+ PUNK GIRL + (HARRY STYLES)

-¡Yo controlo mi propia vida! –dijo la semi teñida saliendo de casa de un portazo, su madre siempre la hace enojar cada mañana, quería estar al tanto de todo y eso no era justo con ella.
Jo jamás permitiría que la usaran como un juguete y preciso era lo que su madre quería lograr. Sacó su teléfono y marcó la línea de James, su padre y el único que podía entenderla pero al tercer timbre la llamada pasó a buzón…
-hola papá, soy yo, te he llamado para decirte cómo andan las cosas en casa, y de seguro ya sabes la respuesta, según debo intentar comportarme con ella pero simplemente me saca de casillas… en fin, llámame apenas recibas el mensaje. Te quiero –cerró su celular y lo metió en el bolsillo de su short* y continuó el camino hasta el instituto.
***
-¡No no! –exclamaba Antonia, la típica chica fresa –no debes usar el maquillaje de ese modo Lexi –le arrebató la bolsa de cosméticos de la mano a su amiga –jamás aprendiste que el rosa fuerte… -Jo pasaba por su lado intentando llegar lo más rápido a los pasillos restándole atención a la conversación de Antonia y su séquito pero esta de un manotazo la detuvo – ¡Jo! Es un gusto verte… -rió cínica -¿que te trae por acá?
-Aquí estudio –dijo intentando zafarse de su agarre. – ¿podrías soltarme? –gruñó con los dientes apretados.
-oh no… aun no he terminado contigo... –dijo y tomó una de sus mechas coloridas – ¿Cómo se verá este estambre en mi muro? –Antonia no había olvidado lo de la última vez y no estaba de acuerdo con olvidarlo… Jo la había hecho quedar en ridículo y se vengaría de peores formas. La golpearía.
-No querrás que se te arruine tu maquillaje ¿eh? –Jo sonrió cínicamente y con su mano izquierda tomo el brazo de Antonia y lo bajó con brusquedad –y no es estambre… es cabello… -se giró y siguió su camino pero Antonia se lanzó sobre sus espaldas y la empezó a golpear
-¡Perra rechazada! –le gritó dándole un puñetazo en la tripa, Jo se enfureció y la dejo pajo de ella y con sus manos empezó a darle en la cara, Antonia chillaba y pataleaba, además toda la escuela estaba a su alrededor observando la desastrosa escena, hasta incluso Harry, su novio que intentaba contener la risa viendo a esa Jo haciendo pedazos a su novia.
Por último Jo se levantó del suelo y le escupió en la nuca y se marchó como siempre haciendo la seña con el dedo del medio pero algo detuvo su ida, frente a ella el director fruncía el ceño enfurecido… caminó hasta Antonia que estaba tendida en el suelo gimiendo de dolor y le ofreció la mano para que se levantase.
-Yo no estaba haciendo nada… -dijo chillando –y Jo se me lanzó encima como un animal… -se quejó –yo solo intenté hablar con ella…
-Las dos, a dirección –ordenó el director señalando la puerta de su oficina –y todos ustedes –le dijo a los expectantes -¿no tienen algo mejor que hacer? ¡Todos a sus clases!
***
-¿Quién empezó? – Cuestionó, ambas se señalaron una a la otra –bien… como nadie quiere decir la verdad tendrán que ir a la sala de castigos el sábado en la noche.
-¡¡¿QUE?!! No puede hacerme esto… tengo una cita con…
-no me interesa su vida amorosa, nadie le mando a realizar prácticas vandalistas en la escuela –se giró ahora a la teñida –y tu Jo… dime ¿Cuántos problemas has ganado este año? ¿eh? –Jo se encogió de hombros –podría ayudar en biblioteca si quiere…
-pues no quiero –dijo en un tono juguetón –me retiro si no le molesta –se puso en pié
-me molesta… aun no he terminado con usted –le señaló la silla de nuevo –biblioteca, mañana a las 8:00 pm.

Jo deambulaba por los pasillos mientras evitaba las miradas de todo aquel que se le cruzara en el camino, con la mirada baja llega hasta su casillero y toma de el una libreta morada, un lápiz y una goma, le encantaba escribir y dibujar pero jamás nadie tenia idea de sus talentos, también era hábil en la guitarra, piano y canto, todos estaban tan empeñados en hundirla a la faz de la tierra que nadie era capaz de por lo menos conocerla realmente como es.
-¡Hey! bicho raro -dijo una voz masculina a lo lejos, Jo cerró el Locker con fuerza y se giró hacia la voz.
-¿Me hablas a mi? -le respondió algo retante
-no que va... a tu casillero -el joven llevaba el uniforme del equipo de futboll del instituto con su águila al lado izquierdo de la camiseta. -te has metido con Antonia... ahora las pagaras. -dijo moviendo su cabeza de lado a lado haciendo que su nuca emitiera unos sonidos extraños.
-¿vas a golpearme? -dijo Jo fingiendo miedo apretando los nudillos.
-¿porque no hacerlo?
-porque soy una chica -se defendió
-tu... ¿una chica? eso en años, BICHO -escupió, Jo sonrió con mucha tranquilidad y se apoyó en su casillero, si acaso creía que la haría sentir mal con eso, estaba muy equivocado.
-¿como es tu nombre? ¿"señormojelospantalones"? -bromeó Jo
-¡Me las pagarás! -el chico empezó a acercarse dando pisadas fuertes, pero antes de que pudiese llegar hasta Jo, una mano la sujeto del antebrazo y la arrastro hacia los baños.
-¡Suélteme! -gritó apenas ya que una de las manos del sujeto tapó su boca
-¡SHHH! se está acercando -dijo mientras se ocultaban en unos de los baños. Las pisadas del bravucón tronaban contra las baldosas del suelo, Jo lo había sacado de casillas. -No te cansas de buscar problemas ¿eh? -le susurró en el oído -jamás te metas con ese tipo ¿oíste? -le dijo serio -te soltaré la boca pero promete no gritar... -Jo asintió con la cabeza acto seguido del chico retirando la mano de sus labios, Jo en un movimiento rápido lo puso contra el muro del baño y amenazó con darle en su entrepierna pero en cuanto halló un verde profundo en los ojos del chico se retracto de lo que iba a cometer.
-Harry... -dijo viéndolo sorprendida -me enteré de que has terminado con Antonia por "mi culpa" Si fue así en verdad lo siento...
-no lo sientas... me hiciste un favor, has tenido el coraje de hacer lo que muchas chicas de aquí quisieran hacer, eso lo admiro de ti... -Jo sintió las mejillas encendidas pero se oculto llevándose su colorido cabello a la cara, ahí estaban solo los dos, encerrados, en un baño... no podia creer las cosas que estaba imaginando que pasarían, sacudió la cabeza de un lado a otro sacando sus asquerosos pensamientos de la cabeza, Jo no podía enamorarse, no de nuevo.