Re: Mis oscuros secretos (One Direction y Tú)

por **agustina1600** Dom 17 Ago 2014, 8:42 pm

"CUARTO CAPÍTULO"

Se encontraba en una tienda de ¿Música? Sí, pero esperen... ¿Acaso la chica que estaba en aquél estante de dsicos era ella? ¿Cómo podía ser...? Se acercó a pasos lentos y se paró al lado de la chica. Era igual a ella, esperen, era ella. Lo supo por su ropa ya que la castaña tenia un conjunto igual al que aquela chica estaba usando. Aquella chica idéntica a ella buscaba algun cd específico supuso la castaña.

-¡AHHHHHHHHHHHHH! - gritó la chica sobresaltando a la castaña -¡LO ENCONTREEEEEEE! Despues de tanto esperar... dios... son perfectos - volvió a chillar, la castaña la miró y en sus ojos se veí felicidad en ellos y tenía una gran sonrisa en su cara, por muy extraña que sonara la castaña había creido oir esas palabras antes.

Se asomó por su hombro para mirar mejor el cd que sostenía en sus manos la chica y lo vió. Las palabras estaban escritas de color negro y tenía una foto en el medio: Up All Night. Claro, ahora recordaba todo. Su mente la llevó a aquel día cuando ella había salido para ir a comprar el cd primer cd de su grupo favorito, One Direction. Asombrada por su descubrimiento volvió a fijar su vista en la chica, es decir, en ella misma. Se veía feliz, sus ojos llorosos y con una gran sonrisa abierta que dejaba ver sus dientes en su cara, solo existía ella y su cd, todo era más sensillo en aquel entonces. Pero su recuerdo no duró para siempre, de pronto todo se volvió otra vez negro. Pero varias voces se escuchaban.

"Inútil, desperdicias tu tiempo en aquellos maricas... No sirven para cantar... Son unos gays de mierda... Aléjate, me contaguiarás... Nunca los conocerás... No lograrás cumplir tu sueño JAMÁS... Ellos no saben que existes... Me das risa por creer que a ellos les importas..."

Las palabras llegaban a su corazon como diez mil puñalas juntas, matandola por dentro, despacio, destruyendola. El piso empezó a temblar, las paredes poco a poco se juntaban, el espació se iba reduciendo, dejandola atrapada. En una de las paredes leyó una frase escrita con rojo, la aturdió, no pudo evitar el miedo y lloró, todo fue su culpa...

La castaña ahogó un segundo gritó mientras más lágrimas descendian por sus ojos, trató de hablar pero no logro formular ni una palabra. Cerró los ojos pensando que así podría despertar pero al abrirlos todo fue más confuso.

Se encontraba en un cuarto oscuro. Una luz tenue brillaba desde el techo. ¿Pero que rayos pasaba? Se levanto del suelo y miro a su alrededos, nada. Estaba completamente sola, la puerta se abrio provocando un chillido molesto para sus dientes, camino a pasos lentos hacia esta, se asomó y descubrió un túnel. En el fondo, una luz brillaba pero más intensa que la de su cuarto ¿Se estaba por morir y se dirigia al famoso tunel para ir al "paraiso"? Sus pensamientos se esfumaron al oir una voz conocida, muy familiar, se oía lejana pero al mismo tiempo cerca.

-____... ayudame...

¿Estaba alucinando? La voz volvió a llamarla, pero se oía más clara, era su "hermana". No su verdadera hermana, ya que no sabia si enverdad tenia hermana o no, era la que habia sido su hermana durante estos años de su niñez, creciendo junto a ella, para la castaña era su hermana aunque fueran de disitnto ADN.

-¿Joi-Joice eres tu? - llamo a su hermana temblando y asustada, su tono era débil y no pudo evitar el nerviosismo. Camino a paso lento fuera del cuerto, adentrandose en el misterioso túnel.

No hubo respuesta.

-¡¿HAY ALGUIÉN ACA? POR FAVOR, RESPONDAN.... ¿JOICE?... ¿ALGUIÉN MALDITA SEA?... - suplico entre sollozos, se estaba empezando a desesperar al no oir una palabra o algo que le dijiera que no estaba sola. Esatab asustada.

Corrió mas rápido por aquel pasillo, desesperada, todo estaba oscuro sin contar la luz lejana que se veía en el fondo del pasillo. Una mano se aferró a sus pies deteniendola, impidiendo su carrera. Miro sus pies y se ahogó un grito al ver la cara de su hermana, suplicando entre gemidos palabras que no logró a oir, enia los ojos hinchados y con grandes bolsas debajos de ellos y varias lágrimas brotaban de sus ojos azules, su boca seca y marca de sangre en sus labios, de sus muñecas brotaban grandes hileras de sangre ensusiando su vestimenta rota y vieja, su cara se encontraba sucia.

-Tú eres la culpable que me encuentre así... Tú lo hiciste, por tu culpa no viví, tú me mataste... Tús acciones... Fuiste Tú.... Tú... Tú... Tú...

-¡NO! - se levanto sobresaltada, aquellas pesadillas que tanto la atormentaban habían aparecido nuevamente, haciendola recordar una y otra vez que todo era su culpa.

Estaba sudada con la respiración agitada. De un segundo a otro se encontraba sentada con las rodillas junto a su pecho y abrazandolas con sus manos, escondiendo la cara entre estas. Lloró. Duro unos minutos así hasta que logro tranquilizarse, miro el cielo y todavia estaba oscuro pero no tanto como antes, dentro de poco amanecería. Se acomodó entre la banca, incómoda, pero no cerró los ojos. Se quedo mirando el amanecer, era una de sus cosas favoritas.

Luego de un rato, la plaza ya comenzaba a llenarse y ella se encontraba sentada mirando. Observaba a los niños divertirse, a las madres conversando y pendientes de sus hijos, a los disintos grupos de chicas riendo y charlando, a los chicos jugando al futbol... Sintió una depresión en su pecho, todos se veían felices y riendo sin preocuparse de lo que pasaba a su alrededor. Pero un chica llamó su situación, una chica no mas de 12 años se encontraba llorando acurrucada en la pared.

Sin pensarlo dos veces se acerco a la chica y se arrodillo frente a ella.

-Oye ¿Estas bien? -la chica levanto la cabeza encontrandose con los ojos azules de la castaña.

-E-eh s-si... -tartamudeo la desconocida pasando su pulgar por sus mejillas secandolas por sus lagrimas derramadas.

-¿Segura? Puedes decirme lo que quieras -insistio la castaña y cuando la chica levanto por completo la cabeza ahi se dio cuenta que no estaba del todo bien, pues un enorme moreton cubria su ojo - Ohh ¿Quien te lo hizo? -pregunto con asombro.

-Na-nadie... yo... e-ellas fue-fueron... siempre me pegan -concluyo en un sollozo cubirnedo la cara con sus manos.

-Ohh ven aca -susurro la castaña y la abrazo fuerte. Estuvieron asi durante un rato hasta que la chica calmo sus sollozos.

-¿Quienes son ellas y por que te lastimaron? Puedes confiar en mi -volvio a repetir la castaña una vez que la chica se calmo.

La desconocida largo un suspiro y hablo -Ellas me lo hacen todos los dias, son un grupo de mi curso que siempre me golpean, yo trato de defenderme pero son tres y yo solo una... no puedo... -tomo aire antes de seguir -lo hacen porque supuestamente ellas, deberia de morirme y cosas mas desagradables...

-¿Y por que lo hacen? Digo, necesitaran un motivo y...

-La hay -interrumpio la chica.

-¿Y cual es?

-Ser directioner -contesto la chica y levanto su cabeza -Soy directioner -concluyo mirandola a los ojos esperando ver su reaccion -

La castaña se quedó sorprendida. ¿Que mier...? No sabia que contestar ¿Que decia decir?

-No sé que decir - fue lo primero que se cruzo por la cabeza.

La desconocida solto una risa amarga y habló.

-Descuida no tienes que decir nada... A veces creo que debería dejar de ser Directioners, es decir, yo no quiero pero no creo poder seguir soportando esto, si tan solo supieras como me siento sabrias que...

-¿Para tí que signifca One Direction? Es decir, ¿Qué sientes por ellos? - soltó la castaña.

La desconocida la miró raro pero luego dijo- Para mí One Direction es mi todo, ¿Sabes? Ellos me salvaron de un momento dificil en mi vida, muy dificil. Y cuando los conocí todo se volvió de colores, ya no me sentía sola porque los tenía a ellos... Ca-cada vez que escucho sus voces me siento bien, feliz, segura de mí misma y hermosa. Ellos me hacen sentir como nadie jamás lo hiso y al verlos, al escuchar sus voces, sus risas, siento mariposas en el estómago y me hacen sonreir como ellos solo saben hacerlo...

La castaña no pudo evitar sonreir ante las palabras de la chica, ella misma se había sentido así un tiempo. Feliz. Sus ojos se pusieron llorosos de la conmoción.

-En re-resumen, ellos te hacen fe-feliz, ¿No? - balbució la castaña entre sollozos tratando de sonar firme y segura.

-Si - contestó la chica con una sonrisa de esas que ponen las adolescentes enamoradas.

-Entonces... - dijo la castaña y se aclaró la voz - Si ellos te hacen feliz, ¿Dejarías de lado aquello que te hace feliz por unas personas que solo quieren hacerte la vida imposible insultandote y dandoles la victoria a ellos? ¿Cambiaras tu felicidad por una vida más simple? - dijo la castaña pero no logró evitar su tono incrédulo.

-.Es que tu no lo entiendes - dijo la chica levantondose del piso - Nunca comprenderas mi vida, porque tú nunca supiste lo que es vivir llena de insultos y golpes - proiguigió con el ceño gruncido y mirada fría, enojada - Pensé que lograrías entenderme, saber que me siento...

-Destruida, como si no tuvieras a nadie en mundo y te preguntas ¿Que hise para merecer esto? Si solo apoyas a tus idolos y no le haces mal a nadie, y no entiendes porque te pegan, pero cuando intentas reflexionar ya es demasiado tarde porque estas invadida de golpes, insultos y toda esa mierda y sientes que estas sola y nadie te comprende hasta que pasa lo peor... llegas a sentirte una mierda justo como ellos querían hacerte sentir y piensas que aquellos insultos y palabras que te dicen a menudo para perjudicarte son verdad, llegas al punto de no soportar más tu vida y haces la cosa mas idiota del mundo, te cortas las venas y es cómo si te sacaras un peso de encima y te olvidas de la realidad -dijo la castaña un poco enojada por las palabras de la chica ¿Ella que sabe acerca de su vida? ¿De lo que tuvo que vivir? Si tan solo la desconocida supiera.

La chica se quedó mirandola con los ojos bien grandes y la boca abierta, sorprendida. Eso era exactamente lo que sentía, sus sentimientos y las mismas palabras que hubiese dicho. La castaña se levantó del suelo. Tomó aire y siguió.

-Tal vez tengas razon y nunca logre entender como te sientes. Pero antes de irme te voy a decir una última cosa. Si te hace feliz, entonces vale la pena. Creéme, luego te arrepentiras por dejarlos de amar... como yo - finalizo con un susurro en la última parte pero la desconocida logró escucharlo por lo que pregunto con voz tranquila:

-¿Tu eras Directioner?

La castaña dudó en contestarle pero con todas sus fuerzas reunió valor y dijo lo que hace tiempo habría querido olvidar y nunca más decirlo ni admitirlo.

-Sí - susurró y se marchó dejando en el camino un mar de tristeza y recuerdos.

***

Hbaía pasado exactamente un mes desde el encuentro con la chica de cabello castaño y Simon se encontraba en su despacho, pensando en ella. ¿Por qué su cara le resultaba tan familiar? El sonido de la puerta lo sacó de sus pensamientos.

-Adelante - ordenó Simon y Paul apareció por la puerta.

-Disculpe Señor pero acaba de llegar un sobre para usted- dijo Paul, el guardaespalda personal, se acercó a Simon y le entregó el sobre y se fue.

Simon impeccionó el sobre y en la parte trasera encontro unas palabras escritas, las leyó "Esta es una foto actual de tu hija, por favor escuentrala. Firma: Alicia". Con ansias abrió el sobre y lo siguiente le sorprendió, sus ojos se abrieron de golpe, la chica de la foto era la misma chica que se había encontrado en la estación de servicio.

-Imposible - susurró pero ni él llegó a creerse sus palabras.

Se levanto de golpe de su asiento, cojió su abrigo y salió de su despacho.

-¿Simon estas bien...? - preguntó Liam viendolo tan apresurado.

-Ya regreso, quédate a cargo de los otros chicos, Pual se quedará con ustedes - ordeno Simon y Liam asintió pero Simon ya se encontraba fuera de la casa.

¿Dónde puedo ir? Sin saber a donde caminar una idea llegó a su cabeza. La plaza, no supo porque pero su instinto le decía que debía ir allí y sin dudar corrió hasta la dichosa plaza. Dió en clavo, sentada en una de las bancas se encontraba la castaña fijando su mirada en el piso.

Simon llegó hasta ella y son rodeos dijo:

-¿Cómo te llamas?

La castaña pegó un salto asustada y miró hacia arriba encontrandose con el mismo hombre de hace un mes.

-¿Pero que demonios...? - dijo o trato con una mano en su corazón - casi me das un infarto cardiaco...

-¿Cómo te llamas? - volvió a preguntar Simon exigente interrumpiendo a la chica.

-____ Johnson, ¿Por qué? - contestó la castaña con una ceja arqueada, ya cansada de la rara actitud del hombre.

-No... es imposible... - susurró Simon y sus ojos se llenaron de lágrimas.

Miró la fotografía que sostenia con entre sus manos y luego a la chica. Eran las mismas personas. Era ella.

Su preciosa hija.

por Invitado Lun 18 Ago 2014, 3:21 am

Su hija!! No es posible *baila por unos segundos sin control* aasdfghjlk! Tienes que seguirla amé el capitul, fue tan per-fec<3 siguela pronto linda!
-Emily xx

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