UNDRESS ME (HOT) (Zayn Malik y tu)

Ahhhhhhh!!! ( es un ahhhhhhh tierno ) se extrañan! :lloro:
TONTA DE LA RAYIS!! Regresa te extraña!!!

holaaaaa debes seguir la nove peroo yaaaaaaaaaaaaaaa o morireeee siguela siguelaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa me encantaaaa

Capítulo Sesenta y Siete.
Me apoye en la puerta y me escurrí hasta el piso de la habitación, abracé mis rodillas y empecé a sollozar, estaba tan triste y lo extrañaba, pero él la había mirado de esa manera; como si estuviera coqueteando con ella, conocía esa mirada y aunque él dijera que no era así, yo sabía que él lo había hecho, había coqueteado con ella.
Tocaron la puerta.
-____________- Dijo Liam –Ábreme, por favor.
-Liam- Aspiré para calmarme –Sólo déjame sola.
-____________- Dijo él, con un tono que no admitía discusión.
Me levanté y abrí la puerta, Liam entró en la pequeña habitación, se sentó en el piso y me invitó a sentarme con él, cuando lo hice me miró a los ojos y dijo:
-Cuéntame qué es lo que pasa- Sonrió, para animarme.
-Pues es esa chica, la del club- Sollocé –Y sé que me equivoqué al terminar con Zayn, pero no estoy lista para admitirlo y él sigue insistiendo en buscarme y en besarme, y me confunde tanto. No sé qué hacer Liam.
-Pues puede que haya coqueteado con esa chica- Dijo él –Pero lo cierto es que te extraña, y mucho. Además, no es que le haya sentado muy bien la manera en que terminaste con él.
-Ya te dije que sé que cometí un error- Respondí –Lo sé. Pero me da tanto miedo admitirlo, admitir que me equivoqué, que lo quiero de vuelta, que me muero de los celos de imaginarlo con esa chica, que me rechace.
-No lo hará- Si te busca es porque no te va a rechazar. Sécate esas lágrimas y sal de aquí, para que Zayn pueda estar tranquilo y se concentre en el concierto, vamos.

My god! Siguela siguelaaaaaaaaa


Me encanta la noveeee

siguela siguelaaaaa

Capítulo Sesenta y Ocho.
Cuando terminó el concierto me senté sola en el camerino de los chicos, necesitaba pensar en lo que había dicho Liam, en lo que había hecho Zayn, en cómo me hacía sentir estar lejos de él. Encontré una de las camisetas de Zayn, era verde con un estampado de calavera, olía como él a Ferrari y a Gucci. Suspiré.
Quería estar con Zayn, pero todo ese odio solo por estar con él era algo que no necesitaba, eso era lo que me había alejado de él, y no sabía cómo se tomaría el que yo quisiera tenerlo de vuelta en vida, sí había pedido tiempo para pensar, y él, a su modo, me la había dado; pero siempre llegaba a la conclusión de que personas que no me conocían no podían juzgarme y decir que sólo me interesaba su fama y su dinero, pero los comentarios dolían estaban ahí, no porque de verdad importara lo que esas personas dijeran, sino porque había una posibilidad de que Zayn terminara creyéndolo y eso me asustaba.
Por otra parte sabía que siempre harían el mismo comentario, cuando estás con uno de los chicos más famosos del mundo, es lo que pasa; digo, una completa desconocida empieza a salir con un chico que lo tiene todo y que además las puede tener a todas y muchas de esas otras chicas empezarán a hablar, está claro. Solo que no creí que me afectaría tanto.
Y por supuesto estaba la parte de mí que siempre me había dominado, a la cual no le importaban mucho esos comentarios y solo quería estar con la persona que ama, esa parte de mí que ahora se negaba a salir, cuando más la necesitaba.
Así que decidí que para el día de la fiesta de Cher, a la cual asistiría mucha gente y yo era invitada VIP; debía haber tomado una decisión.
Así fue como llegó el día de la fiesta, entre la duda y la seguridad, un momento sabía lo que quería al otro no estaba tan segura de que fuera eso. Sentía que las dos direcciones en que podía ir mi vida, tiraban de mí, estaba a punto de volverme loca.
Estábamos reunidas en casa de Cher como habíamos quedado, y empezamos a arreglarnos desde temprano pues teníamos que aplicarnos varias capas de maquillaje y además estaban los vestidos, las medias y además las pelucas.
Mientras los peluqueros y maquilladores se encargaban de aplicar el maquillaje que asemejara el de la época de Marie Antoniette y de ponernos las pelucas, que gracias a los cielos, no eran tan aparatosas como las de ese tiempo, se acercaba cada vez más a la hora en la cual tendría que tomar mi decisión, aunque aún no sabía cuál sería.
Cuando al terminar de arreglarnos para la fiesta me miré al espejo no me reconocí en un principio. El vestido era verde menta de corsé ajustado hasta la cintura y falda amplia, el escote era uno de esos que resultaban realmente favorecedores cuando tienes senos pequeños, la falda quedaba un poco más arriba de la mitad del muslo, las mangas del vestido eran de tul hasta la muñeca y las medias blancas con moño del mismo color del vestido además de los zapatos, otra cosa era la peluca era una extravagante creación blanca adornada con flores del mismo tono verde.
-¡WOW!- Exclamé. Estaba sin palabras. Ahora sí que no tenía idea de que podía ocurrir.

siguela siguelaaaaaaa siguelaaaaaaa me encanto el cap!!!!!

Siguela perdón por no comentar es que estaba castigada! Siguela

Capítulo Sesenta y Nueve.
Me sentía cómoda con el vestido, las medias y todo, lo único que no encajaba conmigo era la peluca, pero era una fiesta de disfraces y este era el tema.
Cuando llegamos al salón ya había unas cuantas personas que yo no conocía, y a las cuales Cher nos presentó tanto a Allison como a mí. La gente seguía llegando y yo sabía que en cualquier momento los chicos de One Direction también lo harían y con ellos Zayn, cada minuto me ponía más nerviosa. Incluso llegué a pensar que no vendrían porque ya había mucha gente y ellos aún no aparecían.
Pero mis dudas fueron despejadas cuando en un determinado momento, estando Cher, Allison y otras amigas más hablando, bailando y tomando un poco de champagne, Allison llamó mi atención y al voltear los ví entrar uno a uno en el gran salón estilo siglo Luis XVI.
Sus disfraces eran réplicas exactas de la ropa de la época, pero los colores oscuros demostraban que eran chicos salidos directamente de los 90’s. El disfraz de Zayn era negro, de estilo militar y con ribetes dorados en la pechera de la levita; me quedé mirándolo como atontada, y él parecía buscar a alguien por la manera en que recorría el salón con los ojos. Allison había visto a Harry; y me arrastraba con ella en dirección de los chicos, de Zayn, eso era lo único en lo cual yo podía pensar.
Cuando llegamos frente a ellos me quedé de piedra, Zayn me estaba mirando con intensidad, como si hubiera estado esperando este momento desde hace mucho. Sentí como la sangre subía a mis mejillas, era increíble que después de todo lo que había pasado entre nosotros él aún tuviera el poder de ponerme nerviosa. Allison se arrojó a los brazos de Harry como si tuvieran tres meses de no verse, se habían visto la noche anterior, y yo por mi parte, bajé la cara tratando de evitar los ojos negros de Zayn.
Saludé a Niall, Liam y Louis; por último y cuando fue completamente inevitable me acerqué a Zayn y lo saludé con un pequeño beso en la mejilla como había hecho con los demás, pero él rodeó mi cintura con sus brazos y me apretó contra su cuerpo, haciéndome sentir el calor que emanaba de él. Pasé mis brazos alrededor de su cintura y nos quedamos así unos segundos, hasta que los demás chicos, incluidos Allison y Harry se sumaron a nosotros al grito de “Abrazo Grupal”.

Jajajaj! Que lindo! Que hermoso! Es tan.... PERFECTO! Que vuelvan que vuelvan!!! Siguela besos

pero q cap tan lindoooo ! es perfectoooo me encanto siguela prontoooo me encantaaa

Capítulo Setenta.
Había estado tan cerca de Zayn que su perfume se había impregnado en mi vestido y en mi peluca, hacía que no podía evitar sentir que el chico que usaba Ferrari Black y Gucci by Gucci estaba a mi alrededor. Me alejé de ellos, trataba de pensar y tenerlo cerca me lo impedía, sentía su mirada en mí cada que estábamos cerca el uno del otro, y la gente a mi alrededor estaba cada vez más pasada de tragos; Cher estaba atendiendo y saludando a sus invitados y Allison estaba con Harry; situación que me dejaba solo dos opciones: La primera, quedarme con los chicos y probablemente con Zayn; y la segunda, la soledad, vagar sola por los alrededores de la fiesta. Escogí la segunda.
Empecé a pasearme entre la gente, detallando los trajes en mi mente y tomando notas de quienes, según mi criterio, habían acertado con su elección y quiénes no. Pero constantemente Zayn seguía entrando en mis pensamientos; y el hecho de que se hubiera sentido tan bien cuando me abrazó no ayudaba en nada. Me acerqué a la barra y pedí otra copa de champagne, tenía que dejar de tomar, ya llevaba 3 y empezaba a sentir los efectos. Así que me dije que ésta sería mi última copa. Me senté en la barra y cuando el chico me entregó mi copa me quedé allí tomándola, pasados unos 5 minutos Zayn llegó también a la barra y se sentó a mi lado.
-_________- Dijo mi nombre –Necesitamos hablar, ya basta con esto de evitarme.
-Éste no es buen lugar- Respondí.
-Ya lo sé- Sus ojos miel se clavaron en mí –Cuando terminemos nuestras bebidas buscaremos un lugar más tranquilo. Por cierto, lindo escote.
Miré mi pecho, pues sí, él tenía razón mi escote se veía bien en este vestido, pero si tienes un corsé por pequeño que sea tu busto tu escote lucirá genial.
-¿Gracias?- Lo miré confundida.
-No tienes que dar las gracias, es la verdad- Se acercó a mí –Aunque entre nosotros, siempre me gustado tu escote.

Jajajaja! Que lindo siguela! Estoy segura de que regresan y si no te voy a jalar las patas en la noche con elmo

Capítulo Setenta y Uno.
Al terminar nuestras bebidas Zayn tomó mi mano y acarició mis dedos con suavidad, se levantó y se ubicó frente a mí.
-Luces como un pirata- Dije sin pensar, el champagne hablaba por mí.
-¿Y eso es bueno o malo?- Preguntó Zayn. Mirándome intensamente.
-Bueno, teniendo en cuenta de que serías un pirata muy atractivo- Bajé la mirada. Él tomó mi barbilla con delicadeza, para hacer que lo mirara.
-Ven- Tomó mi mano con firmeza y me guio hasta una pequeña habitación que estaba pasando un largo pasillo.
La habitación estaba decorada, como el resto del salón, con hermosas piezas que evocaban todo el esplendor del palacio de Versalles, con sofás, chaise longes y un escritorio que presidia el espacio. Era como viajar en el tiempo.
Bajé la mirada, sonrojada, mientras Zayn me atravesaba con la mirada, sus ojos miel fijos en mí. Empecé a jugar con el dobladillo de la falda de mi vestido a medida que sentía a Zayn acercarse a mí.
-¿Dejarás de huir?- Preguntó.
-Estás bloqueando la puerta- Sonreí, mirándolo a los ojos –Así que, aunque quisiera, no podría; y tampoco quiero hacerlo.
-Qué bueno- Suspiró –Te extraño, tus libros, tu ropa, tu voz, extraño estar contigo.
-Y yo a ti- Dije –El asunto es que; bueno… Me asusté. Estaba aterrorizada, completamente, por todo lo que había pasado y no sabía que otra cosa hacer.
-No huir, esa habría sido una buena opción- Tomó mis manos, y me haló hacia sí, me rodeó con sus brazos y yo apoyé mi cabeza en su pecho, lentamente empezó a buscar mis labios y cuando nuestros labios se tocaron sentí como surgía una corriente eléctrica entre nosotros haciendo que mi piel se erizara.
-Y también extrañaba eso- Dijo contra mis labios, refiriéndose a mi erizada piel.
Enredé mis brazos alrededor de su cuello y mis piernas alrededor de su cintura, había llegado a pensar que nunca experimentaría eso de nuevo, pero él estaba allí besándome, conmigo y no quería volver a estar sin él. Zayn caminó haca el escritorio que estaba en el centro de la habitación con mis piernas aún alrededor de su cintura, me sentó en el escritorio y, a medida que besaba mis labios, empezó a acariciar la piel desnuda de mis muslos, llegando justo al borde de mis medias, profundicé el beso, acercando más nuestros cuerpos, hasta que nuestras pelvis estuvieron separadas solamente por nuestra ropa, empecé a soltar los botones de su chaqueta y en ese momento la puerta de la habitación se abrió dando pasó a Cher que venía riendo y tomada de la mano de Craig, cuando se dio cuenta de lo que pasaba me miró significativamente y soltó una sonora carcajada, yo sólo pude saltar del escritorio y esconderme tras la espalda de Zayn, mientras ella decía:
-Te lo dije, Malik- Sonrió, se dio la vuelta, se llevó a Craig; agregando –Dejemos a los tórtolos.
-Y: ¿Eso qué significa?- Lo miré a los ojos.

Capítulo Setenta y Dos.
Zayn se acercó a mí y susurró de manera sugerente en mi oído:
-Vamos- Sentí sus labios pegados a mi oreja –Sino terminaré haciéndote el amor en ese escritorio.
Un escalofrío recorrió mi espalda cuando pronunció esas palabras, luego él tomó mi mano y nos guio fuera del pequeño estudio, cuando llegamos donde estaban los demás chicos empezaron a gritar porque estábamos tomados de la mano; yo no puede evitar sonrojarme, mientras sentía cómo Zayn acariciaba mis nudillos con su pulgar en un intento de calmar mis nervios. Pero el sonido de sus palabras y la sensación de sus labios en mi oreja me hacían sentir ansiosa, quería que se acabara la fiesta solo para poder estar a solas con él y mirar a sus hermoso ojos miel, eso era lo que más necesitaba.
Nuestras miradas se encontraban constantemente mientras estábamos sentados a la mesa con los demás chicos que seguían jugándonos bromas con respecto a que estuviéramos tomados de la mano; pasó un rato y Zayn habló en mi oído:
-Vamos a bailar- Se levantó delante de mí y me haló.
Mientras caminábamos hacia la pista de baile podíamos ver a las personas a nuestro alrededor besarse y bailar de una manera que, por momentos podía llegar a resultar demasiado provocativa. Zayn rodeó mi cintura con sus brazos y me acercó a su cuerpo de esa manera algo brusca pero tan sensual en que siempre hacía cuando quería atraer mi atención. Nos empezamos a mover lentamente al ritmo de “She Wolf” de David Guetta. Sentí como nos desplazábamos lentamente por la pista hasta que mi espalda chocó con lo pared y los labios de Zayn se encontraron con los míos, abrí la boca para dar paso a su lengua tibia y un poco áspera; mientras enredaba mis dedos en su cabello suave y negro. Sus manos recorrían mi espalda hacia arriba y hacia abajo, cuando nos separamos buscando aire vi la intensidad de su mirada y cuando presionó su cadera contra mi cuerpo pude sentir la erección que había crecido dentro de sus pantalones, jadeé y traté de empujarlo un poco, pero no dio resultado. Sentía ese calor espeso asentarse en mi vientre y despertar todas las terminaciones nerviosas de mi cuerpo mientras la gente a nuestro alrededor seguía bailando mientras mi mente iba quedando en blanco con cada pequeño roce de los labios de Zayn.
Luego de que pasaran tres canciones él dijo:
-Vámonos a mi casa- Estampó un beso en mis labios –Por favor.