''No tengas miedo''

''No tengas miedo''

¿Un secreto? ¿Un misterio? ¿Mi peor pesadilla?
Anne _____ Dawson una chica de 16 años nacida en un remoto pueblo de London.
Ese día, el día que cumplía 17, el día que le cambiaría la vida.
Sus padres, le guardaban un secreto…
¿Crees en lo fantasmas? Bueno Anne tampoco creía, ahora se arrepiente de no haberlo hecho.
-‘’No tengas miedo, no te hare daño’’.

Capítulo 1: Un chico nuevo.

― ¡Anne! Vamos levántate. –Dijo mi mama sacudiéndome-.
―5 minutos más por favor. –Le respondiste-.
―No ya levántate. –Dijo tu mama con un tono desagradable-.

*

―Boba… -Escuchaste que te gritaron desde atrás del pasillo de la escuela, tú no decidiste voltear ya que siempre te hacían lo mismo-.
―Si te estoy hablando a ti, no te hagas la sorda. –Dijo otra voz.
―Déjenme en paz –dijiste gritando y corriendo hacia el tocador (baños de chicas) siempre te refugiabas ahí, durabas horas llorando hasta que decidías salir.
― ¿Anne? ¿Qué te paso? -Decía mi mejor amiga, Ally, que para tu suerte estaba en el tocador para ayudarte.
―Siempre es lo mismo Ally –Respondiste con la voz entre cortada, mientras algunas lágrimas recorrían tus mejillas.
―Tranquilízate mujer, si me tienes a mí –Te dijo dedicándote una sonrisa.
―Gracias Ally no sé qué haría sin ti -te interrumpió la campana para entrar a clases.
―Vamos sécate esas lágrimas y vamos a clases no querrás que nos regañen, ah y por cierto feliz cumpleaños –te respondió Ally, abriendo sus brazos para dedicarte un fuerte abrazo.

Salieron del tocador y se dirigieron al aula de clases…
Tú te sentaste donde siempre en las últimas filas casi al último lugar, de hecho en el penúltimo, junto a tu amiga Ally que iba de lado derecho junto a ti, también en el penúltimo lugar.

―Saquen su libro en la página… -Dijo la Srta. Adams que fue interrumpida por un golpe en la puerta del aula, se alejó de su escritorio y continuo caminando 5 pasos más para llevar a la puerta y girar la perilla de esta.


Al abrir nos dimos cuenta que era el director, en ese mismo instante la maestra nos hizo la señal de que nos levantáramos del asiento y así lo hicimos.
―Bueno días señor director –Dijimos todos al unísono.
―Buenos días chicos, siéntense –Dijo el señor director entrando al aula con un compañero-
Bueno quiero presentarles a… -Continúo diciendo-
―Niall Horan –Dijo aquel muchacho a lado suyo-
―Claro, él es Niall Horan, su nuevo compañero. –Dijo el director.
―Bueno Sr. Horan puede tomar asiento detrás de la Srta. Dawson, espero no le incomode por ahora. –Dijo la Srta. Adams mientras le señalaba donde se iba a sentar.
―Pobre se sentara detrás de la Freak. –Se escuchó una voz de una mujer, era Lily, me odiaba sin razón alguna siempre se encargaba de hacer mis días en la escuela un infierno.
En ese momento Niall Horan volteo y la fulmino con la mirada, al parecer a él no le gustan las bromas pesadas.

― ¡Lily, a la dirección! ― Exclamo el director, que aún seguía en el salón de clases.
― Pero ¿Por… ―Trato de reclamar Lily.
― A la dirección, dije. ― El director escolto a Lily hasta la puerta del aula. ― Hasta luego. ― Exclamo por último el director para después retirarse.

―Hola rubio –Dijo mi amiga Ally.
―Hola, que pasa –Dijo aquel chico.
―Nada, y que haces aquí –Dijo Ally.
―Bueno, nos hemos cambiado de casa así que también de escuela. ―Exclamo el rubio.
―Mala elección –Dijo Ally. ―Siempre nos molestan, debes de tener dinero o ser de papa importantes para que te traten bien... Verdad Anne –continúo diciendo.
―Am, si claro. –Respondí, en realidad no le estaba poniendo mucha atención.
― ¿Que le sucede? –Dijo aquel rubio con voz baja para intentar que no lo escuchara, pero intento fallido lo escuche más que bien.
―Así es, es un poco tímida –Dijo Ally-
―Bueno, y ¿cómo te llamas? –Dijo aquel rubio.
―Me llamo Ally Torres mucho gusto. –Dijo Ally que estiro su mano hacia el para estrecharla como un buen saludo de compañeros.
―Y tú ¿cómo te llamas? –Dijo aquel rubio tocándome la espalda con el dedo índice.
― Anne ____ Dawson, mucho gusto –Le conteste también estrechando la mano derecha, en ese momento es cuando voltee un poco y pude admirar su perfecto rostro, quede atónita por minutos admirándolo, sus perfectos ojos azules, su delgados y definidos labio…
― _____ ¿estás bien? –Dijo mi amiga Ally-
― Uh, ¿Qué? Si, por supuesto. – ‘’Trágame tierra’’ pensé en aquel momento, pensara que soy una boba.

Después de eso no volví a mencionar ni una sola palabra, me levantaba de mi asiento, cambiábamos de salón y así paso mi día. No sé si fue casualidad pero el rubio y yo compartíamos la mayoría de las materias, tal vez a los dos nos gustaba lo mismo…

―Ya me voy chicos –Dijo Ally tomando su bolsa y dándome un beso en la mejilla a mí y al rubio.
―Adiós Ally –Dijimos al unísono-

Me levante de mi asiento y me agache para tomar mi bolso, no pude evitar voltear para ver al rubio pero él ya me estaba mirando, mis mejillas tornaron a un peculiar color rosa y no quería que él lo notara. Pose mi bolso en mi hombro derecho y salí del salón de clases, comencé a dirigirme hacia mi auto*.

― ¡_____! Oye, aguarda. –Dijo aquel rubio que se dirigía hacia mí.
En mis mejillas aún estaba ese color rojizo del que Niall fue el culpable, no quería que se diera cuenta de lo que el causo en mí, así que lo ignore y continúe caminando. Me pare en frente de mi auto para comenzar a buscar las llaves, Niall cada vez estaba más cerca de mi así que comencé apresurarme con mi búsqueda ‘’Estúpidas llaves’’ pensé entre mí.
Mi mochila cayó al suelo, después de tanto jaloneo creo quera razonable que se cayera. Me hinque rápidamente a rejuntar mis cosas, claro antes de que llegara el rubio. Pero demasiado tarde antes de rejuntar todas mis cosas ya estaba enfrente de mí el rubio, usando unos tenis muy peculiares ‘’Supras blancos’’.
―Mierda... –Dije en voz baja, sabía que era aquel rubio el cual no quería hablarle.


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*El auto es de Ally y ____, el cual compraron con sus ahorros, Ally se lo deja a ____ ya que sabe que ella lo necesita más…
Cada * significara que lo explicare al final ese tema o también puede significar que ya ha pasado tiempo como 1 o dos horas después, espero darme a entender.

Holaaa,nueva lectora,ame el primer capitulo!!!la rayis es muyy timida,es igual que yo jaja soy asi de tonta sdfghj y conocio a Nialler sdfgh siguela^^ y sin necesitas chicas por aqui ando *_*

Capítulo 2: Mi cumpleaños.

― ¡Hey! _____ se te olvido esto -Dijo aquel rubio, hincándose para entregármelo y ayudarme con las cosas.
Note que era mi llavero donde tenía las llaves de mi casa, auto y demás.
―Uh, gracias –Dije un poco apenada, ya que hui de el mientras solo quería ser bueno conmigo.
―No hay de que, bueno adiós... –Dijo el rubio.
― ¿Por dónde vives?, si quieres yo te llevo –Continúe diciendo, se lo dije como para recompensar lo mala que había sido.
―No, así está bien, gracias por la oferta –Dijo parándose y entregándome mi bolso.
―Gracias –Dije agarrando el bolso.
―Enserió, vámonos, no hay problema, espero que vivas cerca de ------ porque te dejare afuera de mi casa -continúe diciendo.
― ¿Vives por ahí? ¡Yo vivo a 5 calles de ahí! –Dijo el rubio algo sorprendido.
―Entonces vámonos –Le respondí.
―No gracias –me dijo el rubio.
―No te estoy preguntando, vámonos –Le dije.

En minutos ya estábamos afuera de mi casa, así que el rubio me agradeció y se fue caminando. Me baje del coche y mi dirige hacia la puerta, al entrar note a Ally con mi mama y un gran pastel de cumpleaños.
―No se hubieran molestado –Dije súper contenta.
― ¿Qué? ¿De qué hablas? enserio piensas que es para ti, que ya nadie puede comprar pasteles por nomas. –Exclamo Ally. ―Mentira, Feliz cumpleaños Anne, te quiero. –Dijo Ally abrazándote.
―No fue molestia hija, al cabo no siempre cumples 17 –Te dijo tu mama sonriéndote.
―Bueno ya que cumplo 17 crees poder decirme el gran secreto –le dijiste a tu mama.
―______ ya te he dicho que no te hablare de eso, y por favor no lo vuelvas a mencionar no quiero pelear contigo –Dijo tu mama levantando la voz.
Guardaste silencio, después de todo tenía razón cumplías 17 y era inmaduro seguir peleando hasta en el día de tu cumpleaños. Mientras tanto Ally se quedó callada mirando hacia abajo, creo que se sintió incomoda. Pasaron 15 minutos tu mama les sirvió una rebanada de pastel a Ally y a ti, en ese tiempo transcurrido no habías mencionado ninguna palabra hasta que decidiste romper el silencio.
―Mama ya soy grande y me han pasado cosas extrañas, por favor dímelo –Continúe insistiendo.
―Ya ____ no te ha pasado nada extraño –me contesto.
― ¿Nada extraño? te parece nada extraño ver gente que ya no existe, y encontrarme con esa niña desde que tengo memoria. –Le respondí un poco enojada.
―Es la última vez que peleo contigo de esto, no quiero volver a tocar el tema –Dijo mi mama entre dientes, no me levanto la voz ya que ahí estaba Ally.
―Vamos Ally, a mi cuarto –Dije levantándome de la silla-
―Con permiso señora –Dijo Ally muy educada levantándose de la silla-
―Propio –Dijo mi mama con un tono aun molesto, por el mal rato que le hice pasar.

*En mi cuarto*

―Enserió _____ ya deberías de dejar de pelear con tu mama -Dijo Ally dándole la razón a mi mama.
― ¿Tú también? entiéndelo siempre me han ocultado cosas, estoy harta de saber que todo esto lo puedo parar, pero simplemente ellos no me quieren ayudar, entiéndeme crees que es lindo que a lugar que vaya me encuentre a aquella niña.
―Pues ignórala –dijo Ally.
―Si claro como si fuera tan fácil, desde que tengo memoria se me aparece, por eso soy la rara desde que voy en el prescolar, ¡hablaba sola! Según yo hablaba con mi ‘’amiga’’ pero no. Para todos era una loca, me llevaron a 3 distintos psicólogos, mis papas tienen el remedio de todo esto y no me dicen nada –Le respondí, casi gritando enserio estaba muy enfadada, al parecer Ally no sabía que hacer solo se quedó callada, no sabía que decirme…
―Perdón –Le dije a Ally. ―Tú no tienes la culpa de que me haya enojado con mi mama, lo siento –continúe diciendo.
―Si está bien, no te preocupes. Oye y ¿porque tardaste tanto en llegar a tu casa? duramos 10 minutos esperándote.
―Larga historia –Dije en un tono divertido.
― ¿Larga historia? ¿Te quedaste con el rubio? –Me miro con una cara sorprendida.
―Puede ser –Le dije algo coqueta, siendo realista estaba jugando.
―Quien te viera, no te conocía así. –Me respondió Ally, que a su vez me guiño un ojo.
―No nada que ver solo como amigos –Le respondí, en ese mismo instante tocaron la puerta.
―_______ te hablan -Grito mi madre desde abajo.
―Voy –le respondí.

Ally y yo bajamos las escaleras y nos dirigimos a la puerta principal para ver quién era…
― ¿Rubio? –Dijimos Ally y yo al unísono, algo confundidas.
―Hola ______, ¿Ally? ¿Tú que haces aquí? –Dijo aquel rubio.
―No si hola gusto en verte también a ti rubio, y mi pregunta es, ¿tú qué haces aquí? –Dijo Ally sarcásticamente.
―______ iré de compras regreso en 2 horas –Dijo mi mama. ― Hasta luego Ally, hasta luego muchacho.
―Adiós –Le dije.

En ese instante mi mama se fue y nosotros pasamos al living. En menos de unos minutos mi madre me mandó un mensaje ‘’No quiero que pases aquel muchacho a la casa, no lo conozco y no quiero que pase algo ahí que yo no vea, te quiero, regreso hasta tarde’’.
― Demasiado tarde –Pensé entre mí. Ya había pasado al rubio a la casa y no pensaba correrlo.
― ¿Quieren ver una película?–Les pregunte a los dos.
―Una de terror –dijo el rubio.
―Les parece la de Actividad paranormal –Les respondí.
―Si claro, me encanta esa película –Dijo Ally.
―Sí está genial –Dijo el rubio con más confianza.

Calentamos palomitas acarameladas, nos servimos Coca-Cola y nos fuimos directo al living, prendimos el DVD y puse la película… Ally durante toda la película se tapó los ojos y el rubio, bueno el rubio parecía haberse dormido.
La película estaba a punto de acabarse cuando se escuchó un golpe realmente fuerte en la cocina como si alguien hubiese cerrado alguno de las alacenas, pause la película y fuimos a verificar que era…

Capítulo 3.

― ¿Escucharon eso? –Dijo Ally-
― Si, de seguro son fantasmas ¡uuuuuhh! –Dijo aquel rubio jugando-
― No juegues con eso –le dijo Ally-
Yo solo quede atónita mirando hacia atrás de aquel rubio, era aquella niña…
― _____, estas bien – me pregunto el rubio-
― Ah –no podía continuar hablando. Pero levante mi mano señalando detrás de aquel rubio-
― ¡Dios, no jodas! en las escaleras hay huellas –Dijo Ally muy preocupada-
― ¿____ a quien señalas? ¿Qué pasa? –dijo aquel rubio, al parecer ya estaba asustado-
En ese momento no sabía qué hacer, correr, gritar o solo hacer como si nada paso…
― La.a.Laa niña –Dije entre susurros-
― ¿La volviste a ver? –Dijo Ally-
― Que niña ¿de qué hablan? -Dijo el rubio un poco confundido-
― Solo… Vámonos de aquí –Dije dirigiéndome a la puerta, la cual no podía abrir-
― ¿Y ahora que hacemos por donde salimos? –Dijo Ally -
― Por la puerta trasera, vamos -dijo el rubio-


Tampoco se podía abrir esa puerta, estábamos encerrados. De repente se escuchó un golpe en el cuarto de mis padres. Era difícil imaginar que eran fantasmas, más bien era un robo en la casa, no creo que un fantasma dejara huellas y nos encerrara.
― Sigamos las huellas, que alguien me acompañe –dijo el rubio subiendo el primer escalón-
― Yo ni loca – le respondió Ally-
― Yo voy – le dije-
El rubio tomo mi mano y subimos cuidadosamente hacia arriba, primero fuimos a mi cuarto… Pero no había nada, nada sospechoso, todo estaba en su respectivo lugar, después con mucho miedo fuimos a la recamara principal, a la de mis padres, no había nada, todo estaba en orden… Al salir desde lejos note una fotografía debajo de mi cama, decidí no ir a verla hasta que Ally y el rubio se fueran, bajamos las escalera y Ally tenía los ojos cerrados.
― Ya no pasa nada –Fui a decirle a Ally, para que se tranquilizara-
― Todo era mental, nos asustamos demás con la película, que creímos haber escuchado ruidos y todo eso –Le dijo el rubio a Ally-
― Revisen las puertas –dijo Ally-
Fui a ver si ya no estaban atascadas y así era, ya se podían abrir perfectamente.
― Ya abrió –dije feliz-
― ¿Enserio? Genial –dijo Ally tomando sus cosas-
― ¿Ya te vas?  –le pregunte agachando la cabeza, la verdad no me quería quedar sola
― Si, sabes que te apoyo y te quiero pero además ya es tarde y esto que paso dejara un leve trauma en mi –dijo Ally bromeando-
― Nos vemos mañana, adiós, adiós rubio –dijo Ally retirándose-
― Si adiós –le respondí cerrando la puerta-
― Hey no te desanimes, me tienes a mí –dijo el rubio-
― Jajá menos mal –dije con un tono sarcástico-
― Y seguimos viendo la película –Me pregunto Niall-
― Te juro que con lo que acaba de pasar es lo menos que quisiera hacer –le respondí-
Hubo mucho silencio, nadie mencionaba ninguna palabra. Para nuestra mala suerte los dos éramos tímidos… Duramos casi 15 minutos, fue un poco incómodo, hasta que Niall rompió el silencio.
― Te puedo hacer una pregunta –Dijo-
― Si dime – le respondí-
― ¿Quién es la niña?
― Nadie importante.
― ¿Nadie importante? Esperas que te crea –dijo el rubio-
― Bueno eso esperaba.

Yo no quería seguir con el silencio así que continúe charlando.
― Y como era tu otra escuela, te molestaban, eras popular, ‘’el deseado por las chicas’’ –le pregunte un poco curiosa-
― Pues era como cualquier otra escuela, no era popular ni mucho menos ‘’el deseado por las chicas’’ creo que eso de las chicas no se me da –dijo el rubio con un tono divertido-
― ¿Te molestaban? –seguí insistiendo-
― La verdad estos dos últimos meses, el equipo de basquetbol decía que era una niñita, una princesita. Hasta que me arte y le di un golpe, en realidad muy fuerte, creo que le rompí la nariz. Esa fue la verdadera historia por la que me cambiaron de escuela, y le mentí ah Ally, nunca nos cambiamos de casa –dijo el rubio-
― Y porque le mentiste a Ally –le pregunte-
― Porque no la conozco –dijo el rubio-
― ¿Y a mí sí me conoces?                                                                                                                                ― Mmm… no pero… -dijo el rubio, creo que se incomodó un poco- ― Bueno, ya me tengo que ir –dijo el rubio levantándose del sofá y despidiéndose de mi-
― Adiós –le respondí-

En cuanto se fue subí a mi habitación, tenía que ver esa foto pero al verla notaste algo muy extraño, estabas sentada tu aun lado de aquella niña, estaban en el piso, atrás de ustedes había una señora, muy linda en realidad tez blanca, pelo rojizo y chapeteada, no se veía muy grande, de treinta no pasaba.
― ¿Qué diablos? –Me pregunte, lo dije en voz fuerte-
Baje las escaleras y estaba una puerta abierta. En realidad siempre ha habido una puerta a lado de las escaleras, siempre tenía llave y nunca me permitían entrar, por eso me pareció bastante extraño ver aquella puerta emparejada. Tenía curiosidad de saber que me ocultaban así que decidí ir a ver lo que me ocultaban, pero al entrar…