"THE NOT SO HAPPY ENDING" (Harry Styles y Bekah Dale) |TERMINADA|

Después de prácticamente correr por las avenidas, llegamos en menos de media hora a la clínica. Entramos y en la sala de espera estaba un triste y lloroso Niall, llorando a todo pulmón, a su lado y tratando de calmarlo, su novia Fátima.
Nos acercamos a ellos e inconscientemente abracé a Niall, y también me puse a llorar. Me sentía horriblemente mal, no podía creer que de un momento a otro todo podía cambiar.
-¡Harry se va a morir!, eso dijeron los doctores- dijo Niall en su sollozo y yo lo apreté con más fuerza. Lo que dijo me acababa de partir el corazón.
-Ella no va a morir Niall, tú y yo no vamos a permitir eso, ¿verdad?- le dije bajito y como pude, porque las lágrimas no me dejaban respirar.
-Cierto Harry, pero no la quiero perder, es mi mejor amiga y la quiero demasiado- me dijo él.
-Y yo Niall, yo la amo aunque sea un estúpido que se comportó como un imbécil con ella. Ella no se lo merecía, yo soy el culpable de todo- y no aguanté más y me tiré al suelo a llorar como un idiota, como el idiota que era, porque si yo no hubiera hecho eso y no la hubiera juzgado, a lo mejor ella no estaría en el estado que está ahora.
Niall se tiró en el suelo también y me volvió a abrazar. Susan y Fátima también lloraba a nuestro lado tratando de calmarnos, pero no iba a ser posible, estábamos destrozados por dentro.
Louis y Priscila se acercaron rápidamente mientras Aldi y Liam venían entrando por la puerta principal, y supongo que pensaron lo peor al vernos tirados en el suelo llorando descontroladamente.
Aldi se acercó a nosotros y comenzó a llorar también, se sentó a nuestro lado y nos abrazó a los dos.
-Chicos, ¿por qué nos tiene que pasar esto?- nos preguntó, pero no hubo respuesta. Ninguno lo sabía.
Liam la tomó suavemente del brazo y la llevó al otro lado de la sala para calmarla, mientras Louis llenaba unos formularios en el mostrador y Priscila conversaba triste con Fátima y Susan.
-Somos unos idiotas Harry, yo también la dejé cuando más me necesitaba- dijo Niall secando sus lágrimas.
-¿Porqué?, el que se debe de sentir mal soy yo, yo fui el que la insultó y el que la dejó sin importarle nada, todo es mi culpa- dije haciendo lo mismo que él, tratando de secarme las lágrimas.
-Te sentías dolido, eso es todo Harry. Siento que si no sale un médico y me dice que ella está mejor, me voy a morir poco a poco aquí- respondió y asentí, tratando de calmarme y recostando mi cabeza en una de las sillas. No me quería sentar en esas frías sillas, prefería estar tirado en el suelo.
-Lo mismo digo, siento demasiada impotencia- le dije y cerré los ojos. Traté de pensar en esos momentos agradables que tuve con ella, pocos, pero los mejores que había tenido en mi vida.
Al abrir los ojos pude ver que Susan y Fátima se acercaban con dos vasos llenos de café. Se sentaron al lado de cada uno y nos lo ofrecieron.
-Tomen chicos, sé que no los va a hacer sentirse mejor, pero les ayudará a estar despiertos si ocurre algo- dijo Susan.
-Gracias Susan, por venirme a acompañar hasta acá. No deberías de haberlo hecho- le dije tomando el café.
-No es nada Harry, quería ayudar- respondió.
-Em… no te conozco Susan- dijo Niall viendo a mi amiga.
-Hola, soy Susan- respondió ella mostrándole una sonrisa.
-Yo soy Niall, me supongo que eres amiga de Harry- dijo él mirándome horriblemente.
-Sí Niall, es sólo mi amiga- respondí por ella.
-Chicos, tómense el café, los vamos a dejar solos para que hablen- dijo de repente Fátima y ella y Susan desaparecieron.
-¿Así que una amiga nada más?- me atacó Niall.
-¿Acaso estás celoso?, es la verdad, es mi amiga- le respondí.
-Está bien, te creo. Si fuera una conquista no estuviera aquí- dedujo.
-Exacto- dije viendo como Louis se acercaba.
-Chicos hay sólo dos oportunidades para pasar a la habitación de Bekah, pensé que ustedes dos querían ser esos dos- dijo.
-POR SUPUESTO- respondimos los dos al unísono. Louis asintió.
-¿Quién irá primero?- preguntó al fin.
-¿Podría?- dijo Niall mirándome.
-Sí, pasa tú primero, luego pasaré yo- y él y Louis se perdieron entre los pasillos.
Mientras esperaba, me aferré al café que me había traído Susan como si mi vida dependiera de ello, tomaba cada sorbo desesperado y nervioso. Quería entrar en esa habitación y decirle a Bekah que la amaba.
Al cabo de un rato vino Niall más tranquilo, se veía en paz consigo mismo y no le pregunté nada y salí enseguida corriendo por los posillos.
-Habitación 17- gritó Louis a lo lejos.
Caminé hasta conseguir la habitación. Entré lenta y pausadamente. No quería que algo se estropeara.
Me acerqué hasta su cama y la pude ver después de dos meses sin mirarla ni hablarle. Estaba pálida y más delgada de lo normal, debajo de sus ojos se formaban unas ojeras horribles y sus labios estaban secos y sin vida.
Busqué una silla y me senté a su lado y enseguida comencé a llorar de nuevo. No lo podía evitar, me sentía miserable y creía que todo era mi culpa. Tomé su mano y la acaricié.
-Hola Bekah, soy Harry. Sé que probablemente me odies y que no quieras que esté aquí, pero necesitaba hablar contigo y pedirte perdón. Discúlpame por haber sido una idiota que no razonó las cosas. Discúlpame también por haberte herido y llamado mentirosa, porque no lo eres, eres la persona más linda y amable del mundo. Todo es mi culpa y todo lo que te pasa es gracias a mí. Te pido que por favor me perdones, todo ha sido también difícil para mí y yo… te amo Bekah- le dije cerca de su oído. Algunas de mis lágrimas cayeron en sus mejillas y las sequé rápidamente.
Pude sentir que ella estaba viva, y que no se quería ir. Sentí también un cosquilleo mientras sostenía su mano, el mismo cosquilleo que sentí la primera vez que la besé. Todo me comenzó a dar vueltas cuando los aparatos dejaron de sonar y uno de ellos sólo hacía un sonido ruidoso. Significaba que Bekah se estaba muriendo no lo podía permitir.
Grité histéricamente y salí corriendo en busca de un médico. Todos los médicos y enfermeras comenzaron a entrar en la habitación y no permitía dejarla ver.
Cerraron la puerta y me dejaron afuera esperando, las lágrimas no dejaban de salir de mis ojos y sentía que todo se iba abajo. Al parecer los chicos me oyeron gritar y llegaron corriendo a mi lado. Todos llorábamos inconsolablemente hasta que por fin un médico salió de la habitación.
-Chicos, me temo decirles que la señorita Bekah Dale murió- dije él volviendo a entrar en la habitación.
Todos quedamos en shock y me tiré en el suelo horrorizado. Yo había muerto con ella también.

Bekah había muerto exactamente hace 5 años. Ninguno de nosotros lo podía creer en ése entonces, ya que todo había ocurrido demasiado rápido. Después de que aquel médico nos diera la noticia, todos sentimos que nos faltaba algo, más a mí que a cualquier de ellos, y era mi corazón. Al morir ella morí yo también, no tenía ganas de ir a esa universidad a estudiar medicina, ni mucho menos rehacer mi vida, porque mi vida era ella, ¿cómo iba a poder recuperar mi vida si yo también había muerto con ella?. Después me mucho tiempo y con ayuda de mis amigos, decidí estudiar medicina y graduarme, para por lo menos hacer algo en mi vida, y para no permitir que personas como Bekah, murieran y dejaran ése vacío tan horrible en sus familias.
Dos días después de su muerte, regresaron Zayn y María de sus “trágicas vacaciones en España”, porque al enterarse de todo lo que había pasado, comenzaron a sentirse culpables por no haber estado ahí.
Niall y Fátima se casaron dos años después, en una ceremonia alegre y hermosa, en las afueras de Mullingar, lugar de nacimiento de Niall. Ése mismo año nació una hija fruta de su amor, Mary Ann, se llama.
Aldi y Liam siguieron juntos, pero hasta estas fechas no han decidió casarse, quizá porque Liam tiene miedo de pedírselo a ella, pero estoy segura que ella aceptaría inmediatamente. Tiene dos hijos, una pequeña niña de 2 años llamada Lilian y un niño de 3 años llamado Ian.
Louis y Priscila se fueron a vivir a la ciudad natal de él, en Doncaster. Se casaron hace pocos meses y están de luna de miel en París.
Zayn y María también se casaron, y viven en España tranquilamente. En las reuniones que realizamos, ellos vienen y estamos todos hablando sobre nuestra vida.
Y bueno, en mi caso, duré dos años sin querer saber nada del mundo, me encerraba en mi habitación y por más de que Louis me rogaba, no le hacía caso. Por fin estudié medicina y me gradué hace poco, pero volví a ser el típico chico que era de más de una mujer y que se la pasaba todas las noches en los bares para pasar su penas, hasta que Susan me hizo entender que eso no era bueno para mi vida, y mucho menos era algo que Bekah hubiera querido que hiciera.
Después de éstos cinco años decidí darle una oportunidad a Susan, porque me apoyó desde el principio y nunca se alejó de mí. Ella aceptó y desde hace unos meses somos pareja, pero en mi corazón siempre estará ella, porque fue la primera persona que entró en mi corazón. De a poco sólo me ha quedado el recuerdo de ella, y le ha dado paso a momentos lindos e inolvidables con Susan, pero nunca olvidaré a Bekah. La persona que verdaderamente amé.