After Midnight | Fichas

Calypso

Calypso es una chica valiente e inteligente que tiene unas creencias poco comunes. Es una persona única y, aunque es extrovertida, no tiene demasiados amigos. Disfruta del aire libre y le encanta estar fuera de casa. Es especialmente curiosa, lo que la ha metido en más de un lío. Tiene un humor bastante sarcástico y no se corta con las ironías, por lo que a veces resulta un poco borde. Aún así, es una chica encantadora cuando se lo propone.
Es suficientemente lista para saber como comportarse en cada instante para conseguir lo que quiere. A pesar de creer en los fenómenos paranormales no es una chica incrédula, y distingue muy bien la realidad de lo ficticio. Suele tener la razón en todo, y le encanta hacerlo. Aunque muchas de sus creencias no están demostradas, ella apoya sus ideales y pensamientos con todo su orgullo, y no le avergüenza decirlo. Jamás daría su brazo a torcer, te tiene mucho aprecio si tira la toalla en una discusión en tu contra.
Es liberal, de mente completamente abierta, y no soporta a la gente cuadriculada y cerrada. Cree que todos tenemos derecho a conseguir nuestros sueños, aunque ella es en realidad algo egoísta. En la mayoría de casos, cree que el fin sí justifica los medios. Es algo torpe y a la hora de la verdad se pone nerviosa, pero nunca huirá. Hace lo que es mejor para ella y sus seres queridos, que son pocos. Tiene un pasado movido, que la ha marcado bastante.

Nació en un pueblo a unos kilómetros de Dallas, Texas, en la enorme villa en la que vivía su abuela materna, una señora bien. Su madre, Melody, nunca había encajado bien en su familia, puesto que no era la hija delicada y refinada que había querido su madre, así, a los diecinueve años se escapó de casa con su novio, el padre de Calypso, un hombre unos años mayor que ella, guapo y creyente de cosas extrañas. Su noviazgo era de jóvenes y ellos era felices, el problema llegó cuando Melody se quedó embarazada con tan solo veinte años. Su madre la mataría, a ella nunca le había gustado Connor, y encima estaba sin anillo en el dedo.
Sin contarle nada a su novio sobre su estado, lo dejó sin explicaciones y volvió a casa. Lloró y suplicó a su madre que la perdonara, que iría a una buena universidad y que sería la hija perfecta, pero que, por favor, le dejara tener al bebé. No es que Melody estuviera en contra del aborto, es que aquella niña era la hija del amor de su vida, y necesitaba tener algún recuerdo de él. Y así fue. Tuvo dos preciosos mellizos. A la niña la llamó Calypso, por el personaje mitólogico favorito de Connor. Los pequeños nacieron en la mansión de su abuela y estudiaban en casa, Annabeth, su abuela, no quería que sus amigos de clase alta supieran que tenía unos nietos bastardos, por lo que los niños se criaron sin amigos y sintiéndose rechazados por su propia familia, puesto que su madre estaba a kilómetros estudiando.
Cuando la niña tenía trece años, sus padres se reencontraron. Melody y sus niños, que eran más bien como hermanos en vez de madre e hijos, paseaban por Nueva York en un viaje de familia cuando se cruzaron con Connor. El parecido físico entre la niña y su padre era más que evidente, y después de juicios y soluciones legales, la custodia fue entregada a su padre. Calypso y su hermano pasaron los siguientes años de sus vida viajando con él por todo el mundo, estudiando todo tipo de materias. Ella se convirtió en una chica increíblemente culta. Su padre, científico, siempre había tenido un interés en los sucesos paranormales, y por ello, sus hijos se documentaron sobre esa materia. Cuando ambos cumplieron los dieciocho se mudaron solos a Salem, aunque suelen hacer visitas a su madre, en Dallas. Tienen dinero de sobra, su abuela ha muerto y tienen gran parte de su herencia, además, Calypso escribie diarios de viaje de las aventuras su padre, que han sido publicados y bien vendidos.

Cora Rose

Cora es una persona de ánimo cambiante. Unos días se come el mundo y otros es el mundo el que se la come a ella. Sin embargo, es una persona llevadera. Es muy testaruda, es como si algo en su ADN la obligase a llevar la contraria, tenga o no tenga razón. Tiene un orgullo enorme que no deja de lado por nada ni por nadie, este aspecto de su personalidad ha causado que pierda a varias personas que le importan y sobre todo, ha provocado varias disputas con las personas de su alrededor.

Maniática hasta la médula, con todo, no hay excepción. Si la habitación está desordenada, está desordenada. No puede estar en un punto medio. Para ella solo existe el blanco o el negro, no hay grises entre medias. O algo es bueno o es malo. Si la quieres la quieres, y así con todo. Su actitud extrema le nubla muchas veces el raciocinio, impidiéndole ver los tipos de realidades que se presentan.

Su sinceridad es una arma de doble filo. Las personas de su alrededor agradecen que vaya con la verdad por delante, pero el problema de Cora es que no sabe callar y sus formas de ser sincera son un tanto bruscas. Es decidida e impaciente, una mezcla explosiva y peligrosa de defectos. Lo desconocido le pone nerviosa, le hace sentir insegura. Por eso, se tira de golpe ante cualquier indicio de desconocimiento, sin pensar en el peligro que puede conllevar.

Es inteligente, pero no muestra esa cualidad suya, no al menos muy con frecuencia. Prefiere que la tomen por tonta y luego demostrar con hechos que solo se está haciendo pasar por algo que no es. Le encanta jugar al despiste, contar con el factor sorpresa.

Es soñadora, se pasa el día en un mundo privado allá por la nubes imaginando como le gustaría que fueran las cosas en su día a día. Le aburre la realidad, le aburre la rutina. Uno de sus tiempos favoritos es sacar de quicio a alguien a quien no aguante. No se calla ni debajo del agua si se le da la oportunidad de hablar. No tiene en cuenta las consecuencias que pueden acarrear sus palabras o sus acciones. Por eso muchas veces se ve obligada a pedir perdón; una de las cosas que más le cuesta en el mundo.  

Sabes que Cora te ha permitido entrar en su vida cuando cuenta contigo para todo. Pasa de ser un chica con una fachada "dura" a convertirse en una chica animosa, divertida y cariñosa, siempre a su manera claro está.

Si le haces daño, no parará hasta vengarse de ti. Para ella la justicia tiene que ser equitativa, por lo que la fastidias ella te fastidiará a ti de la misma manera. Tampoco tendrá reparo en bajarte los humos.

Cora pertenece al condado de Chicago y se ha criado en el seno de una familia descompuesta, que vive en un declive constante que les lleva irremediablemente a la descomposición. Su padre es un jugador de pool famoso, rico y con una fuerte debilidad por la bebida. Mientras que su madre, era una inglesa refinada, con menos instinto maternal que un cactus y que vive constantes relaciones con otros hombres. Cora es la menor de tres hermanas, por lo tanto, la menos deseada. Ha pasado su vida metida en un campo de batalla. Luchando por hacerse respetar entre las personas que supuestamente, más deberían quererla. Su madre dice de ella que no es su hija. Demasiado pelirroja, enfadadiza, contestona. No como sus tres demonios mayores. Su padre, que pasa más borracho que sobrio desde hace unos años no tiene opinión respecto a su hija, Cora cree que ni siquiera se acuerda de que existe. Y sus hermanas son peores que las hermanastras de Cenicienta, a cual más malvada, pedante y metomentodo. Debido a su situación familiar, Cora se ha visto obligada a trabajar para poder costearse sus gastos en un bar de mala muerte de la ciudad. Ahora está en su segundo año de universidad. Y este verano, su amiga la invita a pasar las vacaciones en su nueva casa en Salem, alejada por completo de su estresante familia. Cora esperaba un verano tranquilo sin complicaciones, pero los extraños sucesos que comienzan a pasar y la aparición en su vida de un chico torbellino en su vida, serán las confirmaciones de que sus planes de verano serán completamente distintos.

Liam J. Santorski.

Liam es el típico —no tan típico— chico Americano, deportista y extrovertido homofobo que usa la palabra "maricón" como insulto. A diferencia de su amiga Alaska, él deja de lado el estudio, y se concentra en ocupar su tiempo con alguna chica —de preferencia animadora— a la cual solo vera como objeto para conseguir sexo.
Gusta de montar a caballo en el rancho de sus abuelos, jugar fútbol y nadar. Es un chico muy dinámico y le fascina hacer cosas nuevas, por eso jamás lo veras aburrido y mucho menos triste. Es más que raro ver a Liam triste, no le gusta que los demás sepan cuando está mal, aunque siendo franco, no es mucho cuando se siente de ese modo.
Tiene un ego enorme, y no se molesta en moderar un poco su amor propio. Es competitivo, y te restregara en la cara de por vida que tu perdiste y el gano, jamas se le olvidara porque no hay cosa que ame mas que ganar y nunca perder. Se comporta como un completo bastardo intolerante e irrespetuoso, en especial cuando se trata de la homosexualidad, y esa es la mayor razón por la cual es un tanto odiado en la escuela.
Él es muchas cosas; un rayo dinámico, un casanova, un idiota, pero por encima de todo; es curioso, él no se detiene hasta conseguir lo que quiere, hasta encontrar la verdad. Nada le asusta y podría ver al mismísimo diablo, y no le afectara en lo absoluto. 
Solo los que lo han logrado conocer a fondo saben que en realidad puede llegar a ser un buen chico, solo que no siempre le gusta que se den cuenta porque hay cierta satisfacción en hacer solo lo que tú quieres sin tomar en cuenta los sentimientos de los demás, y eso él lo sabe mejor que nadie.
Ahora, debido a una serie de sucesos extraños, está comenzando a sospechar que algo no anda bien en la nueva casa de los Hamilton y no se detendrá hasta descubrir que es.

Nació en Wichita, Kansas, un 29 de Agosto. El día de su nacimiento su madre falleció llevándose con ella a quien sería su hermano gemelo, motivo y circunstancia por la cual fue criado por su abuela. Su padre jamás hizo aparición en sus 16 años de vida y su abuela para no dejarlo totalmente desinformado sobre él, le contó varias cosas —aunque si intención de inculcar un odio en Liam hacia su padre—. Le contó que él había dejado a su madre embarazada por irse con un hombre, era gay. Eso hizo que Liam se llenara de un gran rencor por los homosexuales tan grande que no podía entrar en razón y reconocer que la comunidad gay no tenía culpa de que su padre fuese un degenerado, pero Liam era —y aun es— muy terco.
A veces agradecía el hecho de no haber logrado conocer a su madre, porque así dolía menos no tenerla a su lado, pero no podía negar que en muchas ocasiones despertaba con las ganas de recibir un beso de ella. Gracias al cielo que tenía a su abuela. Ella creo criarle de la mejor manera, inculcándole valores y principios en Salem, un pueblo de lo más remoto y misterioso en el estado de Massachusetts donde ella nació y se crió.
Se puede decir que tiene una buena vida, no las mejores notas en la escuela, pero si el reconocimiento y las chicas que desee. El no considera que su manera de ver la vida sea mala, ni aun cuando es un completo hijo de puta la mayoría del tiempo, ni tampoco cree que sea culpa de su pasado el ser así, solo así debía ser.
Lo único que quisiera cambiar de su vida, es que dejara de ser tan aburrida como el mismo lo plantea. Que pasara algo interesante que cambiara todo.
Lo bueno es que el destino es traicionero, y a veces podría hacer lo que pedimos, sea para bien, o para mal.