que automáticamente bajaba la puerta
detrás de ella.

Me quedé de pie en el camino de ingreso por un momento, dividida entre
entrar directamente y disculparme, y el miedo creciente causado por su fácil
evasión de mi pregunta.

Así que eso era. Ella estaba saliendo con Hank con toda la intención de casarse
con él. Estaba haciendo lo mismo que Marcie la había acusado de hacer: pensar
en el dinero. Sabía que nuestras finanzas estaban apretadas, pero habíamos
sobrevivido, ¿verdad? Estaba resentida a mi madre por caer tan bajo, y resentida
a Hank por darle una opción que no fuera apañárselas conmigo.

Dejándome caer de nuevo en el Volkswagen, conduje por la ciudad. Estaba
superando el límite de velocidad por quince millas, pero por una vez, no me
importaba. No tenía un destino en mente, simplemente quería poner distancia
entre mi madre y yo. Primero Hank, y ahora su trabajo. ¿Por qué sentía que ella
seguía tomando decisiones sin consultarme?

Cuando la entrada a la autopista apreció en el carril más adelante, tomé la
derecha y la seguí hacia la costa. Tomé la última salida antes del parque de
diversiones Delphic y seguí los carteles hasta las playas públicas. Esta parte de
la costa veía mucho menos tráfico que las playas sureñas de Maine. La costa era
rocosa, y plantas perennes surgían justo fuera del alcance de la marea alta. En
lugar de turistas con toallas de playa y cestas de picnic, vi un solitario
caminante y un perro persiguiendo gaviotas.

Lo cual era exactamente lo que yo quería. Necesitaba tiempo a solas para
calmarme.

Moví bruscamente el Volkswagen hacia la acera. En el espejo retrovisor, un
coche rojo con refacciones se deslizaba detrás mío. Vagamente recordaba
haberlo visto en la autopista, siempre unos coches más atrás. El conductor
probablemente quería realizar un último viaje a la playa antes de que el clima
cambiara para peor.

Salté la barandilla y bajé el terraplén rocoso. El aire estaba más frío de lo que
había estado en Coldwater, y el constante viento aporreaba mi espalda. El cielo
era más gris que azul, y neblinoso. Me quedé por encima del alcance de las olas,
escalando las rocas más altas. El terreno se volvió cada vez más difícil para
recorrer, y mantuve mi concentración fija en el cuidadoso posicionamiento de
mis pies más que en la pelea más reciente con mi mamá.

Mi bota se resbaló en una roca, y caí, aterrizando torpemente sobre mi lado.
Maldiciendo por lo bajo, recobré mi apoyo, y fue en ese momento que una gran
sombra cayó sobre mí. Tomada por sorpresa, giré rápidamente. Reconocí al
conductor del coche rojo. Era más alto que el promedio y tenía uno o dos años
más que yo. Su cabello estaba cortado utilitariamente corto, con ojos de un
marrón arenoso y un toque de vello en su barbilla. Por la manera en que la
sudadera le sentaba, iba al gimnasio regularmente.

—Por fin saliste de tu casa —dijo él, mirando alrededor—. He tratado de verte a
solas por días.

Me puse de pie, balanceándome en una roca. Busqué su rostro por familiaridad,
pero las luces no se encendieron.

—Lo siento, ¿nos conocemos?

—¿Crees que te siguieron?—Sus ojos continuaron recorriendo la costa—.
Intenté llevar el registro de todos los autos, pero puede que alguno se me haya


escapado. Hubiera ayudado que rodearas el estacionamiento antes de
detenerte.

—Uh, honestamente no tengo idea de quién eres.

—Que cosa extraña para decirle al chico que compró el auto que te trajo aquí.

Un momento pasó antes de que mi cabeza comprendiera sus palabras.

—Espera. ¿Eres... Kevin Parnell? —Aún cuando habían pasado años, el parecido
estaba ahí. El mismo hoyuelo en su mejilla. Los mismos ojos color avellana.
Agregados más recientes incluían la cicatriz en su pómulo, una barba incipiente,
y la yuxtaposición de una boca llena y sensual con facciones esculpidas y
simétricas.

—Oí de tu amnesia. ¿Los rumores son ciertos, entonces? Parece que es tan
mala como decían.

Por Dios si él no era un optimista. Crucé mis brazos sobre el pecho y dije
fríamente,

—Mientras estamos en el tema, quizás este sea un buen momento para decirme
por qué descartaste el Volkswagen en mi casa la noche en que desaparecí. Si
sabes sobre mi amnesia, seguramente has oído que fui secuestrada.

—El coche fue una disculpa por ser un idiota. —Sus ojos seguían moviéndose
hacia arriba y abajo por los árboles. ¿Quién temía que nos hubiera seguido?

—Hablemos sobre esa noche —determiné. Sola aquí no parecía el mejor lugar
para tener esta conversación, pero mi determinación por obtener respuestas
ganó—. Parece que ambos fuimos disparados por Nick más temprano esa
noche. Eso es lo que le dije a la policía. Tú, yo y Nick, solo en la casa de
diversiones. Si Nick siquiera existe. No sé cómo te las arreglaste, pero estoy
empezando a creer que lo inventaste. Estoy comenzando a creer que tú me
disparaste y necesitabas a alguien más a quien culpar. ¿Tú me forzaste a darle el
nombre de Nick a la policía? Y la próxima pregunta, ¿me disparaste, Kevin?

—Nick está en el infierno ahora, (tn).

Di un respingo. Él lo había dicho sin ninguna vacilación y con la cantidad justa
de melancolía. Si estaba mintiendo, merecía un premio.

—¿Nick está muerto?

—Está ardiendo en el infierno, pero sí, es la misma idea. Muerto funciona, en lo
que a mí respecta.
Escruté su rostro, buscando el más mínimo movimiento en falso. No iba a
discutir detalles sobre la vida después de la muerte con él, pero necesitaba la
confirmación de que Nick se había ido para siempre.

—¿Cómo lo sabes? ¿Se lo has dicho a la policía? ¿Quién lo mató?

—No sé a quién tenemos que agradecerle, pero sé que se ha ido. Las noticias
viajan rápido, confía en mí.

—Vas a tener que hacerlo mejor que eso. Puedes tener engañado al resto del
mundo, pero yo no caeré tan fácilmente. Abandonaste un auto en mi camino de
acceso la noche que fui secuestrada. Luego huiste a esconderte... New
Hampshire, ¿verdad? Perdóname si la última palabra que me viene a la mente
cuando te veo es ―inocente‖. Creo que no hace falta decirlo: no confío en ti.

Suspiró.

—Antes de que Nick nos disparara, me convenciste de que yo realmente soy
un Nefilim. Tú eres la que me dijo que yo no podía morir. Eres parte de la razón
por la que huí. Tenías razón. Nunca iba a terminar como la Mano Negra. De
ninguna manera iba a ayudarle a reclutar más Nefilim a su ejército.

El viento atravesaba mi ropa, respirando como escarcha contra mi piel. Nefilim.
Otra vez esa palabra. Siguiéndome a todas partes.

—¿Yo te dije que eres un Nefilim? —pregunté con nerviosismo. Cerré mis ojos
un momento, rogando que él se corrigiera. Rogando que hubiera estado
usando las palabras ―no puedo morir‖ en sentido figurado. Rogando que ese
fuera el momento en que él explicara que él era la última parada en un
elaborado engaño que había comenzado la noche anterior, con Gabe. Un gran
engaño, y la broma estaba dirigida a mí.

Pero la verdad estaba ahí, agitándose en ese turbio lugar donde mi memoria
una vez había estado intacta. No podía racionalizar eso en mi cabeza, pero
podía sentirla. Dentro de mí. Ardiendo en mi pecho. Kevin no lo estaba
inventando.

—Lo que quiero saber es por qué no puedes recordar nada de esto —dijo—.
Pensé que la amnesia no era permanente. ¿Qué pasa?

—¡No sé por qué no puedo recordar! —estallé—. ¿De acuerdo? No lo sé.
Desperté hace unas noches en el cementerio sin nada. Ni siquiera podía
recordar cómo había llegado hasta ahí. —No estaba segura de por qué sentía el
repentino impulso de contarle todo a Kevin, pero ahí estaba. Mi nariz comenzó a
chorrear, y pude sentir lágrimas formándose detrás de mis ojos—. La policía me
encontró y me llevó al hospital. Dijeron que había estado desaparecida durante
casi tres meses. Dijeron que tengo amnesia porque mi mente está bloqueando
el trauma para protegerme. ¿Pero quieres saber qué es lo loco? Estoy
comenzando a pensar que no estoy bloqueando nada. Tengo una nota. Alguien
irrumpió en mi casa y la dejó en mi almohada. Decía que a pesar de estar en
casa, no estoy a salvo. Alguien está detrás de esto. Ellos saben lo que yo no sé.
Saben qué fue lo que me pasó.
ElitzJb
ElitzJb


Volver arriba Ir abajo

Un Angel Caido y Un Amor Prohibido (Finale IV Temporada) Joe y _Tn. (TERMINADA) - Página 11 Empty Re: Un Angel Caido y Un Amor Prohibido (Finale IV Temporada) Joe y _Tn. (TERMINADA)

Mensaje por ElitzJb Vie 15 Feb 2013, 10:33 am

Un Angel Caido y Un Amor Prohibido (Finale IV Temporada) Joe y _Tn. (TERMINADA) - Página 11 66188557

III Temporada

Capitulo 14
Parte dos

3/4


Justo en ese momento, me di cuenta de que había divulgado demasiado. No
tenía evidencia alguna de que la nota existiera. Peor aún, la lógica probaba que
no era así. Pero si la nota era un producto de mi imaginación, ¿por qué la idea
se negaba a desaparecer? ¿Por qué no podía aceptar que lo había inventado,
ideado, o alucinado?

Kevin me estudió con el ceño fruncido que se hacía más profundo.

—¿Ellos?

Levanté mis manos.

—Olvídalo.

—¿La nota decía algo más?

—Dije que lo olvidaras. ¿Tienes un pañuelo descartable? —Podía sentir la piel
bajo de mis ojos hinchándose, y estaba más allá del punto donde sorber mi
nariz iba a ayudarme a mantenerla seca. Como si eso no fuera lo
suficientemente malo, dos lágrimas cayeron por mis mejillas.

—Hey —dijo Kevin amablemente, tomándome por los hombros—. Va a estar
bien. No llores, ¿de acuerdo? Estoy de tu lado. Te ayudaré a descifrar este lío. —
Cuando no me resistí, él me atrajo hacia su pecho y me dio palmaditas en la
espalda. Torpemente al principio, y luego se decantó por un ritmo más
tranquilizador—. La noche en que desapareciste, yo me escondí. No es seguro
aquí para mí, pero cuando vi en las noticias que habías vuelto y que no podías
recordar nada, tuve que salir de mi escondite. Tenía que encontrarte. Te lo
debo.

Sabía que debía alejarme. Sólo porque quería creer en Kevin no quería decir que
debía confiar en él completamente. O bajar mi guardia. Pero estaba cansada de
levantar muros, y dejé que mis defensas se deslizaran. No podía recordar la
última vez en que se había sentido tan bien sólo que me abrazaran. En sus
brazos, yo casi podía hacerme creer que no estaba sola en esto. Kevin había
prometido que atravesaríamos esto juntos, y quería creerle en eso también.
Además, él me conocía. Era un enlace con mi pasado, y eso significaba más para
mí de lo que podía expresar con palabras. Después de tantos desalentadores
intentos de recordar cualquier fragmento que mi memoria considerara correcto
arrojarme, él había aparecido sin ningún esfuerzo de mi parte. Era más de lo
que podría haber pedido.

Limpiando mis ojos con el dorso de mi mano, dije,

—¿Por qué no estás seguro aquí?

—La Mano Negra está aquí. —Como si recordara que el nombre no significaba
nada para mi, dijo—. Sólo para asegurarme de que quede claro, ¿no recuerdas
nada de esto? Quiero decir, ¿nada de nada?

—Nada. —Con esa única palabra, sentí como si estuviera de pie frente a la
entrada de un laberinto prohibido que se extendía hasta el horizonte.

—Apesta ser tú —dijo, y a pesar de su elección de palabras, creí que
sinceramente lo lamentaba—. La Mano Negra es el apodo de un poderoso
Nefil. Está construyendo un ejército clandestino, y yo solía ser uno de sus
soldados, a falta de una mejor palabra. Ahora soy un desertor, y si me atrapa,
no será agradable.

—Retrocede. ¿Qué es un Nefil?

La boca de Kevin se arqueó en un lado.

—Prepárate para sentir tu mente explotar, Grey. Un Nefil —explicó con
paciencia—, es un inmortal. —Su sonrisa se elevó aún más ante mi expresión
dudosa—. No puedo morir. Ninguno de nosotros puede.

—¿Cuál es la trampa? —pregunté. Él realmente no podía referirse a inmortal
como una persona que no puede morir.

Él hizo un gesto hacia el mar estrellándose contra las rocas muy por debajo
nuestro.

—Si salto, sobreviviré.

Está bien, así que él quizás había sido lo suficientemente estúpido como para
haber saltado antes. Y había sobrevivido. Eso no probaba nada. No era inmortal.
Simplemente creía que lo era porque era el típico adolescente que había hecho
unas cuantas cosas imprudentes, había vivido para hablar de ellas, y ahora creía
que era invencible.

Kevin arqueó las cejas en falsa ofensa.
—No me crees. Anoche pasé un buen par de horas en el océano, buceando
para pescar, y no morí congelado. Pude aguantar la respiración ahí abajo por
ocho o nueve minutos. Algunas veces me desmayo, pero cuando vuelvo en mí,
siempre he flotado hacia la superficie, y todos mis signos vitales están
funcionando.

Abrí la boca, pero me tomó un minuto formar las palabras.

—Eso no tiene sentido.

—Tiene sentido si soy inmortal.

Antes de que pudiera detenerlo, Kevin sacó una navaja suiza y la clavó en su
muslo. Di un grito ahogado y salté hacia él, sin saber si debía sacar la navaja o
estabilizarla. Antes de decidirme, él mismo la sacó de un tirón. Maldijo con
dolor, sus pantalones chorreando sangre.

—¡Kevin! —chillé.

—Vuelve mañana —dijo en un tono más moderado—. Será como si nunca
hubiera sucedido.

—¿Ah, sí? —espeté, todavía alterada. ¿Estaba completamente loco? ¿Por qué
haría una cosa tan estúpida?

—No es la primera vez que lo he hecho. He intentado quemarme vivo. Mi piel
chamuscada... desapareció. Un par de días después, estaba como nuevo.

Incluso ahora podía ver la sangre secándose en sus pantalones. La herida había
dejado de sangrar. Estaba… curándose. En segundos en lugar de semanas. No
quería confiar en mis ojos, pero ver era creer.

De repente, recordé a Gabe. Más claramente de lo que quisiera, convoqué una
imagen de una llave cruz saliendo de su espalda. Adam había jurado que la herida
no mataría a Gabe…

Al igual que Kevin juraba que su herida sanaría sin siquiera un rasguño.

—Está bien, entonces —susurré, aún cuando me sentía de cualquier manera
menos bien.

—¿Seguro que estás convencida? Siempre puedo arrojarme delante de un auto
si necesitas más pruebas.

—Me parece que te creo —dije, no logrando mantener el aturdido desconcierto
fuera de mi tono.

Me forcé a salir de mi estupor. Por ahora, iba a seguir la corriente tanto como
pudiera. Concéntrate en una cosa a la vez, me dije. Kevin es inmortal. Está bien.
¿Qué sigue?

—¿Sabemos quién es la Mano Negra? —pregunté, repentinamente hambrienta
por poner mis manos sobre cualquier información que Kevin pudiera tener.
¿Qué más me estaba perdiendo? ¿Cuántas de mis creencias él podría hacer
girar en sus cabezas? Y la prioridad más alta: ¿podría ayudarme a reparar mi
memoria?

—La última vez que hablamos, ambos queríamos saberlo. Pasé todo el verano
siguiendo pistas, lo cual no es fácil, dado que estoy fugitivo, no tengo dinero,
trabajo solo, y La Mano Negra no es lo que llamarías imprudente. Pero lo he
reducido a un solo hombre. —Sus ojos se posaron en los míos—. ¿Estás lista
para esto? La Mano Negra es Hank Millar.

—¿Hank es qué?

Estábamos sentados sobre dos troncos en una cueva, a más o menos un cuarto
de milla de la costa, escondida detrás de un acantilado sobresaliente, y lejos de
la vista de la carretera. La cueva estaba semi oscura con un techo bajo, pero
ofrecía protección del viento y, como Kevin había insistido, nos ocultaba de
cualquier potencial espía de la Mano Negra. Se había rehusado a decir otra
palabra hasta que estuvo seguro de que estábamos solos.

Kevin raspó un fósforo contra la parte inferior de su zapato y encendió un fuego
en un hueco de rocas. La luz se reflejaba en las paredes irregulares, y yo di mi
primera buena mirada alrededor. Había una mochila y una bolsa de dormir
contra el muro trasero. Un espejo roto estaba apoyado contra una roca que
sobresalía como un estante, junto con una navaja, un lata de crema de afeitar, y
una barra de desodorante. Más cerca de la boca de la cueva había una gran caja
de herramientas. Sobre ella descansaban unos pocos platos, cubiertos y una
sartén. Junto a ella descansaban una caña de pescar y una trampa para
animales. La cueva me impresionó y entristeció a la vez. Kevin era de todo
menos desvalido, claramente capaz de sobrevivir por sus propios conocimientos
y fortaleza. Pero, ¿qué clase de vida tenía, escondiéndose y huyendo de un
lugar a otro?

—He estado observando a Hank por meses —dijo Kevin—. Esta no es una
puñalada en la oscuridad.

—¿Estás seguro de que Hank es la Mano Negra? No te ofendas, pero no encaja
con mi imagen de militar clandestino o… —Un hombre inmortal. La idea parecía
irreal. No, absurda—. Él maneja la concesionaria de autos más exitosa de la
ciudad, es miembro del club de yates, y él solo apoya su recaudación de fondos.
¿Por qué le importaría lo que está pasando en el mundo de los Nefilim? Ya
tiene todo lo que podría querer.

—Porque él también es un Nefilim —explicó Kevin—. Y no tiene todo lo que
quiere. Durante el mes judío de Jeshvan, todos los Nefilim que han hecho un
juramento de fidelidad tienen que entregar sus cuerpos por dos semanas. No
tienen opción. Lo entregan y alguien más lo posee... un ángel caído. Nick era el
ángel caído que solía poseer a la Mano Negra, y así fue como logré oír que está
ardiendo en el infierno. La Mano Negra puede estar libre, pero no ha olvidado y
no perdonará. Para eso es el ejército. Va a intentar derrocar a los ángeles
caídos.

—Retrocede. ¿Quiénes son los ángeles caídos? —¿Una pandilla? Así era como
sonaba. Cada vez tenia más dudas. Hank Millar era la última persona en
Coldwater que se rebajaría a asociarse con pandillas—. ¿Y a qué te refieres con
―poseer‖?

La boca de Kevin se contrajo en una sonrisa despectiva, pero para su crédito,
respondió con paciencia.

—Definición de ángel caído: los rechazados del cielo y la peor pesadilla de un
Nefil. Nos obligan a jurar lealtad, y luego poseen nuestros cuerpos durante
Jeshvan. Son parásitos. No pueden sentir nada en sus propios cuerpos, así que
invaden los nuestros. Sí, Grey —dice ante la expresión de aborrecimiento que
estaba segura estaba congelada en mi rostro—. Quiero decir que literalmente
entran en nosotros y usan nuestros cuerpos como si fueran suyos. Un Nefil está
mentalmente allí mientras tanto, pero no tiene ningún control.

Intenté digerir la explicación de Kevin. Más de una vez, imaginé la canción
principal de La Dimensión Desconocida sonando de fondo, pero la verdad del
hecho era que sabía que él no estaba mintiendo. Todo estaba volviendo. Los
recuerdos estaban fragmentados y dañados, pero estaban allí. Yo había
aprendido todo esto antes. Cómo o cuándo, no lo sabía. Pero sabía esto, todo.
Dije,

—La otra noche vi a tres tipos atacando a un Nefil. ¿Era eso lo que estaban
haciendo? ¿Tratando de obligarlo a entregar su cuerpo por dos semanas? Eso
es inhumano. ¡Es... repulsivo!

Kevin había dejado caer sus ojos, agitando el fuego con un palo. Mi error me
golpeó demasiado tarde. La vergüenza me llenó y susurré,

—Oh, Kevin. No estaba pensando. Lamento que tengas que pasar por eso. No
puedo imaginarme cuán difícil debe ser entregar tu cuerpo.

—No he jurado lealtad. Y no voy a hacerlo. —Él lanzó el palo al fuego, y chispas
doradas lloviznaron en el aire oscuro y con humo de la cueva—. Por lo menos,
eso es lo que la Mano Negra me enseñó. Los ángeles caídos pueden probar en
mí cualquier truco mental que quieran. Pueden cortarme la cabeza, cortarme la
lengua y quemarme hasta que me haga cenizas. Pero nunca haré ese juramento.
Puedo soportar el dolor. Pero no puedo soportar las consecuencias del
juramento.

—¿Truco mental? —La piel en la parte trasera de mi cuello hormigueó, y mis
pensamientos volvieron a Gabe una vez más.

—Una ventaja de ser un ángel caído —dijo amargamente—. Puedes meterte en
las mentes de las personas. Hacerlos ver cosas que no son reales. Los Nefilim
heredaron eso de los ángeles caídos.

Parecía que había tenido razón acerca de Gabe después de todo. Pero él no
había usado una artimaña de mago para crear la ilusión de él convirtiéndose en
un oso, como Adam me había dejado creer. Él había usado un arma Nefilim...
control mental.

—Muéstrame como se hace. Quiero saber exactamente cómo funciona.

—Estoy fuera de práctica. —Fue todo lo que dijo, inclinándose hacia atrás en su
tronco y entrelazando sus manos detrás de la cabeza.

—¿Puedes intentarlo al menos? —dije con un golpe juguetón a su rodilla,
esperando suavizar el humor—. Muéstrame contra lo que nos enfrentamos.
Vamos. Sorpréndeme. Hazme ver algo que no estoy esperando. Luego
enséñame cómo se hace.

Cuando Kevin continuó mirando el fuego, con la luz iluminando los duros
bordes de sus facciones, la sonrisa se esfumó de mi rostro. Esto era cualquier
cosa menos una broma para él.

—Esto es así —dijo—. Esos poderes son adictivos. Cuando los saboreas, es
difícil detenerse. Cuando huí hace tres meses y me di cuenta de lo que era
capaz, usaba mis poderes cada vez que podía. Si estaba hambriento, entraba en
una tienda, metía lo que quería en un carro, y hacía que el empleado embolsara
mis cosas y me dejara ir sin pagar. Era fácil. Me hacía sentir superior. No fue
hasta que estaba espiando a la Mano Negra una noche, y lo vi haciendo lo
mismo, que dejé de hacerlo. No voy a vivir el resto de mi vida así. No voy a ser
como él. —Sacó un anillo de su bolsillo, sosteniéndolo a la luz. Parecía estar
hecho de hierro, y la corona del anillo estaba estampada con un puño apretado.
Por un momento fugaz, un extraño halo azul de luz pareció irradiar del metal.
Pero desapareció de inmediato, y lo descarté como un truco de la luz.

—Todos los Nefilim tienen una fuerza mayor, lo que nos hace físicamente más
poderosos que los humanos, pero cuando uso este anillo, lleva esa fuerza a un
nivel completamente diferente —dijo Kevin solemne—. La Mano Negra me dio
el anillo después de que intentó reclutarme para su ejército. No sé qué clase de
maldición o encantamiento tiene, o si siquiera es una de esas. Pero hay algo.
Cualquier persona con uno de estos anillos es casi físicamente imparable. Antes
de que desaparecieras en junio, me robaste el anillo. La necesidad de tenerlo de
vuelta era tan fuerte que no dormí, no comí o descansé hasta que lo encontré.
Era como un drogadicto buscando la única cosa que podía servirme. Entré a la
fuerza a tu casa una noche después de que fuiste secuestrada. Lo encontré en
tu cuarto, dentro del estuche de tu violín.

—Chelo —fue mi corrección murmurada. Un recuerdo débil se agitó dentro de
mí, una sensación de haber visto el anillo antes.

—No soy el chico más inteligente, pero sé que este anillo no es inofensivo. La
Mano Negra le hizo algo. Buscaba una manera de darle a cada miembro de su
ejército una ventaja. Incluso si no lo estoy usando, y sólo estoy dependiendo de
mis poderes y fuerza natural, la necesidad de tener más de ambos es fuerte. La
única manera de vencerla es dejar de usar mis poderes y habilidades tanto
como puedo.

Intenté simpatizar con Kevin, pero estaba un poco decepcionada. Necesitaba
obtener un mejor entendimiento de cómo Gabe me había engañado en caso de
que me encontrara cara a cara con él de nuevo. Y si Hank era realmente la Mano
Negra, el líder de una milicia clandestina e inhumana, tenía que preguntarme si
él estaba en mi vida por razones mucho más oscuras de las que se podían ver a
simple vista. Después de todo, si él estaba tan ocupado luchando contra los
ángeles caídos, ¿cómo tenía tiempo para manejar su concesionaria, ser padre, y
salir con mi mamá? Quizás yo era muy sospechosa, pero considerando lo que
Kevin me había dicho, estaba muy segura de que estaba justificada.


Necesitaba a alguien de mi lado que pudiera ir contra Hank, si se llegaba a eso.
En este momento, la única persona que conocía era Kevin. Quería que él
mantuviera su integridad, pero al mismo tiempo, era la única persona que
conocía que tenía una posibilidad contra Hank.

—Quizás puedas tratar de usar los poderes del anillo para hacer el bien —
sugerí suavemente después de un minuto.

Kevin pasó una mano por sus cabellos, obviamente listo para cambiar de tema.

—Demasiado tarde. He tomado una decisión. No usaré el anillo. Me conecta
con él.

—¿Nunca te preocupa que si no llevas el anillo puesto, eso le dará a Hank una
ventaja peligrosa?

Sus ojos atraparon los míos, pero evitó contestar.

—¿Tienes hambre? Puedo pescar unas lubinas. Saben bastante bien hechas al
sartén. —Sin esperar mi respuesta, él tomó la caña de pescar y descendió por
las rocas que salían de la cueva.

Lo seguí, súbitamente deseando poder cambiar mis botas por zapatillas. Kevin
atravesaba las rocas con zancadas y saltos, mientras que yo me veía forzada a
tomar un cauteloso paso tras otro.

—Está bien, por ahora no hablaremos de tus poderes —grité—, pero no he
terminado. Todavía hay demasiados espacios en blanco. Volvamos a la noche
en que desaparecí. ¿Tienes alguna idea de quién me secuestró?

Kevin se sentó en una roca, ensartando la carnada en el anzuelo. Para cuando
finalmente lo alcancé, él casi había terminado.

—Al principio pensé que tenía que haber sido Nick —dijo—. Eso fue antes de
que supiera que estaba en el infierno. Yo quería regresar y buscarte, pero no era
tan simple. La Mano Negra tiene espías en todos lados. Y a juzgar por lo que
pasó en la casa de diversiones, supuse que también tendría a la policía detrás.

—¿Pero?

—Pero no fue así. —Me miró de lado—. ¿No lo encuentras un poquito extraño?
La policía tenía que haber sabido que yo estaba en la casa de diversiones esa
noche con Nick y contigo. Tú les hubieras contado. Probablemente también les
dijiste que me habían disparado. ¿Entonces por qué nunca vinieron por mí?
¿Por qué me dejaron ir? Es casi como... —se detuvo.

—¿Cómo qué?

—Como si alguien hubiese venido después y hubiera limpiado todo. Y no estoy
hablando de evidencia física. Estoy hablando de trucos mentales. Borrar la
memoria. Alguien lo suficientemente poderoso para hacer que la policía mirara
en otra dirección.

—Un Nefil, quieres decir.

Un encogimiento de hombros.

—Tiene sentido, ¿verdad? Quizás la Mano Negra no quería que la policía me
buscara. Quizá él quería encontrarme por sí mismo y encargarse de mí
extraoficialmente. Si me encuentra, créeme, no me va a entregar a la policía
para que me interroguen. Me encerrará en una de sus prisiones y me hará
arrepentirme del día en que lo dejé plantado.

Así que estábamos buscando a alguien lo suficientemente fuerte como para
forzar la mente o, como Kevin decía, borrar recuerdos. La relación con mi propia
pérdida de memoria no se me pasó por alto. ¿Podría un Nefil haberme hecho
esto? Un nudo se ató en mi estómago mientras consideraba la posibilidad.

—¿Cuántos Nefilim tienen esa clase de poder? —pregunté.

—¿Quién sabe? Definitivamente la Mano Negra.

—¿Alguna vez has oído hablar de un Nefil llamado Adam? ¿O de un ángel caído,
en ese caso? —añadí, cada vez más consciente de que Adam era muy
probablemente uno o lo otro. No que comprenderlo me hiciera sentir
consolada en lo más mínimo.

—No. Pero eso no dice mucho. Casi tan pronto como supe de los Nefilim, tuve
que ocultarme. ¿Por qué?

—La otra noche conocí a un chico llamado Adam. Él sabía acerca de los Nefilim.
Detuvo a los tres chicos… —me interrumpí. No había necesidad de ser
imprecisa, aún cuando fuera más fácil para mi estado mental—. Él detuvo a los
ángeles caídos de los que te hablé de forzar a un Nefil llamado B.J. a hacer el
juramento de fidelidad. Esto va a sonar loco, pero Adam irradió un tipo de energía.
La sentí como electricidad. Era mucho más fuerte que lo que los otros
irradiaban.

—Probablemente un buen indicador de su poder —dijo Kevin—. Enfrentarse a
tres ángeles caídos habla por sí mismo.


—¿Es así de poderoso y nunca has oído de él?

—Créelo o no, yo sé lo mismo que tú sobre estas cosas.

Recordé las palabras que Adam me había dicho. Yo intenté matarte. ¿Qué
significaba eso? ¿Estaba involucrado con mi secuestrado después de todo? ¿Y
era lo suficientemente fuerte para borrar mi memoria? Basado en la intensidad
del poder que irradiaba de él, era capaz de más que unos pocos simples trucos
mentales. Mucho más.

—Sabiendo lo que sé sobre la Mano Negra, me sorprende que yo todavía sea
un hombre libre —dijo Kevin—. Debe odiar que lo haga ver como un tonto.

—Hablando de eso, ¿por qué desertaste del ejercito de Hank?

Kevin suspiró, dejando caer sus manos pesadamente sobre sus rodillas.

—Esta es una conversación que yo no quería tener. No hay una manera fácil de
decir esto, así que simplemente lo diré. La noche en que tu papá murió, se
suponía que yo lo vigilara. Él estaba en camino a una reunión muy peligrosa, y
la Mano Negra quería asegurarse de que estuviera seguro. La Mano Negra dijo
que si yo tenía éxito, probaría que él podía contar conmigo. Me quería en su
ejército, pero no era lo que yo quería.

Un escalofrío cosquilleó mi columna. Lo último que esperaba era que Kevin
trajera a colación a mi papá en todo esto.

—Mi papá… ¿conocía a Hank Millar?

—Yo ignoré la orden de la Mano Negra. Me imaginé que le haría una seña con
el dedo y dejaría mi punto en claro. Pero todo lo que logré fue dejar que un
hombre inocente muriera.

Pestañeé, las palabras de Kevin cayendo en cascada sobre mí como un balde de
agua helada.

—¿Dejaste que mi papá muriera? ¿Le dejaste ponerse en peligro y no hiciste
nada para ayudarlo?

Kevin extendió sus manos.

—No sabía que iba a ser así. Yo pensaba que la Mano Negra estaba loco. Lo
creía un loco egocéntrico. Nunca entendí todo el asunto de los Nefilim. No lo
supe hasta que fue demasiado tarde.


Miré directamente hacia adelante, fijando la vista en el océano. Una sensación
no deseada aferraba mi pecho, apretándolo implacablemente. Mi papá. Todo
este tiempo, Kevin había sabido la verdad. No me la había contado hasta que se
la saqué a la fuerza.

—Nick apretó el gatillo —dijo Kevin, su voz irrumpió suavemente en mis
pensamientos—. Yo dejé a tu papá entrar a una trampa, pero fue Nick quién lo
ultimó.

—Nick —repetí. En piezas amargas, todo volvía a mí. Un horrendo vistazo
después del otro. Nick llevándome a la casa de diversiones. Nick admitiendo
pragmáticamente que había matado a mi papá. Nick apuntándome con su
arma. No podía recordar lo suficiente para pintar el cuadro entero, pero las
imágenes eran suficiente. Estaba enferma del estómago.

—Si Nick no me secuestró, ¿quién fue? —pregunté.

—¿Recuerdas que dije que había pasado el verano siguiendo a la Mano Negra?
A principios de agosto, él hizo un viaje al Parque Nacional White Forest.
Condujo hasta una cabaña remota y se quedó allí por menos de veinte minutos.
Un viaje tan largo para una visita tan corta, ¿verdad? No me atreví a acercarme
lo suficiente para ver por las ventanas, pero oí una conversación suya por
teléfono un par de días después, de regresó en Coldwater. Él le contó a la
persona al otro lado de la línea que la chica todavía estaba en la cabaña, y que
él necesitaba saber si tenía la memoria en blanco. Esas fueron sus palabras. Dijo
que no había lugar para ningún error. Estoy comenzando a pensar que esa chica
a la que se refería...

—Era yo —terminé por él, anonadada. Hank Millar, un inmortal. Hank Millar, la
Mano Negra. Hank, mi posible secuestrador.

—Hay un tipo que probablemente pueda conseguir más respuestas —dijo
Kevin, tirando de su ceja—. Si alguien sabe cómo conseguir información, es él.
Rastrearlo puede ponerse difícil. No sabría dónde empezar. Y dadas las
circunstancias, quizás no quiera ayudarnos, especialmente porque la última vez
que lo vi, él casi me rompe la mandíbula porque intenté besarte.

Me sobresalté.

—¿Besarme? ¿Qué? ¿Quién es ese tipo?

Kevin frunció el ceño.

—Cierto. Supongo que tampoco lo recuerdas. Joe, tu ex.
ElitzJb
ElitzJb


Volver arriba Ir abajo

Un Angel Caido y Un Amor Prohibido (Finale IV Temporada) Joe y _Tn. (TERMINADA) - Página 11 Empty Re: Un Angel Caido y Un Amor Prohibido (Finale IV Temporada) Joe y _Tn. (TERMINADA)

Mensaje por ElitzJb Vie 15 Feb 2013, 10:44 am

Un Angel Caido y Un Amor Prohibido (Finale IV Temporada) Joe y _Tn. (TERMINADA) - Página 11 81724610

III Temporada

Capitulo 15

(parte uno)

4/4


Retrocede —ordené—. ¿Joe era mi ex? —Esto no
concordaba con la historia de Marcie. O la de Demi, para
el caso.


—Ustedes dos rompieron. Algo que ver con Marcie, creo. —Él levantó sus
palmas—. Eso es todo lo que sé. Volví a la ciudad en el medio del drama.

—¿Estás seguro de que él era mi novio?

—Tus palabras, no las mías.

—¿Cómo lucía?

—Temible.

—¿Dónde está ahora? —pregunté con más energía.

—Como dije, encontrarlo no será fácil.

—¿Sabes algo acerca de un collar que él puede haberme dado?

—Haces muchas preguntas.

—Marcie dijo que Joe era su novio. Ella me dijo que él me dio un collar que le
pertenece, y ahora ella lo quiere de vuelta. Dijo que él me hizo ver lo bueno en
ella y nos unió.

Kevin acarició su mentón. Sus ojos se reían de mí.

—¿Y tú la creíste?

Mi mente daba vueltas. ¿Joe fue mi novio? ¿Por qué había mentido Marcie?
¿Para obtener el collar? ¿Qué podía querer con eso?

Si Joe fue mi novio, eso explicaba los destellos de déjà vu cada vez que oía su
nombre, pero…

Si él fue mi novio, y yo había significado algo para él, ¿dónde estaba ahora?

—¿Algo más que me puedas decirme acerca de Joe?

—Apenas conocí al tipo, y lo que conocí me asustaba terriblemente. Veré si
puedo encontrarlo, pero no puedo hacer ninguna promesa. Mientras tanto,
concentrémonos en algo seguro. Si podemos conseguir suficiente información
acerca de Hank, quizás podamos entender por qué él tiene tanto interés en ti y
en tu mamá y qué es lo siguiente que planea hacer, y pensar en una manera de
acabar con él. Ambos tenemos algo que ganar con esto. ¿Estás dentro, Grey?

—Oh, lo estoy —le dije con fiereza.

Me quedé con Kevin hasta que el sol se sumergió en el horizonte. Dejé mi cena
de pescado a medio comer y caminé de vuelta por la orilla. Kevin y yo nos
despedimos en la barandilla. Él no quería acostumbrarse a mostrar su rostro en
público, y a juzgar por lo que me había dicho de Hank y sus espías Nefilim,
comprendí su cautela. Le prometí visitarlo de nuevo pronto, pero él desechó la
idea. El tráfico rutinario hacia la cueva era demasiado riesgoso, afirmó. En su
lugar, él me buscaría.

De camino a casa, reflexioné. Repasé todo lo que Kevin me había dicho. Una
extraña sensación se cocía a fuego dentro de mí. Venganza, quizás. U odio en
su forma más pura. No tenía evidencias suficientes para afirmar con certeza que
Hank estaba detrás de mi secuestro, pero le había dado mi palabra a Kevin de
que haría todo lo posible para llegar al fondo de esto. Y por "fondo", quería
decir que si Hank tenía algo que ver con esto, lo haría pagar por ello.

Y luego estaba Joe. Mi supuesto ex novio. Un tipo que irradiaba misterio, que
dejó una fuerte impresión en Marcie y en mí, y que había desaparecido sin dejar
rastro. No podía imaginarme con un novio, pero si tenía que hacerlo, me
imaginaba un agradable chico normal que entregaba su tarea de matemáticas a
tiempo y que quizás incluso jugara al béisbol. Una descripción demasiado
limpia que se contraponía con todo lo que yo sabía acerca de Joe. Que no era
mucho.

Tendría que encontrar una manera de cambiar eso.

En la granja, encontré una nota en la mesada de la cocina. Mi madre había
salido con Hank esa noche. Cena, seguida de una orquesta sinfónica en
Portland. La idea de que estuviera sola con Hank hizo que mis entrañas cayeran
en picada, pero Kevin había estado vigilando a Hank Millar el tiempo suficiente
para saber que estaba saliendo con mi madre, y me había dado una clara
advertencia: no podía, bajo ninguna circunstancia, dar a conocer lo que sabía. A
ninguno de ellos. Hank creía que nos tenía engañados a todos, y era mejor
mantenerlo así. Tenía que confiar en que, por ahora, mi madre estuviera a salvo.

Debatí el llamar a Demi, dejando en claro que sabía que ella había mentido sobre
Joe, pero me sentía pasiva-agresiva. Dale un día de tratamiento de silencio, y
déjala que se piense acerca de lo que había hecho. La confrontaría una vez que
supiera que estaba lo suficientemente asustada como para empezar a decir la
verdad, esta vez en serio. Su traición dolía, y por su bien, esperaba que tuviera
una muy buena explicación.

Abrí una pote de budín de chocolate y lo comí delante de la TV, usando las
repeticiones de las comedias para llenar la noche. Finalmente el reloj pasó las
once, y yo subí suavemente a mi habitación. Sacándome la ropa, no fue hasta
que devolví mi bufanda a su lugar apropiado en el cajón que noté la pluma
negra de nuevo. Tenía un brillo sedoso que me recordaba al color de los ojos
de Adam. Un negro tan interminable, que absorbía hasta la última partícula de luz.
Recordé ir a su lado en el Tahoe, y aunque Gabe había estado justo allí, yo no
había estado asustada. Adam me hacía sentir segura, y deseé tener alguna forma
de embotellar la sensación, para sacarla cuando la necesitara.

Por encima de todo, deseaba ver a Adam de nuevo.

Había estado soñando con Adam cuando mis ojos se abrieron de golpe. El crujido
de la madera había penetrado en mi sueño, despertándome de un sacudón.
Una figura sombría se agazapaba en mi ventana, bloqueando la luz de la luna.
La figura entró con un salto, aterrizando en mi habitación tan sigilosamente
como un gato.

Me senté de golpe, y todo mi aliento se escapó en un silbido.
—Shh —murmuró Kevin, posando un dedo sobre sus labios—. No despiertes a
tu mamá.

—¿Q-qué estás haciendo aquí? —logré balbucear finalmente.

Él cerró la ventana detrás suyo.

—Te dije que te visitaría pronto.

Me dejé caer de nuevo sobre la cama, intentando recuperar un ritmo cardíaco
normal. No había visto mi vida pasar frente mis ojos exactamente, pero había
estado vergonzosamente cerca de gritar a todo pulmón.

—Te faltó mencionar que involucraría meterse a la fuerza en mi habitación.

—¿Hank está aquí?

—No. Salió con mi madre. Me quedé dormida, pero aún no los he oído llegar.

—Vístete.

Le eché un vistazo al reloj. Luego le eché un vistazo a él.

—Es casi medianoche, Kevin.

—Muy detallista, Grey. Resulta que vamos a ir a un lugar al que será mucho más
fácil entrar a la fuerza a estas horas.

Oh Dios.

—¿A la fuerza? —repetí un poco malhumorada, aún sin recuperarme de ser
despertada tan abruptamente. Especialmente si Kevin hablaba en serio acerca
de hacer algo potencialmente ilegal.

Mis ojos finalmente se estaban ajustando a la borrosa oscuridad, y lo sorprendí
sonriendo.

—No tienes miedo de un hacer un poco de allanamiento ilegal, ¿verdad?

—En lo absoluto. ¿Qué es un delito grave? No es que tenga grandes esperanzas
de ir a la universidad o conseguir un trabajo algún día —bromeé.

Él ignoró mi sarcasmo.

—Encontré uno de los almacenes de la Mano Negra. —Cruzando la habitación,
se escabulló hacia el pasillo—. ¿Estás segura de que aún no han vuelto?
—Hank probablemente tiene un montón de almacenes. Vende autos. Tiene que
almacenarlos en algún lugar. —Me di la vuelta, tiré de los cobertores hasta mi
mentón, y cerré los ojos, esperando que él captara la indirecta. Lo que
realmente quería hacer era insertarme de nuevo en el sueño con Adam. Podía
sentir su beso prolongándose en mis labios. Quería vivir la fantasía un poquito
más.

—El almacén se encuentra en el distrito industrial. Si Hank está almacenando
autos allí, está rogando que lo asalten. Esto es grande. Lo estoy sintiendo, Grey.
Está ocultando algo mucho más valioso que autos allí. Tenemos que averiguar
qué es. Necesitamos toda la información sobre él que podamos conseguir.

—El allanamiento de morada es ilegal. Si vamos a acorralar a Hank, tenemos
que hacerlo legítimamente.

Kevin caminó alrededor de la cama. Tiró de las mantas hasta que pudo ver mi
rostro.

—Él no juega según las reglas. La única manera en que esto va a funcionar es si
emparejamos el terreno de juego. ¿No tienes un poco de curiosidad acerca de
lo que está guardando en el almacén?

Pensé en la alucinación, el almacén y el ángel enjaulado, pero dije:

—Si puede hacer que me arresten, no.

Él se sentó, frunciendo el ceño.

—¿Qué sucedió con querer ayudarme a enterrar a la Mano Negra?

Esa era la cosa. Un par de horas sola para razonar las cosas, y sentí mi confianza
escapándose. Si Hank era todo lo que Kevin afirmaba, ¿cómo podríamos
nosotros dos solos enfrentarnos con él? Necesitábamos un plan mejor. Un plan
más inteligente.

—Quiero ayudar, y lo haré, pero no podemos meternos de cabeza en esto —
dije—. Estoy demasiado cansada para pensar. Regresa a la cueva. Vuelve a una
hora razonable. Tal vez pueda convencer a mi madre de visitar a Hank en su
almacén y preguntarle qué hay dentro.

—Si venzo a Hank, recupero mi vida —dijo Kevin—. Basta de esconderme. Basta
de huidas. Podría ver a mi mamá de nuevo. Hablando de mamás, la tuya estaría
a salvo. Ambos sabemos que tú quieres esto tanto como yo —murmuró con
una voz que no me gustaba. Era una voz que me daba a entender que me
conocía más de lo que me resultaba cómodo. No quería que Kevin tuviera ese

tipo de percepción de mí. No a medianoche, al menos. No cuando estaba así de
cerca de deslizarme de nuevo en mi sueño con Adam—. No voy a dejar que nada
te pase —dijo en voz baja—, si eso es lo que te preocupa.

—¿Cómo puedo saber eso?

—No lo sabes. Esta es tu oportunidad para poner mis intenciones a prueba.
Averiguar realmente de qué estoy hecho.

Atrapé mi labio inferior entre los dientes, pensando. Yo no era el tipo de chica
que se escapaba en la noche. Y aquí estaba, a punto de hacerlo dos veces en
una semana. Estaba empezando a pensar que era completamente diferente a la
persona que me gustaba creer que era. ¿No tan buena después de todo?
pareció burlarse el diablo en mi hombro.

La idea de salir por la noche para espiar uno de los almacenes de Hank no
enviaba un sentimiento exactamente cálido, difuso a través de mí, pero razoné
que estaría con Kevin todo el tiempo. Y si había una cosa que yo quería, era
sacar a Hank de mi vida para siempre. Quizás, si Kevin estaba en lo cierto acerca
de que él era Nefilim, Hank era capaz de engañar la mente de uno o dos
policías, pero si él estaba haciendo algo altamente ilegal, no había manera de
que pudiera evadir al cuerpo policial completo. En este momento, conseguir
que la policía lo siguiera de cerca parecía un buen comienzo para develar sus
planes, cualquiera que fuesen.

—¿Esto es siquiera seguro? —pregunté—. ¿Cómo sabemos que no nos van a
atrapar?

—He estado vigilando el edificio durante días. No hay nadie por la noche.
Tomaremos algunas fotos por las ventanas. El nivel de riesgo es bajo. ¿Vienes o
no?

Di un suspiro de resignación.

—¡Está bien! Me pondré algo de ropa. Date la vuelta. Estoy en pijama. —Pijama
que consistía en nada más que una camiseta y ropa interior con forma de
shorts, una imagen que no quería a fijar en la mente de Kevin.

Él sonrió.

—Soy un hombre. Eso es como decirle a un niño que no mire un mostrador de
caramelos.

Ugh.

El hoyuelo en su mejilla se profundizó. Y no fue lindo de ninguna manera.

Porque yo no iba a tomar ese camino con Kevin. Tomé la decisión de inmediato.
Nuestra relación era bastante complicada. Si íbamos a trabajar juntos, el
platónico era el único camino a seguir.

Con una sonrisa sardónica, él levantó los brazos en señal de derrota y me dio la
espalda. Salí rápidamente de la cama, atravesé la habitación a los saltos, y me
encerré en el armario.

Dado que las puertas tenían tablillas, dejé la luz apagada para estar segura y
palpé mi camino por el estante de ropa. Me puse unos jeans ajustados, una
camiseta de capas, y una sudadera con capucha. Opté por zapatillas, temiendo
que tuviéramos que huir en cualquier momento.

Abotoné mis jeans, y abrí la puerta del armario.

—¿Sabes en qué estoy pensando ahora mismo? —le pregunté a Kevin.

Sus ojos me analizaron.

—¿En qué te ves linda en esa manera de ―chica de al lado‖?

¿Por qué tenía que decir cosas como esa? Sentí brotar un rubor en mis mejillas
y tuve la esperanza de que Kevin no lo viera en la penumbra.

Dije:

—En que será mejor que no lamente esto.
_____________________________________________________________________________________________________
.continuara...


P.D.1: vieron ya pronto sabrán muchísimo mas okis chicas q tal les parecio les gusta...??? ya se siempre lo pregunto pero es q me encanta leer sus comentarios todos los leo y me fascinan lo q piensan respecto a la novela
gracias x ser paciente nos leemos luego se les quiere :)
ElitzJb
ElitzJb


Volver arriba Ir abajo

Un Angel Caido y Un Amor Prohibido (Finale IV Temporada) Joe y _Tn. (TERMINADA) - Página 11 Empty Re: Un Angel Caido y Un Amor Prohibido (Finale IV Temporada) Joe y _Tn. (TERMINADA)

Mensaje por chelis Vie 15 Feb 2013, 2:47 pm

QUE HABRA EN ESE ALMACEEENN???????
AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAHHHH
TANTO MISTERIOOOO!!!!!! :gasp: QUIEROO OTROO CAAPIISS
chelis
chelis


http://www.twitter.com/chelis960

Volver arriba Ir abajo

Un Angel Caido y Un Amor Prohibido (Finale IV Temporada) Joe y _Tn. (TERMINADA) - Página 11 Empty Re: Un Angel Caido y Un Amor Prohibido (Finale IV Temporada) Joe y _Tn. (TERMINADA)

Mensaje por Contenido patrocinado

Contenido patrocinado



Volver arriba Ir abajo

Página 11 de 47. Precedente  1 ... 7 ... 10, 11, 12 ... 29 ... 47  Siguiente

Ver el tema anterior Ver el tema siguiente Volver arriba

- Temas similares

Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.