meta-humano: academia

Capitulo 1: la llegada

-sácame tus sucias manos de enzima-grito la voz de una chica joven desde el otro lado de la gigantesca puerta de metal. La puerta se abrió e instintivamente las tres chicas que estábamos nos tapamos la cara por la fuerte luz que entraba al cuarto oscuro. No pude ver las facciones de la chica debido a la luz pero era alta y delgada.

-¿Quién demonios te crees para tratarme así? - la chica se abalanzo sobre la puerta pero el guardia la cerro deprisa haciendo que la joven se golpeara la cara en la puerta. Su voz sonaba joven tal vez unos 18 años-imbécil...

El silencio lleno la sal por un par de minutos, solo se escuchaba la respiración de la chica que había entrado en la sala, la chica se puso de pie y comenzó a golpear la puerta estruendosamente.

-es inútil, esta hecha de adamantium- dijo la chica que estaba en un rincón, era la primera vez que la escuchaba hablar desde que me habían traído.

-¿quien esta ahí?-pregunto la recién llegada con un ligero tono de temor en su voz.

-soy Kriss y ellas son Samantha y Laura-dijo con mucha confianza mientras se colocaba de pie- Laura, querida, ¿te molestaría iluminar este lugar?-la chica que estaba a mi lado, Laura, se coloco de pie y de la nada en sus manos apareció una luz diminuta que luego produjo humo para pasar a transformarse en una llama.

Las caras de todas se iluminaron dejando ver rostros jóvenes, la chica que de manera extraña conocía nuestros nombres tenia una mirada firme pero juguetona, sus pupilas eran increíblemente parecida a la de los gatos. Laura era pelirroja tenia una mirada dulce pero sus labios le daban un rostro firme y duro como el de una adolecente molesta. La chica que acababa de entrar era rubia de mirada profunda pero tierna, sus labios estaban apretados como si estuviera apunto de golpear a alguien.

-¿quien demonios son ustedes?-dijo la rubia, Kriss se acerco rápido a una rendija de la puerta mientras nosotras nos mirábamos sin entender nada.

-¿que acaso eres sorda? La pelirroja es Laura, la de lindos ojos es Samantha y tu servidora es Kriss- Kriss parecía segura de si misma mientras trataba de ver por la rendija- querida de verdad te explicaría como deletrear cada nombre pero tengo planes en una hora y no puedo llegar tarde- sonrió mirando a la

rubia y luego miro a Laura, se acerco a ella velozmente, la tomo de la cabeza y ¡dios mio, la beso!. Se alejo de Laura (quien estaba impactada), se acerco a la puerta y de una botella pequeña saco un poco de agua, controlo el agua de manera dificultosa, la coloco en la hendidura en donde iba una llave e hizo una replica de esta, la puerta se abrió dejando ver la oscuridad de la noche.

-¿Qué...demonios te sucede?-le pregunto Laura a Kriss quien tenia una sonrisa gigante.

-solo fue un beso, lo lamento, pero al menos logramos salir-hizo una mueca doblando la sonrisa.-¿nos vamos? Dudo que se quieran ir solas en mitad de la noche en un lugar que no conocen.

Hasta el momento no había dicho nada pero ya era hora de que me hiciera notar, ninguna de estas chicas parecía reaccionar a lo que sucedía.

-yo me largo-dije mientras caminaba hacia la puerta en donde estaba Kriss- ¿hacia donde?

-así me gusta –sonrió y entonces pude ver que la mirada felina que antes tenia había desaparecido- Barbie y Laura si quieren se quedan así los guardias tendrán a quien culpar- camino hacia unos escritorios que habían cerca en donde había un guardia dormido, enzima del mesón estaban mis cosas y supongo que las de las chicas-¿Cuáles son las tuyas?

-el bolso café y el gorro- me los lanzo mientras caminaba hacia una puerta descuidada de color café.

Salimos el clima era templado, cuando llegue estaba tan... frio, me tuve que quitar la chaqueta que llevaba y al verme Kriss reia.

-¿Qué es lo gracioso?-pregunte, las chicas venían detrás de nosotras.

-se le llama plack, es un programa que hace que veamos el clima y las temperaturas de diferentes formas.

-cuando llegue nevaba...-dijo Laura. Kriss nos llevaba por una colina mientras nosotras la seguíamos.

-¡si hablas!- dijo Kriss- bueno, debido que son nuevas les doy la bienvenida a la academia, te dan comida, techo, salud, chicos guapos. Te gustara, Barbie.

-primero deja de llamarme Barbie, soy Karla, Karla Devonne, fuerza y ustedes.

-Laura Keynes, control de los elementos

-Samantha Wallser, regeneracion

-bueno, Kriss Deaton, metamorfosis, aun trabajo en el nombre pero por ahí va.

-¿Cómo sabias nuestros nombres?- pregunto Laura

-en el escritorio había unas carpetas tenían sus nombre y mucha información sobre ustedes.-Kriss dejo de caminar y nos entrego unos papeles que tenia en la chaqueta.

Kriss nos los paso pero en la oscuridad de la noche no veíamos nada, ella solamente se quedo miran enfrente, hacía el edificio.

-¿Qué es eso?-preguntamos al unísono mirando el edificio que tenia una luz hermosa, era como cuando los mosquitos van hacia la ampolleta.

Mosquitos hacia la ampolleta, se sentía cruel, quien sabe si la academia se parecería, quizá íbamos hacia un hoyo sin fondo o quizás estemos tomando la mejor decisión de nuestras vidas, pero al igual que los mosquitos no lo sabremos hasta llegar.

El camino a la academia fue lento y al parecer a las demás chicas no les agradaba mucho la idea de hablar con Kriss pero para mi era la forma de saber muchas cosas. 
-¿Por qué nos tenían en ese lugar?-pregunto a Kriss quien solo sigue caminando.
-ese es como "la sala de castigo" te llevan ahí cuando te sales de la academia. 
-¿no nos dejan salir de la academia?-pregunto Karla bastante seca, fingiendo que le daba igual. 
-no si eres nivel 1-nadie nos había hablado de los niveles, se notaba en nuestras caras y por lo visto Kriss lo noto- en la academia nos dividen en niveles, nivel 1 :novatos, se nos enseñan a controlar nuestros "dones";nivel 2: guias y mejoras, tratan de exprimirte como una uva, nos hacen ayudar a los novatos y conocer los limites de nuestros poderes; nivel 3:convate, se nos enseña toda clase de cosas como para la guerra, no se sabe mucho del nivel pero básicamente te enseñan combate; nivel 4 : son como misiones y formas equipos, son los únicos que no necesitan autorización para moverse fuera de la academia; nivel 5: los altos mandos, son quienes lideran todo esto.
-¿a que nivel perteneces?-pregunte, Kriss no parecía mala además seria bueno conocer a alguien. 
-o mas importante ¿Por qué tu también estabas encerrada, por que querías salir?- pregunto Laura  
-yo no quería salir, quería entrar, salir es fácil, entrar por potro lado... no tanto- Kriss dejo de caminar y me di cuenta de que habíamos llegado a un sector de picnic que se encontraba cerca del edificio- soy nivel uno y debemos esperar aquí unos momentos antes de que vengan por nosotras- Ella se sentó y saco un celular mientras nosotras permanecíamos de pie. 
-¿Cuánto tiempo llevas en la academia?-pregunte en voz baja, mas baja delo que hubiera querido. 
-mmmmm como desde los 5 años- Laura y Karla se miraron impresionadas por todo el tiempo que Kriss llevaba-aguarden un momento- se coloco el celular en la oreja y comenzó a llamar por teléfono, luego de unos segundos comenzó a hablar- se que me demore mas de lo que te dije pero...si lo se...no era tanto dinero...-alejo el celular de su oreja y nos miro-¿tienen dinero? Unos 10 tal vez...
-no voy a pagar tus deudas- le dijo Karla con voz y rostro de indignada. 
-gracias-sonrió Kriss sínicamente- si... no, no estoy sola... son tres chicas...no vamos a pagar extra... son lindas, una es de tu tipo...-miro a Karla-¡demonios James no le tomare una foto!... ¡estamos en medio del bosque a mitad de la noche!-Laura comenzó a hacer fuego con sus manos-Linda, a no ser que quieras regresar a ese cuarto oscuro te aconsejo que apagues eso. Okay... ¡te espero pero James, ven rápido!-colgó el celular. 
-¿vendrán por nosotras?- pregunte 
-si, así es, no se cuanto se tarde pero al menos vendrá
-Cuando me besaste...¿así obtuviste mis poderes?- pregunto Laura a lo que Kriss asintió-¿aun los tienes? 
-no, ya no, el efecto solo dura un par de minutos. 
Todas permanecimos en silencio y a momentos se escuchaban suspiros de parte nosotras las nuevas, Kriss solo nos miraba a ratos mientras mira el celular viendo la hora.
-si estas desde los 5 años aquí, ¿Cómo es que aun eres nivel 1?-pregunto Karla de mala manera.
-eso no es asunto tuyo-respondió molesta Kriss  
Karla iba a responde algo mas pero de un momento a otro una bruma azul comenzó a aparecer y de ella se formo una chico guapo y rubio que tenia una gran sonrisa en la cara. Kriss se puso de pie contenta de verlo mientras que nosotras dimos un paso atrás ante la sorpresa de aquel chico. 
-te tardaste- dijo Kriss seria. 
-haces que salga de una fiesta a mitad de la noche para que recoja a 4 damiselas en apuros y enzima te quejas... dios, que clase de amigos tengo.-el chico hizo un gesto con la mano como si estuviera dolido y luego nos miro de pies a cabezas pero se detuvo especialmente en Karla, luego se inclino haciendo una reverencia- yo, soy Niall Horan pero por aquí todos me llaman James-se enderezo y le guiño un ojo a Karla a lo que ella respondió con un rodado de ojos y un suspiro. James o Niall o como sea nos estiro la mano y nos miro-¿Quién sera la primera? 
Todas miramos a Kriss y ella nos miro a nosotras.
-si quieren puedo ir yo primero-dijo kriss pero Karla dio un paso al frente. 
-ni lo sueñes, nadie me asegura que volverás a por nosotras-respondió ella mientras le tomaba la mano a James. 
-valiente, me gusta...-sonrió y apretó la mano de Karla-será breve pero piensa en algo lindo. 
De la nada Karla y James desaparecieron dejándonos total silenció.

>>>>>>

Trata de no mostrar miedo, trata de no mostrar miedo. Eso fue lo único que repetí en mi mente al tomar la mano de James, este me la apretó aun mas fuerte y sentí como mis pies se despegaban del suelo. Justo cuando iba a gritar todo mi cuerpo se desvaneció, sentí que caía pero la mano de james me mantuvo firme. Mis ojos estaban cubiertos por una bruma azul  que no me permitían ver nada. 
Pestañe y la bruma azul había desaparecido para dejarme ver un cuarto repleto de gente bailando y festejando, jóvenes la mayoría. Voltee a ver a James quien me sonrió y dijo algo pero no  pude escucharlo, no se si era por el volumen de la música o por que algo sucedía con mis oídos pero luego de eso el desapareció y quede  sola en aquel lugar tratando de verme fuerte pero en el fondo tenia miedo de no saber lo que podía pasar.

La música en el lugar estaba muy fuerte pero era diferente a la música que se escuchaba en la ciudad, esta era mas seductora y relajante. El mundo me dabas vueltas y entre las luces de la fiesta y la música termine en el centro de la sala bailando con un chico muy guapo que se me acerco. En ese momento no me importaba donde estaba, no me importaba ser diferente, no me importaba que el chico me estuviera tocando el trasero, solo quería bailar y relajarme y era exactamente lo que haría. 
>>>>>> 
James ya se había llevado a Samanatha, solo quedabamos Kriss y yo. Y aquí entre tu que lees y yo, me aterra la idea de simplemente esfumarme. 
-¿estas lista?-me pregunto Kriss con una amable sonrisa, James acaba de regresar y parecía cansado, cerré los ojos para calmar el fuerte palpitar  que tenia. Mi mano sola llego a la James pero antes de irme Kriss se acerco- todo saldrá bien- me miro a los ojos y pude ver los ojos de gato que tenia, me sentí aliviada, como si mi sangre corriera mas despacio y mis pulmones volvieran a trabajar.-estarás bien, lo prometo. 
Lo siguiente que sentí fue como mi cuerpo se desvanecía, cerré los ojos y apreté fuerte la mano de James, este me tomo aun mas fuerte y lo siguiente que sentí fue como mis pies estaban en tierra otra vez. Me encontraba en una sala llena de personas y con una música horrible, Samantha me miraba con los ojos bien abiertos y sonriente, me ayudo a recomponerme e hizo que me sentara en una banca que había cerca. 
-Iré por Kriss, Samantha, no se muevan de aquí ¿okay?- Samantha solo asintió.  
Podía sentir como mi cuerpo reacciona de diferentes formas por el traslado, mi sangre ardía, mis brazos estaban congelados y mis piernas solo querían moverse. 
Lo siguiente que pude percibir era que Kriss, James y Samantha hablan. Todos parecían estar bien, salvo James que parecía cansado pero estaba relativamente bien. Trate de ponerme de pie para no parecer débil pero mis pies no me respondieron y  hubiera caído al suelo si los chicos no me hubieran ayudado. 
-estoy bien-dije mientras apartaba sus manos. Kriss se arrodillo frente a mi y comenzó a verme fijamente, como antes. Mi cuerpo se normalizo y me cabeza dejo de dar vueltas. Ya estoy bien, el alivio recorrió todo mi cuerpo pero no duro mucho cuando vi el rostro de preocupación de los demás.- ¿Qué sucede? 
-es Karla, no la encontramos-respondió Samantha  mientras se subía sobre unas sillas tratando de tener mayor visión. 
-debes salir en 5 minutos, sino no hay paga-dijo un joven que acababa de llegar, era pelirrojo y delgado. Nota mental: el chico que habla con Kriss es guapo. 
-Thomas de verdad necesito mas tiempo, tenemos un problema-le dijo Kriss con tono suplicante, Thomas nos miro a cada uno de nosotros y yo le retuve la mirada. Nota menta: el chico guapo que habla con Kriss se llama Thomas y tiene lindos ojos.  
-5 minutos, no puedo darte mas, llevamos escuchando esta mierda durante 30 minutos- le dijo señalando hacia tras refiriéndose a la música. 
Kriss miro a James quien parecía preocupado, ella solo le dijo que si a Thomas con un movimiento de cabeza y este se fue. 
-tenemos que encontrarla, no sabemos lo que el viaje pudo provocarle.-dijo Kriss mientras miraba con preocupación a su alrededor.  
-pero tu debes salir a cantar, las chicas no conocen el lugar y yo apenas puedo mantenerme en pie si viajo así puedo tener problemas. -cantar, me gustaba cantar, supongo que es porque soy buena, entonces una idea vino a mi cabeza. 
-oigan-dije con tono normal, nadie me escucho. Me puse de pie y camine hacia ellos-¡oigan!-todos me vieron y se acercaron a mi- se que hacer, Kriss ¿puedes convencer al chico de hace un momento de que yo cante un par de canciones en tu lugar?-Kriss se encogió de hombros y asintió-James ve con Samantha a buscar a Kriss, solo caminen, ella será tu apoyo. 
Todos asintieron y nos separamos, trate de caminar sin que mis piernas se doblaran, era difícil, aun no me reponía del todo pero estaba mejor que hace un rato. Kriss se acerco al chico y comenzó a hablar con el, este no parecía muy contento con la idea, me miro de pies a cabeza con el ceño fruncido pero al final miro a Kriss y le dijo que si. Kriss salto de alegria y luego fue hacia mi. 
-okay, nos dejo que cantaras dos canciones. Son como 10 minutos, tiempo es tiempo...¿sabes que cantaras?-demonios no pensé en eso, solo conocía un par de canciones que podría cantar pero  habían fragmentos que no recordaba. Solo había una que conocía de memoria, debería haberle dicho a Kriss que solo sabia una pero no quería hacerle perder tiempo. 
-si, estoy lista-asentí y Kriss tomo un micrófono que estaba sobre la mesa, apretó un par de botones y salió al escenario, la horrible música se había acabado. 
-¡buenas noches amigos míos!-la gente comenzó a gritar como loca y Kriss solo reia- me alegra saber que aun me recuerden- hizo una pausa, ella reía y sonreía, no era una mala chica como yo había pensado luego del beso, no, Kris era buena- hay una amiga aquí detrás-señalo hacia el lugar en que yo estaba- que hoy cantara unas canciones, si tienen respeto por todos los favores que les he hecho, la cuidaran mientras vuelvo, ¿okay?-el publico respondió con un gran OKAY y Kriss bajo del escenario, me entrego el micrófono y me guiño un ojo- lo harás bien. 
Tome el micrófono con fuerza y subí al escenario, todos se quedaron en silencio, respire hondo y comencé: 

musica:

Me salieron lagrimas me di vuelta rápidamente, las seque y volvi mirar al publico. Todos aplaudían, era aceptada, les había gustado, sonrei, tube una gran sonrisa. 
Pero ahora debía cantar otra canción y no tenia nada. Vacío total. Comencé a mirar a través de las personas, no conocía a nadie pero de la nada encontré la mirada de Samantha, ella sonreía, le hice un gesto y al parecer ella entendió, por que subió a una mesa me miro. 
-era Rodolfo un reno-comenzó a cantar un villancico, los demás reían y yo decidí seguirle la corriente a Samantha, cantamos juntas y luego todos nos siguieron. Fue un momento extraordinario, todos cantaban, reían y sonreían, era como si fueran... como si fueran una familia.

rodolfo: