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¿El Chico Equivocado? (Adaptación Joe y Tu)
O W N :: Archivos :: Novelas Abandonadas
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¿El Chico Equivocado? (Adaptación Joe y Tu)
Nombre original: Speak now: The Wrong Boy?
Autora: D.A. Torrez (yo) ;)
Adaptación: Si y No. La estoy escribiendo yo, pero los nombres originales no son los que aparecerán aquí.
Genero: Romance
Advertencias: la historia se dividirá en dos partes, algo así como "una serie".
Autora: D.A. Torrez (yo) ;)
Adaptación: Si y No. La estoy escribiendo yo, pero los nombres originales no son los que aparecerán aquí.
Genero: Romance
Advertencias: la historia se dividirá en dos partes, algo así como "una serie".
Prefacio
Speak Now: The Wrong Boy?
Cuando Tyler, el antiguo novio de ____ y el amor de su vida, Decide unirse en matrimonio con otra chica, Las emociones de ____ dan un colapso al cien por ciento. Pues ___ se siente convencida de que Tyler aun la ama y que debería ser ella la que estuviera frente al altar con Tyler en lugar de Ángela, la prometida de Tyler.
En un arranque de celos y desesperación tras darse cuenta de que está a punto de perder al amor de su vida ____ idealiza un plan para irrumpir en la boda. ____ debe viajar desde Midland hasta San Antonio Texas y recordarle a Tyler todo el amor que ambos se profesaban.
Nada más fácil que eso ¿no?
Pero las cosas se complican tras conocer a Joe. Un joven dos años mayor y que al instante se siente atraído por ella.
Ahora más confundida que nunca, ____ debe decidir por quien vale la pena luchar. Por el chico que está a punto de contraer matrimonio con otra mujer, o por el joven que acaba de conocer y que se ha filtrado en sus pensamientos.
D.A. Torrez.
Re: ¿El Chico Equivocado? (Adaptación Joe y Tu)
:O
hola hola primera lectora!!
Se ve tan interesante akdhkasdhkashkashdksdasf espeor la comiences (:
hola hola primera lectora!!
Se ve tan interesante akdhkasdhkashkashdksdasf espeor la comiences (:
helado00
Re: ¿El Chico Equivocado? (Adaptación Joe y Tu)
Hola chicas!!!! Bienvenidas
Mil gracias por pasarse por aquí.... por un momento creí que no tendría lectoras y compense a entrar en pánico pero bueno, ya paso :D ..... soy un poco nueva en esto,( ya que la primer novela que había escrito en otro foro la tuve que cancelar por perdido perdida de archivos) así que Pleease denme todas sus opiniones, de verdad me encantaría saber que es lo que piensan. Mil besos y nos leemos pronto!!!
Posdata: subiré un capitulo por semana, sera cada lunes a las 9:00 PM
Capítulo 1
Midland Texas
La emoción se instaló de inmediato en mi cuerpo, además de la ansiedad por llegar lo más pronto posible al aeropuerto de la ciudad. No tenía tiempo que perder.
Mis manos temblaban sobre mi regazo, mirando de manera distante por la ventanilla de la vieja camioneta del abuelo de Megan.
Las lágrimas amenazaban con salir de mis ojos al recordar la carta que había recibido la mañana anterior mientras desayunábamos en casa de los abuelos de Megan.
Querida _____.
Lamento no haberte escrito durante los últimos meses. Pero sé que comprenderás que los motivos por los que no lo hice son completamente ajenos a ti.
Te extraño. Y no sabes qué tanto. Aún recuerdo cuando solías acompañarnos a Mathew y a mí al parque a pasear a nuestro perro. Pero en especial, recuerdo aquella ocasión en la que le pediste a Matt que te dejara tomar la correa que sujetaba a Owen, nuestro Golden Retriever y terminaste corriendo detrás de el por todo el parque. O la ocasión en la que le lanzaste tu helado en la cabeza a Tyler porque él no quería aceptar que le habías ganado en su videojuego favorito. Esos querida amiga, son recuerdos que jamás olvidare. Pero espero que algún día podamos volver a estar juntos de la misma manera en la que lo hacíamos.
_____, hay algo que tengo que decirte. Es algo que todo el mundo considera que es mejor ocultarte. Pero si lo hiciera seria como si te estuviera traicionando de algún modo. Así que lo hare.
Te pido por favor que me perdones por el daño que seguramente voy a hacerte. Pero no puedo soportar la idea de que alguien más pueda decirte esto para hacerte daño, o que te enteres por algún cotilleo de pasillo. Así que lo diré.
Tyler va a casarse. Se casara este Sábado. Él ha insistido en que ella es la persona indicada para él y se siente muy fe_____ por la idea de unirse en matrimonio. Por eso te lo digo con tan poca anticipación.
Querida amiga. Por favor, te pido y puedas perdonarme por ocultarte todo esto. Pero realmente no quería hacerte daño. Pero ahora comprendo que eso sería inevitable.
Prometo visitarte pronto. Realmente quiero recuperar nuestra amistad.
Te quiere. Caroline Adams.
Las palabras se estancaron en mi mente desplazando cualquier otro pensamiento coherente, además del enorme nudo en mi estómago y pulmones que amenazaban con cortar todo el aire. Hacían demasiado daño, pero aun así no lograba olvidarlas. No podía creer lo que decía la carta. Pero ciertamente, tampoco quería creerlo del todo.
—_____ ¿te encuentras bien? —La voz de Megan me saco de mi ensoñación. Aparte la mirada de la ventanilla y la mire directamente. Megan se veía un poco preocupada. Y haciéndome sentir culpable de manera involuntaria por hacerla pasar por esto y haber tenido que arruinar sus vacaciones en casa de sus abuelos.
Con esfuerzo, trate de apartar mis sentimientos de pesar y preocupación de mi rostro y le ofrecí una media sonrisa, la cual la tranqui_____o un poco.
—si Meg, Estoy bien— mi voz se cortó en la última frase. Por lo cual maldije en mi mente por permitirme a mí misma que la situación con Tyler me afectara demasiado.
Megan me miro con tristeza, pero finalmente asintió ignorando la forma en la que mi voz se había quebrado. Lo cual agradecí al instante. Pues estaba totalmente segura de que si Megan comenzaba a preguntarme por mi estado de ánimo o mis sentimientos, de inmediato rompería a llorar desconsoladamente.
El silencio se instaló de nuevo en el auto, así que volví a dirigir mi mirada hacia el exterior mientras el auto continuaba el camino fuera de la ciudad, pensando en la posibilidad de que todo fuese un sueño, o más bien una pesadilla, del cual muy pronto se despertaría en pocos minutos y del cual solo quedaría un espantoso recuerdo.
En silencio repase en mi mente una y otra vez la carta de Caroline. Al instante las lágrimas comenzaron a correr por mis mejillas. Dolían demasiado el darme cuenta de que Tyler me había olvidado. Y pero aun, Que él amaba a otra mujer hasta el punto en el que quería unirse en matrimonio a ella. Por un momento pensé en aquellas innumerables ocasiones en las que ambos habíamos hablado acerca del matrimonio, de la manera en la que me vería en un vestido de novia, en nuestra canción para nuestro primer baile como marido y mujer. En como el me vería mientras caminaba hacia el altar del brazo de mi padre. “serás la novia más hermosa del mundo” había dicho en una de las ocasiones en las que hablábamos de cuál sería la mejor iglesia para la boda. Pensábamos en como decoraríamos la casa que ambos compartirían después del matrimonio, e incluso en los nombres que pondrían a sus futuros hijos.
Apartando las lágrimas de mis mejillas con mi muñeca, respire profundamente y me dedique a apartar esos pensamientos de mi mente, y cuando estuve segura de que estaba mejor, me gire hacia mi Megan.
—Perdón por arruinar tus vacaciones Meg —dije con verdadero arrepentimiento. De inmediato Megan dirigió su mirada en mi dirección y sonrió ampliamente.
—¿de qué me estás hablando? —Pregunto Megan con tranquilidad en su rostro. No parecía estar molesta en lo absoluto, y realmente No podía comprender como ella estaba tan tranquila después de todos los problemas que le he estado causando desde la mañana anterior en la que había recibido aquella carta desde San Antonio.
—Hablo de que no tenías por qué traerme hasta aquí y dejar de lado todos tus planes con tus abuelos— Megan sonrió aún más ampliamente —¿ha si? Y dime, ¿qué habrías hecho si me hubiese reusado a traerte?— Pregunto con un gesto de diversión en su rostro. Fruncí el ceño asimilando su pregunta y luchando por obtener una respuesta para su pregunta—
—no lo sé, ¿Pedir un Taxi? —Megan se echó a reír como si fuera la idea más absurda que había escuchado en su vida—
—debes estar bromeando ¿no?— Pregunto con diversión— Escucha _____, sé que esto es muy difícil para ti, y estoy tratando de mantenerme a raya en todo esto porque realmente no conozco del todo la historia de amor que hubo entre ese chico y tú, pero eso no significa que no abandonaría cualquier cosa tan solo para ayudarte a cerrar un capítulo más en tu vida. Te quiero y quiero que sepas que haría cualquier cosa por ti— de inmediato sentí como las lágrimas amenazaban con salir de nuevo, pero en esta ocasión no las detuve.
—Gracias Meg, Gracias por hacer esto— Megan sonrió cálidamente haciéndome sentir un vuelco en mi corazón—
—Estoy segura de que tu harías lo mismo por mí— Megan aparto la mirada devolviéndola a camino y Mi cuerpo se tensó al instante al escuchar las palabras de Megan.
En ese instante me sentí como la peor amiga del mundo, pues estaba totalmente segura de que primero intentaría hacerla desistir de cualquier plan de reencontrarse con su antiguo novio y después inventaría cualquier motivo que la convenciera a razonar que lo que estaba a punto de hacer era una gran tontería y no me rendiría hasta que desistiera de cualquier idea de si quiera pensar el aquel hombre.
Ignorando mi sentido de culpabilidad, devolví mi vista al frente de la carretera concentrándome en el camino que emprendíamos. Al llegar a la intersección en la cual debíamos tomar para llegar al aeropuerto, mi corazón se aceleró al instante, sintiendo de inmediato la emoción y la ansiedad de volver a ver a Tyler. Pero todo eso se convirtió en molestia y confusión cuando Megan no tomo la intersección.
—Meg. Creo que te has desviado del camino— Mencione remarcando lo obvio y confundiéndome aún más cuando Megan sonrió ampliamente.
—¿de qué me hablas? —Pregunto Meg con inocencia.
—¡Ya has pasado el aeropuerto! —Remarque señalando hacia el camino que acababan de dejar atrás.
—Lo sé, pero no me he desviado —Declaro Megan con seguridad.
Mi cuerpo se tensó al instante ante la nueva idea que había llegado a mi mente.
—Dime que no conducirás hasta San Antonio, Meg. ¡Terminaras exhausta!— Mencione preocupada por mi amiga. Ella rio fuertemente—
— no _____. Revise los vuelos hasta san Antonio y no había ninguno disponible, así que nuestra otra opción es tomar un autobús, y ahí es a donde me dirijo —De mi boca salió un gran suspiro de alivio al saber que Megan no conduciría hasta el cansancio para hacerme llegar a san Antonio.
Asimile con detenimiento todas las posibilidades de este nuevo cambio en el plan esperando no encontrar ninguna posibilidad de que el plan saliera mal. Pero para mí desgracia, si hubo una
—pero tardare más si voy en autobús, ¿no es cierto? —Pregunte con un poco de preocupación porque eso pudiese afectar en el plan que Megan y yo habíamos ideado la tarde anterior después de haber salido del Shock que había provocado la noticia de la boda de Tyler. Megan asintió
—solo algunas horas, Pero tranquila, tu autobús saldrá a las ocho en punto, serán como seis horas de camino y además, aún faltan dos días para que llegue el día de la boda, te quedara tiempo suficiente para reunirte con Tyler y averiguar todo lo que necesitas, e incluso para convencerlo de que cancele la boda si eso es lo que quieres —Dijo Megan Guiñándome un ojo. De inmediato rompí a reír recordando el año anterior en el que asistimos a la boda de su primo y mencione que jamás había asistido a una boda en la que alguien gritara “yo me opongo”. Al mirar su rostro de diversión y perversión me di cuenta de que ella tenía en mente el mismo pensamiento— Prométeme que te opondrás si es necesario —dijo Megan con seriedad. Asentí—
—te prometo que lo hare Meg. Lo amo demasiado para dejar que él se aleje de esa manera —Megan asintió.
Minutos más tarde, ya estábamos entrando en el estacionamiento de la terminal de autobuses de Midland. Mi corazón se disparó de inmediato. Temiendo que pudiera sufrir un ataque al corazón, trate de tranqui_____arme haciendo tranquilas respiraciones. Megan estaciono el auto y me miro con una sonrisa en su boca
—Bien, aquí estamos — Menciono mientras apagaba el motor de la camioneta
—Lo sé— Susurre tratando de ignorar el nudo en mi garganta. Megan sonrió y abrió la puerta saliendo del auto y dirigiéndose a la parte trasera de la vieja camioneta que uti_____aba su abuelo en la granja.
Tome un respiro y Salí de la camioneta siguiendo a Mega hasta la parte trasera en donde estaba mi pequeña maleta con todo lo que necesitaría dentro de ella.
En silencio y sonriendo, mire a Megan tratando de abrir la puerta de la camioneta. Megan era una chica alta de cabello oscuro y de complexión delgada. Enfundada en unos janes claros ajustados, blusa de tirantes blanca, una camisa a cuadros abierta por completo y unas botas de cuero en color negro. Ella era realmente atractiva, aun usando ese viejo atuendo de campesina de granja. Y debo admitir que sentía un poco de envidia por eso.
Al lograr abrir la puerta, Megan soltó un suave grito de victoria y de subió en la camioneta tomando mi maleta. Me acerque hasta ella y tome la maleta en mis brazos para después depositarla en el piso.
—bien, vamos de inmediato o perderás el autobús. Menciono Megan después de volver a cerrar la puerta.
Saltando de la camioneta, Megan se acercó hasta mí tomando mi brazo para obligarme a avanzar a través del estacionamiento.
Finalmente llegamos al interior de la terminal de autobuses. Las personas se veían apresuradas para tomar su autobús, algunas otras esperaban en el área de envaramiento, otras hacían fila esperando su turno para comprar su boleto, y algunas otras tan solo se despedían de sus familiares que estaban por abordar.
Megan llamo mi atención de inmediato tras volver de la fila en la que me compro el boleto. Me lo tendió y con un poco de vacilación lo tome en mi mano junto con mi bolso de mano en el que traía todas mis pertenencias básicas para no aburrirme en el camino.
—Bien _____, es el momento— Megan me miró fijamente esperando por una respuesta, pero realmente no sabía que decir.
Una expresión de pánico se apodero de mi rostro tras pensar detenidamente en lo que estaba a punto de hacer. Megan se dio cuenta y me tomo por los hombros
—Si no estás segura aun puedes arrepentirte — Espero en silencio hasta que pude ordenar mi mente y ofrecerle una respuesta.
—Estoy segura Meg —Mi voz temblaba un poco. Pero Megan lo ignoro y asintió.
En un momento estaba siendo enfrentada por una Megan inquisitiva y al siguiente estaba entre los brazos de mi mejor amiga. Megan me apretó fuertemente.
—Prométeme que te cuidaras _____, prométeme que estarás bien pase lo que pase, prométeme que aun en los peores escenarios no harás ninguna locura —Megan se apartó mirándome fijamente. En sus ojos pude ver preocupación, tristeza y hasta incluso miedo.
Un nudo se instaló en mi garganta impidiéndome responder, así que asentí. De pronto, su expresión cambio al instante por una de furia.
—No _____, ¡Prométemelo, dime que no harás ninguna locura!— mirando su expresión de furia, sonreí al instante ignorando su mirada inquisitoria—
—Si Meg, te lo Prometo. Es más —apartándome de mi mejor amiga, puse mi mano frente a mi haciendo el saludo que hacían las niñas exploradoras — Yo _____ Alexander Graham Te prometo a ti Megan Reynolds que no hare ninguna locura, que me cuidare, me alimentare, me aseare y me abrigare de la mejor manera para evitar cualquier incidente que atente contra mi vida e integridad física y emocional…— sin poder evitarlo, rompí a reír, lo cual también hiso reír a Megan. Rompiendo la tensión que se había instalado entre las dos.
—No es gracioso —Dijo Megan aun riendo. De inmediato trate de guardar la compostura.
—Está bien Meg, te lo prometo— Megan asintió y me sonrió cálidamente—
—Solo me arrepiento de no poder acompañarte —dijo haciendo una graciosa expresión de disgusto pero aun pareciendo divertida. —Pero me siento más tranquila sabiendo que estarás bien sin mi ahí para apoyarte —Me acerque a ella abrazándola fuertemente y dejando que mis lágrimas salieran de nuevo.
—prometo que volveré pronto y te contare absolutamente todo lo que pase ahí— Megan sonrió y se alejó.
De pronto los altavoces sonaron con gran volumen anunciando la próxima salida del autobús hacia San Antonio.
—Esa hora —Megan asintió.
Tome una profunda respiración y mi maleta. Girándome en dirección contraria me dirigí hasta la puerta de embarque. Camine algunos pasos. Pero me di cuenta de que aún no me había despedido de Megan. Me gire de nuevo viendo como mi mejor amiga esperaba mi partida, aun con una sonrisa en sus labios y los ojos llorosos.
Me despedí diciendo adiós con mi mano, a lo cual ella respondió de la misma manera. Volví a girarme de nuevo en dirección de la puerta de embarque, con cada paso que me acercaba, sentía como mi corazón se aceleraba de emoción y finalmente mire el autobús que me dirigiría hasta Mi próximo destino. Tyler Adams.
D.A. Torrez.
Re: ¿El Chico Equivocado? (Adaptación Joe y Tu)
Tendre que esperar seis dias para el proximo caaapiisss!!!!???.... aaaaaaahhhhh se que aguantare!!!!!!!!.... asi que sigueeeeee!!!!
chelis
Re: ¿El Chico Equivocado? (Adaptación Joe y Tu)
ME ENCANTÓ!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!! NUEVA Y FIEL LECTORA
Espero el siguiente capitulo xD
Monse_Jonas
Re: ¿El Chico Equivocado? (Adaptación Joe y Tu)
Nueva lectora!! Se ve que es muy buena,síguela!!!!!!!!!!
HOLA.
Re: ¿El Chico Equivocado? (Adaptación Joe y Tu)
Hola a todas y Bienvenidas a mis nuevas lectoras
( HOLA y Monse_jonas)
he querido pasarme por aquí antes, pero por desgracia no he podido, me he atrapado por completo leyendo un nuevo libro, ademas de que me han llamado para formar parte en un grupo musical en donde vivo y se me ha complicado un poco para estar aquí por mas de 5 minutos. pero bueno, ya veré como resolverlo y darme mas tiempo para estar aquí por mas tiempo y mas seguido .....
he notado que algunas de ustedes ya están muy emocionadas por el siguiente capitulo.... en una hora mas subiré el capitulo, solo tienen que tener un poquito mas de paciencia, aun tengo que hacer la edición de los nombres de los personajes jejeje. en fin, nos leemos mas tarde, mil besos
D.A. Torrez.
Re: ¿El Chico Equivocado? (Adaptación Joe y Tu)
Capítulo 2
El momento había llegado. Con el autobús frente a mí, era más que inevitable que mi plan se llevara a cabo. Si mis cálculos eran correctos, en tan solo seis estaría en San Antonio.
Mi corazón se aceleró aún más ante la posibilidad de volver a ver a Tyler una vez más. Una sonrisa apareció en mi rostro ante ese pensamiento y no pude evitar sentir mariposas en mi estómago.
—señorita, ¿me permite su maleta? —escuche la voz de un hombre. Me gire hacia él un poco sorprendida.
Era un hombre no muy mayor, quizás de algunos veinticinco años, y por más que amara a Tyler tenía que admitir que también era atractivo. De inmediato solté mi maleta y asentí. El hombre tomo la maleta y me ofreció una cálida sonrisa. Se alejó dirigiéndose hasta la parte en la que ponían todo el equipaje de las personas que viajaban en el autobús.
Ahora sí que definitivamente no había vuelta atrás. Tomando fuertemente el práctico bolso de mano que cargaba sobre mi hombro, aborde el autobús.
Todas las miradas se dirigieron hacia mí, y supuse que debería ser por mi atuendo, el cual consistía en un pantalón color blanco ajustado, una blusa de tirantes en color salmón combinado con unos zapatos de tacón en color negro, ya que a diferencia de mi mejor amiga, yo no había elegido un atuendo casual, pues el plan era llegar a la terminal de autobuses, tomar un taxi hasta el hotel, registrarme y dejar mis pertenencias y de inmediato salir en busca de Tyler para poder hablar con él y convencerlo de que aún lo amaba y de que nos diéramos una última oportunidad para poder intentar recuperar lo que teníamos. Así que ciertamente no tenía demasiado tiempo, y debía aprovechar al máximo cada minuto en San Antonio.
Avanzando por el pasillo, y sintiendo las incomodas miradas de los hombres en el autobús, además de las miradas fulminantes de la mayoría de las mujeres, comencé a buscar algún lugar disponible.
A cada paso que avanzaba, me encontraba con una expresión diferente en cada rostro de las mujeres a bordo.
En la parte delantera del autobús. Un grupo de mujeres mayores me miraba de manera desaprobatoria, mientras se susurraban unas a otras sin apartar la mirada de mí, un poco más atrás, me encontré con la mirada de superioridad de una mujer rubia, la cual parecía sentirse como una miss universo. Envidiada y admirada por el resto de la humanidad, pero la mujer no tomaba en cuenta que el que su rubio fuera teñido y no natural como ella quería que todo el mundo pensara, salía a relucir a kilómetros de distancia pues en la parte superior de su cabeza ya comenzaba a verse la raíz de su cabello de color negro azabache.
A unos cuantos asientos en el extremo contrario, una mujer de cabello oscuro me miro de manera fulminante, y de inmediato supuse que la razón era que su acompañante no apartaba la mirada de mí. Detrás de ella, una pequeña niña me miraba con una sonrisa en su rostro, y Junto a ella, su madre, una mujer pelirroja de aspecto duro, la cual no apartaba la mirada de su móvil.
Finalmente encontré un par de asientos disponibles en la parte media del autobús. Sin pensarlo, me introduje dentro del reducido espacio del asiento. Me senté y comencé a sacar mi iPod del interior de mi bolso. Mire en mis listas de reproducción, y de inmediato elegí la opción de reproducción al azar. Accione la opción de reproducir y para mi desgracia comenzó Missing you de John Waite. Pero aun así la deje. Enfrascándome en la letra de la canción cerré los ojos y pensé en todo lo que me esperaría en los próximos días.
*****
Mis ojos se abrieron tras sentir un brusco movimiento que me hiso golpear mi cabeza en la ventanilla del autobús. El autobús estaba en movimiento y yo me había quedado dormida.
Mi iPod aún estaba encendido, pero ahora sonaba Maybe Someday de Bon Jovi. Sin siquiera pensarlo, me quite los audífonos y apague el aparato para así poder concentrarme lo que realmente era importante en este momento. Tyler.
Me sentía nerviosa con tan solo pensar en él. Y realmente no tenía ni idea de que le diría al llegar a verlo. Definitivamente no había planeado nada bien esta nueva estrategia, pues en ningún momento había me había pasado por la mente el cómo intentaría hacer que Tyler se diera cuenta de que aún seguía amándolo después de tanto tiempo y la enorme distancia que nos había separado.
No sin palabras saliendo de mis labios, o peor aún, de mi mente.
Bufando un poco, me volví hasta el asiento junto a mí, que aún seguía vacío, y tome un pequeño bloc de hojas que solía traer siempre que viajaba a algún sitio. Esto se había vuelto una actividad indispensable para mí desde el momento en el que había conocido a Tyler, pues me di cuenta de que a veces resultaba muy aburrido el viajar grandes distancias y con un blog de hojas en tu bolsillo el tiempo pasaba rápidamente. Además de que jamás sabias cuando podías necesitar tomar nota de algo que no quisieras olvidar.
Busque en el interior del bolso tratando de encontrar una pluma o un lápiz con el cual escribir sobre el papel, un escalofrió me recorrió por la espalda, me sentí observada.
Mirando a mi alrededor con un poco de disimulo, pude ver a la pequeña niña pelirroja que me estaba observando. Sus facciones mostraban curiosidad, inocencia y un poco de miedo. Fije mi mirada en ella tratando de averiguar lo que pasaba por su mente descifrando las diferentes expresiones de su rostro. Sintiéndose descubierta, se ocultó detrás de su asiento de manera infraganti, haciéndome sentirme sorprendida y un tanto confundida por la actitud de esa pequeña.
*****
Veinte minutos más tarde mis pensamientos estaban en blanco, al igual que las hojas frente a mí que reposaba sobre mi regazo.
Un insistente dolor se había instalado en mi cabeza desde ya hacía varios minutos. El aburrimiento comenzaba a hacerse presente, Además de que aún no había logrado obtener una línea decente para explicar mi presencia en San Antonio para Tyler. Por un instante, la desesperación se apodero de mí, dejando salir un grito de frustración y arrancando las hojas de mi bloc. Por fin me rendí.
—Esto es un desastre— dije un poco más alto de lo que pretendía
Todas las miradas se dirigieron en mi dirección de nuevo. La mujer rubia falsa desteñida me miraba como si hubiera enloquecido. Y no estaba muy lejos de lo correcto, pues prácticamente había enloquecido debido a la presión y a la frustración de no poder sacar aunque sea una sola línea que pudiera explicar mis sentimientos hacia Tyler.
Por otro lado. Todos los hombres me miraban un tanto confundidos y curiosos por las razones que podría tener para reaccionar de esa manera. En la parte delantera del autobús, el grupo de mujeres mayores me miraban con ¿lastima? Si, seguramente debía ser eso. De inmediato las ignore. Y finalmente, La mujer pelirroja, que aun sostenía su móvil en su mano junto al oído, pero que ahora estaba tapando el micrófono del móvil, me miraba con mirada fulminante. Claramente no estaba nada contenta con la interrupción de su “importante” conversación.
Tras tomar un poco de aire, me relaje y decidí que por ahora solo quería dormir. Recargándome en mi asiento, volví a encender mi iPod y me relaje cayendo en un ligero sueño.
*****
Risas se escuchaban a través de mis sueños, risas bajitas y muy agudas seguidas de pequeños susurros.
Los ignore. Me sentía demasiado cansada y muy poco curiosa para aventurarme a resolver el misterio de las pequeñas risas a mí alrededor.
Un suave toque en mi brazo llamo mi atención. Abrí mis ojos, pero aun así no me moví. Las suaves risas continuaron, después volví a sentir ese suave toque, pero ahora en mi hombro. Lentamente me reincorpore, dirigiendo mi mirada al asiento junto a mí.
Una pequeña melena rojiza llego a mi visión, y me di cuenta de inmediato de quien era.
La pequeña niña se quedó inmóvil al darse cuenta de lo que estaba ocurriendo a su alrededor, sus ojos se abrieron ampliamente y contuvo su respiración dándome una confundida mirada la misma mirada que seguramente yo tenía en mi rostro.
—Hola —Pronuncie en voz baja. La niña retrocedió al instante. Parecía estar asustada, pero no podía comprender el porqué. Intentando tranquilizarla me acerque in poco más a ella, pero era demasiado tarde, la niña había salido corriendo por el pasillo hasta estar junto a su madre. Dejando salir por completo el aire que no me había dado cuenta que había estado conteniendo, me deje caer de nuevo en mi asiento, aún más confundida de lo que ya estaba.
*****
Finamente, después de una hora y cuarenta y cinco minutos desde que el autobús había salido de la terminal de autobuses, y gracias la gran insistencia del grupo de personas de mayor edad que viajaba a bordo del autobús, el autobús había sido obligado a hacer su primera parada en una gasolinera de Monahans. Ya que todo el grupo insistía en que tenían que atender sus actividades fisiológicas.
Y no era de extrañar, pues según los médicos, y los abuelos de Megan, Las personas a cierta edad adulta eran capases de retener líquidos en sus vejigas por menos tiempo que las personas más jóvenes.
Tomando mi móvil, y aun sin nada que hacer por el momento, me dispuse a llamar a Megan para avisarle que ya estaba en camino hacia San Antonio y que necesitaría ayuda para preparar un discurso impresionante para así lograr reconquistar a Tyler.
Ruido de personas subiendo en el interior del autobús me distrajo de mi actividad. Dirigiendo mi mirada hacia el frente del autobús, pude ver a la mujer “rubia falsa desteñida” que se apresuraba hasta su asiento. Mirando en mi dirección y con una mirada fulminante, ella se deslizo en su línea de asientos para esperar nuestra partida.
Sin prestar más atención a la chica desteñida, como me gustaba llamarla, devolví la mirada hasta mi móvil. Mirando que tenía muy poca batería, fruncí mis labios en señal de disgusto. No podía llamar a Megan, pues si lo hacía, corría el riesgo de que mi móvil muriera por falta de electricidad. Entrando a la aplicación de mensajes, me apresure a escribir un texto rápido a mi mejor amiga.
Hola Meg, estoy en camino a San Antonio. Pero necesito tu ayuda, no tengo ni la mínima idea de que le diré a Tyler cuando este ahí. SOS!!! .Te llamo en cuanto llegue al hotel, me estoy quedando sin batería. Besos _____
Tras enviar el texto, cerré todas las aplicaciones que tenía abiertas, además de cambiar el brillo de mí móvil reduciéndolo al mínimo para que así ahorrara un poco de batería y lograra sobrevivir a las siguientes horas que aún nos quedaban por recorrer.
Me gire hacia el asiento junto a mí, en donde había dejado mi bolso de mano, y al instante me sobresalte al darme cuenta de la presencia de la pequeña niña pelirroja que viajaba en nuestro autobús. Su mirada estaba dirigida hacia el piso, un pequeño fleco cubría su frente y algunos mechones se escapaban de su coleta. Su piel era pálida y llena de pecas, además de ser una niña delgada y bajita y sus manos revolviéndose juguetonamente en su regazo. Ella era como un pequeño e inocente ángel. Un ángel asustadizo que no dudaba en huir si se sentía amenazado.
Por un momento contuve el aliento temiendo que si hacia un movimiento brusco la pequeña niña saldría corriendo del sitio en donde estaba, no estaba segura de las razones por las que la pequeña tendría que huir de mí, pero no quería arriesgarme a que lo hiciera.
La niña elevo la mirada, dejándome ver sus brillantes ojos verdes llenos de encanto. Me incline un poco hacia ella hasta quedar frente a frente con la pequeña.
—Hola— pronuncie las palabras en voz baja temiendo que si hablaba más alto la niña se sentiría amenazada y se alejaría de aquí. Ella sonrió.
—Hola —pronuncio la niña aún más bajo que yo. De inmediato sonreí. Ya era un avance.
—Me llamo _____. — extendí mi mano en forma de saludo. La niña no se movió. Espere en silencio la respuesta de la pequeña. Pero nunca llego. Solo se mantenía en total silencio.— ¿Cuál es tu nombre? —pregunte finalmente.
—Grace —contesto finalmente la niña con un poco de vacilación. Definitivamente algo estaba mal con esta niña. Ignorando cualquier señal de alerta Sonreí.
—Mucho gusto Grace —extendí mi mano de nuevo en forma de saludo. La niña miro mi mano y después la tomo respondiendo a mi saludo.
—el gusto es mío Señorita _____— contesto de manera casi mecánica, como si hubiese repasado esas mismas líneas un millón de veces y ahora no fueran más que simples palabras sin ningún significado.
—Puedes llamarme solo _____ —Reafirme dándole una cálida sonrisa a la pequeña. Pero ella la ignoro y de inmediato comenzó a negar.
—mi madre dice que a las personas mayores se les trata con respeto y se les llama señor, señora o señorita— la niña se encogió de hombros alejando la mirada de mi rostro y llevándola al piso. De inmediato fruncí el ceño.
—¿en verdad? —pregunte curiosa por el tipo de educación tan estricto que le daban a esta pequeña. Ella asintió—
—si señorita—la niña se encogió de hombros de nuevo.
—y entonces ¿a quienes si puedes llamar por su nombre? —pregunte curiosa. La niña elevo la mirada hasta mis ojos.
—solo a mis amigos —contesto en un susurro. Al instante sonreí ante la idea que llego a mi mente.
—¿en verdad? —pregunte con una sonrisa. Ella asintió.
—si
—entonces, ¿quieres ser mi amiga? —la niña de inmediato elevo la mirada, la cual se ilumino al instante.
—por supuesto señorita _____!— pronuncio la niña con entusiasmo. En su boca apareció una sonrisa y me sentí muy feliz por verla sonreír.
—un momento, ahora soy tu amiga, así que deja de llamarme “señorita _____” y solo dime _____. —la niña asintió frenéticamente y sonrió.
Grace miro el asiento junto a mí de manera interrogante y de inmediato me di cuenta de que estaba esperando la aprobación para tomar asiento junto a mí. Sin detenerme a pensarlo, tome mi bolso retirándolo del asiento
—porque no tomas asiento Grace— Grace al instante asintió y se apresuró a tomar asiento junto a mí, poniendo mi móvil en mi bolso, lo cerré y lo puse en el piso debajo de mi asiento— y cuántos años tienes? — Pregunte curiosa, pues según mi criterio, podía decir que ella tendría entre seis y siete años, pero quería la confirmación de la pequeña.
—Tengo seis —dijo la pequeña con entusiasmo. Al instante sonreí, pues esta niña sentada junto a mí no se parecía en nada a la pequeña niña que había encontrado junto a mi fila de asientos hace algunos minutos. Y realmente prefería a la Grace de ahora que a la de hace algunos minutos. Pues la otra niña asustadiza era un tanto tétrica, y ni hablar de la manera tan mecánica en la que a veces había hablado.
Una ola de escalofríos atravesó mi cuerpo al recordar a la pequeña hablando de esa manera. Definitivamente eso no podía ser normal.
—¿cuantos tienes tú? —pregunto la pequeña pelirroja a mi lado. Bastante sorprendida, la mire ruborizándome por la inesperada pregunta.
—Yo, tengo diecinueve —la boca de la niña se abrió con sorpresa. Lo cual no me sorprendió pues, según mi madre había llegado a contar, durante mi infancia yo había creído que al llegar a los veinte años las personas morían, pues para mi esa había sido la mayor edad que había llegado a mi mente en ese tiempo—
—Es mucho —aseguro la pequeña. Fruncí el ceño en un gesto gracioso—
—No realmente —asegure. La pequeña sonrió
Incluso antes de que la niña pudiera decir algo, una multitud de personas atravesó la puerta del autobús, cada una atravesando el pasillo y dirigiéndose a su asiento.
La mujer Pelirroja atravesó la puerta del autobús mientras registraba el interior. Al instante en el que vio a su pequeña hija sentada junto a mí, su frente se arrugo con claro desagrado a que su pequeña estuviera en mi compañía.
—¡Grace! —dijo con voz firme. La pequeña niña me miro un poco triste.
—Lo siento, tengo que irme— asentí. La niña se reincorporo del asiento y atravesó el pasillo hasta la línea de asientos en donde se encontraba su madre. Definitivamente algo iba mal con esa niña. O quizás no fuera la niña, si no la madre.
D.A. Torrez.
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