Born This Love {Louis y TU}

-Hola Keira- dije dudosa mientras ella me miraba confundida.
-¿Y… y… y Louis?- tartamudeo, pero su tono de “superioridad” aún estaba presente.
Louis se acerco rápido haciéndome a un lado para saludar a Keira con un apasionado beso.
-Aquí amor- se separó lentamente de ella, sin sonreír, serio y al parecer malhumorado. La tomo de la mano y salieron del baño. Dejándome ahí…sola.
….
"Maldito engreído, presumido y coqueto no me debí dejar engañar, solo estaba siendo como es. Nada especial. Odio a Louis Tomlinson, su castaño cabello, sus ojos azules, lo perfecto que es, su hermosa sonrisa lo bien que te hace sentir… lo odio.”
Y todo el día fue lo mismo yo y mi mente odiando –sin aparente razón- al tal Louis Tomlinson.
-Fueron 10 malditos minutos Javiera, en 10 minuto me engatuso- bufe a mi amiga mientras tratábamos de entrar a la cafetería que se encontraba llena de ancianos de las generaciones anteriores.
Javiera Kay, movió su mata de pelo azul muy al estilo Katy Perry, sin exagerar –su cabello natural era castaño oscuro, el cual solo logre ver a través de fotos de su niñez- pero a pesar de eso mi amiga era demasiado bonita, sus ojos de color plomo-azulado enmarcados perfectamente con sus largas y bellas pestañas, con unas pocas pecas mayormente en las mejillas que daban un toque a su pálida piel, muchas curvas definidas sin llegar a ser grotescas, linda sonrisa, una actitud joven, alocada, rebelde y divertida. Era una irlandesa muy fuera de lo común.
Un chico embobado con ella nos cedió el paso, una vez adentro Javiera le soplo un beso.
-¿Recuerdas que Salí con él en segundo?
-¿El de la puerta?- la mire fijamente.
-¡No, Louis!- dijo Javiera haciendo un gracioso gesto de disgusto – La verdad no es la gran cosa.
-¡Es tan guapo! Cuanto daría porque me hablara- dije fingiendo la voz de admiración que la mayoría de las chicas y una vez también Javiera utilizo, chillona, ingenua y molestosa.
-Bueno, sí, lo admito estaba en ese momento loca por él, al final solo me utilizo.
-¿Quién “es tan guapo”? ¿Tan guapo como yo?
Una arrogante y divertida voz me sorprendió al mismo tiempo que unas manos rodeaban mi cintura. Gire rápido quedando frente… a Louis.
-¡HEY! Ho… hola- me atragante con mi saliva.
-¿De quién estaban hablando?- dijo con una coqueta sonrisa. Fruncí el ceño, él quería hacerme caer a sus pies “Arrogante estúpido” pensé, pero a decir verdad mis piernas temblaban como gelatina.
-Puedes soltarme- fingí disgusto- El chico de la puerta, creo que es realmente guapo.
Mentí. Mire a todas partes, el chico al cual Javiera le había soplado un beso era completamente…. No estaba dentro de los gustos de la mayoría de las chicas. Flaco, desgarbado, una marcada manzana de adán, dientes chuecos y cara de zombi, ningún parecido con Louis. Y mi amiga “¿Dónde te metiste Javiera Key?” había desaparecido. Regrese mi mirada a él.
-Sí, ya veo que de veras te atrae ese chico, tu cara de asco al verlo es completamente…- se detuvo, estaba burlándose de mi – ¿Sabes?, eres muy atractiva.
-Tengo que hacer tarea- invente una excusa, la peor que se me pudo haber ocurrido.
-¿Tarea? , claro…- se quedó pensativo- No me has dicho tu apellido.
Me deslice fuera de sus brazos. No le diría a Louis mi apellido, por el apellido les hablaba a todas las chicas. No sería una más, no quería ser una más “¿Segura ____? Pensé que lo que querías es ser solo del montón, sin la arrogante atención de Louis”
-Mérales Grenny- soltó mi boca floja y me di media vuelta, el me detuvo del brazo.
-Mérales Gre…- le tape la boca.
-Se pronuncia “Grinni” Tomlinson, estas advertido- “Estas coqueteando con el supuesto enemigo” me reprendí mentalmente y seguí mi camino.

Me abalancé sobre la cama de mi dormitorio, mi escuela es un internado y mi compañera de cuarto es mi mejor amiga Javiera, quien esta mañana me había abandonado.
Javiera entro corriendo y cerro de un portazo. Su cabello azul se pegaba a su cara debido al sudor.
-No lo vas a creer- hablo ella con la voz entrecortada y mucha rapidez.
-¿Qué?
-¡NO LO VAS A CREER!- grito ella llena de éxtasis y se hecho en la cama aun lado mío –Muestra un poco de emoción.
-No estoy contenta ¡me dejaste sola con Louis Tomlinson!
-Me encontraron besándome muy apasionadamente con Harry- dijo ella como si contara la mejor de las historias y omitió lo que yo había dicho – ¡Harry Styles! Los prefectos se acercaban a nosotros, salimos corriendo y nos persiguieron por todo el campus.
Javiera rompió en una risa entrecortada y de cansancio y a mí me causo tanta gracia que le seguí el juego. Después de todo no podía enojarme con mi mejor amiga.
-Y bueno ¿Qué paso?
-Llegue y me encerré aquí, saben cuál es el dormitorio de Harry pero a mí no me reconocieron.
Fingí estar molesta con ella, en el último año no puedes estar infringiendo reglas, puede causar que te expulsen, pero no me atreví a reprender a mi amiga.
-Date un baño, apestas- bromee con ella y me acurruque en las sabanas, era hora de dormir.
-Apropósito ____, no te ilusiones con Louis, sabes que los gustos de él son…, bueno, excéntricos y tú eres demasiado común. No es que eso tenga algo de malo, pero lo eres. Además ellos ya llevan una larga historia, un año debería decirte algo.
Sus palabras fueron como un bote de agua helada sobre mi cabeza… y mi cuerpo y mi mente y mis sentimientos. ¿Cómo se atrevía a insinuar que yo ni en sueños conquistaría a Louis? Eso era lo que trataba de decir mi supuesta “amiga”. Me levante con toda la indignación de la cama dispuesta a responderle y salir de ahí, aun si eso significaba romper la regla del toque de queda “después de las 8 nadie puede salir de su habitación”.
-Yo podría con eso, él no me ilusionaría y yo creo que soy lo suficientemente buena y única para él- sollocé con un nudo en la garganta que me impedía seguir hablando.
– No es cuestión de estúpidos gustos de egocéntricas desabridas- solté con el poco coraje que me quedaba y las lágrimas escaparon de mis ojos, tome un pequeño suéter y Salí del dormitorio.
….
El aire de afuera estaba frio y los grillos se lograban escuchar, todo estaba tenebrosamente silencioso y después de varios minutos de caminar, pensar y tranquilizarme me encontraba parada frente el edificio de dormitorios de los chicos.
Revise mi reloj, 10:45, ¡pero si había salido a las 8:15! Llevaba casi 2 horas vagando por la escuela.
Pase de largo el edificio de los chicos y fui al área de las canchas y un pequeño arenal donde se jugaba voleibol. Me senté en las gradas, cerré mis ojos y pensé… pensé… pensé…
El ruido de un balón rebotando contra el pavimento me despertó. Mire a mi alrededor, me había quedado dormida. Busque el sonido del rebote no sin antes mirar el reloj 12:30, pasada la media noche, negué con la cabeza “¿Qué se supone estoy haciendo?”
Y lo vi, Louis vestido de una bermuda blanca holgada, camisa a rayas, capucha roja y tenis convers practicaba Basquetbol en una de las canchas… algo extraño ya que para empezar él no jugaba eso, si no futbol. Y lo segundo y aún más extraño…era media noche.
-¡Hey!- le llame desde las canchas, mi voz resonó por todo el campus. Louis volteo y corrió hacia mi subiendo cada uno de los escalones en cuestión de segundos, llego y mi tapo la boca.
-¡“Grinni”! –su voz era de sorpresa y gusto total de verme o así me parecía- ¿Qué rayos haces aquí?
-Creo que esa también podría ser mi línea- trate de decir aun con la mano de Louis sobre mi boca mientras me perdía en sus ojos azules. Retiro su mano lentamente y se sentó a mi lado.
El rio agradablemente, como un niño juguetón.
-Me gusta venir aquí a bajar el estrés, la noche es fiesta hasta que apagan las luces- dijo con una sonrisa, que fuera de ser coqueta, era sincera.
-“La noche es fiesta hasta que apagan las luces”- repetí con una sonrisa –Pues yo no veo por aquí ninguna luz.
-¿A no? – estiro sus dedos, en cada uno de ellos agarrados con un elástico venían lamparitas de colores, las encendió rápidamente y movió sus dedos. Los colores se mezclaban, movían y jugaban entre sí.
Me reí sin mostrar los dientes. Él era realmente tierno.
-¿Tu qué haces aquí?- pregunto.
-Pensando- sobre ti… sobre mí – solo pensando.
Y de repente mis piernas colgaban del hombro de Louis mientras bajábamos las gradas, me llevaba cargando y yo estaba llena de pánico. Solté un grito al cual Louis solo rio y me pidió guardáramos silencio para que no nos descubrieran. Afortunadamente rápido llegamos abajo y el salió corriendo “¿Acaso quiere que lo persiga?” no dude ni un segundo más y Salí tras él, corríamos por toda la escuela, cuando lo alcance le toco perseguirme y se repitió el ciclo. Reíamos demasiado, de repente Louis se perdió de mi vista, yo lo estaba persiguiendo “¿Dónde estás Louis?” me quede parada unos segundos y revise mi reloj 1:25 am, pero yo aún no planeaba regresar a mi dormitorio.
-¡Ayuda!- fingí gritaba aunque lo hacía con voz bajita y chillona - ¡Ayuda!
-¿Alguien necesita ayuda?- la voz de Louis era ronca graciosa y de caricatura antigua – ¡Superman está aquí!
El grito y de repente estaba detrás mío alzándome por los aires y luego dejándome caer levemente sobre el pasto. El plan era atraerlo con mi grito de auxilio para poder atraparlo, pero la cosa había salido diferente. Nos echamos a reír y él se acostó a mi lado.
-Me agradas mucho ____
Louis deslizo sus manos por mi cintura y acomodo su rostro sobre mi hombro, más que un gesto coqueto parecía el de un niño agradecido.
-Y tú a mi Louis- ambos quedamos cara a cara, cm a cm, tan cerca…tan íntimo.