All Too Well (Harry Styles)

All Too Well

"Porque aquí estamos una vez más cuando te amé demasiado.

De vuelta a cuando perdiste la única cosa real que has conocido.

Fue raro, yo estuve ahí, lo recuerdo todo muy bien..."

---> Canción para escuchar con el capítulo 

(Charlize)

Capítulo 1

     El bus detuvo su andar cuando llegamos a la terminal; había luna llena, hacía calor y había muchas personas en la terminal entrando y saliendo con grandes equipajes, niños corriendo de la mano de sus padres, abuelos y abuelas caminando juntos a paso lento, policías, turistas  y parejas despidiéndose, allí estaba yo en medio de ese mar de gente esperando a que llegara por fin la hora que menos quería que llegara, el momento donde lo volvería a ver y eso era algo que no quería que pasara, sé que pronto llegaría y ese sería mi final, y así lo fue.

     Habían pasado ya  seis años desde nuestro último encuentro el cual había sido como en esta ocasión, estábamos viéndonos nuevamente por causa de una boda, una unión entre nuestras familias, pero para mí mala suerte esta vez sería mi hermano Robert y su hermana Gemma. En aquel tiempo, cuando éramos niños fueron nuestros bisabuelos los que decidieron unir sus vidas ya muy avanzadas y cansadas de la soledad, para ese entonces yo tenía un fugaz enamoramiento por Harry, él era un chico de 15 años, delgado y con risos suaves en su cabeza, los ojos verdes soñadores y alegres, siempre con una sonrisa en esos bellos labios que a simple vista eran suaves y cálidos, él era ese chico que toda chica a los 13 años veía como el príncipe azul de su cuento de hadas.

     La noche de la boda me había llenado de valor para hablarle y como en la ceremonia él llevaría los anillos y yo sería la niña de las flores, me encamine a su lado maravillada por lo hermoso que se veía con su esmoquin bien ajustado color negro y su cabello rebelde, estábamos caminando por el largo pasillo de la iglesia y sentía que ese momento era único, al estar a su lado podía sentir como todo en mi interior se volvía un huracán, mi estómago se sentía lleno de mariposas, mi respiración era entrecortada y mis mejillas color dorado estaban un poco rojas; pero, cuando llegamos al final del pasillo frente al Cura y nos tocaba separarnos me anime y le dije: “Hola…”  pero creo que fue más un susurro porque él ni se volteó a mirarme; repetí lo mismo luego de la ceremonia  pero cuando estaba a unos pasos de distancia de Harry él estaba bailando en el salón junto a Melissa mi prima y justo en el momento que lo vi estaba besando sus labios mientras bailaban, y fue allí cuando me di cuenta que los cuentos de hadas no existen y que los príncipes azules que llegan en sus caballos blancos con brillante armadura tampoco eran reales, desde ese momento no permití que mi corazón siguiera volando a gran velocidad cuando lo veía. Sin embargo, toda esa tortura siguió los años siguientes en la secundaria él estaba dos años más adelante que yo por lo que me era imposible no verlo hasta que se graduó y para ese momento en su vida habían estado muchas chicas, él era apodado “El Mujeriego Mentiroso y Sexy” que aunque todas las chicas sabían cómo era ninguna se escapaba a sus encantos, esa fue una de las razones por las que poco a poco lo empezaba a odiar y en cada cena familiar en la que estábamos cerca lo ignoraba y me iba con Gemma y Robert al patio o a jugar en la Wii, él nunca supo el porqué de mi actitud en su contra pero al ver mis reacciones él las imitaba dándome comentarios sarcásticos y momentos de vergüenza y rabia frente a la familia lo que hacía que comenzáramos una pelea monumental y luego eso terminaba con el regaño de los mayores presentes incluidos nuestros hermanos mayores, pero como dije todo eso mejoro cuando él se fue a Londres para estudiar Leyes y Sociología, yo termine la secundaria y luego me fui a Manchester a estudiar Diseño de modas, en mi juventud siempre me decían que tenía mucho estilo al vestirme  por lo que mi pasión se convirtió en hacer los mejores atuendos y ser la joven diseñadora más famosa del mundo, eso era lo que con años de estudio había logrado, ahora ya estaba graduada y era una de las diseñadoras más jóvenes y reconocidas de Inglaterra, pronto mis diseños llegarían al otro lado del mundo y esa era mi meta más reciente. Harry hace ya cuatro años o eso había oído en la cena de navidad del año pasado, se había convertido en el mejor abogado de todo Londres y ya había tenido la oportunidad de defender a famosos y empresarios de gran renombre, y eso era lo que me hacía sorprenderme al verlo vestido tan casual y para mi disgusto lucia algo que lo hacía ver como un sexy chico malo.

     Harry seguía frente a mí al igual que yo, no nos saludamos, no sonreímos solo me encamine en su dirección y al estar a su lado él hizo su camino hacia la salida de la terminal pasando por la atestada sala, él no fue caballero lo que llevo a que yo misma llevara mi pesado equipaje, como había dicho, era de noche y hacía mucho calor yo solo vestía unos viejos jeans de mezclilla una ligera blusa diseñada por mi mejor amigo Franco, unos converse color rosa pastel que combinaban con la blusa y una bufanda ya que el clima de Londres  por lo general es frio, excepto esa noche que el calor podría hacerte sudar.

      El camino hasta su Audi R8 fue muy silencioso, mí mirada solo estaba fija al frente y no me importaba que él estuviera mirándome de reojo, y sabía que lo hacía. No soportaba su actitud arrogante al caminar y la verdad no lo soportaba a él. Al llegar a su auto quito la alarma y luego abrió el porta equipaje donde otra vez me toco a mi sola llevarlo hasta allá y subirlo, se subió en el lado del conductor y yo luego de cerrar el maletero me encamine a sentarme en el puesto del copiloto.

     No puedo decir que el viaje fue una tortura porque fue mucho peor que eso, él estaba muy concentrado en el camino y yo busque la mejor forma de distraerme, en mi bolso de mano estaba mi IPod por lo que lo busque y empecé a escuchar música, la primera que sonó aleatoriamente fue One Love de Justin Bieber, una de mis favoritas no lo puedo negar porque en mi juventud estaba loca por Justin y su música que era viral en todo el mundo. La música empezó a sonar y yo movía mis dedos al compás de la música y así deje que mi mirada se perdiera en lo que había más allá del cristal que nos separaba al exterior y a mí. Las calles de Londres, sus edificios llenos de historia, los buses rojos, los taxis negros y de modelo anticuados y las cabinas de teléfono rojas, antiguas pero bien conservadas eran lo que identificaban a Londres, también había edificios nuevos y modernos, esa era la mezcla perfecta, estaba tan concentrada en lo que había en el exterior que no me importo ir en el mismo auto que Harry respirando su mismo aire y mucho menos el olor de su exquisito perfume varonil y a la vez dulce.

     El viaje solo duró una hora desde la terminal hasta su casa que es donde me quedaría por esa noche ya que mañana iría en busca de un hotel que estuviera cerca de la zona la cual no conocía y era muy exclusiva por lo que podía ver a través de la ventana del Audi. El lugar era lujoso, las calles despejadas, jardines colosales, personas caminando con perros llevados por sus correas, una pareja de paseo con su bebe en su carriola, y las luces que llegaban brillantes hasta el final de la calle sin ninguna interrupción, cada una de las “casas” porque eso no eran casas, eran literalmente MANSIONES, si mansiones con todas la letras, estaban cercadas en casi toda su totalidad, algunas solo lo estaban en la parte de los laterales y dejaban una bella vista de sus hermosos jardines los que al pasar a su lado no podía saber si el primero que vi era mejor que el que le seguía. Entre asombro y admiración parqueamos frente a una gran y cercada mansión de ladrillo y enredaderas acomodadas de forma que no la hacían parecer abandonada sino más bien antigua y llamativa, su fachada era sobria igual que su dueño, como dicen por allí “Las cosas siempre son iguales que sus dueños” y la arrogancia  y vanidad estaba presente en todo el lugar y mucho más cuando la puerta del garaje se abrió, no como normalmente se haría sino de la forma más peculiar posible y con un comando de voz lo que solo le daría acceso a él para abrirla… WOW eso era quedarse corto.

     Al ingresar lentamente al terreno de la MANSION y digo terreno porque si media más o menos lo que lo hacía un estadio de futbol profesional en todo el medio del camino había una fuente que era el centro de atención y el distribuidor de automóviles, junto a la fuente estaba el jardín más original alguna vez creado, eso me daba la idea de que Gemma y Anne la madre de Harry, tuvieron algo que ver con lo que fue el arreglo del jardín de su “casa” hacia el jardín de la derecha había una especie de plaza con estatuas y caminos de piedras que se veían oscuras y podría decirse que era casi un lugar sacado de un cuento. Al ser de noche no se distinguía mucho lo que había en el jardín izquierdo por lo que me había quedado con la intriga, del asombro anterior ya me había olvidado de mi IPod por lo que lo había guardado y solo me dignaba a observar con asombro, eso era un poco tonto de mi parte, pero por otro lado era mi sueño tener un lugar así para mi sola, sería la cuna de mi inspiración para nuevos diseños  y alocadas combinaciones, un lugar así inspira hasta a el artista más vacío y sin inspiración del mundo. El tiempo pasaba lentamente mientras yo evaluaba lo que mis ojos en la oscuridad permitían ver y estaba tan ensimismada que no me había dado cuenta que ya Harry había detenido el auto frente a la puerta de entrada la cual era grande como lo parecía ser todo a mi alrededor, todo era grande y costoso.

     Él no hizo ningún ademan de dirigirme la palabra eso no me molesto al principio del viaje, pero ahora estando en su “hogar” esperaba que aunque fuera me dijera un “esta es mi casa” o “ que ni se te ocurra romper algo palito rosa” ese último era su apodo favorito, no pregunten porqué, ese silencio se me hacía del más molesto cuando ya los dos estábamos fuera del Audi y nos mirábamos el uno al otro por encima del auto de forma desafiante, ya me estaba hartando hasta que él decidió por fin articular una palabra  desde que nos habíamos encontrado en la terminal hace ya hora y media atrás, nada me habría preparado para lo que me diría a continuación.

-Charlize...  Es bueno verte luego de tantos años, bienvenida a Londres, Gemma y Robert estarán contentos con que vinieras a su boda.

-Emmm, hola Harry, si lo sé mucho tiempo, emm mira sé que tú no eres así de amable así que suelta de una buena vez quien de los dos te amenazo con tratarme bien ¿eh Styles?

Mi asombro no podía ser más hasta que vi como sonreía con picardía de medio lado, recuerdo haber visto esa mirada un par de veces cuando lo habían cachado sus novias en la preparatoria junto a otras chicas, y en ese momento de la sonrisa era cuando las mandaba a volar.

-Nadie me obligo Pali… Charlize lo hago por ser amable, así que será mejor que entremos de una vez que tengo hambre porque no cene ya que te fui a recoger a la terminal, por cierto- dijo haciendo una pausa para respirar profundo- Gemma y Robert llegan mañana temprano y se quedaran aquí igual que tú por lo que será mejor que nos comportemos como adultos y dejemos las viejas riñas de cuando éramos niños.

-Ok…-dije sin aire en los pulmones, luego de eso respire profundo y volví a hablar- emm estuviste a punto de comenzar la tercera guerra mundial ¡Harold! Pero está bien, puedo soportarte y tratarte como a todos por el bien de mi hermano y mi futura cuñada a ellos los amo por lo que el motivo de que me la lleve bien contigo es solo por esos dos- hice una pausa y luego agregue para darle en la herida- aunque créeme, no soporto verte a ti y mucho menos a tu gran EGO por lo que creo que es mejor que ni nos hablemos pequeño ¿sí?

     Con esa respuesta de mi parte y una mirada atónita de la suya busque mi equipaje, lo baje del auto y me encamine a las escaleras de la entrada a su gran casa, creo que esta noche será la más larga de mi vida.

     Llegue a la puerta de que media dos metros de altura y cuatro de ancho lo que la hacía de esas puertas dobles estilo castillo. Al ver que Harry no estaba a mi lado abriendo la puerta me di la vuelta para encontrarme con un Harold totalmente enojado y sorprendido a la vez… esto sería divertido y lo sabía, aunque no dejaría que con su nueva actitud cambiara la mía hacia él. Eso no estaba permitido para mi y mucho menos para mi corazón.

      Por favor comenten solo de esa forma sabré que les gusta si no, no la sigo   vamos comenten.

Capítulo 2

(Harry)

----> Para escuchar con el capítulo :3 por qué? porque no se jajaja disfrútenlo 

      Cuando Gemma y Robert me dijeron que Charlize venia para su boda yo todavía seguía sin poder créelo, aunque era algo más que predecible siendo ella la hermana menor de Robert era obvio que tenía que venir a la boda, no podía soportar la idea de verla a ella aquí otra vez, teníamos ya muchos años sin vernos por suerte, ella tenía cierto odio hacia mí y yo no sabía por qué, siempre fui amable con ella cuando tuve la oportunidad pero desde la boda de nuestros abuelos ella cambio mucho, dejó de sonreírme y comenzó a ignorarme. Yo no estaba listo y mucho menos para tenerla cerca otra vez, ella es muy linda para su propio bien por lo que no quería volver a caer en lo que sentí por ella cuando estaba en tercero de secundaria y ella estaba en primero, era muy joven y hermosa; su cabello castaño, su piel bronceada, sus ojos cafés, su personalidad tan tímida y sonriente… todo de ella es belleza,  su habilidad para vestir bien con cosas que a la mayoría de las chicas ni por asomo buscarían usar y su gran ojo para detallar las cosas la que la hacían especial y única.

    Luego de que ella me dijera esas palabras que lograron sacarme de mi zona de confort camine en su dirección tratando de lucir enojado e indiferente al mismo tiempo, no permitiría que ella me tratara así no podía hacerlo, estaba en mi casa y aquí tenía que amoldarse a mis reglas aunque no quisiera.

     La mire por un tiempo más con enojo y admiración por lo bella que se veía con ese simple Jean y blusa, esta noche estaría solo con ella como lo dije gracias a que Gemma siempre tan oportuna llegaría mañana para la hora del almuerzo porque tenía que arreglar unas cosas en casa y organizar a todos allá para que vinieran a Londres para la boda y además que Robert salía de vacaciones desde mañana por lo que la fecha de la boda era perfecta para ambos porque mi hermana estaba de vacaciones y él también haciendo de su boda y luna de miel la mejor y sin interrupciones o eso era lo que ella me había dicho, bueno ahora tendría a la menor de los Monroe por casi 24 horas y estaba más linda que nunca eso no lo podía negar.

    La alcance y abrí la puerta principal porque hoy María mi ama de llaves tenía su día libre por lo que no había quien nos abriera la puerta. Cuando entre sin preocuparme porque ella lo hiciera encendiendo las luces a medida que entraba ella soltó un silbido que en parte me hizo reír  internamente y en parte hizo que mi ego creciera un poco más porque notaba que ella admiraba lo que tenía. Sin embargo, en el momento que encendí la luz de la sala la puerta principal se cerró lo que me indico que ella se había cansado de esperar a que yo lo hiciera rindiéndose así y entrando por completo a mi hogar de soltero.

     Las ruedas de su equipaje se escuchaba en el piso y sus pasos eran ahogados a medida de que ella rodaba su pesada maleta, la que a decir verdad no tenía ganas de ayudarla a cargar, era como mi pequeña venganza por su actitud. Luego de que todas las luces del piso inferior de mi casa estaban encendidas la deje en la sala y subí las escaleras al segundo piso donde estaban las habitaciones y encendí el resto de ellas haciendo que todo quedara en la luz y no en las tinieblas.

Para el momento que baje ella estaba sentada en su equipaje con su celular en las manos riéndose de algo que había leído y tecleando en la pantalla como respuesta, acción que me dio algo de curiosidad y celos al saber que esa sonrisa no era por mí y ese era un sentimiento que no quería tener por ella.

-Charlize… emmm- me aclaré la garganta para que ella me prestara atención- ven para mostrarte tu habitación.

     Ella solo me miro de reojo, bloqueo la pantalla de su celular y luego se puso de pie tomando su equipaje y así junto a ella salimos en busca de su habitación la cual afortunadamente estaba muy lejos de la mía. Charlize seguía mis pasos tras de mí en silencio, al llegar al final del pasillo doblamos a la derecha y allí justo al final junto a un gran ventanal que daba al exterior de la casa con una vista hermosa al jardín y la fuente, nos detuvimos frente a la puerta de su habitación y luego saque de mi bolsillo la llave que abría la puerta. Se puede decir que mi casa es muy grande y por ello tiene muchas habitaciones 11 en total y 10 y medio baños, me gustaba así porque cuando mi familia y amigos me visitaban todos podían quedarse conmigo sin la necesidad de ir a un hotel. Charlize y yo entramos a su habitación luego de que abriera la puerta y prendiera las luces ella dejo su maleta junto a la puerta y observo con asombro y admiración la especiosa habitación verificando que no fuera un sueño que ese lugar fuera solo para ella, me fije en su mirada y había algo oculto en ella como si estuviera pensando en algo más aparte de la suavidad del cubre cama de seda mullida.

-Buenas noche… espero que duermas bien aquí…- rompí el silencio de su meditación y ella volteo casi asustada en mi dirección y allí seguí hablándole-  la puerta de la derecha es el baño y dentro de él a una puerta junto al armario es una que conecta con la habitación principal la cual es mía por lo que se te agradece no molestar con tus ronquidos de monstruo, duerme bien corazón nos vemos mañana en el desayuno.

     Y de esa forma sin dejarla decir más nada me despedí y salí de su habitación cerrando la puerta y caminando a mi habitación. Esta sería una noche muy larga.