#Hechizos {Harry Styles}

-Diteron, antes de nada, te tengo que comunicar varias cosas- murmura la niña haciendo parar mi fiesta privada.
-Cuénteme-pido sentándome frente a ella.
-1. Tu nombre está muy anticuado para ser de un chico de 17 años, desde ahora dejarás de llamarte Diteron a llamarte Harry, Harry Styles- dice enseñándome un dedo- 2. No puedes hablar como si vivieras en la prehistoria, intenta acostumbrarte a tutear a los demás, sobretodo, a los chicos y chicas de tu edad.-dos dedos- y por último, pero no menos importante, vas a comenzar de nuevo el instituto, no de nuevo 1º si no que empezarás donde lo dejaste y cambiarás tu atuendo.- termina de decir.
-¿Qué tiene de malo?-pregunto mirando mi ropa.
-Hueles mal- comenta simplemente antes de coger mi mano y decir varias cosas que no termino de entender.

Segundos después de que diga eso caigo desmayado.

''Estoy harto de estos transportes'' pienso antes de caer en una profundidad negra que me aterroriza y no hace más que forzarme a cerrar mis ojos y apretar mis labios ahogando un grito asustado.
-Este chico duerme más que ninguno- oigo una voz masculina sobre mi cabeza.
-Sí, pero mira que guapo es- suspira otra voz.
-No es nada del otro mundo-
-Estás celoso, Brad- se ríe la voz infantil que me trajo aquí.

Lentamente comienzo a pestañear hasta abrir completamente mis ojos y ver sobre mi a tres personas, dos chicas y un chico. El chico, que creo se llamaba Brad, me mira algo enfadado mientras que las dos chicas, con la apariencia de tener mi misma edad, me miran con un pequeña sonrisa en los labios.

Sus vestimentas son algo extravagantes, al menos las de ellas, ropa pegada de colores muy llamativos junto con muchos accesorios grandes y coloridos. El chico de rostro amargado viste ropas oscuras, pantalones apretados negros, camiseta gris y chaqueta de cuero negra. Con ayuda de una de las chicas me siento de la cama en donde estoy acostado para a continuación mirar a mi alrededor.

Estoy en una gran habitación llena de muñecas y libros. Pintada de rosa pastel y decorada con flores y mariposas. A un lado de la puerta hay una gran librería llena de libros finos de varios colores y un sillón rojo. En este está la niña que me salvó y la miro con una sonrisa antes de acercarme a ella rápidamente y abrazarla.

Ella me corresponde el abrazo y en el momento en que nos separamos no puedo evitar volver a mirarla de arriba a abajo. Me guío por su apariencia para decir que tiene alrededor de diez años, quizá un poco más. La niña me mira sorprendida por mi reacción pero es lo mínimo que puedo hacer por ella.

-Buenos días- dice con voz sorprendida.
-Buenos días, por cierto, no le he preguntado su nombre, ¿me haría el gran favor de presentarse y presentarme a las bellas damas y al caballero?- pregunto con mi mejor sonrisa.
-Diteron, tutéanos o te mando de nuevo allí- dice ella, sé que lo dice en broma pero el sólo pensar en volver a la Luna un escalofrío cruza mi columna y hace que mis peores pesadillas me vuelvan a atormentar.
-Esta bien, mm, presentame a tus bellas amigas y a tu amigo- digo dudando de haberlo dicho bien, no estoy acostumbrado de tutear a nadie, ni a Telea tuteaba y eso que entre nosotros confiábamos ciegamente.
-Pelota- susurra el chico furioso y yo lo miro extrañado porque se comporte así.
-Diteron Styles de los reinos del norte y cazador innato de corazones te presento a mis queridas hermanas mayores, Lara y Tania, y a su mejor amigo, Brad.- dice la niña mientras me mira y yo me río por la parte de "cazador innato de corazones''.
-Encantado de conoceros- digo cogiendo las manos de Lara y Tania y dejar caer en estas un beso.
-Y nosotras encantada de conocerte a ti- dicen al unisono sonrojadas.
-Tío, yo no estoy encantado de conocerte así que mejor no me digas nada- me golpea un poco el hombro Brad y comienzo a enfadarme por su actitud.