OUR 2015

Bueno, 2015, te odié de mil maneras y todas justificadas pero quiero dejar de ser egoísta por un momento. Te consideré mi peor año pero a la vez uno necesario, uno indispensable para encontrarme a mi misma y saber quién soy y con quién debo estar; te desvaloré muchísimo cuando en realidad quizás la culpa se incline a ser mía. 
Inicié enero sin esperanzas y sin metas porque a decir verdad no las tenía y no veía futuro. En el 2014 perdí a una de las personas más importantes en mi vida y decaí luego de eso, sentí que el mundo se me venía abajo y así fue; quise encontrar una salida en algo que no me ayudó en nada. Estaba decidida en morir este año, pero creo muchísimo en el destino y por algo no pasan las cosas.
Una noche me puse a reflexionar y a pensar, me di cuenta que en marzo/abril me llené de amigos y gente que me hacía sonreír constantemente pero yo tampoco lo valoré y deduzco que todo lo que vino después fue producto de mi poco tacto. Perdí a todos, pasé de no faltarme nada a rogar recuperarlo. Lo considero una lección que me dio la vida y debo tomarlo como un regalo (cosa que no hice a su debido tiempo). Pensé que estaba enamorada de alguien que me hacía muy mal, cuando en realidad no lo estaba en lo absoluto y lo que necesitaba era alejarme. 
Hoy 31/12/15, puedo decir que no tengo autoestima y que sigo diagnosticada con transtorno borderline y depresión severa pero que soy feliz sabiendo que estoy dónde debo estar y con quién necesito estarlo.
2016, venite con toda y espero que hagas realidad todos los deseos y metas que tengo con vos porque sí te tengo esperanza y estoy segura que sos lo que me hace falta.