El Flashback

Los Flashbacks son un recurso bastante usado en la narrativa de los fanfictions, tanto, que me atrevo a suponer que todo el mundo sabe de qué se trata por pura intuición. Para ver un modo correcto de usarlos dentro de nuestra historia, veamos primero algunos conceptos de los tiempos dentro de la narrativa:

a) Acción Lineal: cuando la historia se desarrolla linealmente en el tiempo, o sea, que comienza en un punto “A” (por ejemplo, en enero, o un día a las 7 de la mañana) y se desarrolla sin ningún salto hasta finalizar en un punto “B” (en diciembre o al anochecer de un día). La mayoría de nosotros escribimos así, pues es lo más sencillo y lo más comprensible para el lector.

Sin embargo, a veces, por necesidades de la trama (por ejemplo, cuando se necesita “presenciar” un hecho ocurrido en el pasado, como Draco y Harry en el Manual), el escritor tiene que recurrir a

b) Evocaciones Retrospectivas (Flashback): Las cuales son simples vueltas al pasado incrustadas en medio de la trama. La manera de evocarlas, es el punto de discusión aquí. JK Rowling usa constantemente el Pensadero. ¿Por qué? Pues porque como los libros están narrados a partir del Punto de Vista de Harry, ella necesita que sea él quien presencie esos recuerdos (literalmente). No es más que un recurso muy bien pensado para hacer esas evocaciones necesarias, y, como recordarán, es el mismo recurso que usé yo en el Manual.

c) Anticipaciones: (Flashforward): Éstos, al contrario de los anteriores, son saltos hacia el futuro. Un recurso todavía menos usado que los flashbacks, al menos en los fics.

d) In mediae res (en medio de las cosas): Es un estilo de narración donde la acción comienza a la mitad de la historia, y en el transcurso de ésta, el narrador va haciendo varios flashbacks hacia el pasado hasta llegar al punto donde la narración se vuelve lineal.

Ejemplos de lo anterior son las películas Siete Almas (Seven Pounds) o Slumdog Millionaire, donde la acción comienza en un punto clave de la historia y, obvio, nadie sabe cómo los protagonistas llegaron ahí o por qué. Conforme transcurre la acción y con los continuos saltos al pasado, el público comienza a entender el origen y el porqué de las cosas.

Cabe hacer notar que los flashback y los flashforwards son muchísimo más comunes en el cine que en la literatura, tal vez porque son recursos más sencillos de mostrar de manera visual. Sin embargo, también son muy usados en narrativa, aunque requieren el total apoyo del lector a la hora de identificarlos, pues, a diferencia de los fics, no se anuncian con un horroroso letrero de “FLASHBACK”.

Estos recursos existen desde que se escribe, tal como lo vemos en la Odisea de Homero. En ella, el autor comienza narrado las peripecias de Odiseo (Ulises) en su camino a Ítaca, su hogar, pero el punto de inicio no es “el inicio” del viaje de Odiseo, sino que ya lo leemos retenido por Calipso en una isla. Sin embargo, conforme transcurre la historia, Homero nos va enterando de las aventuras que Odiseo tuvo que sufrir con anterioridad, y generalmente lo hace por medio de diálogos dichos por el mismo protagonista. Ejemplo: Hubo una gran fiesta, y al final, se le pidió a Odiseo que narrara cómo ganaron la guerra de Troya. Entonces, él comienza a contar la anécdota. Y es así como nosotros nos enteramos de qué fue lo que ocurrió.

Cuando no se quiere recurrir a esta técnica (de poner a un personaje a narrar recuerdos), el autor de la historia puede intercalar dos o hasta más líneas temporales en el relato. Esto, puede resultar confuso al principio para el lector, por lo que se pueden (y tal vez, se deben) usar “trampitas” o recursos para anunciar que el tiempo de acción está cambiando.

Por ejemplo, en su obra maestra Pedro Páramo, Juan Rulfo usa más de dos líneas temporales y diferentes tipos de narración, y al principio (al menos para mí), no se entiende NADA de qué es lo que está ocurriendo, qué es lo que ya pasó o lo que está pasando. Los cambios en el tiempo, en el espacio y en el tipo de narrador vuelven un poco caótica la obra, pero, por lo mismo, es una genialidad de novela. Al terminar, una segunda lectura es casi obligatoria, para ahora sí comprender quién diablos está narrando cada qué. (Les recomiendo encarecidamente esta novela a quien no la haya leído. Así se comprende mucho más el punto de los tiempos y los puntos de vista en la narración)

Pero bueno, nosotros ni somos Juan Rulfo ni estamos escribiendo libros (aún, digo, espero que entre ustedes haya muchos futuros-escritores, ¿por qué no?). Nos dedicamos, por el momento, a los fics, y por lo general, nadie de nosotros quiere armar un relato tan complejo como el de Pedro Páramo donde nuestros lectores se harten de no comprender nada y abandonen el fic a medio capítulo.
¿Qué hacer entonces?

Bueno, que queden claras dos cosas ( y esto es opinión personal):

Colocar los letreros de Flashback al principio de ellos, es la COSA MÁS HORRIBLE que puedes hacer. Y yo, al menos, cuando veo un fic que los usa, lo dejo de leer de inmediato. Yo quiero que el autor de ese fic sea lo suficientemente sagaz como para darme el salto temporal sin tener que poner el letrerote. No quiero avisos espectaculares, quiero pistas, trampitas, recursos sutiles. Quiero inteligencia de parte del escritor, y que él o ella me considere a mí un lector inteligente.

Escribir todo el flashback con itálica (cursiva) es más usado y más aceptado que poner letreros, pero a mí (en lo personal, que quede claro), me gusta lo mismo que lo anterior. O sea, NADA. Usar las itálicas para narrar TODO un pedazo de historia, es extremadamente cansado para la vista. En serio, leer en itálicas, cansa. Simplemente no me gusta.

Entonces, ¿cómo marcar un salto temporal en un fic?



Los cambios en el tiempo, el lugar geográfico o los sucesos que acontecen en la narración deberían ser pista suficiente para indicarle a nuestro lector que estamos llevándolo a un momento anterior al actual. Sin embargo, si creemos que esto no es suficiente, entonces, como decía más arriba, se pueden usar trampas que le indiquen al lector (sin necesidad de anunciarlo) que estamos narrando algo sucedido en el pasado. Ejemplos:

a) Recuerdos: hacer que los personajes entren a un pensadero. Que uno de ellos “viva” en su mente el recuerdo necesario. Que un personaje se lo narre a otro.

b) Fechas: Colocar la fecha antes de cada trozo de narración. Será obvio para el lector cuando se está hablando de un sucedo ocurrido en el 2008 o en el 2004 si el autor me lo marca así. Un ejemplo de este recurso es Left my Heart y Surrender the Grey de Emma Grant.

c) Tiempos Verbales: Usar dos tiempos diferentes para cada línea temporal. Por ejemplo, tu línea temporal actual, puedes escribirla en presente, y los flashback, en pasado.

d) Tipos de Narrador: Al igual que el anterior (y como Juan Rulfo en Pedro Páramo), también un cambio en el narrador puede darnos la pauta para indicarnos los flashback. Por ejemplo, tu línea temporal actual la puedes describir con un narrador omnisciente, y los flashback, desde un narrador en primera persona. O al revés.


El punto es que un fic donde se mezclan tiempos lineales diferentes representa un reto para el escritor y depende mucho de su pericia y talento para conseguir que sus lectores lo sigan sin perderse. Yo soy de la opinión que, al menos, en cuestión de fics, hay que tratar de darle la mayor claridad posible al lector, pues no somos Juan Rulfo ni ellos están buscando leer a Pedro Páramo. Mi humilde punto de vista, claro.