Conectarse
Últimos temas
miembros del staff
Beta readers
|
|
|
|
Equipo de Baneo
|
|
Equipo de Ayuda
|
|
Equipo de Limpieza
|
|
|
|
Equipo de Eventos
|
|
|
Equipo de Tutoriales
|
|
Equipo de Diseño
|
|
créditos.
Skin hecho por Hardrock de Captain Knows Best. Personalización del skin por Insxne.
Gráficos por y codes hechos por Kaffei e Insxne.
Gráficos por y codes hechos por Kaffei e Insxne.
» Endless «
O W N :: Archivos :: Novelas Abandonadas
Página 1 de 1. • Comparte
» Endless «
Prólogo
Un imperio construido por medio de mentiras y engaños.
Una imagen que tiende a serlo todo.
Un chico que llega a romper sus esquemas, y que destruye su mundo, para ir mostrando uno que tiende a ser mucho más apegado a la realidad.
Nadie dijo que las cosas serían fáciles para Scarlett, nadie mencionó que el llevar el apellido Leveausse sería tan pesado para sus frágiles hombros.
Y lo más confuso de todo… Ella jamás imaginó que su enemigo, llegaría a ser una de las pocas personas que tendrían parte de su corazón.
Bien... Comenzaré presentándome. ¿? Mi seudónimo para escribir es Bellamy Girl. Hace un tiempo publiqué un par de novelas por aquí y algunas fueron bastante conocidas, así que me animé a volver, aunque con otro nombre y otras cuentas.
Les dejo mi página en Wattpad, donde estoy siendo un poco más activa desde esta semana.
Cuento con tres escritos, los cuales estaré publicando tanto allá, como aquí.
> Endless.
> Perfectamente contrarios.
> Perfect for you.
¡Realmente espero que les gusten!
Besos & Abrazos.
Bellamy Girl
BellamyGirl
[ONE]
| Queda prohibido cualquier tipo de copia o adaptación. Todos los derechos reservados. |
[ONE]
— Scarlett... Apresúrate. —
Las palabras en un evidente tono serio de su hermano mayor, Derek, no dejaban de resonar en la cabeza de la chica de cabello castaño. Se había apresurado en dejar la clase en la cual se encontraba, y sin tomar mucha atención a los reclamos del maestro de aquella asignatura, corrió por el pasillo en dirección hacia su auto.
Rebuscó en su bolso las llaves del deportivo rojo, mientras que el único sonido audible, era el resonar de sus tacones.
Algo malo debía estar ocurriendo. Derek jamás le había llamado en medio de una clase, aquello nunca ocurría, aunque ahora tan solo había mencionado aquellas palabras finales tras anunciarles que había un problema y debía ir rápidamente a casa.
Al llegar al estacionamiento, ignoró saludos o palabras de cualquier persona que le hablase, y se resignó a subir con rapidez a su vehículo, introduciendo la llave y encendiendo este.
Condujo a casi cien kilómetros por hora, y en cuestión de minutos estuvo en la puerta de la gran mansión en la cual vivían. Las puertas, extrañamente, estaban abiertas, lo cual le facilitó el trabajo. Apresuró la velocidad hasta llegar a la casa, y ahí, salió del auto para dirigirse al interior de su casa.
Por alguna razón, había camiones de mudanza, junto con autos que evidentemente eran lujosos, y no eran de su familia. Al entrar en el lugar, observó a su hermano mayor, hablando con cierto nerviosismo hacia un par de personas que se veían molestas.
— Derek... ¿Qué sucede?—
Su voz alertó a todos de su presencia en el lugar, y su hermano se acercó a ella, tomando su brazo con suavidad.
— No puedo decir mucho... Necesito que tomes todo lo que puedas, y se lo vayas dando a las personas del camión. Lleva a un par de hombres para que te ayuden. Papá está involucrado en una estafa, Scarlett... Vienen a quitarnos la casa, y todo lo que hay en ella. —
Era mucho para asimilar. La castaña parpadeó repetidas veces, sintiendo el color abandonar sus mejillas, y dejando su mirada atenta en su hermano, habló con algo de dificultad.
— ¿Dónde está papá?—
Supuestamente, su padre estaría volviendo de uno de los viajes de negocios el fin de semana, aunque ante todo lo ocurrido, dudaba de ello.
— El... Desapareció. El dinero que había en la caja fuerte, también. Todo lo de papá no está, Scarlett... Nos dejó.—
Scarlett negó repetidas veces, y se percató de la presencia de uno de los hombres con traje costoso cerca de ellos.
— Señorita Leveausse, la policía hará presencia en un par de horas para verificar que las cosas que continúan a nombre de su padre estén aquí. Para evitar la prensa o que esto llegue a la pantalla en el noticiero, les recomendamos que salgan de aquí con sus cosas. Ustedes no están involucrados, pero lo mejor es que se mantengan lejos de la investigación. —
Sin poder pronunciar palabra alguna, Scarlett avanzó en dirección a la escalera, subiendo esta de forma lenta y torpe, hasta llegar a la segunda planta, lugar en el cual se encontraba su habitación.
No podía creer que aquello estuviese pasando, era prácticamente imposible, pero ahí estaba todo. Al llegar a su espacio personal, observó a Marie y Ellen, las chicas que se encargaban de la limpieza, tener dispuestas en el piso del lugar diferentes maletas, que iban llenando con las prendas de Scarlett.
— Señorita...—
Mencionó Marie con la voz algo quebrada. Ellen, era mucho mayor que ella, y les conocía desde hace ya años, y quizás por aquella razón, la mujer se aproximó a ella para rodearla con sus brazos.
— Estamos terminando de guardar tus cosas, Scarlett... Las de Dylan ya están en el camión, al igual que las de su hermano Derek. Realmente lamento todo lo que está ocurriendo. Si hay alguna otra cosa que necesita de la casa, es mejor que se apresure, la policía está por llegar. —
Scarlett aún no finalizaba de asimilar todas las cosas, aunque sacudiendo su cabeza ligeramente, trató de salir de su estado de shock, para así dirigirse a buscar una maleta vacía, y comenzar a dejar dentro de esta alguna que otra cosa de valor para ella, como las joyas o dinero guardado. Se detuvo momentáneamente, y frunció el ceño, recordando las palabras de su hermano.
El mencionó que la caja fuerte estaba vacía, aunque no habló sobre el lugar en donde su padre había escondido algunos papeles importantes durante su niñez.
Casi corriendo por el lugar, volvió a subir las escaleras, y ahí, avanzó rápidamente hacia la habitación de su padre, pasando luego a su oficina, y rebuscando en el piso, alguna especie de abertura.
Al encontrarla, abrió esta, y escribiendo la contraseña, logró dar con el contenido.
Tomando la mayor parte de los papeles y escritos que ahí estaban, se dispuso a levantarse, aunque se detuvo al ver un pequeño brazalete de oro, que ella había visto antes.
Era de su madre.
Cada recuerdo llegó a su mente. Si bien, Alexia había fallecido cuando Scarlett tenía dieciséis años, cada cosa quedaba en su cabeza. Ella siempre fue una mujer sencilla, hermosa y alguien filantrópica en exceso.
Sus hijos, habían heredado sus ojos, siendo Scarlett, Derek y Dylan poseedores de unos orbes en tono celeste claro.
Los ojos de la chica se cristalizaron, y tomó el brazalete, dejándolo guardado en uno de los bolsillos de su chaqueta, para así dirigirse al escritorio de su padre, y sorpresivamente encontrándose con su computadora portátil ahí.
La tomó al igual, y volvió a su habitación para guardar las cosas en la maleta, y notando que entre Marie y Ellen, habían empacado absolutamente todas sus cosas.
— Gracias...—
Pronunció ella dándoles una pequeña sonrisa, y luego, tras abrazarlas a ambas, bajó en busca de su hermano mayor, quien lucía más nervioso que nunca.
Los hombres ya no estaban ahí, pero Derek yacía sentado en el sofá, con su cabeza entre sus manos, en una notoria señal de frustración.
Sin poder evitarlo, Scarlett se aproximó hacia él, tomando asiento a su lado, y rodeándole con sus brazos de forma delicada.
— Todo estará bien, Derek... Yo lo sé. —
Pronunció sin poder creer ella misma sus palabras. Quizás aún no les tomaba el peso, pero sabía que la situación era complicada.
— Princesa... Eso es lo que me preocupa. Antes teníamos cuentas bancarias a nuestros nombres, y ahora, todas están canceladas. No tenemos una casa, Scarlett... Todo ha sido embargado debido a la estafa. Lo único que tenemos, son los autos, el tuyo, y el mío, nada más que eso... ¿Qué haremos? ¿Dónde vamos a vivir? ¿Qué le diremos a Dylan?—
Su tono de voz cada vez se tornaba más desesperado, y con ello, Scarlett supo que el problema no era para nada simple.
Había algo que Scarlett ignoraba y aún no tomaba plena conciencia. ¿Qué ocurriría con Dylan? ¿Cómo estaría asimilando el todo lo ocurrido?
Tras depositar un suave beso en el hombro de su hermano y volver a asegurar que todo estaría bien, se levantó para ir en busca del pequeño.
Revisó cada habitación y cada lugar de la casa, sin encontrar rastros del pequeño. Estaba preocupándole aquello, aunque al sentir un par de risas, se tranquilizó, saliendo al jardín, y encontrando a Dylan jugueteando con el cachorro que les había regalado su padre hace un par de semanas, al cual el menor le había colocado "Tom".
Avanzó hacia él, y sin importarle su ropa, o algo parecido, se sentó con él, observándole aún en silencio.
— ¿Por qué nos iremos, Scar? —
Preguntó este con el tono de voz infantil que poseía, y por ello, su corazón se apretó dentro de su pecho. Ella no podía decirle todo lo que había ocurrido, apenas era un niño.
— Solo... Vamos a ir a otra casa a vivir, Dylan. No será tan grande como esta, para que así Tom no se pierda. Pero todo va a estar bien, verás cómo vamos a ir al parque todas las tardes luego de tus clases.—
Inquirió ella sonriendo y dejando que su diestra fuese a sus rubios cabellos, desordenando estos.
— ¡¿Al parque?! ¿Cómo los otros niños de mi clase? ¡Te quiero, Scarlett! ¡Yo siempre quise ir al parque!—
Su emoción era notoria, y en parte, Scar comprendía aquello. Su padre evitaba que Dylan saliese del entorno de su jardín de niños, o de la casa. No le dejaba interactuar con pequeños de su edad, y era algo en lo que nadie nunca se interpuso, aunque... Dylan lo necesitaba, y Scarlett lo sabía.
Todo lo que ocurrió luego, fue quizás demasiado rápido para sus ojos. Derek, anteponiéndose ante todo siempre, había optado por vender su auto, al igual que el de su hermana. Ella no había emitido reclamo alguno, ya que sabía cómo estaba la situación en aquel momento, pero era algo que le había dolido. ¿Qué les diría ahora a sus compañeras? ¿Qué dirían los de la universidad si le viesen entrar caminando?
BellamyGirl
Re: » Endless «
[ Dije que dejaría mi página en wattpad, pero lo olvidé ¿? Y acabo de darme cuenta, así que...
¡Aquí está!
PERFECTAMENTE CONTRARIOS: https://www.wattpad.com/myworks/38835643-perfectamente-contrarios
ENDLESS: https://www.wattpad.com/myworks/39359420-endless
PERFECT FOR YOU (Harry Styles) : https://www.wattpad.com/myworks/55049994-perfect-for-you
* * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * *
Si antes había reaccionado tan bien, ahora Scarlett estaba a punto de sufrir un colapso.
Derek se las había ingeniado para conseguir una casa por el precio de ambos autos, aunque no era lo que Scarlett imaginó alguna vez. Una casa de dos plantas, con una falta evidente de una mano de pintura, y con un jardín algo descuidado.
— Fue todo lo que pude conseguir... Está cerca de tu universidad, del jardín de Dylan, y a la vez del lugar donde tendré que trabajar. —
¿Cerca? ¿Realmente el podía llamarle cerca a eso? Estaba a unos cuarenta minutos caminando, y ella consideraba aquella opción solo por el hecho que ahora ya no tenía auto, por lo cual, tendría que caminar.
— Necesitaré toda tu ayuda en esto, Scarlett... Tenemos que salir adelante, y sabes que eso será difícil. Compré lo necesario para arreglar la casa, aunque dudo quieras comenzar a pintar hoy, o esta semana. Conseguí un acuerdo para que algunos muebles de la otra casa se viniesen con nosotros... Es bastante amplio, estoy seguro que luego de los arreglos, será un poco más acogedora. Ha estado sin dueños por mucho tiempo, así que es necesaria toda la ayuda posible. —
La casa no era ni la mitad de donde vivían antes, pero comprendía que su hermano intentaba guardar la mayor cantidad de dinero posible. Asintió a sus palabras, tratando de ocultar su disgusto, y optó por dirigirse al interior del lugar.
El interior era amplio, era cierto, y sabía que en la parte superior, habrían tres habitaciones, dos grandes y una mediana. Se notaba la capa de polvo existente en el piso y ventanas, y ello fue evidente cuando uno de sus dedos se topó en la superficie de madera sobre la chimenea, notandose como el polvo se pegaba a su dedo, y dejaba un camino limpio sobre el lugar a medida que deslizaba este.
— Vamos, princesa... ¿Sabes? Sería mucho mejor si te llevas a Dylan al parque. Ambos necesitan distraerse un poco, y alejarse de todos los cambios de hoy. Llamaré a algunos chicos de mi universidad para que me ayuden a arreglar este lugar, así que puedes estar tranquila.—
Su hermano siempre había tenido una excelente relación con sus compañeros. Derek era humilde, y querido por todos, tal cual solía ser su madre, en cambio, ella se había vuelto algo superficial, y aquello la mortificaba en aquel segundo.
— Vale... Saldré con el un rato. —
Musitó de forma suave, removiendose para ir en busca del menor, y tomar su pequeña mano, dirigiendole hacia fuera del lugar.
Dylan tan solo observaba feliz a sus hermanos, dando ligeros brincos al caminar al lado de Scarlett, quien iba aún sumida en sus pensamientos. Con suavidad, Scarlett se detuvo ante una de las esquinas, esperando a que un vehículo pasara la calle, aunque su sorpresa fue notoria cuando este no se continuó su camino, si no que se detuvo.
Sin poder evitarlo, la castaña fijó su vista en los vidrios polarizados, y sintió su pecho contraerse cuando el rostro de Jethro Bersseau se fue distinguiendo cuando el vidrio comenzó a bajar.
— Miren nada más... ¿Donde quedó tu deportivo? ¿O ahora ayudas al medio ambiente caminando? —
Expresó el con plena diversión en su rostro, negando ligeramente a la vez que bajaba la vista y notaba a un pequeño. Su semblante burlesco cambió radicalmente, y se volvió un poco más serio, aunque una pequeña sonrisa fue dedicada hacia Dylan, quien movía sus largas pestañas estando curioso.
— Estamos caminando. ¿Tienes algún inconveniente con ello?—
Habló Scarlett con algo de irritación, algo que nunca había sido visto en ella. Jethro estudió su figura, y supo que algo andaba mal con la Barbie a quien adoraba molestar. La chica se veía algo desanimada, y podría apostar a que estaba pronta a llorar. Su ropa no estaba impecable como siempre, si no que inclusive, estaba sin un bolso o sin un teléfono celular en sus manos, algo que para el ya era un indicio de algo.
— ¿Estás bien?—
Preguntó y maldijo luego por haber hecho aquella pregunta. El no tenía porqué interesarse si estaba bien o mal, el solo la molestaba y aquel era su única motivación.
— Perfectamente, así que ahora, si no te molesta, continuaremos con nuestro camino. Piérdete, Bersseau.—
Habló intentando que sus últimas palabras saliesen en un tono adorable, aunque aquello no salió del todo bien. Scarlett tiró ligeramente la mano de Dylan, y buscó pasar tras el auto de Jethro, que al ver que ambos continuaron caminando, puso en marcha su vehículo nuevamente.
Estaba extrañado, algo consternado con el hecho de ver a la chica Leveausse en aquellos lugares. Si bien sabía, vivía en la zona rica del lugar, y no en uno de los lugares cercanos a la universidad, que solían ser algo "modestos". Sacando todo pensamiento de Scarlett de su cabeza, se dirigió hacia casa de una de las chicas del bar con las que había entrablado una amistad con privilegios, y tras una jornada de clases, iba con la idea fija de desestresarse.
Scarlett había avanzando ya cuatro calles, y Dylan era el más feliz de ello, aunque ella no. Odiaba caminar tanto con tacones y sobretodo en una zona donde el piso era irregular. Al llegar al parque, el menor soltó su mano rápidamente, y corrió con euforia hasta otros niños que se mantenian jugueteando en diferentes zonas de los juegos.
Scarlett, avanzó casi resignada hacia una de las bancas, y casi llegando a esta, su pie derecho se dobló producto del alto tacón de su sandalia y a la irregularidad en la que se encontraba la tierra.
Soltando un sollozo bajo ante el dolor, caminó como pudo a la banca, y lo primero que hizo, fue quitarse ambas sandalias, notando como su tobillo derecho estaba algo enrojecido.
— ¡Bien! ¡Lo que me faltaba! —
Resopló con los ojos cristalizados, y cubriendo su rostro, aprovechó la soledad en la que estaba inmersa, para poder suspirar con cierto dolor. Los problemas de su familia le tenían casi al punto del desespero, y no sabía como lidiar con ello. ¿Que harían? Ella no podía vivir si no era como estaba antes. Era prácticamente un martirio el cambiar la vida de una persona que estaba en la cima de la pirámide, a la parte más baja.
Las horas pasaron con notable rapidéz, y ante ello, el frío se hacía cada vez más latente. Ya no había un gran número de personas en el parque, si no que todo lo contrario. Scarlett tensó sus labios al ver como su hermanito ahora se encontraba jugueteando solo, y se dispuso a levantarse, no sin antes hacer una mueca de dolor al pisar con su tobillo derecho.
— Maldición. —
Masculló y como puso, avanzaba en busca de Dylan, quien al verla, dejó lo que hacía para ir con ella.
—Scarlett, ¿Podemos ir por algo de comer? —
Inquirió el, algo que mató lentamente cada sentimiento en ella. Rebuscó en el bolsillo de su chaqueta, y agradeció mentalmente el hecho de tener veinte dólares dentro. Podría comprarle algo a su hermano, y eso le hacía sentir un poco mejor.
— Claro, Dy, iremos por algo para comer y lo llevaremos para comer con Derek. —
Instó ella.
Ya no existían lujos para ninguno, y debía adecuarse a todo lo que se les vendría.
Ambos concurrieron una pastelería que adoraba Dylan, y con suerte, pudieron comprar un pastel con el que el menor quedó conforme. Envolvieron este, y salieron, viendo como ya la tarde había caído. Si bien, el pie de Scarlett estaba herido, trataba de disimular lo más posible con su hermano, para que este no fuese a preocuparse.
Sabía como llegar, aunque para cuando lo hiciesen, estaría todo oscuro, y eso le preocupaba, aunque se resignó con fácilidad. ¿Que podrían robarle? ¿Sus sandalias? No traía consigo nada más de valor, así que no estaba demasiado interesada.
Llegó hasta la casa en la que vivirían a eso de las nueve y media de la noche. Derek, estaba con el alma en un hilo, aunque la sorpresa de Scarlett al ver el lugar fue casi incomparable.
El interior sucio y andrajoso que había visto antes de irse, no existía ahora. El lugar era amplio, y tenía alguna alfombras caras que habían tenido en la otra casa. Muebles y cortinas a corde, junto con el piso mucho más limpio de como había estado.
— Esto es... wow. —
Solo pudo articular de forma baja. Derek, notando su impresión, se irguió derecho, estando orgulloso.
— Si... Los chicos y yo hicimos un increíble trabajo.—
Articuló y tomando la mano de su hermana, instó a que dejara el pastel sobre la mesa, para avanzar con ella por la escalera, y así dirigirla a su habitación. Scarlett sabía que no sería como su antigua habitación, aunque el trabajo hecho por Derek la dejó boquiabierta.
Sin duda no se parecía a como había estado antes, todo había cambiado y para una mejor manera.
Lucía confortable, al punto en que Scarlett se sintió un poco mejor.
— Derek... Gracias. —
Musitó y rodeó los brazos del contrario en un cálido abrazo, que este correspondió casi enseguida.
— Quiero que todo este golpe sea lo más suave posible para ti y Dylan... Sé que será difícil, aunque lo lograremos, Scar. —
Inquirió el, a lo cual minutos luego abandonó la habitación. Scarlett se apresuró a ir hacia su armario, y abrir las amplias puertas, teniendo sus maletas cercas para así comenzar a acomodar cada prenda.
Como mínimo, tenia ahí unas once maletas, y todo debía de ordenarlo nuevamente, aunque tenía una idea que le ayudaría a poder ocupar poco espacio, y ganar algo de dinero.
Finalizó su trabajo a eso de las once, habiendo desempacado siete maletas, y las demás, las dejó arregladas, aunque en ellas se encontraban prendas que ya no volvería a utilizar. Tenía un plan para aquellas prendas, aunque esperaría para ponerlo en práctica.
Optó por tomar una ducha, y en esta, dejó que su pie herido reposara en agua caliente. Le dolía, como mil demonios, aunque no podía darle más preocupaciones a sus hermanos. Al salir de la ducha, se colocó un pijama sencillo, y bajó al primer piso, notando como sus hermanos se habían comido prácticamente todo el pastel.
Tomando un trozo de pastel, y disimulando su lesión, se alimentó de este, y prosiguió luego a darles la buenas noches a sus hermanos.
— ¿Me vas a leer un cuento, Derek? —
Preguntó el pequeño Dylan hacia el mayor, a lo cual este asintió.
— Claro, campeón. Los que quieras, y sabes que si tienes miedo, puedes dormir conmigo y ver caricaturas.—
Scarlett ladeó la sonrisa cuando fue subiendo la escalera. Derek tenía una paciencia de oro, y era injusto el que tomara el papel de padre ante ella y Dylan, aunque sabía que el más que nadie, los cuidaría con su vida.
La castaña se desconectó de absolutamente todo lo que siguió. No quiso tomar su teléfono, como tampoco quería asistir a clases al día siguiente, aunque debía de hacerlo. El sueño tomó parte de ella en un par de segundos apenas apoyó su cabeza en la almohada, y en ello tan solo se dejó sumir por completo.
¡Aquí está!
PERFECTAMENTE CONTRARIOS: https://www.wattpad.com/myworks/38835643-perfectamente-contrarios
ENDLESS: https://www.wattpad.com/myworks/39359420-endless
PERFECT FOR YOU (Harry Styles) : https://www.wattpad.com/myworks/55049994-perfect-for-you
* * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * *
Si antes había reaccionado tan bien, ahora Scarlett estaba a punto de sufrir un colapso.
Derek se las había ingeniado para conseguir una casa por el precio de ambos autos, aunque no era lo que Scarlett imaginó alguna vez. Una casa de dos plantas, con una falta evidente de una mano de pintura, y con un jardín algo descuidado.
— Fue todo lo que pude conseguir... Está cerca de tu universidad, del jardín de Dylan, y a la vez del lugar donde tendré que trabajar. —
¿Cerca? ¿Realmente el podía llamarle cerca a eso? Estaba a unos cuarenta minutos caminando, y ella consideraba aquella opción solo por el hecho que ahora ya no tenía auto, por lo cual, tendría que caminar.
— Necesitaré toda tu ayuda en esto, Scarlett... Tenemos que salir adelante, y sabes que eso será difícil. Compré lo necesario para arreglar la casa, aunque dudo quieras comenzar a pintar hoy, o esta semana. Conseguí un acuerdo para que algunos muebles de la otra casa se viniesen con nosotros... Es bastante amplio, estoy seguro que luego de los arreglos, será un poco más acogedora. Ha estado sin dueños por mucho tiempo, así que es necesaria toda la ayuda posible. —
La casa no era ni la mitad de donde vivían antes, pero comprendía que su hermano intentaba guardar la mayor cantidad de dinero posible. Asintió a sus palabras, tratando de ocultar su disgusto, y optó por dirigirse al interior del lugar.
El interior era amplio, era cierto, y sabía que en la parte superior, habrían tres habitaciones, dos grandes y una mediana. Se notaba la capa de polvo existente en el piso y ventanas, y ello fue evidente cuando uno de sus dedos se topó en la superficie de madera sobre la chimenea, notandose como el polvo se pegaba a su dedo, y dejaba un camino limpio sobre el lugar a medida que deslizaba este.
— Vamos, princesa... ¿Sabes? Sería mucho mejor si te llevas a Dylan al parque. Ambos necesitan distraerse un poco, y alejarse de todos los cambios de hoy. Llamaré a algunos chicos de mi universidad para que me ayuden a arreglar este lugar, así que puedes estar tranquila.—
Su hermano siempre había tenido una excelente relación con sus compañeros. Derek era humilde, y querido por todos, tal cual solía ser su madre, en cambio, ella se había vuelto algo superficial, y aquello la mortificaba en aquel segundo.
— Vale... Saldré con el un rato. —
Musitó de forma suave, removiendose para ir en busca del menor, y tomar su pequeña mano, dirigiendole hacia fuera del lugar.
Dylan tan solo observaba feliz a sus hermanos, dando ligeros brincos al caminar al lado de Scarlett, quien iba aún sumida en sus pensamientos. Con suavidad, Scarlett se detuvo ante una de las esquinas, esperando a que un vehículo pasara la calle, aunque su sorpresa fue notoria cuando este no se continuó su camino, si no que se detuvo.
Sin poder evitarlo, la castaña fijó su vista en los vidrios polarizados, y sintió su pecho contraerse cuando el rostro de Jethro Bersseau se fue distinguiendo cuando el vidrio comenzó a bajar.
— Miren nada más... ¿Donde quedó tu deportivo? ¿O ahora ayudas al medio ambiente caminando? —
Expresó el con plena diversión en su rostro, negando ligeramente a la vez que bajaba la vista y notaba a un pequeño. Su semblante burlesco cambió radicalmente, y se volvió un poco más serio, aunque una pequeña sonrisa fue dedicada hacia Dylan, quien movía sus largas pestañas estando curioso.
— Estamos caminando. ¿Tienes algún inconveniente con ello?—
Habló Scarlett con algo de irritación, algo que nunca había sido visto en ella. Jethro estudió su figura, y supo que algo andaba mal con la Barbie a quien adoraba molestar. La chica se veía algo desanimada, y podría apostar a que estaba pronta a llorar. Su ropa no estaba impecable como siempre, si no que inclusive, estaba sin un bolso o sin un teléfono celular en sus manos, algo que para el ya era un indicio de algo.
— ¿Estás bien?—
Preguntó y maldijo luego por haber hecho aquella pregunta. El no tenía porqué interesarse si estaba bien o mal, el solo la molestaba y aquel era su única motivación.
— Perfectamente, así que ahora, si no te molesta, continuaremos con nuestro camino. Piérdete, Bersseau.—
Habló intentando que sus últimas palabras saliesen en un tono adorable, aunque aquello no salió del todo bien. Scarlett tiró ligeramente la mano de Dylan, y buscó pasar tras el auto de Jethro, que al ver que ambos continuaron caminando, puso en marcha su vehículo nuevamente.
Estaba extrañado, algo consternado con el hecho de ver a la chica Leveausse en aquellos lugares. Si bien sabía, vivía en la zona rica del lugar, y no en uno de los lugares cercanos a la universidad, que solían ser algo "modestos". Sacando todo pensamiento de Scarlett de su cabeza, se dirigió hacia casa de una de las chicas del bar con las que había entrablado una amistad con privilegios, y tras una jornada de clases, iba con la idea fija de desestresarse.
Scarlett había avanzando ya cuatro calles, y Dylan era el más feliz de ello, aunque ella no. Odiaba caminar tanto con tacones y sobretodo en una zona donde el piso era irregular. Al llegar al parque, el menor soltó su mano rápidamente, y corrió con euforia hasta otros niños que se mantenian jugueteando en diferentes zonas de los juegos.
Scarlett, avanzó casi resignada hacia una de las bancas, y casi llegando a esta, su pie derecho se dobló producto del alto tacón de su sandalia y a la irregularidad en la que se encontraba la tierra.
Soltando un sollozo bajo ante el dolor, caminó como pudo a la banca, y lo primero que hizo, fue quitarse ambas sandalias, notando como su tobillo derecho estaba algo enrojecido.
— ¡Bien! ¡Lo que me faltaba! —
Resopló con los ojos cristalizados, y cubriendo su rostro, aprovechó la soledad en la que estaba inmersa, para poder suspirar con cierto dolor. Los problemas de su familia le tenían casi al punto del desespero, y no sabía como lidiar con ello. ¿Que harían? Ella no podía vivir si no era como estaba antes. Era prácticamente un martirio el cambiar la vida de una persona que estaba en la cima de la pirámide, a la parte más baja.
Las horas pasaron con notable rapidéz, y ante ello, el frío se hacía cada vez más latente. Ya no había un gran número de personas en el parque, si no que todo lo contrario. Scarlett tensó sus labios al ver como su hermanito ahora se encontraba jugueteando solo, y se dispuso a levantarse, no sin antes hacer una mueca de dolor al pisar con su tobillo derecho.
— Maldición. —
Masculló y como puso, avanzaba en busca de Dylan, quien al verla, dejó lo que hacía para ir con ella.
—Scarlett, ¿Podemos ir por algo de comer? —
Inquirió el, algo que mató lentamente cada sentimiento en ella. Rebuscó en el bolsillo de su chaqueta, y agradeció mentalmente el hecho de tener veinte dólares dentro. Podría comprarle algo a su hermano, y eso le hacía sentir un poco mejor.
— Claro, Dy, iremos por algo para comer y lo llevaremos para comer con Derek. —
Instó ella.
Ya no existían lujos para ninguno, y debía adecuarse a todo lo que se les vendría.
Ambos concurrieron una pastelería que adoraba Dylan, y con suerte, pudieron comprar un pastel con el que el menor quedó conforme. Envolvieron este, y salieron, viendo como ya la tarde había caído. Si bien, el pie de Scarlett estaba herido, trataba de disimular lo más posible con su hermano, para que este no fuese a preocuparse.
Sabía como llegar, aunque para cuando lo hiciesen, estaría todo oscuro, y eso le preocupaba, aunque se resignó con fácilidad. ¿Que podrían robarle? ¿Sus sandalias? No traía consigo nada más de valor, así que no estaba demasiado interesada.
Llegó hasta la casa en la que vivirían a eso de las nueve y media de la noche. Derek, estaba con el alma en un hilo, aunque la sorpresa de Scarlett al ver el lugar fue casi incomparable.
El interior sucio y andrajoso que había visto antes de irse, no existía ahora. El lugar era amplio, y tenía alguna alfombras caras que habían tenido en la otra casa. Muebles y cortinas a corde, junto con el piso mucho más limpio de como había estado.
— Esto es... wow. —
Solo pudo articular de forma baja. Derek, notando su impresión, se irguió derecho, estando orgulloso.
— Si... Los chicos y yo hicimos un increíble trabajo.—
Articuló y tomando la mano de su hermana, instó a que dejara el pastel sobre la mesa, para avanzar con ella por la escalera, y así dirigirla a su habitación. Scarlett sabía que no sería como su antigua habitación, aunque el trabajo hecho por Derek la dejó boquiabierta.
Sin duda no se parecía a como había estado antes, todo había cambiado y para una mejor manera.
Lucía confortable, al punto en que Scarlett se sintió un poco mejor.
— Derek... Gracias. —
Musitó y rodeó los brazos del contrario en un cálido abrazo, que este correspondió casi enseguida.
— Quiero que todo este golpe sea lo más suave posible para ti y Dylan... Sé que será difícil, aunque lo lograremos, Scar. —
Inquirió el, a lo cual minutos luego abandonó la habitación. Scarlett se apresuró a ir hacia su armario, y abrir las amplias puertas, teniendo sus maletas cercas para así comenzar a acomodar cada prenda.
Como mínimo, tenia ahí unas once maletas, y todo debía de ordenarlo nuevamente, aunque tenía una idea que le ayudaría a poder ocupar poco espacio, y ganar algo de dinero.
Finalizó su trabajo a eso de las once, habiendo desempacado siete maletas, y las demás, las dejó arregladas, aunque en ellas se encontraban prendas que ya no volvería a utilizar. Tenía un plan para aquellas prendas, aunque esperaría para ponerlo en práctica.
Optó por tomar una ducha, y en esta, dejó que su pie herido reposara en agua caliente. Le dolía, como mil demonios, aunque no podía darle más preocupaciones a sus hermanos. Al salir de la ducha, se colocó un pijama sencillo, y bajó al primer piso, notando como sus hermanos se habían comido prácticamente todo el pastel.
Tomando un trozo de pastel, y disimulando su lesión, se alimentó de este, y prosiguió luego a darles la buenas noches a sus hermanos.
— ¿Me vas a leer un cuento, Derek? —
Preguntó el pequeño Dylan hacia el mayor, a lo cual este asintió.
— Claro, campeón. Los que quieras, y sabes que si tienes miedo, puedes dormir conmigo y ver caricaturas.—
Scarlett ladeó la sonrisa cuando fue subiendo la escalera. Derek tenía una paciencia de oro, y era injusto el que tomara el papel de padre ante ella y Dylan, aunque sabía que el más que nadie, los cuidaría con su vida.
La castaña se desconectó de absolutamente todo lo que siguió. No quiso tomar su teléfono, como tampoco quería asistir a clases al día siguiente, aunque debía de hacerlo. El sueño tomó parte de ella en un par de segundos apenas apoyó su cabeza en la almohada, y en ello tan solo se dejó sumir por completo.
BellamyGirl
Re: » Endless «
La alarma logró de sacarla de la ensoñación en la que se encontraba, y tras recordar todo lo acontecido el día anterior, suspiró volviendo a apoyar su cabeza en la almohada. Definitivamente no quería levantarse.
De malas ganas fué por una ducha rápida, y optando por llevar un pantalón corto y una clusa algo holgada, fué en busca de sus zapatos.
Definitivamente su tobillo había amanecido más hinchado que el día de ayer, ahora ya era notoria la hinchazón y aquello le perjudicaria ante el hecho de llevar algún zapato cerrado. Tomando unas sandalias que no jugarían tan en contra, se las colocó e hizo una notoria mueca al ver como de alguna forma, hacían que el dolor aumentara.
Dejó su cabello suelto, y tratando de que todo estuviese normal, bajó a desayunar, agradeciendo que su hermano se encontrase ahí aún.
— Derek... ¿Podrías pasar a dejarme a la universidad? —
Preguntó en un tono casi adorable para tratar de convencer a su hermano. Este meditó unos segundos a forma de broma, y asintió, tomando a Dylan entre sus brazos, y haciéndole un gesto a Scarlett.
— Vamos... Toma algo para desayunar en el camino, ya que vas algo tarde.—
Inquirió y con suavidad y le hizo un gesto a su hermana, para salir del lugar. Afuera, estaba una de las camionetas del mejor amigo de Derek, con este dentro, bebiendo su típico café.
— Buen día, Hans . —
Pronunció su hermano, a lo cual Dylan y Scarlett saludaron con una sonrisa.
— Buen día, chicos Leveausse's. Apresurémonos, ya que Dylan y Scarlett llegarán tarde.—
Inquirió y una vez estuvieron todos dentro, comenzó a conducir con cierta velocidad por las calles. Pasaron a dejar al pequeño Dylan primero, para luego llevar a Scarlett a la universidad.
—Scar... Ten.—
Habló Derek tomando la mano de Scarlett para pasarle de aquella manera unos cuantos billetes. El gesto, enterneció a la castaña, quien agradeció de forma baja y una vez llegaron a la universidad, bajó del lugar despidiéndose de ambos.
Estando ahí, observó como la camioneta se alejó y se giró suavemente luego, topándose con uno que otro integrante del equipo de fútbol americano.
— ¿Nuevo novio?—
Preguntó Max en un tono algo celoso, para así, observarle con detenimiento.
— Es mi hermano, Max... Y su amigo. Solo me hicieron un favor y me trajeron.—
Pronunció ella rodando los ojos, para comenzar a caminar directo a su salón, aunque el dolor en su tobillo incrementó. Suspiró de forma ligera, y distinguió a lo lejos a Camille, la única chica que podría considerarse su amiga ahí.
Esta, al verle algo afligida, parpadeó con incredulidad al ver su pie, y frunció el ceño mientras se acercaba a ella, pronunciando de forma alta, aunque tan solo ellas pudieron escuchar.
—Supongo fuiste a médico. ¿Que te ocurrió? ¿Porqué tu tobillo parece una roca de tres veces su tamaño normal?—
Preguntó ella, ante lo cual Scarlett decidió decir todo de una vez.
— Mi padre nos dejó... Estaba involucrado en una estafa. Perdimos la casa, y absolutamente todo. ¡Tuve que vender mi jodido auto!—
La cordura en aquel segundo estaba perdida para Scarlett, y sin poder contener más las lágrimas, abrazó a su amiga, quien le recibió de manera protectora.
—Estamos viviendo en una casa... modesta. Solo Derek, Dylan y yo. Es... Es un asco, Cam. Nadie puede enterarse de que lo he perdido todo. No quiero lástima, ni tampoco quiero perder lo que he conseguido aquí.—
Murmuró y sintió como su amiga propinaba suaves caricias a su cabello.
— Shh... No hables, Scar. Yo puedo pasar a buscarte por las mañanas... Ahora estás aquí, así trata de distraerte. —
Mencionó con un tono de voz protector. Camille era la hermana que ella no tenía, y su amistad ya iba latente por siete años.
Sin continuar en negación, Scarlett obedeció y avanzó con cuidado junto a Camille, hacia donde tenían ambas la siguiente clase.
El primer bloque fue Química, y aquello sacó un poco a Scarlett de sus problemas. Se mantuvo preocupada en la clase, e inclusive estuvo sumida entre risas por comentarios de algún chico en plena hora escolar.
— Iré por algo de comer a la cafetería, y vuelvo enseguida.—
Le mencionó a Camille y salió del lugar llevando consigo tan solo su bolso. Al avanzar por el pasillo, iba completamente sumida en uno que otro mensaje de su teléfono, al punto en que no logró ver con claridad a quien le tomó por el brazo, y atrajo hacia el cuarto de servicio del conserje.
—Scarlett Leveausse... Si gritas, perderás mucho. Quiero que me escuches ¿Está bien?—
Habló Jethro con aquel tono de voz grave y profundo. Scarlett sintió el pánico envolverle, y asintió un par de veces, para que el le soltara de su aprensión en la boca, que le impedía hablar.
— Nena... Debería decir que es lamentable el tema que está ocurriendo con tu padre, aunque como suelo hacer, me aprovecharé de eso. ¿Que se siente haberlo perdido todo, pequeña barbie?—
El color del rostro de Scarlett desapareció. Se sintió mareada por unos segundos, y sus manos temblaron. ¿Como el sabía eso?
— Deberías saber que aquí se armaría un escándalo de proporciones magníficas si se llega a saber. "Mal padre abandona a sus hijos y huye a otro país luego de estafar al fisco" "Ex reina de belleza ahora se la pasa en parques de infantes, donde termina quitándose los zapatos y ser una más del pueblo" ¿Estarían bien los titulares?—
Las manos de la chica se empuñaron, y en sus ojos se notó el dolor a su ego. Quería golpearlo, como nunca, quería golpear su rostro, justo donde yacía esa socarrona sonrisa ganadora. El la tenía.
— Vamos a hacer un trato, ¿Vale? Tú vas a obedecerme. Vas a ser buena conmigo y vas a dejar que yo sea bueno contigo.—
La perversión era notable en su mirada, a lo cual Scarlett negó.
— Eres un cerdo. Si piensas que estaré contigo, estás muy equivocad...—
No pudo terminar, ya que la gran mano de Jethro cubrió su boca, y su cuerpo se apegó al de ella hasta el punto de dejarla contra la pared.
— Creo que no he sido claro. Vas a hacer lo que yo diga, Scarlett. Vas a obedecerme, y solo así tu secretito estará a salvo. Incluso, me ocuparé de ayudarte a mantener aquella mentira, siempre y cuando tu cooperes. ¿Comprendes? Y quédate tranquila, no tengo interés alguno en ti. Como dije antes, no me van las vírgenes.—
Mencionó el, a lo cual ella iba a negarse, aunque un jadeo bajo escapó de sus labios en cuando las manos de Jethro fueron a su cintura, y sus labios se presionaron contra su cuello, besando este de forma demandante. Cerró sus ojos e iba a mordisquear su labio, aunque aquella sensación abandonó su cuerpo enseguida, encontrándose con la divertida sonrisa de Jethro.
— ¿Ves? Virgen. Reaccionas así ante el más mínimo toque. — Mencionó el, y luego negó, tomando distancia.— Las cosas quedaron dichas, Leveausse. Más te vale seguir el trato, o te hundirás. —
Scarlett no había sido consiente de cuando el abandonó el lugar, y por ello, contuvo el aire ligeramente, soltándolo luego para así poder respirar.
Sus rodillas aún temblaban, y tras unos segundos, tomó coraje para salir del cuarto del conserje. Sus ojos picaban, sentía como si las lágrimas fuesen a caer en cualquier momento, aunque no le daría ese privilegio a el.
De malas ganas fué por una ducha rápida, y optando por llevar un pantalón corto y una clusa algo holgada, fué en busca de sus zapatos.
Definitivamente su tobillo había amanecido más hinchado que el día de ayer, ahora ya era notoria la hinchazón y aquello le perjudicaria ante el hecho de llevar algún zapato cerrado. Tomando unas sandalias que no jugarían tan en contra, se las colocó e hizo una notoria mueca al ver como de alguna forma, hacían que el dolor aumentara.
Dejó su cabello suelto, y tratando de que todo estuviese normal, bajó a desayunar, agradeciendo que su hermano se encontrase ahí aún.
— Derek... ¿Podrías pasar a dejarme a la universidad? —
Preguntó en un tono casi adorable para tratar de convencer a su hermano. Este meditó unos segundos a forma de broma, y asintió, tomando a Dylan entre sus brazos, y haciéndole un gesto a Scarlett.
— Vamos... Toma algo para desayunar en el camino, ya que vas algo tarde.—
Inquirió y con suavidad y le hizo un gesto a su hermana, para salir del lugar. Afuera, estaba una de las camionetas del mejor amigo de Derek, con este dentro, bebiendo su típico café.
— Buen día, Hans . —
Pronunció su hermano, a lo cual Dylan y Scarlett saludaron con una sonrisa.
— Buen día, chicos Leveausse's. Apresurémonos, ya que Dylan y Scarlett llegarán tarde.—
Inquirió y una vez estuvieron todos dentro, comenzó a conducir con cierta velocidad por las calles. Pasaron a dejar al pequeño Dylan primero, para luego llevar a Scarlett a la universidad.
—Scar... Ten.—
Habló Derek tomando la mano de Scarlett para pasarle de aquella manera unos cuantos billetes. El gesto, enterneció a la castaña, quien agradeció de forma baja y una vez llegaron a la universidad, bajó del lugar despidiéndose de ambos.
Estando ahí, observó como la camioneta se alejó y se giró suavemente luego, topándose con uno que otro integrante del equipo de fútbol americano.
— ¿Nuevo novio?—
Preguntó Max en un tono algo celoso, para así, observarle con detenimiento.
— Es mi hermano, Max... Y su amigo. Solo me hicieron un favor y me trajeron.—
Pronunció ella rodando los ojos, para comenzar a caminar directo a su salón, aunque el dolor en su tobillo incrementó. Suspiró de forma ligera, y distinguió a lo lejos a Camille, la única chica que podría considerarse su amiga ahí.
Esta, al verle algo afligida, parpadeó con incredulidad al ver su pie, y frunció el ceño mientras se acercaba a ella, pronunciando de forma alta, aunque tan solo ellas pudieron escuchar.
—Supongo fuiste a médico. ¿Que te ocurrió? ¿Porqué tu tobillo parece una roca de tres veces su tamaño normal?—
Preguntó ella, ante lo cual Scarlett decidió decir todo de una vez.
— Mi padre nos dejó... Estaba involucrado en una estafa. Perdimos la casa, y absolutamente todo. ¡Tuve que vender mi jodido auto!—
La cordura en aquel segundo estaba perdida para Scarlett, y sin poder contener más las lágrimas, abrazó a su amiga, quien le recibió de manera protectora.
—Estamos viviendo en una casa... modesta. Solo Derek, Dylan y yo. Es... Es un asco, Cam. Nadie puede enterarse de que lo he perdido todo. No quiero lástima, ni tampoco quiero perder lo que he conseguido aquí.—
Murmuró y sintió como su amiga propinaba suaves caricias a su cabello.
— Shh... No hables, Scar. Yo puedo pasar a buscarte por las mañanas... Ahora estás aquí, así trata de distraerte. —
Mencionó con un tono de voz protector. Camille era la hermana que ella no tenía, y su amistad ya iba latente por siete años.
Sin continuar en negación, Scarlett obedeció y avanzó con cuidado junto a Camille, hacia donde tenían ambas la siguiente clase.
El primer bloque fue Química, y aquello sacó un poco a Scarlett de sus problemas. Se mantuvo preocupada en la clase, e inclusive estuvo sumida entre risas por comentarios de algún chico en plena hora escolar.
— Iré por algo de comer a la cafetería, y vuelvo enseguida.—
Le mencionó a Camille y salió del lugar llevando consigo tan solo su bolso. Al avanzar por el pasillo, iba completamente sumida en uno que otro mensaje de su teléfono, al punto en que no logró ver con claridad a quien le tomó por el brazo, y atrajo hacia el cuarto de servicio del conserje.
—Scarlett Leveausse... Si gritas, perderás mucho. Quiero que me escuches ¿Está bien?—
Habló Jethro con aquel tono de voz grave y profundo. Scarlett sintió el pánico envolverle, y asintió un par de veces, para que el le soltara de su aprensión en la boca, que le impedía hablar.
— Nena... Debería decir que es lamentable el tema que está ocurriendo con tu padre, aunque como suelo hacer, me aprovecharé de eso. ¿Que se siente haberlo perdido todo, pequeña barbie?—
El color del rostro de Scarlett desapareció. Se sintió mareada por unos segundos, y sus manos temblaron. ¿Como el sabía eso?
— Deberías saber que aquí se armaría un escándalo de proporciones magníficas si se llega a saber. "Mal padre abandona a sus hijos y huye a otro país luego de estafar al fisco" "Ex reina de belleza ahora se la pasa en parques de infantes, donde termina quitándose los zapatos y ser una más del pueblo" ¿Estarían bien los titulares?—
Las manos de la chica se empuñaron, y en sus ojos se notó el dolor a su ego. Quería golpearlo, como nunca, quería golpear su rostro, justo donde yacía esa socarrona sonrisa ganadora. El la tenía.
— Vamos a hacer un trato, ¿Vale? Tú vas a obedecerme. Vas a ser buena conmigo y vas a dejar que yo sea bueno contigo.—
La perversión era notable en su mirada, a lo cual Scarlett negó.
— Eres un cerdo. Si piensas que estaré contigo, estás muy equivocad...—
No pudo terminar, ya que la gran mano de Jethro cubrió su boca, y su cuerpo se apegó al de ella hasta el punto de dejarla contra la pared.
— Creo que no he sido claro. Vas a hacer lo que yo diga, Scarlett. Vas a obedecerme, y solo así tu secretito estará a salvo. Incluso, me ocuparé de ayudarte a mantener aquella mentira, siempre y cuando tu cooperes. ¿Comprendes? Y quédate tranquila, no tengo interés alguno en ti. Como dije antes, no me van las vírgenes.—
Mencionó el, a lo cual ella iba a negarse, aunque un jadeo bajo escapó de sus labios en cuando las manos de Jethro fueron a su cintura, y sus labios se presionaron contra su cuello, besando este de forma demandante. Cerró sus ojos e iba a mordisquear su labio, aunque aquella sensación abandonó su cuerpo enseguida, encontrándose con la divertida sonrisa de Jethro.
— ¿Ves? Virgen. Reaccionas así ante el más mínimo toque. — Mencionó el, y luego negó, tomando distancia.— Las cosas quedaron dichas, Leveausse. Más te vale seguir el trato, o te hundirás. —
Scarlett no había sido consiente de cuando el abandonó el lugar, y por ello, contuvo el aire ligeramente, soltándolo luego para así poder respirar.
Sus rodillas aún temblaban, y tras unos segundos, tomó coraje para salir del cuarto del conserje. Sus ojos picaban, sentía como si las lágrimas fuesen a caer en cualquier momento, aunque no le daría ese privilegio a el.
BellamyGirl
O W N :: Archivos :: Novelas Abandonadas
Página 1 de 1.
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.
Miér 20 Nov 2024, 12:51 am por SweetLove22
» My dearest
Lun 11 Nov 2024, 7:37 pm por lovesick
» Sayonara, friday night
Lun 11 Nov 2024, 12:38 am por lovesick
» in the heart of the circle
Dom 10 Nov 2024, 7:56 pm por hange.
» air nation
Miér 06 Nov 2024, 10:08 am por hange.
» life is a box of chocolates
Mar 05 Nov 2024, 2:54 pm por 14th moon
» —Hot clown shit
Lun 04 Nov 2024, 9:10 pm por Jigsaw
» outoflove.
Lun 04 Nov 2024, 11:42 am por indigo.
» witches of own
Dom 03 Nov 2024, 9:16 pm por hange.