"No te enamores de mí" (TERMINADA)

Capitulo 9:

Narra Azahara:

La alarma sonó, comencé a pegar manotazos a todo lo que pillaba, pero no conseguía hacer callar a ese odioso reloj. Me tuve que destapar para apagarla, ¿dónde estaba el dichoso reloj? Abrí un ojo y seguía sin saber dónde estaba, me guié por el sonido y vi que se había metido debajo de la cama.
Azahara: ¿Qué hace ahí?... –lo cogí como pude y lo paré-
Volví a tumbarme en la cama e intenté desperezarme, me destapé y miré por la ventana a ver qué día hacía hoy. Volvería a hacer fresco, sería mejor que me abrigara. Miré en mi armario en busca del jersey más calentito que tuviera y me di cuenta de que no tenía mucha ropa de abrigo, pero conseguir encontrar uno y me puse esto:
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Colgada vi la chaqueta del “chico misterioso” como ya le llamábamos entre nosotras. Hacía ya casi una semana desde que lo vi… y aún no le había vuelto a ver… quizás me engañó y no estudiaba en la Regent’s College, pero ¿porqué iba a mentirme? Solo sé que me recorrí todos los edificios de la Universidad y no lo vi por ningún lado… ¿a caso se estaba escondiendo de mí?... no entendía nada, pero creo que la chaqueta ya me la podía quedar como recuerdo… Volví a soñar con él varias veces, no sabía cómo se llamaba, ni siquiera cómo era exactamente su risa o el simple hecho de besarlo; pero cuando soñaba con eso era como si lo viviese de verdad, como si lo tuviese delante y pudiera rozar sus labios, era tan real… y su aroma aún permanecía en mi piel. Pero solo eran sueños… que nunca se iban a cumplir…
Salí de la habitación y fui al baño para peinarme, allí me encontré con Mel que me dio un beso de buenos días. Iba así vestida:
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Azahara: ¡Qué guapa va mi rubia siempre! –dije mirando su modelito-
Melissa: Jajajajaja gracias, tú también –rió y se dirigió a despertar a Raquel-
Yo fui a la cocina y me preparé el desayuno y las escuché de venir hacia aquí.
Raquel: Buenos días! –sonrió y me dio un besito de buenos días al igual que Mel-
Azahara: Bueno días cariño –sonreí y miré su modelito-
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Desayunamos y nos fuimos a la Uni en el coche de Mel. Por una vez en toda la semana no llegamos tarde. Parecía que hoy iba a ser un buen día. Nos juntamos con Marta y Manmen que también iban súper guapas vestidas:
(Marta: http://www.polyvore.com/sin_t%C3%ADtulo_17/set?id=52837456&.locale=es )
(Manmen: http://www.polyvore.com/ma/set?id=52456356 )
El timbre sonó y fuimos hacia el aula de historia… otra vez volver a ver al asqueroso ese… Nos sentamos: Marta y yo, Mel y Raquel y Manmen se sentó con un chico castaño de ojos azules, creo que la escuché decir que se llamaba Louis, pero no sé muy bien quién era, parecía que ya se conocían de antes y se llevaban bastante bien, hacían muy buena pareja. Estoy segura de que los dos se gustaban, pero aún no se habían atrevido a decírselo.
La clase se me pasó más o menos rápida, y cuando estaba a punto de sonar el timbre el profesor mandó un trabajo en grupo.
Russel: Los grupos son por parejas y son los siguientes –se puso las gafas de ver y sacó una lista de su carpeta-
Jhonson y Gunter, Tomlinson y Segura (parecía que a la “parejita” les había tocado juntos), Anderson y Thomas, Jackson y Whright, Espín y Saura (que bien con mi prima), López y Malik (Raquel parecía alegrarse de su pareja), Martin y Clark… (siguió nombrando)… y por último Styles y Suárez.
Melissa: ¿¡Qué!? –dijo analizando la situación. Un ¡Sí! triunfante se oyó al fondo de la clase -
Russel: ¿Algún problema Súarez y Styles? –dijo de mala gana-
Harry: Ninguno profe! –sonrió como un niño pequeño-
Russel: Llámame profesor no “profe” Styles! Compórtate! –le regañó-
Harry: S-si señor…
Melissa: ¿No cabe la posibilidad de cambiar el compañero? –preguntó con miedo, Raquel le dio un codazo- Auch!...
Russel: ¿Tiene usted algún problema con el señor Styles?
Melissa: N-no… es sólo q…
Russel: Entonces no veo el por qué de cambiarles, además, no pensaba hacerlo así se llevaran a matar. Esto es un trabajo que tienen que hacer sí o sí, si no estarán suspensos hasta septiembre, no me valen escusas, ni peleas con el compañero, quiero que los dos miembros trabajen como un equipo y colaboren, si uno de ellos no hace nada y el otro lo hace todo lo tendré muy en cuenta, así que… ustedes sabrán. Por cierto, el próximo día quiero que se sienten al lado del compañero con el que tienen que trabajar –justo sonó el timbre- pueden irse.
Salimos de clase y Mel seguía renegada.
Melissa: ¡Esto es increíble! No me libro de él ni para los trabajos de clase… encima… tengo que sentarme a su lado, menudo año me espera… -todas reímos, nunca solía cabrearse y cuando lo hacía no sabía, parecía una cría pequeña- si si eso… encima reíros…
Raquel: Vamos Mel… tampoco es para tanto…
Melissa: Claro… como a ti sí que te ha tocado con el que querías… -Lo que la dejó callada y sin respuesta. Cuando se cabreaba soltaba todo lo que se le pasaba por la cabeza sin pensar-
En ese momento…

Narra Melissa:
-----: Meeeeeeeeel! –escuché una voz familiar a mis espaldas-
Melissa: Él otra vez no… -dije cansada. Me giré y lo vi allí de pie, iba bastante guapo vestido:
http://www.polyvore.com/sin_t%C3%ADtulo_43/set?id=53100254&.locale=es joder…le quedaba genial esa camiseta, le hacía unos brazos… espera… ¡no!…Mel… ¡contrólate!– qu-que –dije tras tragar saliva-
Harry: ¡Nos ha tocado juntos para hacer el trabajo! –sonrió ampliamente-
Melissa: Si, por desgracia… -me crucé de brazos-
Harry: Oh vamos Mel, ¿por qué te portas así conmigo?
Melissa: ¿Así cómo? –me hice la tonta-
Harry: Borde y pasota, ¿por qué rehúyes de mí? –se cruzó de brazos imitándome-
Melissa: No te equivoques Harry… tú haces que me porte así contigo –le contesté-
Harry: ¿Por qué?, si solo quiero llevarme bien contigo preciosa…
Melissa: Si sólo fuese eso seríamos amigos desde el primer día, pero… ¡es imposible!, mejor dicho… ¡tú eres imposible!
Harry: Oh… creo que has usado la peor palabra para definirme cielo… -dijo de nuevo con esos aires de chulería-
Melissa: … ¿Qué? –levanté una ceja-
Harry: No suelo ser imposible para ninguna chica, sólo me resisto un poquitín a veces… pero me gusta, contigo sería distinto si me dejaras demostrarte lo bueno que puedo ser… -cortó la frase y apoyó su mano derecha en la pared a un lado de mi cabeza, comenzó a acercarse a mí y yo ya no podía echarme más para atrás-
Melissa: ¿¡Pero qué haces!? –le pegué un empujón para quitármelo de encima-
Él comenzó a reírse, aunque se notaba que le había dado mucha rabia que lo hubiese apartado.. ¿¡pero qué pretendía el loco!? ¡Estuvo a punto de besarme!
Harry: Casi… -susurró- hasta te has puesto colorada, la próxima vez no seré tan lento… -me guiñó un ojo-
Melissa: ¡Eres un…! –me tapó la boca con su mano-
Harry: Prefiero no saberlo… por ahora… no quiero quitarme la imagen de chica encantadora que tienes, ya me dirás todo lo que quieras cuando… -alguien lo llamó en ese momento-
------: ¡Eh Harry! ¿Tío, qué haces? –dijo un chico alto que me resultaba familiar-
Harry: Hola Liam –me soltó y saludó a ese tal Liam- ¿Qué te ha pasado todos estos días? –Liam me miró, parecía que yo también le sonaba a él-
Liam: Tú… eres amiga de esa chica a la que le presté mi chaqueta, ¿no? –me dijo con voz rara. ¡Ahora lo recordaba! ¡Él era el chico misterioso que le dejó la chaqueta a Aza!-
Melissa: Es verdad, ¡eres tú! –dije contenta, al fin mi pequeñita iba a saber quién era su “chico misterioso”-
Liam: Si –rió- Soy Liam Payne, encantado. Siento no haberme presentado la otra noche, pero es que se os iba el bus –volvió a reír, se veía majo y era muy guapo. Me gustaba para Aza-
Melissa: Si jajajaja encantada Liam, soy Melissa Suárez –justo cuando nos íbamos a dar dos besos Harry tuvo que meter su manaza por medio apartando al pobre Liam-
Harry: ¿Qué? ¿Cómo que os conocéis? ¿De qué? –preguntó molesto-
Melissa: Eso es algo que no te incumbe Harry…
Liam: ¿Qué pasa Hazza? ¿Estás celoso de que a mí sí que me hagan caso a ti no? –dijo burlándose de Harry-
Harry: Eh! ¡No te pases! La única que se me está resistiendo es ella –me señaló-
Melissa: ¿No te han enseñado que es de mala educación señalar? –le di un manotazo-
Harry: Auch!... ¿Lo ves?, y no sé por qué es así conmigo…con lo bueno que soy –puso cara de pena y Liam se rió-
Melissa: Bueno Liam, gracias por salvarme de este creído… -Liam se rió a carcajadas- voy a buscar a Azahara y a decirle que estás aquí, seguro que quiere hablar contigo para saber cuándo devolverte la chaqueta –Liam asintió y me fui-
Harry: Adiós rubia! –lo fulminé con la mirada-

Narra Liam:

Llegué a la universidad después de una semana entera de resfriado, aún seguía estornudando, pero ya me sentía mucho mejor. La otra noche cuando conocí a esa maravillosa chica, hacía bastante frío, y por ser un caballero le dejé mi chaqueta, y fui yo el que me resfrié, pero lo preferí antes que haber dejado que fuese ella la que pillase el catarro. Nada más llegar me encontré con Harry acosando a una pobre muchacha que intentaba librarse de él, increíble pero cierto, creo que era la primera chica que se le estaba resistiendo, cosa que me hacía gracia. Cuando me fijé vi a la chica rubia que era amiga de “mi chica misteriosa”, y no pude desaprovechar la oportunidad de preguntarle por ella. Ahora me encontraba con Harry esperando a que llegara Azahara, era un nombre que no había escuchado en mi vida, sonaba a español, pero me encantaba decirlo e imaginármela a ella.
Liam: Está claro que Melissa pasa de ti, creo que deberías dejar de intentarlo, o acabará pegándote un guantazo, si es que no lo ha hecho ya… -sabía que Harry no daba una chica por perdida, nunca se le llegó a resistir alguna, incluso llegó a meterse en problemas por flirtear con chicas que estaban novias… y Melissa no iba a ser menos. Harry funcionaba de la siguiente manera: Se le acerca a una chica que le guste y coquetea con ella, la chica cae y se lían. Pero por otro lado están las que se resisten, pero Harry no desiste y al final caen también. Aunque con Mel era cómo la excepción, con ella sí que le estaba costando, y no creo que se lo fuese a poner fácil-
Harry: Claro que aún no me ha guanteado… pero intuyo que lo hará… -infló los mofletes- ¡Y me da mucha rabia! –dijo cabreándose-
Liam: Pero tú no te vas a dar por vencido… ¿verdad? –suspiré-
Harry: ¡Harry Styles nunca se rinde! Sé que le gusto, lo que pasa es que no me soporta… pero acabará cayendo… como todas… -sonrió satisfecho-
Liam: ¿Sabes Harry? Odio ese ego tuyo, Melissa se está haciendo de respetar, deberías valorarlo, no es como todas esas chicas con las que te has liado y después dejado tiradas…
Harry: Ya lo sé Liam… -dijo serio- ¿Acaso crees que pienso que es igual que las otras? No Liam… no quiero de ella un royo de una simple noche… la quiero como algo más…
Liam: ¿Y qué es ese algo más para ti Harry? –le pregunté serio-
Harry: Mi novia Liam, es la chica perfecta –respondió seguro de sí mismo, se notaba un tono de decisión y madurez en su voz. Conocía a Harry de muchos años y sabía que estaba diciéndolo como lo sentía, por una vez en su vida hablaba en serio, y por eso no se rendía-
Liam: ¿Y por qué no dejas de ser como eres con las demás e intentas ser tú mismo con ella? –le di con el dedo índice en la frente, indicándole que pensara un poco-
Harry: Siempre soy yo mismo Liam… -dijo burlón-
Liam: No Harry, siempre eres el “Harry guay”, el Harry ligón que tiene a todas las chicas a sus pies, es cómo una máscara con la que escondes el verdadero Harry, sé el Harry que eres cuando estás con nosotros, el Harry divertido, que le da igual reír que llorar, el que defiende a su hermana cuando se meten con ella, y no por hacerse el chulito delante de todos, si no porque la quiere –agachó la cabeza, parecía que estaba recapacitando- Si le muestras ese Harry a Mel, el que no la quiere solo para una noche como tú bien has dicho, sino que la quiere para toda la vida, entonces querrá salir contigo… cabeza Harry, cabeza –revolví sus rizos para quitarle tensión al momento-
Harry: Llevas razón… gracias Liam –me abrazó- Bueno, voy a ser el verdadero Harry, me voy a disculpar por ser tan arrogante y creído. Tengo que quedar con ella esta tarde para hacer el trabajo, ¡nos vemos luego! –Salió corriendo. Me quedé conforme, por fin logré que abriese los ojos.
-----: ho-hola… -una voz dulce sonó a mis espaldas. Me giré y vi a la chica más linda del mundo mirarme con unos tímidos ojos-
Liam: Hola linda –sonreí, y ella también. Era realmente hermosa- Soy Liam Payne, el otro día creo que no llegamos a presentarnos como es debido
Azahara: Encantada –sonrió- me llamo Azahara Saura –no dimos dos besos; olía tan dulce-
Liam: Creo que ya has decidido ponerte cosas de abrigo ¿no? –señalé su jeresey cuyas mangas eran tan largas que cubrían sus manecitas-
Azahara: Si jajajaja, aunque es el único que tengo, creo que tendré que comprarme unos cuantos –los dos reímos- y así ya podré devolverte tu chaqueta…
Liam: Sí, aunque puedes quedártela hasta que te compres jerseys nuevos –bromeé y ella rió-

Narra Azahara:

Al fin descubrí quién era “mi chico misterioso”, a la luz del día era mucho más guapo. Nos dimos dos besos y su aroma volvió a inundar mis fosas nasales, los recuerdos de esa noche volvieron a mi mente, cómo choqué con él y me abrazó fuerte para que no me cayera; olía tan bien, desde entonces se me quedó grabado, no podía olvidarme de su maravilloso olor.
Azahara: Por cierto… ¿cómo es que no has venido estos días? –soné desesperada, como si lo hubiese buscado por todos lados para asegurarme de que no había venido, que en verdad es lo que hice… pero no quería que pensara que era una psicópata que lo buscaba por toda la universidad- quiero decir… emm… esto… -rió, tenía una sonrisa tan bonita-
Liam: No te lo vas a creer pero… me resfrié, he estado unos días en cama con fiebre, pero ya estoy mucho mejor –volvió a sonreír mostrando sus dientes y en su naricita se le formaban unas pequeñas y graciosas arrugitas-
Azahara: ¿En serio? –dije preocupada- ¿Te resfriaste por mi culpa?¿Por dejarme tú chaqueta?
Liam: Tranquila, nadie tiene la culpa de nada, además estoy bien, solo ha sido un simple catarro… -dijo sin mayor importancia-
Azahara: Ya pero…
Liam: Pero nada… ¿creías que iba a dejar que te resfriaras con el frío que hacía esa noche?, yo ya estoy acostumbrado al frío de Londres pequeña, tú no –me guiñó un ojo y me dio un pequeño golpecito en la nariz con su dedo. Me derretí con ese gesto-
Azahara: Gracias… -sonreí tímida, tenía las mejillas coloradas, podía notarlo-
Liam: No tienes que darlas, simplemente soy un caballero –bromeó y reímos-
El timbre sonó y tuvimos que volver a la siguiente clase. Ya ni me importaban las horas que tuviese que pasar encerrada allí, había hablando con el chico misterioso con el que había estado soñando todas las noches durante esta semana… no podía dejar de sonreír y acordarme de su risa, era perfecto contra más lo pensaba…al fin…el chico de mis sueños…era real.

Capitulo 10: Parte I

Narra Melissa:

Por fin sonó el timbre del fin de las clases de hoy que me devolvía a mi libertad, pero no tardo en arruinarse…
Harry: ¡Mel espera! –giré y lo vi corriendo hacia mí-
Melissa: ¿Qué pasa ahora Harry?... –le dije sin ganas-
Harry: Toma –me dio un papelito- ¡Hasta luego! –sonrió y se fue de nuevo corriendo-
Las chicas me miraron ansiosas por que abriese el papelito. Había algo escrito con boli negro:
“Preciosa te recojo esta tarde a las 5:30 en tu casa para hacer el trabajo, y tranquila te mostraré al verdadero Harry ;) Un beso, Hazza”
Cuando terminé de leer miré hacia donde se había ido, y lo vi montarse en un coche con los chicos. Suspiré, ¿el verdadero Harry?, ¿qué quiso decir con eso? Las chicas y yo volvimos a casa, Marta y Manmen se quedaron a comer y fue una comida bastante divertida. Después Azahara y Marta se fueron a su habitación a hacer su trabajo de historia, Manmen quedó con Louis para hacer el trabajo también y Raquel se fue a prepararse por que también había quedado con Zayn, se la veía tan entusiasmada, se puso guapísima:
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Melissa: Caray, parece que ese chico te gusta de verdad, ¿no? –le sonreí mientras ella se hacía una coleta delante del espejo del baño-
Raquel: ¿Por qué lo dices? –rió y se sonrojó-
Melissa: Porque te estás poniendo muy guapa para hacer solo un trabajo… -reí-
Raquel: Es guapo, pero ahora mismo solo somos amigos, no creo que pase nada entre nosotros, simplemente nos llevamos bien, además, es la primera vez que vamos a quedar, ni siquiera es una cita… -intentó quitar importancia al asunto- o eso creo… solo vamos a cenar juntos después de acabar el trabajo, nada más…
Melissa: ¿Sabes que te digo? –ella se giró para mirarme-
Raquel: ¿Qué? –dijo intrigada-
Melissa: Que deberías aprovecharlo, se nota que te gustó desde que lo vistes entrar, lo noté conforme me lo ibas contando, te conozco demasiado y sé que ese chico no te da igual, que te importa aunque solo sea un poquito. No será la última vez que quedes con él, seguramente tú también le llames la atención a él –sonreí, provocando una risilla tonta en ella y se puso aún más colorada-
Raquel: Boba… la verdad es que no sé que tiene ese dichoso Malik… pero me encanta… -dijo sonriendo- incluso hace que me olvide de Sergio cuando hablo con él… -me sonrió tierna-
Melissa: Omm… -la abracé- eso es genial cariño –sonreí- espero que todo salga bien, ese chico merece la pena.
Raquel: *suspiro* Si… -teminó de hacerse la raya del ojo y justo sonó el timbre- Bueno cielo, me voy ya, ese tiene que ser Zayn, ¿voy bien? –dijo algo nerviosa-
Melissa: Estupenda –ella amplió su sonrisa y me abrazó- y tranquila verás como todo sale bien.
Raquel: Gracias! Adiós –besó mi mejilla y se fue corriendo hacia la puerta-
Escuché como abrió y se quedaron los dos callados, estaba claro que los dos estaban igual de nerviosos, hasta que él decidió de hablar, se dieron dos besos y la puerta se cerró. “Suerte pequeña” susurré.

Media hora después:

Harry quedó en que pasaría a recogerme a las 5:30, iríamos a su casa, haríamos el maldito trabajo y por fin me iba a librar de tener que estar aguantándolo por más tiempo.
Mel: Agggg!! …. No lo aguanto!! –dije gritando delante del espejo cuando recordé lo que dijo esta mañana… ¿Cómo puede ser tan creído?...¬¬ si creía que yo iba a ser como esas niñatas que van baboseando por él cada vez que pasa, y pone esa ridícula sonrisa perfecta en plan: si chicas ya estoy aquí… ¡¡¡que espere sentado y con un crucigrama porque se va a cansar!!! ¬¬
No tenía ganas de arreglarme, total… para lo que iba a hacer… asique me puse esto:
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Terminé de meter la carpeta, el estuche y el libro de historia en el bolso. Me hice una coleta pero no me gustaba como me quedaba… hoy parecía que nada me salía bien… ¡qué asco!...me deje el pelo suelto y justo cuando me estaba poniendo los zapatos sonó el timbre.
Melissa: -Abriendo la puerta y mirando el reloj de muñeca-Y media, que puntual… -dije con pocas ganas de verle-
Harry: Por supuesto rubia, no podía hacer esperar a una chica tan preciosa como tú, aunque solo sea para hacer un estúpido trabajo de clase –dijo con retintín y sonrió como siempre hace…con esa sonrisa “cautivadora” ¬¬ -
Melissa: Si pues será mejor que nos demos prisa para terminar el “estúpido” trabajo señorito, asique venga… -dije empujándolo para que saliéramos de casa-
Harry: Pero rubiaaa!! Así no se trata a los invitados… -dijo girándose y quedando frente a mí mirándome fijamente a los ojos-
Melissa: -¿Por qué narices me miraba así?- Para empezar… -dije apartándome de él y cerrando la puerta con llave- no eres mi invitado… y lo segundo…
Harry: Oh vamos rubia! Solo iba a pedirte un poco de agua! –dijo interrumpiéndome y cogiéndome por el hombro-
Melissa: -Miré con mirada fulminante su mano que ahora estaba en mi hombro y la aparté de un manotazo- NO ME LLAMES RUBIA, STYLES! –le dije cabreada y me dirigí hacia no sé dónde ya que íbamos a ir en su coche y ni siquiera sabía dónde estaba-
Harry: Está bien rub…digo…em… ¿y cómo te llamo entonces? –dijo siguiéndome-
Melissa: Por mi nombre! Qué bien bonito es! –dije girándome para mirarlo, la verdad es que había conseguido intimidarlo-
Harry: Okey!... –dijo con un gesto conforme, en ese momento me sentí como si hubiese logrado controlar al indomable Harry Styles- por supuesto que una chica bonita como tú debía tener un nombre bonito… –dijo volviendo a la carga…este chico no se rendía…ains…pues no lo iba a conseguir!- ¿Melani verdad? –dijo sonriendo apoyando los brazos en el techo del coche de su lado mientras yo estaba mirándolo por encima de este desde mi lado-
Melissa: ¡¿Cómo?!... –dije entrecerrando los ojos, ¿me estaba desafiando o lo estaba diciendo en serio?-
Harry: Jajajajajajajaja es broma rubia! Digo…Mel, me aprendí tu nombre el primer día que ví que estarías en mi clase;) –dijo sonriendo- y pensé: esa pedazo de rubia tiene que ser mía!
Melissa: -rodé los ojos- Con lo de que te aprendiste mi nombre habías quedado bien… podrías a verte ahorrado detalles… -dije montándome en su coche, pero pensé en si realmente Harry se fijó en mí el primer día que me vió-
Nos montamos en su coche, arrancó y aceleró. La poca gente que había por la calle miraba el coche con cara de mala leche por el acelerón. Eran calles demasiado tranquilas como para que un niñato pijo llegase con su Audi a estropear la calma-
Melissa: ¿No podrías ir más despacio?! La gente te mira mal! –le dije mirándolo mal yo también-
Harry: Tranquila! Tú solo relájate y déjate llevar, siente como ruge el motor –dijo acelerando aún más y demostrando que efectivamente el motor rugía fuerte, lo que a mí ya me estaba comenzando a dar miedo. En menos de un minuto habíamos pasado de estar aparcados en la puerta de mi casa a estar ya en la carretera principal que se dirigía al otro lado de la ciudad, a la “zona nueva“ como le llamamos aquí, la zona llena de grandiosos edificios y lujosas mansiones y en donde estaban las tiendas de ropa cara, la zona “pija” de la ciudad, y parecía ser que allí era hacia donde nos dirigíamos, como no iba a ser menos, el señorito Harry Styles tenía que vivir en una de esas lujosas mansiones-
Melissa: ¡¡Harry!! ¡¡No vayas tan rápido!! –dije abrazando con fuerza mi bolso, ni siquiera podía separar la cabeza del asiento-
Harry me miró por unos segundos con una sonrisa malvada en su cara, pero me hizo caso y fue reduciendo la velocidad. Al fin entramos en ese amasijo de edificios altísimos y tras unos breves minutos nos encontrábamos delante de una gran casa/mansión. Aparcó delante de la cochera y nos bajamos.
Melissa: Guau! Es preciosa! –dije boquiabierta admirándola. Era así:
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Narra Harry:

Había logrado el primer paso, impresionarla con mi maravillosa casa, y el viaje en el coche tampoco fue nada mal, iba asustada pero en el fondo se que estaba sintiendo la adrenalina del motor.
Harry: Adelante madame –dije abriendo la puerta y haciéndome a un lado para dejarla entrar-
Melissa: Gracias… -dijo entrando mientras seguía mirándolo todo con sus hermosos ojos- ¿vives solo?
Harry: No, pero como si lo estuviese… -dije entrando al salón y sentándome en el sofá-
Melissa: ¿Por qué dices eso? –dijo sentándose en el sillón-
Harry: Bah…no tiene importancia…no quiero aburrirte… -dije cruzándome de brazos y mirando hacia otro lado-
Melissa: Como quieras… yo solo quería conocerte un poco más, ya que estaremos, por desgracia, todo el curso sentados juntos y, posiblemente, haciendo trabajos, quería saber quién el famoso Harry Styles que se esconde bajo una sonrisa linda y unos rizos alocados –dijo obligándome a que la mirara de nuevo y a reír inevitablemente por esto último-
Harry: ¿Estás segura?... creía que simplemente ibas a querer terminar el “estúpido trabajo” sin conocer realmente quién es tu compañero –dije apoyando los codos en mis rodillas y la cabeza entre mis manos, despegando la espalda del sofá-
Melissa: Ni que tuviera que tenerte miedo… -dijo cruzándose de brazos irónica-
Harry: O tal vez si muñeca… -dije sonriendo pícaro. Esto se estaba empezando a poner interesante-
Melissa: Melissa –dijo firme-
Harry: Bonito nombre –dije sin entender por qué me lo decía-
Melissa: No no… digo que me llames Melissa, no rubia, ni muñeca, ni ninguno de tus piropos que le sueltas a todas Styles…
Harry: ¿Estás celosa Mel? –dije triunfante- ¿puedo llamarte Mel no?
Melissa: Mel solo me llaman mis amigas, y no… no estoy celosa, eso es lo que tú quisieras Harry –dijo fría, pero con un tono de querer seguirme el juego-
Harry: ¿Y yo no soy tu amigo? –dije poniendo carita de pena, esta cara solía funcionarme con aquellas chicas que se resistían un poco, aunque en verdad algo me decía que con Mel no me iba a funcionar-
Melissa: De momento solo estás en el rango de compañero de clase con el que tengo que hacer un trabajo si queremos aprobar, para llegar a amigo te lo tendrás que ganar –dijo desafiante-
Harry: Esto me empieza a interesar… -dije acomodándome- ¿y qué tengo que hacer para ganármelo?, porque…se me ocurren muchas cosas… –dije humedeciendo mis labios-
Melissa: De momento céntrate en acabar el trabajo, después ya hablaremos… -dijo levantándose y sacando sus cosas del bolso-
Harry: Está bien señorita… esperaré ansioso ese momento –le guiñé un ojo y esta se rió negando con la cabeza, la tarde no había empezado bien pero parecía que ahora iba mejorando…bien!:D –
Fui a por algo de beber a la cocina y en el frigorífico me encontré una nota de Nana, nuestra criada, que había cuidado siempre de mí desde que tengo uso de razón, era como mi segunda madre, le tenía un especial cariño a esa mujer, la mayoría de los que me conocen solo del instituto piensan que es mi verdadera madre, ya que es ella la que se encarga de venir a por mis notas, acudir cuando la llama el director si me meto en algún lío (aunque procuro no hacerlo nunca, pero es inevitable teniendo a Louis Tomlinson como amigo…), y será la que acuda a mi graduación de este año… En la nota ponía que había tenido que salir a cuidar de su madre por unas horas (sabía que Melissa vendría a casa a hacer un trabajo asique en parte hizo lo posible por dejarnos “a solas”) y como no… dejó la cena en el horno para dos: pollo relleno con salsa y patatas- mmmm…una delicia! –pensé mientras me relamía-
Cuando llegué de nuevo al salón me encontré a Mel sentada en la mesa con el libro de Historia abierto y subrayando lo más importante para poner en el trabajo, tenía sus gafitas puestas que la hacían más mona aún de lo que ya era, con el pelo hacia un lado dejando ver su blaquito cuello… que no diré lo que me daban ganas de hacer… no sé que me estaba pasando... pero esta mujer me estaba llegando a alterar bastante… Ni si quiera se percató de que entré hasta que le dejé un refresco al lado.
Melissa: ¿Ya estás aquí?, ni me había dado cuenta de que habías entrado –dijo abriendo su refresco y dando un trago- por cierto gracias por el refresco.
Harry: De nada bonita;) –dije sonriendo y sentándome a su lado- Bien, ¿por dónde empezamos? –dije sacando el portátil de mi mochila y colocándolo sobre la mesa, lo encendí y mientras esperábamos a que se encendiera yo también abrí mi refresco y bebí un trago-
-Cuando se encendió Mel se quedó fijamente mirando mi fondo de pantalla, en él aparecía yo de pequeño con mis padres, mi madre sonriente me tenía en brazos y yo la tenía abrazada por el cuello, mi padre abrazaba a mi madre por la cintura mientras me daba un beso en el moflete. Corriendo abrí el programa con el que íbamos a hacer el trabajo; no quería que Mel me sacara el tema de mis padres… odiaba hablar de ellos, aunque algo me decía que tarde o temprano acabaríamos sacando el tema…
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Narra Melissa:

Cuando Harry encendió el ordenador lo vi un poco nervioso, abrió corriendo el programa con el que haríamos el trabajo, como si no quisiera que viese algo en concreto, será tal vez que le molestó que viera su fondo de pantalla, quizás le daba vergüenza que viera como era el pequeño Harry, aunque no puedo negar que era muy mono. Vi que se puso bastante serio así que me ahorre las preguntas, quizá no quería hablar de sus padres, o eso es lo que me dio a entender con ese gesto y cuando me contesto que es como si siempre viviese solo… en ese momento me temí lo peor… ¿estarían muertos?... se me formó un nudo en la garganta de pensarlo, lo miré y seguía serio, escribiendo el título del tema en el programa.
Harry: ¿Qué pasa? –se dio cuenta que lo estaba mirando-
Melissa: Oh… no… nada… -empecé a pasar las páginas sin saber que hacer-
Harry: Me estabas mirando –sonrió-
Melissa: No… -disimulé-
Harry: Si, lo estabas haciendo ¡te he pillado! –su sonrisa se amplió-
Melissa: Simplemente estaba mirando que… te va a dar calor con esa camisa… aquí no es que haga frío precisamente… -me excusé-
Harry: Llevas razón… -dijo de pronto. Se levantó de la silla y se quitó la camisa, iba así: http://www.polyvore.com/sin_t%C3%ADtulo/set?id=52834347&.locale=es
Comenzamos a hacer el trabajo, mientras yo le dictaba él lo iba escribiendo en el ordenador. Sin darnos cuenta se nos echó encima las 8 de la tarde. Para haber estado toda una tarde haciendo un “aburrido trabajo” con el odioso de Harry Styles no estuvo mal, he de reconocer que hubo momentos en los que nos reíamos, incluso llegamos a rozar nuestras manos sin querer, cosa que me alteraba, y él reía satisfecho, ¡que coraje!
Harry: ¡Dios no puedo más! –dijo echando la cabeza hacia atrás- es interminable…
Melissa: Si es odioso… -apoyé la cabeza en el libro; yo también estaba harta-
De pronto noté como me acarició el pelo y su mano bajó hasta mi espalda, levanté la cabeza corriendo y lo miré. Estaba con su brazo derecho sobre la mesa y su mano sujetaba su cabeza, mientras que con la mano izquierda me acariciaba el pelo. Sonreía tontamente.
Melissa: ¿Qu-que haces?... –sin saber por qué me empecé a poner nerviosa. Creo que fue su mirada la culpable, sus ojos me intimidaban, eran tan grandes-
Harry: Me gusta tu pelo princesa –sonrió mostrando sus blancos dientes-
Melissa: Gracias… pero por favor… no me llames princesa… -cualquiera que lo escuchara pensaría que somos pareja, y ni si quiera me he besado con él-
En ese momento imaginé como podía ser un beso de sus labios… ¿¡pero qué estoy diciendo!? No! No! Y no!...
Harry: Admito que no soy el chico más inteligente del mundo –lo miré extrañada, ¿qué decía este ahora?- pero cuando de verdad me gusta una chica… la trato como a una verdadera princesa –sonrió cogiendo mi cara entre sus manos y acercándose rápido-
Me quedé inmóvil analizando su frase… ¿qué había querido decir con eso?... y ¿qué se supone que iba a hacer? ¿Besarme?... ¡aún no estaba preparada para eso!...


¿Qué pasará aquí? ¿Habrá entre Mel y Harry? ¿Y a Zayn y Raquel, cómo les irá?... :face:
Más en el próximo capítulo, espero que les gustes ;) ATT: Mrs Malik :(L):

Capítulo 10: Parte II

Gracias a dios la puerta se abrió y se separó rápido… Apenas lo tuve a escasos milímetros de mis labios, incluso pude notar su respiración chocar en mi boca. Mi respiración que estaba acelerada comenzó a relajarse poco a poco.
-----: Hola Harold! –se oyó una voz femenina- ya estoy aquí –entró en el salón y nos miró con los ojos abiertos- Yo… esto… espero no haber interrumpido nada… -dijo mirando hacia el suelo-
Harry: *suspiró* -No… tranquila Nana –se levantó y fue hacia ella- Mel esta es Nana, nuestra criada (era así: http://2.bp.blogspot.com/__dG3xrd5fCg/TBFwox_rs1I/AAAAAAAAAB0/71ZQGaq1iik/s1600/servicio-de-mucama.jpg )
Melissa: H-ho-hola… -dije tímida. En verdad, no sé por qué, me alivió saber que Nana era su criada, pensé que sería uno de sus ligues, o tal vez su madre… no me hubiese hecho gracia que nos hubiesen pillado besándonos… aunque… un momento… ¿me hubiera dejado que me besara?... hay dios… Mel…-
Nana: Hola querida –sonrió amable-¿Qué tal el trabajo? –se giró para preguntarle a Harry-
Harry: Bien, aunque aún nos queda bastante… -respondió pesaroso-
Nana: Entonces no molesto más –sonrió- si necesitáis algo me lo decís –y se fue a la cocina-
Harry volvió a sentarse a mi lado, y yo no sabía qué hacer.
Melissa: Bueno… es tarde, será mejor que me vaya ya… -dije sin mirarle-
Harry: Pero… ¿y el trabajo?, aún no hemos acabado –se levantó de la silla-
Melissa: No pasa nada, podemos acabarlo otro día –sonreí y guardé las cosas en el bolso-
Harry: Bueno quédate aunque sea a cenar, Nana había dejado la cena hecha, y no creo que le siente bien que te vayas sin probar su plato… -dijo cruzándose de brazos-
Melissa: Harry no quiero ser una molestia… mejor me voy…
Harry: ¡No eres una molestia! Te lo estoy diciendo en serio, va Mel quédate –me suplicó- además… ¿no te irás andando ahora no?
Melissa: Claro que no, al igual que me has traído me vas a llevar a mi casa sana y salva –sonreí- ¿no ibas a tratarme como a una reina? –lo recordé-
Harry: ¡Pues claro!, no pensarías que te iba a dejar ir sola, ¿no? –me contestó firme-
Melissa: No esperaba menos de ti Styles, se supone que eres todo un caballero, ¿no? –le estaba desafiando… no me lo podía creer-
Harry: Claro que sí, por eso, los caballeros invitan a sus princesas a cenar –siguió insistiendo-
Nana: Querida ¿no te quedas a cenar? –dijo triste, ¿Cuánto llevaba ahí?-
Melissa: Emm… lo siento… es que…
Harry: ¡Claro que se queda a cenar! –me abrazó con un brazo con una sonrisa de oreja a oreja-
Nana: ¡Estupendo! Prepararé la mesa –se fue cantando-
Melissa: No… esto… ¡Harry! –lo miré mal. Él rió-
Harry: Tranquila, te prometo que en cuanto terminemos de cenar te llevaré a casa –sonrió conforme, había logrado lo que quería, maldito mimado…- ahora vengo –desapareció por la puerta y me senté a esperarlo-
Podía escuchar perfectamente a Nana en la cocina cantando, un olorcito muy rico a comida me llegaba. Sonreí inconsciente, me recordaba cuando estaba en casa y mamá preparaba la cena, también solía cantar, la echaba de menos. Me levanté para mirar una foto que había en la pared, era de Harry cuando hizo la comunión, tenía la misma carita de pícaro, seguro que ya de pequeño era todo un ligón, pensé. Al otro lado había otra foto de una chica, era guapísima y se parecía bastante a Harry, supuse que sería su hermana. En un mueble que había enfrente de la lujosa mesa en la que habíamos estado trabajando había pequeñas fotos, en una salía Nana de más joven, sonreía y tenía en brazos a un bebé, pero no sabía si era Harry. Otra salía una mujer muy guapa, se parecía a la hermana de Harry, y en sus rodillas había una niña pequeña con ricitos, era muy graciosa; parecían ser la madre y la hermana de Harry. Otra foto era la que Harry tenía de fondo de pantalla en su ordenador, y pude confirmar que eran sus padres, ya que vi que la madre estaba embarazada.
------: ¿Te gusta verme de pequeño? –una voz ronca sonó a mis espaldas y me asusté-
Melissa: Yo…esto… lo siento… -me puse colorada de la vergüenza-
Harry: Era realmente guapo ¿a que sí? –dijo orgulloso-
Melissa: Cómo te gusta echarte flores… -rodé los ojos-
Harry: Jajajaja ya que tú aún no te has atrevido a decírmelo… me lo tendré que decir yo solo… -puso cara de pena-
Melissa: Pues espera sentado Harry, no vas a obtener piropos de mi boca así porque sí… -sonreí falsa-
Harry: ¿Cuándo te caeré bien?
Melissa: ¿Cómo? Oh vamos… Harry… no me caes mal, es sólo que…
Harry: ¿Qué? –se acercó a mí-
Melissa: Que…que… -la puerta de la calle se abrió y se oyó la voz de una chica-
------: Holaa!! ¿Harry? ¿Nana?
Nana: Estoy en la cocina cielo
Harry: Estoy en el salón enana –dijo sin dejar de mirarme-
La chica llegó al salón, era la de la foto de comunión, la hermana de Harry. Llevaba el pelo suelto, a mitad de la espalda y rizado como el de Harry con un lacito azul, sus ojos verdes llamaban muchísimo la atención, se notaba que eran hermanos. Iba muy mona vestida:
http://www.polyvore.com/cgi/set?id=53398393&.locale=es
-----: Oh! Hola! –sonrió- tú eres esa chica qué estaba el otro día con mi hermano… ¿cómo era?
Harry: Melissa… -dijo rápido-
------: ¡Eso! Mel –sonrió ampliamente- encantada, yo soy Cynthia, la hermana pequeña pero encantadora de este mendrugo –me dio la mano-
Melissa: Encantada –reí, estaba claro que estos dos se decían los piropos a ellos mismos-
Harry: Oye! ¿Cómo que mendrugo?, ¿ya no soy tu “encantador hermano”? –se puso en posición de jarra-
Cynthia: Vamos hermanito, no te cabrees, pero… ya no eres tan encantador cómo antes, admítelo te haces viejo… y feo –le sacó la lengua y se fue corriendo riéndose-
Harry: ¡Te vas a enterar cuando te pille! –yo reí- No le hagas caso, es tonta…
Cynthia: ¡Te he oído Harold! –gritó-
Nana nos llamó para cenar, todo estaba delicioso, nos reímos muchísimo, sobre todo con las peleillas de Harry y Cynthia. Nana era muy amable, se notaba que los quería como si fuesen sus propios hijos. Me sonsacó de todo, pero en ningún momento me lo tomé a mal, solo quería saber cómo era, y supongo que llegó a pensar que Harry y yo éramos… novios… por eso quería asegurarse si yo merecía la pena para él; pensar en ello me provocaba algo dentro de mí, era una sensación rara, aún no entendía como una persona a la que no soportaba, a veces podía causarme arrebatos de robarle un beso… ¿qué me estaba pasando?... La cena acabó y Harry me miró conforme, lo pillé mirándome embobado mientras hablaba con su hermana, la cual era muy simpática y graciosa, me cayó genial.
Melissa: Bueno… -miré a Harry que seguía mirándome con una sonrisa en sus labios- será mejor que me vaya ya
Cynthia: ¿Ya?... jopee… quería enseñarte fotos de mi hermano de pequeño desnudo… -dijo con voz de pena, yo reí-
Harry: ¡Oye! ¡Deja de enseñarles esas fotos a todo el mundo! –la regañó y ella rió satisfecha-
Melissa: Lo siento Cyn, otro día vendré y me las podrás enseñar, ¿vale? –Harry me miró incrédulo y las dos reímos cómplices-
Harry: Muy bonito… ¿conoces a mi hermana de menos tiempo que a mí y ya te haces su aliada y a mí ni siquiera me llamas amigo? –se cruzó de brazos-
Melissa: Las mujeres siempre nos hacemos amigas Harry, los chicos sois muy complicados de entender… -dije levantándome-
Harry: Vosotras sí que sois raritas… -volví a reir y el conmigo. Cogió las llaves del coche y se despidió de Nana-
Nana: Hasta otro día querida –me dio dos besos-
Melissa: Gracias por la cena estaba deliciosa –sonreí y ella aún más-
Nana: Muchísimas gracias cariño. Harry ve con cuidado que ya esta tarde ¿eh? –le dio un beso sonoro en el moflete-
Harry: Si, pero deja de darme esos besos, sabes que me dan mucho coraje…
Cynthia: Y sobre todo cuando hay chicas guapas delante ¿verdad Hazza? –reí-
Harry: ¿Cuándo aprenderás a callarte ese piquito de oro enana? –la miró mal y ella le sacó la lengua-
Melissa: Hasta luego Cyn –me despedí de ella-
Cynthia: Adiós Mel! Vuelve pronto! –yo asentí y Harry y yo salimos a la calle-
Melissa: Caray, ahora sí que hace frío… -me froté los brazos. De pronto noté que me puso su chaqueta y estaba calentita. Lo miré e iba en manga corta y corría hacia el coche. Fue un gesto que me enterneció y me apresuré yo también en llegar al coche-

Dentro del coche:

Harry: Buurrrr… ¡que frío! –dijo frotándose las manos-
Melissa: Gracias… -sonreí y le devolví la chaqueta- ¿cómo se te ocurre salir en manga corta loco?
Harry: ¿Ibas calentita? –me preguntó poniéndose la chaqueta-
Melissa: Si… -afirmé con la cabeza-
Harry: Pues entonces ya está, no te preocupes por mí, los chicos somos fuertes y soportamos todo –sonrió y arrancó. Yo negué con la cabeza y reí-
Se hizo el silencio por un rato pero era algo cómodo. La diferencia de hacía unas horas cuando veníamos para su casa a ahora… era grandísima. Ahora iba tranquilo, sin acelerar, incluso iba más lento de lo normal, pero me gustaba ir así, viendo el paisaje y… teniéndolo al lado… Su comportamiento había cambiado, ahora era tierno y dulce, no un creído e insolente, ¿por qué? ¿por qué había cambiado de esa manera?... ¿este era el verdadero Harry?... Sin darme cuenta me quedé dormida.
Harry: Mel… eh… ya hemos llegado… -me susurró-
Melissa: *mmfgg…*-abrí los ojos y vi unos grandes ojos verdes mirándome fijamente- Aahh! ¿me he…quedado dormida? –él sonrió-
Harry: Si, se te veía tan mona ^^… –me puse colorada-
Melissa: ¡Qué vergüenza! –se rió-
Harry: Bueno… ya hemos llegado, me daba lástima despertarte, pero no creo que te hiciese gracia despertar en mi coche… -bromeó-
Melissa: Jajaja no mucha… -reímos. Los dos nos miramos, me perdí en su mirada, y su sonrisa era muy cálida-…Bueno, gracias por traerme Harry, hasta mañana… –sonreí y abrí la puerta del coche para salir-
Harry: Espera… –me agarró del brazo y me giré hacia él-
Entonces… pasó algo que no me esperaba aún… me… besó… Me quedé inmóvil… pero saboreé sus labios. A los pocos segundos se separó… Fue un beso corto, pero estaba segura de que no se me iba a olvidar fácilmente…
Harry: Te dije que te robaría un beso rápido… –sonrió pícaro muy cerca de mi boca-
En ese momento me entró rabia por el cuerpo, volvía a ser el mismo Harry de esta mañana, el insolente, y yo por estúpida me dejé caer en sus redes al final, y consiguió robarme el dichoso beso. Agarré mi bolso y salí del coche lo más rápido posible.
Harry: Mel! Espera… ¿por qué te vas? ¿qué he dicho de malo?…. –dijo desde dentro-
Melissa: Muy bien cerebrito… al final te tenías que dejar cautivar por esa sonrisa ¿verdad?… ¿no podías seguir odiándolo cómo al principio? –me dije a mí misma mientras abría la puerta y entraba en casa. Cerré la puerta con rabia y me dirigí al salón allí estaba Raquel, parecía muy contenta, pero le cambió la cara cuando me vio aparecer de mal humor.
Raquel: Cariño, ¿qué ha pasado?... –me preguntó preocupada-

Capítulo 11: Parte I

Narra Raquel:

Estaba muy nerviosa, había quedado con Zayn simplemente para hacer el trabajo… bueno y para cenar juntos… ni siquiera se puede considerar como una cita… ¿o sí? ¡ay dios! Solo con pensarlo me entraban unas cosquillas por la barriga que…buff… ¿cómo podía provocarme tantas emociones si tan solo lo conocía de una semana?... es verdad que nos llevábamos muy bien, y el estar sentados juntos en clase ayudaba más a que lo fuese conociendo poco a poco, aunque aún había muchísimas cosas que no sabía de él parecía que lo conociese a la perfección. No sé qué tenía, había algo en él que me encantaba, dios… es guapísimo… No podía dejar de pensar en él, y en la tarde que nos esperaba juntos. Incluso llegaba a olvidarme de Sergio cuando hablaba con él, es decir, últimamente tenía más en la cabeza a Zayn que a Sergio… sobre todo después de ver una foto de su tuenti en la que salía abrazado a… como llamarla… “zorra de instituto”… si, la tía más guarra que había en el instituto, y yo sabía a la perfección que ella siempre había ido detrás de él, y él sabía que yo no la soportaba, pero aún así siempre estaban hablando. Sabía que lo había hecho aposta porque le dio rabia que lo dejara y no me extrañaría que se hubiesen liado, Sergio era así de simple, si sabía que algo me daba rabia lo acababa haciendo si nos cabreábamos. Obviamente me cabreé muchísimo y comencé a pasar de él, y para que negarlo, Zayn fue una gran ayuda, fue como una ayuda caída del cielo… y que buena ayuda… grrr… No sabía que ponerme, parecía que todo me quedaba mal si pensaba en que él iba a verme, menos mal que Mel me tranquilizó diciéndome que con esto iba perfecta: http://www.polyvore.com/sin_t%C3%ADtulo/set?id=52832606&.locale=es
Fui al baño a prepararme y mientras me hacía una coleta Mel me aconsejaba:
Melissa: Caray, parece que ese chico te gusta de verdad, ¿no? –me sonrió pícara-
Raquel: ¿Por qué lo dices? –reí nerviosa-
Melissa: Porque te estás poniendo muy guapa para hacer solo un trabajo… -reí-
Raquel: Es guapo, pero ahora mismo solo somos amigos, no creo que pase nada entre nosotros, simplemente nos llevamos bien, además, es la primera vez que vamos a quedar, ni siquiera es una cita… -intenté quitar importancia al asunto- o eso creo… solo vamos a cenar juntos después de acabar el trabajo, nada más…
Melissa: ¿Sabes que te digo? –me giré para mirarla-
Raquel: ¿Qué? –dije intrigada. Siempre que decía eso era para dar un bueno consejo-
Melissa: Que deberías aprovecharlo, se nota que te gustó desde que lo vistes entrar, lo noté conforme me lo ibas contando, te conozco demasiado y sé que ese chico no te da igual, que te importa aunque solo sea un poquito –me vino a la cabeza la imagen de Zayn entrando en clase el primer día, sentándose a mi lado y quitándose la gorra, fue entonces cuando vi su precioso rostro- No será la última vez que quedes con él, seguramente tú también le llames la atención a él –reí nerviosa y noté como mis mejillas ardían de imaginar que yo también le gustara-
Raquel: Boba… la verdad es que no sé que tiene ese dichoso Malik… pero me encanta… incluso hace que me olvide de Sergio cuando hablo con él… -le conté a Mel lo de la foto, ya que a ella también le caía mal la tipeja esa y no le gustó nada la actitud de Segio-
Melissa: Omm… -me abrazó- eso es genial cariño, espero que todo salga bien, ese chico merece la pena.
Raquel: *suspiré* Si… -teminé de hacerme la raya del ojo y me eché colonia. Justo sonó el timbre- Bueno cielo, me voy ya, ese tiene que ser Zayn, ¿voy bien? –dije nerviosa-
Melissa: Estupenda –sonreí y la abracé- y tranquila verás como todo sale bien.
Raquel: Gracias! Adiós –le di un beso en la mejilla y fui corriendo hacia la puerta-
Me miré en el espejo de la entrada antes de abrir, quería estar perfecta (aunque era imposible estarlo para Zayn Malik, él ya era la perfección en persona) Abrí y me quedé sin respiración, iba guapísimo: http://www.polyvore.com/cgi/set?.locale=es&id=53384302
No fui capaz de mediar palabra, pero él tampoco sabía qué decir, nos quedamos callados por unos segundos.
Zayn: Hola… -sonrió con una sonrisa que me acabó de matar-
Raquel: Ho-hola… -sonreí y nos dimos dos besos. El roce de su piel recién afeitada y con ese olor a colonia me volvía loca-
Cerré la puerta y nos fuimos. Salimos a la calle y vi una camioneta roja aparcada, era enorme pero preciosa, tenía un color muy llamativo y brillante. Era así: http://www.google.es/imgres?q=camioneta+roja&um=1&hl=es&sa=N&rlz=1C1RNKA_enES486ES486&biw=1280&bih=867&tbm=isch&tbnid=2j42wlNjg-s9dM:&imgrefurl=http://www.fondosgratis.mx/items/autos/camionetas/9215_chevrolet-silverado/&docid=mGCCVp0jwwhFHM&imgurl=http://www.fondosgratis.mx/archivos/temp/9215/400_1268707136_silveradode11280.jpg&w=400&h=300&ei=npEEUP-4B4Kl0QWZyJW0Bw&zoom=1&iact=hc&vpx=411&vpy=230&dur=228&hovh=194&hovw=259&tx=136&ty=119&sig=110212057515251514767&page=1&tbnh=157&tbnw=209&start=0&ndsp=20&ved=1t:429,r:6,s:0,i:91
Raquel: ¡Caray! ¿De quién será esta camioneta? ¡Es preciosa! –dije boquiabierta-
Zayn: Jajajaja, ¿te gusta? –me miró sonriente-
Raquel: ¡Sí! ¿A ti no? –se dirigió hacia la camioneta y la abrió-
Zayn: Supongo que sí jajaja –¿pero cómo soy tan tonta?, estaba claro que tenía que ser suya-
Raquel: Cómo no iba a ser tuya… -dije montándome en el asiento del copiloto-
Zayn: ¿Por qué? –rió y arrancó, el sonido del motor combinado con su risa me aceleraron la respiración-
Raquel: Po-po-po-po-porque… no suelen verse este tipo de cochazos por aquí… -“Raquel tranquilízate, se te está notando que estás nerviosa, no te dejes intimidar, eso a los tíos no les gusta”, me dije a mí misma-
Zayn: En realidad es de mi padre, pero me la ha dejado prestada por un tiempo –miró al frente y se puso en marcha-
Nos dirigíamos a su piso, ahora que lo pensaba… íbamos a estar solos en su casa… tragué saliva e intenté no pensar en el tema “solos”. Miré por la ventanilla pero el paisaje pasaba demasiado rápido y me mareaba. Miré al frente y mis ojos instintivamente se giraron para mirarlo, era tan guapo, se le veía tan... sexy conduciendo, con la mirada fija en la carretera, tan serio, y esa sensualidad típica suya. Se dio cuenta que lo estaba mirando y me miró, yo bajé la mirada corriendo pero noté que se dibujó una sonrisa en sus labios. Encendió la radio y empezó a sonar una canción de Bruno Mars: https://www.youtube.com/watch?v=LjhCEhWiKXk , él empezó a cantarla y me quedé boquiabierta, ¡cantaba genial!, era lo único que le faltaba para terminar de impresionarme… No quería interrumpirlo, le estaba quedando perfecta, y era como si me la estuviese dedicando, estaba muy concentrado cantándola. Simplemente lo admiré como una fan embobada con su cantante favorito. Cuando la canción acabó me miró y sonrió.
Zayn: Lo siento, me encanta esa canción, tenía que cantarla… –rió, era tan lindo cuando reía-
Raquel: Cantas genial –dije sinceramente- no sabía esa faceta tuya Malik… me has dejado alucinada –reí. Solía llamarle por su apellido aunque quedaba muy formal-
Zayn: ¿Enserio te ha gustado? –dijo sonriendo pero sin quitar la vista de la carretera-
Raquel: ¿A caso lo dudas? –me miró y sonrió-
Zayn: Gracias pequeña… -desde que comenzamos a hablar más me solía llamar “pequeña”, ya que le llegaba justo por debajo de los hombros, y siempre se andaba metiendo conmigo por eso, pero siempre de broma-
Cuando quise darme cuenta ya estaba aparcando frente a una preciosa casa:
http://www.google.es/imgres?q=casas+bonitas&um=1&hl=es&sa=N&rlz=1R2NCLR_esES488&biw=1280&bih=780&tbm=isch&tbnid=Q3zlOpPIss-GQM:&imgrefurl=http://lasfachadas.blogspot.com/2010/10/fachadas-de-casas-bonitas-y-modernas.html&docid=rQQlkJ0AwdXVQM&imgurl=http://3.bp.blogspot.com/_KZYjBtEY_rU/TMyF9TRRr1I/AAAAAAAAFXQ/ia1div0mLpU/s640/fachadas-de-casas-bonitas.jpg&w=447&h=600&ei=Q4wFUMWdJ9Oa0QXcmsHSBw&zoom=1&iact=hc&vpx=384&vpy=401&dur=522&hovh=260&hovw=194&tx=131&ty=181&sig=106573350661799827559&page=1&tbnh=135&tbnw=109&start=0&ndsp=24&ved=1t:429,r:19,s:0,i:198
Raquel: ¿Esta es tu casa? –dije si poder creérmelo, ¿cómo un crío de 19 años podía tener una pedazo de casa así para él solo?-
Zayn: Si, es obra de mi padre que es arquitecto, así que es como si fuese un regalo –abrió la puerta y me dejó entrar-
Era increíble, todo era muy moderno, el suelo era de parqué y brillaba muchísimo, me podía ver reflejada en él. Olía a limpio y a nuevo.
Zayn: Menos mal que tengo a Boris, si no, no sé qué haría, todo esto es demasiado para mí –dijo mientras se sentaba en uno de los grandes sofás del salón-
Raquel: ¿Boris es el que se encarga de cuidar toda la casa? –era imposible que una persona diera abasto para limpiar toda la casa-
Zayn: Si, es genial, la defiende de maravilla. Una vez intentaron entrar a robar y salió corriendo detrás del ladrón y le mordió, fue increíble –dijo orgulloso-
Raquel: ¿Tienes un criado que ataca a ladrones? –abrí los ojos como platos. ¿¡Qué tipo de criados tenía este chico!?-
Zayn: Boris no es un criado –se empezó a reír y se dirigió a una gran puerta de cristal que daba a la parte trasera de la casa- es un perro –abrió y lo dejó entrar. Era así: http://www.google.es/imgres?q=boris+perro+de+zayn&um=1&hl=es&rlz=1C1RNKA_enES486ES486&biw=1280&bih=923&tbm=isch&tbnid=ZCe4OJFmJYNp-M:&imgrefurl=https://es-es.facebook.com/notes/one-direction-costa-rica/zayn/206933522683086&docid=aldwm33M3Y-7jM&itg=1&imgurl=http://sphotos.xx.fbcdn.net/hphotos-snc6/248885_207416675968104_4689994_n.jpg&w=720&h=482&ei=lp4FULv8G7LB0gWaqZTbBw&zoom=1&iact=hc&vpx=473&vpy=152&dur=254&hovh=184&hovw=274&tx=183&ty=111&sig=110212057515251514767&page=1&tbnh=129&tbnw=210&start=0&ndsp=32&ved=1t:429,r:2,s:0,i:75 Estaba tan contento de ver a Zayn que lo tiró al suelo y empezó a lamerle la cara- ¡Boris para! –decía sin parar de reír. Yo también empecé a reír, era una imagen tan tierna-
Cuando consiguió de levantarse el perro me miró y empezó a ladrarme.
Zayn: ¡Boris! –le regañó- Así no se trata a las invitadas –el perro dejó de ladrar y alzó la cara para mirar a Zayn. Se me acercó, me olisqueó un poco y me lamió una pierna. Me hizo cosquillas, era tan mono, comencé a acariciarlo y a juguetear con él-
Raquel: ¡Es adorable! >-< -dije acariciándole la barriga-
Zayn: Si –sonrió- oye… ¿enserio pensabas que Boris era mi criado? –empezó a reírse de nuevo-
Raquel: Claro, yo pensaba que me estabas entendiendo… me refería a que si él era el único que se encargaba de limpiar la casa… jo déjame… soy tonta –puse cara de pena y él rió aún más-
Zayn: Oooh ¡Qué linda! –me abrazó y yo me ruboricé. Fueron unos escasos segundos pero pude notar como sus brazos me protegían de todo, hacía mucho tiempo que no sentía esa sensación con un simple abrazo- Lo de limpiar la casa lo hace Charlotte, -dejó de abrazarme y volvió a sacar a Boris al patio mientras me explicaba- se encargaba de limpiar la casa de mis padres, pero estaba un poco estresada por mis hermanas, ya sabes, las mujeres sois más… -puso cara de no saber explicarse-
Raquel: ¿Más qué? –me crucé de brazos, odiaba que los chicos fuesen machistas-
Zayn: Malhumoradas, ya me entiendes, cuando estáis con la regla no hay quien os soporte… por lo menos a mis hermanas… y además son muy desordenadas, lo dejaban todo por medio y la pobre Charlotte no daba abasto recogiéndolo todo y además limpiando la casa; la mujer ya tiene una edad y no podía seguir así. El colmo ya fue cuando Safaa le escondió una tarántula de juguete en la vajilla, y Charlotte se desmayó, no sin antes dejarnos a todos sordos con el chillido que dio –rió mientras lo recordaba- Fue entonces cuando mi madre decidió darle un tiempo de baja. Llevo viviendo aquí dos meses y como mi madre sabe que yo solo no iba a saber cuidarme pensó que lo mejor era que Charlotte se viniese conmigo. A penas paro aquí, solo para dormir y comer. Muchas de las cosas siguen igual que cuando llegué, así que Charlotte no tiene mucho trabajo conmigo, ya que mi cuarto, que es lo peor, lo recojo yo para no darle cargos –sonrió sintiéndose orgulloso de su propia compasión hacia Charlotte-
Raquel: ¡Pobre Charlotte! Imagino el susto que se tuvo que llevar –reí y él conmigo-
Zayn: Si… Safaa es un trasto, es mi hermanita pequeña, mira –sacó su móvil y me enseñó una foto de ella: http://www.google.es/imgres?q=zayn+malik+y+su+hermana&num=10&um=1&hl=es&rlz=1C1RNKA_enES486ES486&biw=1280&bih=923&tbm=isch&tbnid=i-FpFQHJJnfESM:&imgrefurl=https://onlywn.activoforo.com/t9575p448-broken-angel-zayn-malik-you&docid=gWzJNSZjA-Rs3M&imgurl=http://29.media.tumblr.com/tumblr_lutvx8mnhq1r6ayepo1_400.jpg&w=317&h=511&ei=RJkFULD1Jqm30QWbuujZBw&zoom=1&iact=rc&dur=316&sig=110212057515251514767&sqi=2&page=1&tbnh=138&tbnw=107&start=0&ndsp=35&ved=1t:429,r:1,s:0,i:72&tx=66&ty=40-
Raquel: Es guapísima –era pequeña, tendría unos 9 años, y tenía unos ojos azules preciosos-
Zayn: Si, se parece bastante a mi madre –empezó a enseñarme fotos de su familia, me enseñó una foto de sus padres, su madre era preciosa y él era idéntico a su padre, también era muy guapetón como Zayn. Sus otras dos hermanas tampoco se quedaban atrás, Doniya que era la grande, tendría 20 años, se parecía muchísimo a su madre y también era muy guapa, Waliyha era morena y se parecía más al padre y a Zayn, era delgadita y tendría diez u once años. Luego me enseñó más fotos de él de pequeño, era monísimo. Me hacía mucha ilusión que Zayn me enseñara esas fotos, era como si ya conociese a su familia y ahora sí que sentía que lo conocía del todo. Me agradaba que confiara en mí y que hubiese decidido contarme más cosas sobre él. Ahora me sentía mucho más cerca de su corazón.
Zayn: ¡Ay va! Mira qué hora es y aún no hemos empezado el trabajo! –dijo mirando su reloj-
Raquel: ¡Es verdad!
Zayn: ¿Quieres algo de beber mientras se enciende el portátil? –me preguntó amablemente-
Raquel: Vale, un refresco porfa –sonreí-
Zayn: Enseguida madmuaselle –reí- y también voy a lavarme la cara, huelo a babas de Boris aagg… -dijo con cara de asco lo que provocó que riera aún más-
El ordenador se encendió y vi que de fondo tenía puesta una foto suya sin camiseta, no podía quitarle ojo, estaba… ¡muy bueno! Tenía varios tatuajes en el pecho, pero estaban escritos en otro idioma, supuse que sería árabe o algo así por la escritura y recordando que Zayn tenía descendencia Pakistaní. No podía dejar de mirar la foto, me estaba entrando hasta calor. De pronto noté algo mojado por mi cuello…

Capítulo 11 parte II

De pronto noté algo mojado por mi cuello… era algo frío y las pequeñas gotitas iban bajando por mi espalda, me estremecí, gemí por el contacto frío con mi piel caliente. Me giré rápido y pude ver a Zayn mordiéndose el labio, cosa que me puso bastante nerviosa, tenía un refresco en la mano.
Zayn: Aquí tienes… -dijo con voz ronca y saltó por encima el sofá para sentarse a mi lado. Abrió su coca-cola y le dio un trago largo. Sin duda, era jodidamente sexy-
Raquel: Gracias… -abrí yo también mi refresco y le di un trago, estaba sedienta, pero aún así no me calmaba la sed-
Zayn: Siento haberte puesto el refresco frío en el cuello, pero me entraron ganas de hacerlo cuando vi tu cuello al descubierto –sonrió malvado-
Raquel: Tranquilo, tenía calor, me ha venido bien –reí-
Zayn: Si… la verdad es que aquí dentro hace bastante calor… -volvió a beber-
Cogió su portátil y volvió a apoyar su espalda en el respaldo del sofá. Nuestros brazos se rozaron, su piel era suave y estaba templada, ahora que me daba cuenta se había quitado la rebeca y se había quedado en manga corta, con una camiseta blanca que le quedaba genial, se ajustaba a la perfección a su torso y brazos. Su pecho subía y bajaba con tranquilidad y su mirada estaba fija en el ordenador, observé de nuevo su cara, pasó su lengua para humedecer sus labios y los mordió. Se me puso la piel de gallina de mirarlo, me estaba poniendo muy tensa. Respiré hondo para intentar relajarme pero no era fácil teniendo su brazo pegado al mío, rozándonos cada vez que se movía para escribir en el teclado. Poco a poco fuimos avanzando el trabajo, pero decidimos de descansar un poco.
Raquel: Si quieres puedo escribir yo ahora, te tienen que doler los dedos de teclear tan rápido –los dos reímos. Tenía una postura tan sexy, estaba apoyado totalmente en el sofá con los brazos detrás de la cabeza y los pies sobre la mesa-
Zayn: Charlotte tiene que estar al llegar –dijo mirando la hora en el portátil- Le dije que vendrías así que se fue a comprar para hacer la cena.
Raquel: No hacía falta que se molestara… -suspiré-
Zayn: Tranquila, a Charlotte le encanta cocinar, siempre me anda diciendo que haber cuando traigo a gente para comer, no sabes lo contenta que se ha puesto cuando le he dicho que te quedabas a cenar, de hecho fue ella quien me lo propuso –sonrió- salió corriendo a comprar cosas para preparar, estará encantada de conocerte.
Raquel: Pues a ver si viene ya ¡que yo también quiero conocerla! Jajaja –él me miró y no dejaba de hacerlo. Me ponía nerviosa que me mirara… ¿por qué seguía?- Bueno… -ya no sabía ni que hacer. De pronto se quedó muy serio- ¿Qu-qué pasa…?
Zayn: No te muevas… -comenzó a acercarse lentamente-
Raquel: Zayn… -mi corazón se empezó a acelerar… incluso se me figuró que podía escucharlo latir a gran velocidad-
Zayn: Shh… -ya estaba súper cerca, yo cerré los ojos. Pude notar como algo me hacía cosquillas por el cuello… pero no era Zayn… Abrí los ojos como platos-
Raquel: Zayn, ¿qué es eso?, ¿qué tengo? –dije asustada-
Zayn: Tranquila –me quitó algo del hombro- Ya está –sonrió muy cerca de mí, provocando que mi corazón se acelerara aún más si se podía- Era una araña, no sé de donde habrá salido… -echó un vistazo al techo y al sofá-
Raquel: U-u-u-u-na… ¿araña? –me tuve que quedar pálida-
Zayn: Si… pero ya no hay araña, ¿lo ves? –dijo limpiándose las manos en una servilleta-
Comencé a respirar rápido, me daban mucho asco los bichos, las arañas no eran lo que más asco me daba, pero solo de pensar que había tenido una por mi cuello… Una pequeña lagrimilla se me escapó, no podía remediarlo, siempre que había bichos por medio acababa “lloriqueando”. Me abracé fuerte a Zayn para que no me viese llorar y escondí mi rostro en su cuello.
Zayn: Eeeh tranquila… -susurró- no me dirás que estás llorando por una insignificante araña… -mierda me había pillado… me abracé más fuerte aún, ahora me daba vergüenza mirarle. El rió por mi reacción- vale… me callo… aunque tienes razón… con lo pequeña que eres podía haber abierto su gran boca llena de dientes y te hubiese comido de un solo bocado… menos mal que te he salvado ¿eh? –dejé de abrazarlo-
Raquel: Tonto… -me reí y le pegué un puñetazo en el brazo. El también se rió-
Zayn: Encima que te salvo de un ataque arácnido… no me lo agradeces y me llamas tonto… ya te vale… -bromeó haciéndose el ofendido y cruzándose de brazos-
Raquel: Sabes que te lo digo con cariño “tontito” –me miró raro y me reí por su gesto-
Zayn: ¿Tontito? –dijo con cara rara- cursi… -yo le saqué la lengua y él rió- ¡Oye enana! Aprende a respetar a tus mayores –comenzó a hacerme cosquillas por la barriga y el costado y yo me estaba muriendo de la risa. Por más que me revolvía en el sofá no podía librarme de él. Ya me dolía la barriga de tanto reírme.
Raquel: Zayn, ¡para por favor! –le pedía entre risas. Zayn paró pero se colocó encima de mí, con las rodillas apoyadas en el sofá y mis piernas entre medias, y me cogió por las muñecas. Así no me podía mover… Su mirada se volvió a clavar en la mía. Volvía a estar serio otra vez- Zayn… -logré decir tras tomar de nuevo aire-
Zayn: ¿Si?... –dijo tranquilo-
Raquel: Me… haces daño… -dije sin dejar de mirarlo y con la respiración acelerada. Me iba a dar algo-
Zayn: Lo siento –dijo soltándome las manos rápidamente-
Sonreí y apoyé mis manos en su pecho. Pude notar que el también tenía la respiración acelerada, pero supuse que sería por haberme estado haciendo cosquillas, no por los nervios de la situación como yo… aunque también noté los latidos de su corazón más acelerados de lo normal. De pronto pasó a apoyarse en sus antebrazos, quedando su cara muy cerca de la mía. Mis manos apoyadas en su pecho eran el único obstáculo que impedía que nuestros cuerpos se juntaran. Nuestras miradas seguían clavadas y su respiración chocaba en mis labios. No podía si quiera hablar, si me movía lo más mínimo mis labios se rozarían con los suyos y… ¡ay dios!... estábamos en un sofá y él encima de mí, su cuerpo muy cerca del mío, y los dos esperando un ansiado beso… rozó su nariz con la mía y…

Siento que sea tan cortito pero esq quería dejarlo así, es que me encanta ver como sufris :twisted: jajajajaja no es broma mis niñas:) enseguida me pongo con la continuación y subo:) os quiero!(L) ATT: Mrs Malik

Capítulo 11: Parte III

Se escucharon ruidos de llaves. Zayn alzó la cabeza corriendo y se quitó de encima de mí. ¡No puede ser! Dije dentro de mí… estuvimos tan cerca… incluso puedo asegurar que nuestros labios se rozaron una milésima de segundo… ¡qué rabia! Me senté de nuevo en el sofá y Zayn a mi lado con el portátil encima de él. ¿Cómo se supone que lo iba a mirar ahora?... estuvimos a punto de besarnos… que te corten un beso es algo muy… vergonzoso…
-----: Ya estoy de vuelta Señorito Malik –dijo una voz de mujer. Tenía acento de cubana-
Zayn: Hola Charlotte! –dijo de poca gana- estamos en el salón… -me miró y me alteré bastante, era una mirada abrasadora-
Charlotte: ¿Se puede? –dijo asomándose. Zayn afirmó con la cabeza y esta entró. Esta era Charlotte: http://m1.paperblog.com/i/72/722710/personajes-encanto-aibileen-clark-especial-cr-L-yo5O2K.jpeg - Hola señorita, usted debe de ser Raquel López, ¿verdad?
Raquel: Si –sonreí-
Charlotte: Encantada, el Señorito Malik me ha hablado mucho de usted –me sonrió de vuelta- ¡señorito! quite los pies de la mesa –le dijo a Zayn pegándole con un trapo en los pies para que los bajara. Zayn le obedeció-
Zayn: Charlotte… ¿cuándo vas a dejar de llamarme Señorito? Ya te dije que aquí puedes llamarme Zayn –le dijo a esta que estaba limpiando la mesa-
Charlotte: Señorito Malik, tengo que seguir unas normas, y me enseñaron que tengo que llamar siempre Señor o Señora y por el apellido a la familia a la que sirva, y usted no va a ser menos. Además… ya estoy acostumbrada a llamarle así desde pequeño –Zayn suspiró rendido- Si no le importa puede traer las bolsas de la compra a la cocina –Zayn iba a protestar pero Charlotte le cayó la boca- usted es joven y fuerte, he venido todo el camino cargada así que hágame el favor –asintió resignado- Las bolsas están en la entrada –Se levantó y fue hacia donde Charlotte le había dicho-
A los pocos segundos Zayn volvió a aparecer en el salón con dos bolsas de plástico repletas de cosas en una mano y en la otra una red de naranjas y un paquete de latas de coca-cola bajo el brazo. Me levanté corriendo y fui a ayudarlo.
Raquel: Dame anda –dije cogiendo las latas de coca-cola-
Zayn: Es igual, puedo solo… -intentó hacerse el fuerte-
Raquel: Zayn , enserio, deja que te ayude, no seas cabezota –insistí y al final me dejó que lo cogiera-
Zayn: Gracias linda –sonrió con esa sonrisa cautivadora suya y fue delante de mí hacia la cocina-
Como no era súper moderna y muy bonita:
http://www.susmueblesdecocina.com/wp-content/uploads/2010/08/Cocina_Integral_1.jpg
Una voz procedente del frigorífico me asustó. Decía algo de que se había olvidado de la comida de Boris.
Raquel: Zayn… -él se giró para mirarme mientras dejaba las cosas encima de la encimera- ¿desde cuándo los frigoríficos hablan?... –él rió-
Charlotte: Bonita soy yo, no es el frigorífico –dijo cerrando la puerta de este-
Raquel: Aaaah… ya decía yo –reí y Zayn seguía riéndose- deja de reírte de mí jo… -me crucé de brazos pero no conseguí que parara-
Zayn: ¿Cuándo vas a dejar de ser tan tontita? –sonrió y me dio un pequeño golpecito con su dedo en mi nariz-
Raquel: Cuando tú dejes de meterte conmigo… -le reproché-
Zayn: Jajajaja, entonces querida me temo que nunca vas a dejar de serlo –se burló y yo le saqué la lengua-
Charlotte: Ya déjala Señorito… -me defendió y yo sonreí triunfante, Zayn negó y rió-
Zayn: ¿Encima te pones de su parte? –se defendió-
Charlotte: Es una invitada, esa es otra norma de los sirvientes: Siempre trataras bien a los invitados –dijo sacando cosas de las bolsas-
Zayn: ¿Hay un libro de normas de sirvientes? –dijo burlesco, le encantaba picar a la gente-
Charlotte: Si, deberías de aprendértelo tú también, ya que otra norma es: No ensuciar lo que los sirvientes ya han limpiado con antelación –recordándole lo de los pies en la mesa-
Zayn suspiró resignado y apoyó la cabeza en la pared mientras bebía un vaso de agua. Yo reí y ayudé a Charlotte a colocar las cosas.
Charlotte: No hace falta querida –dijo en cuanto me vio coger cosas para llevarlas al frigorífico-
Raquel: Vamos Charlotte déjame que te ayude, así acabarás antes, ya me siento lo suficientemente mal estando aquí de pie sin hacer nada –insistí-
Charlotte: Está bien –sonrió amable- Señorito Malik, debería usted aprender, y en un futuro no muy lejano, traerme a esta muchacha como su futura esposa-
Yo abrí los ojos como platos al escucharla y Zayn casi se ahoga. Escupió el agua que tenía en la boca y empezó a toser.
Charlotte: ¡Ay Señorito que se me va a ahogar! –dijo dándole golpes en la espalda-
Zayn dejó de toser y me miró con los ojos llorosos por haber estado tosiendo. Tragó saliva y al fin pudo hablar.
Zayn: Charlotte, por favor, la próxima vez que vayas a decir algo así procura que no sea cuando esté bebiendo agua… -me volvió a mirar y salió de la cocina-
Charlotte: ¿Por qué se pone así el Señorito? ¿He dicho algo malo? –me preguntó. Yo levanté los hombros- Pero… ustedes ya son novios… ¿no? –La miré y suspiré-
Raquel: No… -ella se sorprendió-
Charlotte: Yo pensaba que sí que lo eran. El señorito siempre habla muy bien de usted y… ains… Siempre abro mi bocaza más de la cuenta… -se dijo a sí misma en voz alta mientras seguía colocando cosas-
Raquel: Charlotte… -ella se giró- ¿te importa si voy a hablar con él?
Charlotte: Claro que no querida, me harás un favor, el Señorito ahora mismo no querrá hablar conmigo, quién mejor que usted –sonreí- Además ya me voy a poner a hacer la cena, ve con el querida –sonrió-
Salí de la cocina pero Zayn no estaba en el salón… quizá hubiese subido a su cuarto… de pronto noté un aire fresco en la cara, me giré y vi la puerta que daba a la parte trasera de la casa entre abierta, me asomé y fuera estaba Zayn.

Narra Zayn:

Raquel y yo estuvimos a punto de besarnos… si no hubiese sido porque Charlotte llegó… ¿qué hubiese pasado?... ¡maldita sea!... me dio muchísima rabia que nos interrumpiera… ahora a saber cuándo volvería a tener otra oportunidad así… Para colmo en la cocina tuvo que soltar esa estúpida frase: “en un futuro no muy lejano, trae a esta muchacha como futura esposa” ¿Cómo iba a serlo?, ni si quiera sabía si yo le gustaba. Me estaba precipitando, me encantaba estar con ella y… para qué mentir, me encantaba ella en sí. Quizás sea pronto para decirlo pero… la quiero, quiero estar con ella y demostrárselo. No sé porqué, pero salí de la cocina avergonzado… no ya por lo que dijo Charlotte… si no de mí mismo. Charlotte simplemente quería una buena chica para mí, sabe que siempre que andaba con alguna acababa mal, y no le gustaba verme así, por eso insistió en conocer a Raquel desde el primer momento en que le hablé de ella. Charlotte era mi consejera, siempre que necesitaba consejos de chicas por parte de otra chica acudía a ella; me crió desde pequeño así que no me daba vergüenza contarle mis cosas. Me avergonzaba de mí porque nunca llegué a demostrarle a una chica lo que realmente sentía por ella, y con Raquel era todo distinto, a pesar de conocerla de apenas tres semanas, sentía como si la conociese de toda la vida, me abrió su corazón y me hacía que confiara en ella, como si tuviese la certeza de que nunca me fuese a hacer daño. Era tan diferente al resto de chicas con las que había estado… me gustó desde el primer día que la vi; su mirada tierna, su sonrisa tímida y su dulce personalidad la hacían una persona encantadora y linda…muy linda. Salí a la parte trasera de la casa para tomar un poco el fresco y despejar mis ideas de tonterías y pensar en qué iba a hacer con Raquel, si estaba yendo demasiado rápido o si solo tenía que dejarme llevar por lo que decían mi cuerpo y mi corazón. Me senté en el césped y Boris no tardó en venir a mi lado, se tumbó y apoyó su cabeza en mi pierna.
Zayn: Boris, ¿qué pasa eh? Buen chico… –le acaricié la cabeza. Había estado conmigo 4 años y lo quería muchísimo, era el perro perfecto, leal y una gran compañía. Si yo estaba mal él venía a mi lado y de alguna manera me animaba para que no me sintiese solo-
De mi bolsillo saqué un paquete de tabaco, lo abrí y saqué un cigarro. Boris levantó la cabeza y refunfuñó, agarró con la boca el paquete de tabaco y se lo llevó.
Zayn: Eh, Boris ven acá, ¡trae eso ahora mismo! –giró la cabeza para mirarme pero siguió su camino- *suspiré* Sabes cómo cuidarme… -susurré-
Supongo que fue a enterrarlo por algún lado del patio. Al menos me dejó uno para despejarme. No solía fumar, solamente en momentos así en los que la cabeza me decía: “No puedo más”. Me lo encendí y di unas cuantas caladas, dejé que la nicotina recorriera mis pulmones y todo mi pecho hasta que conseguí relajarme, cerré los ojos y solté el humo por la boca y la nariz. De pronto escuché algo a mis espaldas.
Raquel: ¿Puedo sentarme?... –me preguntó con su dulce voz-
Me giré un poco, aún no estaba preparado para mirarla de nuevo, asentí y ella se acomodó a mi lado. Estaba anocheciendo y ya se comenzaban a ver las primeras estrellas en el cielo.
Raquel: Son preciosas ¿verdad? –la miré y estaba sonriendo mirando fijamente al cielo. El brillo las estrellas se reflejaban en sus ojos. Ella sí que era preciosa-
Zayn: Si… -volví a darle otra calada al cigarro-
Ella me miró al ver que solté el humo.
Raquel: ¿Fumas? –me preguntó con cara de que no le gustaba que lo hiciera-
Zayn: Solo cuando estoy agobiado y necesito relajarme y pensar… -en ese momento vi a Boris acercarse y me dio con la pata en la mano provocando que se me cayera el cigarro- ¡Boris! –le regañé y él me ladró en contestación y me gruñó-
Raquel: *rió* Parece que el perro opina lo mismo que yo –le miré- no le gusta que fumes, ¿verdad Boris? –Boris se le acercó y ella empezó a acariciarlo y se reía. Hasta un perro tiene más suerte que yo, pensé- Buen chico, ¿sabes que eres muy guapo verdad? –Boris dio un pequeño ladrido- Siii jajajaja –sin poder evitarlo me quedé embobado mirándolos, en especial a ella, era tan tierna, se notaba que le encantaban los animales, y a mí también, era perfecta-
Estuvimos un rato ahí fuera, jugando con Boris hasta que Charlotte vino a avisarnos.
Charlotte: Señoritos la cena está lista –dijo con un plato en la mano que ponía Boris. Este nada más verla aparecer salió corriendo hacia ella y casi la tira. Como no Charlotte dio un grito escandaloso y Raquel y yo reímos- ¡Boris! Anda toma bruto, eres peor que tu dueño… -dijo limpiándose las manos en el delantal y entrando dentro de la casa-
Zayn: Oye… hoy me estáis dejando todas por los suelos, ¿eh? –miré a Raquel que se estaba levantando aún riéndose-
Raquel: Mmmm que rico huele –dijo mirando hacia el interior de la casa- ¡vamos! Levanta ese culo gordo Malik, ¡o se va a enfriar! –dijo haciendo un gesto con la mano para que me levantara.
Zayn: Levántame –dije ofreciéndole mi mano para que me ayudara. Ella negó con la cabeza- ¡Oh vamos!... apiádate de un pobre culo gordo… -ella rió y se acercó-
Raquel: ¡Eres de lo que no hay Malik! –me dio la mano y empujó para levantarme, pero yo tiré hacia mí provocando que se desequilibrara y cayera encima de mí. Dio un pequeño grito pero procuré que no se hiciese daño al caer. Se quedó clavada de rodillas entre mis piernas y abrazada a mí- ¿¡Qué haces bruto!? –dijo pegándome un manotazo en el brazo y yo reí, estaba seria pero al final acabó sonriendo- Tonto…
Zayn: ¿A sí? –me giré sobre mí tumbándola en el suelo y colocándome encima de ella; de nuevo volvíamos a estar como hacía una hora en el sofá, antes de que Charlotte interrumpiera nuestro momento. Colocó sus manos en mi pecho, pero esta vez tenía agarrada mi camiseta con sus puños- ¿Ahora qué? –susurré juguetón-
Raquel: Sigo pensando que eres tonto… -sonrió y se mordió el labio. Fue un gesto que me puso bastante-
Zayn: Sabes que te acabarás arrepintiendo de tus palabras, ¿verdad? –Apoyé mis antebrazos a cada lado de su cabeza, volviendo a quedar muy cerca. Ella simplemente suspiró, chocando su respiración con mi boca. Nuestras miradas seguían fijas la una con la otra, hasta que ella bajó su mirada a mis labios y volvió a mirarme, ese fue el gesto que me confirmó que ella también deseaba tanto como yo ese beso-
Yo también bajé mi mirada a su boca y la volví a mirar a los ojos. Ella rió nerviosa y un escalofrío recorrió mi espalda. Apretó sus manos contra mi pecho indicándome que la besara. Cerré mis ojos y de pronto noté algo mojado en mi cara, fue un lengüetazo, olía a babas, era…asqueroso… abrí los ojos y vi a Boris sentado a nuestro lado. Me incorporé corriendo y me limpié la cara.
Zayn: Puaj… ¡Boris! –Raquel rió a carcajadas y acarició a Boris-
Raquel: Eres tan lindo… -acarició su cabeza y se levantó-
Zayn: ¿Te parece gracioso que me chupeteé la cara? –ella asintió y seguía riéndose-
Se fue orgullosa dentro de la casa y me dejó ahí en el patio con Boris, dentro la escuchaba aún reírse y la siguió la risa de Charlotte. Suspiré, y yo también reí, acaricié a Boris y entré.
La cena fue rápida, por lo menos a mi parecer, cuando quise darme cuenta ya estábamos de pie, recogiendo la mesa y acompañando a Raquel a su casa. Charlotte y ella se despidieron, Charlotte le dijo que se pasara otro día y me miró para asegurarse de que no dijo nada malo, yo asentí conforme.
Zayn: Raquel, ¿te importa que en vez de ir en coche vayamos dando un paseo y de paso saco a Boris? Hoy no ha salido en todo el día
Raquel: ¡Claro! Nos vendrá bien que nos dé el aire fresco, además así cuando vuelvas no vendrás solo –sonrió y le respondí con otra sonrisa. Era la sonrisa más bonita que había visto-
Cogí las llaves de casa, la correa de Boris y nos fuimos. Boris iba suelto delante de nosotros, de vez en cuando se paraba en algún trozo de campo para hacer sus necesidades. Hacía bastante fresco pero se estaba bien, aunque Raquel parecía que no lo llevaba tan bien, tenía la piel de gallina por el frío y los brazos helados.
Zayn: Toma –le dije poniéndole mi rebeca-
Raquel: Gracias –sonrió tierna- Qué calentita –rió-
Fuimos hablando de cosas sin sentido, nos reíamos, y también había momentos de silencio en los que solo se oían las patas de Boris chocando con el suelo, pero era un silencio agradable. Al cabo de un rato llegamos al portal de su casa.
Zayn: Bueno… -la miré y pero ella tenía la cabeza acachada y sus mejillas estaban rosadas-
La cogí de la barbilla para que me mirara. Estaba decidido, iba a hacerlo, era el momento, ahora nadie nos podía molestar, iba a… besarla. Ella me miró fijamente a los ojos y pude notar que su labio inferior temblaba un poco, ¿era por el frío o estaba nerviosa?
Zayn: Eeh… -susurré- ¿tienes frío? –rodeé con mi brazo su cintura y la apegué un poco más a mi cuerpo-
Raquel: No… -dijo tímida. Volvió a posar sus manos frías sobre mi pecho. Tragué saliva y miré de nuevo sus labios, ella dibujó una pequeña sonrisa y yo me mordí el labio-
Me fui acercando, ya estaba muy cerca de conseguir por fin ese beso, pero su pierna empezó a vibrar. Me sobresalté y la miré dudoso. Ella se separó corriendo y de su bolsillo sacó su móvil, miró la pantalla y suspiró cansada.
Raquel: Es mi madre… -me miró con una mirada entre rabia y duda- tengo 4 llamadas suyas…
Zayn: *suspiré* Cógelo, es tarde estará preocupada, ya… ya mejor hablamos mañana –sonreí-
Estaba claro que hoy nadie quería dejarnos tranquilos. Ella asintió bajando la mirada, como con pena. En ese momento me entraron ganas de abrazarla y no soltarla. No le podría dar un beso en los labios pero si uno en su mejilla. Me agaché un poco y besé su frío moflete.
Zayn: Hasta mañana pequeña –ella me miró y sonrió-
Raquel: Ah! Toma… –se quitó mi rebeca y me la dio- Bueno tengo que contestar, no quiero que se cabree, ¡hasta mañana Malik! –entró en casa rápido y cerró-
Me quedé ahí parado viendo como su silueta iba desapareciendo detrás de la puerta de cristal opaco. Suspiré y sonreí recordando el contacto con su mejilla fría. Boris se acercó a mí y se sentó a mi lado.
Zayn: ¿Dónde estabas chico? –le acaricié la cabeza- Bueno, será mejor que nos vayamos o Charlotte va a empezar a preocuparse por nosotros –Comencé a andar, Boris simplemente me miraba y me seguía. Parecía que entendía a la perfección cada cosa que le decía- ¿Crees que le gusto? –dije mirando de nuevo hacia atrás-
Boris: “¡Guau!” –lo miré y sonreí-
Zayn: ¿Tú crees? –ladeó la cabeza y sacó la lengua, eso era que sí- *reí* ojala chico –me agaché para acariciarlo y seguí mirando la casa de Raquel. Boris me lamió la cara y sonreí- ¿Vamos a correr un poquito? –Boris dio un ladrido- 1,2… ¡3! –Los dos empezamos a correr-

Cuando llegué a casa:

Me senté en el sofá rendido.
Zayn: Menuda carrera nos hemos pegado ¿eh Boris? –este se subió encima de mí-
Charlotte: Señorito, no deje que Boris se suba al sofá ¡lo va a poner todo perdido de babas! –nos regañó. Boris refunfuñó, yo reí y lo saqué al patio-
Zayn: Charlote…
Charlotte: ¿Si señorito? –dijo mientras colocaba bien los cojines-
Zayn: Siento lo de antes, me fui como un cobarde de la cocina… -agaché la cabeza-
Charlotte: Oh… no importa, se lo dije a la señorita, pensé que ustedes dos… ya me entiende…-la miré sin saber a qué se refería; negué con la cabeza- que ustedes dos ya eran novios –suspiré-
Zayn: No… -justo en ese momento me vino la imagen de cuando estuvimos a punto de besarnos en el sofá-
Charlotte: ¿A usted le gusta mucho esa chica verdad? –yo la miré y asentí; ella sonrió- ¿y por qué no está con ella entonces?, los dos se quieren –dijo cogiendo mi cara- solo tienes que ser valiente y demostrárselo, no huir como hiciste… -al cabo de unos segundos suspiré y asentí-
Zayn: Si, se lo demostraré –dije firme- Mañana volveré a quedar con ella para terminar el trabajo y… -sonreí-
Charlotte: Esta bien, mañana iré a visitar a tus padres, así podrán estar los dos solos –sonrió- ¡pero no hagan nada indebido, ¿de acuerdo!?
Zayn: ¡Charlotte! –me sonrojé y ella rió a carcajadas-
Si… mañana nadie me iba a impedir que la besara…

Capitulo 12:

Narra Raquel:

Llegué a casa y llamé a mamá. Me comió la cabeza diciéndome que la tenía muy preocupada por que no le cogí el teléfono, que se pensaba que me había pasado algo o que me habían hecho algo… suspiré cansada mientras la escuchaba hablar; cuando soltó todo lo que me tenía que decir se calmó y las dos quedamos en silencio.
Mamá: Bueno qué… ¿no me vas a decir nada?¿cómo te va en la Universidad?¿y el trabajo ese que tenías que hacer con el chico ese de nombre raro? –hizo unas cuantas preguntas más-
Raquel: Se llama Zayn mamá…
Mamá: Pues eso… un nombre raro… -afirmó-
Raquel: *suspiro* estaba haciendo el trabajo con él esta tarde, por eso no te cogí el teléfono –tampoco me di cuenta de las llamadas-
Mamá: Ya veo… ¿y qué tal?¿Bien? –volvió a preguntar-
Raquel: Si… -dije recordando cuando estuvimos a punto de besarnos-
De pronto escuché las llaves de la puerta, supuse que sería Mel y, sinceramente, ahora quería hablar con ella, no con mi madre.
Raquel: Bueno mamá, tengo que colgar, he… he dejado el horno encendido y se me va a quemar la pizza… -me excusé-
Mamá: ¿¡Vas a cenar a estas horas!? –exclamó-
Raquel: Si, mañana hablamos, adiós –le colgué antes de que me siguiera diciendo cosas-
Justo en ese momento entró Mel en el salón, la miré alegre tenía que contarle todo lo que había pasado con Zayn, y seguramente ella también tuviese que contarme; pero mi gesto cambió cuando la vi tan seria.
Raquel: Cariño, ¿qué ha pasado?... –pregunté preocupada-
Melissa: ¿¡Qué qué ha pasado!? ¿¡Qué qué ha pasado!?... ese maldito niñato… ¡¡aaaaaaagggg!!... –soltó con rabia el bolso-
Raquel: amor… tranquilízate… -le dije con miedo. Nunca la había visto así de cabreada-
Melissa: Es…es…es un…aaa!!... –yo reí por su reacción estaba tan nerviosa que era gracioso verla así-
Raquel: Vamos, tampoco será para tanto… ¿qué te ha hecho el adorable ricitos de oro? –reí y me fulminó con la mirada-
Melissa: ¿Adorable?... ¿has dicho adorable?
Raquel: Si… ¿no…no lo es? –dije confusa-
Melissa: ¡NO! –Azahara salió de su cuarto y vino al salón-
Azahara: ¿Qué pasa?¿A qué vienen esas voces? –dijo medio dormida-
Melissa: ¿Te he despertado? –dijo relajando su voz-
Azahara: El simple portazo que has pegado ya me ha sobresaltado… -dijo frotándose los ojos y sentándose al lado de Raquel- ¿Qué pasa, es que ese guaperas no te ha tratado bien?
Melissa: No… y si… no lo sé –se cruzó de brazos cabreada y se tiró en el sofá-
Raquel: Ummm… ¿¡nos lo vas a contar ya!? –dije dándole un manotazo en el culo para que se levantara-
Melissa: Está bien… tranquila Mel… -se dijo a ella misma. Aza y yo nos miramos y soltamos una pequeña risita-
Azahara: Vamos Julieta, cuéntanos ya que ha hecho tu Romeo para que estés tan desesperada… ¿te ha besado? –soltó de pronto lo que provocó que Mel abriera mucho los ojos confirmándolo-
Raquel: Ooooom… ese gesto me lo conozco yo… -dije con voz pícara- te ha besado… -volví a decir en el mismo tono-
Azahara: ¡Empieza a contar ahora mismo eso! –le ordenó-
Melissa: Está bien… llegamos a su casa, estuvimos haciendo el maldito trabajo y…
Azahara: ¿¡Y qué!? –la interrumpió- ¡ay dios! ¿te metió la lengua?
Raquel: ¡Aza! ¡No la interrumpas! –y reí por su comentario-
Melissa: No… no me besó, nos “interrumpió” su criada… -eso me suena pensé-
Azahara: ¡Caray! ¿tiene criada? –dijo sorprendida-
Melissa: Es un niño pijo, que esperabas… bueno que si que nos “interrumpió” su criada…
Azahara: Ajam… con que “nos” eh?... eso quiere decir que…¡te hubieras dejado que te besara! –yo abrí la boca formando una perfecta O y miré de nuevo a Mel-
Raquel: ¡Es cierto! ¿te hubieras dejado besar? –repetí en el mismo tono que Aza-
Melissa: em… esto… yo… sois… sois… -nos miraba a las dos con cara asesina, y suspiró- ¡Si vale! Lo admito… me hubiese besado con él… -Aza y yo gritamos de emoción-
Raquel: ¡¡Lo sabía!! –le dije-
Melissa: ¡Pero ya no! –se cruzó de brazos-
Azahara: ¿por qué? –dijo triste-
Melissa: Es que, cuando estábamos en su casa era un chico normal, amable y con el que gusta de hablar… pero después volvió a ser el mismo creído… -recordó con rabia-
Raquel: ¿Pero qué dijo? –pregunté ansiosa-
Melissa: Me trajo a casa en coche, y al parecer me quedé dormida durante el trayecto… me despertó y me dijo que ya habíamos llegado, hasta ahí todo normal, hasta que cuando me despedí de él fui a bajar del coche pero me agarró del brazo, me giré y… me besó… -se sonrojó-
Azahara: Oooohhhh!! ¿pero qué tiene de malo eso? –dijo analizando la situación-
Melissa: No… eso no tiene nada malo, de hecho hasta ahí todo acabó siendo perfecto, pero tuvo que abrir su bocaza de chulito y decir: “te dije que al final te robaría un beso”, poniendo esa sonrisa cautivadora… odioso… -golpeó con el puño el sofá-
Raquel: Lo que a ti te pasa es que te gusta pero no lo quieres admitir… y no querías que al final “ganara él”, y lo consiguió… por eso te da coraje… pero es un amor-odio –sonreí apoyando mi cabeza entre mis manos-
Azahara: Si… yo también pienso lo mismo, no te gusta que sea tan creído, porque muchas chicas van detrás de él, y eso es algo “peligroso”… pero te gusta, si no, no te hubieras dejado besar… -añadió-
Melissa: No me dejé… me besó por sorpresa… -se defendió-
Raquel: Vamos Mel… antes de que os hubiese interrumpido su criada estuvisteis a punto de besaros… y sin embargo ahí sí que sabías que hubiese habido beso, y te ibas a dejar… -ella me miró sabiendo que yo llevaba razón- Mel, sinceramente, creo que le gustas, ¿por qué no lo intentas? Tú misma has dicho que en su casa era una persona normal, con la que es agradable hablar y eso… no sé, no quiero obligarte, pero piénsalo, si de verdad te gusta no pienses en qué podría pasar o si por ser tan “creído” va a venir alguna y te lo va a quitar. Con eso no quiero decir que te lances a la piscina vacía, por supuesto lo último que quiero es que te haga daño, pero considéralo cielo, si pudo ser una persona normal cuando estabais solos, ¿por qué no puede serlo siempre?, no digo que cambie su personalidad, pero supongo que estando contigo no se fijará en otras chicas… -Mel soltó una risa irónica-
Azahara: Claro Mel, si no le importaras no sería tan pesado contigo, te lo hemos dicho millones de veces, yo digo que le importas, y él a ti también, no entiendo entonces por qué te niegas a aceptarlo y en tener algo con él –soltó seria-
Melissa: ¿Creéis que Harry y yo… podríamos ser algo?, ¿me podéis asegurar que no tendrá nada con otra chica y que me querrá solo a mí? –preguntó temerosa-
Raquel: Cariño, no te puedo asegurar nada de eso, pero si sé que deberías darle una oportunidad, ¿quién mejor que tú para conocerlo mejor?, saber que intenciones lleva contigo y si cuando te dice que serás suya te lo dice porque de verdad lo quiere, y no solo por pasar una noche loca contigo y adiós… -acaricié su pelo-
Azahara: Además, no puedes estar cabreada con él, tenéis que estar sentados juntos todo el año, no es agradable tener a alguien con el que no te llevas bien al lado…
Melissa: Si, y aún no hemos terminado el trabajo, pero… ¿y si pasa algo entre nosotros y no sale bien?, tendremos que dejar de hablarnos, y aún así habrá tensión entre nosotros cuando nos sentemos juntos, y ya no trabajaremos a gusto el uno con el otro…
Raquel: eehh, shhh, no pienses eso ¿vale? No tenéis por qué dejaros de hablar. No puedes pensar solo en lo malo, tienes que pensar también en lo bueno. Porque te pasara eso en tu pasado no puedes cerrarte al resto de chicos y hacer como si todos fuesen iguales. Amor… enserio, piénsalo, Harry no tiene que ser tan mal chico como tú lo ves… déjate conocer, ¿no crees qué el también lo tiene un poco complicado contigo? –en ese momento pude notar en ella que comprendió que Harry había intentado conocerla más, pero que ella no dejó que lo hiciese, se aferraba a estar borde con él, por eso en casa de Harry fue distinto, Harry le “abrió su vida” para que lo conociera de una manera diferente, no le mostró al Harry creído, y ese fue el Harry que le gustó. Ella simplemente agachó la cabeza y asintió-
Melissa: Gracias chicas… -dijo sin mirarnos a la cara- lo siento, necesito estar sola y pensar las cosas… -se levantó del sofá-
Azahara: Tranquila cariño, descansa –se levantó y besó su frente-
Raquel: Amor, si necesitas hablar aunque sea tarde, ya sabes dónde estoy, ¿vale? –le dije, asintió y se fue a su cuarto-

Narra Melissa:

Me encerré en mi cuarto, cabreada, ¿cabreada conmigo misma o con Harry?... Me puse el pijama: http://www.polyvore.com/pijama/set?.locale=es&id=51821017 y me tiré en la cama; hundí mi cabeza en la almohada y contuve las ganas de llorar. ¿Qué me estaba pasando? ¿Por qué no quería reconocer que Harry me gustaba? ¿Cómo no iba a gustarme?… es encantador. Odiaba de él que fuese un creído, pero he de reconocer que, en parte, me volvía loca esa faceta suya. Recordé entonces el primer día que vi a Harry, su sonrisa, sus ojos verdes y su voz ronca, cómo se acercó a mí valiente pidiéndome disculpas. Sonreí al recordarlo y suspiré. Me giré quedando bocarriba en la cama, mirando el techo azul clarito de mi habitación, era como mirar el océano, me tranquilizaba bastante, mi habitación era como mi rincón para evadirme del mundo que me rodeaba. Muchos recuerdos empezaron a venir a mi cabeza. Tenía miedo de mostrarle mi verdadera yo porque… una vez ya lo hice, con la persona que más quería en este mundo… y me falló. Por eso ahora me cerraba a todos los chicos que querían conocerme, era borde con ellos, y no les mostraba realmente a la verdadera Melissa, la Melissa que era feliz y cariñosa con sus amigas. Esa persona fue Mario, el que fue mi novio durante año y medio, y el que me destrozó la ilusión y el corazón. Era un chico muy guapo, moreno con el pelito corto, ojos marrones, labios carnosos y sonrisa pícara pero perfecta. Tenía cara de chulito pero era todo un encanto. Como no su cuerpo hacía juego a la perfección con su cara, estaba bastante bueno, me sentía protegida en sus brazos. Solía vestir con pantalones ajustados y camisetas de tirantes, aunque todo le quedaba genial. Siempre solía estar rodeado de chicas, pero nunca llegó a interesarse por ninguna en especial, hasta que me conoció varios años después. Si, ese fue el chico del que estuve enamorada toda mi vida hasta hace unos meses cuando conseguí al fin olvidarme de él, nunca pensé que se fijaría en mí, pero así fue. Le entregué todo, pero me lo devolvió de la peor manera que pudo… acostándose con la que por aquel entonces era mi mejor amiga. Él me pidió disculpas de todas las maneras posibles, me llamó llorando rogándome que volviese con él, que sabía que se había equivocado y que nunca iba a sentir por esa…zorra lo que sentía por mí, pero ya era demasiado tarde… el daño ya estaba hecho y no lo iba a poder remediar tan fácilmente. Le cogí asco, lo odié, pero seguía permanente en mi cabeza, como un tatuaje en la piel el cual acabas odiando con todas tus ansias por alguna razón, pero que no puedes hacer nada para borrarlo. Suspiré cansada. ¿Esa era la razón por la cual también odiaba a Harry? Temía encapricharme con él y que una zorra lo apartase de mi lado, de nuevo, como ya me ocurrió en su día; por eso me juré a mi misma que no volvería a entregarle mi corazón a ningún tío. Pero Raquel llevaba razón, no podía estar sola toda mi vida, al final acabaría cayendo en las redes del amor, temía que fuese con Harry, pero como bien había dicho ella, si no lo intentaba no sabría lo que podría pasar… Sin darme cuenta me quedé dormida, pero en mi cabeza ya había una respuesta, y por una vez parecía que mente y corazón estaban de acuerdo.

Al día siguiente:

Sentí unos golpes en la puerta, abrí un ojo con pesadez mientras gruñía palabras sin sentido. ¿Ya es de día?, miré hacia la ventana que lo corroboraba con los pequeños rayos de sol entrando por ella. Volví a sentir golpes en la puerta y una voz tras ella.
-----: Mel, ¿estás bien?, ¿puedo entrar? –dijo Raquel al otro lado-
Era hora de levantarse. Me froté los ojos con los puños y me destapé para ponerme en pie y dirigirme hacia la puerta, quité el pestillo y abrí para encontrarme con mi querida amiga.
Melissa: Hola amor… -sonreí y el gesto de preocupación de la cara de Raquel desapareció para dar paso a una gran sonrisa-
Raquel: ¡Hola! –dijo enérgica y abrazándome- te veo mucho mejor, ya has… ¿decidido? –se lo pensó dos veces antes de preguntarlo-
Melissa: Si –sonreí-
Raquel: Aaaaaaaaaa!!!!!! Eso es genial!!!!! –gritó y empezó a correr por todo el pasillo. Azahara escuchó los gritos de esta y salió de su habitación. Me eché a reír de ver a Raquel como loca y Azahara mirándola sin entender nada y con la cara de dormida aún-
Melissa: Jajajajaja ¿qué haces? ¡para! –le dije y me obedeció-
Raquel: ¿¡Qué has decidido hacer!? –dijo animada-
Azahara: ¿Cómo que qué has decidido hacer? ¿Qué me he perdido? –replicó y vino corriendo a mi puerta-
Melissa: Jajajaja, ya he decidido que voy a hacer con Harry cielo –le dije a Aza, y esta abrió la boca todo lo que pudo y se puso a gritar también y a abrazarse a Raquel- ¿Por qué os alegráis tanto?... ni si quiera he dicho lo que voy a hacer con él… -dije seria-
En ese momento las dos locas dejaron de saltar y pegar gritos y me miraron con los ojos como platos.
Azahara: ¿No… no es para alegrarnos? –dijo con pena-
Raquel: Mel… no… por favor… -dijo poniendo poniendo su labio inferior sobre el superior-

Capítulo 13:

Narra Manmen:

Louis y yo habíamos quedado. No era la primera vez, pero sí que se podía llamar “primera cita”, ya que las otras, digamos que no fueron en serio… Esta vez Lou pronunció la palabra “cita”, cosa que me alegró ya que eso significaba que íbamos a salir como pareja, aunque aún no lo éramos… ni si quiera llegamos a besarnos… un cosquilleo recorría mi barriga continuamente y sonreí pletórica delante del espejo. Me metí la camisa por dentro del pantalón pero no me gustaba como quedaba, ya estaba harta de probarme modelitos, decidí que ya no me iba a cambiar más, así que tenía que hacer algo con esa dichosa camisa, me quedé mirándola en el espejo y tuve la idea de anudarla. ¡Perfecta! Sonreí conforme: http://www.polyvore.com/sin_t%C3%ADtulo_20/set?.locale=es&id=52838087
Me maquillé un poquito y me arreglé el pelo. Al rato llamaron al timbre.
Manmen: Ese debe ser Louis –dije contenta-
Me dirigí corriendo a la puerta, me temblaba el pulso, agarré el pomo con seguridad y la abrí, no sin antes dar un suspiro para soltar los nervios.
Louis: Hola preciosa –sonrió mostrando sus dientes, lo que provocaba que se le achinaran los ojos, era tan gracioso-
Manmen: Hola guapetón –reí-
Realmente iba guapo: http://www.polyvore.com/sin_t%C3%ADtulo_45/set?.locale=es&id=53100605
La camiseta se ajustaba perfectamente a su torso y los pantalones dejaban ver sus delgadas pero musculadas piernas.
Louis: ¿A dónde vamos? –dijo sonriente cuando salimos del vecindario-
Manmen: ¿Qué tal a una cafetería? –le propuse, pero él puso un gesto de que no le parecía buena idea-
Louis: Es que… me paso todas las tardes metido en una, y para una tarde que tengo libre… -dijo sin intención de que me enfadara-
Manmen: Om… llevas razón jajajaja tranquilo, hay muchos sitios a los que podemos ir –sonreí y él alegró la cara-
Louis: ¿Me dejas que te lleve a un sitio muy especial? –sonrió tierno-
Manmen: Normalmente esa propuesta la rechazaría de otro chico, pero si me lo pides con esa carita… -dije con gracia-
Louis: Jajajaja vaya… gracias –sonrió- ¿te fías de mí entonces? –pasó su lengua por sus labios-
Manmen: ¿Por qué no iba a tener que fiarme? –crucé mis brazos mostrando preocupación-
Louis: Jajaja ¿entonces crees que soy buen chico? –sonrió ampliamente y yo reí-
Manmen: Ahora me estás haciendo dudar… -le dije y el abrió la boca en forma de O-
Louis: Oh vamos, sí que lo soy, si no, no estarías saliendo conmigo… -alzó las cejas triunfante-
Manmen: Está bien chico bueno, llévame a dónde quieras… pero ojito que se kárate –él alzó las manos como si fuese inocente y sonrió-
Louis: Tendré las manos donde puedas verlas guapita –me guiñó un ojo y reí negando con la cabeza-
Empezamos a andar dirigiéndonos a un parque cercano mientras hablábamos de todo un poco. Era un parque enorme, http://www.google.es/imgres?q=parques+con+estanque&um=1&hl=es&sa=N&rlz=1C1RNKA_enES486ES486&biw=1280&bih=923&tbm=isch&tbnid=kH-eR-WgFaP_OM:&imgrefurl=http://www.unlugarecologico.com/2012/01/los-verdes-secretos-de-donostia-san.html&docid=bOPQaRyZSHHpYM&imgurl=http://3.bp.blogspot.com/-JKGA2FVfyzo/Tx7MtOznGkI/AAAAAAAABu8/uxsomMaKVIM/s1600/parque_Aiete_cisnes_estanque.JPG&w=1600&h=1200&ei=9bYNUISjKIaJ0AXJzN3ACg&zoom=1&iact=hc&vpx=520&vpy=293&dur=1188&hovh=194&hovw=259&tx=99&ty=143&sig=110212057515251514767&page=1&tbnh=130&tbnw=162&start=0&ndsp=30&ved=1t:429,r:8,s:0,i:97 lleno de árboles verdes y al parecer tenía un gran estanque con patos y cisnes. Me estaba riendo muchísimo, Louis era muy gracioso y estaba loco, empezó a gritarle: “¡KEVIIIIIIIN!“ a todas las palomas del parque, hasta que una se le paró encima de la cabeza.
Louis: ¡KEVIN! –y sonrió como un niño chico, yo no podía parar de reírme- Me tenías muy preocu… ¡auch! –la paloma picoteó su cabeza- ¡Kevin eso no se hace! ¡Estás castigado! –la paloma puso cara rara y salió volando, no sin antes dejarle un pequeño regalito en la camiseta…-
Manmen: Ups… -ahora sí que no podía para de reír-
Louis: Oh… ¡mierda! –maldijo entre dientes-
Manmen: Si… eso es exactamente lo que llevas en la camiseta… -intenté aguantarme la risa pero era imposible-
Louis: Estoy quedando genial… -murmuró y corrió a una fuente-
Intentó echarse agua pero no llegaba al punto exacto. Yo lo observaba desde lejos mientras negaba con la cabeza. Este chico es un espectáculo…
Manmen: ¿Te ayudo? –me acerqué y saqué un pañuelo del bolso. Lo escuché murmurar insultos entre dientes-
Louis: ¡Se ha cagado en un punto en el que es imposible que llegue mi brazo! –hizo pucheros. Realmente estaba loco-
Con el pañuelo le quité los restos y le limpié la camiseta con un poco de agua.
Manmen: ¡Ala! Ya está –sonreí y tiré el papel a la basura-
Louis: Gracias linda –sonrió- pero… ¿sabes qué? –puso su dedo índice bajo el labio como si estuviese pensando-
Manmen: ¿Qué pasa?
Louis: No me apetece ir yo solo mojado por la calle… -amplió la sonrisa de oreja a oreja-
Manmen: ¿A qué te refie…? -antes de que pudiera acabar la frase Louis me estaba echando agua de la fuente- ¡¡Aaaaaah, Louis!! –salí corriendo y él detrás de mí-
Louis: Jajajajaja vamos Manmen, así iras más fresquita ¡no corras!
Manmen: ¡No Louis para! –intenté escapar por detrás de un árbol pero antes de que me diese cuenta sus brazos ya me tenían rodeada-
Creí que no iba a ser capaz pero si… me metió dentro de la fuente… acabé toda empapada…
Manmen: Louis… te… te…te… -apreté los puños-
Louis: ¡amas! Lo sé –sonrió-
Manmen: ¡odio! –entrecerré los ojos-
Louis: Eso me ha dolido –hizo pucheros-
Manmen: ¡Te lo mereces!, esto no es de ser chico bueno… -ahora era yo la que hice pucheros-
Louis: Llevas razón… -se puso serio, se metió en la fuente y se puso bajo el chorro de agua-
Manmen: ¡Louis no! –estiré de su brazo para sacarlo- ¿qué haces? ¡Te vas a poner empapado entero loco! –él rió con todos los pelos en la cara-
Louis: Me encanta ser loco, ahora la gente nos mirará raro, ya verás –salió de la fuente y me ayudó a mí también a salir-
Manmen: Es obvio que nos miren raro Louis… ¡vamos empapados! –dije señalándonos-
Louis: Jajajaja es divertido –sonrió-
Manmen: Louis… no me gusta que la gente me mire… -suspiré sin remedio-
Louis: ¡Oh vamos! Te gustará –pasó su brazo por mi hombro- somos diferentes al resto, me gusta ser diferente al resto –sonrió orgulloso y empezó a andar-
Efectivamente toda la gente nos miraba con cara rara, como si estuviésemos locos. Yo estaba muerta de vergüenza mientras Louis iba tan campante. Admiraba su forma de actuar, la manera en que le daba igual lo que pensara o dijese la gente. Era genial. No podía dejar de mirarlo. Estuvimos bastante rato andando por el parque, era gigante y realmente hermoso. Incluso el sol secó nuestras ropas.
Louis: Espera aquí –dijo y entró en una tienda de chuches y revistas-
Al cabo de un rato salió con una bolsita blanca pero no sé que tenía en su interior.
Manmen: ¿Qué has comprado? –pregunté mirando la bolsa intentando saber qué era-
Louis: ¿Te gustan los patos y los cisnes? –me preguntó-
Manmen: Si –sonreí-
Louis: ¡Bien! –sonrió y enseñó sus dientes-
Llegamos a un puentecito que cruzaba el estanque, por debajo de este iban pasando cisnes blancos y preciosos con sus crías, eran tan monos.
Manmen: Oh! Son adorables –dije asomándome para verlos mejor-
Louis: Ten –abrió la bolsa y sacó un trocito de pan-
Manmen: ¿Entraste a comprar comida para los patos? –sonreí. Fue algo que me pareció tierno por su parte-
Louis: Sí –sonrió y apoyó los brazos cruzados en la baranda- Siempre que me encuentro mal vengo a pasear por aquí, y este es mi lugar favorito de todo el parque. Desde aquí se ve todo y es muy tranquilo, me relaja bastante y me ayuda a olvidar todos los problemas que pueda tener… -confesó con la mirada perdida en el horizonte. Yo le observaba embobada mientras le daba de comer a los patos, que no tardaron en hacer un corrillo alrededor de las migajillas que iban cayendo-

Narra Louis:

Amaba este lugar, poca gente sabía que yo venía aquí cuando me encontraba mal, tan sólo lo sabían Harry, Zayn y ahora Manmen. No solía haber mucha gente por aquí a pesar de que es un sitio precioso y muy romántico. Esta parque ya no es lo que era… suele estar más lleno los fines de semana o festivos, hoy al ser un día laboral apenas había gente, pero lo prefería. Esta baranda a escuchado muchos de mis lamentos y soportado muchas de mis lágrimas, pero aún así no lo veía como un sitio amargo por mis malos recuerdos, al contrario, lo veía cada vez más hermoso y me encantaba venir aquí siempre que podía a ver la puesta de sol.
Manmen: Es precioso –me sacó de mis pensamientos. La miré y los rayos de sol que iluminaban su rostro la hacía aún más preciosa de lo que ya era. Sonreí inconscientemente-
Louis: Aún será más bonito dentro de… -miré mi reloj de muñeca- media hora exactamente, perfecto.
Manmen: ¿Más aún?, no lo creo… jajaja –hasta su risa era preciosa- enserio, llevo casi cuatro meses aquí, y no sabía de este sitio… -me dio un trozo de pan y pizcó un poco más para los patitos que miraban para arriba para que les echáramos más-
Louis: Este parque es muy famoso aquí en Londres, pero muy poca gente se para a recorrer todas las partes, es muy grande y prefieren otras zonas más cercanas a la entrada –le expliqué mientras miraba como se peleaban dos patitos por un trozo de pan hasta que mamá cisne los separó-
Manmen: Es cierto, hemos andado mucho, creo que ahora mismo no sé ni en qué parte estamos jajajaja
Louis: Tranquila jajajaja, mientras no te separes de mí no te perderás –sonreí y ella me correspondió con una sonrisa dulce-
Estuvimos hablando del instituto y más cosas hasta que recordé la sorpresa que le tenía preparada, le iba a encantar. Volví a mirar mi reloj y sonreí.
Louis: Un minuto –susurré-
Manmen: ¿Un minuto para qué? –preguntó, pero yo seguía contando los segundos-
Miré al frente y sonreí.
Louis: Para esto… -ella miró también hacia el frente y pude ver como se quedó boquiabierta-
Manmen: Louis…es, es, es la puesta de sol más bonita que he visto en mi vida… -se llevó las manos a la boca-
Louis: Me alegro que te guste preciosa –sonreí satisfecho-
Los dos permanecimos en silencio observando la puesta de sol. Realmente era increíble, el cielo anaranjado iluminaba todo el paisaje, incluso los verdes árboles ahora eran naranjas-amarillentos también; en el agua un gran círculo naranja en constante movimiento por las pequeñas hondas que nacían de las patas de los cisnes, los cuáles resaltaban aún más con el plumaje blanquecino. De pronto noté como ella apoyaba su cabeza en mi hombro, la miré y estaba sonrojada y con sonrisa cálida dibujada en su cara, yo sonreí, era tan tierna. Agarré su barbilla y la hice que me mirara, quedando frente a frente, la rodeé con mi otro brazo por la cintura. Ella abrió los ojos como platos por mi repentino movimiento y sonreí.
Louis: ¿Sabes que eres aún más bonita con la puesta de sol?... –acaricié su mejilla sonrosada-
Manmen: Pero que cosas dices Louis… -rió nerviosa, lo noté, lo estaba, miró a todos lados menos a mis ojos, pero he de reconocerlo, yo también lo estaba-
Louis: Eh… mírame… -le pedí en un susurro y me miró poniéndose aún más colorada, fue a decir algo, pero no le dejé, ya que… la besé-

Narra Manmen:

No me lo podía creer… en cuestión de segundos pasé de estar apoyada en el hombro de Louis a estar rodeada por la cintura con su brazo y a tenerlo pegado en mis labios. Eran cálidos y suaves. Él me apegó aún más a su cuerpo, su ropa aún estaba un poco mojada pero su piel era cálida. Agarró mi cara entre sus manos, abrí mis labios y él comenzó a buscar mi lengua con la suya, su lengua se movía rápido y recorrió con ella toda mi boca. Fue un beso increíble, nunca llegué a pensar que Louis besara tan bien…
Manmen: Guau… -dije cerca de sus labios cuando tuvimos que separarnos por falta de aire- besas genial –dije sincera-
Louis: Lo sé –sonrió y pellizqué su brazo- jajajaja es broma tonti… tú sí que besas genial… -me dio un piquito-
Manmen: Pues… ¿a qué esperas para repetirlo? –sonreí y él también-
Louis: Encantado preciosa… -tras esas últimas palabras no se volvieron a escuchar nada más que besos y el chapoteo de los patos en el agua-
Al cabo de una hora terminamos nuestro paseo agarrados de la mano y llegamos a mi casa.
Louis: Bueno… creo que el trabajo tendrá que esperar para otro día… -rió-
Manmen: Me temo que si… -reí- pero no cambio la tarde que he pasado hoy contigo por nada del mundo –dije abrazándolo por el cuello y dándole un beso corto pero intenso-
Louis: Sabía que te encantaría –sonrió triunfante y reí-
Manmen: Y has sido buen chico –rocé mi nariz con la suya-
Louis: Es verdad… -en ese momento bajó las manos hasta mi culo-
Manmen: ¡Oye! –reímos y le di un cachete-
Louis: Ala… ya estamos en paz… -rió y me robó un beso- Hasta mañana preciosa… -me dio otro corto beso-
Manmen: Hasta mañana bonito… -atrapé su labio inferior y rápidamente di paso a mi lengua dentro de su boca-
Al cabo de diez minutos entré en casa suspirando como una enamorada y buscando a Marta como loca para contárselo todo.

Capitulo 14:

Narra Melissa:

Salí del cuarto tras escuchar golpes en la puerta, era Raquel preguntándome si ya me encontraba mejor y si había pensado en qué iba a hacer con Harry…y sí…ya lo tenía claro… Azahara y Raquel me empezaron a preguntar desesperadas y yo simplemente reía, era gracioso verlas con los ojos como platos y ansiosas por saber la respuesta.
Melissa: Jajajaja, ya he decidido que voy a hacer con Harry, pero… ¿Por qué os alegráis tanto?... ni si quiera he dicho lo que voy a hacer con él… -dije seria-
En ese momento las dos locas dejaron de saltar y pegar gritos y me miraron con los ojos como platos.
Azahara: ¿No… no es para alegrarnos? –dijo con pena-
Raquel: Mel… no… por favor… -dijo poniendo su labio inferior sobre el superior-
No pude aguantar la risa de ver esas caras y me empecé a reír.
Azahara: ¿Por qué te ríes?... no tiene gracia… -se cruzó de brazos fingiendo enfado-
Raquel: Eso… -imitó la postura de Azahara- ¡va Mel no nos dejes así! –me cogió por los hombros y empezó a zarandearme como una loca-
Melissa: Vale, vale… tranquilas… he decidido que… -de pronto comenzó a sonar un móvil y las dos abrieron los ojos y miraron para todos lados para ver qué era-
Azahara: ¿Qué narices es eso? –y miró a Raquel ya que el sonido provenía de ella-
Raquel: Ups… mi móvil… -rió nerviosa y maldijo después por haber estropeado la noticia-
Sacó el móvil y miró la pantalla y abrió la boca todo lo que pudo seguido de un chillido.
Melissa: ¿¡Qué pasa!? –dije tapándole la boca corriendo-
Raquel: ajsd sda addsal zajh
Azahara: ¿Qué?... ¡Mel quítale la mano de la boca!
Melissa: ¡Ais perdón! –la quité corriendo- ¿Qué pasa?
Raquel: Es…es…u-un…mensaje!!!! –comenzó a saltar-
Azahara: ¿Desde cuándo te alegras tanto de recibir un mensaje de Orange?... –dijo irónica-
Raquel: Nch… boba… no es de Orange… es… ¡de Zayn! Aaaaaaaa! –y volvió a gritar dando saltos-
Melissa: ¡Para! –le volví a tapar la boca- ¿Qué dice? –ella me ofreció su móvil y leí en voz alta-

Mensaje:
“Buenos días pequeña, ¿qué tal has dormido?:) ¿Te apetece que quedamos hoy también?... ayer creo que nos quedamos a medias… :P un beso, Malik”

Melissa: ¿Cómo que os quedasteis a medias? –entrecerré los ojos, la miré y vi como su cara pasó a ser roja en segundos y empezó a hacerse aire con las manos-
Azahara: Creo que me he perdido muchas cosas… ya estáis tardando en contar… que tú aún no has terminado así que no te hagas la loca… -me miró con los ojos entrecerrados y señalándome con el dedo- y tú te lo tenías muy calladito, ¿no guapita? –cruzó los brazos-
Melissa: Empieza tú… -le dije a Raquel ansiosa por saber qué había pasado con ella y con Zayn, ya que fui tan tonta que ni me acordé de preguntarle-
Raquel: Ah no, primero tú que te has quedado a medias… -se cruzó de brazos ella también-
Azahara: Eso, venga, me da igual la que empiece, ¡pero que hable alguna ya! –dijo moviendo enérgicamente los brazos-
Melissa: Esta bien… -las dos me miraron atentas- le voy a dar una oportunidad a Harry… -las dos se miraron entre ellas con amplias sonrisas y empezaron a gritar y a abrazarme- pero solo voy a mostrarme como soy realmente, dejarlo que me conozca tal y como soy, pero si algo no funciona…
Azahara: ¡No pienses eso! –dijo cogiéndome de las manos-
Raquel: Todo va a salir genial –sonrió y me acarició el brazo-
Melissa: Gracias chicas –sonreí- bueno haber… ¿y a ti qué te ha pasado con Zayn? –esta se volvió a poner colorada en cuanto escuchó el nombre- que ayer se me olvidó preguntarte… iba tan ciega con lo mío…
Raquel: Jajajaja no te preocupes cari –sonrió- pues… nada…
Azahara: ¿Cómo que nada? ¿No te besó? –dijo sorprendida-
Raquel: No… -bajó la mirada-
Azahara: ¡Pero si está claro que le gustas! ¿Por qué no te besó? –dijo con rabia-
Raquel: Pues… porque a nosotros también nos “interrumpió” su criada… -dijo mirándome y suspirando-
Azahara: ¡Joder! Eso les pasa por tener criada… -dijo cruzándose de brazos y bufando-
Yo reí y miré a Raquel con compasión, esta puso carita de pena y reímos.
Raquel: Si… pero es que después me llamó mi madre…al móvil… justo cuando él iba a intentar besarme otra vez… -dijo esta vez con rabia de verdad-
Melissa: Ya sabes cari, las madres siempre jodiendo los mejores momentos… -reí-
Azahara: En fin… será mejor que nos vayamos vistiendo o volveremos a llegar tarde… -dijo esto y se fue a su habitación a cambiarse-
Melissa: Entonces… le gustas –dije cogiéndole la cara a Raquel-
Raquel: No lo sé… -dijo colorada-
Melissa: ¡Claro que le gustas! ¿A caso no te lo dejó claro cuando estuvo a punto de besarte? –sonreí pícara- además… hoy habéis quedado otra vez.
Raquel: Ais calla… -rió nerviosa-
Fue a vestirse y yo hice lo mismo. Como hoy hacía solecito me puse esto:
http://www.polyvore.com/sin_t%C3%ADtulo_21/set?.locale=es&id=52838308 Me dejé el pelo suelto y me pinté. Después fui a desayunar.

Narra Raquel:

Me dirigí a mi habitación y cerré la puerta mientras pensaba que me podía poner hoy. Me asomé a la ventana y vi que hacía sol, parecía que hoy iba a ser un muy buen día. Sonreí al recordar el mensaje de Zayn y se me formaron unas cosquillas en la barriga. Abrí el armario y rebusqué entre la ropa buscando algo corto, encontré esto http://www.polyvore.com/sin_t%C3%ADtulo_117/set?.locale=es&id=54393791 y me lo puse, además también encontré la mochila de Hello Kitty que me regaló mi prima pequeña, me traía tantos recuerdos… así que saqué todas las cosas de la otra mochila y las metí en esta. Me miré en el espejo y acomodé bien la camiseta, dejando asomado un hombro. Me peiné y me dejé el pelo suelto con el flequillo recogido, me pinté y fui a desayunar.

Narra Azahara:

Me fui a mi cuarto tras hablar con las chicas, parecía que todo iba genial, Mel le iba a dar una oportunidad a Harry y, obviamente, este no la iba a rechazar; Raquel y Zayn se gustaron mutuamente desde un principio, por lo que no había mucho que predecir… era evidente. Por último estaba yo… me gustaba Liam, desde que me choqué aquel día con él, incluso soñé que le devolvía su chaqueta y cosas sin sentido. En ese momento recordé que aún tenía su chaqueta guardada, y creo que iba siendo hora de devolvérsela, ya llevaba más de una semana conmigo. Abrí el armario y busqué que ponerme:
http://www.polyvore.com/sin_t%C3%ADtulo_59/set?.locale=es&id=53105098
Pensé en coger también su chaqueta pero iba a acabar demasiado arrugada de llevarla metida en la mochila. Después de aquel día en que por fin supe cómo se llamaba volvimos a hablar, me dijo que algún día teníamos que quedar y de paso le devolvería su chaqueta, pero ninguno de los dos nos atrevimos a fijar un día para nuestra “cita”, por eso su chaqueta seguía en mi armario e intuía que ahí se iba a quedar por más tiempo. Suspiré y salí de la habitación dirigiéndome a la cocina. Allí ya estaban las chicas y me senté con ellas a desayunar. Al rato me llegó un mensaje al móvil, era de Manmen y decía que tenía que contarnos algo. Las tres nos miramos extrañadas y nos dirigimos al instituto. Al llegar vimos a Manmen y a Marta con una gran sonrisa en la cara.
Manmen: ¡Hola chicas! –dijo alegremente-
Azahara: Buenas –sonreí- ¿Ha pasado algo malo? –dije mostrando mi móvil-
Manmen: Ah, no, jajajaja –se puso colorada y empezó a juguetear con sus dedos-
Raquel: ¿Entonces qué es lo que tienes que contarnos? –respondió aliviada-
Manmen miró a Marta y esta sonrió dándole ánimos.
Manmen: ¿Recordáis que ayer quedé con Louis? –y nos miró a las tres-
Melissa: Es cierto, ¿qué pasó? –dijo entusiasmada-
Manmen: Pues… nos besamos… -se llevó las manos a las mejillas y suspiró-
Raquel, Melissa, Azahara: Aaaaaaaaaaaaaaaahhhhhhhhhhhhhhhhhh!!!!!!!!! –y corrimos hacia ella para abrazarla. Creo que la pobre acabó espachurrada entre tantos brazos-
Azahara: ¿Entonces sois…? –no hacía falta que terminara la frase, vi como se le iluminó la cara con una amplia sonrisa-
Manmen: Bueno… aún no hemos hablado nada… pero… -en ese momento alguien la agarró por la cintura y ella abrió los ojos como platos-

Narra Manmen:

Estaba hablando con las chicas cuando de pronto noté que alguien me rodeaba la cintura con los brazos, me quedé paralizada y escuché su voz en mi oído: “Buenos días preciosa”, una sonrisa se me dibujó de inmediato y me giré para quedar frente a frente. Y pude ver sus ojos celestes que iban a juego con su preciosa camiseta http://www.polyvore.com/sin_t%C3%ADtulo_121/set?.locale=es&id=54656354 Sonreí al ver su cara y me besó. Noté como las chicas se quedaron en silencio y nos miraban. Me separé de sus labios aunque no quería hacerlo y me giré para ver a las chicas que, efectivamente, estaban boquiabiertas y no nos quitaban ojo.
Louis: ¿Estas son las amigas de las que tanto me has hablado? –sonrió y las miró-
Ellas sabían quién era Louis por lo que les había contado y porque ya me habían visto más veces con él, pero no se las llegué a presentar.
Manmen: Si –sonreí y comencé a nombrarlas- Marta –se dieron dos besos y ella sonrió- Azahara –que seguía boquiabierta- Raquel –que se puso colorada cuando Louis le dio dos besos- y Melissa –él la miró y frunció las cejas-
Louis: A ti te conozco… -dijo haciendo memoria-
Melissa: Si… nos conocimos el primer día de instituto, “el encantador Louis Tomlinson a sus pies”–dijo imitando su voz y en ese momento Louis abrió los ojos y sonrió-
Louis: ¡Ya me acuerdo! Eres esa chica que mojé sin querer cuando mi intención era mojar los ricitos de Harry –empezó a reír-
Melissa: La misma… -suspiró y acabó riendo ella también-
Louis: Caramba que sorpresa, ¿qué tal te va con Hazza? –preguntó abrazándome de nuevo-
Melissa: Omm… -nos miró a todas y Raquel soltó una risita y dos segundos después la campana sonó-
Azahara: Salvada por la campana –dijo cogiendo su mochila y dirigiéndose a clase-
Louis: Oh vaya, creo que será mejor que me vaya o llegaré tarde –dijo mirando el reloj- Nos vemos luego preciosa -Besó mi mejilla y se fue-
Manmen: Aiiish… -observé cómo se iba-

Narra Marta:

Manmen se quedó ahí plantada en mitad del patio mientras miraba como Louis se iba corriendo. Las chicas se despidieron y se fueron a sus correspondientes clases mientras que Manmen y yo teníamos Latín.
Marta: ¿Piensas quedarte ahí todo el día?... –dijo agarrándola del brazo-
Manmen: Ais… lo siento, es que es tan guapo… *suspiró* -yo reí-
Marta: Anda vamos… -en ese momento recordé que había olvidado coger el libro de latín que me lo dejé en la taquilla- ¡Mierda! –miré en la mochila por si acaso pero no, allí no estaba-
Manmen: ¿Qué pasa? –me miró-
Marta: Se me ha olvidado el libro de Latín en la taquilla… -dije poniendo cara de preocupación-
Manmen: Tranquila es el primer timbre, tienes tres minutos todavía, las taquillas no están lejos, ¡corre! –dijo señalando en dirección a las taquillas-
Eché a correr y subí las escaleras lo más rápido que pude, iba tan rápido que ni me paré a ver si había alguien por el pasillo y al girar la esquina me choqué con algo y caí al suelo.
Marta: ¡Auch! –dijo frotándome el culo, me dolía-
------: ¡Oh! Lo siento, ¿estás bien? –abrí los ojos y vi a un chico alto, de piel blanquita, rubio y de unos preciosos ojos azules-
Marta: S-si… -el chico me ofreció su mano para levantarme y la acepté-
------: ¿Te has hecho daño? –preguntó preocupado-
Marta: Un poco… pero soy fuerte –sonreí y él cambió su gesto de preocupación por una sonrisa-
Quizás no fuese una sonrisa perfecta (ya que tenía los dientes torcidos), pero me gustaba. Era una sonrisa linda y preciosa, aunque mucha gente dijera lo contrario. No sé por qué pero, ese chico me recordaba muchísimo a alguien…
------: Lo siento, de verdad, no te había visto, iba con los cascos puestos y no te oí… -dijo rascándose la cabeza con nerviosismo-
Marta: Tranquilo, no pasa nada, estoy-estoy bien –mentí, me dolía muchísimo el culo, pero sonreí- la culpa a sido mía, iba tan rápido que ni me di cuenta de… -en ese momento me quedé mirando su cuello, el corazón se me paralizó al ver un colgante en él, pero no era un colgante cualquiera… era un trébol http://www.polyvore.com/sin_t%C3%ADtulo_120/set?id=54655980, un trébol que me era muy familiar… Tragué saliva y volví a mirarlo a los ojos, me miraba con cara extrañada por mi reacción.
-------: ¿Te pasa algo? –siguió mi mirada y agarró el colgante con su mano-
Marta: E-e-ese colgante… -el chico se puso serio- ¿de dónde… lo has sacado? –lo miré y los dos clavamos nuestras miradas, aunque él parecía seguir extrañado por mi reacción-
-------: Este colgante es muy importante para mí… es una larga historia…¿por qué te llama tanto la atención?... –dijo con un tono frío-
Marta: Ese… ese colgante… -me llevé la mano al cuello y saqué uno exactamente igual-
http://www.polyvore.com/sin_t%C3%ADtulo_119/set?.locale=es&id=54655520
El chico abrió los ojos todo lo que pudo y apretó la mandíbula.

Capítulo 15:

Narra Marta:

Marta: Hola… Niall… -dije reprimiendo las ganas llorar, no sabía si ponerme a gritar que por qué no volvió a dar señales de vida, o correr y dejarlo ahí-
Niall: ¿Marta?, ¿eres tú de verdad? –dijo con una pequeña sonrisa en la cara-

Flash-back:
Conocí a Niall cuando era pequeña, tendríamos 14 o 15 años. Aunque en verdad le conocí gracias a Ashley http://www.google.es/imgres?q=tumblr+girls&um=1&hl=es&sa=N&rlz=1C1RNKA_enES486ES486&biw=1280&bih=887&tbm=isch&tbnid=w40U1waoYYaxdM:&imgrefurl=http://calvinscanadiancaveofcool.blogspot.com/2011/12/tumblr-girls-are-magnificent.html&docid=mg_5-xDBXpwsqM&imgurl=http://2.bp.blogspot.com/-QoZdf9t5bm8/Tuv4vbzDRkI/AAAAAAAA1cs/rDuYFo7R1S8/s400/tumblr_lsb41eAOau1qf89uro1_500.jpg&w=400&h=300&ei=7yAcUKDxN-mo0QXckIH4CQ&zoom=1&iact=hc&vpx=360&vpy=161&dur=1247&hovh=194&hovw=259&tx=106&ty=84&sig=110212057515251514767&page=1&tbnh=158&tbnw=211&start=0&ndsp=22&ved=1t:429,r:1,s:0,i:76
Ella vivía en Inglaterra hasta que tuvo 3 años, que se vino a vivir a España hasta que tuvo 12 años y se volvió a mudar a Mullingar (Irlanda) por el trabajo de su padre. Recuerdo que lloramos muchísimo cuando nos enteramos de que tenía que irse, nos conocíamos desde que teníamos 6 años; desde entonces estuvimos todo ese tiempo juntas, éramos como hermanas, inseparables, las mejores amigas, incluso llegué a decirle a mi madre de “adoptarla” para que se pudiese quedar conmigo, y así seríamos como hermanas de verdad, tonterías de crías supongo. En su despedida me prometió que vendría todos los veranos, y así fue. El primer verano lo pasamos juntas como si nunca se hubiese ido, pero tuvo que hacerlo de nuevo. Deseé con todas mis ganas que llegara el verano siguiente para verla, no parecía ni la misma Ashley de dos años atrás, se puso guapísima, le creció su larga melena rubia, sus ojos claros ahora resaltaban aún más por la raya negra de lápiz, estaba mucho más delgada y alta, tenía un cuerpazo y los dientes que hacía un año estaban llenos de braquets ahora eran perfectos y súper blancos. Digamos que se convirtió en la chica destacada del instituto. Me contó que ese año en Mullingar fue increíble, que todo en el instituto le iba genial y que conoció muchos chicos, y ahí es donde entra en la historia Niall, ese rubio tímido de ojos azules del cual me encantaba escucharlo reír. Niall llevaba enamorado de ella dos años, pero Ashley pasaba de él, lo veía tan solo como un amigo, pero no le gustaba como algo más. Ella estaba enamorada de Ryan, un chico que por lo que me contó era el típico chulito y la estrella del equipo de Baloncesto. Niall era un chico normal, no destacaba entre los demás pero era mono. Ese verano me lo presentó por internet y me cayó genial, de hecho le invité a que viniese a pasar las vacaciones de verano al año siguiente, y así podría conocerlo en persona, aunque a Ashley parecía no hacerle mucha gracia, pero le insistí en que viniese con él, quería conocerlo, aunque ella se pensó que se lo pedía porque me gustaba, cosa que no era así, solo nos llevábamos bien y quería conocerlo en persona ya que cabía la posibilidad, así que al año siguiente Ashley apareció con Niall y yo me puse muy contenta al verle; era la primera vez que lo veía pero me sentía como si lo conociese desde hacía muchos años, desde que me lo presentó Ashley por internet hablábamos todos los días y nos contábamos todo, era mi mejor amigo. Ese verano fue el mejor de mi vida, fuimos al río a pescar y Niall consiguió un pez enorme, aunque acabamos empapados enteros… fue el día que más me reí en mi vida. Nos echamos muchísimas fotos y nuestra amistad se hizo más fuerte. Noté a Ashley rara, como celosa, pero no sabía exactamente por qué… hablé con ella y me dijo que no le pasaba nada, que simplemente estaba cabreada porque Ryan la había dejado, si… en ese año parece que pasaron muchísimas cosas… Niall se atrevió de una vez y le pidió salir a Ashley, ella me lo contó y la convencí, estuvo a punto de decirle que sí… pero Ryan le pidió salir también y… rechazó al pobre Niall, a pesar de eso siguió detrás de ella protegiéndola y amándola. Ashley comenzó a salir con Ryan, al principio me cabreé con ella, no me parecía buena idea, yo solo quería que ella estuviese con Niall, me cerré a esa idea hasta que ella insistió en presentármelo y no era mal chico, al final me acabé acostumbrando aunque no me terminaba de convencer la idea de que estuvieran juntos. Pasaron todo el año juntos, eran la “parejita perfecta”, estaban las 24 horas del día al lado el uno del otro, ya podéis imaginaros todo lo que hacían… ahora era yo la que por una parte estaba “celosa”, quería mucho a Ashley y sabía que ella a mí también, pero estaba totalmente cambiada desde que Ryan la separó de Niall y de mí… Por eso Niall y yo empezamos a ser más amigos, si se podía, a pesar de no habernos visto en persona aún nos poníamos todos los días la cam y se puede decir que ese año apenas tuve vida social fuera de la ventana de conversación con él… Por eso cuando lo vi en persona, por fin, fue como algo que llevaba esperando desde hacía muchísimo tiempo. Ryan dejó a Ashley por una de las animadoras del equipo… fue todo un bombazo en el instituto y al parecer ahora todos los alumnos hablaban sobre ello, incluso hicieron un ranking para ver con quien hacía mejor pareja, si con Ashley o con esa animadora (Keith), cosa que a Ashley le sentó fatal, ya que el resultado fue que hacían mejor pareja Ryan y Keith. Estaba tan cabreada que la pagó conmigo sin ningún motivo, salió de mi cuarto (ya que dormíamos juntas) hecha una furia y se fue a yo que sé donde… yo acabé llorando y en la habitación de Niall (que en verdad era la habitación de mi hermano y estaba justo al lado). Niall me abrazó e intentó tranquilizarme, después salimos a buscar a Ashley y la encontramos cerca del lago llorando como una madalena. Al vernos se secó corriendo las lágrimas, me miró y vio que yo también estaba llorando, nos abrazamos y me pidió disculpas. Niall se unió al abrazo con un tierno “mis niñas” y besó nuestras frentes, era tan lindo… A los tres días se tenían que ir de nuevo a Mullingar, acabé llorando, les iba a echar muchísimo de menos, pero sobre todo a Niall, el cual me prometió que un día me llevaría a Irlanda para que viese lo bonita que era. Esos tres últimos días los pasé al lado de Niall todo el tiempo, no sé por qué pero necesitaba estar con él, sabía que lo echaría muchísimo de menos, así que pensé que era solo por eso… hasta que el último día, al despedirse, cuando Ashley ya estaba montada en el coche, Niall me abrazó muy fuerte, yo empecé a llorar, las lágrimas recorrían mi mejilla haciéndome cosquillas y él secó una de ellas con un beso, yo me puse colorada y un poco nerviosa, no era el primer beso que Niall me daba en la mejilla, pero si el primero en el que nos quedamos tan cerca el uno del otro mirándonos fijamente. De sus labios salió un sincero “te echaré de menos gordi” y rió, yo también reí y le dije: “te echaré de menos leprechaun”, una lágrima volvió a recorrer mi mejilla y me besó muy cerca de los labios, me quedé paralizada por unos segundos, estuvimos a punto de besarnos, sonrió y se montó en el coche no sin antes taparse la cara con su gorra ya que había empezado a llorar él también. Los siguientes días los pasé pegada al ordenador hablando con él y recordando ese “casi-beso” una y otra vez. No sabía que me estaba pasando, hasta hacía un mes lo veía solo como un amigo, que es lo que era, pero esos tres últimos días no podía dejar de estar a su lado y abrazarlo, lo quería como algo más que un simple amigo, quería besarle… y temía perderlo por una estupidez. Pero al parecer no era yo la única que se sentía así… él me dijo que también se quedó “pillado” por mí, cosa que yo ignoré ya que él siempre había ido detrás de Ashley, era imposible que ahora le gustase yo… y me daba miedo que pasase algo entre nosotros y acabar mal. Ese año pasó rápido, aunque ya empecé bachiller, así que no me pude conectar tanto, ya apenas hablaba con él, aunque todas las noches recibía un mensaje suyo diciéndome que durmiese bien, que soñara con los angelitos o que estaba contando los días que faltaban para volver a vernos y que me echaba muchísimo de menos. Sinceramente, me estaba enamorando poco a poco de él. Hablé con Ashley y me dijo que ahora pasaba todos los días con Niall, que incluso se quedaba a dormir en su casa y que la gente pensaba que estaban juntos, cosa que a ella parecía no importarle, me confesó que le gustaba Niall, así que decidí callarme y no le dije que yo también sentía lo mismo que ella… pensé que sería mejor así, Niall estaría de una vez por todas con Ashley y esta ya no sufriría más por un chico, además yo no tenía posibilidades con él por la distancia, mientras que ella lo veía todos los días… aunque por dentro odiaba la simple idea de imaginármelos juntos. Lloré por las noches, pero a Niall siempre le mentía y le decía que estaba bien para no preocuparlo. Fueron pasando los días y noté que Ashley estaba muy distante de mí, intenté hablar con ella pero nunca me cogía el teléfono, no contestaba mis mensajes y si me conectaba se desconectaba rápido para que no me diese tiempo a hablarle. Se lo conté a Niall y me dijo que le contó lo que pasó el día de nuestra despedida, que estuvimos a punto de besarnos y que los dos sentíamos algo por el otro, y que al parecer Ashley no se lo tomó muy bien…yo me sentí fatal por la pobre Ashley y le reproché a Niall el que se lo hubiese contado, aunque él no tenía la culpa. A los pocos días vi un tweet de Ashley que decía:
“Siento si no te ha gustado, pero ahora sé lo que se siente al probar tus labios, y soy feliz al haberlo hecho antes que ella”
Analicé la frase y decidí llamar a Niall, seguro que él sabría a lo que se refería ya que Ashley no se rendía hasta tener al chico que le gustaba… no me cogía el teléfono, era algo raro en él, ya que siempre me lo cogía, seguro que se pensó que seguía cabreada y más al ver el tweet de Ashley. Le mandé un mensaje y le pedí que me cogiera el teléfono pero él me contestó esto:
“Supongo que ya habrás visto el tweet de Ashley y por eso quieres hablar conmigo, si me ha besado, nos hemos besado… lo siento”.
En ese momento no pude evitar el llanto y hundí mi cabeza en la almohada, que quedó empapada de lágrimas, hasta que me quedé dormida. Me despertó el sonido de mi móvil, no sabía ni qué hora era ni cuanto llevaba dormida, miré la pantalla y era Niall, ni si quiera quería escuchar su voz, me dolió tanto el leer que él también la besó… volví a girarme y a seguir durmiendo. A la mañana siguiente me despertó la luz que entraba por la ventana, abrí los ojos y busqué mi móvil a tientas, con la cabeza aún metida bajo las sábanas, una vez lo cogí miré la hora, eran las doce y media y tenía 2 mensajes y 11 llamadas perdidas. Miré los mensajes uno era de mi hermano, decía que saldría más tarde de trabajar así que tendría que comer yo sola; el otro era de Niall:
“Sé que no quieres hablar conmigo, pero será mejor que bajes a tu puerta y me abras porque necesito hablar en persona, dejar las claras, que no haya malentendidos y espero no haber hecho un viaje en balde”
Miré la hora del mensaje, hacía una hora que me lo había mandado, me froté los ojos y leí de nuevo el mensaje, ¿Enserio había venido hasta España solo para aclarar las cosas y llevaba una hora esperando a que le abriese la puerta? Me levanté escopetada, fui corriendo al baño y me eché agua en la cara para terminar de espabilarme y quitarme las pitarras, ni si quiera me paré a peinarme. Bajé las escaleras lo más rápido que pude y abrí la puerta, pero allí no había nadie, miré por todo el porche pero ni rastro. Una sensación de impotencia recorrió mi pecho y las lágrimas empezaron a brotar de mis ojos. Miré y vi que bajo el felpudo había un pequeño papelito doblado y pillado para que no se lo llevase el viento, lo cogí y lo abrí, era una nota de Niall…
“Como veo que no abres ni contestas mis llamadas he decidido irme… lo siento, espero que algún día puedas perdonarme… Te quiero gordi, Niall”.
Me tapé la cara con las manos. Todo se había echado a perder, necesitaba verlo, abrazarlo, decirle que yo también le quería y volver a escuchar su risa cerca de mi oído, esa risa que me estremecía y me trasportaba a otro mundo, pero ya…nada de eso iba a ser posible, se había ido, para siempre… De pronto unos brazos rodearon mi cintura por la espalda y una voz en mi oído dijo: “¿Por qué lloras pequeña leprechaun?”, era un voz linda pero sonaba triste, en mi cara se dibujó una media sonrisa bañada por las lágrimas y me sentí protegida por unos segundos en esos brazos cálidos y blanquitos. Sequé mis lágrimas y me giré, allí estaba él, frente a mí, muy cerca de mi cara, sus ojos celestes clavados con los míos, como la última vez que lo vi, el día de nuestra despedida… Había cambiado desde la última vez, se había cortado un poco el pelo dejándose una pequeña crestecita, ahora sus mejillas eran más coloradas pero su sonrisa seguía siendo perfectamente imperfecta. Estaba mucho más guapo, más hombre. Lo abracé muy fuerte y él me correspondió de la misma manera, necesitaba ese brazo desde hacía tanto tiempo… lo eché tanto de menos que ya ni recordaba con exactitud su colonia. Volvimos a mirarnos y sonrió.
Niall: ¿Sabes que te sienta genial ese pijama? –yo me sonrojé-
Ni me dio tiempo a cambiarme de ropa, llevaba una camiseta de manga corta que me dio mi hermano, me estaba ancha pero me quedaba un poco cortita, tapaba lo justo pero no era como para ir paseándome por ahí con ella. Entramos en casa y subí corriendo a cambiarme, no me sentía cómoda así vestida delante de Niall. Cuando volví a bajar estaba sentado con cara seria en el sofá. Me senté a su lado y me miró con cara de preocupación. Estuvimos hablando, me contó todo lo que pasó con Ashley, que ella se le presentó un día en su casa y se le tiró a la boca, él intentó apartarse pero ella no le dejaba y acabaron liándose, aunque él no quería y la echó de su casa. Aguanté las ganas de llamarla de todo, ¿cómo mi mejor amiga me podía haber hecho eso? Acabamos aclarando las cosas aunque me dolió que le correspondiera al beso, aunque no podía reprocharle nada ya que yo no estaba con él, ni teníamos nada. Preparé la comida y estuvimos juntos todo el día. Me dijo que se iría esa madrugada, ya que pensaba que no iba a querer hablar con él, yo me entristecí pero no quedaba más remedio, ya tenía el billete de avión y no podía cambiarlo. Mi hermano llegó y se saludaron, se llevaban genial y siempre quiso que estuviésemos juntos. Después de cenar decidimos dar una vuelta y fuimos cerca del lago. De su bolsillo sacó un pequeño paquetito envuelto en papel de regalo y me lo dio. Levanté un ceja con curiosidad y el sonrió, lo cogí y lo abrí. ¡Era un colgante de un trébol! Me alegré tanto al verlo, era muy parecido al suyo, él sabía de sobra que me encantaba ese collar y ahora era como llevar algo suyo, algo que significaba que éramos amigos. Me giré para que me lo pusiera y sonreí satisfecha. Él cogió mi cara y apoyó su frente contra la mía… “te quiero”, eso fue lo último que escuché antes de que posase sus labios sobre los míos, dejando un dulce y cálido beso. Fue el mejor beso de mi vida, no es que me hubiese dado muchos besos con otros chicos antes, tan solo me lié con tres o cuatro, no más… pero el beso de Niall era tan especial, sentí que de verdad lo necesitaba, era como un beso que ambos llevábamos esperando mucho tiempo. Nuestras lenguas comenzaron a juntarse y a fundirse hasta ser una sola. Cuando nos separamos lo abracé fuerte y hundí mi cabeza en su hombro, él me acariciaba el pelo mientras dejaba pequeños besitos por mi cabeza, era tan tierno.
Niall: Hagamos una promesa –me cogió de la barbilla para que lo mirara fijamente a los ojos- Este colgante significará que estamos juntos, aunque haya miles de kilómetros por medio. Solo quedan dos años para que vayas a estudiar a Londres y entonces podremos estar juntos de verdad, yo te esperaré esos dos años… –yo abrí los ojos aún más al escuchar sus palabras- Si alguno de los dos nos quitamos este colgante significará que hemos roto la promesa, que no somos amigos, no nos queremos y que no nos vamos a esperar en estos dos años…
Marta: Pero Niall… son dos años… es mucho tiempo… conocerás a muchísimas chicas, chicas que querrán salir contigo, no podrás rechazarlas todo el tiempo solo por esperarme a mí –empecé a ver borroso porque mis ojos estaban llenos de lágrimas, Claro que quería estar con él y deseaba con toda mi alma que esos malditos dos años se pasaran rápido para poder estar con él, pero era imposible que ambos rechazásemos un simple beso de otra persona en tanto tiempo-
Niall: ¿Crees que no seré capaz de esperarte? –dijo serio- He estado detrás de Ashley dos años enteros Marta…
Marta: No la nombres por favor… -lo corté y el sonrió-
Niall: ¿Crees que Ash es más importante que tú para mí? –lo miré entristecida- si fui capaz de esperarla dos años, ¿no voy a ser capaz de esperarte a ti? Creo que he dejado bien claro que me importas tú muchísimo más que ella, ¿no crees? –me abrazó- He venido hasta aquí para aclarar las cosas, porque necesitaba verte y… -me cogió la cara entre sus manos- hacer lo que no hice en su momento…besarte –y me volvió a besar- Esto es algo que en la vida hubiese hecho por Ashley –pude ver la sinceridad en su mirada-
A las pocas horas mi hermano y yo lo acompañamos al aeropuerto, no podía dejar de llorar y abrazarlo, hasta mi hermano acabó llorando… se despidió de mí con otro beso cálido y mi hermano sonrió satisfecho. Lo vi montarse en el avión mientras mis ojos ya rojos seguían soltando lágrimas.
Fue pasando el tiempo, Niall y yo volvimos a hablar todos los días, nos poníamos la cam y nos llamábamos por teléfono a todas horas, era la más feliz del mundo. Ashley y yo nos acabamos reconciliando al enterarse de que Niall vino a verme para solucionar las cosas, me pidió disculpas y yo las acepté, al fin de al cabo era mi mejor amiga aún. Se acercaba el verano y con él ¡las vacaciones! Niall tuvo que hacer un viaje con el instituto la semana antes de volver a venir a España junto con Ashley, pero me dijo que estaría de vuelta justo a tiempo para poder venir a España…pero no fue así… ese verano no vino… Cuando fui a recogerlos al aeropuerto solo vi aparecer a Ashley, que dijo que tenía que hablar conmigo, al parecer Niall habló con ella y le dijo que no iba a poder venir ese verano porque… había conocido a otra chica en ese maldito viaje de instituto. Yo me sentí desilusionada, rota por dentro, destrozada. Ashley fue mi hombro de lágrimas durante varios días, hasta que decidí hablar con él. Lo llamé, hasta lo intenté con el móvil de Ashley que me pidió el móvil para mandarle un mensaje por mí, pero nunca me cogía el teléfono, y él tampoco me llamaba ni daba señales de vida, para colmo se me rompió el ordenador, así que no tenía ninguna manera para comunicarme con él. Había roto la promesa… así que ya no hacía falta seguir llevando ese estúpido colgante, me lo arranqué del cuello y lo tiré a un cajón del escritorio lleno de tonterías. Ashley intentó animarme y me sacó todas las noches de fiesta para que conociera a chicos nuevos, todos eran muy majos y guapísimos… pero ninguno tenía el corazón de Niall, no podía sacármelo de la cabeza. Me lié con varios de ellos para intentar olvidarme de Niall, pero sin éxito. Llego el día en que Ashley tenía que marcharse de vuelta a Mullingar, ahora sí que la iba a echar de menos… Aunque no por mucho tiempo ya que solo faltaban 6 meses para irme a estudiar a Londres. Me arreglaron el ordenador pero en cuanto me conecté vi que Niall tenía muchas fotos con chicas y no parecía para nada echarme de menos, aunque… aún llevaba el colgante, me llamó la atención un tweet suyo: “El amor es lo suficientemente fuerte para impedir que las promesas se rompan…trébol” e iba acompañado de una foto del colgante, no entendía entonces por qué había hecho eso… ¿por qué rompió entonces la promesa? Ni si quiera le dije nada, ya me había hartado, me defraudó… aunque le echaba muchísimo de menos. Los meses fueron pasando, no volví a coger el ordenador, ya no había nada interesante que me atara a él. Se acercaba la fecha de irme a Londres y comencé a preparar las maletas. Rebuscando entre los cajones buscando mi MP4 encontré el colgante del trébol y me quedé paralizada, ya ni me acordaba que lo dejé ahí, en ese momento me vinieron a la mente los preciosos ojos de Niall y decidí volver a ponérmelo a pesar de todo… no volví a saber de él en esos 3 meses pero aún así quedaban en mí sentimientos por él,me fui a Londres con la esperanza de volver a verlo algún día…
Fin del flash-back.

Holaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa cielo! Aquí tu nueva lectoraa :D Wii, ¿te dije que me pasaría no? Jaja, bueno, pues aquí estoy :D La novela, es GENIAL en serio. Preciosa, y me encanta como escribes! Te lo digo en serio. ¡Tienes que seguirla! Es perfecta! En cuanto puedas, síguela porfa !

Un beso, Lucía xx

¡Síguela! :(

Capítulo 16: Parte I

Narra Niall:

Iba tan absorto en mi mundo con mis cascos de música que ni me di cuenta de que me choqué con algo hasta que la vi tirada en el suelo. Le iba a decir que tuviera más cuidado de por dónde iba pero me callé la boca al ver que era una chica y que por mi culpa había acabado en el suelo, al fin y al cabo era yo el que iba con la música y en mi mundo y no la vi. La ayudé a levantarse y le pedí disculpas, nuestras miradas se encontraron, eran unos ojos preciosos y también me eran muy familiares, aunque no lograba recordar donde los había visto, hasta que de pronto la chica se interesó por mi colgante del trébol y… ella también tenía uno igual.
Marta: Hola Niall… -dijo al fin-
Niall: ¿Marta?, ¿eres tú de verdad? –dije alegre-
No me lo podía creer, la volvía a tener delante de mí, ¿cómo no me había dado cuenta antes? eran sus maravillosos ojos. Tenía tantas cosas que preguntarle que no sabía ni por dónde empezar. Sentí la necesidad de rodearla con mis brazos y besarla, pero había pasado tanto tiempo y tantas cosas que… ni si quiera sabía si ella seguía sintiendo lo mismo por mí… Estaba claro que yo nunca me olvidé de ella, siempre la tenía presente en mis pensamientos, la llamé todos los días sin hallar respuesta alguna… no entendía por qué de pronto se comportaba así… sí, creo que empezaría a preguntarle eso.
Niall: ¿Por…por qué no me contestabas las llamadas? ¿Por qué no me volviste a llamar? ¿Por qué te olvidaste de mí de la noche a la mañana?...¿Por qué?... –la atosigué a preguntas a las que ni ella misma parecía tener respuestas-
Marta: ¿De qué estás hablando Niall?... –dijo seca- Fuiste tú el que rompiste la promesa ¡no yo! –dijo con los ojos llorosos y golpeó mi pecho con su pucho-
Niall: Eeeh pequeña… -ella rompió en llanto y la abracé. Se la veía tan indefensa y pequeña así. Odiaba verla llorar y más si era por mí- yo no rompí la promesa… te juro que no me olvidé de ti en todo este tiempo, ¿cómo iba a ser capaz de liarme con alguna chica? –le confesé-
Marta: ¿¡Qué no!?... já… -se separó bruscamente de mí aún con los ojos llenos de lágrimas- todos los hombres sois iguales… ¿no podéis resistiros a cualquier tipeja que se os insinúe verdad? –dijo con tono cabreado-
Niall: Espera… ¿de qué estás hablando? –esta vez era yo el que sonaba cabreado-
Marta: No te hagas el loco Niall… me prometiste que me esperarías, te dije que sería mucho tiempo, pero aún así me convenciste de que lo harías y te esperé Niall, lo hice… -conforme iba hablando su tono de voz iba bajando hasta que el llanto la detuvo- lo hice Niall… te esperé…pero tú no… -se tapó la cara con las manos-
Niall: Marta… enserio, no sé de qué me estás hablando-no entendía nada de lo que estaba diciendo, ¿a qué se refería? ¿Por qué me echaba en cara que no la esperé cuando sí que lo hice? Algo aquí me olía mal… e intuía que todo había sido por culpa de Ashley- ¿qué te dijo Ashley de mí cuando te vio? –me atreví a preguntar-
Levantó despacio la cabeza mara mirarme y tragó saliva.
Marta: Ashley… -perdió la mirada en un punto y maldijo entre dientes algo que no entendí muy bien-

Narra Marta:

¿Qué estaba pasando?¿Por qué Niall no admitía de una vez su error?¿Por qué actuaba como si fuera el bueno de la película y yo la mala que inventa cosas? ¿Es que acaso no era cierto todo lo que me contó Ashley?...Un momento… Ashley… fue nombrarle y no sé por qué, pero en ese momento en mi cabeza todo giró en su contra, todas las culpas fueron a parar a ella…
Marta: E-ella… me dijo que tú… -hice una pausa para mirarlo, sus ojos ansiaban saber que había pasado-
Niall: ¿¡Qué!? ¿Qué fue lo que te dijo? –me agarró por los hombros con insistencia-
Marta: Tú me habías olvidado… porque conociste a otra chica en ese viaje de estudios… y estabas con ella -mordí mi labio inferior temerosa al ver la rabia en la mirada del rubio-
Niall: ¿¡Que te dijo qué!? Será hija… -contuvo sus palabras mordiéndose el puño- Es todo mentira Marta, ¡todo! Te lo juro no me he liado con nadie en este tiempo, te prometí que te esperaría y así lo hice, créeme por favor… -dijo suplicante- ¡yo te quiero a ti!, siempre te he querido –dijo cogiendo mi cara- Es cierto que salí con mis amigos de fiesta, que conocí a chicas y que me hice fotos con ellas, también es cierto que varias de ellas quisieron conocerme más, querían quedar conmigo, una de ellas incluso intentó besarme –mis ojos se fijaron en los suyos en ese momento- pero no lo consiguió, ninguna de ellas lo consiguió. Las ignoré a todas, no podía sacarte de mi cabeza Marta, y no quería hacerlo, no tenía motivo para ello a pesar de que no me contestabas nunca a los mensajes ni a las llamadas, te hice una promesa y la iba a cumplir, y así lo hice. Sabía que pronto iba llegar este día, soñaba con él, y era lo que me daba fuerzas para seguir esperándote… -dijo mirándome fijamente a los ojos-
Sus palabras parecían salir directas de su corazón, en ese momento supe que Niall llevaba razón, que fue Ashley la manipuladora y la que me comió la cabeza, me engañó y lo peor de todo es…que yo caí, y la creí, desconfié del chico que más quiero en este mundo… cuando nunca me dio motivos para desconfiar de él, la mala siempre fue Ashley… ¿cómo pude creerla de verdad?¿Cómo?... y encima yo sí que había roto la promesa liándome con otros… ¡mierda! Maldita Ashley, ¿¡Cómo no me pude dar cuenta de que tramaba algo!? Me la tenía guardada por haberle “robado” a Niall… ¿Cómo iba a ser capaz ahora de mirarlo a la cara?...
Marta: Niall… -el sentimiento de culpabilidad era tan grande que solo pude esconder la cabeza en su pecho, no podía mirarlo a la cara- lo siento… lo siento, lo siento… -dije llorando-
Ahora no podía parar de pedirle disculpas, me sentía tan mal conmigo misma.
Niall: Eehh mírame –dijo tranquilo, cogiendo mi cara para hacer que lo mirara y secando mis lágrimas con sus pulgares- soy yo el que te tiene que pedir disculpas… le pedí a Ash que te dijera lo que pasó y el porqué no podía ir ese verano en vez de llamarte yo personalmente… pero es que nunca pensé que Ashley fuese capaz de decirte eso… -dijo con rabia y pena a la misma vez-
Marta: ¿Qué pasó entonces Niall?... –noté que su mirada se entristeció al escuchar la pregunta-
Niall: Enserio Ashley no te dijo la verdadera razón de por la que no fui… -dijo con la voz ahogada-
Marta: No… ¿qué ocurrió Niall? –el chico perdió su vista a un lado justo cuando su mirada se empañó de lágrimas por el doloroso recuerdo de la pregunta- Niall… -acaricié su mejilla y me miró-
Niall: Mi… -humedeció los labios antes de continuar- Mi abuela… murió –secó una de las lágrimas que recorrían su mejilla derecha mientras su labio inferior inevitablemente comenzó a temblar-
Marta: ¡Oh dios! –la noticia me pilló con tanta sorpresa que se me quedó la boca abierta- Lo siento… -sus ojos se volvieron a llenar de lágrimas- lo siento muchísimo leprechaun –lo abracé. Aunque era más alto que yo apoyó su cabeza en mi hombro y acaricié su suave pelo para tranquilizarlo- Shhh… -sin poder evitarlo mis ojos también se llenaron de lágrimas-
Sabía lo importante que era su abuela para él. Todo el mundo tiene un afecto especial por su abuela, pero lo suyo era pura devoción, estaba todo el día con ella, desde pequeño estuvo acostumbrado a tenerla en casa, ya que su abuelo murió joven en la guerra, él no pudo conocerlo pero su abuela se dedicó a contarle como era, así que prácticamente tenía una perfecta imagen de su abuelito en su cabeza. Sabía que su abuela ya estaba mayor pero se conservaba joven, tenía mucha vitalidad y era muy activa, siempre estaba haciendo cosas, pero al parecer a la llamada de la muerte no se puede escapar nadie… ¿Cómo Ashley pudo mentirme en eso?...
Niall: Gracias gordi… -dijo levantando su cabeza y dibujando una pequeña sonrisa en su cara a pesar de que aún quedaban gotitas por su cara- ¿por qué estás llorando tú? –dijo frunciendo el ceño-
Marta: Porque no lo sabía y te culpé de todo lo contrario Niall… pensé que estabas con otra cuando en verdad lo estabas pasando fatal y necesitabas todo el apoyo de alguien y Ashley me comió la cabeza para que la creyera y… -lo solté todo de carrerilla, nunca en mi vida había hablado tan rápido pero es que necesitaba desahogarme de tanta culpa. Vi una sonrisa que me instaba paz en la cara de Niall-
Me hundí en esa sonrisa perfecta, me olvidé de todo por unos segundos, me quedé sin palabras, ni si quiera sabía por dónde me había quedado. Sus brazos me rodearon y besó mi frente.
Niall: Te echaba tanto de menos… -dijo mirándome. Después de eso lo último que noté fueron sus labios sobre los míos-
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Narra Azahara:

Cuando salimos de clase Melissa, Raquel y yo fuimos al gimnasio, si, ¡nos tocaba gimnasia! No era una de mis asignaturas preferidas pero era en la única en la que me lo pasaba bien, además, iban a estar todos los chicos interesantes allí… entre ellos Liam… aiish… ¿Cómo se le daría a él la gimnasia? Seguro que genial, porque ese cuerpazo solo se puede conseguir a base de ejercicio, y eso que no lo había visto sin camiseta… solo de pensarlo… uuff ¡qué calores! Llegamos al gimnasio y fuimos directas a los vestuarios, cada una nos pusimos el chándal:
Azahara: http://www.polyvore.com/sin_t%C3%ADtulo_53/set?id=53102304#stream_box
Melissa: http://www.polyvore.com/sin_t%C3%ADtulo_52/set?id=53102124#stream_box
Raquel: http://www.polyvore.com/sin_t%C3%ADtulo_50/set?id=53101750#stream_box
Al poco llegó Manmen corriendo y se cambió también con nosotras: http://www.polyvore.com/sin_t%C3%ADtulo/set?id=52833867#stream_box
Manmen: Chicas, ¿sabéis dónde está Marta? –preguntó mientras terminaba de subirse el pantalón-
Azahara: Mmm… no, no la he visto ahí fuera ni tampoco estaba aquí dentro cuando hemos llegado –le dije mientras me ataba los cordones de las zapatillas-
Melissa: ¿No teníais clase juntas? –dijo mientras se ponía los calcetines-
Manmen: Si… pero dijo que se le olvidó el libro en la taquilla y fue a por él corriendo, la estuve esperando un rato pero a la única que vi aparecer por las escaleras fue a la profesora de latín… y no vino a clase… -dijo preocupada-
Raquel: ¿Dónde se ha metido entonces esta chica? –dijo tras terminar de peinarse la coleta-
Manmen: No lo sé… es raro que ella se salte las clases… y más siendo los primeros días –dijo en el mismo tono de preocupación que antes-
Azahara: Quizá vio la puerta de la clase cerrada y se fue a la biblioteca o… a saber… -mi prima se iría a cualquier aula antes de perder clase-
Melissa: Bueno vamos a fuera quizás venga ya –las cuatro salimos al gimnasio-
De pronto la vimos entrar con un chico rubio bastante mono, iban hablando y por sus miradas parecían conocerse bastante bien.
Marta: ¡Anda! Ya estáis aquí –dijo cuando nos vio-
Manmen: ¿Se puede saber dónde te habías metido? –le soltó cabreada, como si fuese su madre-
Marta: Ais lo siento… se me fue el tiempo… -se excusó-
Azahara: Aiis primita… se te ha ido con ese chico, ¿no? ¿Quién era? –dije con interés mientras veía que saludaba a Louis, el novio de Manmen-
Marta: Niall Horan –dijo orgullosa-
Raquel: Vaya, ¿y de qué lo conoces? Es guapo –dijo mientras me abrazaba por la espalda-
Marta: Es… -suspiró- una larga historia, luego os cuanto ¿va? ¡Voy a cambiarme o el profe me mata! –dijo esto y fue corriendo a cambiarse. Se puso esto: http://www.polyvore.com/sin_t%C3%ADtulo_51/set?id=53101906#stream_box –
Las cinco nos sentamos juntas en las gradas y escuchamos con atención al profesor Martínez, al fin un profesor español… o eso creíamos hasta que lo vimos aparecer, era colombiano, y no estaba nada mal… Cuando apareció todas empezaron a cuchichear y a hacerse aire con las manos: http://www.google.es/imgres?q=taylor+lautner&um=1&hl=es&sa=N&rlz=1C1RNKA_enES486ES486&biw=1280&bih=880&tbm=isch&tbnid=rAJQneGTVIdIiM:&imgrefurl=http://www.lavozlibre.com/noticias/ampliar/35934/taylor-lautner-quiere-una-chica-normal&docid=LWhOXeWWNWWyxM&imgurl=http://www.lavozlibre.com/userfiles/2a_decada/image/FOTOS%2525202010/01_%252520ENERO%2525202010/22%252520enero%2525202010/taylor%252520lautner.jpg&w=409&h=516&ei=0gstUKvMLdGChQfXqYDoBQ&zoom=1&iact=hc&vpx=187&vpy=515&dur=1756&hovh=252&hovw=200&tx=92&ty=188&sig=110212057515251514767&page=2&tbnh=159&tbnw=134&start=30&ndsp=35&ved=1t:429,r:21,s:30,i:238
Profesor: Buenos días chicas y chicos, en primer lugar voy a presentarme. Me llamo Taylor Martínez, y seré vuestro profesor de gimnasia hasta el final del curso –mientras iba hablando repartió fichas con huecos en blanco a rellenar por nosotros- Bien, estas fichas son para que las rellenéis con vuestros datos y me las entreguéis el próximo día, ¿de acuerdo? –todos asentimos- Bien, hoy es el primer día pero me gustaría ver vuestra capacidad física, como veis aquí –dijo señalando un circuito de colchonetas, potros, bancos, aros, porterías con balones y canastas de baloncesto- me gustaría que fueseis uno a uno haciendo este circuito. Os diré antes de nada que no es fácil, pero como veo que todos habéis escogido esta asignatura será porque realmente os apasiona el deporte, ¿no? Así que no quiero escuchar a las chicas de quejaros ¿entendido? –sonrió mostrando sus maravillosos dientes rectos y blancos aunque tenía cara de cabrón-
Azahara: Pff… madre mía… la que nos espera… -dije en un suspiro a lo que Raquel rió-
Raquel: No sé de qué te quejas si a ti se te da genial… siempre sacas notazas en las pruebas, las que tenemos que tener miedo somos nosotras…. –dijo encogiéndose de hombros-
Azahara: Ya pero… -una voz nos interrumpió-
Taylor: ¿Chicas queréis comentar algo? –dijo cruzándose de brazos mirándonos-
Raquel: Lo siento profe –dijo con una sonrisa-
Taylor: Como iba diciendo… ¿quién se ofrece voluntario… o voluntaria para hacer el circuito? –dijo mirándonos a todos, pero acachábamos la cabeza y rezábamos porque no nos escogiera- vamos no tenemos todo el día, al final todos lo vais a tener que hacer, ¿qué más da que seáis el primero?
------: Yo quiero hacerlo–se oyó de pronto-
Todos miramos al chico que había dicho eso y me alegré tanto de hacerlo, era mi precioso Liam, sin poder evitarlo me puse nerviosa y muy colorada.
Azahara: Qué calor… -susurré mientras Melissa y Raquel se reían y Marta me daba codazos-
Taylor: ¡Perfecto!, ven aquí –dijo con una gran sonrisa-
Liam se levantó y fue hacia el profesor, creí que los vaqueros y la camisa era lo que mejor le quedaba, pero el chándal no se quedaba atrás: http://www.polyvore.com/sin_t%C3%ADtulo/set?id=52834789#stream_box Escuché a más de una susurrar cosas cuando Liam pasaba por delante de ellas y le seguían ciertas risillas tontas…
Taylor: ¿Cómo te llamas?
Liam: Liam Payne –y de nuevo se escucharon a varias chicas de suspirar-
Taylor: Bien Liam… ¿estás preparado? –dijo sacando un cronómetro del bolsillo- He de deciros también que para aprobar esta prueba tendréis que sacar la nota que saque Liam…
Harry: ¿¡Qué!? Entonces nos suspenderás a todos… -dijo el rulitos-
Taylor: ¿Por qué? –dijo sobresaltado por el grito de Harry-
Harry: Porque Liam es el mejor deportista de toda la Universidad, se le da genial esta asignatura, nos va a fundir a todos… -dijo cruzándose de brazos-
Taylor: En ese caso, si te consideras inferior a él… ¿por qué no lo haces tú primero? –lo desafió-
Harry: omm… no prefiero que lo haga él primero…
Taylor: Pues entonces ya sabes lo que toca ricitos…
Harry: Me llamo Harry, solo me llaman ricitos mis niñas –rió y unas cuantas niñatas con él-
En ese momento miré a Mel que tenía cara de querer levantarse y pegarle dos tortas… o tres.
Melissa: ¿Cómo puede ser tan odioso cuando quiere? –dijo entre dientes-
Raquel: ¡Oh! Vamos Harry, demuestra lo valiente que eres, además… así dejarás la nota más baja para “tus niñas”… -puso morritos para intentar convencerlo a lo que el chico rió-
Harry: Lo siento preciosa… pero me temo que hoy no va a poder ser… -dijo negando con la cabeza-
Raquel: Caguica… -dijo en tono apenas audible-
Muchas de las chicas empezaron a quejarse por que el maravilloso Harry Styles no iba a dar muestra de su capacidad física.
Taylor: ¿Harry puedes salir aquí un momento? –le pidió-
Al principio Harry puso cara de indecisión pero algunas chicas empezaron a animarlo para que se levantara y al final se acercó al profesor.
Harry: Qué –dijo secamente-
Taylor: ¿No tienes seguridad en ti mismo? –le dijo este en tono serio-
Harry: ¿Cómo? –se rió-
Taylor: No estoy de cachondeo Harry… ¿por qué no quieres hacerlo? ¿A caso te da vergüenza?
Harry: ¡Claro que no!... –dijo mirando hacia otro lado a lo que el profesor esbozó una sonrisa-
Taylor: ¿Crees que eres sexy? –le soltó sin rodeos a lo que todas las chicas empezaron a reír como tontas y afirmaban con la cabeza-
Harry: Pues claro –rió de nuevo- ¿a qué viene esto?...
Taylor: Bien… pues si tan sexy eres supongo que no te importará entonces quitarte la camiseta, ¿no? –volvió a desafiarlo-
Marta: Vaya… parece que esto se empieza a poner interesante –dijo riendo-
Harry: ¿Qué?... –se puso como un tomate- Oye tío, ¿de qué vas? ¿eres un profesor pederasta de esos o qué?... –dijo en su defensa y el profesor rió-
Taylor: Harry… si tuvieses confianza en ti mismo te daría igual… -en ese momento todas las chicas comenzaron a corear que se la quitara y Harry se puso aún más colorado- lo ves, las chicas lo piden Harry… y a ti te gusta que te reclamen, ¿no es cierto?
Zayn, Louis, Niall y Liam no podían parar de reírse de ver la cara de Harry, nunca antes lo habían visto tan colorado, hasta Mel parecía estar disfrutando del espectáculo.
Harry: ¡Vale! ¡Basta ya! ¿Qué es esto? ¿una encerrona o algo?... Dejad ya de reíros –dijo mirando a sus amigos que dejaron de reír al instante al ver que Harry iba cambiando el tono de su voz a cabreado-
Zayn: ¡Oh vamos Haz! No te cabrees… es solo una broma… -dijo volviendo a reír-
Taylor: No, no es una broma, solamente quería probar la autoestima que te tienes a ti mismo…
Harry: Vale, si, lo admito, me da vergüenza mostrar mi cuerpo, ¡pero eso creo que es algo que no tiene nada que ver con la gimnasia!... –dijo cabreado-
Taylor: Tiene mucho más de lo que tú te piensas Harry… Habrá días en que os llevaré a la piscina del centro a hacer ejercicios, ¿no te quitarás entonces la camiseta? –Harry abrió los ojos y acachó la cabeza- solo te digo que espero que a partir de ahora no te lo tengas tan subidito… sobre todo si quieres conseguir a una buena chica… -en ese momento vi como Mel se quedó boquiabierta- ahora siéntate –Harry cerró la boca y regresó a su sitio con cara de pocos amigos-
Manmen: Me encanta este profesor jajajaja
Raquel: Creo que ha descrito a la perfección lo que Mel quiere de Harry –dijo mirándola y Mel seguía boquiabierta. Taylor continuó con la clase-
Taylor: Bien Liam, ¿estás preparado? –Liam asintió- ¡ya! –y sonó el silbato-
Liam empezó a correr mientras todo el mundo lo animaba, realizó todas y cada una de las partes del circuito a la perfección y a una velocidad increíble, hasta que llego a la última parte, el potro, en donde debía de saltarlo y caer con una voltereta en el aire, y como no lo bordó. Me quedé impresionada, y sorda también con todos los aplausos y gritos de las chicas. Acabó agotado y sudando, pero con una gran sonrisa en la cara. El profesor le felicitó y le puso la mejor nota. Después señaló a varios chicos y una chica para que hicieran el ejercicio, entre ellos estaban Manmen, Louis y Zayn. Le deseamos suerte a Manmen y esta se fue con Louis para desearle suerte también. Estos dos lo hicieron y consiguieron buena nota también.

Narra Raquel:

Le tocaba el turno a Zayn y lo hizo genial, hasta que llegó a la voltereta que cayó malamente y se torció el tobillo, en ese momento todas las chicas gritaron pero fui yo la única que me levanté asustada. Zayn se quedó allí tirado retorciéndose de dolor y Taylor se acercó para ayudarlo.
Taylor: Chicos necesito que alguien me ayude a llevar a Zayn a la enfermería –dijo agarrando la pierna de Zayn-
Louis: ¡Yo voy! –dijo el castaño adelantándoseme-
Taylor: Chicos por favor id a cambiaros mientras, el timbre esta al sonar, que alguien se encargue de recoger las cosas de Zayn y después id a la siguiente clase que os toque ¿de acuerdo?, hasta el próximo día –agarró a Zayn por el tobillo lesionado pasando el brazo de Zayn por su cuello, y Louis realizó la misma operación con el otro brazo y la otra pierna-
Como bien dijo Taylor el timbre sonó justo cuando salieron por la puerta.
Melissa: Tranquila amor… seguro que no será nada grave, solo se le ha torcido el tobillo –dijo para tranquilizarme ya que me estaba poniendo muy nerviosa-
Marta ¿Por qué no te encargas tú de recoger sus cosas y se las llevas?
Manmen: Si, seguro que le hará mucha ilusión –sonrió pícara- Yo voy a recoger las de Louis y a llevárselas también, si quieres podemos ir juntas –asentí-
Raquel: ¿Pero cómo voy a entrar al vestuario de chicos a coger todas sus cosas si están todos cambiándose? –dije colorada-
Melissa: Dile a Liam que te las dé –dijo señalando con la cabeza al chico que hablaba con mi pequeña Aza, se les veía tan lindos, hacían una pareja perfecta ahora que me fijaba-

Narra Azahara:

Después de que Liam terminara su ejercicio me acerqué para felicitarlo, aunque estaba rodeado de niñatas… Pero al verme sonrió y se acercó a mí dejándolas a todas de lado.
Azahara: Hola fortachón –reímos-
Liam: Hola preciosa, ¿qué te ha parecido? –puso la sonrisa más bonita que jamás había visto-
Azahara: Has… has… has… -me dejó tan loca con esa sonrisa que ni me salían las palabras- has estado… increíble –dije con sinceridad y timidez-
Liam: Gracias boni… -en ese momento escuchamos un grito de dolor-
Miramos para ver quién era y vimos a Zayn tendido en el suelo retorciéndose de dolor sujetándose el tobillo.
Liam: ¡Oh dios Zayn! –dijo asustado-
El profesor pidió que alguien los acompañara a la enfermería y Liam parecía que iba a ofrecerse voluntario pero Louis se le adelantó.

Narra Raquel:

Vi a Azahara hablando con Liam y decidí pedirle a Liam que me diera las cosas de Zayn.
Raquel: Emm… hola… siento interrumpir –dije cuando llegué a donde estaban y Liam me miró con una sonrisa- Me… preguntaba si podías…coger las cosas de Zayn… -dije tímida-
Liam: Am claro, será mejor que se las lleve –dijo secándose el sudor con la camiseta-
Raquel: ¿Te importa si se las llevo yo? –dije rápido a lo que el chico me miró sorprendido-
Liam: Cla-claro… ve tú, yo tengo que ducharme todavía… además creo que le hará más ilusión que vayas tú –rió y entró en los vestuarios en los que se oían risas y voces masculinas diciendo burradas-
Con ese “le hará más ilusión que vayas tú” me dejó pillada y me puse roja.
Azahara: Vaya… así que le hará ilusión que vayas tú, ¿eh? –rió y se fue hacia el vestuario de las chicas-
Me senté en un banco a esperar a que saliera Liam mientras algunos chicos ya iban saliendo y me miraban. A los pocos segundos al fin salió Liam.
Liam: Aquí tienes –dijo dándome su mochila y la bolsa con la ropa-
Raquel: Gra-gracias –sonreí-
Liam: De nada –sonrió- ¡Ah! Dile que luego me pasaré a ver cómo va, y dile a Azahara que luego quiero hablar con ella –se despidió con la mano sin darme tiempo a responderle y entró de nuevo a los vestuarios para ducharse-
Manmen: ¿Ya estás? –me giré y la vi con su mochila colgada en un hombro, la de Louis en otro y con la mía en la mano-
Raquel: Si –sonreí- ¡Om! Gracias –agarré mi mochila y me la colgué-
Manmen y yo fuimos a la enfermería.


Cielooooos siento la tardanza pero esq estos días estaba falta de inspiración :( pero ya he vuelto!:D y prometo no dejarlas tantos días sin capítulos :) Aunque este no me gusta mucho como me ha quedado, ya que no sabía muy bien como continuar... pero bueno espero que les guste :) os amo mis niñas :(L):
Att: Mrs Malik

Tienes que seguirlaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa :D

Yo quiero ver que pasa ahora cuando le lleva la mochila *w* ¿y qué le querrá Liam a Aza e.e? ajajjja

síguela cielo!

mi niñaaa:D:D ahora mismito subo capitulo:) siiii...¿qué pasará con Zayn? y lo que le querrá decir Liam a Aza es...aksduhasdmnhasumdhuaids*-* jajajajaja