Desearía nunca haber cresido

Nombre: Neidy
Autor: Yo, Neidy
Adaptación: No
Género: General
Otras páginas:No
Advertencias: Ninguna

Desearía nunca haber crecido
Querida Sue.
Louis ven a conocer a tu pequeña hermana- Dijo mi madre con un rollo de tela en sus brazos, yo solo asentí y fui hasta donde ella se encontraba, allí estabas tu, envuelta en tela rosa, con tus mejillas rosadas y tus pequeños ojos cerrados, parecía que si te tomaban muy fuerte podrías romperte, yo solo tenia 6 años y no podía ni siquiera imaginar como pudiste haber nacido.
Sue –Susurre, mama giro confundida y sonrió – pequeña Sue
Recuerdo ese día perfectamente, no podía dejar de verte, cuando lloraste llore contigo, abriste tus pequeños ojos y yo grite con alegría ‘Mira mama, abrió los ojos’ nuestra madre solo rio y yo comencé a hacerte caras raras para que rieras hasta que mama dijo ‘Pequeño Loui, los bebes tardan al menos un mes para reír y la pequeña Sue solo tiene 3 días de nacida’ yo asentí pero seguí tratando de hacerte reír.
Tenias ya casi 1 año y ya yo tenia 7 años, eras mi pequeña princesa, mi pequeña hermanita, mi tesoro personal, eras lo que siempre había querido, una persona mas pequeña que yo para poder ser su superhéroe, ya decías ‘Mama’ ‘Papa’ y mas nada, yo estaba muy triste, esa tarde había pasado casi 3 horas diciéndote ‘Loui’ y tu solo reías, pensaba ‘Ahora si ríes cuando quiero que digas mi nombre’. Ya cansado me acosté a tu lado y tu comenzaste a jalar de mi cabello, yo te regañaba y tu reías, no te podía hacer nada, solo tratar de sacar tus manos de mi cabello pero quede congelado cuando gritaste ‘Boo Bear’. Sonreí, sonreí tanto que me dolían las mejillas, me acababas de llamar Boo Bear, estaba más que contento corrí al cuarto de mama y le grite: ‘ME ACABA DE LLAMAR BOO BEAR’
Ya tenías 2 años y aun te costaba caminar, yo estaba en clases y llegaba a las 3 en punto de lunes a viernes, duraba casi toda la tarde ayudándote a caminar, ya quería que fueras lo suficientemente grande para poder ir al parque y jugar contigo todo el día a el superhéroe, ese día llegue un poco mas temprano y fuiste directo hacia mi caminando y a la misma vez diciendo Boo Bear, ese día estabas atrás mío para cada lado que iba, era maravilloso tener a alguien con quien jugar después de 6 años solo, Papa susurra: ‘Louis se comporta como todo un padre y solo tiene 8 años, me siento un poco celoso’ ellos reían y yo seguía jugando contigo hasta que te cansabas y hacia rápido mi tarea para poder después que despertaras seguir jugando.
Habían pasado los años y estábamos frente a tu nuevo colegio que quedaba a dos cuadras del mío, llorabas desconsolada en mi hombro mientras te cargaba. Tenías 5 años y yo 11, era tu primer día de clases y no querías entrar a ese lugar, solo llorabas y me susurrabas al oído ‘Boo no me dejes en este horrible lugar’ yo luchaba contra las lagrimas que amenazaban caer pronto de mis ojos, me destrozaba verte así, de tu superhéroe pasaba a ser el villano al dejarte en brazos de mama y me iba al auto, ya no aguantaba las ganas de llorar y no quería llorar frente a nadie.
Ahora tenias 8 y yo 14, estabas bailando por toda la casa con tu pijama de unicornios, riendo como me encantaba, ya no jugábamos mas, era obvio, ahora salía con mis amigos y me separe un poco de ti pero aun amaba como eras, tan niña, tan infantil. A veces te envidiaba, yo no podía hacer nada de eso, yo estaba creciendo, tenia que madurar y dejar al niño a un lado, estudiar para ir a una buena universidad mientras tu solo te preocupabas por la hora para poder ver Barney o algún tu programa favorito o que mama fuera a tu habitación cada noche a taparte con tus sabanas y prender tu pequeña lámpara que tenias en tu mesita de noche, y yo no podía hacer nada de eso, me sentía tan estúpido cuando tenia esos pensamientos y reía solo.
LOUIS DAME MIS COSAS- Gritabas detrás de mi puerta con algún objeto con el que me golpearías, yo reía a carcajadas, a esta edad era fascinante molestarte, tenias 12 años y yo 18, no me quedaba mucho tiempo en esta casa y quería estar todo lo que pudiera contigo, de cualquier modo y era feliz, cuando discutíamos, cuando jugábamos, cuando te enojabas con Clarie tu ‘Mejor Amiga’ y cuando me contaste que te gustaba Matt, un chico dos años mayor que tu, estaba muy molesto, sentía que me dejarías a un lado por ese tal Matt, aunque tenias 12 años eras mi pequeña princesa, la chica que necesitaba a un superhéroe y ese era yo, solo que tu ahora tenias otro punto de vista, ya yo no era tu superhéroe ahora lo era Matt, ya se estaba haciendo hora, dentro de poco tiempo me tendría que ir.
YO SOLO QUIERO CRECER E IRME DE ESTA CASA- Gritabas mientras corrías enojada hasta tu cuarto y cerrabas la puerta tan duro que los cuadros se estremecieron, fui hasta donde se encontraba mi madre llorando, era la primera vez que decías eso, estas atravesando esa etapa que solo quieres es crecer e irte de acá, tienes 14 años y es comprensible, fui hasta donde se encontraba mama y la abrace, era el único hombre de la casa después del divorcio de nuestros padres, luego de un rato fui a tu habitación, necesitaba hablar contigo
¿Podemos hablar?- entre poco a poco a tu habitación luego de que asentiste sentada frente a tu laptop -¿Qué paso allá afuera?- giraste tu silla y te lanzaste encima mío
Quiero ir al cine con Matt y mama no me deja ir- te brillaban los ojos cuando hablabas de Matt que después de tantos meses lograste que se acercara a ti y se enamorara de ti, ¿Quién no lo haría? Eres un encanto Sue, desde que naciste lo eres
No debiste tratarla así Boo- me miraste confundida y giraste tu cabeza a otro lado- No estoy 100% de su lado Boo, mama esta sola y tu eres lo único que tendrá acá en casa –giraste rápido tu cabeza e ibas a decir algo pero te calle rápido- ya crecí Sue, es el momento que yo debo irme de acá y tener mi propio espacio, no es que me moleste estar aquí, es mas desearía nunca haber crecido y que tu tampoco lo hubieras echo y seguir jugando en el parque- Vi unas cuantas lagrimas salir de tus ojos y las seque rápido- Pero Sue desgraciadamente así es la vida y en algún momento tu también te iras, pero ¿te puedo pedir algo?- asentiste aun derramando lagrimas- Aunque quieras, trata de no crecer.
Sue P.D.V
Luego de 4 años aun sigo conservando la carta que me envió Louis desde Alemania, aun lloro leyéndola, extraño tanto a Louis, mi Boo Bear, mi superhéroe. Recordando mi infancia en esta antigua casa, tomando fotografías con mi mente, extrañare esta casa y todo lo vivido en ella, cuando papa llegaba a casa y yo corría a sus brazos, cuando jugaba con Louis y el delicioso olor que salía de la cocina, bajando las escaleras recordando cada vez que corría hasta abajo con Louis para ver quien llegaba primero a comer o detrás de el con algún zapato luego de estar fastidiándome.
Pare en el umbral de la puerta principal y deje mis maletas abajo y gire para seguir tomando fotografías mentales ‘Nunca debí haber crecido’ murmure dejando ya la puerta atrás y entrando a mi auto, en el camino escuchando las mismas canciones que escuchaba al ir al colegio pero esta vez no seria igual, esta vez iría a mi nueva vida… sola.
Abriendo la puerta de mi departamento ya amueblado, viendo las pareces azules, si, todo se sentía frio acá, recorriendo todo el departamento encuentro mi habitación, dejando las maletas en el suelo y cambiándome, seria mi primera noche acá, ya no tenia nada, lo perdí todo, solo ahora puedo es taparme yo misma con mi gran sabana y enciendo la lámpara de mi mesita de noche pero antes de caer libre a los brazos de Morfeo recuerdo las palabras de Louis ‘Desearía nunca haber crecido’. Ahora ya lo entiendo, yo también desearía nunca haber crecido.