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Gráficos por y codes hechos por Kaffei e Insxne.
Gráficos por y codes hechos por Kaffei e Insxne.
Madness {One Direction.
O W N :: Archivos :: Novelas Abandonadas
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1, 2
Re: Madness {One Direction.
por Jockie. Vie 28 Feb 2014, 3:21 am
Cris: Yo. También. Me. Amo.
Lo sé, es fántastico(? Oc no. Muchas gracías aunque podría a ver sido mejor, si no lo hubiera hecho a toda prisa T.T
No mueras Cris D′: Sho, sho te quiero(?
Me pongo a trabajar en el capítulo u.u
Misty: Gracías<3 Me ha costado varios de práctica para escribir así.
Me pongo a trabajar ya en el capítulo
♥
Lo sé, es fántastico(? Oc no. Muchas gracías aunque podría a ver sido mejor, si no lo hubiera hecho a toda prisa T.T
No mueras Cris D′: Sho, sho te quiero(?
Me pongo a trabajar en el capítulo u.u
Misty: Gracías<3 Me ha costado varios de práctica para escribir así.
Me pongo a trabajar ya en el capítulo
♥
Jockie.
Re: Madness {One Direction.
por ●cнrιѕ● Lun 10 Mar 2014, 6:01 pm
¿No piensas seguirla? 
Hazlo por favor
Siento que moriré :buho:
Hazlo por favor
Siento que moriré :buho:
●cнrιѕ●
Re: Madness {One Direction.
por Shelley Mar 11 Mar 2014, 10:37 am
Nueva lectora. Umm.... como decirte mi opinion sobre este capitulo... ¡Ah sí! M-E E-N-C-A-N-T-Ó. 
Dios, me encanta el tema principal y da un misterio que te cagas. Siguela pronto xoxo
Dios, me encanta el tema principal y da un misterio que te cagas. Siguela pronto xoxoShelley
Re: Madness {One Direction.
por Winter. Jue 13 Mar 2014, 9:01 am
Chaper II
No le gustan las mañanas. Ella ha sido siempre de noches porque, como suelen decir, en la oscuridad transcurren las mejores cosas pero, por una vez en su vida, se alegra de que los rayos de sol iluminen su rostro. Para ser francos, ella no ha sido capaz de dormir nada. Entre la sombra del jardín y el cuarto del final del pasillo, no ha podido descansar tranquila así que se ha dedicado a dar vueltas en la cama, con la luz encendida. Se ha prometido que será lo suficientemente valiente para espantar el miedo y que, hoy mirará con la ayuda del día lo que ha encontrado en el final del pasillo, en la puerta. Quizá, sus ojos la han engañado, y ha malinterpretado las cosas.
Aprieta los puños bajo la sábana, y toma una profunda bocanada de aire. En el caso de que sea verdad lo que hay en el cuarto, no va a dudar contárselo a su padre. No piensa vivir ni loca en una casa semejante. Se pone en pie, con la ropa con la que ha llegado aún puesta y arrugada y estira sus brazos hacía arriba, desperezándose. Siente la boca pastosa, como si se hubiera estado dedicando a comer caramelos rancios, de los que se adhieren a las muelas con fuerza y saben asquerosos. Bosteza una vez más y camina hasta la puerta, con los labios apretados. Se tiene que mentalizar en lo que piensa hacer pero, realmente se siente como si fuera estúpida.
Ella se siente como en una película de terror, en la que la protagonista vive en una casa encantada, llena de habitaciones inundadas de objetos macabros y cosas que saltan por los aires solos. Gen no cree en fantasmas, tampoco en cosas paranormales. Le gusta la relajación que le expande por su delgado cuerpo el saber, que la ciencia tiene siempre la razón.
Para cuando se dá cuenta, ella se encuentra a mitad del pasillo. Los rayos de sol matutino serpentean juguetonamente por la moqueta que cubre el pasillo. Está cansada. Sinceramente no quiere ir hasta allí. Y si es verdad lo que vió. Un escalofrío recorre su espalda. No, no lo puede ser.
Sus ojos grises recorren hasta el final del pasillo. Se siente solitario, oscuro... Vacío. Traga saliva, y camina en su dirección, con los pasos de alguien que está decidido respecto a las acciones que va a cometer a continuación. Su mano se dirige hasta donde se supone que esta el pomo pero, para su sorpresa —alivio y confusión—, no hay nada. Gen arruga el ceño, con una gota de sudor resvalando por la sien hasta la mejilla y cayendo al suelo. Su mano se dirige hacia el otro lado. Quizá, se ha equivocado pero no. No hay nada. Su cara es estupefacta, dejando claro que aquello no se lo puede creer y corre hacia la ventana, moviendo con violencia las gruesas cortinas que la tapan. Lo primero que hace es cerrar los ojos, porque la luz ha entrado directamente en ellos y luego, se gira, abriéndolos.
Los puntitos negros inundan su visión, dejándola ciega durante unos instantes hasta que puede ver de nuevo. La puerta no está. Ella se encuentra pálida y mareada pero su cerebro busca velozmente una escusa. Una jodida escusa que le pueda asegurar que ella no se imagina cosas. Gen podría jurar un millón de veces que aquella puerta si que se encontraba al final del pasillo y que transportaba a un cuarto. Sus manos frotan sus ojos y piensa, con pesadez, que tal vez todo aquello se lo habría imaginado. Debe de confesar que, se encontraba muy cansada ya que un viaje de diez horas desde su ciudad hasta aquel pequeño pueblo a las afueras sin dormir la han matada; que se encontraba un poco nerviosa, porque la lluvía no dejaba de caer y a aquello se le sumaban truenos y rayos y eso la inquieta y que, el aspecto que daba aquella casa era escalofriante. Como un soplo de terror en la cara.
Gen asiente una vez más, girando sobre sus talones y dirigiéndose al baño para asearse.
—Todo ha sido una tonteria —murmura para si misma—. Debería de descansar más.
Aprieta los puños bajo la sábana, y toma una profunda bocanada de aire. En el caso de que sea verdad lo que hay en el cuarto, no va a dudar contárselo a su padre. No piensa vivir ni loca en una casa semejante. Se pone en pie, con la ropa con la que ha llegado aún puesta y arrugada y estira sus brazos hacía arriba, desperezándose. Siente la boca pastosa, como si se hubiera estado dedicando a comer caramelos rancios, de los que se adhieren a las muelas con fuerza y saben asquerosos. Bosteza una vez más y camina hasta la puerta, con los labios apretados. Se tiene que mentalizar en lo que piensa hacer pero, realmente se siente como si fuera estúpida.
Ella se siente como en una película de terror, en la que la protagonista vive en una casa encantada, llena de habitaciones inundadas de objetos macabros y cosas que saltan por los aires solos. Gen no cree en fantasmas, tampoco en cosas paranormales. Le gusta la relajación que le expande por su delgado cuerpo el saber, que la ciencia tiene siempre la razón.
Para cuando se dá cuenta, ella se encuentra a mitad del pasillo. Los rayos de sol matutino serpentean juguetonamente por la moqueta que cubre el pasillo. Está cansada. Sinceramente no quiere ir hasta allí. Y si es verdad lo que vió. Un escalofrío recorre su espalda. No, no lo puede ser.
Sus ojos grises recorren hasta el final del pasillo. Se siente solitario, oscuro... Vacío. Traga saliva, y camina en su dirección, con los pasos de alguien que está decidido respecto a las acciones que va a cometer a continuación. Su mano se dirige hasta donde se supone que esta el pomo pero, para su sorpresa —alivio y confusión—, no hay nada. Gen arruga el ceño, con una gota de sudor resvalando por la sien hasta la mejilla y cayendo al suelo. Su mano se dirige hacia el otro lado. Quizá, se ha equivocado pero no. No hay nada. Su cara es estupefacta, dejando claro que aquello no se lo puede creer y corre hacia la ventana, moviendo con violencia las gruesas cortinas que la tapan. Lo primero que hace es cerrar los ojos, porque la luz ha entrado directamente en ellos y luego, se gira, abriéndolos.
Los puntitos negros inundan su visión, dejándola ciega durante unos instantes hasta que puede ver de nuevo. La puerta no está. Ella se encuentra pálida y mareada pero su cerebro busca velozmente una escusa. Una jodida escusa que le pueda asegurar que ella no se imagina cosas. Gen podría jurar un millón de veces que aquella puerta si que se encontraba al final del pasillo y que transportaba a un cuarto. Sus manos frotan sus ojos y piensa, con pesadez, que tal vez todo aquello se lo habría imaginado. Debe de confesar que, se encontraba muy cansada ya que un viaje de diez horas desde su ciudad hasta aquel pequeño pueblo a las afueras sin dormir la han matada; que se encontraba un poco nerviosa, porque la lluvía no dejaba de caer y a aquello se le sumaban truenos y rayos y eso la inquieta y que, el aspecto que daba aquella casa era escalofriante. Como un soplo de terror en la cara.
Gen asiente una vez más, girando sobre sus talones y dirigiéndose al baño para asearse.
—Todo ha sido una tonteria —murmura para si misma—. Debería de descansar más.
- ″Leelo, its so important″:
[color=white]Bueno, aquí tienen el capítulo. Sé que es bastante corto pero es que últimamente he estado muy ocupada ya que he tenido exámenes (fuck the sistem) y también muchos problemas personales de los cuales no quiero hablar .-.
Quiero dar la bienvenida a la Ana(: mi nueva lectora. Gracias por pasarte a leer por mi pequeño rincón de PesadillasGore(?
Prometo que, en cuanto tengo un hueco libre, subiré el 3° capítulo, siendo bastante largo para recompensarlo por esta pequeña mierdecita sacada de mi cabeza.[/colof]
Winter.
Re: Madness {One Direction.
por Shelley Jue 13 Mar 2014, 11:35 am
Me encantó. Esto está lleno de intriga que me muero. Ya lo haces adrede, ponerme así ¿verdad? que mal por tu parte. Siguela cuando puedas, que te entiendo, y mas ahora por lo menos para mi que estoy en finales ((mátame.)) Besos xoxo.
Shelley
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