Re: Dangerous Girls {Novela colectiva} 1er Parte TERMIANADA

por Invitado Miér 10 Jul 2013, 10:21 pm

Kathleen Crowley

CAPÍTULO 12

Estaba corriendo más rápido de lo que yo usualmente corría. ¡Maldición! Me había caído, mas sin embargo sentí que alguien me tomo por los brazos llevándome a cargas de él. Dios mío, m había torcido el tobillo y me dolía mucho, aun sin inmutarme quién demonios me estaba llevando cargada.

— Tranquila, el dolor cesara, te lo aseguro —inquirió este, haciendo más fácil reconocerlo.
Mierda, era el…
— ¿Qué hacemos aquí? —pregunte atemorizada, notando nuestra llegada a un bosque demasiado oscuro. Me aferre más a su cuello sintiendo el miedo recorrer por todo mi cuerpo.
— Nos están siguiendo, Kath —siseo.
Se detuvo por unos minutos, mirando para todas partes como si estuviéramos perdidos.
— Por favor, bájeme —susurre— estas muy cansado, y mi peso no ayuda en nada.
— No te preocupes, no estoy cansado.
Rodee los ojos. ¿No podía ser más arrogante?
— Bájame, Logan —chasquee— No te hagas el valiente, sé que estás cansado… corrimos demasiado.
Su mandíbula se tensó, sus ojos se oscurecieron a pesar de que la noche se hacía presente en ese mismo instante.
— Si te bajo, ¿Cómo demonios caminaras? Por si no te has dado cuenta tienes el tobillo torcido —dijo entre dientes— No quiero que te lastimes más de lo que ya debes de estar. Por favor, ¿podrías dejar tu terquedad para otra ocasión?
Suspire fuertemente, sintiendo la oleada de enfado pasar por frente mío. Mas sin embargo lo deje pasar, y así seguimos nuestro taciturno camino sin dejar a conocernos un poco más.

Sentía temor conmigo misma, sentía temor de solo pensar que él era el chico por el cual había soñado hacía mucho tiempo. ¿Qué haría ahora? Escapar con el hombre de mis sueños, quizás. Pero, ¿sería justo para mi vivir con alguien que finge conocerme como la palma de su mano?, ¿o dejaría que esas “personas” me capturaran e hiciesen conmigo todo lo que les plazca? ¡Demonios! No puedo ni pensar con el dolor del tobillo carcomiéndome lenta y dolorosamente.

— ¿Aun te duele? —pregunto preocupado al notar mi mueca de dolor. Se detuvo y me dejo suavemente en el tronco de un árbol cortado.
— Algo, pero creo que… ¡Agh! —exclame al sentir su mano rozar mi tobillo. Levanto su mirada hacia la mía, y ¡Bam! Ya me encontraba hipnotizada por sus hermosos ojos azules. ¡Quita la mirada, Kathleen! Me gritaba a mí misma.
— Lo siento —susurro, inmediatamente quite la mirada hacia otra parte. ¡Cobarde! Me gritaba de nuevo a mi misma.
Cerré mis ojos fuertemente al sentir como vendaba con delicadeza mi tobillo. Dios, me estaba doliendo mucho. Las lágrimas empezaron a caer por mis mejillas, hasta caer en seco en el césped. Escuche un gruñido por parte suya, y deje se sentir su mano en mi tobillo. Abrí lentamente mis ojos, observando vagamente la figura que se encontraba a rodillas de mí. Sus ojos, dios mio, sus ojos transmitían tantas cosas, que no lograba distinguir el reflejo de sus ojos azules.

Las palabras sobraban ahora, solo éramos el y yo. Su mano de pronto tomo mi mano llevándolo hasta su mejilla, haciendo que mis dedos acariciasen dulcemente su mejilla. No se había rasurado en semanas, ya que podía sentir el bello de su barba. Note como sus ojos se cerraban al sentir mi tacto con el de él. Entonces logre estudiar sus facciones un poco más. Su cabello tan desordenado dándole un aspecto mas rudo; ojos pequeños y azules, adornados con unas hermosas y largas pestañas; cejas abundantes y rectas tratando de contener aquel semblante serio que es tan obtuso en el; su nariz respingada dando un aspecto tierno a sus bellas facciones; sus labios, tan carnudos y rosados, totalmente opuestos a los que, tal vez, en algún momento me pertenecieron. Una sonrisa se escapo de mis labios. Era inevitable no aceptar que amaba a este hombre, a pesar de que no podemos estar juntos.

— Te amo… —susurre inconscientemente.
Sus ojos se abrieron suavemente, atrapando los míos. Sonrió pasivamente.
— También yo —susurro.

Fue entonces donde sentí sus labios contra los míos.

Un gemido escalofriante lo despierta. ¡Cristo! Estoy empapada en sudor y mi corazón palpita fuertemente. ¿Qué demonios es lo que me sucede? Me siento erguida en la cama y pongo la cabeza entre mis manos. Santo cielos. Han vuelto. El ruido era yo. Tomo una respiración profunda estabilizándome, tratando de liberar mi mente del olor a sudor y a vomito.

Había sobrevivido al día tres después de mi extraño encuentro con el tal “Logan” de mis sueños. Era una distracción bienvenida. El tiempo había volado en una neblina de nuevos rostros, trabajo por hacer, y el nuevo despertar con las mañanas en Francia. Volteo mi mirada hasta la cama seguida de la mía, donde usualmente duerme tranquilamente Jimmy. Me sonríe hacia abajo, sus ojos azules centelleando mientras se apoya contra los codos en su cama.

— ¿Mañana de mierda? —bromea, tratando de hacerme sonreír.

Me las arreglo para curvar mis labios hacia arriba en una semblanza de sonrisa.

— Algo así —susurro.
— Hey, te eh notado un poco distraída desde que viste al moreno de ojos azules… —me ruborizo— ¿Tienes algo que ver con el?

Suspiro cansinamente. Quiero evitar a toda costa hablar de él, pero sé que Jimmy seguirá insistiendo.

— Si y no, ¿sabes? Los últimos días ah sido… los peores —reí tristemente— no dejo de soñar constantemente con un chico que aparentemente es mi novio. ¿Cómo?, aun no lo termino de entender. Siempre es la misma escena en donde el y yo corremos de personas, como si el y yo fuéramos fugitivos… —suspiro entrecortado— Me eh obsesionado tanto con ese chico, y con encontrarlo alguna vez que cuando lo vi en la estación de policías, casi me da infarto —Jimmy sonrió— De inmediato pensé; “¿en serio, Kath?, ¿en serio creerás que ese es el chico de tus sueños por el cual añoras en conocerlo?”. Y ahora viéndolo por ese lado, tal vez tenga razón…
— No, no, no Kathleen —negó inmediatamente— si en verdad crees que es el, pues… no se, intenta hablar con el, charlar y ganar su confianza.
— No creo tener el valor de hacerlo, Jim —me ruborice.
— ¿Tienes miedo? —Asentí avergonzada conmigo misma— El miedo es un sentimiento que no se identifica en muchas personas. El miedo es algo en ti que te impone el estar con alguien que en verdad quieres. No dejes que el miedo te gane, Kathleen —pauso— yo pase por el mismo problema que tú, ¿sabes? Nunca pensé que el temer hablarle seria la peor cosa que me pudo haber pasado después de haberlo perdido por mi propia culpa —cerro los ojos por unos minutos, abriéndolos nuevamente pero tenia algo nuevo que jamás había visto en ella… ¿angustia?— Nunca me lo podría perdonar, y aun tengo que cargar a cuestas mías, que gracias al dichoso miedo, todo se fue por el caño.
— Valla, Jimmy —balbuceo— no sé que decirte, ¿gracias?

Jimmy ríe fuertemente, sobre saltándome.

— ¿Gracias porque?, es solo algo que quería compartir contigo —le sonreí— pero si te pediré un gran favor. No se lo digas a nadie, jamás eh tenido una conversación de este tipo con nadie… a diferencia de ti, claro. Tienes algo que da mucha confianza —asentí.
— Por supuesto, eso es un hecho.
— Bien —bostezo— mejor duerme otro poco, esta noche tenemos un cuadro que robar.

{***}

— ¡¿Estas loca?! Ni por el dineral de Rusia me meto a ese conducto de ventilación —exclamo en un leve susurro Adelaide.

Nuevamente discusiones entre Helena y Adelaide. Irónico, ¿no? Rodee los ojos.

— Te metes por que te metes —amenazo ferozmente Helena.
— ¿Y quien eres tu para mandarme? —soltó Ade.
— ¡Chicas, por favor! ¿Podrían madurar alguna vez en su puta vida? —Siseo enfurecida, Valerie— Estamos aquí para robar la Mona Lisa, no a perder el tiempo con discusiones entre ustedes.
— Ahora bien, ¡entra al endemoniado conducto de ventilación! —forcejo Chis haciendo que sus propias palabras suenen en eco.
— ¡Bien! Entrare al maldito conducto, y aclaro que no lo hago porque me lo haya dicho Helena, sino por mi propia cuenta.
— ¡Ahora! —susurramos irritadas todas.

Adeleide nos saco la lengua mientras tomaba la reja que había en medio del conducto y el estacionamiento. Entro sigilosamente hasta que escuchamos el sonido de sus tacones caminar hasta la puerta trasera del salón de artes.
— Bien, recuerden las instrucciones que les di ayer en la mañana —insinuó Helena— tomen lo que sea que sea necesario para evitar que nos atrapen —extendió una maya con diversos tipos de armas, incluso cuchillos y navajas— no hay muchos vigilantes aquí, así que si ven uno no duden en usar su teléfono celular y de inmediato teclear “rojo”, si es el caso de algún idiota que venga a cuidar, pero si es un policía armado tecleen “amarillo” para dar como finalizada nuestro robo, ¿entendido?
— Una duda —levanto la mano Jimmy— ¿Por qué no usamos esos cosos que usan los criminales antes de robar?
— ¿Sabes donde los venden? —Ella negó— ¿Sabes cuanto valen? —nuevamente negó— Entonces no preguntes —mascullo Helena.
— Como no hay mas dudas, empecemos con nuestra emboscada…—inquirió Chis— primera parada…
— La Mona Lisa —anunciamos todas, chocando nuestros nudillos.

{***}

Me encontraba acompañada por Jimmy, gracias al cielo. Estábamos en cubierta ambas, vigilando de que nadie se acercase a la zona de artes y demás baratijas. No había nadie más que dos chicas con dos revólveres y acompañadas por el miedo y la adrenalina.

— ¿Crees que a las chicas les estará yendo bien? —comenzó Jimmy tambaleándose nerviosamente.
— No lo se, pero parece que si —sonreí temerosamente.
— No me importa, Lou... te lo juro, jamás me había interesado una chica tanto como ella —escuche el habla de un hombre.

Mire a Jimmy nerviosamente, quien me hacia señales incoherentes que no lograba entender. Noto que no le entendía nada, así que me agarro del brazo y me empujo hasta el cuarto de servicio. Tape mi boca con mis dos manos, mientras Jimmy se asomaba por debajo de la puerta mirando los pasos de ambos chicos.

— Estas siendo paranoico, amigo —otra voz muy familiar re-sonó— además, ¿precisamente tenia que ser ella? ¡Vamos! Es prácticamente una criminal.
— No es una criminal, y ambos lo sabemos… sin decir que es demasiado linda, ¿o también me lo negaras?
— Si, no te puedo negar eso… ¿Cómo era que se llamaba?
— Kathleen, Kathleen Crowley

¡Santa mierda! Me corazón dejo de latir, sentí que mis manos empezaron a temblar y un nudo se formo en mi garganta. Jimmy abrió los ojos par a par, y me miro horrorizada. Levante los hombros con una sonrisa inocente.

— Es el, ¿verdad? —susurro.

Asentí extrañamente emocionada.

— Sera mejor que le mandemos un mensaje a Adelaide y a las demás, antes de que nos descubran —tome mi teléfono y empecé a teclear “Rojo y amarillo. Hay dos policías recorriendo los pasillos del salón de artes. Sera mejor que se escondan. Me parecen familiares, tal vez los reconozcan. –Kath.” Y lo apague.

— ¡Demonios! —maldijo por lo bajo, Jimmy— los idiotas sintieron el maldito perfume de Adelaide.

Fruncí el ceño y suspire. ¡Claro! Desde aquí se podía sentir ese molesto y obsceno olor a colonia.

— ¿Y ahora? —Jimmy se encogió de hombros— ¿Y que tal si salgo yo?
— ¿Estas loca o psicópata? —se alteró— Oh no, ya se lo que ocurre… ¡Te volviste loca por el chico! Vamos Kath, sé que dices estupideces pero no puedes ser tan…

Mi teléfono vibro, interrumpiendo la barbaridad que Jimmy me iba a soltar. Abrí el celular, decía: “Kathleen, Jimmy; estamos afuera, ya tenemos el cuadro. Perdónenme si las dejamos, pero el imbécil de Tomlinson ya estaba sospechando de nosotras. Ahora lee con atención: arriba de ustedes hay un conducto de ventilación, salgan por allí sin hacer ruido… después de allí sigan a la izquierda siempre hasta que vean una luz, allí estaremos esperándolas, ¿de acuerdo? Nos vemos pronto. –Hele.”

— ¿Qué paso? —susurro mirando por la rendija de la puerta.
— Las chicas ya están afuera, pero no lograron ayudarnos a salir ya que los chicos ya sospechaban de ellas —me mordí el labio inferior, en señal de nerviosismo.
— ¡Genial! —Exclamo Jimmy alzando las manos exageradamente— Nos abandonan y se llevan el premio gordo —bufa— ¿Y ahora que?
— En realidad nos dejaron unas instrucciones de como salir de aquí.
— ¿Ah sí? —su tono ahora era mas como sarcástico-molesto— ¿Y como demonios es el “plan”?
— Salimos por el conducto de ventilación —sonreí.

Guarde mi teléfono en mi bolsillo de los vaqueros, recogí mi cabello en una coleta y así no dejar caer esos rebeldes mechones en mi rostro. Jimmy saco una banca, la coloco debajo de la rendija, mientras sacábamos la reja. Con ayuda de las manos de Jimmy y sus quejas de mi “sobre peso” subí rápidamente y le ayude a Jimmy quien tampoco se quedaba atrás con su sobre peso. Empezamos a reírnos como hienas locas por estar discutiendo quien esta más gorda que la otra.

— Mejor cállate antes de que nos encuentren en esta… ¡Deja de reírte, Kath! —me regaño Jimmy soltando una risita.
— Lo siento, ya me callo —susurre y volví a soltar una carcajada. Jimmy me tapo la boca, mientras se seguía riendo conmigo.
— ¡Que Dios no ayude! Kathleen si seguimos en esta misma escena toda la noche, nos encontraran fácilmente.
— Tienes razón, mejor vámonos —masculle mientras me deslizaba por el conducto de ventilación. Sentía como Jimmy gateaba detrás de mi, siguiendo las instrucciones al pie de la letra como me lo había indicado Helena. “Siempre a la izquierda hasta que vea una luz”, entonces un disparo nos sobresalto, pasando por debajo de nosotras.

— Salda de donde quiera que estés —grito uno de los policías— Sabemos que aun están allí, ¡les ordeno que se bajen de ese conducto!
— Corre —susurro Jimmy.

Tenia muchos nervios, y ahora estábamos en medio de una balacera incesable. Disparos iban y venían. Hasta que sentí un grito en seco, mas bien un chillido. ¡Jimmy!, la mire inmediatamente. ¡Santo cielos! Estaba herida, sangrando en la costilla derecha. Nunca en mi vida había sentido tanto miedo como en ese momento, quería gritar y llorar, pero en vez de eso; ayude a Jimmy desplazarse sigilosamente por el conducto hasta la luz como me había indicado Helena. Deje de escuchar los disparos, ahora solo escuchaba los gruñidos de dolor de Jimmy.

— Recuerda, Kathleen; “El miedo es algo en ti que te impone el estar con alguien que en verdad quieres” —Entonces, solo entonces me permití relajarme un poco ante sus palabras tan reconfortantes, y su hermosa sonrisa.

No dejaría que nada le pasara a Jimmy, cueste… lo que me cueste.

+ Sigue: Gene.

por **Cony'.** Jue 11 Jul 2013, 12:03 am

¡OH DIOS JIMMY ESTA HERIDA! Dangerous Girls {Novela colectiva} 1er Parte TERMIANADA - Página 26 2841648573

Dangerous Girls {Novela colectiva} 1er Parte TERMIANADA - Página 26 1857533193

Boo me ha encantado el capítulo, estuvo demasiado sdjkfhsjkdf y los malditos que tiran disparos al aire, ojalá nuestra Jimmy este bien y podamos correr a salvo.
Ahora esperamos a que Gene suba Dangerous Girls {Novela colectiva} 1er Parte TERMIANADA - Página 26 1857533193

por **Julianne.** Jue 11 Jul 2013, 12:40 am

dkjsdkjdk OHH DEOS ME HA ENCANTADO!!
Primero que nada Gene será encargada de narrar paso por paso el robo de la Mona Lisa, ya que Kath y Jim no estuvieron, trabajo difícil Genesita linda :3
Y AHORA SÍ! LOREE LO AMÉ! En serio que lo amé. Kathleen volvió a soñar con él, creí que todo era de verdad, y mientras leía estaba así de O.O Como paso!! jajajaja, y después era un sueño.
Oww amo la amistad de Jimmy y Kath, así como la pareja de lesbianas de Hel y Chis, las peleas de Hel y Ade, y la rudesa por asi decirlo de Val y Chis <3 <3
DEOSSS ROBARON LA MONA LISA, LO CONSIGUIERON, jajaja Kath y Jimmy no hicieron nada, pero aún así Jimmy termino herida D: Kath es muy linda con mi Jimm(: amo su amistad (repito)
KJAKJSKAJ GENEEEE TENES QUE SUBIR, sos la encargada de decir como fue el robo, y si mi Jimm esta bien D: skdjskjsk y de todo !!! jfkdksdj

LAS AMOOO! me ha encantado el capítulo!

por **Anni.** Jue 11 Jul 2013, 10:41 am

¡Jimmy está herida, repito, está herida!
Joder, joder y más joder. Siempre tiene que salir algo mal.
¡Te juro que cuando soñabas con Logan, creía que estaba pasando de verdad! Estaba en plan: ''¿Cómo hemos llegado a esto?'' ''¿Cuantos capítulos me he saltado?'' ¡Y era porque lo estabas soñando, ole mi inteligencia!XD
¡HEMOS ROBADO 'La Mona Lisa', MI SUEÑO HECHO REALIDAD, QUE PUTA FELICIDAD TENGO! *Chis' está contenta*
¡PUTOS POLIS, QUE DISPARAN DONDE LES SALE DEL PENE! *odio infinito*
Bueno, espero el siguiente capítulo, eh Gene, quiero ver como la robamos y que hare, porque seguro estaré más feliz de lo normal..
¡Come on, Gene! Dangerous Girls {Novela colectiva} 1er Parte TERMIANADA - Página 26 1857533193

por **rutherford.** Jue 11 Jul 2013, 11:55 am

¡Oh Loreeeee! TU CAPÍTULO ESTUVO MÁS QUE AJSAKSDNIASD. La parte en que soñabas con Logan fue como... No sé. Siempre me encanta cuándo sueñas con él :B Y YA ESTAMOS ROBANDO LA MONALISAAA! Le dispararon a Jimmy... ¡Nooo! ¿Por qué? ¡ES TAN BUENA PERSONA! D: ~~Es buenísima, lol e.e~~ Y joder, me has dejado la parte más difícil. Pero les voy a escribir un capítulo enoooorme(?)

ANSDKJAS, AMÉ EL CAPÍTULO TOO MUCH, BOO.

La sigo hoy de tarde probablementeeeee.

¡BESOOOS! Las quiero muchisísimo♥

por **rutherford.** Jue 11 Jul 2013, 5:18 pm

Estoy escribiendo Dangerous Girls {Novela colectiva} 1er Parte TERMIANADA - Página 26 2841648573

por **rutherford.** Jue 11 Jul 2013, 6:12 pm

Adelaide Williams.

Capítulo 13.

Estaba subiendo por aquel estrecho conducto de ventilación, ¿por qué acepté a hacer esto? Me voy a ensuciar de polvo y dañaré todo mi atuendo. Además Helena me grita. ¡Dios! A veces la odio tanto pero le tengo cariño, diría que… ¿mucho? No lo sé. Creo que con toda la tierra que he inhalado me está dañando el cerebro.

Bien, Hel y Chis rodearían el museo hasta llegar en donde la Mona Lisa se encontraba. Jimmy y Kat se encargarían de llamarnos si es que algún guardia se encontraba por allí. Mientras yo, iría por éste incómodo camino para no hacer sonar mis “escandalosos” tacos y quién sabe ayudar para qué. ¿Es que acaso no saben de moda? O por lo menos yo quería estarlo para robar. Es decir, Adelaide Williams casi nunca usará unas zapatillas, mucho menos deportivas.

Aún me quedaba un poco por recorrer en ese conducto, había mucho polvo, telarañas y cucarachas. Pero, ¿qué podía hacer? Sí. Sólo seguir y… Seguir. De repente la noticia de ayer o más bien, lo que había sucedido ayer rondó por mi mente mientras giraba hacia la derecha, adentrándome más allí y viendo a lo lejos la luz.

Ayer salía de la prueba que tuve en el “Bonne journée” la cafetería en el cual conseguí el trabajo de barista, o experta en cafés, lo cual es raro porque no sé nada acerca de eso, pero no hay nada que no pueda aprender o conseguir. Ya había finalizado mi turno y prometieron darme mañana el uniforme si es que pasaba otra prueba, ¡vamos! Ni que eso fuera la gran cosa. De todas formas debía hacerlo, además de que no quería levantar algún tipo de sospecha debía reunir lo suficiente si es que quería comprarme un perfume aquí, en esta ciudad.

Iba caminando tranquilamente por una calle que, realmente no conocía pero solo utilizaba la intuición, además tenía el dinero suficiente para agarrar un taxi e irme a dónde fuera que las chicas se encontraran.

Al cruzar la calle divisé un rostro conocido. Era un hombre y me miraba de una forma no muy correcta. Usaba una cazadora marrón y por lo que veo se había rapado completamente. Por ello no lo reconocía en lo absoluto, tenía una idea pero no podría ser posible. ¿Qué haría él aquí? De repente había seguido mi camino y de igual forma ya se encontraba en mi misma calle y cuadra, a no menos de cinco pasos de mí. Y fue ahí cuando reconocí esos ojos azules. Aquellos ojos que alguna vez me atraparon irremediablemente. Scott detuvo mi caminar y obstruyó mi paso posicionándose enfrente de mí.

―¡Adelaide! ¿Cómo estás? ¿Qué estás haciendo aquí? Hace mucho que no te veo y te seré sincero; te he extrañado como loco. ―Dijo intentando darme un abrazo, ¿acaso cree que me es fácil olvidar lo que hizo? Al no ver mi respuesta dice: ―Vamos, ¡Adelaide! Di algo.

―Hola Scott. ―Pronuncié a penas, recordando lo que había pasado hace tres años atrás.

Scott y yo nos encontrábamos sentados en la cama de su cuarto. Sus padres habían salido de viaje y él había aprovechado la oportunidad para hacer lo que quisiera conmigo, porque, vaya, yo estaba estúpidamente enamorada de esa sonrisa.

―Ade, ¿crees estar lista para mí? ―Lanzó sin más preámbulos mientras terminaba de, prácticamente, comerme a besos.

―Yo… Realmente no lo sé. ¿Qué te podría decir? Tú ya lo sabes, estoy enamoradísima de ti. Pero, aún así no creo ser lo suficiente o… estar lista para lo que quieres. Y supongo que mi respuesta sería no. ―Me miró serio.

―¿Acaso no confías en mí? ¿Piensas que te dejaría después de hacerlo; después de que tantas veces te he dicho que te amo? ¿Me tienes en tan mala forma? Vamos Adelaide, no pasará nada que tú no quieras, pero lo disfrutarás. Sé bien que te estás entregando a la persona que amas, así que no te resistas y se mía ésta noche. ―Retomó el beso y no esperó a que yo contestara algo. No estaba segura de hacerlo, realmente a veces pensaba que lo odiaba pero muy en fondo mío él era la única persona en el mundo importante.

Pero estaba siendo muy tonta.

Él me había desvestido de una manera ruda y rompió algunas prendas mías. No entendía que le pasaba, de repente actuaba como un completo idiota.

De hecho, él lo era.

Usando palabras más expresivas; fue un animal conmigo. Se suponía que la primera vez de toda chica debía ser tierna, dulce y amorosa. Pero este no fue el caso. Lágrimas corrían por mi rostro pero eso no le importaba, incluso no le inmutó que repentinamente comenzara a sangrar. Creo que a veces en vez de suplicarle por más yo le gritaba que parara o que tan siquiera aminorara su paso. Y no lo hizo. Había sido una de las cosas más desastrosas de mi puta vida.

Lo peor sucedió al día siguiente.

Llegué al colegio y todos me miraban como el bicho raro que… Si lo era. No era muy popular pero desde que salía con Scott – el chico que todas mueren por tener como enamorado – me había hecho un poquito más conocida. Aunque vale recalcar que eso a mí no me importaba.

En el aula de química se encontraba Scott, con todos sus amigos – de por sí también míos – y cuando entré todos me regresaron a ver. Me acerqué a mi enamorado y traté de besarlo pero lo esquivó.

―Lo siento. Ya no somos nada Adelaide. ¿En realidad creíste lo que te dije ayer? Pensaba que eras tonta, pero no tanto. ¿Cómo podrías confiar en Scott George? El chico que se las tira a todas y luego no le importa nada. Parecías ser difícil pero no fue así. ―Escupió esa frase tan dolorosa. Mis ojos se cristalizaron pero no iba a llorar, no en frente de él.

―Tienes razón, fui muy estúpida…

―Y además no tienes nada de práctica en eso. Te recomiendo que a la próxima vez intentes llegar con Scott, ya sabes… A lo que me refiero. ―Agregó Martin. Un patán de última. Pero… Espera, ¿qué mierda había hecho ese estúpido?

―Me… ¿Me grabaste? ―Scott asintió. ―¡Eres más que un estúpido! Maldito hijo de puta. ―No era la típica chica que decía malas palabras pero… ¡Él me sacaba desquicio!

Después de todo no volví a ser aquella persona inocente, dulce y amigable. Él me cambió. Él me hizo ser como soy ahora. Él me había quitado lo que yo cuidaba tanto. Y no lo iba a perdonar. ¿Ahora quería hablarme?

―¡Llamando a planeta tierra, Adelaide! ―Escuché un grito desde el final de la cornisa y era la voz de Helena que supongo se encontraba fastidiada por mi demora. ―¡Vamos! Tenemos una Mona Lisa que robar y no va a ser simple si no mueves tu trasero de puta hasta acá.

¿Qué pasó después en la calle cuándo me encontré con Scott? Pues le proporcioné una cachetada rompedora de mejillas patentada por Adelaide Williams. Además le quité su billetera y fui a comprarme el perfume que llevo puesto hoy, que por cierto no les gusta las chicas… ¡Bah! ¿Qué importa?

―¡Ya voy Helena! Y te lo recalco no tienes el derecho de gritarme, ¿comprendido?

―Cerraré mi boca cuando terminemos con esto pronto y con tu gran ayuda quizás no lo conseguiremos. ―La ignoré. Yo ya me encontraba bajando por el estrecho conducto y vi como Chis tecleaba unas cuantas cosas en un teclado que se encontraba en la puerta del final. Allí se encontraba la Mona Lisa, simplemente debíamos desactivar todas las alarmas.

―¿Y en qué pensabas tanto? ―Indujo Hele.

―Cosas nada importantes. Se los contaré algún día. ¿Qué haces Chis? ¿Quieres que te ayude en algo?

―Estoy tratando de desactivar esta puta alarma, ¿no lo ves? ¿Sabes con qué podrías ayudarme? Dándote un baño que te quite ese repugnante olor que cargas a perfume barato.

―Oh por Dios. Amaneciste de malas, ¿o me equivoco? ―A pesar de que trataba de mantener la guardia baja no le importaba a nadie. Bien, Adelaide estamos robando. No podríamos ser risas y chistes aquí.

―He desactivado todas las alarmas, incluso la de rayos láser. Sin embargo no consigo abrir la puerta. ―Entonces Hele intervino con fuerza bruta. De una sola patada mando para abajo el pedazo de madera que no se encontraba reforzado pues Chis había eliminado todo con aquellas cosas que había tecleado antes.

―¿Segura que no se activará algún tipo de alarma por el estruendo que la fuerza de Hel acaba de provocar? ―Chis negó con una sonrisa. Y corrí a abrazarla. ―Ahora, ¿qué haremos?

―Pues algo tan simple como entrar. ―No sé cómo pero Val ya se encontraba adentro.

―Podrías explicarme que hace Val aquí adentro si la puerta estaba cerrada. ―Cuestionó Hel a la que parecía saberlo todo por el momento. Ella iba a contestar pero Vale intervino. ―Encontré otro conducto que conectaba justo aquí. ―Dijo señalando una coladera abierta por donde, supongo, debió haber salido. ―No me costó mucho llegar hasta aquí, además la Mona Lisa no está tan reforzada y complicada de sacar que digamos. He estado esperando como por diez minutos que Chis y Helena abran la puerta. La Mona Lisa está allí, de hecho. ―Finalizó indicando la pared donde el cuadro se encontraba apoyado.

―¿Quieres decir que la has sacado tu sola? ―Pregunté.

―Nope. Lo hemos hecho todas juntas chicas. Ahora a…―Val no pudo hablar más pues el sonido de mi aparato de bolsillo sonaba. Un mensaje de Kathleen y Jimmy: “Rojo y amarillo. Hay dos policías recorriendo los pasillos del salón de artes. Sera mejor que se escondan. Me parecen familiares, tal vez los reconozcan. –Kath.”

―¡Chicas! Debemos salir cuanto antes.

―¿Por qué? ¿Qué ocurre? ―Agregó Chis exaltada.

―Una alerta, al parecer dos tipos están rondando por acá y Kath dice que quizás los conozcamos. Debemos buscar una salida rápida. ―Dije.

―Por dónde yo vine. ―Intervino Val una vez más. ―Da justo a la puerta de atrás, la cual está cerrada pero sin seguro.

―De seguro rastrearon el olor nauseabundo del perfume de Adelaide. ―Helena dijo. ¿Qué tenía en contra mío?

―Yo también creo lo mismo. ―Añadió Chis.

―Yo creo que será mejor que salgamos antes de que nos atrapen. ―La última palabra fue de Vale y nos dispusimos a salir por el mismo conducto. Ella cargaba la Mona Lisa, mientras que yo las ayudaba para que suban. A lo lejos la voz de… El policía Tomlinson, supongo, con otro más se escuchaba. ¡Casi nos atrapaban! Aprovechando la técnica de Hele, saqué mi labial rojo del bolsillo de mi pantalón y en la pared trasera escribí:

“Nunca se librarán de las Dangerous Girls, por más que lo intenten. x.”

Después de gatear hasta desfallecer por esas coladeras finalmente salimos hacia la puerta. Helena le envió un mensaje a Jimmy y Kath: “Kathleen, Jimmy; estamos afuera, ya tenemos el cuadro. Perdónenme si las dejamos, pero el imbécil de Tomlinson ya estaba sospechando de nosotras. Ahora lee con atención: arriba de ustedes hay un conducto de ventilación, salgan por allí sin hacer ruido… después de allí sigan a la izquierda siempre hasta que vean una luz, allí estaremos esperándolas, ¿de acuerdo? Nos vemos pronto. –Hele.”

Parecía que todo ya iba a acabar, solo nos restaba esperar a Kath y Jimmy y dar por finalizado uno de los peores robos de la historia. La paz se vió terminada cuando escuchamos un disparo a lo lejos. Todas lanzamos un desgarrador: “¡No!” ¿Qué y si le habían disparado a una de nuestras chicas? ¡No podría ser posible!

―¡No! ¡No! Por favor dime que estamos soñando. ―Desesperadamente Chis articuló esa pequeña frase. Hele y yo estábamos petrificadas. Más de una vez pensé en enviarles un mensaje para preguntarles si estaban bien. Pero eso les restaría tiempo; y aquí el tiempo es valioso.

¡Parecía que pasó una infinidad! Cuando al fin vimos a Jimmy y Kath salir de allí y para nuestra mala suerte le habían disparado a mi Jimmy. El rostro de Kath estaba prácticamente desfigurado por los nervios y por la preocupación acerca de Jim.

―¡Vamos! Debemos correr, pero Jimmy está mal. Chicas, ella no podrá. ―Kathleen llevaba a la aludida mientras la sostenía de la cintura.

―¿Crees que no pensamos? He dejado estacionado el carro justo en frente. ―Val miró hacia la vereda en busca del auto y lo señaló. ―Ven, allí está. Ahora suban a Jim con cuidado. Kath fue a dejarla en el asiento trasero mientras sacaba una lata de pintura en spray y la agitaba.

―Tengo que hacer algo importante. ―Nos sonrió y se dirigió a la pared del museo. Por consiguiente escribió con un color rojo de pintura: “Malditos infelices, ya verán lo que les pasará por hacerle eso a una de nosotras. D.G.” ―Listo. ―Finalizó con una sonrisa triple veces más grande Kathleen.

{***}

Nos preocupaba mucho el estado de nuestra amiga la rubia. Pero, ¿qué podíamos hacer? Si íbamos a un hospital probablemente nos atrapen pero si no lo hacíamos la salud de ella corría un gran riesgo.

Entonces se me encendió el foco. Estábamos varadas en el auto a muchas calles de distancia del museo. Según me había enterado, Nicholas, un viejo ex novio mío se había mudado aquí, a esta ciudad y su padre era un excelente curandero, pues no sólo curaba torceduras y moretones, también era experto en accidentes de bala, etc.

Gracias a Dios aún tenía su número de teléfono y no dudé ni un instante en llamarlo. El reloj marcaba más de las doce pero con suerte él se encontraría despierto aún y quizás también su padre.

―Nicholas. Soy yo, Adelaide. Necesito tu ayuda… No ya no quiero nada contigo… Solo me preguntaba si tu padre sigue con el trabajo de allá en Londres… ¿Si?... Entonces si podemos ir, ¿verdad?... Si, no soy sólo yo, somos seis en el grupo, pero Jimmy está herida… Bien, ya tengo la dirección, voy para allá en unos minutos.

―¿Y bien? ―Preguntó Chis.

―Rue de Cheville y Avenue Marechal Mortier. ―Dije dándoles la dirección.

{***}

Ya estábamos afuera de la casa de Nicholas y su padre. No le contaríamos nada de negocio ni de porqué Jimmy resultó baleada, solo le pediríamos que haga su trabajo sin preguntas.

Toqué la puerta tres veces y la abrió… El mismo chico de rulos de esa vez. Harry Styles. ¿Qué narices estaría haciendo aquí, ahora? Estábamos en serios problemas, pero nada era más grave que la salud de Jimmy.

Sigue: No sé quién sigue, ahre :B

por **Cony'.** Vie 12 Jul 2013, 12:57 am

Hay que salvar a nuestra Jimmy Dangerous Girls {Novela colectiva} 1er Parte TERMIANADA - Página 26 1857533193

WUT? pero que mierda!, el ruloso sexy se aparece por todos lados, tendremos que secuestrarlo para hacerlo callar jajaja
Me ha encantado el capítulo Gene <3 amo como escribes.
Parece que sigue Boo (? ni idea jaja.
Besos xx.

por **Julianne.** Vie 12 Jul 2013, 3:43 pm

Holo aquí llegó Juli (: xd.
ME ENCANTOOOOOO EL CAPÍTULOOOOOO!!
En serio que lo amé Gene <3 <3 Primero estaba como ¿Qué carajos le pasa a Scott? TENÍA GANAS DE MATARLO, ASESINARLO POR COMPLETO. Es un patán de mierda. Fue ¿una violación? no tan violenta pero yo creo que fue una violación. O algo parecido D:
Puto. Tendría que haber un capítulo dedicado a la venganza de las DG hacía ese hijo de puta.... Mmmm....
SKJDSKJSKAS PERFUME PUTO BARATO, jajajajaa. Ow, que bueno quee Val hayá pensado en todo :3 QUIERO SABER QUE MIERDA HACE HAROLD AHÍ? Mi Jimmy no podrá ir con el curandero, o sí... ah jajaja KSDSAKDAKSDJ HARRY QUE MIERDA HACES AHÍ RULOSO? EH? EH? jajajajaja XD.
Esperamos a Lore, sigue ella porque todo vuelve a la normalidad, por así decirlo jajaja :B

por Invitado Sáb 13 Jul 2013, 1:14 pm

culpable de por vida!:cc lo siento chicas, estuve de party(?) en la casa de un primo, apenas llegue esta madrugada y estoy que vomito:C asdadas. Gene cielo, aun no eh leído tu cap, pero en cuanto termine el mio, leo el tuyo :3
chauxx.

por Invitado Dom 14 Jul 2013, 1:53 pm

Chicas, qiuero disculparme por no comentar vuestros capítulos. Los he leído de pasada pero ni siquiera me he enterado. No tengo la cabeza para leer en estos momentos. Los comentaré como es debido cuando vuelva en unos días.
Por favor Juli, lee mi privado cuando puedas. Gracias chicas.

por Invitado Lun 15 Jul 2013, 9:32 am

Not Problem, Hel (: ojala espero verte pronto por acá, y que sea lo que sea... estoy aquí para ti, ¿bueno?

pd:. chicas, estoy intentando concentrarme en escribir, pero me duelen los dientes :c prometo subir hoy o mañana asdas
Besosxx.

por **rutherford.** Lun 15 Jul 2013, 10:13 am

Ajankdsa, yo también no he estado muy conectada, pues ayer sufrí un percance: Mi compu se daño D: Y tuvieron que formatearla... Pero bue, ahora ya la tengo.

Heli, what's up darling? :c Are you Ok? I'll be here for you always in everything... In everything that happens. ~~PERO ESPERARÉ CON ANSIAS TUS COMENTARIOS y tu jodidamente hermoso acento.~~

BooBoo: Yo entender lo que te pasa a tí, yo usar también brackets, y creerme eso doler muchote en especial cuando recién te los ponen, anyways.

Ahora a todas les voy a decir algo importante: No sé si les haya gustado la última parte de mi capítulo, ya no tenía ideas y bueno... Debemos secuestrar a alguien pronto(? ~~Siente la indirecta Harry.~~

¡Las quiero muchisísimo! c:

por **Julianne.** Mar 16 Jul 2013, 7:10 am

cuando fue que llegamos a esto?

por Invitado Mar 16 Jul 2013, 9:56 am

.Juli. escribió:cuando fue que llegamos a esto?

no lo se, pero la mayoria se le han acabado las ideas, o simplemente tienen muchas cosas que hacer :c pero no te preocupes Juli linda, ya estoy que subo :3

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