where do broken heart go? {muro.

Nombre: Sanddie Valentine Woodgate.
Edad: 22 años.
Rol: Shut up and dance.
Representante: Leighton Meester.

Sanddie es una chica diferente, misteriosa, muy razonadora. Lista e inteligente a la vez que madura para su edad, tiene los pies bien puestos en la Tierra y sabe que todo en esta vida cuesta y que nada te va a llegar por arte de magia. Una chica coqueta y sociable por naturaleza, suele llevarse bien con todo bien, tiene un carisma muy peculiar. Le gusta disfrutar de las cosas sencillas de la vida, le encuentra lo bueno a todo, aun por mas negro que esto se vea ella sabe como verle algo de color a lo mas triste. De un carácter fuerte, no se deja de nadie y jamas lo hará, ten cuidado si la haces enojar que puede ser algo insoportable, y no es que se tome las cosas muy a pecho si no es que cuando algo no le parece lo dice y ya, por lo que podría decirse que es una joven muy directa y sin miedo a decir lo que piensa.

Le gusta reír a todo momento a pesar de su personalidad exigente y perfeccionista, es una chica bastante alegre y divertida que busca la manera de bromear y jugar solo cuando es el momento indicado. Se interesa demasiado en las personas que la rodean, suele entregar todo de ella en las personas en quienes de verdad confía, siempre podrán contar con ella. A pesar de que su personalidad toma origen amistosa, no le gusta el compromiso por lo que es muy independientemente, con esto sucede que puede ser un tanto orgullosa y no le importa lo demás, no le gusta humillarse a si misma y vale más su orgullo y dignidad, eso lo tiene muy presente.

Una persona difícil. Difícil de analizar, y también de entender, pareciera que hasta fuera bipolar. Sarcástica y a veces también algo irónica. Es muy buena hablando con las personas y conociendo gente.

Nombre: Koda Fitzpatrick Carpenter.
Edad: 25 años.
Rol: Shut up and dance.
Representante: Ash Stymest.

Koda es un chico poco común. Un ser complejo, pero sencillo a la vez que termina por cautivar a cada una de las chicas que se cruzan por su camino con tan solo una simple mirada o una sonrisa con un cierto deje de coquetería. De unos modales dignos de un príncipe salido de cuentos, sabe usar sus atributos para obtener lo que quiere; demás está decir que esa natural caballerosidad que irradia no es eterna, tiene límites -al igual que su paciencia- bastante frágiles, que al cruzarles, hacen que aquel príncipe encantado y perfecto a los ojos de muchos se transforme en un verdadero demonio.

Su naturaleza misteriosa lo hace llamativo ante cualquiera, por mucho que a veces quiera pasar completamente desapercibido por el mundo. Usualmente se rige por una sola cosa: impulsos, de todo tipo. En algunos aspectos no piensa mucho las cosas antes de hacerlas y no le importa en lo más mínimo los errores o consecuencias que puedan desencadenar sus acciones, piensa que él es el propio dueño de su futuro, él lo forja, él lo vive, él lo construye por lo que no cree en el destino, en el cosmos, ni en ninguna de esas pavadas sin sentido. Se considera incapaz de hacerle daño a los que estima –llámense amigos, familia, amantes, etc- a menos que ellos hayan sido los que dieron el primer paso, pues si es así, simplemente se defiende hasta las últimas consecuencias.

Extremadamente cabezotas, una vez algo se le mete en la cabeza no hay cómo, ni quien le haga cambiar de opinión. Es perseverante por lo que cuando quiere algo se esfuerza al máximo y es capaz de hacer todo lo que esté en sus manos y lo que no, por conseguirlo. No tiene pelos en la lengua, si tiene algo que decirte, te lo dirá, te guste o no la manera en que lo diga, sinceridad ante todo.

Prepotente, egocéntrico, altanero, desconfiado, cariñoso, alegre, divertido, orgulloso… tiene muchas facetas, de contrastes, pero todas ellas se resumen en tan solo una: él, simplemente él, Koda Carpenter; con sus altos, bajos, virtudes y defectos.