❆ Seven Sisters❆

—¡Niall!— se escuchó desde la otra punta de la cancha de arena. El rubio giró la cabeza y sintió el sudor corriendo por su frente. Corrió lo más que pudo, hasta estar a una distancia ni tan cerca, ni tan lejos del portero. Louis le pasó la pelota, cayendo en sus pies y antes de que Malik se la quitase, corrió en dirección a Mirchoff, quien esperaba atajar la bola blanca con círculos negros. Niall golpeó con todas sus fuerzas la pelota con su pie, logrando anotar un gol más al equipo con la camiseta naranja. Gritó, no solo de alegría, si no también porque sus compañeros saltaron sobre él para festejar su gran anotación. Un silbato destruyó su alegría, haciendo que los sudorosos chicos se dirigieran hacia el proveniente sonido, dando por terminado el partido.

—Muy buen entrenamiento, chicos— escucharon decir al entrenador Steve, mientras tomaban de sus respectivas botellas con agua. —Pero Beau, ¿cómo no pudiste detener el balón? Mi hijo de cinco años patea mejor que Horan— el rubio elevó sus cejas, demostrando lo ofendido que se encontraba, soltando un »¡Hey!« sorprendido. Los chicos soltaron una carcajada al unísono.— Bueno, no importa. Les quería hablar sobre algo importante— Las risas se calmaron al ver a Steve algo serio. Todas las miradas se centraban en él y solo él, esperando a que suelte lo que los dejaba con la duda. — Como sabrán, este año tendremos el súper campeonato de fútbol, donde participaran solo los equipos que queden semifinales. Y, para ello, debemos competir contra el equipo de Seven Sisters. 


—Uno, dos, tres, ¡les patearemos el culo!— dijeron lanzando sus manos hacia arriba con una sonrisa triunfantes.