Un río de lágrimas por ti, Irwin.

Ficha:

Siempre había escuchado en muchos sitios la misma frase, una y otra vez, golpeándome con fuerza, y cuando pienso qué no puede ser más doloroso, lo es. Siempre había ignorado el significado de ese conjunto de palabras, qué en este momento lo significaban todo. El no te hace bien, Mery, siempre esas mismas palabras y en el mismo orden. Pero nadie se sumergía lo suficiente en mi piel para saber que sentía, para saber lo que él me hacía sentir. Una vez, leí una frase que ahora me queda como anillo al dedo, cuando el sonríe, aparta la vista, antes de que sea demasiado tarde y caigas en su hechizo, por qué el puede verse como un ángel, pero es el mismo demonio. Me siento usada. Él decía que no era ninguna clase de manipulación, que el demostraba el amor de una manera diferente. Ahora desearía tenerle delante para poder darle un buen puñetazo, aunque no sería ni un poco de lo que yo sentí a su lado. Cada segundo, minuto, hora, día, semana, mes y año era un martirio. Pero el es tan buen actor, sus mentiras me hechizaron, esos te amo que me decía eran puras mentiras, y seguro que no era la única a la que engaña de tal modo. Perdone usted, Ashton Fletcher Irwin, pero desearía que estuvieras muerto solo para bailar sobre tu tumba. Oh, ese sería el día más feliz de mi vida.

¿Recuerdas el día qué nos conocimos? Quizás no, pues tendrás demasiadas chicas en tus manos como para preocuparte de una rubia bajita de Texas. Pero yo sí, como sí fuera ayer, hasta recuerdo lo que llevabas, y lo bien que te hacía ver. Tu venias a hacer un concierto en mi ciudad con tu banda, que se había puesto muy de moda, ¿5 seconds of summer, así se llamaba? Creo que sí. Aunque te odie, debo admitirlo, vosotros cuatro juntos sonabáis jodidamente bien. Y realmente sus canciones eran pegadizas. Tú siempre me cantabas al oído una de ellas, what i like about you. Aunque siempre me mantenías alejada de tu banda, tu decías que era por celos a que me enamorara de alguno, pero ahora sé que era para que no me conocieran. Oh. Como me gustaría que escucharan nuestra historia.

— Canta otra vez—. Solía rogarte yo, y tu comenzabas a cantar y envolverme con tus fuertes brazos.

En ese momento amaba tu voz, ahora si me cantarás, te tiraría un jarrón a la cabeza. Y no bromeo. Aún así, sigue doliendo. Todo lo que fuimos, nuestros momentos juntos,¿nunca fueron nada para ti? O mejor dicho, ¿fui algo para ti, o solo un juguete? Fui tu juguete, fui tonta. Lo sé.

¿Recuerdas cómo acabó todo? ¿Cómo acabaste tú con todo? Tonterías mías, seguro que no, tienes memoria de pez. Gracias a mi hermana, que supo abrirme los ojos. Te vi, y a ella. A los dos, juntos, besándose como si nada importara. ¿Y yo qué hacía? Lloraba en mi hermana, un río de lágrimas por ti, Irwin. Y cuando te pregunté en casa, con una gota de esperanza porque todo fuera un error y me amaras a mi, me respondes y tus palabras caen sobre mi, como un balde de agua fría.

— Es mi nueva novia.

Creo que fueron las palabras más dolorosas de mi vida. Como puñales clavándose sin parar.

¿Sabes qué? Te estoy agradecida. Fuiste el primer amor de mi vida, el imbécil que mas daño me hizo, pero aprendí a amar, aunque fuera amándote a ti, y ahora amo a una persona mejor, que no me hará daño, porque el no es tú. Y tú eres el demonio con sonrisa de ángel.

—¿Qué escribes, princesa? — escuchó la voz de Luke, y sonrió, cerrando mi diario.

— Nada amor, vamos a la cama.— digo y el asiente, acariciando mi barriga. Estoy embarazada, y me alegro de que no sea tuyo, Ashton. Es del amor de mi vida.