Survive.

SURVIVE.

ficha:

Bueno, Angie reportandose con un fanfic que escribí hace bastante ya, la verdad es que lo amo, tengo una libreta llena de cosas para este, la segunda parte llamada monster que aún está en proceso y la precuela llamada zelos que habla sobre los comienzos de este caos. La verdad que le puse mucho empeño y dije "vamos a publicarlo en Onlywn." Espero que tenga el mismo buen recibimiento como lo tuvo en Wattpad y lo sigue teniendo <3 más que nada porque adoro como me quedó esta historia con mi alma y tiene a una de las protas mas hermosas y creativas que hice en mi vida ¡Esta chica es todo! Ire dejando mas abajo a los personajes principales de la historia y lo más importante, tal vez necesiten ver el video antes o no, no lo se, espero que la disfruten y dejen sus lindos comentarios :3 besitos.

Tomó la pequeña rosa azul, con aroma a moras y la paso por sus fosas nasales. ¿En que momento se había vuelto su sostén? Tal vez cuando su padre casi lo mata a golpes o cuando vio como su madre moría a causa de una guerra en la que no estaba involucrado.

Miro a su hermana, su primer sostén, dormía no muy cómoda en aquel suelo de madera. Hacia frío, tanto que se colaba por sus huesos y lo hacía temblar; miro sus manos y las froto por los brazos de su hermana menor haciendo que esta se sintiera un poco más cómoda.

Trago el gran nudo que tenía en la garganta; como le dolía vivir así. Min Young no tenía la culpa de nada y no tenía por que aguantar todo lo que pasaba. Pero luego sonrió, su hermana no estaba sola; sabía exactamente lo que sentía por su amigo y lo que Wonho sentía por ella.

Jamás estaría sola.

Pero el si lo estaba.

Levantó la vista y vio a su mejor amigo de cabellos platinados; le señaló a su hermana y que no hiciera ruido. Le beso la frente a la más pequeña y camino a su amigo, recibiendo un gran abrazo de su parte.

—Vamos, el clan espera...

Y desapareció otra noche más.

Spoiler:

Changkyun observó a su madre y se secó una de sus lágrimas antes de comenzar a lavar uno de sus brazos. Sabía que su madre estaba casi muerta, apenas podía comer y dudaba mucho que pasara la noche.

Sintió su piel más fría, como sus músculos dejaban de tensarse y miró la cabeza la cual estaba apoyada contra su pecho. Esta vez si se hecho en llanto.

Nunca había estado tan sólo.

Llamó inmediatamente para que tomaran a su madre y la llevaran a enterrarla. No era el mejor lugar, pero por lo menos su sufrimiento había terminado.

A ella ya no le doleria y a el ya no le preocuparía.

Trago en seco y observó a lo lejos aquella cabaña abandonada; camino despacio mientras el sol se ocultaba y cerró la puerta una vez dentro.

Se sacó el abrigo que llevaba por el frío y se sentó en el círculo. Observó a Hyungwon el cual estaba lleno de marcas por toda la cara, supuso que su padre había hecho su acto nuevamente. Luego paso sus ojos a Shownu el cual miraba sus manos y de vez en cuando sus ojos se posaban en Jooheon el cual se concentraba en preparar la sustancia.

Aceptó gustoso la taza de líquido azul que le compartía aquel chico que le gustaba. Rozó sus manos y sonrió al sentir el frío de la pintura pasar por sus mejillas y cerca de sus labios.

Una vez que terminó, apoyo su frente con la de Kihyun, antes de depositar un suave beso en sus labios.

Tal vez la flor no era su droga.

Sino que los tiernos y hermosos labios del pelirrojo.

Shownu trago en seco, como odiaba aquella enfermedad de su padre y que el hospital solo aceptara su estadía por dinero. Miro a Jooheon el cual venia corriendo con un bolso negro.

—El arma solo tiene dos balas, aunque creo que no te serán necesarias.

—Eso esperemos

Shownu miro su bolso y luego a Jooheon; se encontraban en un callejón en el cual solo entraban ellos dos, el aire era mínimo y por auto reflejo tomo al castaño del cuello; depositando un apasionado beso en sus labios.

—Recuerda; pase lo que pase, yo estaré ahí para ti.

El de cabello negro suspiro y comenzó a correr; tal vez su padre no era una excusa para quitarle algo importante a otras personas. Pero no buscaba una repuesta lógica. Estaba totalmente cegado por el dolor y el miedo de perder a alguien que quería.

Tomo el arma la cual estaba cubierta con una manta blanca y apunto a la persona detrás del vidrio.

—Dame todo el dinero, ahora.

+++

—Lo siento chico; tu padre no lo ha logrado. —El doctor acarició su hombro y besó su frente. —Era un buen hombre, tuvo una buena vida.

Y desapareció.

Al igual que su padre; que su madre y hermanos.

Pero el dolor seguía ahí ¿Por que no se iba?

Luego vio la puerta del hospital; ahí estaba Jooheon.

"Con una flor azul en su mano y por unos minutos; Shownu vio una razón por la cual vivir."

Min Young no era la mas bonita, ni la mas inteligente, ni siquiera tenía un poco de educación. Hablaba con groserías, se metía en peleas muy seguido —con hombres y mujeres— y era completamente sobreprotectora con su hermano. Sabía que Hyungwon era mucho más débil de lo que aparentaba; parecía ella la mayor con tan solo diecisiete años de edad; era mucho más madura cuando se trataba de su familia. Bueno, hermano, lo único que tenía era eso.

 Miro como su hermano se iba con el chico de cabello platinado, le dolían todos los huesos, había dormido en mala posición y tan solo una hora no era lo suficiente como para sobrevivir. Pero ella estaba acostumbrada, había noches en las que simplemente no dormía.

Corrió rápidamente hacia su patio trasero, saltando la pared que la separaba de la calle. Probablemente nadie estaría haciendo guardia a esas horas, nunca lo hacían; soltó un suspiro cuando vio que no había nadie más y corrió nuevamente dos cuadras más, encontrándose con una cabellera rubia, la cabeza de Wonho estaba baja.

Eso significaba malas noticias.

—El padre de Shownu a muerto; mañana quieren que salgamos por dos días hasta donde está pasando todo...—Trago en seco. —Probablemente no nos veamos nunca mas, Min.

Min negó reiteradas veces, sabía que en algún momento pasaría, pero no. No estaba preparada, no quería que Wonho se fuera, no quería perderle; no. Y su hermano... ¡No quería despedirse de más personas, estaba malditamente cansada de todo!

Entonces la idea mas descabellada salió de sus labios.

—Iré con ustedes.

Wonho levantó la cabeza sorprendido, no podía negarlo, ver a Min así le apasionaba. Era tan valiente, era pura, siempre pensaba en el bienestar de los demás antes de que el de ella, y a la vez odiaba toda esa actitud suya, nunca lograría protegerla si seguía de ese modo.

—Min, estas loca, no irás a ningún lado; debes quedarte.

—¿Para que mierda quieres que me quede? ¡No me queda nada aquí! Hyungwon tambien ira y probablemente los pierda a los dos ¿Y que? no pienso pasar el resto de mi vida sola.

Wonho entendió todo al instante, Min era tan testaruda. Por eso la amaba, por más que él le dijera que no, ella lo haría, porque era su pequeña valiente. Min era todo lo que Wonho amaba, cada una de las cosas de las chicas eran la perfección pura, aquella inocencia y aquel movimiento de manos que hacía al hablar exagerando siempre todo. Le encantaba.

—Ire, Shin Hoseok, quieras o no; si muero, quiero hacerlo a tu lado.

Y el rubio la abrazo.