Another me

por **MaariaAgustina** Mar 24 Nov 2015, 10:34 pm

PROLOGO

El destino de tres personas se verá entrelazado bajo el techo de una misma universidad.

Secretos y mentiras siempre habrá

Nicolás esconde un secreto que involucra a Ana. Todo marcha bien hasta que es descubierto por su compañera de banco. Acá Luz entra en escena, su curiosidad se ve involucrada, a medida de la historia ira manipulando la situación para girar a una sola dirección;
¿A favor de quién?

PERSONAJE: Ana Sofia Bolina

No queras saber quién soy...

Edad: 18 años
Origen: Cordoba
Signo: Piscis
Color: Negro
Música: Pop
Comida favorita: Sushi
Trabajo: Estudiante de la unc en abogacía

Rasgos físicos:

Altura: 1,74 m
Peso: 56 Kg
Ojos: Almendras
Cabello: Rubio ceniza.
Detalles: Largas pestañas, pelo de ensueño, bronceado siempre

Rasgos de personalidad:

Alegre/Triste: Ana es una chica que se muestra muy feliz por fuera, siempre riendo y cantando, pero ¿es realmente así o es solo una máscara?

Atrevida: No tiene miedo en mostrar sus intenciones y lanzarse a lo que quiere

Coqueta: Siempre a la moda es una de sus reglas, le gusta verse bien, consentir a su cuerpo y sentirse superior

Inseguridad: A pesar de dedicar largas horas a su cuerpo, y demostrar que tiene actitud por fuera, es bastante insegura de si misma, no sabe el efecto que tiene en las personas y hasta que punto llega su belleza

Misteriosa: Ana tiene una doble faceta, por fuera es algo ya conocido, por dentro guarda un secreto al que se debe enfrentar todas las noches aun no revelado

Enamoradiza: Cree en el amor por sobre todas las cosas, como toda chica sueña con encontrar aquella persona que la haga sentir especial y olvidarse de su pasado

Deportista: Ama el deporte con cada parte de su ser, se ha dedicado toda su vida a realizar toda clase de deportes y su pasión infinita es correr por el parque todas las mañanas.

PASADO:
A revelar

ACTUALIDAD:
Ana vive con sus padres y hermana menor todavía, acaba de terminar el instituto y se encuentra estudiando abogacía en la UNC.

PERSONAJE: Nicolas

¿Para que morir intentando?

Edad: 19 años
Origen: Cordoba
Signo: Cancer
Color: Azul
Música: Rock
Comida favorita: Pasta
Trabajo: Estudiante de la unc en abogacía, trabaja en "Novocentro Bar"

Rasgos físicos:

Altura: 1,85 m
Peso: 80 Kg
Ojos: Verdes
Cabello: Castaño claro.
Detalles: Rizos

Rasgos de personalidad:

Artistico: Nicolas siempre ha tenido una gran inclinación hacia el arte desde muy temprano en su vida. Es bastante bueno con las pinturas pero su pasión son los lápices, le gusta dibujar lo mas hermoso de la vida

Virtuoso: Por su amor al arte, Nicolas siempre ha tenido buen oído para la música en especial con la guitarra

Deportista: Su cuerpo respira deporte, sobretodo el futbol y atletismo. Lleva una vida muy sana y con hábitos saludables para hacer sentir bien a su cuerpo

Solitario: A pesar de ser amigable y que se le de bien las cuestiones sociales es muy cerrado. Solo se abre a muy pocas personas y cuando lo hace es increíble, pero siempre prefiere estar en soledad

Aventurero: Siempre le ha fascinado explorar y descubrir cosas nuevas. Su gran sueño es viajar por el mundo, viajar a los lugares mas escondidos que hayan existido y conocer.

PASADO:

Nació en la ciudad de Córdoba pero viajo por varios puntos del país, el trabajo de su padre como gerente de banco hacia que su hogar nunca fuera el mismo.
Se enamoró por primera vez a los 11 años de una chica de su barrio en la gran ciudad de Buenos Aires, pero no duro mucho, una inminente mudanza los separo y allí aprendió lo que es tener un corazón roto.

Con tantos cambios, Nicolas, se acostumbró a no encariñarse con su entorno fácilmente.

A los 12 años compro su primera guitarra en un mercado de segunda mano. Ahí descubrió la pasión que lo guiaría por el resto de su vida

Cansada de no tener estabilidad, su madre, se llevó a Nicolas, con 15 años, y su hermano mayor devuelta a la ciudad donde nacieron y a formar una nueva familia en la que su padre no estaría presente.

ACTUALIDAD

Con sus padres divorciados y su madre con pareja nueva, Nicolas vive en un departamento compartido con su hermano y trabaja a medio tiempo en un bar, lo hace simplemente por independencia, ya que recursos no le sobran.

Estando el año pasado de mochilero por todo el país, creando obras de artes en las paredes de distintos lugares, pasando de cama en cama y de amor en amor, finalmente decide asistir a la universidad a formar un mejor futuro

Personaje: Luz

"Ser divertida...no ayuda"

Edad: 18 años
Origen: San Pablo
Signo: Capricornio
Color: Celeste
Música: Pop
Comida favorita: Hamburguesas
Trabajo: Estudiante de la unc en abogacía

Rasgos físicos:

Altura: 1,70 m
Peso: 54 Kg
Ojos: Celestes
Cabello: Castaño oscuro .
Detalles: Pecas y pequeños lunares en todo su cuerpo

Rasgos de personalidad:

Valiente: Se puede ser valiente de muchas maneras y ante diferentes situaciones. Luz siempre se ha caracterizado por su actuar y pensar decidido. Sabe lo que quiere y hace lo que sea para lograrlo. Valentía siempre le ha sobrado a la hora de hacer, hablar y no callarse nunca nada. A pesar de que esa valentía escaza a la hora de tomar riendas en el amor

Alegre con altibajos: Alegría, siempre una sonrisa en el rostro es lo que muestra por fuera y por dentro. Aunque en algunas situaciones, ciertas cosas la tiran para abajo por lapsos muy cortos de tiempo, pero siempre sale adelante. ¿Esta alegría disminuirá a medida que transcurra la historia?

Sentido del humor: Oír la risa saliendo de sus labios es una orquesta. Tiene el don de transmitir alegría, felicidad y humor a aquellos que la rodean. Hacer reír a la gente es su mejor cualidad

Espontanea: Actúa de manera libre y sin prejuicios. Es autentica y natural. No piensa antes de dar un paso. Sus acciones se van dando de acuerdo a la situación, sin pensar en las consecuencias, en las palabras a decir ni sus movimientos. Esto es algo que puede traer problemas a lo largo del tiempo, pero luz siempre ha salido a flote con sus demás aspectos

Curiosa: Todo llama la atención para Luz, siempre intenta conocer, preguntar y saber más acerca de todo tipo de cuestiones. A veces pasa la línea entre la curiosidad sana y la intromisión. Esto le va a traer muchos problemas, pero al fin y al cabo, no habría historia que contar si la curiosidad no fuera parte de su ser

Centrada: Es muy centrada acerca de sus objetivos, principalmente el estudio, no deja que nadie la desenfoque. Esta característica se ve a la hora de asistir a clases, a pesar de ser sumamente amigable, prefiere dejar de lado las charlas y enfocarse en el profesor, lo que la lleva a no tener muchas amistades en el ámbito estudiantil

Inseguridad amorosa: Valentía y espontaneidad le faltan a la hora de hablar de amor. A pesar de ser muy segura de sí misma, le cuesta aceptar y afrontar sus sentimientos por el otro.

No egoísta: Siempre pone los sentimientos de los demás por sobre los suyos

Pasiones: Ballet y piano

BIOGRAFIA:

Nacimiento

Luz nació en San pablo, un pequeño pueblo de su país, alejada de la ciudad y lo que ella involucra. Sus padres la amaron con locura desde el primer momento en que la vieron y siempre se esforzaron por darle lo mejor, a pesar de a veces no poder permitírselo

Infancia:

Su infancia estuvo marcada por la búsqueda de sus aficiones. Sus padres la anotaron en todo tipo de talleres, desde futbol a ballet, con el objetivo de aumentar sus habilidades. Finalmente emprendió el camino de la música, practicando ballet y piano. A los diez años consiguió su primer piano propio, instalado en su sala de estar, luz pasaba las tardes enteras ahí, uno de los lugares más felices de su infancia

Adolescencia:

Gracias a la gran belleza de su rostro, su cabello largo y ojos azul profundo, Luz se destacó como una de las reinas de su instituto. Sus cualidades le abrían todas las puertas posibles y no dejaba nada que probar.
Su nivel económico la avergonzaba, a pesar de que sus padres se esforzaban para mandarla al mejor instituto, ella no reconocía el esfuerzo, y al ser tan conocida, ella se hacía valer menos por lo que no tenía.
El ballet la volvió muy perfeccionista, en especial con su cuerpo, pero nunca abusando

Imposible de conquistar ella era, ningún chico llamaba su atención, y a pesar de la popularidad, el amor siempre fue algo de gran valor para ella y no para cualquiera. Su primer novio llego a los 16 años, duraron unos meses antes de que el la dejara por otra chica de perfil bajo, argumentando que no era para su mundo. Luego de eso, Luz, abrió los ojos, empezó a valorar el esfuerzo de sus padres, se dio cuenta la falsedad de sus amigos y la lealtad que muy pocos le ofrecían, dejo de lado sus pensamientos materialistas, decidida a empezar una nueva vida en otro lugar.

Juventud:

Con 18 años recién cumplidos, Luz se alejó de su pasado y se fue a vivir a una nueva ciudad, con un objetivo en mente, bailar, tocar en los bares del lugar y recibirse en derecho ya que siempre le había fascinado la idea de "justicia".
Luego de haberse perdido a sí misma en su adolescencia, decidió encontrarse en nuevos lugares, dejar atrás algunos hábitos, y empezar de cero.

Actualmente vive en una residencia en pleno centro, estudiando en la universidad gratuita y trabajando en un bar como pianista. El ballet quedo algo en el pasado, pero es algo que quiere volver a encontrar

Inspiración:

Siempre que leí novelas románticas, de los dos protagonistas súper enamorados, siempre me preguntaba que sería si apareciera otra chica, una diferente a la protagonista (siempre en los mismos tópicos aburridos) y luchara por el chico.

A veces aparecía una chica, una antagónica con personaje de "puta roba novios", y en todos los comentarios la insultaban, odiaban y deseaban que los protagonistas se vuelvan a juntar y "amar por siempre". Yo, en cambio, siempre ame la antagónica o siempre desee que hubiera alguna

Luz es la antagónica de mi historia, no está basada en un tópico: pobre/rica, santa/puta, buena/mala, amada/no amada, etc.

Es un punto medio, una contraria a la protagonista para ver el punto de vista de la chica que no es la que debe estar con el "galán"

Capitulo 1

(LUZ)

Entrecerré frenéticamente los ojos intentando comprender lo que decía en la pantalla de mi teléfono. Con los efectos del alcohol era imposible comprender una sola palabra, casi tanto como encontrar algo decente en los bares de nueva córdoba

-¡Lu! –Escuche un grito de desesperación seguido de un manotazo en mi hombro- ¡Lu! ¡Lu!

Se trataba de mi buen amigo y compañero, Tomas, que como todo sábado a la noche se encontraba en un estado de ebriedad alucinante

-Tomi –suspire cansada- ¿Qué mierda te pasa?

-No se si notaste que desaparecí por horas –grito nuevamente con un tono desesperado

-La verdad que no –me encogí de hombros y tome de manera sumamente inocente un trago de aquella bebida extraña que me habían ofrecido con el pase al bar

-Me paso algo terrible –en su cara se dibujó un llanto fingido y a continuación una risa de lo más penosa y triste

-¿Te violaron? –Pregunte sorprendida- ¿Te robaron tu preciado alcohol?

-Nooo, peor peor que eso

-¿Qué puede ser peor que eso? –Puse mi mejor cara de puchero- ¡Ya se! Catalina te corto el rostro otra vez?

-¿Quién? –al parecer no reconocía el nombre ni por asombro

-¿El amor de tu vida? ¿La luz de tus ojos? –rei al recordar como la solia llamar cuando estaba borracho, pero al parecer esta vez estaba tan en pedo que no recordaba ni su rostro

-Ah sí sí! –En sus ojos se prendió una luz- pero no es eso

-¿Y qué es? –ya estaba terminando con la poca paciencia que me quedaba, la cual se empezó a agotar en cuanto entramos a este lugar por no organizar bien las cosas

-La verdad –suspiro- no me acuerdo. ¿Vos que hacías?

-Acaban de subir la agenda de clases –le puse mi teléfono a milímetros de su cara- pero no puedo leer lo que dice

-¡Oh Lu! –Grito- ¡es sábado!, deja de arruinar nuestra existencia

-¿Porque Lu quiere arruinarnos? –apareció Paula con el pelo hecho un desastre

-¿Pau? ¿Que te paso? –reí junto a tomas

-El chico con el que me fui era... –sonrió- intenso

-Amm, ok –dije

Paula era una amiga de Tomas que no era completamente de mi agrado, era demasiado mezquina y fácil por decir. Mi amigo había insistido en que era lo correcto invitarla por mera cortesía, pero yo sabía que en realidad, le da vergüenza salir los dos solos

La noche continuo entre bailes y copas, Paula nos invitó un par de tragos más lo que hizo que mi visión se tornara borrosa en cuestión de minutos.

-Chicos, me voy –suspire cansada

-Ay Luz, que amargada –rio Paula moviendo sus caderas- recién son las tres, la
noche es larga

-Te recuerdo que el horario de mi residencia es estricto –me toque la cabeza incomoda- no todos tenemos la suerte de poder pagar un departamento

-Ya son las tres –Tomas me dedico una sonrisa y siguió bailando- a la mierda el horario

-Nono, perdón me tengo que ir enserio

-Como quieras –la pelirroja suspiro y desapareció de la escena

-¿Me acompañas? –le pregunte a mi buen amigo

-Mmm, realmente me quiero quedar un rato más

-Como quieras

Me di media vuelta y me dirigí a la salida. El clima empezaba a tornarse frio, el viento sacudía los árboles, el efecto del alcohol mantenía mis huesos calientes mientras caminaba por las calles en busca del gran edificio donde vivía.

Siempre fue mi sueño estudiar en esta ciudad, pero a fin de año mis padres concluyeron que no me podía permitir grandes lujos como vivir en mi propio lugar, así que encontré una residencia bastante cómoda y económica en una zona bastante linda del lugar.

Al principio de mi estadía compartía habitación con una chica bastante peculiar, toda una onda gótica que me asustaba bastante. Todo iba medianamente bien hasta que me empezó a faltar dinero, luego de unas ciertas comprobaciones, descubrí que mi querida compañera era la responsable. De más está decir que la echaron, pero para no correr riesgos otra vez, decidí tomar un trabajo en un bar para poder pagar la habitación privada.

Ya con el edificio frente a mis narices, subí las escaleras y toque la puerta tres veces.

-¿Quién es? –pregunto del otro lado de la puerta una voz bastante conocida

-Luz –apenas dije mi nombre se escuchó un suspiro lleno de frustración y el
chillido de la puerta abriéndose

-Estas no son horas de llegadas –el rostro ahora era visible tras la puerta, se trataba de Marion, la encargada de la residencia- Tendremos que hablar sobre esto

-Marion querida –sonreí- Mi comportamiento es excelente, no me podes retar por una vez de pocas. Además, el otro día una chica se encontraba cómodamente fumando en el living, y no le dijiste nada ¿Cierto?

-Hablaremos después –dijo riendo, siempre me salía con la mía

-Te adoro –pase por su lado dándole un beso en la mejilla y me fui subiendo las escaleras

Las cortinas verdes de la habitación causaban la entrada de una luz con un tono bellísimo, se notaba que era un día excelente pero al parecer mi cuerpo no coincidía con esto, dolía bastante en varias zonas y la cabeza me giraba sin parar.

La gripe me duro una semana entera y perdí mi primera semana de cursado

(ANA)

Ya empezando el segundo semestre de la universidad el clima estaba volviéndose cada vez más frio, una clara muestra de que el invierno empezaba a invadir la ciudad. El sonido de mis botas hacía eco en el asfalto mientras me dirigía a mi primera clase de este nuevo ciclo. Mire mi celular para asegurarme de no equivocarme de clase, derecho privado aula 21, fácil de recordar.

Luego de andar algo perdida por el edificio principal logre encontrar la famosa aula, antes de entrar examine los asientos disponibles, un grupo de chicas que parecían bastante amigables se encontraban en los primeros lugares y ahí es donde fui.

Me senté al lado de una chica con el cabello marrón sujeto en una coleta, ojos color avellana y facciones suaves vestida muy a la moda que no paraba de revisar su celular

-Hola, aquí da la profesora Pilco? –pregunte sabiendo ya la respuesta, pero era un buen método para empezar una conversación

-Hola –aparto la mirada del celular y me miro sonriendo- si es acá, pero todavía
no aparece

-Si eso vi –algo obvio si el escritorio se encuentra vacío- No sabes el frio que hace afuera, casi me muero de hipotermia- solté para cortar un poco

-Uff sí, ¡no me digas! –rio- casi me caigo de todo el hielo que hay el piso

-Peor que lo que me paso el otro día no existe....

Continuamos hablando así por lo que fueron veinte minutos, la chica se llamaba Alicia y resultaba ser bastante agradable y muy inteligente. Al rato nos pusimos a hablar con las dos chicas que se sentaban atrás, una rubia alta muy parecida a mí, a excepción de que mi pelo era un tono más ceniza, llamada Emilia y otra morocha con las puntas teñidas que no paraba de hablar.

Nos llevábamos súper bien, eso era lo bueno de la universidad, ahora que deje de ser como antes, conocía gente distinta en todas las clases y se hacía un grupo de amigos de manera rápida

Media hora más tarde llego la profesora disculpándose por la tardanza, argumentando que el transito era de locos.

La clase se desarrolló con total normalidad, hablando de la unificación del nuevo código civil y comercial y demás. Pero hubo algo que me mantuvo atenta durante las dos horas de duración, sentía una mirada clavada a mi nuca como nunca antes. En un par de oportunidades me di vuelta y encontré a un chico mirándome fijamente, pero al ser sorprendido desviaba rápidamente la mirada.

Lo sorprendí unas cinco veces, era un chico bastante alto por lo que se veía, pelo castaño claro con algunas ondulaciones, y no de lo más corto debo decir, y unos profundos ojos claros que me producían un corto circuito cada vez que se posaban en mí.

Se encontraba haciendo garabatos en su cuaderno y al parecer no prestaba atención a lo que la profesora decía. La última vez que me di vuelta a mirarlo desvió la mirada y lanzo una sonrisa que me calo hasta los huesos

Cuando termino todo me distraje hablando con mis nuevas amigas, quise hablarle, pero se fue demasiado rápido, ahora ni siquiera se su nombre...

Volviendo a casa no podía dejar de pensar en su sonrisa, tenía que hablarle, era evidente que me había estado mirando, ¿o solo era mi imaginación?

Después de todo lo que ocurrió en mi pasado no era lo mejor interesarme en un chico, así que no le di importancia. Las siguientes clases, ni siquiera me voltee a mirarlo y me dispuse a hablar con mis amigas y escuchar la clase atentamente.

A las cinco clases lo mire nuevamente, estaba muy concentrado en una hoja mientras una chica lo molestaba y le pellizcaba el hombro. Los mire todo el tiempo. Ella era morocha, más baja que yo, ojos celestes y una sonrisa perfecta, no la había visto en los primeros días de clase, pero se nota que no le costó integrarse. Estaba riendo muy felizmente y le susurraba cosas en el oído al chico de las miradas, este fruncía el ceño, molesto, pero a veces no se resistía y lanzaba una risa y se revolvía el cabello.

Algo no estaba bien adentro mío, ¿Quién era ella?, ¿Quién era el y porque ocupaba mis pensamientos la mayor parte del tiempo?

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