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Skin hecho por Hardrock de Captain Knows Best. Personalización del skin por Insxne.
Gráficos por y codes hechos por Kaffei e Insxne.
Gráficos por y codes hechos por Kaffei e Insxne.
Travesuras Mágicas
O W N :: Novelas colectivas :: Novelas colectivas :: Novelas Colectivas :: Inscripciones / audiciones
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Travesuras Mágicas
por Beac Miér 12 Abr 2017, 11:55 pm
Nombre: Travesuras Mágicas.
Autor: colectiva.
Género: romance, aventura, drama, etc.
Adaptación: Si, del mundo de HP.
Advertencias: posible lenguaje vulgar y escenas subidas de tono.
Otras páginas: no.
[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]
Autor: colectiva.
Género: romance, aventura, drama, etc.
Adaptación: Si, del mundo de HP.
Advertencias: posible lenguaje vulgar y escenas subidas de tono.
Otras páginas: no.
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TRAVESURAS MAGICAS
Déjenme contarles la historia de todos querían evitar. Déjenme contarles cómo estos jóvenes consiguieron sobrevivir a la parte oscura del mundo mágico...¡Y mejor que cómo lo hicieron sus padres!Entre idas, vueltas, armarios y misterios, el joven Scorpius Malfoy y sus amigos descubrirán viejos conjuros, profecías olvidadas, y la sombra de un Lord que intenta resurgir. Muchos secretos fueron guardados, y mientras estos jóvenes intentan ser adolecentes normales, los secretos gritan por salir. ¿Podrán evitar que la historia se repita?
- Cosas:
Es obviamente, sobre Harry Potter. Cuando algunos misterios se presentan en el castillo, Scorpius y sus amigos deciden investigar... y allí descubren cosas que quizá, no querían saber. Va a tener un poco sobre guerra mágica, pero en su mayoría tratará sobre la vida en el castillo.
REGLAS:
1- Si te inscribes, no abandones. Nada, sólo eso.
-Pueden llevar los personajes principales que quieran con un máximo de seis.
-El resto se decide en el muro.
Porque soy dramionera a full, Scorpius es hijo de Draco y Hermione, y ellos son un matrimonio mega feliz, y no se discute.-Teddy Lupin Tonks. 24(Andy)-Scorpius Malfoy Granger. 17 (MIO)-James Sirius Potter Weasley. 17(Andy)
-Fred II Weasley Jhonson. 17
- Libre masculino.17-Lorcan Scamander Lovegood. 17(Andy)-Lyssander Scamander Lovegood. 17(Sisa)
-Molly Weasley Jones. 17- Libre femenino. 17(MIO)- Libre femenino. 17(Andy)-Libre femenino. 17(Andy)-Albus Severus Potter Weasley. 16(Sisa)- Libre masculino. 16(Sisa)-Rose Weasley (yquienquieran). 16(Andy)
-Roxxane Weasley Jhonson.16
-Dominique Weasley Delacour. 16-Libre femenino. 16(Sisa)-Libre femenino. 16(Sisa)
-Libre masculino. 15-
-Louis Weasley Delacour. 15
-Hugo Weasley (yquienquieran). 15
-Lily Luna Potter Weasley. 15
-Libre femenino. 15
-Libre femenino.15(Sisa)
Nada más que esto. Espero que la idea les guste. Es una colectiva, así que cada una debe respetar su plazo para subir.
Me pueden decir Bea o Bu.
- Ficha:
-Escrito.
-Nombre del pj.
-Pareja.
Última edición por Beac el Sáb 22 Abr 2017, 7:12 pm, editado 3 veces
Beac
Re: Travesuras Mágicas
por Beac Jue 13 Abr 2017, 11:16 am
Genial hermosa, ya te los aparto, este Teddy es un loquillo(es profesor en Hogwarts)Andy Belmar. escribió:# Escrito:
[Tienes que estar registrado y conectado para ver este vínculo]
# Nombre del Pj: James Potter, Lyssander Scamander, Teddy Lupin
# Pareja: Abigail Dumbledore (pj libre de 17), Rose Weasley, Pj libre mujer de 17 años.
# Las parejas son: James y Abigail, Lyssander y Rose y Teddy con la pj libre mujer de 17 años.
Beac
Re: Travesuras Mágicas
por Loki. Sáb 22 Abr 2017, 12:59 pm
Yoyoyoyoyoyoyoyo <3
Pronto te dejo mi ficha *-*
Amé la idea <3
¡Besos!
-Sisa
Pronto te dejo mi ficha *-*
Amé la idea <3
¡Besos!
-Sisa
Última edición por CNCOwner. el Sáb 22 Abr 2017, 1:17 pm, editado 1 vez
Loki.
Re: Travesuras Mágicas
por Loki. Sáb 22 Abr 2017, 1:15 pm
- Hello:
- Escritos:
- Uno.:
“De acuerdo, empiezo yo. ¿Cuál es tu color favorito?”
“El azul.” Dijo él, encogiéndose de hombros.
“De acuerdo. El mío es el verde esmeralda.” Dije, sonriendo. “Tu turno.”
“Amm… ¿Prefieres el día o la noche?” Preguntó, mirando al frente.
“La noche.” Dije.
“Yo también.”
“¿Unicornios o pegasus?”
“Pegasus.”
“También yo.”
Él pareció pensar su siguiente pregunta. Abrió los labios varias veces, pero no dijo nada, hasta que clavó sus ojos en mí y finalmente decidió hablar. “¿He sido tu primer beso?”
El calor no tardó en llegar a mis mejillas. No esperaba esa pregunta.
Tragué con dificultad y pensé en cómo responderle, pero me limité a musitar un casi inaudible “Sí.” Luego lo miré, expectante. Me moría de ganas de saber cuál sería su respuesta. Muy en el fondo, esperaba que dijera un ‘sí’, también.
“No.” Dijo.
¿No? ¿Yo no había sido su primer beso? ¿A quién ha besado a parte de mí, entonces? ¿A la perra de Mackenzie?
No pude evitar sentir una punzada en el estómago. Y, aunque no sabía exactamente lo que era esa sensación, tenía una pequeña hipótesis: celos.
Decidí no hacer ningún otro comentario ya que era mi turno, entonces suspiré y hablé. “¿Por qué me has besado?”
“¿En serio no lo has comprendido hasta ahora, Tence?” Me miró como si no hubiera entendido la explicación de cuánto es uno más uno.
Tragué con dificultad y clavé mis ojos en su mirada verde esmeralda. “¿Comprender qué?” Dije, frunciendo el ceño a manera de frustración. Realmente no entendía a qué se estaba refiriendo.
“Me enamoré.” Se detuvo, y se colocó en frente de mí.
Abrí los ojos como platos y sentí como todo a mí alrededor se detenía. El calor no tardó en llegar a mis mejillas, y el zoológico que tenía en mi estómago despertó, atacando. Estaba sin palabras, porque nunca de los nuncas me había imaginado que alguien me diría esas dos palabras.
“¿Qué?” Fue todo lo que logré musitar. Él me miró y colocó una de sus manos en mi mejilla izquierda. Su tacto era suave y delicado, como si tocara un frágil cristal que podría romperse.
“Me enamoré.” Repitió. Sus palabras no parecían reales. No creía que de verdad me estaba diciendo esto.
“¿Cómo…?” Comencé a decir, pero la voz se me fue apagando cuando noté que no tenía idea de qué decirle.
“¿Que cómo lo sé?” Preguntó, ladeando una sonrisa. Lo miré y me perdí en sus ojos. En esos hermosos ojos esmeralda que tanto me gustaban. “Porque ya no quiero conocer a nadie más.” Respondió su propia pregunta. Una sonrisa se formó en mis labios y él me la devolvió. “A nadie.”
- Dos.:
Estaba acostada cerca de la fogata, intentando conciliar el sueño, mientras Mario estaba de guardia, por si los Buggs aparecían.
Lo miré por el rabillo del ojo y pude ver que estaba arrancando pedazos de pasto, muy concentrado en eso.
La noche estaba totalmente oscura, excepto por las estrellas en el cielo, y la pequeña fogata que estaba a mi lado.
Podía ver algunas sombras por el cielo, de murciélagos, o pequeñas criaturas que volaban por la noche.
Ni siquiera podía ver la luna, por lo que supuse que estábamos en luna nueva.
Hacía ya muchas horas que había anochecido, así que se podría decir que era media noche. Y yo no podía dormir.
Me levanté y me senté frente a él, expectante. “¿Por qué?” Pregunté, mirándolo de una manera intensa.
“¿Por qué, qué?” Preguntó, sin dejar de arrancar pastos. Ni siquiera había levantado su mirada para verme.
“Tú sabes bien a lo que me refiero.” Lo señalé, frunciendo el ceño. Era mentira. Ni siquiera yo sabía a lo que me refería.
Quizás habría sido bueno preguntar <<¿Por qué no me hablaste en todo el día?>> <<¿Por qué estás molesto?>> <<¿Por qué me dices que estás enamorado y luego me ignoras como si nada hubiera pasado?>>
Finalmente levantó su mirada, y sus ojos verde esmeralda chocaron con mis ojos azules como el cielo. Una corriente me recorrió el cuerpo al oír que me respondía por fin.
“No lo sé.” Dijo. Soltó un largo suspiro, y me miró, pasando una mano por su despeinado cabello semi-rubio. “Yo…” Comenzó a decir. “Quisiera…” Su voz se fue apagando, como si no estuviera seguro de lo que fuera a decir.
“¿Quisieras…?” Lo animé, dedicándole una leve sonrisita.
“Sólo quisiera ser uno de los motivos de tu sonrisa, quizá un pequeño pensamiento de tu mente en las mañanas, o un lindo recuerdo antes de dormir.” Dijo, mirándome y, podría jurar que se sonrojó, pero parecía saber disimularlo. “Quisiera ser alguien que quisieras tener a tu lado, quizá no toda la vida, quizás no durante todo el día, pero quisiera, de una forma u otra, vivir en ti.”
Lo miré atónita. No había respondido de la forma que yo me esperaba que respondiera la pregunta que hice.
La había respondido de una forma mejor. Sentí que mis mejillas estaban del color del cabello de los Weasley, pero no me importó.
Porque me había dicho, lo que nunca en mi vida creí que alguien me iba a decir.
“Ya lo haces, Marito.” Fue todo lo que pude decir, antes de que sus labios devoraran los míos.
El tiempo se detuvo. Todo lo que antes había a mí alrededor, ya no importaba. Porque ahora, lo único que me importaba, era Mario.
Sus labios eran suaves como un algodón, delicados como un cristal, y cálidos, como una brisa de verano.
Mis dedos se enterraron en su suave cabello, y las manos de él se posaron en mis mejillas, mientras sus pulgares las acariciaban.
Jamás creí sentir lo que siento ahora por nadie. Jamás creí que alguien me diría todo lo que Mario me ha dicho. Y jamás creí que yo iba a llegar a sentir amor de la forma en la que lo describen en las películas románticas. Pero heme aquí.
Mario me había dicho que estaba enamorado de mí. Me había dicho cosas muy hermosas.
Y fue entonces, cuando descubrí que no podía mirar a nadie, de la manera en la que lo miraba a él.
Parejas: Albus Potter & Nacile Raeken; Lyssander Scamander & Existence Davies; Zabdiel Krum & Sisabella Slytherin
Loki.
Re: Travesuras Mágicas
por Beac Sáb 22 Abr 2017, 7:13 pm
Lo tienes apartados Sisa querida, esperemos que se ocupen rápido los puestos, porque ya quiero iniciar!
Beac
Re: Travesuras Mágicas
por Jones. Jue 27 Abr 2017, 4:29 pm
¡Hey!
¡Amé la idea!
Mi nombre es Cece pero todos me dicen Jones:)
¡Amé la idea!
Mi nombre es Cece pero todos me dicen Jones:)
- FICHA:
- ESCRITOS:
- AQUÍ.:
Suspiré y subí las escaleras hasta el tercer piso del edificio. Saqué la llave de mi mochila y abrí el departamento B, las luces estaban apagadas.
Espero que mi abuela esté dormida. ¿Qué diría si me encuentra llegando a casa a estas horas de la noche?
“¿Que, qué diría?” Dijo la voz de mi abuela, encendiendo las luces de la sala. “¡Leo Hunter, te dije que llegaras temprano!”
Cerré los ojos con fuerza. A veces podría jurar que mi abuela tenía el poder de leer las mentes, pero, obviamente, eso era imposible. Simplemente me conocía demasiado bien.
“Lo siento.” Susurré. “Me quedé con Georgie haciendo las tareas y perdí la noción del tiempo.” Respondí, con la verdad.
“Me preocupaste, hijo.” Suspiró, acercándose a mí. “Ve a tu habitación y prepara tu maleta, que la mía ya está lista.”
“Claro, abuela.” Asentí, y caminé hacia mi habitación. “Buenas noches.”
Solté un suspiro, cerré la puerta de mi habitación, lancé mi mochila a una esquina y me tiré sobre mi cama.
Una pequeña fotografía rota estaba sobre mi mesita de noche.
Fruncí el ceño al verla fuera de su lugar. Se supone que esa fotografía debería estar debajo de mi almohada. ¿Quién la sacó de su lugar?
Quizás mi abuela, al ordenar un poco mi habitación.
Suspiré y tomé la pequeña y rota fotografía. En ella se veía a un hombre con ojos de un tono verdoso –Aunque menos verdes que los de mi abuela–, cabello castaño aunque un poco rojizo, una amplia sonrisa y cejas gruesas, pero no demasiado.
Sonreí de lado, con tristeza y curiosidad, viendo a mi padre en la fotografía, Thomas Hunter. Un hombre que jamás conocí, porque él murió cuando yo nací, en un accidente de tráfico o algo así, jamás quise preguntar por la historia completa, porque de seguro a mi abuela le dolía contar la historia de cómo murió su único hijo.
En la fotografía, él vestía con un terno negro, una corbata gris, y se encontraba abrazando a alguien.
Se veía un pequeño brazo de tez pálida rodearlo por la cintura. Esa era la parte rota. La parte de la fotografía que yo había roto hace dos años, al enterarme de la verdad.
Había roto la fotografía, porque los delicados brazos pálidos, le pertenecían a mi madre, una mujer que me abandonó en la puerta de mi abuela cuando yo era tan sólo un bebé con unas pocas semanas de vida, y luego desapareció, sin dejar rastro.
Ni siquiera pregunté por su apellido. Simplemente todo lo que sabía de ella, era que su nombre era Elle, y que me había abandonado.
Solté un suspiro y me levanté. Tomé un pequeño espejo que tenía guardado en mi pequeño cajón, y me observé, observando la fotografía de vez en cuando. Era algo que me encantaba hacer.
Me miré el cabello unos segundos, y luego observé a la fotografía. Yo tenía casi el mismo color de cabello que mi padre, y el mismo peinado. Un tono de castaño oscuro, peinado hacia la izquierda, y el de mi padre era un castaño más rojizo. El color de mi piel era menos moreno que el de mi padre, pero igual era de un tono bronceado.
Me observé las cejas, eran un poco diferentes a las de él. Eran menos gruesas que las de mi padre, y más cortas, pero tenían una forma parecida a las cejas de él, como formando una especie de semi círculo o algo así, no sabría describirlo bien.
Pasé a los ojos. Eran diferentes a los de mi padre, pero al menos tenían algo de él. Los ojos de mi padre eran menos verdes que los de mi abuela, pues tenían manchas castañas alrededor, lo cual hacían verlos un poco menos brillantes. Los míos, en cambio, eran de color miel, y alrededor tenían como una especie de círculo verde, que hacían que se vieran de un color claro.
Continué con la nariz. La nariz de mi padre parecía ser recta y algo ancha, aunque no demasiado. La mía era exactamente igual.
Miré la gran sonrisa de mi padre, y sonreí al espejo. Teníamos una sonrisa muy parecida, y eso me hacía sentir bien.
Y lo que me hacía sentir mejor, era que yo era algo así como una copia de mi padre, era casi igual a él, físicamente hablando. Y mi abuela me lo recordaba siempre.
No me parecía en nada a mi madre, y eso era bueno. No tenía ganas de parecerme en nada, a la mujer que me abandonó como si de un perro se tratase.
Solté un suspiro y guardé la foto donde pertenecía: debajo de mi almohada.
Volví a acostarme sobre mi cama, y me quedé observando el techo por varios minutos más.
- AQUÍ.:
Lo conocí cuando estaba entrenando con el equipo de fútbol de mi club.
El entrenamiento había comenzado hace como una hora, y nos encontrábamos corriendo por fuera de la cancha, dando vueltas sin descanso.
Sentía las pequeñas gotas de sudor caer por mi cara, y, mi cabello, amarrado en una coleta alta, se agitaba con cada paso que daba.
“¡Entrenador! ¿Podemos jugar?” La voz de un chico llamó la atención de todo el equipo, tanto del femenino como del masculino.
“¿Un partido amistoso?” Habló el entrenador Nicholas, con una gran sonrisa. “¡Suena bien!” Exclamó, aplaudiendo una vez. “¡Todos! ¡Paren de correr y vengan aquí!”
Me detuve y me acerqué al entrenador, siendo seguida por las chicas y los chicos que formaban parte del equipo.
Un grupo de chicas y chicos habían entrado a nuestra cancha, y estaban vestidos con zapatillas deportivas, y yo estaba muy segura de que eran los chicos y chicas del equipo de atletismo del lugar.
“¡Juguemos un pequeño partido amistoso!” Exclamó el chico que habló primero. Sonreí inconscientemente al verlo, y grabé cada detalle del atleta.
Tenía el cabello rubio y largo, como la melena de un león, pues estaba perfectamente desordenado. Sus ojos eran de color miel, y combinaban perfectamente con su tez, que era de un color bronceado.
Se encontraba sonriendo, y podía jurar que era la sonrisa más perfecta que había visto en mi vida.
Vestía con una camiseta negra, que en letras blancas tenía escrito ‘11º Grado’. Y esa camiseta pertenecía al onceavo grado de mi instituto.
Se encontraba con un short corto de color crema, y zapatillas deportivas color gris.
“Sia, la baba se te cae.” Susurró mi amiga Camille, una de las chicas de mi equipo, lo suficientemente bajo para que solamente yo la escuchara.
“Cállate, Cam.” Respondí, con el ceño fruncido. “¿Quién es él?” Señalé al rubio.
“¿No se te hace conocido?” Soltó una leve risa y yo negué, confundida. “Es Finn Vernon, está en tu instituto.” Sonrió, y luego me guiñó un ojo. “¿Por qué no le hablas?”
“¿Estás loca?” La miré.
“¿Es que tienes miedo?” Me retó.
Dijo las palabras prohibidas. ¡Yo, Sia Scott, no le temo a nada!
Y se lo demostraré.
“¡Claro que no tengo miedo!” Fruncí el ceño. “Le voy a hablar, después del partido amistoso.”
“Espero con ansias ese momento.” Rió mi compañera.
El partido amistoso había terminado después de una hora y media. Habíamos ganado con siete goles a cinco. Y yo había anotado dos goles, y había hecho una asistencia (una muy buena, por cierto).
Me quedé esperando a que todos se fueran para armarme de valor y hablarle a Finn, pero el rubio comenzó a caminar hacia las duchas.
Si no hacía algo, se iría y no le habré hablado, y Cam pensará que tuve miedo, cuando no fue así.
“¡Oye! ¡Finn!” Grité cuando estuvo a punto de entrar al vestuario de varones, pues estaba como a cincuenta metros de él, y no estaba planeando acercarme más.
“¿Sí?” Me gritó de vuelta, volteando a verme.
Vamos, díselo. No vas a perder nada, Scott. Tú puedes. Eres una mujer con agallas.
Sólo cuenta hasta tres y grita.
Uno.
Dos…
¡Tres!
“¡Eres lindo!” Exclamé, para después salir corriendo fuera del lugar y lejos de su vista.
La adrenalina me llenó conforme me alejaba corriendo, pues había pasado un papelón al haberle gritado eso.
Pero había valido la pena.
- PERSONAJES:
Lily Luna Potter; Fred II Weasley; Isabelle Saltwood (Libre femenino 15); Giuliano Peverell (Libre masculino 17); Dominique Weasley; Peter Peverell (Libre masculino 15)
- PAREJAS:
Lily Potter & Peter Peverell; Dominique Weasley & Giuliano Peverell; Fred II Wesley & Isabelle Satlwood
Jones.
Re: Travesuras Mágicas
por Loki. Jue 27 Abr 2017, 7:27 pm
Newtie. escribió:¡Hey!
¡Amé la idea!
Mi nombre es Cece pero todos me dicen Jones:)
- FICHA:
- ESCRITOS:
- AQUÍ.:
Suspiré y subí las escaleras hasta el tercer piso del edificio. Saqué la llave de mi mochila y abrí el departamento B, las luces estaban apagadas.
Espero que mi abuela esté dormida. ¿Qué diría si me encuentra llegando a casa a estas horas de la noche?
“¿Que, qué diría?” Dijo la voz de mi abuela, encendiendo las luces de la sala. “¡Leo Hunter, te dije que llegaras temprano!”
Cerré los ojos con fuerza. A veces podría jurar que mi abuela tenía el poder de leer las mentes, pero, obviamente, eso era imposible. Simplemente me conocía demasiado bien.
“Lo siento.” Susurré. “Me quedé con Georgie haciendo las tareas y perdí la noción del tiempo.” Respondí, con la verdad.
“Me preocupaste, hijo.” Suspiró, acercándose a mí. “Ve a tu habitación y prepara tu maleta, que la mía ya está lista.”
“Claro, abuela.” Asentí, y caminé hacia mi habitación. “Buenas noches.”
Solté un suspiro, cerré la puerta de mi habitación, lancé mi mochila a una esquina y me tiré sobre mi cama.
Una pequeña fotografía rota estaba sobre mi mesita de noche.
Fruncí el ceño al verla fuera de su lugar. Se supone que esa fotografía debería estar debajo de mi almohada. ¿Quién la sacó de su lugar?
Quizás mi abuela, al ordenar un poco mi habitación.
Suspiré y tomé la pequeña y rota fotografía. En ella se veía a un hombre con ojos de un tono verdoso –Aunque menos verdes que los de mi abuela–, cabello castaño aunque un poco rojizo, una amplia sonrisa y cejas gruesas, pero no demasiado.
Sonreí de lado, con tristeza y curiosidad, viendo a mi padre en la fotografía, Thomas Hunter. Un hombre que jamás conocí, porque él murió cuando yo nací, en un accidente de tráfico o algo así, jamás quise preguntar por la historia completa, porque de seguro a mi abuela le dolía contar la historia de cómo murió su único hijo.
En la fotografía, él vestía con un terno negro, una corbata gris, y se encontraba abrazando a alguien.
Se veía un pequeño brazo de tez pálida rodearlo por la cintura. Esa era la parte rota. La parte de la fotografía que yo había roto hace dos años, al enterarme de la verdad.
Había roto la fotografía, porque los delicados brazos pálidos, le pertenecían a mi madre, una mujer que me abandonó en la puerta de mi abuela cuando yo era tan sólo un bebé con unas pocas semanas de vida, y luego desapareció, sin dejar rastro.
Ni siquiera pregunté por su apellido. Simplemente todo lo que sabía de ella, era que su nombre era Elle, y que me había abandonado.
Solté un suspiro y me levanté. Tomé un pequeño espejo que tenía guardado en mi pequeño cajón, y me observé, observando la fotografía de vez en cuando. Era algo que me encantaba hacer.
Me miré el cabello unos segundos, y luego observé a la fotografía. Yo tenía casi el mismo color de cabello que mi padre, y el mismo peinado. Un tono de castaño oscuro, peinado hacia la izquierda, y el de mi padre era un castaño más rojizo. El color de mi piel era menos moreno que el de mi padre, pero igual era de un tono bronceado.
Me observé las cejas, eran un poco diferentes a las de él. Eran menos gruesas que las de mi padre, y más cortas, pero tenían una forma parecida a las cejas de él, como formando una especie de semi círculo o algo así, no sabría describirlo bien.
Pasé a los ojos. Eran diferentes a los de mi padre, pero al menos tenían algo de él. Los ojos de mi padre eran menos verdes que los de mi abuela, pues tenían manchas castañas alrededor, lo cual hacían verlos un poco menos brillantes. Los míos, en cambio, eran de color miel, y alrededor tenían como una especie de círculo verde, que hacían que se vieran de un color claro.
Continué con la nariz. La nariz de mi padre parecía ser recta y algo ancha, aunque no demasiado. La mía era exactamente igual.
Miré la gran sonrisa de mi padre, y sonreí al espejo. Teníamos una sonrisa muy parecida, y eso me hacía sentir bien.
Y lo que me hacía sentir mejor, era que yo era algo así como una copia de mi padre, era casi igual a él, físicamente hablando. Y mi abuela me lo recordaba siempre.
No me parecía en nada a mi madre, y eso era bueno. No tenía ganas de parecerme en nada, a la mujer que me abandonó como si de un perro se tratase.
Solté un suspiro y guardé la foto donde pertenecía: debajo de mi almohada.
Volví a acostarme sobre mi cama, y me quedé observando el techo por varios minutos más.
- AQUÍ.:
Lo conocí cuando estaba entrenando con el equipo de fútbol de mi club.
El entrenamiento había comenzado hace como una hora, y nos encontrábamos corriendo por fuera de la cancha, dando vueltas sin descanso.
Sentía las pequeñas gotas de sudor caer por mi cara, y, mi cabello, amarrado en una coleta alta, se agitaba con cada paso que daba.
“¡Entrenador! ¿Podemos jugar?” La voz de un chico llamó la atención de todo el equipo, tanto del femenino como del masculino.
“¿Un partido amistoso?” Habló el entrenador Nicholas, con una gran sonrisa. “¡Suena bien!” Exclamó, aplaudiendo una vez. “¡Todos! ¡Paren de correr y vengan aquí!”
Me detuve y me acerqué al entrenador, siendo seguida por las chicas y los chicos que formaban parte del equipo.
Un grupo de chicas y chicos habían entrado a nuestra cancha, y estaban vestidos con zapatillas deportivas, y yo estaba muy segura de que eran los chicos y chicas del equipo de atletismo del lugar.
“¡Juguemos un pequeño partido amistoso!” Exclamó el chico que habló primero. Sonreí inconscientemente al verlo, y grabé cada detalle del atleta.
Tenía el cabello rubio y largo, como la melena de un león, pues estaba perfectamente desordenado. Sus ojos eran de color miel, y combinaban perfectamente con su tez, que era de un color bronceado.
Se encontraba sonriendo, y podía jurar que era la sonrisa más perfecta que había visto en mi vida.
Vestía con una camiseta negra, que en letras blancas tenía escrito ‘11º Grado’. Y esa camiseta pertenecía al onceavo grado de mi instituto.
Se encontraba con un short corto de color crema, y zapatillas deportivas color gris.
“Sia, la baba se te cae.” Susurró mi amiga Camille, una de las chicas de mi equipo, lo suficientemente bajo para que solamente yo la escuchara.
“Cállate, Cam.” Respondí, con el ceño fruncido. “¿Quién es él?” Señalé al rubio.
“¿No se te hace conocido?” Soltó una leve risa y yo negué, confundida. “Es Finn Vernon, está en tu instituto.” Sonrió, y luego me guiñó un ojo. “¿Por qué no le hablas?”
“¿Estás loca?” La miré.
“¿Es que tienes miedo?” Me retó.
Dijo las palabras prohibidas. ¡Yo, Sia Scott, no le temo a nada!
Y se lo demostraré.
“¡Claro que no tengo miedo!” Fruncí el ceño. “Le voy a hablar, después del partido amistoso.”
“Espero con ansias ese momento.” Rió mi compañera.
El partido amistoso había terminado después de una hora y media. Habíamos ganado con siete goles a cinco. Y yo había anotado dos goles, y había hecho una asistencia (una muy buena, por cierto).
Me quedé esperando a que todos se fueran para armarme de valor y hablarle a Finn, pero el rubio comenzó a caminar hacia las duchas.
Si no hacía algo, se iría y no le habré hablado, y Cam pensará que tuve miedo, cuando no fue así.
“¡Oye! ¡Finn!” Grité cuando estuvo a punto de entrar al vestuario de varones, pues estaba como a cincuenta metros de él, y no estaba planeando acercarme más.
“¿Sí?” Me gritó de vuelta, volteando a verme.
Vamos, díselo. No vas a perder nada, Scott. Tú puedes. Eres una mujer con agallas.
Sólo cuenta hasta tres y grita.
Uno.
Dos…
¡Tres!
“¡Eres lindo!” Exclamé, para después salir corriendo fuera del lugar y lejos de su vista.
La adrenalina me llenó conforme me alejaba corriendo, pues había pasado un papelón al haberle gritado eso.
Pero había valido la pena.
- PERSONAJES:
Lily Luna Potter; Fred II Weasley; Isabelle Saltwood (Libre femenino 15); Giuliano Peverell (Libre masculino 17); Dominique Weasley; Peter Peverell (Libre masculino 15)
- PAREJAS:
Lily Potter & Peter Peverell; Dominique Weasley & Giuliano Peverell; Fred II Wesley & Isabelle Satlwood
Holiii!!!
Me haces reír tanto cada vez que te presentas :'D
Realmente el que te puso el apodo de Jones es un genio xD
Love youu que bonito trabajar juntas again <3
Loki.
Re: Travesuras Mágicas
por Beac Mar 02 Mayo 2017, 4:15 am
Nooooooo por su chucha, habia comentado esto y no quedo el comentario. Bebes, tengo la pc en el service, el finde haré todo como se debe!!!
Beac
Re: Travesuras Mágicas
por Willa Mar 02 Mayo 2017, 10:57 am
- Ficha:
- Escrito: [Tienes que estar registrado y conectado para ver este vínculo], [Tienes que estar registrado y conectado para ver este vínculo]
Personajes: Fred Weasley II, Lily Luna Potter, Louis Weasley, Hugo Weasley, Zeus Havenwatcher (libre masculino), Willow Woldin (libre femenino 15),
Pareja: Fred y Willow, Lily Luna y Zeus, Louis Weasley y Hugo Weasley(libres)
Willa
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