crazy little thing called love.

Dicen que la música no hace milagros  y que la internet es una pérdida de tiempo y dinero. Querida madre, muchas veces tienes toda la puta razón de la vida y en esto te equivocas.
Es una locura como pasa el tiempo y mucho más loco es ver como el tiempo te va convirtiendo en lo que serás. Y yo, en esta chica lo he visto todo. Y mil disculpas queridísima amiga por hacer esto muchos días después, pero una madre hospitalizada algunas veces es una excusa ¿o no?
Mamá siempre dice que los locos que oigo me harán conocer ha gente mala y aún más loca. Pero ya hace cuatro años, con apenas catorce y una vida caótica, fuiste la única persona que acepto a la chica cuyo tema de conversación era un tipo que cantaba en una banda extraña cuyo nombre tiene que ver con Marte.
En ese momento, en este mismo sitio y con la certeza que era la persona más genial que conocía te hablé. Porque todo aquel que adora a Gerard Way lo vale. Y vaya que les debo mucho a Jared Leto y a MCR.
Estoy segura que en algún lugar de mi mente debe estar atesorada cada conversación. Porque me emocionaba hablarte. Era como... alucinante.
Nunca tuve una mejor amiga. Y que injusta es la vida que cuando me dio a los mejores amigos que pude desear los colocó a kilómetros y un océano de distancia. Pero creo que ya sería historia antigua sin ustedes... y bueno, sin ti.
Estoy llorando como una tonta en este momento pero es que... estoy tan orgullosa de ti. Cuando le hablé a esa tú de catorce años supe que "molabas", que serías fascinante y que sin duda alguna quería acompañarte en este camino. Quería ver con mis propios ojos como cada día serías mejor y mejor, y aquí estamos.
Gracias por las conversaciones profundas, las tristes y las alocadas. Por desvelarte conmigo hasta las dos de la mañana y por esos: Cuentas conmigo, que expresaste cuando estuve en el fondo.
Porque sé que aunque nos separa el Océano Atlántico no puedo esperar a que seas real. A darte un merecido abrazo y para llorar como magdalenas.
No puedo desearte un muy feliz cumpleaños porque llegué un pelín tarde. Pero puedo desearte un feliz dos de mayo, un feliz lunes y una feliz vida. Espero pronto hacerte tus arepas y bueno, darte las gracias por absolutamente todo en persona.
Cuentas conmigo para siempre. Y no sabes cuanto deseo que seas real.
¡Hemos esperado demasiado, por Zeus! Quiero que recuerdes, por y para siempre, que esta atolondrada venezolana siempre estará, a un click. Sólo con un enviar.
¡Ya eres una vieja, chama! Las clases de venezolanismos siguen en pie.
Jareto hoy, Jareto mañana, Jareto para siempre.

Me he pasado por aquí como suelo hacer al menos una vez al año. Ya me cambié de carrera, estoy estudiando Letras y tengo 20 años. 
Siento que la Annya que escribió esto ha sido ofrendada en una sacrificio a Zeus, aunque debo decirles que en este momento Poseidón me parece más genial para darle en sacrificio a mi antigua yo.
He vuelto a escribir y ahora tengo una historia en Wattpad, pero no dejo de extrañar esto. A esta Annya, a estos amigos, a estos momentos, a todos los recuerdos que caen sobre mí cuando entro a OWN. Cuando la vida era sencilla, cuando mis amigos estaban cerca y mi país no parecía sacado de una de esas distópicas películas de Hollywood.
Mi mejor amigo se fue hace dos años a otros país y yo realmente no me he largado porque aunque a veces esté deprimida, y con poco dinero en los bolsillos, estoy cumpliendo mi sueño. Estoy viviendo lo que siempre soñé, pero no de la manera que imaginé.
Estos días estoy deprimida. Aunque más que eso nostálgica, de ese nóstos que sentía Odiseo al estar lejos de casa. Porque aunque mi casa se sienta como mi casa y se vea como mi casa ya no es tal... Faltan las risas de tantos, los abrazos de tantos, las conversaciones con tantos que me lleno de lágrima que deben salir de alguna forma y en algún momento y eso es mientras escribo.
He estado yendo a una iglesia y aunque diga que me ha ayudado cuando estoy sola y pongo a pensar el dolor me ahoga. Es como si todo lo que siento fuese brea pegajosa que va subiendo desde mi estómago hasta mi garganta, que no me deja respirar hasta que por fin lloro.
Te extraño Annya muerta.
Te extraño tanto.

Hace mucho no entraba acá. Tengo 22, casi 23, y peso como 6 kilos más de lo que pesaba cuando paseaba por acá con frecuencia. Voy a la mitad de mi carrera, me han roto el corazón dos veces, mi mejor amigo vive en China desde hace tres años y mi mejor amiga pues... ya no lo es más. Estoy aprendiendo mandarín y francés, a veces escribo algunas cosas... cuando siento que mi corazón duele demasiado, pero ya no lloro tanto como antes. Ahora me encanta que me den abrazos y amo con locura la crónica literaria.
Hoy solicité que me cerraran esta cuenta y creo que será para siempre. Hay amigos de acá con los que aún hablo y otros que son bonitos recuerdos, a los que les deseo lo mejor del mundo aunque ya no sepa de ellos. Fueron muchos años por acá y fueron muchas personas las que conocí, pero ya esto no se siente como yo, se siente como una Annya de otra dimensión, de otro mundo, de otro tiempo tan lejano que pudiera ser recitado por las Musas.
Hay cosas que extraño, como tener 14 años y conectarme en el chat para hablar con mis amigas, ya que en la vida real nunca he sido buena juntándome con chicas y se me da mejor tener amigos. La verdad nunca sentí que me hacían falta amigas de carne y hueso hasta que salí de aquí y me di cuanta de lo mucho que representaban en mi vida y del enorme espacio que tenían en mi corazón cada una de ustedes, con sus acentos, culturas, países, religiones y cosmovisiones diferentes. Ampliaron mi visión del mundo y de la vida, mucho antes siquiera de empezar a ver las cosas por mi misma y no saben cuanto lo agradezco, cada uno de ustedes puso una piecita de lego en la Annya actual, ayudaron a construirla, a construirme.
¡Santo cielo! Estoy llorando en este momento, porque aunque odio las despedidas, me hace muy bien escribirlas, pues es una forma en la que los otros pueden saber lo mucho significaron para mí, aunque tal vez yo no representara nada para ellos, sin embargo... espero que este no sea el caso.
OWN fue una parte fundamental de mi adolescencia. Acá tuve mis primeros lectores, beta readers y amigos a distancia y aunque amo estar acá la adultez reclama mi atención y la nostalgia me embarga cada vez que paso por aquí y no me hace bien. Deseo para cada uno de ustedes, me conozcan o no, lo mejor del universo. Gracias por mantener este lugar en pie y gracias por leer esto, si es que alguien lo lee. 
Gracias por ser parte de mi vida, si ya no lo son y gracias a los que se mantienen, a los que a pesar de los años, la distancia y la vida, intentamos mantenernos cerquita. 
¡Un abrazo muy fuerte a todos! Nos leemos, ya no por acá, pero si me conocen sabrán donde encontrarme... si ya no me encontraron.