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Skin hecho por Hardrock de Captain Knows Best. Personalización del skin por Insxne.
Gráficos por y codes hechos por Kaffei e Insxne.
Gráficos por y codes hechos por Kaffei e Insxne.
Dark Reality {Louis Tomlinson}
O W N :: Archivos :: Novelas Abandonadas
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Dark Reality {Louis Tomlinson}
Ficha:
Nombre: Dark Reality
Autor: {Josie}
Adaptación: No.
Género: Drama&Romance.
Advertencias: Tiene algunas palabras subidas de tono.
Otras páginas: No.
Prologo
Aquel giro hizo que mi cuerpo se llevara hacia la puerta que estaba media abierta, sosteniéndome del tablero, y escondiendo mis pies en debajo de este, voltee hacia el castaño que estaba maniobrando el auto, en aquel momento vi como todo el mundo se puso de color rojo y azul, las patrullas se acercaban y mi corazón estaba temblando, sangrando y desborrándose, mi pulso estaba a mil por hora mientras que la avioneta nos aluzaba con su enorme faro blanco. Vi como el hombre que iba a mi lado, sudaba y me miraba de vez en cuando, trato de sostener mi mano pero la rechace, no la merecía, el no me respondió con la mirada, solo hizo una mueca y volvió a girar en la lavandería de aquel barrio, voltee hacia atrás y vi a el rubio viendo a nuestras espaldas junto a el moreno que estaban avisándole al castaño que venía a mi lado que se apresurara si no, nos alcanzarían, mi estomago dio un tirón cuando las patrullas, nos bloquearon y cuando trato de retroceder el auto, chocamos con otra patrulla, estábamos en el centro, no teníamos salida.
En aquel momento, todo fue tan rápido, blanca como un papel estaba, los recuerdos, y con un susurro.
-Lo siento.
El me miro con esos oscuros ojos para luego prender una mirada de asco en su rostro, lo descifro y en aquel momento una flamante luz blanca me llevo al pasado, al comienzo de esta tortura, donde había conocido al hombre de mis sueños, aquel testarudo hombre que me había llevado a la cima en aquella noche especial, donde sus caricias y sus besos me habían dado en el blanco de mi vida, donde las piezas de mi corazón se habían juntado, donde aquel momento feliz estaba hecho para mi, donde la luz brillaba y mis amigos, mis verdaderos amigos aquellos que me había hecho en aquel viaje, se volverían especiales en mi vida, los había traicionado. A ellos y a el amor de mi vida, ¿Cómo me perdonarían?, ¿Lo harían?, ¿volverían a confiar en mí?, ¿Cómo fue que pude hacerles esto?, gracias a ellos había cambiado, gracias a ellos la verdadera Emily Sheppar, estaba saliendo a luz.
En aquel momento, todo fue tan rápido, blanca como un papel estaba, los recuerdos, y con un susurro.
-Lo siento.
El me miro con esos oscuros ojos para luego prender una mirada de asco en su rostro, lo descifro y en aquel momento una flamante luz blanca me llevo al pasado, al comienzo de esta tortura, donde había conocido al hombre de mis sueños, aquel testarudo hombre que me había llevado a la cima en aquella noche especial, donde sus caricias y sus besos me habían dado en el blanco de mi vida, donde las piezas de mi corazón se habían juntado, donde aquel momento feliz estaba hecho para mi, donde la luz brillaba y mis amigos, mis verdaderos amigos aquellos que me había hecho en aquel viaje, se volverían especiales en mi vida, los había traicionado. A ellos y a el amor de mi vida, ¿Cómo me perdonarían?, ¿Lo harían?, ¿volverían a confiar en mí?, ¿Cómo fue que pude hacerles esto?, gracias a ellos había cambiado, gracias a ellos la verdadera Emily Sheppar, estaba saliendo a luz.
{Josie}
Re: Dark Reality {Louis Tomlinson}
Capitulo 1
Todo estaba hecho pedazos, mi vida mi carrera, solo necesitaba un vacio para caer en el ya acabar con lo único que faltaba, mi vida. todo se hacía cada vez más difícil, ¿Cómo es que no aprendí de mi última lección?, ahora solo necesitaba salir a la afueras y sentir el frio aire darle una bienvenida a mi pálido rostro, pero mis piernas nos respondían, estaban de luto, querían quedarse y no salir nunca más, no querían correr, no querían caminar, querían descansar.
Escuche el teléfono sonar, pero mi estomago dio un retorcijón dándome a entender que no me levantara, que no descolgara el teléfono, solo seria nuevamente el ofician Carruso, informándome que mis cosas ya estaban en la calle y no querían volverme a ver en aquel departamento después de haber dejado escapar a uno de sus mejores delincuentes. Aquella noche parecía torturarme en mis sueños, en como mi cobardía me hizo quedarme paralizada. Sin que ninguno de mis músculos se moviera, ¿Cómo se hubiera sentido atraparlo?
El teléfono dejo de sonar pero no tardo en volver a sonar. Con el alma que lleva el demonio, descolgué el teléfono y me lo coloque en la oreja. Espere a que su voz me informara lo que mi cabeza pensaba. Pero el solo suspiraba entrecortadamente. No decía nada, hasta que chasqueo la lengua y dijo.
-Quiero verte en mi oficina esta tarde, a las cinco de la tarde. La junta tiene algo que decirte, te vamos a estar esperando Emily, no me defraudes, no defraudes a tu padre. –
-Estaré haya señor-
-Nos vemos, pequeña- colgó.
Defraudar a mi padre. Eso era lo menos que quería hacer en el mundo, voltee hacia el reloj y eran ya las tres de la tarde, me dedique a darme una ducha caliente mientras que comenzaba a pensar, ¿Para qué me querrían?, ¿Humillarme?, seguramente sería eso y yo iría poniéndome como una bandeja de plata para que aquello sucediera.
Cuatro de la tarde.
Con mi chaqueta negra, baje del auto y espere a que el tren llegara a la estación para irme al departamento, mientras que esperaba, algunas personas me miraban, y luego murmuraban entre ellas. Si yo fui la estúpida que dejo huir a aquel terrorista. Solo yo, la única policía torpe. Cuando escuche las vías del tren chirrear, sentí libertad, el tren se coloco frente a mí, se abrieron las puertas y escapando de aquellos susurro entre al tren que me llevaría, ahí nuevamente dentro del tren donde la cabina era aun más calurosa, mas hombres y mujeres me miraban, algunos me habrán visto en televisión, otros en periódicos o simplemente me habrán oído en la radio. Menudo día.
Llegue a las oficinas saludando a la recepcionista que me miraba con una enorme sonrisa, aquella mujer después de todo lo malo que le ha sucedido sigue con aquella mueca en su rostro, debo de confesar que cuando tenía días malo, quería borrarle aquella sonrisa de un golpe para que dejara de molestarme pero no lo hacía si no que reventaba la puerta con un fuerte golpe. Deje que los nervios dejaran de hacerme una mala jugada y poder subir al elevador que me llevaría a la sala de juntas. Cuando pique el piso, mis puños se tensaron y comenzaron a moverse como si tuviera algún mal, el elevador se paro en el piso siete, y unos cuantos colegas entraron al elevador saludándome, solo eso, sabían perfectamente mi carácter y tras lo sucedido será mejor no picar. Piso nueve, baje y suspire para dejar salir todas las tensiones, pero fue inútil, al entrar a la sala de juntas, los directores, el oficial y mi jefe o ex jefe, estaban en aquella mesa cuadrada donde podía caber todo el pueblo, todos me miraban, otros sorprendidos, otros con una sonrisa y simplemente otros con cara de aburridos.
-Siéntate por favor- me ordeno mi ex jefe. Hice lo que me dijo y me senté al frente de toda la mesa. Me sentía la directora, pero sabía que no lo era porque el director estaba en la otra punta. Me sentía como en un juzgado, en cualquier momento dirían mi sentencia, y sabía que no me gustaría. Necesito un abogado.
-¿Sabe porque está aquí, señorita Sheppar?- negué con la cabeza, torpemente. – John, por favor, lee. – enseguida mi jefe que vestía un elegante trague gris con una corbata negra se levanto de su asiento y tomo la carpeta blanca que tenia impreso el logo de las oficinas, este se acomodo su corbata, aclaro su garganta y se puso a leer.
Todo lo que decía, era lo que había sucedido aquella noche, cada palabra, cada suceso, nuevamente lo estaba viviendo, quería correr, quería escapar, quería que dejaran de leer, no quería recordar el cómo traicione a mi padre. John se detuvo y bajo la carpeta.
-Hemos tomado una decisión. Como ha de saber, tu puesto ha sido revocado, definitivamente, no puedes trabajar en ningún departamento de hoy en día- asentí, eso lo sabia no necesitaban recordármelo- Pero… hemos hecho un cambio a eso- fruncí el ceño, ¿De qué hablaban?- Emily. Mañana mismo puedes volver a trabajar, tenemos un nuevo trabajo para ti, que claramente no puedes echar a perder y ahora si puedes hacer a tu papa orgulloso, ahora por favor sal de la sala con la mayor discreción posible.
Con aquella última palabra, salí casi temblando, arrastrándome, pálida como las paredes que estaba atrapada. Cuando ya estuve fuera, lo único que pude hacer fue… bailar.
Dentro de la oficina, se hacían todos los directores, y este viejo le pregunto a mi jefe.
-¿Crees que tenga discreción?- mi jefe sonrió.
-Emily, nunca será discreta, jefe-
-¿Cómo podemos creerte?- en aquel momento, mi jefe se levanto de su asiento y recorrió la cortina del pasillo donde me veía bailando ridículamente entrando al elevador donde dentro pegue un fuerte grito.
-Como puede ver. Nuestra chica, nunca será discreta y eso es lo que necesito, una oficial, natural. Solo así caerá en el anzuelo de Tomlinson. Por Emily, atraparemos a Louis. Ese infeliz.
Escuche el teléfono sonar, pero mi estomago dio un retorcijón dándome a entender que no me levantara, que no descolgara el teléfono, solo seria nuevamente el ofician Carruso, informándome que mis cosas ya estaban en la calle y no querían volverme a ver en aquel departamento después de haber dejado escapar a uno de sus mejores delincuentes. Aquella noche parecía torturarme en mis sueños, en como mi cobardía me hizo quedarme paralizada. Sin que ninguno de mis músculos se moviera, ¿Cómo se hubiera sentido atraparlo?
El teléfono dejo de sonar pero no tardo en volver a sonar. Con el alma que lleva el demonio, descolgué el teléfono y me lo coloque en la oreja. Espere a que su voz me informara lo que mi cabeza pensaba. Pero el solo suspiraba entrecortadamente. No decía nada, hasta que chasqueo la lengua y dijo.
-Quiero verte en mi oficina esta tarde, a las cinco de la tarde. La junta tiene algo que decirte, te vamos a estar esperando Emily, no me defraudes, no defraudes a tu padre. –
-Estaré haya señor-
-Nos vemos, pequeña- colgó.
Defraudar a mi padre. Eso era lo menos que quería hacer en el mundo, voltee hacia el reloj y eran ya las tres de la tarde, me dedique a darme una ducha caliente mientras que comenzaba a pensar, ¿Para qué me querrían?, ¿Humillarme?, seguramente sería eso y yo iría poniéndome como una bandeja de plata para que aquello sucediera.
Cuatro de la tarde.
Con mi chaqueta negra, baje del auto y espere a que el tren llegara a la estación para irme al departamento, mientras que esperaba, algunas personas me miraban, y luego murmuraban entre ellas. Si yo fui la estúpida que dejo huir a aquel terrorista. Solo yo, la única policía torpe. Cuando escuche las vías del tren chirrear, sentí libertad, el tren se coloco frente a mí, se abrieron las puertas y escapando de aquellos susurro entre al tren que me llevaría, ahí nuevamente dentro del tren donde la cabina era aun más calurosa, mas hombres y mujeres me miraban, algunos me habrán visto en televisión, otros en periódicos o simplemente me habrán oído en la radio. Menudo día.
Llegue a las oficinas saludando a la recepcionista que me miraba con una enorme sonrisa, aquella mujer después de todo lo malo que le ha sucedido sigue con aquella mueca en su rostro, debo de confesar que cuando tenía días malo, quería borrarle aquella sonrisa de un golpe para que dejara de molestarme pero no lo hacía si no que reventaba la puerta con un fuerte golpe. Deje que los nervios dejaran de hacerme una mala jugada y poder subir al elevador que me llevaría a la sala de juntas. Cuando pique el piso, mis puños se tensaron y comenzaron a moverse como si tuviera algún mal, el elevador se paro en el piso siete, y unos cuantos colegas entraron al elevador saludándome, solo eso, sabían perfectamente mi carácter y tras lo sucedido será mejor no picar. Piso nueve, baje y suspire para dejar salir todas las tensiones, pero fue inútil, al entrar a la sala de juntas, los directores, el oficial y mi jefe o ex jefe, estaban en aquella mesa cuadrada donde podía caber todo el pueblo, todos me miraban, otros sorprendidos, otros con una sonrisa y simplemente otros con cara de aburridos.
-Siéntate por favor- me ordeno mi ex jefe. Hice lo que me dijo y me senté al frente de toda la mesa. Me sentía la directora, pero sabía que no lo era porque el director estaba en la otra punta. Me sentía como en un juzgado, en cualquier momento dirían mi sentencia, y sabía que no me gustaría. Necesito un abogado.
-¿Sabe porque está aquí, señorita Sheppar?- negué con la cabeza, torpemente. – John, por favor, lee. – enseguida mi jefe que vestía un elegante trague gris con una corbata negra se levanto de su asiento y tomo la carpeta blanca que tenia impreso el logo de las oficinas, este se acomodo su corbata, aclaro su garganta y se puso a leer.
Todo lo que decía, era lo que había sucedido aquella noche, cada palabra, cada suceso, nuevamente lo estaba viviendo, quería correr, quería escapar, quería que dejaran de leer, no quería recordar el cómo traicione a mi padre. John se detuvo y bajo la carpeta.
-Hemos tomado una decisión. Como ha de saber, tu puesto ha sido revocado, definitivamente, no puedes trabajar en ningún departamento de hoy en día- asentí, eso lo sabia no necesitaban recordármelo- Pero… hemos hecho un cambio a eso- fruncí el ceño, ¿De qué hablaban?- Emily. Mañana mismo puedes volver a trabajar, tenemos un nuevo trabajo para ti, que claramente no puedes echar a perder y ahora si puedes hacer a tu papa orgulloso, ahora por favor sal de la sala con la mayor discreción posible.
Con aquella última palabra, salí casi temblando, arrastrándome, pálida como las paredes que estaba atrapada. Cuando ya estuve fuera, lo único que pude hacer fue… bailar.
Dentro de la oficina, se hacían todos los directores, y este viejo le pregunto a mi jefe.
-¿Crees que tenga discreción?- mi jefe sonrió.
-Emily, nunca será discreta, jefe-
-¿Cómo podemos creerte?- en aquel momento, mi jefe se levanto de su asiento y recorrió la cortina del pasillo donde me veía bailando ridículamente entrando al elevador donde dentro pegue un fuerte grito.
-Como puede ver. Nuestra chica, nunca será discreta y eso es lo que necesito, una oficial, natural. Solo así caerá en el anzuelo de Tomlinson. Por Emily, atraparemos a Louis. Ese infeliz.
{Josie}
Re: Dark Reality {Louis Tomlinson}
HOLA HERMOSA , ME ENCANTO EL PRIMER CAPITULO SI NECESITAS CHICA PARA HARRY ME AVISAS SIGUELA PRONTO
moustache liuba
Re: Dark Reality {Louis Tomlinson}
yasmari vas happenin escribió:HOLA HERMOSA , ME ENCANTO EL PRIMER CAPITULO SI NECESITAS CHICA PARA HARRY ME AVISAS SIGUELA PRONTO
Me alegra que te haya gustado :hug: Claro si busco chicas, te pongo a vos :P
{Josie}
Re: Dark Reality {Louis Tomlinson}
oh Pobre Lou lo traicionan
me gusto
siguelaaaaaaaaaaa
yo te pido Liam <3
si puede ser
besos
tienes una fiel reader jajaj
me gusto
siguelaaaaaaaaaaa
yo te pido Liam <3
si puede ser
besos
tienes una fiel reader jajaj
maiira1D
Re: Dark Reality {Louis Tomlinson}
{Josie} escribió:yasmari vas happenin escribió:HOLA HERMOSA , ME ENCANTO EL PRIMER CAPITULO SI NECESITAS CHICA PARA HARRY ME AVISAS SIGUELA PRONTO
Me alegra que te haya gustado :hug: Claro si busco chicas, te pongo a vos :P
AUWWW GRACIAS TE DEJO MI FICHA
moustache liuba
Re: Dark Reality {Louis Tomlinson}
Kas! Me encantó, síguela cuando puedas. Me encantan todas tus novelas, soy fiel lectora, besooos! Si buscas chicas me avisas porfa? :love:
Mari1D
Re: Dark Reality {Louis Tomlinson}
maiira1D escribió:oh Pobre Lou lo traicionan
me gusto
siguelaaaaaaaaaaa
yo te pido Liam <3
si puede ser
besos
tienes una fiel reader jajaj
Que bueno que te guste linda.
No creo subir a Liam, pero veré que puedo hacer :D
{Josie}
Re: Dark Reality {Louis Tomlinson}
Mari1D escribió:Kas! Me encantó, síguela cuando puedas. Me encantan todas tus novelas, soy fiel lectora, besooos! Si buscas chicas me avisas porfa? :love:
:aah: Me alegra que te haya gustado.
Vale te aviso si necesito.
{Josie}
Re: Dark Reality {Louis Tomlinson}
Capitulo 2
La vida parecía darme una segunda oportunidad para vivir y ser una mejor persona o en este caso, no ser tan idiota y emplear mis años de estudio para atrapar a un delincuente. ¿Qué pensaría mi padre al enterarse que volvería a mi trabajo?, Que no me había despedido, si no que solo era una pequeña llamada de atención. Tras mi ridículo baile y una sonrisa no muy hermosa hacia la dientes de caballo que estaba escuchando los chismes diarios de los demás, me miraba por encima del hombro.
-¿Qué haces aquí Emily?, vienes a poner a otro delincuente en mis manos-
En aquel momento todos mis pelos picaban y quería lanzarme hacia ella para quitarle todo su falso cabello rubio, me di la media vuelta apretando mis puños y mirándome con sorna, aquella infeliz fue una de las causables para que el delincuente se me fuera, vi como sus comisuras de elevaban al igual que sus cejas.
-¿Qué quieres Hannah?- pregunte, la verdad, estaba feliz, pero no tanto como para soportar a una verdadera arpía como ella.
-¿Qué haces aquí?, el jefe ya te ha quitado la licencia-
-Nada de eso, Hannah. Tengo un nuevo caso.
-¿Qué dices?, estarán estúpidos si te vuelven a contratar, por dios, dejaste escapar a uno, automáticamente debes estar fuera de esta oficina.
-Pues… digamos que por algo estoy aquí, ¿Para qué me querían?, nada más que trabajar, Hannah ¿Por qué en vez de molestarme no vas y me haces un café?, mira que tengo mucha sed.
-¿Por qué no te vas a la mierda?- replico entre dientes.
-¿Molesta?, ¿Qué pasa Hannah?, tu plan de deshacerte de mi no te funciono querida. Te recuerdo porque escapo Federick. O… ¿No lo recuerdas?- ladee la cabeza para admirar mejor sus expresiones. Sus ojos estaban anchados y inyectados de sangre, su boca estaba en una línea recta, estaba cabreada. Perfecto. Vi como sus largas piernas que estaban cubiertas por una fina capa de seda negra, y sus tacos chirriantes se acercaban hacia a mi. Su cabellera rubia roso mi brazo haciéndome estremecer, Hannah estaba susurrándome en el oído.
-El día que tu reveles que paso aquella noche. Estarás muy lejos de aquí, querida. –se alejo para ver mi expresión de miedo, pero no le di el gusto, en cambio sonreí y chasquee la lengua.
-¿Eso es todo?, ¿me vas a mandar de vacaciones?, eso lo veremos Hannah. Recuerda que puedo ser muy torpe, pero el Jefe me cree más a mí que a ti.
-No te atreverías. – levante mis manos como si estuviera apúntame con un arma y decidí dar pasos hacia a tras para poder salir de ese lugar.
-Piénsalo. Sabes que lo haría. –me día la media vuelta, saliendo de la oficina suspire hondo. Vaya que estos encuentros con Hannah, cada vez se ponen más tensos. Bendito sea el día en que el jefe la traslado desde Australia, se hubiera quedado en su país y no estuviera teniendo los pelos de punta y tratando de trabajar mi cabeza para sus contraataques.
-Louis, debemos hablar- trato de alcanzarlo pero su amigo estaba caminando demasiado lejos y era imposible llegarle. En medio del campo, exasperado le grito.-¡QUE DEBEMOS HABLAR, HOMBRE!- el castaño se detuvo casi a la orilla del campo y dejo deslizar su arma en el pasto. Se dio la media vuelta y sus ojos azulados le quedaron plasmados en el alma.
-No hay nada de qué hablar- dijo con la voz ronca después de haber llorado por su muerte- Lo voy a matar, Liam, ese infeliz me las va pagar, ¡ME LA HA QUITADO!- grito dejado el campo con el eco desganado de la voz de Louis. -¿Por qué no me dejas en paz?-
-Porque no quiero que hagas una tonterías. Eres mi mejor amigo, y los dos sabíamos que la encontrarían, Louis por dios- troto hacia donde su amigo se hacía roto. –Vengaremos su muerte, eso está claro, la muerte de Clarissa no quedara impune. – tras haber llegado a su lado, le dio un abrazo, Louis era un chico que no solía abrazar a nadie, que su cinismo y frialdad alejaban a los demás, pero con Liam era diferente, ahora necesitaba un abrazo y lo sabía, quería sacar el dolor, quería gritar, quería llorar hasta zarcearse, quería vengar la muerte de su novia.
-¿Por qué ella, Liam?, ¿Por qué la persona que era mi mundo?- su voz era tan rota y ronca que provocaba un revuelco en el estomago de Liam.
-No tengo idea amigo. Pero lo averiguaremos, te prometo que la muerte de mi hermana no quedara así por nomas, también me han quitado a mi luz, a mi pequeña niña que había prometido proteger y ahora por mi culpa ella está muerta.
-Liam…- el cambio de papeles había sido tan repentino. Louis se sentía mal por las palabras de su mejor amigo, Liam no tenía la culpa de nada. Solo trataba de proteger a su pequeña hermana, el solo quería buscarle paz, pero el mal llego y se las quito de las manos, dejándoles un vacio a los dos. Con rabia y ardor en su corazón roto, Louis prometió matarlo, y verlo agonizar frente a sus ojos, y como Liam dijo, la muerte de Clarissa no quedaría en el vacío. Así era su mundo, lleno de venganzas y lealtad.
-¿Qué haces aquí Emily?, vienes a poner a otro delincuente en mis manos-
En aquel momento todos mis pelos picaban y quería lanzarme hacia ella para quitarle todo su falso cabello rubio, me di la media vuelta apretando mis puños y mirándome con sorna, aquella infeliz fue una de las causables para que el delincuente se me fuera, vi como sus comisuras de elevaban al igual que sus cejas.
-¿Qué quieres Hannah?- pregunte, la verdad, estaba feliz, pero no tanto como para soportar a una verdadera arpía como ella.
-¿Qué haces aquí?, el jefe ya te ha quitado la licencia-
-Nada de eso, Hannah. Tengo un nuevo caso.
-¿Qué dices?, estarán estúpidos si te vuelven a contratar, por dios, dejaste escapar a uno, automáticamente debes estar fuera de esta oficina.
-Pues… digamos que por algo estoy aquí, ¿Para qué me querían?, nada más que trabajar, Hannah ¿Por qué en vez de molestarme no vas y me haces un café?, mira que tengo mucha sed.
-¿Por qué no te vas a la mierda?- replico entre dientes.
-¿Molesta?, ¿Qué pasa Hannah?, tu plan de deshacerte de mi no te funciono querida. Te recuerdo porque escapo Federick. O… ¿No lo recuerdas?- ladee la cabeza para admirar mejor sus expresiones. Sus ojos estaban anchados y inyectados de sangre, su boca estaba en una línea recta, estaba cabreada. Perfecto. Vi como sus largas piernas que estaban cubiertas por una fina capa de seda negra, y sus tacos chirriantes se acercaban hacia a mi. Su cabellera rubia roso mi brazo haciéndome estremecer, Hannah estaba susurrándome en el oído.
-El día que tu reveles que paso aquella noche. Estarás muy lejos de aquí, querida. –se alejo para ver mi expresión de miedo, pero no le di el gusto, en cambio sonreí y chasquee la lengua.
-¿Eso es todo?, ¿me vas a mandar de vacaciones?, eso lo veremos Hannah. Recuerda que puedo ser muy torpe, pero el Jefe me cree más a mí que a ti.
-No te atreverías. – levante mis manos como si estuviera apúntame con un arma y decidí dar pasos hacia a tras para poder salir de ese lugar.
-Piénsalo. Sabes que lo haría. –me día la media vuelta, saliendo de la oficina suspire hondo. Vaya que estos encuentros con Hannah, cada vez se ponen más tensos. Bendito sea el día en que el jefe la traslado desde Australia, se hubiera quedado en su país y no estuviera teniendo los pelos de punta y tratando de trabajar mi cabeza para sus contraataques.
***
-Louis, debemos hablar- trato de alcanzarlo pero su amigo estaba caminando demasiado lejos y era imposible llegarle. En medio del campo, exasperado le grito.-¡QUE DEBEMOS HABLAR, HOMBRE!- el castaño se detuvo casi a la orilla del campo y dejo deslizar su arma en el pasto. Se dio la media vuelta y sus ojos azulados le quedaron plasmados en el alma.
-No hay nada de qué hablar- dijo con la voz ronca después de haber llorado por su muerte- Lo voy a matar, Liam, ese infeliz me las va pagar, ¡ME LA HA QUITADO!- grito dejado el campo con el eco desganado de la voz de Louis. -¿Por qué no me dejas en paz?-
-Porque no quiero que hagas una tonterías. Eres mi mejor amigo, y los dos sabíamos que la encontrarían, Louis por dios- troto hacia donde su amigo se hacía roto. –Vengaremos su muerte, eso está claro, la muerte de Clarissa no quedara impune. – tras haber llegado a su lado, le dio un abrazo, Louis era un chico que no solía abrazar a nadie, que su cinismo y frialdad alejaban a los demás, pero con Liam era diferente, ahora necesitaba un abrazo y lo sabía, quería sacar el dolor, quería gritar, quería llorar hasta zarcearse, quería vengar la muerte de su novia.
-¿Por qué ella, Liam?, ¿Por qué la persona que era mi mundo?- su voz era tan rota y ronca que provocaba un revuelco en el estomago de Liam.
-No tengo idea amigo. Pero lo averiguaremos, te prometo que la muerte de mi hermana no quedara así por nomas, también me han quitado a mi luz, a mi pequeña niña que había prometido proteger y ahora por mi culpa ella está muerta.
-Liam…- el cambio de papeles había sido tan repentino. Louis se sentía mal por las palabras de su mejor amigo, Liam no tenía la culpa de nada. Solo trataba de proteger a su pequeña hermana, el solo quería buscarle paz, pero el mal llego y se las quito de las manos, dejándoles un vacio a los dos. Con rabia y ardor en su corazón roto, Louis prometió matarlo, y verlo agonizar frente a sus ojos, y como Liam dijo, la muerte de Clarissa no quedaría en el vacío. Así era su mundo, lleno de venganzas y lealtad.
{Josie}
Re: Dark Reality {Louis Tomlinson}
Capitulo 3
La sangre le hervía y sus venas se mostraban tanto que los demás comenzaron a acercarse hacia él para separarlos pero era imposible como Louis no dejaba de golpear aquel pobre hombre que solo había ido por una copa al típico bar del pueblo. Cuando se dieron cuenta del alto escándalo, Liam y demás de sus amigos se acercaron hacia él.
-LOUIS SUELTALO- grito Liam, pero era inútil, tuvo que pedir ayuda a Spider, un grandote de unos ochenta que su cuerpo estaba todo lleno de tinta por los tatuajes, cuando Spider tomo a Louis por los hombros para levantarlo, este comenzó a patalear como un bebe.
-¿Qué demonios, estás haciendo?- le pregunto Liam cabreado.
-Ese infeliz sabe algo. Lo sé. Que no se haga idiota- trataba de aflojar el agarre de Spider pero el grandulón no lo soltaría, sabría que sucedería después.
-ha dicho que no sabe nada. Y le creo.
-¿Cómo puedes creerle a este infeliz?, por dios es uno de ellos Liam.
-Sé que es uno de ellos. Pero lo conozco y sé cuando dice que no tuvo nada que ver con la muerte de Clarisse, así que deja de armar pelea en todos los lugares que vayamos.
-no sé cómo le puedes creer a esa rata.- bravo Louis, explotando de rabia. En un buen golpe le dio a Spider en el estomago dejándolo sin aire, Louis camino a zancadas hacia la salida dejando atrás a Liam que ayudaba a Spider a respirar.
-Algún día ahorcare a ese hombre-
-Tranquilo, Spider, por más que queramos matarlo ahora mismo, sabemos cómo se pone con sus cabreos.
-Lo único bueno que tiene este muchacho es que sabe hacer negocios. –Liam asintió- si no creo que ya lo hubiera enterrado. – se levanto y cogió un poco de aire, para luego echar un vistazo hacia el pobre chico que había quedado noqueado debajo de la barra.
-Louis es muy impulsivo. Y desde la muerte de mi hermana, se ha vuelto un completo idiota. –asintió Spider.
-¿Qué harás con él?-
-Por ahora no tengo idea. Pero no puedo dejar que Louis me arruine mis encuentros con los proveedores, me va arruinar, y aparte nos cortarían el pellejo.
-¿Piensas lo mismo que yo?- levanto una ceja. Liam asintió. Por más que le duela, debería de hacerlo.
-Debo mandar a Louis a la granja. Solo serán vacaciones, no debo traerlo conmigo por ahora, ya que pase lo de mi hermana e investigue quien fue el infeliz que la mando matar, soltare a Louis para que lo haga trizas.
A la mañana siguiente, había recibido un nuevo llamado, el jefe me había informado que Tulisa, vendría a mi departamento para informarme sobre el nuevo proyecto. No tenía idea de porque no me querían decir en las oficinas como era siempre pero creo mi presencia en la oficina no era muy grata y menos con Hannah dentro. Por lo que acepte que Tulisa viniera. La morena no era tan perra como Hannah, ella venia de una familia humilde y podre, Tulisa la vez que la vi, me sonrió, aunque aquella pobre y bella chica estuviera en la ruido y a punto de perder a sus pequeños hermanos por la muerte de sus padres, aun así sonreía, la admiraba y mucho.
Cuando mi padre falleció, no pude soportarlo, fue como si tuviera cinco años y un niño del kínder me quitara mi juguete favorito ese con el que duermo abrazada por las noches. Tulisa me brindaba serenidad me gustaba mucho su compañía, aparte fui informada que ella sería mi compañera en el viaje de este proyecto, por lo que me sorprendí, no habían elegido a Hannah esta vez, como desearía ver su cara de rata quemada cuando le digan que esta fuera del caso.
-¿Puedo?- toco la puerta Tulisa, que estaba entre abierta. Asentí y la deje pasar. Esta venia con tres carpetas de la oficina, se dejo caer en el sofá y las carpetas cayeron en la mesa que tenía enfrente.
-¿De qué trata el Proyecto?-
-Creo que primero deberás, ver la segunda carpeta.
-¿Por qué?-
-Para que te prepares, y te des cuenta que no será como proyecto que casi estropeas. Esta vez no iras tras ellos con una patrulla o en un auto de lujo, Emily, esta vez deberás estar cerca de ellos , vigilando cada detalle, tendrás que convivir con ellos, deberás ser uno de ellos.
-LOUIS SUELTALO- grito Liam, pero era inútil, tuvo que pedir ayuda a Spider, un grandote de unos ochenta que su cuerpo estaba todo lleno de tinta por los tatuajes, cuando Spider tomo a Louis por los hombros para levantarlo, este comenzó a patalear como un bebe.
-¿Qué demonios, estás haciendo?- le pregunto Liam cabreado.
-Ese infeliz sabe algo. Lo sé. Que no se haga idiota- trataba de aflojar el agarre de Spider pero el grandulón no lo soltaría, sabría que sucedería después.
-ha dicho que no sabe nada. Y le creo.
-¿Cómo puedes creerle a este infeliz?, por dios es uno de ellos Liam.
-Sé que es uno de ellos. Pero lo conozco y sé cuando dice que no tuvo nada que ver con la muerte de Clarisse, así que deja de armar pelea en todos los lugares que vayamos.
-no sé cómo le puedes creer a esa rata.- bravo Louis, explotando de rabia. En un buen golpe le dio a Spider en el estomago dejándolo sin aire, Louis camino a zancadas hacia la salida dejando atrás a Liam que ayudaba a Spider a respirar.
-Algún día ahorcare a ese hombre-
-Tranquilo, Spider, por más que queramos matarlo ahora mismo, sabemos cómo se pone con sus cabreos.
-Lo único bueno que tiene este muchacho es que sabe hacer negocios. –Liam asintió- si no creo que ya lo hubiera enterrado. – se levanto y cogió un poco de aire, para luego echar un vistazo hacia el pobre chico que había quedado noqueado debajo de la barra.
-Louis es muy impulsivo. Y desde la muerte de mi hermana, se ha vuelto un completo idiota. –asintió Spider.
-¿Qué harás con él?-
-Por ahora no tengo idea. Pero no puedo dejar que Louis me arruine mis encuentros con los proveedores, me va arruinar, y aparte nos cortarían el pellejo.
-¿Piensas lo mismo que yo?- levanto una ceja. Liam asintió. Por más que le duela, debería de hacerlo.
-Debo mandar a Louis a la granja. Solo serán vacaciones, no debo traerlo conmigo por ahora, ya que pase lo de mi hermana e investigue quien fue el infeliz que la mando matar, soltare a Louis para que lo haga trizas.
***
A la mañana siguiente, había recibido un nuevo llamado, el jefe me había informado que Tulisa, vendría a mi departamento para informarme sobre el nuevo proyecto. No tenía idea de porque no me querían decir en las oficinas como era siempre pero creo mi presencia en la oficina no era muy grata y menos con Hannah dentro. Por lo que acepte que Tulisa viniera. La morena no era tan perra como Hannah, ella venia de una familia humilde y podre, Tulisa la vez que la vi, me sonrió, aunque aquella pobre y bella chica estuviera en la ruido y a punto de perder a sus pequeños hermanos por la muerte de sus padres, aun así sonreía, la admiraba y mucho.
Cuando mi padre falleció, no pude soportarlo, fue como si tuviera cinco años y un niño del kínder me quitara mi juguete favorito ese con el que duermo abrazada por las noches. Tulisa me brindaba serenidad me gustaba mucho su compañía, aparte fui informada que ella sería mi compañera en el viaje de este proyecto, por lo que me sorprendí, no habían elegido a Hannah esta vez, como desearía ver su cara de rata quemada cuando le digan que esta fuera del caso.
-¿Puedo?- toco la puerta Tulisa, que estaba entre abierta. Asentí y la deje pasar. Esta venia con tres carpetas de la oficina, se dejo caer en el sofá y las carpetas cayeron en la mesa que tenía enfrente.
-¿De qué trata el Proyecto?-
-Creo que primero deberás, ver la segunda carpeta.
-¿Por qué?-
-Para que te prepares, y te des cuenta que no será como proyecto que casi estropeas. Esta vez no iras tras ellos con una patrulla o en un auto de lujo, Emily, esta vez deberás estar cerca de ellos , vigilando cada detalle, tendrás que convivir con ellos, deberás ser uno de ellos.
{Josie}
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