Las reglas de Izzie (One Direction)

No sabía qué hacer, por primera vez en una semana me sentía vacía. Ya no estaba esa sensación de plenitud y tranquilidad que tenía desde que habíamos ido al hospital, ya no. Ahora tenía miedo de perderlo, aunque según sus propias palabras, ya lo había hecho, y era todo por mi culpa.
-Pase –susurré cuando tocaron la puerta de la habitación de Matt.
-Izzie –dijo Niall, caminando rápidamente hasta mí. –Creí que te habías ido… vine porque olvidé mi chaqueta y Vanessa quiere que nos vayamos. ¿Estás bien?
-No…
-Escucha… lo que sucedió entre nosotros, no puede volver a repetirse nunca. Tengo novia, y no te mentiré diciendo que la amo… porque no es así, pero…
-¿Un error? –genial, había arruinado mi “amistad” con Harry por un estúpido error y recién ahora lo notaba.
-Si… estabas borracha, y Vanessa estaba molesta conmigo…
-Entonces tuviste sexo conmigo porque tu estúpida novia estaba enfada contigo… Genial, te entregué mi virginidad y perdí a Harry por nada…
-¿Harry? Izzie, ustedes no estaban realmente juntos. ¿Lo entiendes verdad? Y, además, que tiene que ver él en este asunto.
-Harry sabe que nos acostamos. Bueno… no sabe que me acosté contigo…
-Uf, gracias a Dios. –dije visiblemente relajado. -¿Se enfadó contigo porque dormiste con alguien más?
-Me odia..
-No tiene porque, ustedes no estaban juntos.
-No, pero había algo… y no lo había notado hasta ahora. –dije sollozando. Jamás creí que me daría cuanta de esta manera que si quería a Harry como algo más que un amigo.
-Mira… no puedo hacer nada para ayudarte por el momento… debo irme o Vanessa vendrá por mi y te encontrará semi desnuda… créeme que puede ser una completa bruja cuando se lo propone y no quiero que su odio caiga sobre ti. –dijo tomando su chaqueta y caminado hacia la puerta, sin siquiera mirar atrás. –¡Ah! Una cosa más… No se lo cuentes a nadie... digo lo que acaba de pasar aquí, ni siquiera a tus amigas… por favor.
Definitivamente había cometido un error al tener sexo con Niall, no es que fuera horrible, porque ni siquiera eso podía recordar, pero estaba muy claro que para él solo había sido eso… sexo y por despecho. Mientras que para mi había sido algo más, y por ese algo mas había perdido, al posible, único ser humano que sería capaz de sentir algo por mí.
-Lo prometo. –murmuré. Lo único que hizo Niall fue sonreír de medio lado y después salir de allí sin mirar ni una sola vez en mi dirección.
Si, había sido un terrible, terrible error.

***

Lexie.

-¿Dónde está Izzie? –pregunté a Harry, quien justo estaba bajando las escaleras. -¿Estás bien?
-No –dijo sin más. Se notaba que había estado llorando, pues tenía los ojos rojos y las mejillas brillando por el rastro de las lágrimas. –Izzie está en la habitación de Matt… tercera puerta por la izquierda.
-Gracias- dije, pero él ya no podía escucharme, pues se había ido.
Subí rápidamente las escaleras. Quería saber que había sucedido con mi amiga y su novio… si él estaba llorando significaba que Izzie también podría estarlo.
Golpeé repetidas veces la puerta, pero nadie salió por lo que decidí solo entrar. Pero para mi sorpresa nadie estaba allí, solo había una cama muy desordenada, sin duda había sido utilizada y no precisamente para dormir.
Salí rapidamente de allí para seguir buscando a mi amiga. Estaba preocupada pues a pesar de que ella siempre fue el apoyo de todas nosotras, también era una persona muy sensible y si había discutido o terminado con su novio, debía estar muy mal.
Luego de aproximadamente media hora buscándola por toda la casa, y sin éxito, por supuesto, decidí salir al enorme patio trasero. Sin duda era uno de los más grandes que había visto en mi vida, lleno de enormes árboles y flores, con una enorme piscina en el centro de esta. Era realmente hermoso, y lo hubiese sido aun mas sin todas esas parejas prácticamente teniendo sexo al aire libre. Intenté esquivarlos a todos mientras buscaba con la mirada a Iz, pero nada. No había ningún tipo de señal de donde podría estar y para mas no respondía el teléfono.
-¿Lexie? –escuché tras de mí. Giré lentamente, pues habría reconocido su voz en cualquier lugar del mundo.
-Louis –dije, comprobando mi teoría. Mi ex novio secreto estaba aquí.
-¿Qué haces aquí? –preguntó, incluso más confundido que yo.
-¿Yo? ¿Qué haces tú aquí?
-Es el cumpleaños de Matt. –como si eso lo explicara todo.
-¿Y como se supone que conoces a Matt?
-Matt… es mi compañero de curso. –dijo, prácticamente burlándose de mí. -¿Y tú?
-Matt me invitó… ¿Y como se supone que eres compañero de Matt, si tú no vas en la escuela?
-Ahora sí. – Sonrió –Me cambié de instituto la semana pasada, querida Lexie.
-¿Qué? No, tú no puedes hacerme esto.
-¿Hacerte qué? Yo solo vine a estudiar. Ahora… debo irme, mi cita me está esperando. –señaló a una rubia, delgada y muy linda chica sentada a pocos pasos de nosotros. –Si me disculpas, debo terminar mis asuntos pendientes con Amy.
-Espera… -le agarré el brazo. –Nadie, escúchame bien… nadie sabe que tu y yo tuvimos una relación, ¿entiendes? Nadie. Así que, por favor, mantén el secreto.
-¿Me estas pidiendo un favor McCoy?
-Te odio. –dije entre dientes, pues sabía que su silencio tendría un precio.
-Y yo. –dijo sensualmente. –Te espero el lunes, después de la escuela, en mi departamento. Tu sabes donde es. –giñó el ojo. –Te espero hermosa.
-Te odio. –repetí.
-Lo sé.

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