EL HOMBRE DE MIS SUEÑOS. (NIALL HORAN Y TÚ)

Nueva Lectoraa Dimw Fran Soy De Chile Puedo Con Zayn?

Capitulo II
Daniel se rio –De verdad que sí estás un poquito loca, ___. O sea, ¿imaginarse al hombre con el que soñaste? ¡Wow! Para eso, tendría que ser demasiado perfecto –me dijo haciendo énfasis en la palabra “demasiado”
-Lo era. –le respondí. –Tal vez si estoy muy loca –me reí. –mejor pienso en otra cosa, tal vez quiero tanto que sea verdad que ya hasta me lo imagino.
-De pronto… -me dijo y sonó el timbre.
-Bueno, tenemos que ir rápido al salón antes de que llegue el profesor y nos deje por fuera. –le dije un poco asustada, debido a que era mi primer día y no podía llegar tarde a ninguna clase, no podía dejar esa mala impresión en los profesores. -¿qué clase nos toca, Dani?
-Nos toca… -paró mientras buscaba su horario. –inglés.
-¿Es chévere el profesor, o la profesora? Lo que sea –me reí
-Es profesora –se rio –y pues, más o menos, a veces es muy molesta.
-Ojalá se la lleve bien conmigo, no quiero problemas.
-Créeme que no quieres problemas, y menos con Miss Cole, de verdad, pobrecitos los que tienen problemas con ella.
-¿Por qué? –Le pregunté curiosa.
-Porque se las monta mucho, la mayoría ha perdido el año por que la profesora los reprueba.
-Oh, eso apesta.
-Sí, mucho, pero bueno, vamos porque si llegas tarde te tendrá entre ojos.
-Entonces mejor sí, vamos.
Llegamos al salón y una vez más me senté al lado de Daniel, a los cinco minutos de haber llegado, llegó la profesora, se dio cuenta de que yo era una nueva alumna en su clase así que decidió hacerme parar al frente de toda la clase, divisé a todos mis compañeros cuando de repente vi que él estaba ahí, así es el chico de mi sueño estaba ahí.
-No lo puedo creer, sigo alucinando – susurré
-Disculpe, ¿qué dijo, señorita ___ (tu apellido)? –me preguntó la profesora
-No, nada Miss Cole, no se preocupe.
-Está bien, puede volver a su asiento.
Ese chico nunca desapareció de mi vista, tal vez era una alucinación tan grande que ni siquiera desparecía; definitivamente estaba asustada, debía ir al psicólogo a ver qué era lo que pasaba conmigo. Cuando sonó la campana y lo vi salir me dirigí lo más rápido que pude para poder hablar con él pero Daniel me detuvo.
-¿A dónde vas con tanto afán? –me preguntó curioso por saber
-Lo sigo viendo Dani, y me asusta mucho.
-¿A quién?
-Al tipo de mi sueño, lo sigo viendo.
-¡Wow! Pues la verdad es que eso si está bien raro.
-Sí, lo sé; tengo que ir al psicólogo.
-Sí, tal vez él te puede ayudar a que encuentres la razón de todo esto.
El día pasó y no volví a ver al rubio de mi sueño, seguía muy asustada, per sin embargo pude dormir bien, mi único problema fue que una vez más ese rubio apareció en mis sueños, está vez me acuerdo que me dijo que tenía 19 años, y en un paseo a la playa escribió N+_= ♥. Así que ya sabía que su nombre empezaba por la letra ‘N’ y al día siguiente no iba a dejar que este chico “imaginario” se me escapara, iba a averiguar qué era lo que ocurría, definitivamente lo iba a hacer.
A a la mañana siguiente cuando llegué al colegio me encontré con Daniel y le conté todo mi plan, él me dijo que me ayudaría diciéndome donde estaba el chico rubio cada vez que él lo viera. Estaba hablando con él y de repente lo vi pasar, y le dije a Daniel:
-¡Es él! ¡¿Puedes verlo!?
-Hay mucha gente, ___; no sé de quién me hablas.
-¡Es el rubio, Dani, el único rubio que hay!
-Oh estás hablando de… -No lo dejé terminar; lo interrumpí.
-¡Ya vengo, tengo que ir hacia allá!
-¡¿Y qué le dirás, ___!? –Me gritó mientras yo me alejaba.
-¡No sé, improvisaré! –Le devolví el grito.
Mientras caminaba hacia el chico rubio me encontré un pequeño cuaderno tirado en el piso, como iba de afán sólo lo cogí y lo guardé en mi maleta, para ver de quién era y entregárselo después. Me acerqué al chico rubio y lo saludé.
-Hola… -Le dije un poco nerviosa.
-Hola tú, otra vez –Me respondió sonriendo– Lo siento por lo de ayer—Me dijo apenado.
-¿Otra vez? ¿Lo de ayer? –Pensé– ¿De qué hablas? –Le pregunté.
-Sí, ayer, cuando me choqué contigo y te grité; lo siento mucho, de verdad.
-Oh ¿fuiste tú? –Le pregunté un tanto asombrada.
-¿Te parece si empezamos todo de nuevo? –Me preguntó.
-Sí, claro. –Dije contenta.
-Mucho gusto, me llamo Niall Horan, un placer conocerte ¿cómo te llamas tú?
-¿Niall? ¿Niall Horan? ¡No! ¡Esto no puede ser cierto! ¡Su nombre empieza por ‘N’, como el de mis sueños! –Dijo una voz dentro de mi cabeza– Mucho gusto Niall, yo me llamo ___ ______ (Tu nombre y tu apellido).
-Sí, lo sé.
-¿Cómo lo sabes?
-Estoy en la case de inglés contigo, vi cuando la profesora te presentó ayer, pero como estamos empezando de nuevo, entonces… Mucho gusto ___ un placer conocerla –Se rió.
Definitivamente algo raro estaba pasando, era idéntico al de mis sueños, y su nombre empezaba con ‘N’, como el chico de mis sueños; cada vez me asustaba más. Terminé de hablar con Niall y me dirigí hacia donde estaba Daniel.
-Estoy muy asustada, Dani. –Dije preocupada.
-¿Por qué? ¿Qué pasó? ¿Te hizo algo? ¿Te amenazó? ¡¿Qué pasó, ___?!
-No me amenazo, Dani –me reí– tranquilízate; simplemente que el nombre del chico de mis sueños empezaba por la letra ‘N’ y la de él también, él se llama… -me interrumpió.
-Niall, Niall Horan, te lo iba a decir pero no me dejaste terminar de hablar.
-Lo siento pero estaba muy apresurada. Es un chico bastante smpático; me agrada.
-Sí, lo es.
El día pasó normalmente y cuando llegué a mi casa abrí mi maleta para hacer las tareas y de repente, vi en ella ese cuadernito que me había encontrado, sí, el que no había devuelto, lo abrí para ver de quién era y me asombré al ver la primera página, esta decía: “Diario de Liam Payne”
-¡Mierda, tengo el diario del chico lindo de ojos café! –pensé.
Quería guardarlo y no ver nada, pero la curiosidad me mató así que decidí empezar a leerlo, duré horas y horas leyendo ese diario, me sentía culpable, sabía que estaba mal hecho, pero mi problema es que yo era demasiado curiosa, además, no es que yo lo fuera a publicar por todos lados, no soy ese tipo de persona, se lo entregaría personalmente. Seguí leyendo hasta que encontré algo que me dejó total y completamente boquiabierta, Liam Payne era... Él era… ¿Gay?

hola soy una nueva lectora wiiiii me gusta tu novela, me llamo alejandra y soy de venezuela :3, y e verdad me preguntaba si podia ir con harry :$

Me llamo Antoo!
Esta genial!!!! Me encantó.
Puedo estar con Liam?
besos!

Omg Que liam es QUE!!! No puede ser tienes que seguirla que si no MORIRE!!!

Capítulo III
¡Esto no podía ser cierto! ¡¿Usaba a Danielle para ocultar su homosexualidad?! ¿Debía contárselo a Daniel? ¿O debía guardar el secreto? ¡No tenía idea de qué hacer! Entre pensamiento y pensamiento me quedé dormida; me levanté a la mañana siguiente, me bañé, me puse mi uniforme, desayuné y como todos los días me dirigí hacia el colegio. El día iba perfecto hasta que en el descanso vi pasar a Liam con su novia, Danielle, tan pronto los vi, todo lo que había leído se me vino a la mente, empecé a preocuparme de nuevo y no sabía cómo iba a hacer para devolverle el diario a Liam, y tampoco sabía si debía contárselo a Daniel, así que esperé hasta que Liam estuviera solo y me acerqué a él y le hablé.
-Hola –le dije nerviosa
-Hola, um… ¿Te conozco?
-No, no me conoces pero sí se quién eres tú, y pues… vine a entregarte algo.
-¡¿Lo tienes tú!? ¡Por favor, dámelo, te daré lo que quieras!
-Espera, ¿hablas de tu diario, cierto?
-Por supuesto, ¡por favor dámelo!
-Aquí lo tienes, me lo encontré tirado ayer y lo guardé en mi maleta, olvidé por completo entregártelo, hasta que lo vi anoche; lo siento.
-No te preocupes pero… ¿Lo leíste?
-Yo… Um… Yo… Me tengo que ir, adiós, que te vaya bien –dije nerviosa
-No, no te vayas, sólo quiero que me respondas ¿Lo leíste o no?
-Sí. –dije cabizbaja
-¿Por qué?
-Lo lamento mucho, la curiosidad me ganó.
-¿Qué leíste?
-Todo.
-¿Qué es todo?
-Todo es… Todo.
-Por favor, te lo suplico, no le cuentes a nadie lo que dice ahí, mi reputación se dañaría por completo.
-No te preocupes. –le dije y le guiñé un ojo.
-Bueno… -me hizo señas de que no sabía mi nombre
-___.
-Bueno, ___, tengo que ir a clases, un placer haberte conocido, y ya sabes, por favor no le comentes esto a nadie.
-Chao, Liam, nos vemos por ahí, un placer haberte conocido a ti también y no te preocupes que soy una tumba, de mi boca no saldrá absolutamente nada. –me guiñó un ojo y se fue.
Lo había prometido, y yo soy de las personas que siempre cumplen sus promesas, y si no lo hago me sentiría tan mal que tendría que ir a contarle que rompí la promesa y eso sería fatal, lo siento, pero ya no podía contarle nada a Daniel.
-¿Qué hacías con él? –me dijo una voz gruesa, la cual me asusto.
-¡Daniel! –grité me asustaste, y estaba hablando, nada más.
-Lo siento, y de qué hablaban.
-De… nada importante, no te preocupes
-Vamos, ___, cuéntame.
-No puedo.
-¿Por qué no puedes?
-Se lo prometí.
-Bueno, no importa, vamos a clase.
Llegamos al salón de clases y ahí estaba, Niall; siendo sincera no me gustaba estar en clase con él porque me distraía demasiado viendo su perfecto pelo, su perfecta nariz, su perfecta sonrisa, sus perfectos labios, mejor dicho, todo él era perfecto. Estaba mirándolo cuando se me acercó y me dijo:
-Hola, linda ¿se puede saber qué es lo que tanto me miras? –se rio
-¿Yo? Pft, yo no te estaba mirando, ni lo sueñes, sólo estaba pensando y curiosamente miré hacia ti.
-Si, como no –dijo mofándose.
-Es en serio –me moleste y me levanté de la silla.
-¡Hey! No te pongas así, más bien ¿te gustaría ir a tomar un café conmigo?
-No. –dije haciéndome la interesante, la difícil.
-Vamos, ___, no seas así, acepta.
-Está bien. –sonreí pero solo uno.
-Sí, no te preocupes ¿te recojo mañana a las 8?
-Bueno, más tarde te envío mi dirección por mensaje de texto.
-Tú no te preocupes, yo ya la tengo.
-¿Qué? ¿Cómo la conseguiste?
-Tengo mis contactos.
-“Daniel” –pensé bueno, nos vemos mañana, adiós.
Apenas se fue salí apresurada buscando a Daniel, estaba molesta pero a la vez contenta, lo encontré y le grité:
-¡Daniel Castellanos!
-___ ¿estás bien?
-¡Cómo se te ocurre darle mi dirección a Niall!
-¿Yo? Pero, ___, ¿cómo le iba a dar tu dirección si nunca he ido a tu casa?
-Buen punto, pero entonces ¿cómo putas la supo?
-Pues, él es un chico extremadamente popular, puede conseguir lo que quiera.
-Ok, eso me asusta.
-Tienes que tener cuidado.
-Lo haré –le dije y lo abracé.
Me di cuenta que en la clase de Inglés Niall no hacía más sino mirarme, es me intimidaba demasiado, aunque puede que le pase lo mismo que a mí, que sueña despierto, pero ¿todo el tiempo? Eso ya era muy raro. Luego de que se terminó la jornada escolar del día llegué a mi casa, me di una ducha, hice tareas y me fui a dormir. Una vez más ‘N’ estaba en mis sueños, de verdad me asustaba pero yo no lo podía controlar. En el sueño estábamos él y yo, en el parque, como una pareja muy feliz, él se paró y yo le grité:
-¡Niall! ¿a dónde vas?
-Es una sorpresa, mi amor, te va a encantar. –dijo haciendo énfasis en la palabra “encantar”
Me desperté acalorada y sudando ¡¿Niall?! ¿Era Niall el de mis sueños? Definitivamente necesitaba un psicólogo así que cogí el directorio y busqué los números de los psicólogos de la ciudad, busqué y busqué hasta encontrar a una que quedaba cerca a mi casa, no era muy tarde así que la llame.
-¿Aló?
-Aló ¿Con quién hablo?
-Con la doctora Miranda, psicóloga ¿en qué le puedo ayudar?
-Me gustaría apartar una cita.
-Necesito su nombre completo y edad.
-___ ________ (tu nombre y apellido) y tengo __ (tu edad) años.
-¿Puede mañana?
-No, lo siento mañana tengo un compromiso ¿se podría el sábado?
-Sí, por supuesto ¿a qué horas desearía la cita?
-3:30 p.m.
-Perfecto señorita ___, nos vemos el sábado
-Muchísimas gracias.
-Con mucho gusto, hasta luego que tenga buena noche.
-Lo mismo.
Tenía que averiguar qué estaba pasando conmigo, ya esto me asustaba demasiado.


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Aquí tienen su capítulo mis amores, LAS AMO <3

hola soy ale
puedo ir con harry? besos desde venezuela