Dead and gone.

La pareja se encontraba en un situación incómoda, los dos se miraban fijamente, ninguno decía ninguna palabra, la chica bajo la mirada y se incorporó en sillón de cuero, por instinto del chico le siguió el juego y se sentó al frente de ella, admirando la belleza de la muchacha soltó un suspiro.
—tanto tiempo…—murmuro el chico esperando respuesta de la chica quien tenía la mirada agachada.
La chica no sabía por qué se encontraba en aquel lugar tal vez era para pedirle perdón por lo que había sucedido desde el último encuentro pero las palabras no le salía, tampoco podía levantar la vista, estaba siendo una chica infantil por aquella actitud. —bien.— escucho de parte del muchacho.
Ella levanto de la vista encontrándose con sus ojos claros, abrió la boca para luego cerrarla, frunció el ceño y se encogió de hombros. —; recuerdas la vez que…la última vez que nos vimos. —hablo por primera vez la chica mirando al chico con tristeza.
El chico solo asintió. —¿Por qué esperaste tanto tiempo? —murmuro con amargura. — Después de cada palabra dicha. —dijo con rencor. —me siento muerto y enterrado. —finalizo.
La chica agacho la su cabeza y se tapó la cara con sus manos, un llanto se empezó a escuchar en la habitación, por mucho que le doliera ver a la chica que amaba, no la iba a consolar como lo hacía antes,  ella quiso ponerle fin al romanticismo que hubo, ella se aguante sola, por muy frio que sonara, era verdad, las palabras que le había dicho la muchacha a él lo había hecho sentir muerto y enterrado en sufrimiento, no la iba a perdonar, por  mucho que la amara.