always on my mind

por **Cinna.** Miér 15 Mar 2017, 3:34 pm

Ficha de la serie

• Titulo: Always On My Mind
• Autor: Cinna. (yo)
• Adaptación: no.
• Género: drama, romance.
• Contenido: puede contener lenguaje vulgar y algunas escenas eróticas.
• Advertencias: advertiré al inicio de cada capítulo sobre contenido erótico. Si quieres adaptarla por favor, manda MP.
• Otras páginas: sólo en OWN.

Always On My Mind

Una vez alguien me dijo que en esta vida nada era imposible. Y tenía mucha razón. Que cuando menos te lo esperas, el amor llega para hacerte sentir más viva. Llega para sanar y curar tus heridas. Llega para arreglar tu vida de una manera más bonita. Llega para quedarse en tu vida, para siempre.

¡Hey!:

lista de capítulos:

por **Cinna.** Miér 15 Mar 2017, 4:12 pm

Capítulo 1

Era un jueves nublado invernal, como de costumbre. Uno de esos días donde la temperatura no sobrepasa los cinco grados y solo te dan ganas de seguir durmiendo en tu cómoda y calentita cama, sin importar lo que tengas que hacer en el día… hasta que, por desgracia, suena el despertador por tercera vez y me levanto repentinamente.

—¡Ay! Mierda. Me quedé dormida —mascullé, mirando el reloj que marcaba las 6:20AM.

Y otra vez empezamos la rutina de levantarse muy temprano y con mucho frío para ir al colegio. Aunque ya habían pasado dos semanas de las vacaciones de invierno, realmente las necesito de nuevo para dormir todas las mañanas y no moverme de la cama.

Me dirigí a la pieza de mis hermanos para despertarlos.

—A ver… ¡Pablo, Priscila! Despierten, ya es tarde.

Pablo y Priscila son mis hermanos menores, por lo que yo estoy a cargo de ellos como toda una “hermana mayor”.

—¿No podemos faltar? —bostezó Priscila mientras se daba vuelta para el otro lado.

—¿Quieren faltar y que nuestros papás me reten a mí porque los deje seguir durmiendo? Están muy equivocados. Vamos, que ahora les preparo algo para tomar.

Mientras ellos se iban despertando, preparaba un café con leche para Pablo y un mate cocido para Priscila, tal como a ellos les gustaba. Cuando terminé, fui hacia nuestro comedor para dejar las tazas y encontré una nota de mis padres:

“Belu, por favor llevalos temprano al colegio y haceles el almuerzo cuando vuelvan. La abuela estará en casa a las 12 y nosotros volveremos muy tarde”.

No era nada raro que mis padres volvieran tarde de su trabajo. Mi madre es diseñadora gráfica y mi padre es ingeniero informático. Pablo, Priscila y yo ya nos acostumbramos a que pasen poco tiempo con nosotros y estemos en familia solo en las noches y los fines de semana, aunque yo los entendía, porque ellos hacían mucho esfuerzo para mantenernos a nosotros y a la casa. A veces, venía mi abuela Josefina a casa para cuidar a mis hermanitos.

Ya eran las siete y media de la mañana, y ya estábamos en camino al colegio. Pablo va a sexto grado de primaria y mi hermana, a tercer grado de primaria, mientras yo curso el cuarto año de secundaria. Me detuve cuando ya habíamos llegado para despedirlos.

—Adiós Pri, adiós Pablo. Por favor miren bien por donde van cuando vuelvan a casa. Cuida a tu hermana Pablo, no dejes que vaya sola por la calle.

—Si Belu, ya lo sé, sé todo lo que tengo que hacer no es necesario que lo repitas —dijo Pablo mientras veía como agarraba de la mano a Priscila y entraban juntos— adiós hermanita.

—¡Adiós! Compórtense bien —sonreí. Me dí vuelta en dirección a la entrada para la secundaria y entré.

Nuestro colegio era muy grande. Ocupaba toda una manzana y se dividía en la sección para infantes, para estudiantes de primaria y para los estudiantes del secundario. Tenía una entrada y salida para cada sector.

Una vez adentro, subí las escaleras ubicadas en el lado derecho de la entrada y fui directo al aula de mi curso con mi mirada en el suelo. Es algo normal en mí, ir por mi vida con mi mirada perdida y concentrándome en mí misma. Es algo normal de mi timidez y forma de ser… porque así era yo. Introvertida, tímida, nerviosa y un poco callada. No suelo relacionarme con otras personas o gente nueva debido a que no sé cómo tener una buena conversación, pero, sin embargo, así me sentía bien. Me sentía tranquila.

—Buen día nena —y quien iba a pensar que esta chica “introvertida, tímida, nerviosa y un poco callada” tuviera un novio tan adorable y gentil— ¿Qué tal?

Era Tomás, mi compañero y mi novio, sonriéndome todas las mañanas como siempre apenas me veía entrar al curso. Era un chico no tan alto, medía aproximadamente un metro sesenta y cinco y aparentaba de su edad, de quince años. Sus cabellos eran rizados color castaño oscuro, que le llegaba a la altura de la nuca; y sus ojos, color miel. Vestía el uniforme que consistía en una chomba blanca, una campera y unos pantalones bordó. Me quede mirándolo un poco más de un minuto sin saber que responder.

—Planeta Tierra llamando a Belén Arellano —volvió a hablar otra vez, dándome palmaditas en el hombro izquierdo. En cuestión de segundos, reaccioné.

—Ya, ya. Hola amor —le dí un beso en la mejilla— Estoy bien, como siempre, gracias a vos.

—¿Gracias a mí?

—Sí, si sabés que verte sonreír me alegra los días —lo abracé y lo escuche reír.

—Vamos a sentarnos en nuestro lugar —dijo, mientras me acompañaba al banco dónde nos sentábamos siempre.

En ese momento, mi celular vibró en el bolsillo de mi pantalón. Lo saqué y vi una notificación de Whatsapp, que decía “Mensaje de Nico”.

—Será mejor que nos sentemos antes que el director te vea con el celular, Belu —dijo Tomás tratando de ver mi móvil.

—Sí, Tomi. Vamos.

por **Carstairs** Miér 15 Mar 2017, 6:19 pm

Hola de nuevo, como dije vine a leer tu novela y me parece muy interesante y espero que la sigas pronto always on my mind 2686721104

por Invitado Miér 15 Mar 2017, 7:07 pm

Hola Belen, espero que me recuerdes, pero si no, soy Ana o Ann o como gustes. He visto que es tu novela y he entrado de una vez. (Me encanta que sea basados en hechos reales).

por **Cinna.** Jue 16 Mar 2017, 12:46 pm

Carstairs escribió:Hola de nuevo, como dije vine a leer tu novela y me parece muy interesante y espero que la sigas pronto

Holaa! Gracias por pasarte, me alegra verte por aquí :) Sigo escribiendo capítulos, dentro de un rato se viene el segundo, saludos!

peraulata escribió:Hola Belen, espero que me recuerdes, pero si no, soy Ana o Ann o como gustes. He visto que es tu novela y he entrado de una vez. (Me encanta que sea basados en hechos reales).

Hola Ana! Gracias :) ya estaré subiendo el segundo, besos

por **Cinna.** Jue 16 Mar 2017, 1:12 pm

Capítulo 2

Una vez ya sentados, nos pusimos hablar sobre que habíamos hecho ayer. Hacía mucho frío en el salón, así que me acurruqué a su lado como pude mientras él me abrazaba. Estuvimos así hasta que llegó la profesora de biología y todo el curso se puso de pie para saludarla.

—Buen día chicos, tomen asiento —dijo mientras se sentaba en su escritorio.
—Buen día, profesora —repetimos al unísono.

Aprovechando el tiempo en el que la profesora firmaba unas fichas, y Tomi hablaba con sus amigos, saqué el celular y abrí la notificación de Whatsapp. Era mi amigo Nicolás, un amigo virtual si se puede llamar así. Lo había conocido en un juego online, empezamos hablar y me caía bien. Un día me pidió mi número de teléfono para agregarme a Whatsapp y avisarme para que entrara a jugar, pero la verdad, es que nos la pasábamos hablando todos los días.

Nico: Buen día! Como andas? No te hagas la boba y anda al colegio eh
Me reí y le respondí.
Belu: Buen día Nico.. bien y vos? Shh, estoy en el colegio tratando de estudiar pero usted me manda estos mensajes. Cállese y vaya a trabajar.

Me gustaba tratarlo de usted, no porque sea un señor grande, sino porque era mayor, tenía veinte años. Guardé el celular cuando Tomás se dió vuelta y me comenzó a hablar.
—¿Viste que Marcos va a hacer una fiesta por su cumpleaños? —se refería a un compañero de nuestro curso. Era el típico niño mimado y engreído, pero aún así, a la mayoría le caía bien.
—No me gustan ese tipo de fiestas. Te lo dije varias veces.

La mayoría de las fiestas de nuestro barrio consistía en juntarse en una casa e invitar a medio mundo para tomar litros y litros de alcohol, y tal vez, alguna que otra pastillita de color. Yo no comprendía como disfrutaban estar así, embriagados. Y lo peor de todo, es que Tomi suele ir a esas fiestas, pero solo porque van algunos de sus amigos para tomar algo e irse a sus casas. Mi mayor miedo es que tome de más y es por eso que hay veces que me enojo con él.

—Y yo también te dije varias veces que no es nada del otro mundo y no hay nada de lo que debas preocuparte. Solo tendrías que preocuparte de ir y pasarla bien —respondió mientras ponía los ojos en blanco.
—¿Pensás que vaya a esa cosa? —lo miré.
—Pues la verdad, me preocupa que estés la mayoría del tiempo en tu casa y te pierdas de toda la diversión, boba.
—No le veo el lado divertido, bobo. Salir con vos sería divertido, pero preferís esas fiestas y…
—No empieces Belén —me puso un dedo en los labios— ¿Estás diciendo que no tengo tiempo para vos? Lo podemos dejar para otro día, sabés que no tengo problemas.
—No me refiero a eso. Ya sabés lo que no me gusta y te conozco. Es malo para vos.
—Está bien. El sábado voy a ir igual porque ya le dije que sí. Si querés, vení. Fue una invitación, nada más que eso —dijo, como si hubiera ignorado cada palabra que dije anteriormente.
—Perfecto. Tal vez el sábado me quede en mi casa durmiendo o salga con alguna de mis amigas.

—Me parece perfecto.

Me acomodé bien en mi asiento y miré para el lado de la ventana. La profesora aún no comenzaba con su clase y busqué mi celular para ver si había llegado un mensaje. Y así fue.

Nico: Jaja.. hoy no trabajo. Que onda vos? ¿Aburrida en clases?
Sonreí y respondí.
Belu: Sí… más aún cuando tu novio te ignora cada palabra de lo que decís.

Al cabo de unos minutos, Nicolás respondió mi mensaje.
Nico: Nada nuevo eh. Que pasó esta vez?
Belu: Puedo resumírtelo como un… “me deja de lado y prefiere irse a esas jodas que pasar al menos un fin de semana conmigo”
Nico: Y vos? Por qué no lo acompañas? Aunque ya se tu respuesta, “soy diferente y rara a las demás”
Belu: Que raro usted siempre riéndose de mí! Y sí, sabes que soy así. Hasta llegué a pensar que no soy el tipo de chica para Tomás..
Nico: No digas estupideces y mira el lado positivo. Otro día más para que puedas hacer lo que quieras
Belu: Otro sábado más para que pueda aplastarme en mi cama y desvelarme jugando.

Tal vez Nicolás tenía razón. Tenía razón en que era diferente y rara aún cuando lo decía bromeando. No soy el tipo de chica que se interesa mucho por la ropa y el maquillaje, que sale a clubs o bares los fines de semana y todas esas cosas que haría cualquier adolescente común y corriente. Me gustaba leer, mirar series o anime y jugar videojuegos, es por eso que suelo quedarme en mi casa en vez de salir. Apenas salía con Tomi cuando él me invita a comer o al cine.

Nico: Y clarooo! Aunque no podré hacerte compañía porque yo también voy a salir
Belu: Genial. Aprovecharé para dormir temprano.. Zzz…
Nico: Sí que andas muy boba hoy
Belu: Por qué? Tengo que dejar el celular y prestar atención a la clase, hablamos después

Lo apagué y miré a Tomás. Se encontraba hablando con su amigo que tenía al lado en vez de interesarse por la clase de biología. Nunca más cambiará, pensé.

Había sido un extenso día en el colegio. Realmente sentí que Tomi estaba un poco cortante y eso es algo que no soporto, no veía la hora de irme a casa y descansar un poco. Eran las dos y cuarto de la tarde cuando llegué y encontré a mi abuela con mis hermanos, comiendo en la cocina.

—¡Beluuu! —exclamó Josefina mientras se acercaba para darme un abrazo— ¿Cómo estás? ¿Cómo te fue en el colegio?

Mi abuela Josefina, o Jose, como le decíamos todos, aparentaba de unos cincuenta años y parecía joven a su edad. Era una mujer de pelo largo y lacio, como el mío y el de mi madre. Su cabello teñido color rojo cobrizo resaltaba sobre su piel morena y la verdad es que le quedaba perfecto. Con pocas arrugas en su rostro y unos ojos color avellana parecía muy joven.
—Bien abuela, muy bien —respondí mientras le daba un beso en la mejilla. Aunque no fuera cierto, no quería que ella me vea mal— ¿Qué hiciste de rico?
—Unos ravioles de ricota, tal como te gustan —me sonrió, y le devolví la sonrisa.
—Sabés perfectamente mis gustos. Gracias abu, deja que me cambie la ropa. Volveré enseguida.

por **Cinna.** Dom 19 Mar 2017, 9:15 am

Capítulo 3

Me dirigí a mi dormitorio con la ropa en mis brazos. Cerré la puerta y me saqué el uniforme, lo cambié por una remera gris de mangas largas y unos pantalones negros gruesos. Saqué el celular de mi bolsillo, lo prendí y lo deje en mi mesita de luz mientras me cepillaba un poco el cabello. En ese momento, empezaron a llegar las notificaciones de todos los mensajes que aún no había leído. Algunos eran de Tomás y otros de Nicolás.

Tomi: Nena, me pasás lo último de geografía que me olvide de copiar?
¿Era en serio? Estuvo cortante en todo el día y ahora me pide cosas… No le respondí y preferí pasar al otro chat.

Nico: Ah, por nada. Dale! hablamos cuando puedas
Decidí responderle mediante un mensaje de voz.

—Ya llegué a mi casa, ¿qué haces? Avísame cuando quieras para jugar, sino me aburriré toda la tarde.
Luego de responderle, fui a comer los ricos ravioles de mi abuela.

—Decime, Lore, ¿algo que quieras hacer este finde?
Lore es mi mejor amiga. Hoy había faltado al colegio y la extrañé muchísimo. Ahora mismo, estamos hablando por teléfono. Le había contado en cuarenta y tres minutos todo lo que había pasado en el día.

—Si este resfriado se va y me deja libre, podríamos ir al nuevo bowling que abrieron en Devoto con las chicas. O no sé, tira alguna idea vos.
—Me da lo mismo mientras salga de mi casa y me despeje un poco. Pues, iremos al bowling.
—Ya veremos en esa noche que hacemos —río— Tal vez, podríamos buscar algunos chicos en el…
—No quiero nada de chicos en nuestra salida de chicas —aclaré, riéndome— Además, sabés que no soy capaz de unirme a tu búsqueda y caza de chicos.
— ¡Perfecto! ¿Algo más que desee agregar a nuestra planificación del sábado, señora Arellano? —dijo Lore irónicamente.
—Por ahora no.
— ¡Perfecto! —repitió— Te veo en mi casa a las ocho. Tráete tu ropa y tu maquillaje, por fi.
—Dale, chau Lore, espero verte mañana en el colegio.
—¡Adiós Belu! —colgó.

Miré la hora y mi reloj marcaba las seis y veinte. En ese momento, me llega una llamada de Nico y atendí.

—¿Qué no sabés que primero me tenés que pedir permiso para llamarme? —contesté.
—Ey ey… perdona, se me había olvidado —río— Recién terminé de ayudar a mi padre con su trabajo y ví tu mensaje, como andaba medio aburrido decidí llamarte.
—Sólo bromeaba, tonto. Que bien.
—¿Qué anda… bas ha-cien.. do? —se escuchó entrecortado.
—No entendí, las llamadas por Whatsapp no son muy buenas y siempre tienen interferencias.
—Ay, bueno… No tengo crédito para llamarte. Me sale muy… ca-ro u-na llamada de larga distan-cia.

Tenía razón. Nico vivía lejos, en Bahía Blanca, mientras que yo vivía en la Ciudad de Buenos Aires. Aunque estuviéramos en la misma provincia, la distancia era mucha, casi de unos seiscientos kilómetros.

—Como dije anteriormente, solo te bromeaba —reí— No es mi culpa que no tengas una buena señal de internet en tu puebli… —y colgó la llamada.

Al mismo tiempo, me llegaron varios mensajes de él.

Nico: Perdona! Ahora te llamo en un rato, espera que consiga buena señal
Belu: No pasa nada
Y así fue, al cabo de unos tres minutos me llamó de nuevo.

—¿Hola? ¿Se escucha bien? —dijo.
—Sí, sí.
—Genial. Cóntame que pasó hoy, pareces algo así como enojada, sin ánimos de hablar.
—Ya sabés lo que me paso, hasta me canso de repetirlo —le contesté mirando hacia la ventana.
—Bueno si no querés no pasa nada, pero no te pongas así por tonterías. Seguro cambia de opinión al ver que no irás.
—No creo, pero gracias por tratar de levantarme el ánimo —sonreí. Él era un amigo en el que podía confíar.
—Y vos sabés que si te pasa algo o tenés ganas de hablar estoy acá. No importa si son las tres de la mañana, siempre estaré. No me gusta ver como mis amigos se ponen tristes o pasan por un mal momento.
—No estoy triste, simplemente que… No sé. Es una mezcla de cosas. Cuando esté segura de lo que estoy sintiendo te lo podré explicar. Ahora, cambiemos de tema.
—Mejor.

Y creo que estuve hablando el resto de la tarde con él hasta la hora de preparar la cena. Amigos como él valen la pena. Ojalá tuviera más amigos así, que te escuchen, que te hagan reír y que te hagan pasar un buen momento.

readme:

por **Carstairs** Mar 21 Mar 2017, 8:11 pm

Hola, como estas? me gustaron mucho los dos capitulo, voy a estar esperando a que subas mas

por **Cinna.** Lun 27 Mar 2017, 3:55 pm

Capítulo 4

En eso de las nueve y media de la noche, cerré la puerta de mi dormitorio y bajé al comedor. Encontré a mi hermano sentado en el sofá mirando la televisión, mientras que mi hermanita estaba hablando con mi madre acerca de lo que había hecho hoy. Se dió vuelta para saludarme.

—¿Dónde estabas? No te ví cuando llegué —dijo Raquel, mi madre, mientras se apartaba sus mechones castaños de la cara.

—¿Tengo que tomar eso como un regaño? —comenté.

—No contestes así, es de mala educación.

—Pues estaba en mi habitación con uno de mis amantes —le respondí sarcásticamente.
—Ya, séntate a comer que en un rato se tienen que dormir —contestó de mala gana.

Luego de unos minutos, ya nos encontrábamos todos comiendo y hablando en la mesa. Mi madre preparó carne con papas al horno y no había quedado ninguna porción, fue así que nos quedamos conversando hasta que llegó la hora de dormir para empezar la rutina diaria nuevamente.

Me desperté y el reloj marcaba “sábado 22 de agosto de 2015, 10:39 AM”. El día de ayer, había sido como cualquier otro, sólo que ayer no había hablado nada de nada con Tomás e incluso parecía enojado, aunque preferí no darle mucha atención a eso. Recordé que hoy salía con mis amigas y cambie un poco mi estado de ánimo.

Bajé para tomar algo y no encontré a mi familia, seguro habían salido a comprar algo y ni me avisaron, pero mejor. Podía disfrutar de la soledad y la paz por un ratito.
Mientras revolvía mi taza de café y prendía el televisor, me llegan varios mensajes de Tomás y del grupo que tenía con mis amigas.

Tomi: Decime que hoy venís!

—No Tomás, no. Hoy salgo con mis amigas, que hace tanto no lo hago. Divertite, ya sabes lo que no tenés que hacer. Besitos —le respondí mediante audio.

Pasé al siguiente chat.

Las del fondo —cabe aclarar que así se llama mi grupo, porque mis amigas y yo nos sentamos en el fondo del salón de clases.

Lore: Hoy voy con Belu al bowling de Devoto, alguna se copa y nos acompaña? Luego vamos a tomar y comer algo por ahí.

Sofi: A qué hora? Me fijo si puedo
Vale: Hoy estoy libre, yo voy. Nos juntamos en tu casa?
Lore: Sí! A las 8. Avisen después

Deje el celular sobre la mesa y prendí la radio para escuchar música, eso me motivaba a ponerle onda al día. Empecé a limpiar la casa. Lavé los platos sucios de anoche, hice las camas, acomodé los adornos del comedor y me fui a bañar. Amaba las duchas “matutinas”. Me despertaban más, y sentir el agua caliente era una sensación relajante.

Al salir del baño, me puse a tararear una canción y me peiné el cabello húmedo. Me lo sequé y me até una cola de caballo, luego de vestirme con una camiseta y unos pantalones violetas. Una vez cambiada, me tiré a la cama y suspiré. Busqué mi mochila y saqué mis carpetas y lapiceras para hacer la tarea de ayer.

“Historia. 1) Desarrolle las causas y consecuencias de la Primer Guerra Mundial.”
Seguro era la única que hacía tarea de historia un sábado, pero era mejor para mí, así luego no tenía nada para hacer y estaba completamente libre. Me entretuve un buen rato resumiendo en mi libro y escribiendo las respuestas, hasta que no sé como pasó, pero me quedé dormida.

En aquel sueño podía ver que estaba en la recepción de un lujoso hotel. Me dí vuelta para mirarme al espejo y estaba vestida de una forma diferente. Vestía un abrigo de terciopelo negro muy grande, llegaba dos dedos por encima de mis rodillas. Mis piernas estaban cubiertas por unas medias de nylon oscuras, y en mis pies llevaba unos zapatos de taco alto, también color negro. Mi pelo color chocolate estaba bien peinado, y mis labios pintados de un rosa oscuro resaltaban sobre mi tez blanca. La recepción tenía una iluminación tenue, se podía ver como colgaba una lámpara de araña con muchas velas encendidas, y daba la sensación de estar en un lugar cálido e íntimo. De repente, escuche unos pasos por el lado de la entrada. Me dí vuelta y encontré un hombre vestido formalmente, con una camisa y unos pantalones de vestir. Aquel hombre se acercaba a mí y me tomó de la mano, pero no podía distinguir bien su cara, había algo que me lo impedía.

—Belén… —dijo él, mientras hacía mi mayor esfuerzo para tratar de ver su rostro.

por **Cinna.** Jue 30 Mar 2017, 3:05 pm

Capítulo 5

—Belén… Belén, ¡Belén! —dijo mi madre por tercera vez. Me desperté y mire para mi alrededor. Seguía en mi dormitorio, con los libros abiertos en mi cama y algún que otro lápiz suelto.

—¿Qué? —respondí.

—¿Cómo qué? Te quedaste dormida y no comiste nada. Nos fuimos pensando que te harías cargo de tus necesidades y sólo te la pasas durmiendo. Son las cuatro de la tarde, a esta hora ya deberías merendar al…

—Shh —susurré— Ya está, no me voy a morir por no comer, mamá.

—Levantáte, traje medialunas para merendar —respondió saliendo de mi habitación.

Me levanté y mire todo a mi alrededor. Nunca había tenido ese tipo de sueños, donde estaba con algún chico en alguna situación “amorosa”. No recordaba bien lo que había sucedido, pero lo que si recuerdo es que no podía verle la cara y eso me dejó con mucha intriga.

—Fue un sueño como cualquier otro, nada interesante —hablé para mi misma.

Cepillé un poco mi cabello y bostecé. Debía empezar a hacer algo ya, antes que seguir tirada y solo me agarre más fiaca, en unas horas tenía que ir a la casa de Lore.

Bajé al living y tomé dos medialunas. Me senté en el sofá y empecé a comer mientras hablaba con mi madre.

—Hoy salgo con las chicas, creo que te lo dije, pero te lo recuerdo.

—Sí, Belén. ¿A qué hora volvés?

—No lo sé, pero Lore me invitó a dormir en su casa.

—Está bien, no te olvides de la ropa de dormir.

—Lo sé, lo sé. Voy a bañarme de nuevo.

Cuando salí del baño el reloj marcaba las seis y cincuenta. Empecé a preparar mi mochila con todo lo que iba a llevar. Primero, busqué mi “ropa de dormir”, que consistía en un pijama grueso color verde oscuro. Luego, busqué la ropa que me iba a poner para salir. No tenía mucho, pero supuse que unos jeans y una camiseta beige bordada con unos pequeños diamantes estarían bien. Agarré el par de botas negras que reposaba en mi estantería y las metí en una bolsa, para que no se ensucien al llevarlas dentro de la mochila. También busqué mi maquillaje y mi planchita de pelo, mi cepillo de dientes, un poco de dinero para la noche y unos chicles. Ya estaba lista. Sólo me tenía que cambiar en la casa de Lore.

—Listo, mamá. Ya estoy lista. Me voy.

—Espera, no vayas sola. Tu padre te llevará en el auto.

—Mmm bueno, está bien —me senté a esperarlo.

Pasada las siete y cuarenta, llega mi padre a casa. Venía de comprar unas cosas para el hogar.

—Belén quiere ir a la casa de su amiga, ¿la llevás? —preguntó mamá.

—Claro que sí… Pero, ¿a qué hora vuelven? —contestó mi padre mientras posaba su mirada en mí.

Muchos decían que me parecía a Pedro, mi padre. Teníamos el mismo color de pelo, los mismos ojos oscuros y la misma tez. Tal vez, sí me parezco mucho, porque nuestra personalidad es casi la misma: callados e introvertidos, con un aspecto algo serio.

—Me quedo a dormir en la casa de Lorena —respondí.

—Bueno, vamos que te llevo —dijo mientras se dirigía hacia afuera.

—Adiós, mamá —la saludé mientras salía con paso acelerado.

Cuando llegamos a la casa de Lorena, saludé a mi papá y me bajé del auto. Toqué el timbre y esperé a que me abra.

—¿Quién es? —gritó Lore.

—Tu novio —reí— ¿Quién más? Yo, Belu.

—Hola tontis, pasa —dijo mientras me dejaba el paso y cerró la puerta.

—¿Llegó alguna de las chicas? —pregunté mientras la seguía hacia su habitación.

—No, fuiste la primera.

—Ah, bueno. Permiso —contesté entrando a su dormitorio.

El cuarto de Lore era muy grande. Las paredes eran blancas y la mayoría de las decoraciones eran de un color turquesa. Tenía dos armarios medianos color negro con un espejo en una de sus puertas, un escritorio ubicado en una de las esquinas de la habitación y un tocador con sus maquillajes y esmaltes sueltos por ahí. Además, el piso estaba cubierto por una alfombra grande y extensa, también de color turquesa.

—Vení, sentate Belu —dijo mientras se sacaba sus pantuflas de conejito y se acostaba sobre la alfombra. Parecía como si recién
se acababa de levantar, seguía con su pijama puesto.

—Ay, que cansada estoy —bostecé— Mira, traje esto.

Lorena se levantó para mirar y agarró la camiseta beige que saqué de mi mochila.

—¿Y esto es para dormir?

—¿Qué? ¡No! Es para ahora, cuando vayamos al bowling.

—Parece algo que se pondría mi abuela, es muy… simple.

—Y bueno, no tengo otra cosa que ponerme. Así que lo…

—Shh —fue a uno de sus armarios y lo abrió— Voy a buscarte algo mejor.

—No te molestes Lore, en serio, me pondré esto.

Y ella seguía buscando, hasta que empezó a sacar varias prendas y las arrojó a su cama.

—Anda mirando y decime cual te gusta.

Había como cuatro tops y tres shorts en su cama. Ambos eran cortos y de talla chica, no es algo que suelo ponerme todos los días.

—Como que no estaría siendo de mi estilo... —musité.

Lore se dió vuelta y me miró.

—Ya verás que sí, te voy ayudar —río, mientras seguía sacando más ropa.

por **Cinna.** Sáb 01 Abr 2017, 5:36 pm

Capítulo 6

Ahora me encontraba en el baño, probándome la ropa que me pasó Lore. Me puse un top de mangas largas color carmesí, unas medias de nylon oscuras y un short negro, y salí para mostrarle como me había quedado y que opinaba ella.
—¡Te queda re bien! —exclamó sonriendo.

—¿No crees que es… demasiado… para ir a un bowling?
—¿Qué tiene? Si te queda perfecto, ¿qué importa que sea demasiado? Además, ya te dije que podemos ir a un bar después de eso. Quedémonos hasta tarde —sonrío.

—Está bien, ganaste —le contesté mientras ponía los ojos en blanco— Ahora cambiate, mientras me voy a maquillar.

—Dale —dijo Lore mientras agarraba ropa para cambiarse.

Aproveché para agarrar mi celular y ver si tenía mensajes. Miré el chat que tenía con Tomás, pero no me contestó cuando le mandé el audio. Me preocupé y le mandé otro.

—¿Pasa algo? ¿Estás enojado? Es raro que no me hayas escrito en todo el día… Como sea, espero que la pases bien.

Al rato, volvió Lorena vestida con un top verde y un short negro. Aquel top combinaba con el color de sus ojos, que también eran verdes, y le quedaba muy bien con su largo cabello oscuro.

—¿Otra vez rógandole que te responda? —preguntó— No te preocupes si no te responde, deberías hacerle lo mismo. Te soy sincera nena, pero ese tipo… No me agrada.

—Sólo le mandaba un audio. Nada más.

—No es algo que pasa por primera vez —pausó— No es que quiera meterme en su relación pero, ¿cuántas veces hace lo mismo de no responder apenas se “ofende”? Así no se solucionan las cosas. Y vos solo decís, ya se le pasará, y disimulas tu tristeza diciendo que es un chico perfecto y tierno, y todas esas co…

—Basta —traté de callarla— No me hagas pensar en eso por favor.

Aunque quiera negárselo, tenía razón. No era la primera vez que hacía lo mismo. Había veces que ni peleábamos y lo notaba raro, sin ganas de hablarme. Y otras veces que tenía miedo de preguntarle que le pasaba por miedo a su reacción, miedo a que se enoje.

—Sólo espero que algún día cambies de parecer —respondió y sonó el timbre— Ah, debe ser alguna de las chicas. Ya vengo, voy a abrir.

—Está bien.

Justo me llega un mensaje de Nicolás. Lo abrí.

Nico: Que opinas Belu? Que me pongo para hoy?

Unos segundos después, me llegan dos fotos con dos conjuntos diferentes. En una había una camisa a cuadrillé roja y azul con un pantalón negro, y en la otra; una remera negra con un pantalón blanco.

Belu: Opino que pareces mi amiga pidiéndome opiniones jajaja, pero creo que te quedaría bien el de la primer foto!

Al rato, respondió con otra foto.

Nico: Así? Ignora mi cara de recién me despierto! Jaja

En la imagen, aparecía él de frente de pies a cabeza, tomándose una selfie en algún espejo. Su pelo negro azabache parecía algo despeinado, revuelto, pero aún así le quedaba bien con aquella barba de tres días. Tenía puesta la camisa y el pantalón negro y sonreí de satisfacción, ya podría ser una asesora de imagen.

Belu: Siii, mira vos, tenés una amiga asesora de imagen.

Nico: Gracias boba!

Decidí sacarme una foto en el espejo de Lorena mostrando mi conjunto y se la mandé a Nicolás.

Belu: y que opinás vos? Así me voy a dormir jaja

—Ey, hola —saludó Valeria mientras entraba a la habitación— ¡Están re lindas las dos! —exclamó señalándome a mí y a Lorena.

—Gracias —respondimos al unísono.

—Creo que solamente seremos nosotras tres. Sofi no puede venir, Cami tampoco —explicó Vale mientras se miraba al espejo— Por cierto Lore, ¿me peinás? —dijo moviendo su cabellera rubia.

—Por supuesto —respondió ella.

Mientras Valeria se ponía unas botas negras, Lore buscaba unos peines y unas gomitas transparentes para peinarla y comenzaron a hablar. Yo solamente me sumergía en mis pensamientos mirando hacia la ventana, pensando en que estaría haciendo él.

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por **Carstairs** Dom 02 Abr 2017, 4:09 pm

Hola!! que bueno que subiste capitulo, había leído en 4 y estaba esperando que subas el quinto por ese sueño super raro con un chico :posmecallo:

.
Claro que yo quiero una maratón!! así siento que estoy leyendo un capitulo muy largo always on my mind 2686721104

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