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UNT University. | Resultados.| nc.
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UNT University. | Resultados.| nc.
Bienvenidos a la Universidad de Nashville, Tenessee; también conocida popularmente por UNT, es una universidad pública la cual no consiguió mucha fama en sus primeros años. Fundada en 1978 por Williams Alexander, actualmente ha sido nombrada la segunda universidad más seleccionada por los estudiantes de esta generación. También siendo la tercera universidad más antigua de Nashville. UNT cuenta con aproximadamente 32.000 estudiantes de postgrado y licenciatura, UNT es la universidad con el mayor número de estudiantes de todo el estado.
Una de las universidades mejor recomendadas a estudiantes con matrículas de honor y notas sublimes. Todo en UNT parece perfecto, desde sus profesores y estudiantes hasta lo que ocurre en las habitaciones de las fraternidades, ¿Pero alguna vez te has atrevido a conocer todo lo que UNT esconde?
Para saberlo debes vivirlo. UNT sólo acepta a miembros de altas notas y expediente limpio ya que para ellos, la imagen de la universidad es esencial y no se pueden permitir admitir a estudiantes rebeldes. Cuando eres un miembro de una de sus fraternidades todo en tu vida cambia radicalmente. Y, si no eres del agrado de sus miembros, debes cambiar tu aspecto y tu personalidad sino quieres que tu experiencia en UNT sea horrible. Las chicas deben ser unas plásticas y no pueden ser vírgenes ; los chicos deben ser arrogantes y populares, nada de ternura ni amabilidad. Las fiestas deben estar compuestas por ; alcohol, alcohol y alcohol.
Estudiar en UNT puede ser genial, trae muchas recompensas, creces cómo persona y también profesionalmente. Y además puedes conocer personas que serán tus amigos para toda la vida, pero también personas falsas que se pueden hacer tus amigas para después clavartela por la espalda.
La tradición de UNT se ha conservado durante décadas y, actualmente, eso no ha cambiado. Los nuevos estudiantes son recibidos con bromas, también conocidas cómo novatadas, solo y únicamente por parte de los estudiantes de último curso. Las novatadas deben ser muy malignas, algo que los nuevos estudiantes no olviden nunca.
UNT cuenta con cinco fraternidades y, cada una de ellas tiene algún secreto. Una historia, varias reglas y un pacto de sangre por los miembros de cada fraternidad. Si entras en una de ellas no puedes irte, quedas registrado cómo hermano de la fraternidad y no se puede dar vuelta atrás.
¿Quién dijo que las universidades no esconden secretos?
¿Estas dispuesto a descubrir cada uno de los secretos de las fraternidades?
¿A cuál perteneces?
Bienvenido a UNT...
reglas.
+El respeto es kúl. En esta enecé el respeto es nuestra primera regla. Nada de peleas.
+son audiciones.
+Es una novela colectiva. No necesitamos chicas, son escritoras. Así que no nos preguntes "Se que es una enecé ¿Pero puedo ser una chica?" Porqué te matamos mientras como nutella.
+responsabilidad. Queremos que tengan en cuenta algo muy importante: no nos importa lo perfecto que escribas, ni cómo de bien se te dé el tema , si no eres puntual a la hora de subir capítulo... hasta luego, Lucas. Ya en éste punto, queremos aclarar que si no tienes tiempo para ésta nc, ni te molestes en enviarnos tu ficha.
+Sólo dejaremos pasar que se te olvidé subir capítulo por 6 veces, sino lo subes a tu tiempo te golpearemos con nuestro látigo "Vete de mi enecé, irresponsable".
+ortografía y gramática ; Sabemos que se puede escribir como Cassandra Clare pero por favor, intenta tener el mínimo número de faltas. Se que la paja de usar corrector (Word) es muy grande ; pero un esfuerzo se agradece.
+ Guión largo por favor, nada de estilo teatro bc en nuestra enecé no se permitirá y si lo haces no te damos nutella (?).
+Ficha en hide, comenta para ver.
+Los roles serán elegidos en el muro interactivo. Y por favor, pongan nombres originales, no me llamen a "Harry" cómo "Harry", no sé, "Eduardo Peluquería" esta bien.
+si realmente están leyendo las normas, ponme 1 gif de Justin Bieber y otro de Zayn Malik en spoiler con el nombre que le pondrías a tu fraternidad(Se tiene en cuenta la originalidad).
+ No se puede ir por Zayn Malik ni Kendall Jenner bc son míos ; tampoco por Justin Bieber ni Kylie Jenner bc son de Nakary.
reservados.
Dunny Williams & Zayn Brooks.| Kendall Jenner & Zayn Malik.|♡Weinberg♡(Dunny).
Kylie Williams & Justin Gray.| Kylie Jenner & Justin Bieber.| Darkness†.(Nakary).
ficha.
Dunny y Naka os saludan.
Hey pipúl. Somos Dunny (yo) y mi compinche Nakary. Esperamos ver audiciones ya que nos encantó la idea y esperamos que a vosotros igual. Se nos ocurrió...bueno, se nos vino de la nada. Esperamos vuestras fichas y que la idea funcione ya que nos encantaría que fuera así baby's.
Última edición por ♡Weinberg♡ el Sáb 24 Mayo 2014, 10:14 am, editado 2 veces
hayes grier.
Re: UNT University. | Resultados.| nc.
Olitas de mar (?) ké. Ya, dejo mi naqués a un lado. Dudé en dejar mi comentario porque se me está haciendo adicción de nuevo, pero quiero irme por Harlena y Harlena is 2 much 4 me. Nashville me recuerda a Hannah Montana ;-; ya, dejo la melancolía. En un rato dejo mi ficha... espérenla, nenas. Soy Mariella y suelen decirme Marie pero, pueden llamarme cómo les plazca. Eso.
wanweird
Re: UNT University. | Resultados.| nc.
Helous Jo, esto es una adicción para todos, esperamos tu ficha linda, Paz .lemon. escribió:Olitas de mar (?) ké. Ya, dejo mi naqués a un lado. Dudé en dejar mi comentario porque se me está haciendo adicción de nuevo, pero quiero irme por Harlena y Harlena is 2 much 4 me. Nashville me recuerda a Hannah Montana ;-; ya, dejo la melancolía. En un rato dejo mi ficha... espérenla, nenas. Soy Mariella y suelen decirme Marie pero, pueden llamarme cómo les plazca. Eso.
Levine.
Re: UNT University. | Resultados.| nc.
mi Naka tiene razón, esto se volvió adicción. Esperamos tu ficha Marie <33lemon. escribió:Olitas de mar (?) ké. Ya, dejo mi naqués a un lado. Dudé en dejar mi comentario porque se me está haciendo adicción de nuevo, pero quiero irme por Harlena y Harlena is 2 much 4 me. Nashville me recuerda a Hannah Montana ;-; ya, dejo la melancolía. En un rato dejo mi ficha... espérenla, nenas. Soy Mariella y suelen decirme Marie pero, pueden llamarme cómo les plazca. Eso.
hayes grier.
Re: UNT University. | Resultados.| nc.
pos voy a audicionar aunque me creé esta cuenta hace 2 días por lo que el code se va a complicar mucho, so, si no uso ese no me peguen con el látigo :lloro: por cierto, yo era Mainstream. :rhianpls:
Invitado
Invitado
Re: UNT University. | Resultados.| nc.
Hey baby. Si quieres, no pongas imagenes y ya, cuando sea más adelante y ya se te sea permitido pues lo editas, aceptaremos tu ficha sin imagenes (Lee las reglas baby) Esperamos tu ficha.taemin. escribió:pos voy a audicionar aunque me creé esta cuenta hace 2 días por lo que el code se va a complicar mucho, so, si no uso ese no me peguen con el látigo :lloro: por cierto, yo era Mainstream. :rhianpls:
hayes grier.
Re: UNT University. | Resultados.| nc.
pos audiciona(?, por lo del code no te preocupes c:. yo antes era Bazinga :c ;-; .taemin. escribió:pos voy a audicionar aunque me creé esta cuenta hace 2 días por lo que el code se va a complicar mucho, so, si no uso ese no me peguen con el látigo :lloro: por cierto, yo era Mainstream. :rhianpls:
Levine.
Re: UNT University. | Resultados.| nc.
Me encanta la ideaaaaaaaaa, asi que, voy a participar!! Cuando deje la ficha dejo los gifs, bc tengo que pensar un nombre cúl c:
Miluh.
Re: UNT University. | Resultados.| nc.
Hey girl La espero con sus nombres kúlsMiluh. escribió:Me encanta la ideaaaaaaaaa, asi que, voy a participar!! Cuando deje la ficha dejo los gifs, bc tengo que pensar un nombre cúl c:
hayes grier.
Re: UNT University. | Resultados.| nc.
La idea fue toda mía, okno xD, espero .Miluh. escribió:Me encanta la ideaaaaaaaaa, asi que, voy a participar!! Cuando deje la ficha dejo los gifs, bc tengo que pensar un nombre cúl c:
Levine.
Re: UNT University. | Resultados.| nc.
Mientes mucha Naka, y yo que te amodoraba :lloro: :lloro:Darkness†. escribió:La idea fue toda mía, okno xD, espero .Miluh. escribió:Me encanta la ideaaaaaaaaa, asi que, voy a participar!! Cuando deje la ficha dejo los gifs, bc tengo que pensar un nombre cúl c:
hayes grier.
Re: UNT University. | Resultados.| nc.
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tobiaskosh&effysweet
tobiaskosh&effysweet
Nombres: tobias kosh & elizabeth "effy" sweet.
Representantes: chace crawford & holland roden.
Edades: 19 años.
Escritos:
- escrito #01:
- Capítulo 1
No había peor cosa que comenzar el colegio. ¿O tal vez si? Sí, la había, y era volver a ver a todos los idiotas que me ignoraban o humillaban o que, simplemente, se reían de mí por ser tan solitaria.
Mas, para mi suerte, este era el último año en el que vería las caras de todos aquellos ineptos que me hacían la vida imposible constantemente. Mas, para mi suerte, el año que viene me iría a Inglaterra a estudiar a la mejor universidad de artes escénicas de todo el mundo, posiblemente.
Me cambie rápidamente y luego me maquille un poco. A diferencia de todas las chicas del Cramer Creek High School, posiblemente yo era la más sencilla de todas: base para tapar los pocitos o granitos, mascara de pestañas —no tanto— y un poco de brillo de labios, ¿quién necesitaba más? Yo no, así era feliz.
Me miré en el espejo de cuerpo completo por última vez, y luego me dirigí a la cocina donde tome un poco de café y salí por la puerta de entrada. Lo mejor de vivir cerca del infierno era que no tenía que caminar muchas cuadras o pedirle a alguien que me llevara. Lo malo era saber que era la única en todo el instituto que no tenía un auto o una moto, ¿patético? Totalmente.
Era como una tortuga. Me tomaba mi tiempo para caminar y observar todo lo que había a mi alrededor, era muy observadora. En realidad no escuchaba nada, estaba tan metida en mi mundo que no escuche los bocinazos de un Audi detrás de mí. Finn Anderson, como no.
—Hey, mugrosa. —Apuré el paso, la tortura comenzaba antes de tiempo, ¿por qué a mí? —. No corras, cariño.
Puede ser que sea la primera vez en el año que caminaba tan rápido. En menos de cinco minutos me encontraba entrando por las puertas de la institución y dirigiéndome a la sala de actos, donde se realizaba el acto de comienzo de año y la directora comunicaba las normas y bla, bla, bla.
Tome asiento en una de las sillas de plástico delante de todo, como siempre. Nada había cambiado en aquel salón. Las ventanas seguían siendo igual de altas y horribles, las paredes seguían de ese horrible alba de hace años, el suelo tenía aún mugre y polvo del año pasado. El escenario llevaba aún las guirnaldas de la fiesta de finalización de clases, ¿acaso nadie se preocupaba por como lucía todo aquel lugar? Obviamente que no.
El salón de actos se fue llenando poco a poco, y veinte minutos después todos los alumnos estaban sentados y charlando con sus amigos o con el que tenían al lado. Yo estaba en silencio, no tenía amigos. Era la excluida.
Se escuchó como alguien golpeaba un micrófono y algunas chicas gritaron tapándose los oídos, puse los ojos en blanco. La directora estaba de pie, arriba del escenario, con su típico uniforme de soy-una-vieja-con-mal-gusto-para-la-ropa y con un peinado que parecía de los años 80. Volvió a golpear el micrófono y el silencio inundo la sala.
—Buenas mañanas mis queridos alumnos —comenzó a decir—. Bienvenidos a un nuevo año lleno de emociones y trabajo duro.
La mayoría de las cosas que la Sra. Garrett decía no las escuche. En realidad, todo lo que escuchaba eran bla, bla, bla. Normas del colegio y el uniforme. Bla, bla, bla, bla. Todo lo típico, sin embargo, algo había cambiado.
—Por favor, todos los del último año presten atención. —Levante la cabeza, esperando lo que iba a anunciar—. Este año hemos preparado, con el consejo estudiantil y la aprobación de todos los padres, un proyecto que los meterá de lleno en la vida adulta. —¿Todos los padres? ¿Qué demonios estaba diciendo?—. El proyecto es llamado “Proyecto Padres” y consiste en emparejar a dos personas del último curso, totalmente al azar, con la que tendrán que convivir hasta mitad de año. —Los abucheos comenzaron, gritos de horror y algunas chicas que lloraban. Yo estaba con los ojos como platos y la boca entreabierta, ¿qué trataba de decir con “convivir”?—. ¡Por favor, silencio! —Gritó, todos se callaron—. Los gastos de la vivienda donde convivirán con su pareja será pagada en su totalidad por la institución. Mas, esto no termina aquí. —Tomo aire y saco unas hojas—. Se les asignara, a cada pareja, una cantidad de niños de los que deberán cuidar hasta noviembre. —Los gritos comenzaron nuevamente, nadie parecía feliz por el proyecto. Y nadie era nadie—. El máximo de niños es de cinco, el mínimo de dos. —Estaba estupefacta, helada por lo que la Sra. Garrett decía—. Sobre las parejas: nadie puede cambiar de pareja. Es obligatorio convivir con esa persona y, nos ocuparemos, de saber si alguno no está en su casa o apartamento asignado. —Volvió a tomar aire—. Los apartamentos o casas tienen cámaras con lo que se podrá ver todo lo que las parejas hacen, desde como cuidan a sus “hijos” a ver cómo se llevan y conviven. De todas formas, se les dará un manual en donde están todas las normas de este proyecto. —Se rasco la frente, el silencio que había en el salón era sepulcral, todo el mundo estaba con la boca abierta o llorando en silencio—. En su primera clase del día sus profesores les dirán las personas con las que fueron asignadas. ¡Disfruten el año y diviértanse!
Todo el mundo se dirigió a la puerta del salón para salir de allí. Rápidamente el lugar quedo vacío, a excepción de los profesores que hablaban animadamente. Ya me encontraba en el pasillo cuando, de repente, sentí que alguien me golpeaba el hombro. Me gire instintivamente y mire a Emma Stevenson parada junto a su “hermoso” novio, Finn Anderson.
—¿La mugrosa con quien será emparejada? —Dijo Emma, mirando a su novio y luego a mí.
—Con alguien mugroso, seguramente. —Contestó Finn. Ambos comenzaron a reír. Puse los ojos en blanco y seguí caminando.
No solo tenía que aguantar eso en los pasillos o en la cafetería, sino que debía hacerlo en todas las clases y, también, por toda la ciudad. Todo el año. Era un sufrimiento.
Llegué al salón de ciencias y me encontré con que la mayoría de las personas ya estaban allí. Me dirigí al fondo y me senté en la esquina, en el banco de siempre. El banco de “Sophie la mugrienta”.
El maestro entro por la puerta y dejo sus cosas encima del escritorio. Luego sonrió y se sentó.
—Buenos días a todos —dijo, alegremente—. Como saben, el Proyecto Padres llego al Cramer Creek High School. —Rodee los ojos, posiblemente no fui la única. El profesor tenía una sonrisa de oreja a oreja—. Ahora, antes de decirles sus parejas, les entregaré el manual que todos —énfasis en la palabra todos— tendrán que leer.
De una caja marrón saco copias de un manual. Comenzó a entregarle una copia a todos los presentes. En la portada se podía leer “PROYECTO PADRES: TODO LO QUE TENES QUE SABER”. Me pareció un nombre patético pero por la suerte de todos, el manual no era tan grande. Luego, el profesor volvió a su escritorio y tomo asiento nuevamente.
—Ahora sí, comencemos con las parejas. —Saco una hoja de un portafolio y comenzó a leer los nombres.
Lindsay Connor con Mason Scott. Bla, bla, bla. Emma Stevenson con Gabe Hamilton. Bla, bla, bla. Más bla, bla bla. Y, por último…
—Sophie Evans…—dijo, y luego se tomo un largo tiempo para decir mi pareja—… con Finn Anderson.
Mis ojos se abrieron como platos. Los de Finn también. Emma casi se cae de su silla. Giré la cabeza para mirar a Finn y fue imposible no sonreír y detener las palabras que iban a salir de mi boca.
—Veo que el mugroso eres tú —dije, sonriendo cínicamente. Aunque por dentro todo aquello no me gustaba para nada.
- escrito #02:
- 1
En los últimos meses de mi vida soñaba cosas que me habían pasado o que deseaba que sucedieran. En realidad, algunos de esos “sueños” eran pesadillas, mientras que los otros, bueno, los otros sí se trataban de sueños. Uno de los peores sueños que tuve —o mejor dicho pesadillas— era en el que veía a Alison, mi mejor amiga, y luego de gritarle a los cuatro vientos que la amaba, corríamos para darnos ese beso de película con el que todo el mundo sueña. Pero, en ese momento, siempre aparecía un camión color rojo carmesí que nos atropellaba o, bueno, eso pienso que hacía, ya que siempre me levantaba en ese instante. Sin embargo, ese no era el “sueño” que me atormentaba desde hace ya dos meses. Se trataba de otro. Otro mucho peor.
Me levanté de golpe, mientras comenzaba a rascarme la cabeza y me percataba de que estaba sudando. No recordaba que día era, ni en qué mes o año me encontraba. Sin mencionar que incluso había olvidado quien era. Me senté en la cama y solté un suspiro, que apuesto que fue el más largo que pude haber dado en toda mi vida, mientras que seguía rascándome la cabeza, tratando de recordar algo, al menos, de la noche anterior.
Me quede pensando en la pesadilla que había tenido. Una vez más, desde hace ya dos meses, me encontraba soñando con mi padre. Soñando con su esperado regreso. Creía que era algo inmaduro de mi parte, aunque en realidad era increíble no haber podido superar que nos abandonó. Quiero decir, hace ya cinco años que la tierra se lo trago por completo y yo aún seguía soñando con él, con que volvería algún día. Era patético que tuviese esos sueños, ya que hace un tiempo lo tuve que haber superado y sacado de mi mente. Aunque, por supuesto, era complicado de hacer. La verdad es que nunca me imagine que él se iría el día en que nacía su única hija. Pero lo hizo y, eso, aún duele. En realidad, lo que me dolía de ese tema era que Megan, mi hermana, me consideraba su héroe y el amor de su vida, era tierno y muy bonito de su parte, mas ella debía decirle héroe a su padre y no a su hermano. Más sin embargo, lo que más me dolía era tener que escuchar a mi madre llorar todas las noches, mientras se culpaba por la huida de ese cobarde al que llamaba padre. Mi madre aún no lo superaba, pero se convirtió en uno persona fuerte y por eso la admiraba. Nos enseño, a Megan y a mí, a como ser personas fuertes y superar —o tratar— todo lo que Dios nos ponga en el camino. Nos enseño a sobrellevar las cosas, aunque a lo mejor era imposible hacerlo. Para resumir todo, esa era la razón por la que estaba orgulloso de mi madre.
Deje de pensar en mi padre y me eche para atrás, mirando el techo. Me gustaba mucho el candelabro que había en el centro de mi habitación. Era divertido ver como se movía de un lado a otro, lo que significaba que se iba a caer, pero que aguantaba, que era resistente. Era fuerte. En ocasiones, me hacía acordar a mí, hace cinco años atrás cuando mi padre nos abandono.
Y la escena pasó por mi cabeza.
Recordaba perfectamente lo que había sucedido. Tenía demasiada hambre y, como solo tenía 11 años, no me animaba a salir a comprar solo, conclusión: se lo pedí a él. Él había asentido con gusto y me ordeno que lo espere hasta que él aparezca por las puertas del sanatorio. Pero, él, nunca regreso. Estuve sentando por tres horas en la sala de espera, esperando que él entrase por aquellas puertas con un paquete de papas fritas que esperaba poder comer con él. Mas, decidió desaparecer. Aquello me recordaba a Los Simpson, más específicamente al episodio en el que Nelson cuenta la huida de su padre, que fue a comprar un paquete de cigarrillos y termino comiendo maní (del cual era alérgico) y nunca más volvió. Aunque, el padre de Nelson había sido secuestrado por un circo, el cual pensó que era un mono mutante (por su alergia, obvio). Mientras que ese, lamentablemente, no era el caso de mi padre.
Me largue a llorar. Lloré como si no hubiese un mañana. Odiaba llorar, porque me hacía sentir débil. ¿Y qué debía ser? Debía ser fuerte, porque era un hombre ¿y qué son los hombres? Sí, son fuertes. Mas, era inevitable no llorar cuando recordaba eso. Y, lo peor, es que a medida que el tiempo pasaba comenzaba a comprender que había sido mi culpa que él haya desaparecido. Si nunca le hubiese pedido ese paquete de papas fritas, él todavía estaría aquí.
Y sería el héroe de Megan.
Y mi madre sería feliz.
Y yo… yo tendría un padre.
Hice un gran esfuerzo por detener las lágrimas que amenazaban con seguir saliendo y, luego, me dirigí al armario de roble que se encontraba frente a mi cama. Saque una camisa y un pantalón color azul marino. Arrastrando los pies, salí de mi habitación para meterme en el baño, el cual se encontraba al final del pasillo, para poder ducharme tranquilamente y, de paso, despejar mi mente.
Luego de ducharme, baje a la cocina y me percate de que mi madre no estaba, lo que significaba que debía prepararme el desayuno yo mismo. Me resultaba incomodo y repugnante tener que comer cereal, lo detestaba y mucho más aquel tipo de mies. Megan lo compraba por el simple hecho de que coleccionaba los juguetes de princesas que traía, pero si no fuese por ese motivo, mi madre no gastaría ni un centavo en cereal. Lo comí a regañadientes y, después, me regañe por no saber cocinas ni siquiera un panqueque.
Después de comer el cereal, se me ocurrió llamar a mi mejor amiga. Agarré mi celular y busque su número entre mis contactos y, cuando ya tuve el contacto “Ali”, apreté el botón verde y la llamada comenzó. El teléfono sonaba y sonaba, mas nadie atendía. Estuve a punto de colgar cuando, por fin, Alison se digno a atender.
—Hola Ali —dije, mientras caminaba de un lado a otro sin razón alguna.
—Josh, no es momento. —Fue lo único que dijo y, luego, añadió—: mis padres están discutiendo. Te llamo luego.
Y me colgó antes de que pudiese decir algo. Algo que odiaba de la pelirroja era que colgaba cuando la gente le iba a contestar. Era algo molesto e irritante y, ella, no hacía nada para evitarlo.
Abrí los ojos ya que sentía la mirada de alguien en mi cuello. Al instante, me di cuenta de que me había quedado dormido en la cocina y, después, bostecé. Gire la cabeza a la derecha y me encontré con Megan, la cual comenzaba a decir cosas que no podía comprender. Me senté derecho, mientras que con la mano izquierda me rascaba los ojos para poder despertarme por completo. Luego mire a mi hermana.
—¿Qué sucede pequeña? —Dije, mientras me rascaba la nuca. ¿Cuánto tiempo había dormido?
—Tengo hambre. —Luego de decir eso, Meg se sentó a mi lado y se cruzó de brazos.
—Está bien, ¿quieres cereal? Es lo único que sé hacer —Ella asintió, con una pequeña sonrisa que le ilumino el rostro.
Me pare y me acerqué a la heladera, de donde saque el sachet de leche y, del estante, el cereal. Agarré el tazón favorito de mi hermana pequeña y puse una buena porción del alimento y, después, le agregue leche. Por último le di a Meg una cuchara y salí de allí.
Amaba el living de mi casa, no por el hecho de tener un plasma de unas 45 pulgadas en el cual se podían ver películas de alta definición, sino por el hecho de ser un lugar tranquilo en donde podías hacer lo que quieras y, tenlo por seguro, nadie te molestaría ya que el living era el segundo lugar sagrado de la casa —después de la cocina, por supuesto—. Me senté en el sofá y encendí el televisor, para luego prepararme para ver El Diablo se viste a la moda (la película favorita de Alison y, también, la mía). Sin embargo, mi celular comenzó a vibrar por lo que, después de bufar y poner los ojos en blanco, contesté. Era Alison.
—Hola —dijo, en un susurro.
—Hola —contesté.
—Mi madre se irá a vivir a Argentina, —y añadió—: lo tenía planeado desde hace meses y no dijo palabra alguna —escuche como tomaba un poco de aire, supongo que trataba de aguantar las lágrimas. La voz se le había quebrado y casi no podía continuar—. Y siguen peleando. Mi padre dice que si me voy con ella se asegurará de ponerle un abogado. Pero, ella, quiere que me vaya a Argentina y comience una vida nueva.
—Pero… ¿no te irás verdad?
—Ella se irá hoy. Yo me quedo aquí.
—¿Pero no lo harás? Alison, ¿no te irás cierto?
—Es mi decisión y aún no la he tomado —dijo, para luego respirar profundamente—. De todas formas, creo que me mudaré con mi madre. —Y colgó, dejándome con las palabras en la boca… una vez más.
Esas palabras resonaron por mi cabeza todo el día. “De todas formas, creo que me mudaré con mi madre”. ¿Irse con su madre? ¿Acaso hablaba en serio? Alison no podía hacerme eso, ella prometió nunca abandonarme y ella cumpliría la promesa, ¿o no?
Por supuesto que no lo haría, ella rompería la promesa apenas la oportunidad se le cruzase por el camino. Realmente odiaba que Alison fuera así. Era una persona egoísta y narcisista y, eso, era lo que más odiaba de ella. Quiero decir, no la odiaba solo que, simplemente, me irritaban sus actitudes de niña mimada y malcriada cuando, en realidad, ella no era ninguna de las dos cosas. A veces, Ali podía llegar a ser algo —muy— molesta con sus caprichos, mas seguía siendo una chica buena y con un gran corazón. Además, hace ya un tiempo me había dado cuenta que ella no era la perfección como mi subconsciencia me hacía creer. Porque lo perfecto no existía. Porque todas, absolutamente todas, las personas del mundo tenían al menos un defecto. Y, los de Ali, eran esos. Ser egoísta, narcisista y caprichosa.
Muchas veces me pregunté porque seguía siendo amigo de Alison. Luego, comprendí que el amor que sentía hacia mi mejor amiga era tan pero tan grande que se me hacía muy difícil separarme de ella. Y, en ese momento, entendí que estaba enamorado de la pelirroja.
Tarde bastante en conciliar el sueño. Todavía esas palabras retumbaban en mi mente una y otra vez. El simple hecho de que existían las posibilidades de que mi mejor amiga se fuera del país me asustaban. Pero el hecho de quedarme solo, me asustaba aún más. Mejor dicho, me aterraba.
Cuando decidí ser su amigo, todas las personas que eran mis “amigos” se alejaron y me quede solo. Pero, ella y Steve, quisieron quedarse —y a Steve ya lo había perdido— y ver como decidía entre irse o quedarse dolía. Sentí que el cuerpo se me quemaba y que en cualquier momento se iba a quebrar en dos. Sentí que el corazón se me estrujaba cada vez que me imaginaba una vida sin mi mejor amiga.
Eso que sentía… era realmente horrible.
- PhiDeltaBelka:
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Miluh.
Re: UNT University. | Resultados.| nc.
Miluh. escribió:[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]
tobiaskosh&effysweet
Nombres: tobias kosh & elizabeth "effy" sweet.
Representantes: chace crawford & holland roden.
Edades: 19 años.
Escritos:
- escrito #01:
Capítulo 1
No había peor cosa que comenzar el colegio. ¿O tal vez si? Sí, la había, y era volver a ver a todos los idiotas que me ignoraban o humillaban o que, simplemente, se reían de mí por ser tan solitaria.
Mas, para mi suerte, este era el último año en el que vería las caras de todos aquellos ineptos que me hacían la vida imposible constantemente. Mas, para mi suerte, el año que viene me iría a Inglaterra a estudiar a la mejor universidad de artes escénicas de todo el mundo, posiblemente.
Me cambie rápidamente y luego me maquille un poco. A diferencia de todas las chicas del Cramer Creek High School, posiblemente yo era la más sencilla de todas: base para tapar los pocitos o granitos, mascara de pestañas —no tanto— y un poco de brillo de labios, ¿quién necesitaba más? Yo no, así era feliz.
Me miré en el espejo de cuerpo completo por última vez, y luego me dirigí a la cocina donde tome un poco de café y salí por la puerta de entrada. Lo mejor de vivir cerca del infierno era que no tenía que caminar muchas cuadras o pedirle a alguien que me llevara. Lo malo era saber que era la única en todo el instituto que no tenía un auto o una moto, ¿patético? Totalmente.
Era como una tortuga. Me tomaba mi tiempo para caminar y observar todo lo que había a mi alrededor, era muy observadora. En realidad no escuchaba nada, estaba tan metida en mi mundo que no escuche los bocinazos de un Audi detrás de mí. Finn Anderson, como no.
—Hey, mugrosa. —Apuré el paso, la tortura comenzaba antes de tiempo, ¿por qué a mí? —. No corras, cariño.
Puede ser que sea la primera vez en el año que caminaba tan rápido. En menos de cinco minutos me encontraba entrando por las puertas de la institución y dirigiéndome a la sala de actos, donde se realizaba el acto de comienzo de año y la directora comunicaba las normas y bla, bla, bla.
Tome asiento en una de las sillas de plástico delante de todo, como siempre. Nada había cambiado en aquel salón. Las ventanas seguían siendo igual de altas y horribles, las paredes seguían de ese horrible alba de hace años, el suelo tenía aún mugre y polvo del año pasado. El escenario llevaba aún las guirnaldas de la fiesta de finalización de clases, ¿acaso nadie se preocupaba por como lucía todo aquel lugar? Obviamente que no.
El salón de actos se fue llenando poco a poco, y veinte minutos después todos los alumnos estaban sentados y charlando con sus amigos o con el que tenían al lado. Yo estaba en silencio, no tenía amigos. Era la excluida.
Se escuchó como alguien golpeaba un micrófono y algunas chicas gritaron tapándose los oídos, puse los ojos en blanco. La directora estaba de pie, arriba del escenario, con su típico uniforme de soy-una-vieja-con-mal-gusto-para-la-ropa y con un peinado que parecía de los años 80. Volvió a golpear el micrófono y el silencio inundo la sala.
—Buenas mañanas mis queridos alumnos —comenzó a decir—. Bienvenidos a un nuevo año lleno de emociones y trabajo duro.
La mayoría de las cosas que la Sra. Garrett decía no las escuche. En realidad, todo lo que escuchaba eran bla, bla, bla. Normas del colegio y el uniforme. Bla, bla, bla, bla. Todo lo típico, sin embargo, algo había cambiado.
—Por favor, todos los del último año presten atención. —Levante la cabeza, esperando lo que iba a anunciar—. Este año hemos preparado, con el consejo estudiantil y la aprobación de todos los padres, un proyecto que los meterá de lleno en la vida adulta. —¿Todos los padres? ¿Qué demonios estaba diciendo?—. El proyecto es llamado “Proyecto Padres” y consiste en emparejar a dos personas del último curso, totalmente al azar, con la que tendrán que convivir hasta mitad de año. —Los abucheos comenzaron, gritos de horror y algunas chicas que lloraban. Yo estaba con los ojos como platos y la boca entreabierta, ¿qué trataba de decir con “convivir”?—. ¡Por favor, silencio! —Gritó, todos se callaron—. Los gastos de la vivienda donde convivirán con su pareja será pagada en su totalidad por la institución. Mas, esto no termina aquí. —Tomo aire y saco unas hojas—. Se les asignara, a cada pareja, una cantidad de niños de los que deberán cuidar hasta noviembre. —Los gritos comenzaron nuevamente, nadie parecía feliz por el proyecto. Y nadie era nadie—. El máximo de niños es de cinco, el mínimo de dos. —Estaba estupefacta, helada por lo que la Sra. Garrett decía—. Sobre las parejas: nadie puede cambiar de pareja. Es obligatorio convivir con esa persona y, nos ocuparemos, de saber si alguno no está en su casa o apartamento asignado. —Volvió a tomar aire—. Los apartamentos o casas tienen cámaras con lo que se podrá ver todo lo que las parejas hacen, desde como cuidan a sus “hijos” a ver cómo se llevan y conviven. De todas formas, se les dará un manual en donde están todas las normas de este proyecto. —Se rasco la frente, el silencio que había en el salón era sepulcral, todo el mundo estaba con la boca abierta o llorando en silencio—. En su primera clase del día sus profesores les dirán las personas con las que fueron asignadas. ¡Disfruten el año y diviértanse!
Todo el mundo se dirigió a la puerta del salón para salir de allí. Rápidamente el lugar quedo vacío, a excepción de los profesores que hablaban animadamente. Ya me encontraba en el pasillo cuando, de repente, sentí que alguien me golpeaba el hombro. Me gire instintivamente y mire a Emma Stevenson parada junto a su “hermoso” novio, Finn Anderson.
—¿La mugrosa con quien será emparejada? —Dijo Emma, mirando a su novio y luego a mí.
—Con alguien mugroso, seguramente. —Contestó Finn. Ambos comenzaron a reír. Puse los ojos en blanco y seguí caminando.
No solo tenía que aguantar eso en los pasillos o en la cafetería, sino que debía hacerlo en todas las clases y, también, por toda la ciudad. Todo el año. Era un sufrimiento.
Llegué al salón de ciencias y me encontré con que la mayoría de las personas ya estaban allí. Me dirigí al fondo y me senté en la esquina, en el banco de siempre. El banco de “Sophie la mugrienta”.
El maestro entro por la puerta y dejo sus cosas encima del escritorio. Luego sonrió y se sentó.
—Buenos días a todos —dijo, alegremente—. Como saben, el Proyecto Padres llego al Cramer Creek High School. —Rodee los ojos, posiblemente no fui la única. El profesor tenía una sonrisa de oreja a oreja—. Ahora, antes de decirles sus parejas, les entregaré el manual que todos —énfasis en la palabra todos— tendrán que leer.
De una caja marrón saco copias de un manual. Comenzó a entregarle una copia a todos los presentes. En la portada se podía leer “PROYECTO PADRES: TODO LO QUE TENES QUE SABER”. Me pareció un nombre patético pero por la suerte de todos, el manual no era tan grande. Luego, el profesor volvió a su escritorio y tomo asiento nuevamente.
—Ahora sí, comencemos con las parejas. —Saco una hoja de un portafolio y comenzó a leer los nombres.
Lindsay Connor con Mason Scott. Bla, bla, bla. Emma Stevenson con Gabe Hamilton. Bla, bla, bla. Más bla, bla bla. Y, por último…
—Sophie Evans…—dijo, y luego se tomo un largo tiempo para decir mi pareja—… con Finn Anderson.
Mis ojos se abrieron como platos. Los de Finn también. Emma casi se cae de su silla. Giré la cabeza para mirar a Finn y fue imposible no sonreír y detener las palabras que iban a salir de mi boca.
—Veo que el mugroso eres tú —dije, sonriendo cínicamente. Aunque por dentro todo aquello no me gustaba para nada.
- escrito #02:
1
En los últimos meses de mi vida soñaba cosas que me habían pasado o que deseaba que sucedieran. En realidad, algunos de esos “sueños” eran pesadillas, mientras que los otros, bueno, los otros sí se trataban de sueños. Uno de los peores sueños que tuve —o mejor dicho pesadillas— era en el que veía a Alison, mi mejor amiga, y luego de gritarle a los cuatro vientos que la amaba, corríamos para darnos ese beso de película con el que todo el mundo sueña. Pero, en ese momento, siempre aparecía un camión color rojo carmesí que nos atropellaba o, bueno, eso pienso que hacía, ya que siempre me levantaba en ese instante. Sin embargo, ese no era el “sueño” que me atormentaba desde hace ya dos meses. Se trataba de otro. Otro mucho peor.
Me levanté de golpe, mientras comenzaba a rascarme la cabeza y me percataba de que estaba sudando. No recordaba que día era, ni en qué mes o año me encontraba. Sin mencionar que incluso había olvidado quien era. Me senté en la cama y solté un suspiro, que apuesto que fue el más largo que pude haber dado en toda mi vida, mientras que seguía rascándome la cabeza, tratando de recordar algo, al menos, de la noche anterior.
Me quede pensando en la pesadilla que había tenido. Una vez más, desde hace ya dos meses, me encontraba soñando con mi padre. Soñando con su esperado regreso. Creía que era algo inmaduro de mi parte, aunque en realidad era increíble no haber podido superar que nos abandonó. Quiero decir, hace ya cinco años que la tierra se lo trago por completo y yo aún seguía soñando con él, con que volvería algún día. Era patético que tuviese esos sueños, ya que hace un tiempo lo tuve que haber superado y sacado de mi mente. Aunque, por supuesto, era complicado de hacer. La verdad es que nunca me imagine que él se iría el día en que nacía su única hija. Pero lo hizo y, eso, aún duele. En realidad, lo que me dolía de ese tema era que Megan, mi hermana, me consideraba su héroe y el amor de su vida, era tierno y muy bonito de su parte, mas ella debía decirle héroe a su padre y no a su hermano. Más sin embargo, lo que más me dolía era tener que escuchar a mi madre llorar todas las noches, mientras se culpaba por la huida de ese cobarde al que llamaba padre. Mi madre aún no lo superaba, pero se convirtió en uno persona fuerte y por eso la admiraba. Nos enseño, a Megan y a mí, a como ser personas fuertes y superar —o tratar— todo lo que Dios nos ponga en el camino. Nos enseño a sobrellevar las cosas, aunque a lo mejor era imposible hacerlo. Para resumir todo, esa era la razón por la que estaba orgulloso de mi madre.
Deje de pensar en mi padre y me eche para atrás, mirando el techo. Me gustaba mucho el candelabro que había en el centro de mi habitación. Era divertido ver como se movía de un lado a otro, lo que significaba que se iba a caer, pero que aguantaba, que era resistente. Era fuerte. En ocasiones, me hacía acordar a mí, hace cinco años atrás cuando mi padre nos abandono.
Y la escena pasó por mi cabeza.
Recordaba perfectamente lo que había sucedido. Tenía demasiada hambre y, como solo tenía 11 años, no me animaba a salir a comprar solo, conclusión: se lo pedí a él. Él había asentido con gusto y me ordeno que lo espere hasta que él aparezca por las puertas del sanatorio. Pero, él, nunca regreso. Estuve sentando por tres horas en la sala de espera, esperando que él entrase por aquellas puertas con un paquete de papas fritas que esperaba poder comer con él. Mas, decidió desaparecer. Aquello me recordaba a Los Simpson, más específicamente al episodio en el que Nelson cuenta la huida de su padre, que fue a comprar un paquete de cigarrillos y termino comiendo maní (del cual era alérgico) y nunca más volvió. Aunque, el padre de Nelson había sido secuestrado por un circo, el cual pensó que era un mono mutante (por su alergia, obvio). Mientras que ese, lamentablemente, no era el caso de mi padre.
Me largue a llorar. Lloré como si no hubiese un mañana. Odiaba llorar, porque me hacía sentir débil. ¿Y qué debía ser? Debía ser fuerte, porque era un hombre ¿y qué son los hombres? Sí, son fuertes. Mas, era inevitable no llorar cuando recordaba eso. Y, lo peor, es que a medida que el tiempo pasaba comenzaba a comprender que había sido mi culpa que él haya desaparecido. Si nunca le hubiese pedido ese paquete de papas fritas, él todavía estaría aquí.
Y sería el héroe de Megan.
Y mi madre sería feliz.
Y yo… yo tendría un padre.
Hice un gran esfuerzo por detener las lágrimas que amenazaban con seguir saliendo y, luego, me dirigí al armario de roble que se encontraba frente a mi cama. Saque una camisa y un pantalón color azul marino. Arrastrando los pies, salí de mi habitación para meterme en el baño, el cual se encontraba al final del pasillo, para poder ducharme tranquilamente y, de paso, despejar mi mente.
Luego de ducharme, baje a la cocina y me percate de que mi madre no estaba, lo que significaba que debía prepararme el desayuno yo mismo. Me resultaba incomodo y repugnante tener que comer cereal, lo detestaba y mucho más aquel tipo de mies. Megan lo compraba por el simple hecho de que coleccionaba los juguetes de princesas que traía, pero si no fuese por ese motivo, mi madre no gastaría ni un centavo en cereal. Lo comí a regañadientes y, después, me regañe por no saber cocinas ni siquiera un panqueque.
Después de comer el cereal, se me ocurrió llamar a mi mejor amiga. Agarré mi celular y busque su número entre mis contactos y, cuando ya tuve el contacto “Ali”, apreté el botón verde y la llamada comenzó. El teléfono sonaba y sonaba, mas nadie atendía. Estuve a punto de colgar cuando, por fin, Alison se digno a atender.
—Hola Ali —dije, mientras caminaba de un lado a otro sin razón alguna.
—Josh, no es momento. —Fue lo único que dijo y, luego, añadió—: mis padres están discutiendo. Te llamo luego.
Y me colgó antes de que pudiese decir algo. Algo que odiaba de la pelirroja era que colgaba cuando la gente le iba a contestar. Era algo molesto e irritante y, ella, no hacía nada para evitarlo.
Abrí los ojos ya que sentía la mirada de alguien en mi cuello. Al instante, me di cuenta de que me había quedado dormido en la cocina y, después, bostecé. Gire la cabeza a la derecha y me encontré con Megan, la cual comenzaba a decir cosas que no podía comprender. Me senté derecho, mientras que con la mano izquierda me rascaba los ojos para poder despertarme por completo. Luego mire a mi hermana.
—¿Qué sucede pequeña? —Dije, mientras me rascaba la nuca. ¿Cuánto tiempo había dormido?
—Tengo hambre. —Luego de decir eso, Meg se sentó a mi lado y se cruzó de brazos.
—Está bien, ¿quieres cereal? Es lo único que sé hacer —Ella asintió, con una pequeña sonrisa que le ilumino el rostro.
Me pare y me acerqué a la heladera, de donde saque el sachet de leche y, del estante, el cereal. Agarré el tazón favorito de mi hermana pequeña y puse una buena porción del alimento y, después, le agregue leche. Por último le di a Meg una cuchara y salí de allí.
Amaba el living de mi casa, no por el hecho de tener un plasma de unas 45 pulgadas en el cual se podían ver películas de alta definición, sino por el hecho de ser un lugar tranquilo en donde podías hacer lo que quieras y, tenlo por seguro, nadie te molestaría ya que el living era el segundo lugar sagrado de la casa —después de la cocina, por supuesto—. Me senté en el sofá y encendí el televisor, para luego prepararme para ver El Diablo se viste a la moda (la película favorita de Alison y, también, la mía). Sin embargo, mi celular comenzó a vibrar por lo que, después de bufar y poner los ojos en blanco, contesté. Era Alison.
—Hola —dijo, en un susurro.
—Hola —contesté.
—Mi madre se irá a vivir a Argentina, —y añadió—: lo tenía planeado desde hace meses y no dijo palabra alguna —escuche como tomaba un poco de aire, supongo que trataba de aguantar las lágrimas. La voz se le había quebrado y casi no podía continuar—. Y siguen peleando. Mi padre dice que si me voy con ella se asegurará de ponerle un abogado. Pero, ella, quiere que me vaya a Argentina y comience una vida nueva.
—Pero… ¿no te irás verdad?
—Ella se irá hoy. Yo me quedo aquí.
—¿Pero no lo harás? Alison, ¿no te irás cierto?
—Es mi decisión y aún no la he tomado —dijo, para luego respirar profundamente—. De todas formas, creo que me mudaré con mi madre. —Y colgó, dejándome con las palabras en la boca… una vez más.
Esas palabras resonaron por mi cabeza todo el día. “De todas formas, creo que me mudaré con mi madre”. ¿Irse con su madre? ¿Acaso hablaba en serio? Alison no podía hacerme eso, ella prometió nunca abandonarme y ella cumpliría la promesa, ¿o no?
Por supuesto que no lo haría, ella rompería la promesa apenas la oportunidad se le cruzase por el camino. Realmente odiaba que Alison fuera así. Era una persona egoísta y narcisista y, eso, era lo que más odiaba de ella. Quiero decir, no la odiaba solo que, simplemente, me irritaban sus actitudes de niña mimada y malcriada cuando, en realidad, ella no era ninguna de las dos cosas. A veces, Ali podía llegar a ser algo —muy— molesta con sus caprichos, mas seguía siendo una chica buena y con un gran corazón. Además, hace ya un tiempo me había dado cuenta que ella no era la perfección como mi subconsciencia me hacía creer. Porque lo perfecto no existía. Porque todas, absolutamente todas, las personas del mundo tenían al menos un defecto. Y, los de Ali, eran esos. Ser egoísta, narcisista y caprichosa.
Muchas veces me pregunté porque seguía siendo amigo de Alison. Luego, comprendí que el amor que sentía hacia mi mejor amiga era tan pero tan grande que se me hacía muy difícil separarme de ella. Y, en ese momento, entendí que estaba enamorado de la pelirroja.
Tarde bastante en conciliar el sueño. Todavía esas palabras retumbaban en mi mente una y otra vez. El simple hecho de que existían las posibilidades de que mi mejor amiga se fuera del país me asustaban. Pero el hecho de quedarme solo, me asustaba aún más. Mejor dicho, me aterraba.
Cuando decidí ser su amigo, todas las personas que eran mis “amigos” se alejaron y me quede solo. Pero, ella y Steve, quisieron quedarse —y a Steve ya lo había perdido— y ver como decidía entre irse o quedarse dolía. Sentí que el cuerpo se me quemaba y que en cualquier momento se iba a quebrar en dos. Sentí que el corazón se me estrujaba cada vez que me imaginaba una vida sin mi mejor amiga.
Eso que sentía… era realmente horrible.
- PhiDeltaBelka:
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Ficha DENEGADA
Denegada, no colocaste la ficha obligatoria, APARTE, me lanzaste tierrita en los ojos por que no lo note XD, fuera de broma, denegada, arregla eso.
Última edición por Darkness†. el Dom 18 Mayo 2014, 4:58 pm, editado 1 vez
Levine.
Re: UNT University. | Resultados.| nc.
Omg, mi Naka es malota idk.
No aceptare yo la ficha también porque la paja es grande pero estas audicionando.
No aceptare yo la ficha también porque la paja es grande pero estas audicionando.
hayes grier.
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