Érase una vez un caballo y una escritora

por **Most** Jue 13 Jul 2017, 6:50 pm

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Ficha

Nombre: Érase una vez un caballo y una escritora

Autora: Yo

Adaptación: No

Género: Romance

Advertencias: ninguna

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Ohaio! Soy Vi y les traigo un One Shoot nuevo. Es una historia real, con los nombres cambiados. Voy a subirla en un par de partes o tres. Podéis encontrar esa historia en Wattpad.

Con esa pequeña historia vuelvo a OWN. Esa web me ha cambiado la vida. Ahí empecé a publicar mis primeras novelas y conocí gente maravillosa, y por eso no lo voy a dejar ir tan rápidamente. Voy a actualizar todo mi perfil y mis historias pronto. Cualquier cosa pueden mandarme un MP.

por **Most** Jue 13 Jul 2017, 6:56 pm

Capítulo 1

♥♥ ♥♥ ♥♥

Cuentan testigos reales que en mayo y junio de 2017 hubo un caballo que acosaba una escritora. El caballo era hijo de un caballo muy importante en villa Instituto, alguien que arruinó un curso entero a la escritora, y en empezar el nuevo curso vino el caballo hijo a revolucionarlo todo.
Una Cantante quiso juntar el Caballo con la Escritora, pero ésa se negó rotundamente, y se olvidó el tema hasta unos días antes de los exámenes de fin de curso.
Todo empezó cuando la Escritora notó las miradas del Caballo puestas en ella todo el rato, pero no hizo mucho caso. Al poco tiempo, se dio cuenta de que ese Caballo no estaba nada mal y lo apodó "Crush". Des de entonces, estaba pendiente de los movimientos de ese Caballo porque todo eso le parecía sospechoso. Hasta que un 25 de mayo, estaba esperando a que le abrieran la puerta de su clase cuando el Caballo apareció por sorpresa y se puso a mirar su móvil. Entonces apareció el mejor amigo de ése, el Polvorón Acosador que sacaba 3 y medio (al cual llamaremos simplemente Acosador), lo apartó de la chica y él lo miró, indignado. Luego se largaron galopando hasta la salida.
La Escritora confesó el secreto a su amiga la Matemática, y ésa se dedicó a observar si los movimientos del Caballo eran los que decía su amiga. La Matemática dudó de si los movimientos eran del Caballo o el Acosador, pero pronto se resolvió la duda.
El día 29 de mayo era un día de desagradables recuerdos para la Escritora, pero todo cambió completamente. Cuando empezó el día, el Caballo miró sin disimular, como hacía siempre. En ese día, su amiga la Unicornio se dio cuenta de que allá había gato encerrado, y se dedicó a investigar hasta llegar a estar muy cerca de la verdad. Entonces, las dos chicas tuvieron que ir a pedir un libro en la clase del Caballo y el Acosador. Cuando entraron, el Caballo se quedó mirando fijamente la escritora, y ella pidió el libro al Acosador. Ése se lo dio, impertérrito. En terminar la clase, ella devolvió el libro y se dio cuenta de que el Caballo la estaba esperando.
Pero el inicio de todo fue más tarde. Horas más tarde, las tres chicas esperaban en el pasillo cuando vieron al Caballo y el Acosador pasar por delante de ellas. El Caballo estaba muy nervioso, y el Acosador le daba ánimos. Ella no les hizo mucho caso y fue buscar sus cosas. Se dirigía a la biblioteca con Unicornio cuando vio el Caballo solo en medio del paso. Se dio cuenta de que el Acosador y otro estaban escondidos, expectantes. Cuando pasó al lado del Caballo, ése sonrió, se acercó a ella y le dijo:
-Eres guapa.
La Escritora no se lo podía creer. Era la primera vez que le decían eso. Él se lo volvió a repetir, tras ver la cara de sorpresa de ella. La Escritora, entonces, le soltó:
-Tu también lo eres. -y se fue con su amiga la Unicornio.
Caballo, Acosador y el otro se quedaron a hablar del tema, alucinados. Las dos chicas se fueron en clase, también alucinadas. Al final del día, el Caballo observó los movimientos de la escritora y se puso en el lugar donde ella se sitúa en la salida, pero no coincidieron. Unicornio fue quien lo vio todo. Esa misma tarde, la Escritora lo agregó en una red social, y él hizo lo mismo, sin decirse nada luego. En ese mismo día, la escritora confesó el secreto a su amiga la Canadiense.
Al día siguiente, un día antes de los exámenes, la chica consiguió un caramelo y quiso dárselo a Caballo. Ése se pasó el día entero buscándola por todo el instituto y se quedaba observando en la puerta de su clase. A última hora, al no haberle podido dar el caramelo, la Escritora pidió a Unicornio que se lo diera en su nombre. Cuando se encontraron, él fingió no conocer a la Escritora, hasta el punto de sonsacarle información sobre la chica a Unicornio, y luego dijo "que no se crea lo de ayer". La Escritora quiso matarlo, pero en seguida se dieron cuenta de que mentía. Era imposible no saber quién era, y mintió para protegerse de Unicornio (aun sin saber por qué debería de protegerse). A lo largo del día, habían visto al Caballo y un amigo suyo mirarla y hablar de ella sin disimulo, y por eso la Escritora estaba desconcertada.
Los exámenes finales llegaron. Dos días después del fiasco, el Caballo volvió a hacer su aparición estelar. Tras los primeros exámenes, se pasó el rato vigilando a la Escritora y persiguiéndola por el instituto, mientras Unicornio coqueteaba con un amigo suyo. Esa misma tarde, la Escritora y la Canadiense quedaron y se encontraron con el Caballo, quien no tuvo el valor de decirles nada.
El día más importante de la historia fue el miércoles siguiente.
Las chicas estaban haciendo un examen importantísimo cuando dicho Caballo se puso en la puerta de su clase y miró cómo iba dicho examen. La Matemática y la Escritora lo vieron y, mientras la primera se moría de risa, la última no se pudo concentrar para el examen. Se descontó 4 veces en la redacción y el profesor notó en seguida que algo no iba bien. El Caballo, en ver que ella ya estaba terminando, dijo "ya acaba" y se fue afuera con un pretendiente de Unicornio.
Unicornio y la Canadiense estaban esperando a sus amigas fuera cuando apareció el pretendiente de Unicornio junto al Caballo y empezaron a darles información sobre ése, como si todo fuera una broma. Unicornio grabó la conversación y cuando la Escritora terminó el examen, las dos chicas se lo mostraron. Ella no dijo nada, estaba sorprendida por la repentina visita en medio examen.
Las chicas estaban estudiando para el último examen del miércoles cuando el Acosador y el Caballo se sentaron cerca de ellas. Unicornio vio que los auriculares del Caballo eran muy parecidos a los suyos que había perdido, pero no se atrevió a preguntárselo. De repente, el Caballo se acercó a las chicas y, mirando a la Escritora, preguntó:
-Hola chicas, ¿qué tal?
-Hola, Caballo. -saludó la escritora, sin rodeos. -Oye, ¿esos auriculares son de Unicornio? -él, en oírla, se detuvo, hizo una pose de chulo y se paró a escucharla:
-Dime.
-Digo que si estos auriculares son de Unicornio, porque los ha perdido y se parecen mucho a los que llevas.
-No, son míos. -dice, sonriendo. -Oye, ¿cómo te llamas? -él lo sabía de sobras, pero quería hacerla hablar.
-Me llamo Escritora Irlandesa.
-Hola, Escritora Irlandesa, ¿qué tal?
-Oh, bien, ¿y tú, Caballo?
-Bien también. -todas notaron que le temblaba la voz de los nervios. -Oye, quería preguntarte algo.
-Dime.

-Tú... -estuvo unos instantes que no podía ni hablar -¿Querrías quedar conmigo esta tarde para estudiar?

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