< El árbol de las manzanas > ( Harry styles y Tu)

CAPITULO 13 

Llegan a casa y abren la puerta; reparan en que no hay nadie. Harry se va directo a la cocina a preparar el té y cuando mira la hora son las seis de la tarde.
- Ha sido divertido- dice él. Ella lo mira, cada vez descubre más una personalidad que nunca nadie le había dado a luz. Bueno, a veces Liam se comporta de esa manera; pero es más extraño cuando viene de alguien que no conoces; de alguien a quien quieres conocer.
- Si- concuerda ella- La bruja no ha llegado todavía- él ríe divertido y la mira mientras se mueve. 
"Deja de mirarla" piensa para si mismo con una enorme rabia. No quiere involucrarse sentimentalmente con la chica; no quiere pensar en ella. No quiere tener que romper con Romina porque le está empezando a gustar su hermana; sabía desde el principio que eso sería una mala idea. El echo de ir; y eso que ni siquiera la conocía. 
¡Maldición! el pensaba que era una chica llena de tatuajes y aros, y con ropa negra y maquillaje oscuro; pero parece ser todo lo contrario. Es linda, es divertida y hace que incluso sus rabietas sean tiernas; una viziati de pies a cabeza.
Quizás algún día le diga lo que significa; quizás algún día se lo haga saber. Quizás algún día deje de cuestionar su amor hacía Romina y quizás algún día no le importe que tan bonita se ve _____ con el pelo suelto, o con el pelo amarrado. Traga saliva y sus pensamientos- como es de esperar- no le hacen caso. La sigue mirando. Se sienta en el sillón pero luego se recuesta en él porque lo ha encontrado bastante más cómodo. 
La puerta se abre y su mirada inmediatamente se dirige hacía allá. Jeniffer entra cargada de bolsas. Harry inmediatamente corre hacía ella. La señora Jeniffer es hermosa; él sabe de donde la pequeña ha sacado su belleza. Romina es más como su papá, piensa él. Le conoce; nunca le ha agradado del todo. Tiene una mirada que te intimida y un temperamento de la puta madre. 
- Deje que le ayude, por favor- dice él divertido. Jeniffer suelta las bolsas y Harry las carga en sus manos sin siquiera hacer fuerza. 
_____ también esta haciendo un esfuerzo por no mirarlo; lo intenta, de verdad que si, pero no puede evitar hacerlo cuando es tan caballero y bonito, ¿porque el italiano guapo tiene que llegar a arruinar su vida completamente planeada?
- Muchas gracias, Harry- dice la mujer. Harry saca dos tazas y Jeniffer se recuesta en el sillón que _____ acaba de abandonar para que su madre pueda descansar. - Hola, cariño- le dice. La chica sonríe débilmente; no quiere pelear con su madre en frente de Harry. No ahora; eso le daría vergüenza.
- Hola, mamá.. ¿como te ha ido en el trabajo?
- Bien, pronto acabará este proyecto
- Me alegro- sonríe ella. Harry se acerca a la mujer y le tiende una taza.
- Dos de azúcar como me imagino que le gusta- le sonríe él. Jeniffer no puede evitar hacer lo mismo y toma la taza entre sus manos.
- Gracias Harry, no sabes lo mucho que quería una taza de café y lo poco que quería prepararla. 
- No se preocupe, señora Jeniffer..
- ¡Jeniffer! me siento tan anciana cuando me dices señora
- Lo siento, Jeniffer, cualquier cosa que desee estoy de invitado, es un placer para mi atenderla
- Oh, que lindo eres Harry- ríe ella- ¿no es lindo ___?- mira a la chica. Ésta se congela.
"¿no es lindo?" Pues claro que es lindo, entonces, ¿porque su boca no puede decir un si? Traga saliva y siente la mirada de Harry encima de ella tan intensa que tiene miedo de que pueda ver a través de lo que está sintiendo en ese momento. No debería preocuparse por lo que diga o haga Harry; o lo que él piense, a ella nunca le ha molestado que alguien piense algo de ella, ¿porque ahora si? Quizás porque piensa que si contesta que si, entonces pensarán que le gusta, ¿y es eso verdad? su mente dice que no, pero ¿es que su corazón dice otra cosa? ¿y que pasa si dice que no? Pues entonces quedará como una grosera.
- Es un buen chico- es lo primero que se le ocurre decir para evitar la pregunta. Quedan satisfechos con la respuesta; Harry sonríe y le da un sorbo al té; el corazón de ella late con fuerza, y siente como si se hubiera quitado un gran peso de encima.
- ¿porque no está Liam aquí? Esto es raro, incluso más raro que Romina no esté aquí- dice la mujer de repente. _____ la mira.
- Ha tenido que hacer cosas... Y Romina también- dice finalmente. Odia decir el nombre de su hermana; y odia que ella se llame así. De pequeña no le podía poner Romina a sus muñecas; le gustaba ese nombre, pero es como cuando te gusta un nombre y luego conoces un profesor que se llama así, y ¡bam! es el mismo que hace de tu promedio un papel miserable con números más bajos de cuatro.
- ¿y no le has acompañado?- mira a Harry. 
- No, él se ha quedado aquí porque a mi me dolía el estomago y Romina le ha pedido que me cuide- digo yo. Harry la mira confundido y Jeniffer se levanta.
- ¡ah! no te dije yo que es un chico tan lindo.- le sonríe y desaparece de allí- ¡chicos tomaré una ducha!
- Claro- dicen al unísono y escuchan como la puerta se cierra y ella desaparece también. Se miran incómodos; ninguno sabe que decir.
Harry toma la taza que Jeniffer ha dejado y se levanta para ir a lavarla junto con la suya.
- Después de eso puedes ordenar mi habitación- le dice ella. Harry la mira divertido.
- Necesitaría un año completo para terminar esa tarea..
- Pero sería lo mejor que te podría tocar
- No estaría tan seguro..- contesta. Está feliz; ha logrado hablar con ella sin gritos de su parte. La puerta se abre y aparece esta vez Romina. Harry se siente inmediatamente incómodo y ____ resopla molesta.
- He olvidado que debo hacer tarea- dice la chica- gracias por todo Harry, la pasé increíble- le sonríe. harry se maldice; eso es exactamente lo que esperaba que no diga. Sin embargo le alza un pulgar arriba y le sonríe. Romina los mira enfadada; es el colmo de los colmos. Ella comprando todo el día sola y su hermana con su novio divirtiéndose. 
- ¿como te ha ido amor?- le pregunta a la chica esperando obtener una buena respuesta pero dispuesto a la peor.
- Parece que no tan bien como a ti- contesta fría mientras se aleja del beso que el ha intentado darle.
- Maldición, Romina, deja de comportarte así
- ¿así como?- pregunta ella.
- Como una.. una.. ¡una niña de dos años malcriada!- grita él. Romina se indigna de inmediato.
- ¡te odio! ¡te odio a ti y a cada parte de ti!- grita ella. _____ está escuchando todo; está tan divertida escondida en una de las puertas. Le divierte tanto esa pelea. Esta aguantando la risa.
- Venga, no es lo que quise decir..- le dice él.
- Claro que si Harry, siempre quieres decir lo que dices, por algo lo haces
- Tu haces que hable de esta manera- dice él mientras le agarra el brazo. _____ observa todo y de repente no le parece tan divertido- Eres la niña malcriada mas bonita que he conocido en toda mi vida- le dice él mientras le aparta un cabello hacía atrás. Romina sonríe; la ha comprado con esa frase cursi.
No, esa pelea ya no le parece divertida en absoluto.

CAPITULO 14

Toca la puerta suavemente; y al notar que nadie responde, simplemente entra. Su madre está saliendo de el baño con una toalla amarrada a la cintura. 
- Hola Romina- le dice ella contenta. Romina le sonríe de vuelta y se sienta en la cama con la bolsa que contiene el regalo que le dará. - ¿como ha ido tu día? no estabas acá cuando llegué
- No, te compré esto- le dice ella. Su madre se da la vuelta mientras se amarra la bata de dormir y la mira sorprendida. No está acostumbrada a recibir regalos.
Abre la bolsa despacio y saca de ella una caja de color negro en forma de paralelepípedo. Mira el contenido dentro y sus ojos comienzan a brillar, no había recibido algo parecido en años.
- No tenías que molestarme Romina, yo..
- Mamá- la interrumpe ella- está bien, quise comprar algo, no te preocupes- sonríe ella. Jennifer está impactada, ¿cuanto le habrá costado ese collar de oro? Quizás una fortuna. Es tan simple. Una simple cadena larga con un corazón al medio, tan hermoso. 
- Gracias- suspira ella finalmente y lo deja en su velador.- ¿Porque no has ido a comprar con Harry?
- Oh.. - dice ella- Pues.. a ____ le dolía el estomago y ya sabes como es Harry, no soporta ver a nadie enfermo sin poder hacer algo al respecto.
- Lo entiendo- sonríe ella.- Ese chico cada día me cae mejor, y parece que él y ____ se están llevando bastante bien
- Si..- dice Romina un poco triste. No es que no quiera que se lleven bien; pero ¿como es que Harry ha conseguido acercarse a ella, y Romina no, que es su hermana? ____ debería estar hablando con ella en ese momento, pero podía apostar a que habla con Harry.
- ¿celosa?
- No entiendo porque me odia, mamá, quiero ser su amiga, lo intento pero.. ¡me saca de quicio!
- A todos- ríe Jeniffer- pero de eso se tratan las familias, Romina, de cometer errores día a día y aún así, perdonarlos.
- Es fácil decirlo, cuando tu le hablas no te aparta ni te grita
- no lo creas, es que con los años que estoy con ella sé como es
- ¿me quieres echar en cara que me fui como se hubiera sido mi culpa?
- Vez. Ahí estás tu y tu temperamento nuevamente, ¿notas que te quejas de lo malcriada que es tu hermana y tú eres igual?
- No me he quejado
- Pues será mejor que no lo hagas, porque no tienes escusa. A veces te comportas igual e incluso peor que ella. Es una niña, está dolida, no tiene idea de lo que sucede a su alrededor todavía, no tiene el sentido de las distancias y de lo importante que son estás, las decisiones que cambian tu vida. No tiene idea de nada. En su mundo, todo es de color negro porque ella misma se lo ha pintado así, y lo único que estás haciendo es ayudarla a pintar de oscuro, en vez de colorear un poco su mundo, que de paso, también te hace falta.- Romina se pone pensativa. Quizás tenga razón. Las madres siempre tienen razón, dicen por ahí.
Se levanta de la cama y se dirige hacía la puerta, un tanto pensativa.
- Te veo luego mamá
- Te veo luego, cariño- contesta ella. Romina cierra la puerta y ve a Harry en la cocina haciendo quizás-qué. Frunce el ceño.
- ¿donde está _____?- pregunta. Harry alza el rostro con esos hermosos ojos de color azul verdoso y le sonríe; pero la sonrisa se desvanece en un segundo.
- Está donde ese amigo raro suyo que vive al lado
- ¿que amigo?- pregunta ella.
- Liam.. Creo que se llama así
- Ah.. Ya veo- contesta Romina. Se acerca a Harry para observar lo que está haciendo. - ¿cocinas?
- He pensado que tu madre ha sido tan linda con nosotros que le debería preparar algo para la cena
- ¿y eso ha sido..?
- Sushi- contesta él. Romina sonríe; adora el sushi. Sabe que a su madre también le gusta el sushi; pero sabe a quien no. No hay problema; no se encuentra en casa.
- Perfecto- contesta ella.- ¿te ayudo en algo?
- Podrías poner la radio- le dice él. Romina asiente y comienza a sintonizar una. Finalmente repara en Wish you were here de Pink Floyd.
- Perfecto- sonríe Harry. Romina se acerca a él y lo abraza. Harry ríe divertido y la abraza de vuelta mientras se mueven al ritmo de la música. 
Con lentitud y delicadeza él posa sus labios sobre los de ella haciendo un baile entre ellos y lo único que se le pasa por la mente es el que se sentirá besar a ____.
Intenta no pensar en eso. Intenta no pensar en ella; pero por algún extraño motivo, lo hace.
La puerta se abre de golpe y el rostro de ____ aparece. El sonido hace que Romina y Harry se separen y ella pone su mejor cara de asco por ver a esos dos besarse.
Liam aparece detrás de ella con una sonrisa que inmediatamente provoca que Harry sea el que ponga cara de asco esta vez. Hay algo que no le gusta de ese chico, ¿porque anda con él?
- Podrían besarse en otra parte, supongo que una persona como yo tiene derecho a no querer ver intercambios de saliva en su propia casa.. Más cuando son de extraños- fulmina a Romina con la mirada. Pero ésta no dice nada.
- Has llegado- le dice él.
- Si, Hemos llegado.. él es Liam- señala al chico.
- Sé quien es- sonríe Harry falso. Romina lo saluda alegre y Liam se acerca a la cocina donde esta Harry para ver lo que está preparando.
- ¿estás seguro de preparar eso?- pregunta Liam en voz baja. Harry lo mira enfadado, ¿quien se cree que es? Sin embargo, no va a armar pelea con él en ese momento.
- ¿que hablas?- pregunta en el mismo tono de voz baja mientras ve como ___ está sentada y Romina intenta hablarle pero no consigue respuesta.
- _____ odia el sushi- contesta Liam. Harry se siente inmensamente estúpido ahora. Está intentando impresionarla, ¿y ahora que? no le gusta lo que cocina.
- Suerte la mía- dice con sarcasmo. La puerta de la habitación de Jeniffer se abre y aparece ella con un vestido negro que le queda de maravilla.
- ¡Wow! la familia completa- ríe divertida.
- Se ve hermosa- le dice Liam. Jeniffer le sonríe agradecida y Harry nuevamente lo mira feo; se ha adelantado completamente a lo que él iba a decirle.
- ¿que estás cocinando Harry?- le pregunta al chico. Harry mira a ____ y duda unos instantes.
- Yo.. Eh..
- Sushi- contesta Liam. Dios mío, ¡ahora si que tiene ganas de golpearlo!. ___ mira a Harry y frunce el ceño.
- Que rico- contesta Jeniffer.
- Vamos, Liam- le dice ____.
- ¿donde?
- A cualquier lugar- contesta ella y desaparecen por la puerta. 
Inconscientemente Harry tira el paño encima de la mesa enfadado. Odia a ese chico. Romina lo mira confundida, ¿que le sucede? La señora Jeniffer parece igual.
- No te culpes, cariño- lo tranquiliza- es una malcriada
"una viziati" piensa él.
Se da la vuelta y sigue cocinando; con la esperanza de alguna vez poder hacer algo para que no se comporte de esa manera. Por lo menos no con él.

CAPITULO 15

La chica se sienta en su mesa a esperar a Liam. Todos los puestos del local de McDonald están ocupados; parece ser uno de esos días navideños donde las personas compran todo el maldito día y para recompensarse a si mismas como si comprar fuera algo bueno, van a comer a lugares como ese.
Da un largo suspiro y observa como la cajera mira a su amigo; es atractivo, venga; Liam es jodidamente guapo, y tiene buen cuerpo, y no mencionar que es la mejor persona que alguna vez vas a poder conocer, pero entonces ¿que es lo que hace que a ella no le guste como algo más que amigos?
No lo entiende. Probablemente si no fueran amigos, si no se hubieran conocido desde niños ella tendría un crush con el chico; pero no. Quizás es por esa razón; es que ella lo ha visto pasar por todo y él la ha visto pasar por todo a ella. Conocen la intimidad y secretos el uno del otro y necesitan el apoyo incondicional ya que el otro es lo único que tienen, por lo que si algún día llegan a tener algo más que amistad, eso tendría que destruirse algún día, y ninguno se quiere arriesgar a estar completamente solo de nuevo.
En el fondo; ambos saben de aquello. Ambos tienen entendido que es mejor tenerse como amigos aun que algún día por esas casualidades de la vida a uno le llegara a gustar mucho el otro.
Liam piensa que ella es guapa. De echo, es una muchacha hermosa. Por dentro como por fuera y nadie más entiende su mal humor como él; sus mañas y la manera en la que frunce el ceño sin darse cuenta por ninguna razón alguna, si no porque simplemente está acostumbrada a tener malos ratos. El echo de que su hola sea el único que le alegre el día; pero él la ve como una hermana que nunca tuvo. 
Si. Hubo un tiempo en el que ella le gustaba y mucho; pero es pasado. Era un niño, las hormonas eran lo único que hacían acción y reacción en ese cuerpo.
Siente curiosidad por Romina. Por lo que ella le contó esa noche de llanto parecía ser un monstruo y esperaba al verla al menos que tire humos por las orejas cada vez que hable como en las caricaturas; pero al contrario. Parece ser una chica realmente dulce, y para que mencionar hermosa.
Pero no importa, porque ella está saliendo con el tarado de su novio. No le cayó bien desde el principio; tiene algo que no le gusta realmente. Quizás es la manera en la que mira a su amiga- y si, se ha dado cuenta- o quizás es simplemente celos porque él puede estar con Romina.
Pero, como dije anteriormente, no importa. De cualquier manera, de cualquier forma, de cualquier motivo, no importa para nada.
Liam coge la bandeja que la chica le da justo después de guiñarle el ojo y se dirige automáticamente a la mesa donde se encuentra su amiga mirando a los chicos que entran en el lugar, y esta realmente consciente de que ninguno es tan guapo como el novio de su hermana.
- Papas fritas para la chica que odia el sushi- sonríe Liam sentándose a su lado.
- ¡Si! - exclama emocionada- al fin, pensé que tardarías una eternidad más
- También yo, hubo un momento en el que pensé que me rendiría
- Bien que no lo hiciste- dijo ella echándose una papa frita a la boca. Liam hacía lo mismo; solo que él las llenaba de Ketchup antes.
- Así que.. ¿tu y el Italiano se han estado llevando bien?- lo mira. Ella se encoje de hombros.
- Ni siquiera es Italiano
- Analiza eso muchacha, ¿cuantos años lleva viviendo en italia?- Ella nuevamente se encoge de hombros- Pues tu hermana si que es Italiana
- ¿en que te basas para decir eso Señor Liam?
- Estando cinco años, o más en un país, te vuelves de esa nacionalidad aun que hayas nacido en otra parte
- Venga, ¿y que pasa si nací en un lugar determinado y me fui a Colombia por cinco años, y luego a Estados Unidos otros cinco, y luego a África otros cinco, y a Brazil cinco años más, que soy?
- Pues entonces eres millonaria- ríe divertido. Ella analiza y luego ríe con él- Pues supongo que alguien que sueña con ser un gringo y se marcha hacía allá cinco años no tendrá problema en decir que es de allá
- ¿entonces Harry no quiere tener una nacionalidad Italiana?
- Es lo que pienso yo, no lo sé
- Bien- se echa otra papa a la boca. 
Un silencio incómodo se vuelve entre ellos. _____ sabe que Liam encuentra atractiva a su hermana; y Liam sabe que _____ le provoca más de una sonrisa el chico. Es su mejor amiga, la única persona con la cual convive y conversa y le cuenta sus secretos hace años; a esa altura es un poco normal que tenga en su vida todo controlado y que encuentre en sus ojos la manera de ella de sentirse.
Cuando está triste, se le ponen caídos y depresivos y pareciera que nunca han visto la luz del sol. Cuando está emocionada los abre realmente grandes- más de lo normal. Cuando esta enojada arruga un ojo y el otro no. Cuando esta sorprendida levanta la ceja derecha durante pocos segundos y luego abre la boca. Cuando está preocupada mira hacía varias direcciones abriendo los ojos y cerrándolos. Cuando está en problemas pestañea varias veces. Y cuando siente algo por alguien sus ojos simplemente brillan; más que siempre, más que todos los días, más que más, simplemente brillan. 
Y sus ojos brillan cuando ve a Harry.
Quizás no siente algo muy grande por él; y quizás no está enamorada, quizás ni siquiera le gusta, pero es obvio que se siente levemente atraída por el chico y eso es algo que nada ni nadie `puede hacer que niegue. Por lo menos no en frente de Liam.
- ¿nos vamos ya?- pregunta Liam una vez que terminan de comer. Ella asiente ligeramente y se ponen a caminar por la calle. 
Liam mira hacía sus ojos. Están normales. Pareciera que todavía no está sintiendo ningún tipo de emoción; esta neutra.
- Nos vemos mañana- le dice cuando llegan a casa. Ella asiente y sus caminos se separan.
Ella tiene miedo de abrir la puerta, no sabe que es lo que puede encontrar detrás. Suspira; en el peor de los casos va a ser una escena de romance por parte de su hermana y su novio- o debería decir su guapísimo novio.
Deja girar las llaves en su dedo durante unos segundos y después de un largo rato se decide; gira la manilla.
No sabe si la escena que está viendo es mejor o peor; se decide que es mejor que estén todos unidos comiendo el desagradable sabor del sushi a que Romina encima de Harry intentando quitar su camisa, aun que supone que claro, eso lo hacen cuando están solos. 
- Ciao- le dice Harry que está rodeando a Romina con un brazo en el sillón grande mientras que su madre está con una copa de vino en el otro con una enorme sonrisa como si recién hubiera terminado de reír a carcajadas.
- Ciao Hermana- le dice Romina. _____ la fulmina con la mirada y traga saliva para intentar dejar en su garganta todas las palabrotas que tiene por decirle.- ¿como estuvo tu paseo con Liam?
- Mejor de lo que hubiera estado aquí, de seguro- contesta ella, y una vez más su boca hace su trabajo. No se puede resistir. Romina suspira pausadamente; tiene que controlarse si quiere volver a ganar el corazón de su hermana.
A Harry se le congela la sangre; "mejor de lo que hubiera estado aquí"
¿que tiene ese chico que no tenga él? Está seguro de que puede divertirla casi tanto como él y más. Frunce el ceño y se acomoda en el sillón.
- Me hubieras dicho que no te gustaba el sushi- dice él.
- No te hubiera importado.
- ¿en que te basas?
- En que a nadie le importa lo que me pasa, ¿por que a ti?- sonríe fulminante. Frunce el ceño nuevamente, pero no dice nada- Exacto- suspira finalmente mientras sube a su habitación.
- Espera..- le dice Harry intentando subir, pero justo después su hermana lo detiene.
- Déjala, creo que tengo que ir yo.. Es lo correcto.

CAPITULO 16 

Romina baja las escaleras rendida. Harry y Jeniffer hablan y murmullan entre ellos pero cuando la ven se callan de inmediato y la miran, como si hubieran estado hablando de ella.
Y vaya que lo hacían. 
"Apuesto cinco mil pesos a que no le abre la puerta" dijo Jeniffer. 
"Apuesto diez mil a que usted tiene razón"- le prosiguió Harry. Y allí está Romina parada en frente de ellos, derrotada por no poder hablar con su hermana.
- Estoy comenzando a odiar a esa muchacha- gruñe.
- Ese es el problema, Romina, no le estás dando tiempo para que ella te quiera como tu la quieres a ella porque gritas a los cuatro vientos que la odias, y ella lo escucha y te odia aún más- le dice Jeniffer. Romina mira a Harry esperando que éste la defienda; pero no dice nada, porque sabe que en el fondo, la Señora tiene razón.
- Bien, creo que todos están en mi contra
- Nadie esta en tu contra- le dice Harry- Estamos intentando ayudarte
- ¿que me dices tú? como si pudieras conseguir que ella te abra la puerta a ti
- ¿apuestas contra eso?- alza una ceja. Sin pensarlo dos veces Romina pone un billete sobre la mesa. Harry ríe divertido- No necesito billetes mi amor, la satisfacción de saber que puedo me es suficiente- y vaya que lo cree; sin embargo, esa no es la razón por la cual va. O por la que no ha aceptado el billete. Sabe que le espera algo mucho mejor al cruzar esa puerta: una niña malcriada y hermosa que lo hace reír de una manera increíble. 
Romina guarda el billete agradecida de que no se lo tenga que dar y lo observa esperando que vaya. Se toma su tiempo; le da otro sorbo a la taza de té y se estira un poco haciendo sonar unos cuantos huesos; luego de ese ritual de relajación, sube por las escaleras.
A medida que se acerca su adrenalina fluye como si se fuera a tirar en benji- cosa que ha echo y ha pensado que ha estado a punto de morir.
Las alturas no se le dan nada, pero nada bien.
Y allí está su puerta. Y allí está ella al otro lado; no puede verla, pero puede sentirla. Puede escucharla. Puede olerla. Puede tener la satisfacción y alegría de que ella se encuentra ahí; de que él no se ha ido a Italia todavía y de que esas vacaciones siguen en pie. 
Toc. Toc. Toc. 
- ¿cuanto dinero le has sacado a la bruja?- pregunta la chica. Harry ríe por lo bajo divertido.
- No he aceptado su dinero
- Eso está mal, ¿como pretendes que tenga una buena escusa para dejarte entrar?
- Porque te compré un helado- escucha la risa de ella a través de la puerta y los pasos que se acercan cada vez más. El pestillo se sale y la puerta se abre y allí está.
La chica. La bella hermana de su novia le está sonriendo, tiene que controlarse. Tiene que controlarlo, él ha visto muchas chicas bonitas antes, ¿porque no puede controlarse? ¿porque sus manos quieren tocarla? ¿porque se ha ruborizado? ¿Porque está sonriendo como idiota? 
- Entra- le dice ella, y tan rápido como el chico lo hace ella vuelve a cerrar la puerta para que nadie más pueda entrar. Se sienta a gusto allí, con él.
- Perdón por preparar sushi- dice finalmente después de unos incómodos segundos. Ella está en su balcón, dada vuelta, y una pequeña risita sale de ella misma; le provoca diversión que Harry sea tan tierno y caballero y que se disculpe incluso por preparar una comida que a ella no le gusta. Demasiados modales en una sola tarde hacen que la piel se le ponga de gallina y su estomago se revuelva. 
- No importa- se encoge de hombros.
- Si importa- dice él- y tu también importas, aun que creas que no, aun que pienses que nadie en esta casa te valora, Romina está loca intentando de acercarse a ti, tu madre habla de ti como si fueras un ángel que no merece ser lastimado- y él también piensa que lo es, de echo- y yo..
Todo se detiene en ese momento. Y yo. ¿Y él? ¿que tiene él para decir sobre ella? Se calla de inmediato y siente una punzada en el estomago. Por favor, Harry, no me hagas esto, no comiences a hablar maravillas de mi porque yo podría comenzar a hacer algo completamente loco e irracional como quererte- piensa mientras cierra los ojos.
Nada, no dice nada. Está allí sentado pensando en que decirle. Y ella esta dada vuelta, y de repente, ninguno de los dos se atreve a hablar. Ninguno de los dos se atreve a decir una palabra. El silencio se ha tornado completamente incómodo a pesar de que ambos estén en la presencia del otro.
- ¿tu..?- pregunta ella. Se maldice a si misma; las palabras han salido de su boca como bala de cañón sin que ella lo haya querido de esa manera. Suspira durante un largo rato y se sigue maldiciendo a si misma; esta vez porque Harry no ha contestado nada aún.
Traga saliva y cierra los ojos esperando que se la trague la tierra pero todo lo que consigue es seguir allí parada, con la misma incomodidad.
- Yo pienso que eres una chica increíble- dice finalmente.

CAPITULO 17 

Una chica bonita hubiera estado bien porque normalmente no se siente a gusto consigo misma. Una chica malcriada hubiera estado bien porque realmente es una chica malcriada y lo sabe y el echo de que le recuerden lo que es no le molesta, ni le complica, ni le afecta, ni le causa nada.
Una chica inteligente hubiera estado bien porque es bueno que los libros estén en tu cabeza y no sobre ella. 
Pero, ¿una chica increíble? ¿que se supone que significa eso? Quizás no haya tenido imaginación para inventar algo; en el mejor de los casos requería todas las anteriores nombradas, pero en el peor de los casos requería que haya dicho una palabra al azár. 
Entonces, ¿por qué demoró tanto?
Es frustrante el echo de quererte meter en la cabeza de una persona para descubrir sus pensamientos; para saber que es lo que piensa realmente de ti. Leer su mente, y obtener un “eres una chica increíble” Ni siquiera sabe lo que significa eso.
Quizás no sea tan malo. Quizás eso signifique lo mejor. Quizás. Si tan solo las cosas no fueran un quizás. Si tan solo no tuviera que vivir preguntándose a si misma que pasaría si o el como sería si, todo sería más agradable. Absolutamente todo. Pero no es la manera en la que se debe vivir. 
Y ahí están de nuevo; en la incomodidad del día en China,y de noche allí. Ninguno se hablaba al otro. Increíble.
¿Que se siente ser increíble? Se siente pésimo, porque no sabes realmente lo que significa.
Harry suspira intentando llamar un poco su atención o atraer si quiera su mirada que se había desviado ligeramente hacía el suelo, pero lo único que consigue es que ella le de la vuelta y mire hacía afuera buscando algo que hacer, algo que mirar, algo que observar.
Algo con que olvidar que es increíble.
- Si he dicho algo que te ha echo sentir mal o que te ha echo sentir que te he faltado el respeto, por favor disculpa- dice él rompiendo el silencio. Ella niega con la cabeza.
- Estoy bien- contesta.
- ¿entonces porque siento que metí la mata?
-Estoy bien.
- No te vez lo que alguien llamaría bien..
-estoy bien.- repite, esta vez firme, cortante, y fría. Harry suspira y repasa todo lo que le ha dicho buscando una palabra mala, algo que justifique que la muchacha se comporte de esa manera, pero no consigue nada.
Quizás no debió haberle dicho que es increíble, aun que lo sea, o quizás a ella no le gusta que la llamen de esa manera, o quizás ella esperaba algo más, de todas maneras, lo que haya sido que fuese, no le agradó; y mucho menos a Harry, que ahora esta en la cama frustrado encontrando alguna manera de hacerla sonreír.
- ¿quieres comer algo?
-No tengo hambre- dice ella.
- Vamos, venga, y mande, ¿que ocurre? Te dije que eres increíble, ¿te ha molestado? Luces muy molesta y te escuchas como mi madre enfadada cuando me resfriaba y me echaba en cara que todo era mi culpa así que mande, que sucede.
- te dije que estoy bien
- ¡te dije que eres increíble!- exclama él. Ella se deja caer al suelo y suspira frustrada.
- ¿que quiere decir eso?- pregunta. Cualquier persona podría pensar que es una inútil, que se tira al suelo, que hace escándalo, que parece una tonta, alarmada, pero, para una persona que nunca le dicen que es increíble, para alguien a quien nunca le remarcan una virtud, tanto así que cree tener solamente defectos, para una persona que piensa tener solo un amigo, una persona con la cual contar, para una persona como ella, que le digan increíble entre medio de tantos insultos es casi un acto revolucionario. 
Sin embargo, Harry no cree que está haciendo ningún escándalo, es más, el entiende ahora completamente la actitud de la muchacha.
Una malcriada, pero la comprende.
- quiere decir...
- No me lo digas, no quiero escucharlo- interrumpe ella y se pone de pie para caminar al baño. Harry se levanta de la cama y agarra con firmeza su brazo. Dios mío, ¿es esto legal? Estar de frente en frente con el novio de tu hermana, mirarle a los ojos, sentir como tu corazón late tan deprisa que tengas miedo de aquello, sentir que late tan fuerte que se te va a salir de su espacio en cualquier momento, ¿es legal?
No puede respirar. Esta haciendo un intento por respirar y está haciendo un intento porque ese nudo que tiene en la garganta no se le desate y se ponga a llorar, ¡y es que nunca había deseado a alguien de esa manera tan loca! Nunca había querido saber lo que pasaba por la mente de alguien tan desesperadamente, y nunca había querido que algo prohibido no lo fuera de una manera tan fuerte.
Harry pone un mechón de pelo atrás de su oreja y traga saliva.
- Quiere.. Quiere decir que- se aclara un poco la garganta- quiere decir que eres linda, e inteligente.. y divertida, y me haces reír mucho y..- se maldice. No sabe que decir, pero la tiene allí, en frente, el tiempo está detenido alrededor de ambos.- te haces la fuerte, pero es tu exterior, tienes una capa que no te deja ablandarte, pero cuando por fin puedes llegar al interior, puedo ver que eres realmente dulce, y que es fácil quererte.

CAPITULO 18 

Se acerca más a ella. Puede sentirla; puede tocarla, pero no puede besarla. No puede hacer eso. No puede simplemente besarla y luego volver con Romina; no puede ser un completo patán. Nunca se ha caracterizado por eso, pero si ella no se aleja de él rápidamente, pues entonces algo pasará, porque él no piensa hacerlo. No puede controlar sus impulsos y mucho menos cuando los labios de ___ se encuentran a tan solo centímetros de su boca.
Su garganta está seca por lo que necesita tragar saliva, ¿porque no se aleja? ¿porque ella sigue allí? ¿es que ella también lo desea de esa forma?
La puerta comienza a sonar desesperadamente haciendo que los dos chicos se separen inmediatamente. Su respiración se hace agitada mientras se acerca a la puerta.
- ¿quien es?- pregunta la chica. 
- Romina- responde. Se frota la cabeza y siente como Harry se aproxima a ella, pero no exactamente a ella, si no a la puerta. La abre y la mira allí, de brazos cruzados y casi se siente traicionada por Harry, ¿como se atreve a abrir la puerta de su habitación? 
Quizás simplemente está buscando pelea con alguien. O Quizás no. 
Suspira frustrada y mira a su hermana esperando que desaparezca de su habitación porque realmente ya no la necesita ni tampoco la quiere allí adentro.
- ¿que hacen?- pregunta Romina. Y entonces ella recuerda lo que hacen; recuerda lo que estaban a punto de hacer y sus mejillas se vuelven rojas completamente que no se atreve a mirar a Harry, ni mucho menos a Romina. Agacha el rostro, y se le olvida completamente como ser ruda; así también como se le había olvidado como respirar hace segundos antes, cuando sus labios casi estallan en los del novio de su hermana.
No puede alzar el rostro; no puede decir palabra alguna ni tampoco puede controlar su corazón que late a mil por segundo. Un escalofríos le recorre el cuerpo y se encoge de hombros; mientras que, por otro lado, Harry se aclara la garganta.
- Juegos de poker- contesta. Ella frunce el ceño.
- ¿Perdón?
- Juegos de azar, le aposté diez a que vendrías en cinco minutos, pero han pasado seis así que creo que le debo dinero a tu hermana- sonríe mientras desaparece de la habitación esperando que Romina lo siga; pero no es así. Ella simplemente cierra la puerta detrás de ella.
Genial.
No puede dejar de pensar en Harry ahora; no puede dejar de pensar en el casi beso que se dieron, no puede dejar de pensar en como huele su ropa cada vez que se acercaba más a él, no puede dejar de pensar en sus manos tocando los mechones de pelo que luego corría hacía atrás; pero sobre todas las cosas, no puede dejar de pensar en él.
Y ahora, entre medio de sus pensamientos, aparece una caricatura de su hermana, enfadada por todo, gritándole y diciéndole lo malvada que es.
Quizás no se ha dado cuenta; y está allí por otra cosa.
- Necesitamos hablar- dice. Ups. No se escucha para nada bien, partiendo por el echo de que no es un "queremos hablar" amistoso, es más bien uno rudo.
Un nudo en su garganta; probablemente no le hubiera importado eso hace unos días atrás, de echo le hubiera divertido que su hermana esté tan cabreada por algo que ella misma ha provocado; pero sabe que eso podría hacerle daño también a Harry, y.. ¿así se siente que le hagan daño a alguien que quieres?
Harry. Como olvidarlo. Como sacarlo de su cabeza, si es que hay manera alguna.
Él se acercó a ella con tanta velocidad como ella a él, ¿es que él está jugando con Romina? No lo cree; no parece ser uno de esos chicos, pero ese casi beso le deja mucho que pensar.
- Quiero llevarme bien contigo- dice Romina finalmente.
Que alivio. Suspira largamente y sonríe; el corazón comienza a latir con la velocidad normal nuevamente y sus mejillas vuelven a tomar su color natural; por poco piensa que su hermana se había dado cuenta de lo ocurrido; pero al parecer, es tonta, como una puerta.
- ¿Cuantas veces repetirás eso hasta que te des cuenta de que nunca ocurrirá?- pregunta levantando una ceja.
- ¿el que?
- El llevarnos bien.. Mira, quédate un mes aquí, ¡no, espera! quédate aquí un año- y por favor con Harry, piensa para sus adentros - pero ignorame, no existo para ti y no existes para mi, no somos hermanas, simplemente somos dos desconocidas que están en la misma casa, no me dirijas la palabra, no seas amable conmigo porque no lo seré contigo, ¿venga? tu presencia ya ni siquiera me molesta, o importa, pero si lo hace el echo de que se dirija a mi, y ahora si me disculpas tengo que hacer tarea
- ¿desde cuando haces tarea?
- Siento una brisa, ¿es que alguien me está hablando?- la mira. Romina traga saliva y asiente tristemente; al parecer convencer a su hermana es más difícil de lo que ha pensado.
- Vale, captado.

CAPITULO 19 

Es lunes en la mañana nuevamente. Que manera de haber pensado en Harry ese fin de semana y que manera de haberlo evitado. Desde lo que sucedió en su habitación no le ha dirigido la mirada, palabra, nada. Y él tampoco se molesta en hacerlo. Lo único que le ha dicho fue:
"¿Me alcanzas la sal, por favor?" 
Y ella ni siquiera lo miró para entregarle la sal, con los ojos todavía en su plato. No le ha dicho nada; pero no ha pasado un minuto en el que no haya pensado en él.
Lo quiere, no puede negarlo. Siente un poco- muy poco, según ella- cariño hacía Harry, solo porque él es el único que demuestra interés en hablar con ella- hace poco- a diferencia de Romina, que le habla solo por, lo que es según ella, causar una buena impresión.
Después de tomar la ducha baja por las escaleras lentamente. Nadie se encuentra allí; revisa la habitación de su madre, y ve que se ha ido ya a trabajar.
Ese parece un día perfecto para tomar un día sin clases; pero claro, su hermana la delataría.
Tonta.
Se sienta en la mesa y se prepara una taza de café cuando siente pasos bajar por la escalera y su corazón se comienza a acelerar cuando reconoce de quien son los pasos.
No son los de Romina porque ella baja de a poco y lentamente, mientras que estos son rápidos- hasta cierto tiempo, supone que hasta que la ha visto.
No sube la mirada. Mantiene su mirada fija en su café y no quiere dar vuelta la mirada; pero sabe que Harry es educado y que suceda lo que suceda, él la saludará.
Y sucede.
- Buenos días- dice él, un poco cortante y frío. Tampoco se atreve mucho a mirarla y se dirige directamente a la cocina. Le da la espalda mientras prepara su café y no dice ninguna palabra. Ella tampoco, que silencio más incómodo y a la vez reconfortante. Él finalmente está ahí; no se podría sentir mejor.
A pesar de que no le hable. A pesar de que le de la espalda. A pesar de todo, su presencia y su compañía siempre se sentirá bien.
- Buenos días- contesta ella. Harry sonríe para sus adentros al escuchar su voz dirigida a él; pero no le muestra su sonrisa. Le da un sorbo al café y piensa en algo para hablar con ella. No quiere pasar toda su estadía allí sin hablarle a pesar de lo que haya ocurrido.
- Y... ¿vas al colegio muy seguido?- pregunta. Pero que gran pedazo de inútil. Cierra los ojos y se maldice una y otra vez en silencio, ¿vas al colegio muy seguido? ¿que clase de pregunta es esa?
No sabe que hacer. La chica suspira y le mira.
- Adiós.
- ¿ya te vas? ¿quieres que a dejar?
- No, no es necesario- contesta fría y cortante aun que por dentro muere por hablarle de otra manera. Le da rabia que esté con Romina haciendo al mismo tiempo ilusiones con ella.
No comprende como es que de un momento a otro lo quiere, y luego de ese momento a otro lo odia. De lo único que está segura es que es una mezcla perfecta; igual que él.- Puedo caminar, pasaré por Liam
- Puedo llevarte, en serio no me molesta, deja que iré por las llaves del auto..
- ¡venga, Harry! en serio, no necesito que me lleves- alza la voz. Harry traga saliva y la mira; ¿que ha echo mal? ¿intentar besarla, quizás? Ni siquiera "intentó, besarla" simplemente se ha dejado llevar un poco por lo que ha ocurrido y es más que obvio que ella no quiere hablar con él. Ni mirarlo. Se ha dado la vuelta y ha salido por la puerta un poco enfadada. 
Harry frunce el ceño intentando comprender el comportamiento de la chica cuando repara en que Romina está bajando por las escaleras.
- ¿esa era ______?- pregunta. Asiente- ¿Porque gritaba?
- No lo sé, Romina- contesta él con el ceño fruncido mientras pone los ojos nuevamente en su café. Romina lo mira esperando que vuelva a poner su vista en ella, pero eso no sucede.
- Venga, suelta que te sucede cabeza de rulos, has estado así desde la noche de sushi y quiero saber que es lo que sucede contigo porque no es normal en ti estar de esa manera, tu eres el que me ruega siempre, así que dime, ¿pasó algo?
- No- miente. Claro que ha pasado algo. "Ella" pasó.
- Claro, olvidé que te pones así cada vez que comes sushi
- no es verdad
- Exacto- dice ella mientras se incorpora a su lado- así que dime ya que es lo que te tiene así.. ¿o acaso pasó algo de lo que yo no me enteré?
- Que no, Romina, solamente estoy cansado, es todo.
- Si, cansado, claro.. ¿sabes? no sé que te sucede, pero resuélvelo, porque es irritante estar viviendo contigo mientras tu cabeza está en otro mundo- se marchó ella.
Y vaya que era otro mundo.

CAPITULO 20 

Se sienta al lado de Liam en clases de matemáticas. Está bastante distraída; mira hacía todos lados y en el momento en el que le hacen una pregunta no sabe que es lo que debe contestar.
- ¿______?- pregunta la maestra esperando una respuesta.
- Yo.. No lo sé- dice finalmente.
- tonta- toce una chica detrás de ella. La ira se le sube al cerebro cuando ve a Jesy reír; no puede odiar más a esa muchacha. Nunca a querido ver a alguien tan mal.. O quizás si.
Abre la boca para decir algo pero Liam la detiene.
- Tranquila, no te rebajes a ese nivel
- Me gustaría usar su rostro como pañuelo de orina de perro- dice frunciendo el ceño.
- Pues a todos nos gustaría hacer algo y no por eso lo decimos- suelta la profesora que se pone delante de ella enojada. _____ suspira; <> se dice a si misma <>.
- Bien, sigan con los ejercicios de la página 45- se marcha. La chica toma el libro y comienza a leer; pero no lo hace realmente. Tiene la vista perdida; tiene la cabeza, corazón, mente, cerebro, todo menos el cuerpo donde se encuentra Harry. Ahí está desde que el llegó; y lo sabe.
Quiere gritar; tiene ganas de maldecir todo, ¿porque el chico que le gusta es aquel chico que precisamente no puede tener? El que tiene su hermana.
- Te conozco de pies a cabeza y sé cuando algo te ocurre, así que dime ya que es lo que sucede- suelta Liam. La muchacha lo mira y luego vuelve a fijar la vista en el libro.
- ¿en que te basas?- le pregunta. Él ríe irónico.
- Punto número uno; no has hablado casi en toda la mañana, ¡raro! punto número dos, has estado distraída en la clase de música ¡raro! punto número tres, te has sacado una pésima nota en el examen de letras, ¡más raro aún! y punto número cuatro y el más importante, cuando te he dicho que no le digas nada a Jesy, no lo has echo, la ____ que está normal le hubiera gritado en la cara lo insoportable que es, y tu lo sabes- dice finalmente. Ella suelta una pequeña risa acompañada de un suspiro y deja caer su rostro en la cabeza.
- Es que...
- Vienen a retirar a Liam Payne- dice una señora entrando de repente en el salón. Ambos fruncen el ceño; pero de alguna manera se siente aliviada de no tener que decirle en ese instante lo que ha ocurrido con Harry en su habitación cuando Romina se encontraba abajo; y quizás para el ha sido nada. Ni siquiera sabe porque le está dando tantas vueltas al asunto; aunque realmente si que lo sabe.
Quiere convencer a si misma de que la razón por la que todo ha ocurrido en ese momento es porque él ha querido besarla.
- Me tendrás que contar después- dice él y sale de la sala con sus cosas. Ella asiente débilmente cuando él ya no puede mirarla y espera allí a que el timbre suene.
Un papel aterriza en su cabeza y escucha nuevamente las risas del diablo detrás de ella. Quiere insultarla; pero no cree tener las fuerzas para aquello.
Abre el papel con enojo y lo lee.
"¿adivina que? has sido elegido la chica más fea del instituto.. ¡de nuevo!"
Algo golpea su corazón. De alguna forma eso nunca le ha importado; que le diga que es fea; perole molesta en ese instante.
<<¿Porque Harry besaría a la chica más fea del instituto?>>
Mira a Jesy; quiere golpearla.
La campana suena y ella y sus amigas salen disparadas riendo hacía fuera. Ella toma sus cosas y las mete en su mochila; antes de que pueda salir la profesora la detiene.
- Quiero que sepas que si sigues así tendrás un buen castigo jovencita- la mira. Ella asiente sin importancia y se marcha; corre por los pasillos del lugar hasta llegar abajo; en la puerta de salida, las puede ver reír mientras miran unos chicos que pasan por allí.
Camina hacía ellas con aire de superioridad.
- ¡son unas perras!- les grita. Las muchachas tienen ahora su atención; no pueden creer lo que acaba de decir- Sobre todo tú, Jesy, ¿es que no puedes dejarme en paz por un segundo? ¿tan importante soy para ti que tu vida entera se basa en molestarme?- le pregunta. A medida que grita, las personas se van reuniendo alrededor de ella.
Jesy sonríe con superioridad; a ella le sale de una manera natural, y las palabras que dice no le molestan para nada.
- En serio, ____, deja de dar pena, ¿en serio crees que me importaría la chica más fea del instituto? - ríe divertida y sus amigas la acompañan. Es todo; la tiene allí, las personas están mirando, y su rostro está completamente impecable.
Se acerca con rabia y siente que hay lágrimas en sus ojos a punto de estallar; siente que el mundo entero se está moviendo para recordarle que no es nadie y que ella lucha para demostrar lo contrario.
Alza el puño en dirección hacía ella y ¡BAM! antes de que pueda golpear a Jesy siente como un brazo la detiene. Su primer pensamiento es que un profesor la ha pillado y que su vida escolar termina ahí; pero un profesor no huele como Harry. Un profesor no habla como Harry. Un profesor no se ve como Harry. Un profesor no es Harry.
- ¿que crees que haces?- le pregunta el chico. Ella lo mira mientras Jesy se lleva las manos a la boca.
- ¿viste como ese guapetón me ha defendido de esa inútil?- pregunta a una de sus amigas. La ira en ____ aumenta y tiene ganas de golpear su rostro seriamente. Intenta salir del brazo de Harry; pero no la deja.
La guía lejos de la multitud mientras todos chiflan porque esperaban ver una pelea y la hace subir al auto. Una vez allí se pone el cinturón de seguridad; sus mejillas se ponen rojas cuando se da cuenta de lo que ha ocurrido, ¿porque Harry está allí? 
- Estás completamente fuera de ti misma, los golpes no son maneras de solucionar las cosas- dice él- nadie merece ser golpeado
- cállate, ¿si? no tienes idea de lo que sucede
- No lo tengo, pero sé que no era para golpear a la muchacha esa..- dice. Traga saliva y pone en marcha el auto; después de unos minutos de silencio vuelve a hablar- ¿que ha ocurrido?- pregunta.
Ella no quiere contestar, pero le entrega el papel que Jesy le ha tirado.
Harry lo lee en voz alta y suelta una pequeña risa.
- Vamos, _____, tu sabes que no es así.

CAPITULO 21 

El camino a casa se hace en silencio. Ninguno dice una palabra; pero ella todavía sigue sonrojándose. No sabe si decir algo o callar; pero siente que lo que ha echo Harry ha sido una completa falta de respeto, ¿como se ha atrevido a interrumpir de esa manera cuando estaba a punto de hacer lo que siempre había querido con el rostro de la irritante Jesy?
Nota que Harry está tomando un camino equivocado, ¿es que acaso no sabe manejar todavía por la ciudad? ha tomado la otra calle en vez de la que va a su casa y ha doblado a la derecha hasta ir por la rotonda y salir a la carretera. La chica frunce el ceño.
- ¿que crees que haces?- le pregunta.
- Romina me ha mostrado este lugar- dice él- te encantará
- no me encantará, quiero volver
- No, no volveremos todavía- la mira él- eres una viziati
- no me interesa lo que creas que sea, déjame volver a casa
- non ascoltare- dice él con una sonrisa. Dios mío; no puede entender lo que está diciendo pero le gusta todo sobre lo que está hablando. 
Porque lo dice él; porque es su voz, por que es su boca la que se mueve al decir palabra alguna y son sus manos las que hacen gestos para acompañar lo que dice.
Es su risa el sonido que la hace sentir feliz.
Se rinde; sabe que no saca nada con pelear. Tampoco tiene fuerzas para pelear, para gritar, para patalear; así que de todas maneras no lo hará. No tiene ganas de sacarlo de encima ahora; puede decir de todo, pero en realidad, lo quiere ahí. Le gusta ahí. A pesar de que ella diga lo contrario.
Harry estaciona el auto en un pequeño pedazo de campo. Puro pasto y árboles; supone que se podría perder allí durante horas y horas. Se baja y comienza a mirar el lugar fascinada; no tiene demasiada magia, y eso quizás es lo que le ha gustado tanto.
- Sabía que te encantaría- le dice él, como si pudiera leer su mente. Ella sacude la cabeza y se acerca a uno de los árboles. Es enorme; tiene un tronco gigante y calcula que tiene muchos años de vida.
- Es un ahuehuete - dice él- ¿no es hermoso?- ella asiente, pero sigue sin decir nada.- ¿estás enfadada?
- ¿debería estarlo?- pregunta y vuelve a decir palabra.
- No, no deberías- sonríe él, y antes de que pueda protestar se pone a caminar rápidamente.Ella lo sigue mirando cada movimiento que hace. 
Como camina. Como da pequeños saltos. Como se echa a un lado los rulos del pelo para poder peinarse. Como hace todo. 
Comienza a escuchar agua cerca de donde está y presiente que sabe a donde se dirigen; acierta. A no mucho rato después lo ve sentarse al lado del lago.
- ¿no es lindo?- pregunta, y vaya que si. Es un lago rodeado con enromes árboles en los que te puedes sentar, y se puede escuchar el canto de los pájaros si es que te quedas en silencio durante un largo rato.
- ¿porque hemos venido aquí?- pregunto. Él suspira.
- He peleado con Romina, no quiero ir a casa- dice, y por primera vez ella siente lástima por él. Siente que lo dice de una manera realmente sincera.
Suspira, no sabe que decir.
- ¿puedo saber porque?
- Pues le he dicho que me gustaría volver a Italia- un nudo se le hace en la garganta y quiere tragar pero no puede, ¿que ha escuchado? ¿que el amor de su vida quiere irse de su vida? No sabe que decir y mira hacía otro lado porque siente miedo; miedo de que Harry pueda ver en sus ojos lo que está intentando esconder; miedo.
- ¿y que tiene de malo? es tu casa
- Si, pero ella quiere quedarse a vivir aquí- contesta. No puede creerlo, y piensa que debe escuchar de nuevo, ¿como es que ha dicho? ¿que Romina se quiere quedar allí?- Ella quiere pasar más tiempo contigo, quiere pasar más tiempo con La Señora Jeniffer, las extraña mucho y.. no me quiero separar de ella ¿sabes?- otro nudo en la garganta. Esta vez hay más ganas de llorar que antes.- Antes habíamos peleado, pero ahora.. Peleamos peor que las otras veces, ¿comprendes?- ella asiente.
- Entonces.. no sé que debo hacer- ella piensa durante un instante.
- yo..
- Lo siento por traerte a ti, por cierto, pensé que sería buena idea, tu la conoces, y me conoces a mi..
- Claro, lo hago..
- Quizás no fue lo correcto, no quiero que te molestes después de lo que prometimos
- está bien harry
- ¿y entonces?
- ¿entonces qué?
- ¿que.. que crees que deba hacer?
- No lo sé Harry, ¿sabes que es lo que me ha enseñado mi mamá?
- ¿qué?
- Que la amo. La amo mucho a pesar de que peleemos, y de que no sea tan buena con ella como debería.. Pero la amo, y cuando amas a alguien, tu hogar está donde esa persona está, no importa donde sea.