#Addicted To Love {Harry, Zayn & Tú}

ADDICTED TO LOVE (Harry, Zayn & Tú)

Capítulo 14

En el momento en el que Zayn cruzó los tres pasos que los separaban, __________ lo atrajo hacia ella y lo besó con fuerza. Él entró a la ducha en cuestión de segundos. No había nada de ropa separándolos, y eso facilitó las cosas un montón.
—Se supone que no haría esto con esto contigo porque eras demasiado caballeroso, ¿qué pasó con eso? —preguntó __________ contra los labios de Zayn. Él llevó las manos hasta sus senos, y _________ soltó un gritito.
—¿Quieres que me detenga? —dijo Zayn en tono juguetón.
—No, al carajo.
Zayn la cargó y _________ enroscó sus piernas en su cintura. En cuestión de segundos, Zayn estaba dentro de ella, y __________ se encontró gritando su nombre una y otra vez.
Las uñas de ___________ se clavaron con fuerza en la espalda de Zayn y, una vez más, grito su nombre entre gemidos. Zayn adoraba observarla, con el agua de la regadera corriendo por todo su cuerpo, sus labios entre abiertos y sus ojos cerrados. Sus mejillas estaban coloreadas de un tono rosado que le parecía adorable.
La embistió otra vez. Y luego otra. Y otra más.
___________ hizo más fuerte el agarre alrededor de la cintura de Zayn con sus piernas, al tiempo que su cuerpo entero se tensaba. El de Zayn también se tensó, y ambos sintieron aquél cosquilleo y calor que te recorren por completo antes del final.
Zayn tiró del cabello de _________ un poco. No quería ser demasiado brusco, pero en esos veinte (o más) minutos había aprendido que a ella le gustaba a la fuerza. Tiró de su cabello un poco más, y __________ soltó un jadeo de placer, antes de morderse el labio inferior.
Abrió los ojos. Sus pupilas estaban dilatadas y tenía problemas enfocándose, pero sonrió. Sonrió con una sonrisa que Zayn no había podido apreciar hasta esa noche. Era juguetona, y parecía esconder mil secretos.
Zayn negó con la cabeza.
—Me vas a volver loco. —susurró, agachando la cabeza un poco para susurrarle a ___________ al oído. Ella soltó una risa ahogada.
—Ese es el punto, tontito. —musitó, antes de besar el cuello de Zayn.
Los cuerpos de ambos se tensaron con fuerza una vez más, antes de que se relajaran por completo y ambos soltaran suspiros de satisfacción.
Se quedaron así, enredados, por un par de minutos hasta que ___________ desenroscó sus piernas de la cintura de Zayn. Miró el chorro de agua que descendía sobre sus cabezas con el ceño fruncido.
—Supongo que debería bañarme en serio.
—Supongo que sí. —contestó Zayn, sonriendo levemente. De la garganta de ___________ brotó una risita, que fue callada cuando Zayn estampó sus labios contra los de ella. En cuanto se separaron, __________ estiró la mano para tomar una esponja.
—Estoy exhausta. Y es toda tu culpa. —le tendió la esponja a Zayn, que la enjabonó y empezó a tallar su espalda con extrema delicadeza, despacio, disfrutando el momento.
—Eso es bueno. Significa que estuvo bien. —bromeó Zayn.
___________ soltó un bufido.
—Estuvo más que bien.
Zayn rio.
—Me alegro que te gustara.
—Cada que necesite una toalla, le pediré a Vicky que vaya a buscarte específicamente a ti. No aceptaré un no por respuesta. —dijo __________, dándose la vuelta para mirar a Zayn a los ojos. Era increíble que después de lo que acababa de pasar no se sintiera ni un poco incómoda. Después de todo, con Harry sí que había sido incómodo. Pero con Zayn las cosas sólo… fluían.
—No iba a decir que no. —contestó él, guiñándole un ojo y besando su mejilla, provocando que ella sonriera.
En el instante en que ella salía (gracias a Dios que Zayn sí había llevado la toalla que le había pedido, y no sólo la que lo envolvía a él), alguien tocó en su puerta. Era un toque sencillo: dos fuertes y tres suaves. Lo reconocía de la casa del árbol cuando eran pequeños, y eso le recordó que aún tenía un montón de preguntas que hacerle al chico que estaba tocando.
—¡Voy! —gritó, apresurándose a secarse.
—¿Quién es? —preguntó Zayn del otro lado de la cortina.
—Um… no lo sé. Pero iré a revisar. Puede que me tarde un poco, dejé tu toalla sobre la taza. Volveré en unos minutos, ¿sí? No te vayas.
Pudo escuchar la risa de Zayn, y eso la hizo sonreír un poco.
—No me iré a ninguna parte.
Salió del baño y se puso unos jeans azul claro con una blusa básica color café y unas botas igualmente cafés, que fue lo primero que se encontró en su closet. Abrió la puerta y la cerró detrás de sí antes de que él hablara y Zayn los escuchara. Tenía que preguntarle de qué había sido todo eso en la fogata y probablemente golpearlo un poquito, y Zayn no tenía por qué oírlo.
Arrastró a Louis hasta las escaleras y miró el reloj de la pared que había en el pasillo. Eran pasadas las tres de la mañana, pero por lo que le habían dicho ese día se suspendía el toque de queda y la responsabilidad caía totalmente en los alumnos. Algo le decía que más de la mitad del instituto faltaría a clases al día siguiente.
Suspiró y miró a Louis a los ojos, notando que él tenía los labios apretados en una fina línea. Estaba nervioso.
—Será mejor que te expliques. —dijo ____________, cruzándose de brazos.
Louis soltó el aire que había estado conteniendo desde que ella salió.
—¿Explicar qué? —preguntó, haciéndose el inocente. ___________ soltó un bufido de exasperación.
—Pues la última vez que revisé, sí sabías que estaba en esta academia. Lo has sabido desde que entré. De hecho, estoy bastante segura de que tú convenciste a mi mamá de que me metiera aquí. Y, para que lo sepas, mi instinto me dice que nunca fui tu ex porque, ya sabes, ERES EL EX DE MI HERMANA. —gritó, furiosa. En el momento se había confundido y le había seguido el juego pensando que tenía alguna buena explicación para todo eso. Esperaba que así fuera.
Louis se llevó una mano a la nuca, sin saber muy bien qué decir.
—Hablando de Allie, ¿cómo está? ¿Está bien?
_________ lo miró con una cara que gritaba “¿estás hablando en serio?”.
—Sí, está bien. Pero ya nadie le dice Allie, Louis. Prefiere su nombre completo, Alice. Y es hora de que la superes. Ya pasaron dos años.
—Alice suena bastante formal. —contestó él, arrugando un poco la nariz y decidiendo ignorar el comentario de _________ sobre superarla.
__________ se encogió de hombros.
—Pues a ella le gusta. Ahora, volvamos al tema. ¿Qué ocurrió ahí, Lou?
Louis la miró por unos segundos, en los que la paciencia de __________ disminuía cada vez más. Finalmente, Louis habló.
—Creo que necesitas sentarte —ambos se sentaron en uno de los escalones—. Es sobre Harry y Zayn.
—Lo supuse. —_________ hizo una mueca. Sabía que tenía que ver con ellos, pero no sabía hasta qué punto.
—Lo que quiero decir es que… no son buenos para ti, __________.
____________ le dio un codazo.
—Se cuidarme, Lou. Ya no necesito que tú o Alice lo hagan por mí, tranquilo. No pasa nada.
—No, no. No estoy hablando de eso. Necesito que te alejes de ellos.
___________ notó la desesperación en su voz, pero aun así no pudo evitar enojarse.
—¿Por qué? ¿Trafican órganos? ¿Están en alguna clase de negocios de trata de blancas? Si no mal recuerdo, Harry es tu mejor amigo. Y Zayn por lo menos es tu amigo. ¿Por qué ahora quieres que me aleje de ellos? —preguntó, con un tono de irritación casi palpable.
Louis había sido el amigo sobre-protector con ella desde que tenía dos años y se mudó a la casa de al lado en Chapel Hill. Pero se había transformado en su hermano mayor en los once meses que duró su relación con Alice, su hermana. Después de eso se mudó a Sussex para estudiar en Milton, aunque siempre mantuvo una buena relación con los padres de __________, y por eso había tenido cierta influencia en su decisión sobre mandarla a Milton.
—Lo he querido desde que empezó el curso. Sólo que no sabía cómo decirlo —dijo, pasándose una mano por el cabello y pensando qué decir a continuación—. Sólo… no te involucres tanto, ¿si, __________? Porque he notado que estás llegando a ese punto.
__________ soltó una exclamación, casi indignada.
—¡Claro que no!
Louis mantuvo la vista en el suelo cuando dijo:
—Tus gritos se escuchaban hasta el primer piso —__________ se quedó boquiabierta por unos segundos—. Y no creas que Harry no me ha contado lo que pasó. Soy su mejor amigo. —eso la dejó aún más perpleja. Genial. Ahora la persona que la conocía de toda su vida y que la había visto llorar y decir “¡qué asco!” la primera vez que un niño le había dicho que le gustaba, probablemente pensaba que era una fácil.
Miró hacia la pared, repentinamente interesada en el color blanco, y se aclaró la garganta.
—Yo… uh…
—No necesitas explicarme nada. Sólo hazme caso. Aléjate mientras puedas. —la miró con esos ojos de perrito que siempre le ganaban la última galleta en las reuniones de vecinos. Pero esta vez no se dejó intimidar.
—No.
—¿No? —preguntó con un gesto de confusión.
—No. No quiero. Me gustan, Louis. ¿Qué tan difícil es eso de comprender? —se llevó los dedos a las sienes, masajeándolas. Pelear con la gente que quería siempre la ponía de malas.
—Pero están jugando contigo, __________.
—Si acaso yo estoy jugando con ellos, Lou. Estoy con uno y después con otro y esto parece mesa de ping-pong. No los culpes, es mi culpa. —en el momento en que lo dijo supo que era cierto. ¿Qué estaba haciendo? No podía ir por ahí haciendo horarios sobre con quién estar. “A las once y media con Zayn y luego hago un hueco a la una para Harry” no sonaba muy bien.
En los pocos segundos que le tardó decir eso, Louis abrió la boca para decir algo, pero la cerró para esperar que ella terminara de hablar. Al escuchar la última frase, sencillamente explotó.
—¡DÁTE CUENTA, ____________! ¡ERES UNA APUESTA!
Volvió a cerrar la boca en el momento en que las palabras salieron. Harry lo mataría. No volvería a hablarle nunca en la vida. Pero tenía que hacer algo. Miró a __________, notando como la confusión y el miedo llenaban sus ojos.
—¿De qué estás hablando?