Re: Infidelidad Joe Jonas y tu TERMINADA

por **MileyCyruZ** Jue 02 Ene 2014, 10:45 pm

NUEVA LECTORA *U* SIGUELA PLISS

por **HOLA.** Jue 02 Ene 2014, 11:01 pm

NOOOOOOOOOO COMO LA DEJAS AHÍ!!! DIOS QUE BUEN CAPÍTULO SÍGUELA

por **PaolaGarbowsky** Jue 02 Ene 2014, 11:12 pm

- Vuelve a ser mía.
- ¿Podemos comer? Tengo muchísima hambre. – Me observa y sonríe.
- ¿Me estas invitando a cenar?
- Mira, no tengo ganas de que te quedes, solo lo hago por educación, deja de hacer preguntas estúpidas o vete.
Inhala fuerte.
- Si.
Como la mayoría de la pizza, ni siquiera lo volteo a ver, mientras hago que observo concentrada la tv, estoy nerviosa ¿Qué va a pasar?
- ¿Vas a volver?
Su voz hace que mis pensamientos vuelvan aquí.
- Claro que no.
La sonrisa que tenía se desvanece por mi respuesta.
- No voy a trabajar para ti, me demostraste tu falta de profesionalismo.
- ¿Por follarte?
- ¡Por despedirme sin justificación!
- Tengo una muy buena justificación.
Sonríe.
- Me gustaría saber cuál es.
- Es la primera vez que hago algo así, quiero estar contigo, realmente quiero hacerlo.
¿Primera vez de qué?
¿Ser infiel?
- ¿Primera vez de qué?
- _____, dejaría todo por ti.
Hazlo.
- Lo que paso en Rusia, no fue nada de lo que quiero hacer contigo.
- No voy a ser tu juguete sexual.
- No quiero que seas eso.
- Explícame entonces.
- Quiero estar contigo, no quiero esperar a divorciarme.
- Tú organiza.
- No estés bromeando.
- Bien ¿Por qué me has tratado tan mal desde lo que nos acostamos?
- No quería hacerte daño.
- ¡Felicidades lo hiciste!
- Lo sé.
- Escucha, estaba confundido, ahora no, se lo que quiero, te quiero a ti – Inhala – Ahora.
- El tiempo de hablar paso hace más de una semana.
- No quiero separarme de ti.
- Me voy a ir a España, estoy decida.
Abre la boca sorprendido y frunce el ceño.
- Quédate conmigo.
- ¿Para qué? ¿En calidad de qué?
- Amante por el momento.
¡AMANTE!
- Claro que no.
- Por favor.
- ¡No!
- Tú pon las reglas.
- No quiero ser tu maldita amante.
- ¿Qué quieres ser entonces?
Esposa.
Madre de tus hijos.
Mi corazón se hunde por ese pensamiento.
Hijos.
- Nada.
- Tu pon las reglas.
- No quiero acostarme contigo.
- _____.
- No quiero quedarme aquí.
- Lo único que te pido es exclusividad, no te compartiré con nadie.
Lo fulmino con la mirada.
Idiota.
- ¿Tú puedes estar casado y yo tengo que serte fiel?
- Si.
- No. – me quito el collar y se lo aviento a sus piernas.
- Por el momento.
- Vete de mi casa, vete de mi maldita vida.
- Está bien – Se pone de pie y deja el collar en la mesa – Piénsalo, no demores demasiado, tienes hasta el viernes para pensarlo.
- Lárgate.
- Si.
Camino detrás de él y abro la puerta.
- Buenas noches – Se para en el umbral de la puerta impidiendo cerrarla.
- Adiós. – Le digo cortante.
- Te ves hermosa sin maquillaje.
- Si, vete.
- Una última cosa.
Odio su sonrisa.
- ¿! Qué ¡?
Se inclina rápidamente chocando sus labios contra los míos y aprisionando mi rostro con sus manos. No. Intento quitarme pero, vamos, quiero besarlo, enserio quiero hacerlo.
Me colgué de su cuello, profundizando el beso, mientras sus manos bajaban a mi trasero apretándome contra él. Gimo en su boca, es tan sexy, me encanta este hombre. Me toma de las piernas y el pongo alrededor de su cuerpo, comienza a moverse y cierra la puerta detrás de nosotros, camina por todo al pasillo, la habitación, lo escucho dejar las llaves y otras cosas, hasta llegar a la ducha. Abre el grifo de agua caliente y cae por mi espalda y empieza a templarse.
Me suelta y comienzo a deslizarme por su cuerpo mojado.
Mmmmm.
Su mirada intensa inspecciona mi cuerpo mientras yo hago lo mismo con él, esta tan bueno y ahora lo tengo para mí. Alzo las manos para desabotonar la camisa que está pegada a su pecho, el se ve extremadamente sexy y yo, bueno, yo solo estoy en pants y sudadera empapada. Cuando termino con su camisa paso mis manos por el pecho mojado, la fina capa de bello que cubre su pecho se ve tan tentadora, bajo las manos al cinturón, deshaciéndome de él y también del pantalón. Por Dios. Los bóxer se le pegan a la piel, su miembro empuja la tela, tomo el resorte y lo bajo para que se una a el piso.
Me sonríe y me empuja contra los fríos azulejos, eleva mi mentón y me da un beso casto sobre ellos, desliza sus manos por mi espalda abrazándome.
- Extrañaba a este Joseph.
Le digo mientras mi rostro está pegado a su pecho mojado.
- Es el único que veras, linda.
- Si.
Suspiro y siento sus manos heladas por mi espalda despegando la sudadera de mi piel mojada, desabrocha mi sostén y vuelve a bajar las manos hasta el final de la sudadera y la saca por mi cabeza. Bajo los tirantes y me quito el sostén.
- Perdón por haberte hecho daño.
Toma mi rostro y lo hace para atrás para darle acceso a mi cuello, desliza la lengua hasta mi oído y mordisquea el lóbulo. Mmmmm. Ágilmente me deshago del pantalón y bragas mientras chupa uno de mis pechos, eleva su mirada a mis ojos y me sonríe misteriosamente.
- Hazme tuya.
Le suplico.
- Por favor.
- Todo a su tiempo.
- No.
Lo tomo de las mejillas y bajo su rostro para besarlo, sus labios firmes me torturan por la proximidad, jalo mas su rostro y Lepanto un beso, apasionado, se apodera de mi boca mientras con sus manos la pasa por todo mi cuerpo, bajo las manos hasta su cuello.
- Por favor.
De golpe toma mis piernas como ya se le hizo costumbre y le rodeo con las piernas.
- Te voy a penetrar.
Por Dios.
- ¿Estas lista?
Asiento, incapaz de hablar, introduce lentamente su miembro, llenándome centímetro a centímetro, hasta el fondo, sin perder de vista mi mirada.
La sensación me invade, inmovilizándome, todo mi cuerpo está complacido por el buen trato que le están dando, acerca su rostro y vuelve a besarme mientras sale lentamente de mi, gimo en su boca y vuelve a entrar dentro de mí, sigue con el mismo ritmo, torturándome, sin dejarme un minuto los labios con un beso apasionado, me toma firmemente de la cadera.
- Más rápido.
- La paciencia es una virtud.
- Joe.
Me calla besándome de nuevo, las baldosas del baño no parecen tan frías y de pronto me siento bien, donde siempre he querido estar.
Con él hombre que quiero.
Y me corro, el orgasmo me abraza y arrastra hasta el fondo. De pronto me estrecha contra su cuerpo aun más y eyacula dentro de mí. Su mirada se nubla y cierra los ojos con fuerza.
- Maldición _____.
Recargo mi rostro en su hombro, el pulso de Joe aun no baja.
Lentamente sale de mí y me deja en el piso, doy unos pasos hasta que quedo bajo el chorro de agua caliente. Se une a mí, pero no está aquí conmigo, está disperso, nos enjabonamos mutuamente con mucho cariño, pero él sigue sin tomar la atención necesaria.
- ¿Qué pasa Joe? Vas a huir de nuevo.
- _____, no me protegí.
Lo sé.
- Joe, tomo anticonceptivos.
Se remueve incomodo pasándose la mano por el cabello y apagando después el agua.
Es una cosa que lo pone nervioso, no quiere dejarme embarazada.
Me envuelvo en una toalla y también mi cabello.
¿Qué tienes Joe?
No me atrevo a preguntar y salgo del baño. El viene detrás de mí, con una toalla en la cintura.
- ¿Me puedes hacer un favor?
Alzo una ceja insinuándolo.
- ¿Podrías calmarte? Necesito que saques de mi camioneta un poco de ropa, con unos bóxers y ropa para mañana basta, en la cajuela, por favor.
¡Se va a quedar a dormir conmigo!
- Sí, claro.
Saco de mi cajón mi bata de dormir ¿Debería ponerme algo sexy?
_____, no tienes pijamas sexys.
Doy voy vuelta para cambiarme y esta acostado en mi cama con esa maldita toalla en la cintura, los músculos de su abdomen se saltan, estoy babeando, es tan guapo.
- Hace frio.
Sonrió y dejo la bata en la cama. Me quito la toalla y comienzo a secarme el cabello con ella, tomo la de mi cuerpo y la dejo en la cama también, me muero de vergüenza así que me pongo rápido la bata y busco mis pantuflas. Aquí. Lo vuelvo a ver y ahora tiene el ceño fruncido. Tomo las llaves de la mesa de noche.
- ¿Así sales a la calle?
Pongo los ojos en blanco.
- Es tarde, no hay ni un alma en la calle, además no estoy desnuda.
Le digo mientras salgo del cuarto casi corriendo, al pasar por la sala una oleada de felicidad me llena, estamos bien, no me importan las condiciones, solo lo quiero a él.
Tomo unos bóxer negros, encuentro su traje azul marino, me encanta como se le ve, lo agarro y una camisa beige, zapatos y calcetines, busco dentro de la maleta y después cierro todo.
Alguien está detrás de mí, Joe salió así como sin nada. Me doy vuelta.
- Por Dios _____ ¿Qué haces afuera? Entra traje películas para ver juntos, ya no llores por él mi amor. – Me toma del brazo y me sonríe, Oh Jared, llegas tarde.
- Estoy ocupada.
- ¿Ocupada?
- Esta aquí.
- ¿Quién? ¿El Dios del sexo?
- Joseph esta aquí.
- ¡No! Yo te quería para mí esta noche.
- Estuvimos hablando y se va a quedar a dormir.
- Voy a entrar a decirle a ese idiota que no puede tratarte como una cualquiera.
- Estamos bien.
- ¿Ya se acostaron otra vez?
- Más o menos.
- ¿Dónde está?
- En mi cuarto.
Volteo ilusionada hacia el ventanal que da a la calle que debería estar en penumbras por las pesadas cortinas negras, pero no, está ahí parado observándonos, con esa maldita mirada de nuevo.
- Esta buenísimo.
- Cállate Jared, tengo que entrar.
- Claro, entra, deja a tu amigo-vecino-confidente, solo, mientras tú tienes más sexo alucinante con ese bombón.
- Mañana hablamos.
- A detalle.
- No, buenas noches, gracias por lo de ayer. – Lo abrazo, beso su mejilla y me doy vuelta.
- Adiós tigresa. – Me dice mientras me da una bofetada en el trasero.
- Por Dios Jared, nos está viendo. – Le digo mientras sigo caminando y entro corriendo a la casa.
Se volvió a sentar en la cama, esperando a que entre y cuando encuentra mi mirada me intimida.
- ¿Quién demonios era ese?
Dejo la ropa en la cama y corro al cuarto de lavado, vuelvo con la plancha de vapor al cuarto y ahora lleva los bóxer.
Dios del sexo.
Bien planteado Jared.
- ¿Vas a contestar?
- Nadie.
- ¿Por qué dejas que te toque?
Conecto la plancha y tomo el traje colgándolo en la estructura para plancharlo.
- ¿Interpreto tu silencio?
- No.
- ¿Por qué no me contestas entonces?
Comienzo a pasar la plancha por el traje, huele divino.
- Es mi amigo.
- ¿Dejas que todos tus amigos te toquen así?
- Solo me azoto, en broma.
- ¿Venia contigo? ¿Venia a estar contigo?
- Es mi vecino.
Me encanta su expresión, molesto se ve igual o más sexy de lo normal.
- Es tu amigo, vecino y puede tocarte ¿Te acuestas con él? – Se pone de pie y se sitúa detrás de mí.
- ¡No!
- _____, se que te pido mucho pero necesito que seas solo mía, no quiero compartirte. – Su voz es un ronroneo.
Sigo mi trabajo, no tengo porque darle explicaciones.
- ¿Si te acuestas con él?
- Por Dios Joe – Me voy vuelta frustrada, que insistente - ¡Es homosexual!
Nunca me ha gustado ventilar a Jared ¿Qué te importa Joseph?
Me voy vuelta y después de unos minutos termino, sin hablarle lo dejo colgado y acomodo la cama para acostarme, con el o sin él no me importa.
El sueño me está venciendo.
- ¿Han tenido sexo?
- Una vez, cuando íbamos al instituto, fue hace mucho, nada de qué preocuparte.
- ¿Por qué te toca entonces? No es tan homosexual como piensas.
- ¿Estas celoso?
Esto sí es cómico.
- Claro que estoy celoso.
- Mira, puedes seguirlo, no quiero recordártelo pero lo hare, eres un hombre casado y no puedes decirme nada.
Camina hacia mí hasta acorralarme contra la pared.
- Eres mía.
- No quiero discutir, lo único que quiero es dormir, puedo hacerlo sola o contigo pero toma en cuenta que debes de confiar en mí, nunca volvería a acostarme con él, ni siquiera a besarlo y no por ti si no porque no me atrae ¿De acuerdo?
- Si.
Me besa.
Mmmmm.
- Ven.
Me toma de la mano y me acuesta en la cama para después unirse a mí, pasa sus manos alrededor de mí y me aprieta contra él.
- Podrías explicarme entonces ¿Con quién te acuestas?
- Contigo, evidentemente.
- ¿Por qué tomabas pastillas anticonceptivas inclusive antes de tener sexo?
No.
No.
No.
No puede preguntarme sobre eso.
Me hundo en la oscuridad, los recuerdos vienen a mí, atormentándome, dándome una paliza.
“- _____, tu porcentaje de esterilidad es mínimo, apenas alcanza el diez por ciento”
Esa frase, esa oración me aniquila.
Claro que no tomo pastillas, no me gusta utilizar anticonceptivos. Cualquier posibilidad vale oro, eso me prometí después de tanto estudio, después de desgastantes tratamientos.
Yo quiero ser mamá y no me importa el padre, solo quiero tener un hijo que sea de mi sangre. Nadie puede comprenderlo. Solo yo.
Nunca podre serlo.

por **GinaE** Jue 02 Ene 2014, 11:59 pm

oh Dios! no puede tener hijos Infidelidad - Infidelidad Joe Jonas y tu TERMINADA - Página 11 167695056

!!

siguela me encantaa!!

-fani

por **GinaE** Jue 02 Ene 2014, 11:59 pm

siguelaaaaaaa

por **Frida R** Vie 03 Ene 2014, 12:18 am

omg joe dkjs quiere todo con la rayita! :o

pobrecita, no puede tener hijos :( ojalá que por obra del espiritu santo
quede embarazada de Joe :P

por **@ntonella** Vie 03 Ene 2014, 12:42 pm

pobre de la rayis... :( ojala que haya una posibilidad
y quede embarazada de joe... :P
sigueeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeee

por **ItaSosa** Vie 03 Ene 2014, 1:08 pm

:O
Caray! :S
Siguele!!..
Me recordó a algo...
"Sale embarazada y sale huyendo"
;) digo... se me ocurrió
Yo lo haría

por **hellomynameis** Vie 03 Ene 2014, 3:06 pm

akjhkjAJJAKLJA QUE BUENO QUE YA ESTEN BIEEEEEEEEEEEEN:G POBRE RAYS:( SIGUE

por **-GrizJonasLovatoCyrus-** Vie 03 Ene 2014, 10:06 pm

SIGUELA ME ENCANTA

por **Frida R** Sáb 04 Ene 2014, 12:14 am

siguela pronto

por **Believeinyourdreamsforeve** Sáb 04 Ene 2014, 12:38 pm

Oh por Dios, es magnifico el capitulo, me encanto, siguela, yo la entiendo al momento de decir que no puede tener hijos :c estoy ansiosa continua por favor...

por **GinaE** Sáb 04 Ene 2014, 3:31 pm

ahhh!! siguelaaa

por **Frida R** Sáb 04 Ene 2014, 10:42 pm

sigueee

por **Frida R** Dom 05 Ene 2014, 7:28 pm

siguela parfavaaar

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