Diario de un suicidio{Harry Styles.

Saqué la carta y el diario del bolsillo de mi suéter, y se los mostré, el se quedó sorprendido, y con manos temblorosas tomó la carta, la examinó unos momentos en silencio, hasta que la abrió cuidadosamente.
—Louis...—Susurré, el me miró, y asinitó, se paro y fue hacia su mesa de noche, en un cajón de esta, sacó una pequeña caja café que parecía algo antigua, luego de su cuello descolgo una llave que se encontraba en una cadena, puso la llave en la caja y la abrió, pude notar varias cosas ahí, para luego sacar la presiada carta en sus cosas, cerró la caja y se volvió a poner la llave en su cuello, me miró fijamente y luego me la entregó, la tomé rápidamente y la abrí, con mi corazón golpenado en mi pecho.
"Louis.
Se que ahora debes estar listo para leer las palabras que probablemente nunca te dije, se que ahora estoy muerta, y que al escribir estas palabras te duele tanto como a mí, pero Louis, estoy mejor acá.
Se que debes sentirte impotente y desgraciado, pero dejame decirte que no lo eres y que nunca lo serás, se que eres fuerte pero no lo demuestras, se que eres valiente pero no lo admites, Louis siempre serás ese angel guardian, me salvaste de muchas cosas, y ahora quiero agradecerlo, pero se que quizás te sientes mal por no haberme salvado de la muerte, pero dejame decirte que esto ya estaba destinado para mí, como algo mejor esta destinado para ti, no quiero que sufras, como tampoco quiero que llores, y tampoco quiero que estes solo.
Louis, eres tan importante para mí, me preocupas tanto, eres como un ángel quebrado, y yo siempre te dije que eran un ángel disfrazado de demonio.
Quiero que tengas por seguro que Jesús quiere que me aleje de ti, obviamente no soy buena para ti, como para nadie, tú debes conseguirte mejores personas que habiten en tú alrededor, porque yo estoy en la oscuridad, y se qué si quiero podría arrastrarte conmigo, pero no puedo, no quiero, nunca podría hacerte daño Louis, eres tan inocente, tan ingenuo, tan especial, eres tan hermoso, como por dentro y por fuera.
La sangre que compratimos se ha ido, pero las cicatrices de una verdadera amistad siguen marcadas en nuestras muñecas, tú me dijiste que nunca te dejara ir, y ahora quiero decirte que nunca te dejare ir.
Todos pensarón que era perfecta y tú viste mi lado negativo, el lado que no estaba acostumbrada a mostrar, tú viste las lágrimas luego de la sonrisa.
Louis quiero que sepas las razones de mi muerte y veas cuanto me hiciste feliz.
He escondido mi diario debajo de mi cama, debajo de ella, hay un cajón secreto, si quitas la alfombra con lo que lo tengo tapado lo encontrarás, solo abrelo, ahí está.
Es toda mi vida, una vida llena de odio, de rencor, de dolor, llena de lágrimas, llena de perfección.
Louis tú nunca serás perfecto, porque la perfección no exite.
Tú siempre serás hermoso.
Con Amor.
Summer"
Despegué mis ojos lagrimosos de la carta, parpadenado algunas veces para detener el llanto que se aproximaba, pero al ver que Louis estaba derrumbado en su cama, llorando como un pequeño niño, mi corazón de partió, es tan fácil ver las sonrisas de las personas, pero siempre es dificl ver las lágrimas.
Es tan fácil dar golpes, pero es tan dificil dar abrazos.
Es tan fácil decir te odio, pero tan dificl decir te amo.
Me acerqué a el, con lágrimas en mis ojos, y lo abrazé acurrucandolo en mi pecho, era tan inocente y solo necesitaba un poco de amor.
—Harry—Louis susurró mirandome entre sollozos.
—¿Qué sucede?—Acaricie su mejilla con ternura.
—Ella hablaba de esto...
Ví como se levanto la manga de su pijama y pude verlas, tenía demasiadas cicatrices, y algunas estaban de un color rojizo las cuales apenas se acababa de hacer, aprete mis ojos con fuerza, y aleje un poco de mí a Louis, haciendolo quedar sentado sobre la cama, y yo me acomode frente a el.
Tomé su muñeca entre mis manos, y pase las yemas de mi dedos por las cicatrices, mientras el lloraba descontroladamente, y mirandolo fijamente a los ojos, le besé las marcas.
—Se que son marcas de guerra...—Frunció su ceño.
—De guerras contra ti mismo.

Louis se quedó dormido a mi lado, mientras me disponía a mirar el techo y pensar un poco sobre todas las cosas que ahora estaban sucediendo, todo esto me tenía tan confuso, estaba comenzando a artarme, estaba comenzando a desesperarme, me encontraba en un callejón en donde no veía la salida, suspiré con cansancio, y me levante de la cama teniendo algo de cuidado pero fue inútil ya que Louis abrió los ojos, asustado.
—Shh, tranquilo Lou, duerme—El asintió y volvió a cerrar los ojos, acurrucandose entre las sabanas.
Tomé la carta y el diario, y abrí la puerta para salir.
—Adios, Harry—Murmuró adormilado Louis, sonreí.
—Adiós—Salí por la puerta y baje las escaleras, me tope con Jay, me despedí de un beso de ella, y luego noté la hora en el reloj que colgaba del techo del living, eran las 10:30 seguro mi mamá me mataría por llegar tan tarde en días de escuela.
Comencé a caminar rápido entre las frías calles y solitarias de Londres, mi mente no dejaba de atormentarme, hasta el punto de dolerme, creo que me dolían los pensamientos.
Al llegar a casa, entré rápidamente con la esperanza de no encontrarme con mamá, pero no tuve tanta suerte, ella estaba sentada en el sofá que daba la vista a la puerta, al verme se cruzó de brazos y me fulminó con la mirada, me quedé de pie mirandola fijamente esperando algún regaño, o cualquier otra estupidez que tuviera que decirme para poder irme a dormir.
—¿Dónde has estado?—Su tono de voz fue duro y fuerte, estrangulador, me daba escalofríos y estaba a varios metros de distancia.
—Estaba con Louis—Ella frunció su ceño, y apretó sus labios.
—¿Por qué tardanste tanto?, estaba preocupada por ti—Asentí y caminé unos pasos hacia las escaleras, mientras ella me seguía con la mirada.
—Estaba hablando sobre Summer y las cartas—Su vista bajo hacía el diario y la carta que mantenía en mi mano, al ver eso, las escondí en mi bolsillo.
—¿Qué es eso?—Preguntó claramente refiriendose a las cartas, fruncí el ceño.
—¿Qué?—Ella me miró aún mas mal, y se levantó para quedar frente a mí, me intimidaba.
—¿Qué tienes ahí?—Señaló con su mirada mi bolsillo, y me comencé a remover incomodo.
—Un diario—Ella quizó sacarlo de mi bolsillo, pero me aleje.
—Muestramelo.
—No—Dije entre dientes, esto me estaba asustando.
—Harry—Repitió con un tono mas amenzador, y me aleje aún mas de ella, temblando.
—No es mío, es de Louis.
—¿Por qué lo tienes tú?—Estiraba su mano hacía mi, con intenciones de que se lo diera, pero eso no pasaría.
—Me lo prestó.
—Harry.
—¡Basta, dejame!—Le grité y corrí escaleras arriba, entré a mi habitación y la cerre con pestillo tras de mí, mi corazón latía fuertemente, y mi respiración estaba entrecortada, mientras temblaba como gelatina, me desplome en la cama, y saqué el diario de Summer.
Lo sostuve entre mis manos mirandolo fijamente y lo abracé en mi pecho mientras las lágrimas comenzaban a salir de mis ojos, la extrañaba cuanto la extrañaba, extrañaba sus besos, sus susurros, sus lágrimas, su voz, sus abrazos, sus mensajes por las noches, los murmuros, las miradas, las sonrisas, la extrañaba completamente a ella, estaba enamorado de ella, la quería tener de vuelta, quisiera irme con ella, a su lado, por siempre juntos.
Los sollozos comenzarón a salir sin permiso de mi boca, me acurruque en la cama, y solo me deje llevar por la tristeza y mi corazón roto, me deje llevar por los miedos y la inseguridad, me deje llevar hasta caer, porque estoy solo, y simplemente ya no quiero estarlo, estoy cansado de sentirme solo, de no poder encontrar la paz y la luz, estoy oculto en las sombras que Summer dejó para mi.
Abrí el diario y lo puse en la página siguiente, para poder continuar leyendo.
Cababa mi propia tumba.
18 de Noviembre del 2012.
"Querido Diario:
Te juró que ya no puedo más.
La vida me ha pagado mal, la suerte nunca ha estado de mi lado, es como si todo lo que estoy pasando lo estoy pasando por algo, llevo años esperando el arcoíris, pero me he cansado de esperarlo.
Zayn se ha enterado de que lo engañe con Niall y de la peor manera.
Llevó varios días en los cuales nos estamos viendo por las noches y es por eso ya no he escrito en ti.
Niall me ha sitado varias veces en su casa y nos hemos visto, y echo el amor, porque el y yo no hacemos otra cosa más que el amor, me siento bien con el, me siento viva, me siento amada, me hace sentir que por un momento soy perfecta, aún y con todos mis errores.
Pero ayer por la noche Zayn me siguió y se topó con la grata sorpresa de que me estaba viendo con Niall pero no fue entonces que me reclamo, fue cuando llegue a casa por la madrugada, el ya estaba en mi habitación, me reclamó, me dijo que era la cosa más asquerosa del mundo, que era una zorra, una maldita perra, y me golpeó.
Luego me arrojó a la cama, y comenzó a desnudarme y desnudarse mientras pasaba sus manos por mi cuerpo, notó los cortes pero no dijo nada, no como Niall que cuando los notó, no me juzgo, simplemente me amo, pero Zayn me lastimó, me uso, me hizo suya, me marco como de su propiedad pero nunca seré suya completamente.
Los cortes han vuelto, y ya no he sabido nada de Eleanor cuando le dije que tenía algo con Niall, creo que piensa que soy una zorra, pero solo necesito amor, estoy deseosa de amor, uno que nunca podré tener."
Apreté mis puños con fuerza, y maldecí a Zayn, ese maldito.

El sol topó en mis ojos, maldecí no haber cerrado las cortinas ayer por la noche, refregué mis ojos, y los intente abrír, vostezé, y volví a cerrarlos.
Deprimente me levanté de mi cama, y me metí al baño para poder ducharme, me desise de mi ropa y entré al agua caliente, me estremecía pero era algo relajante, tomé mi rastrillo y lo examiné, tenía cuchillas, y pase el dedo índice por ellas, muchos decían que cortarse era algo sanador, pero yo lo encontraba algo inútil, solo lástimabas tú piel, te lástimabas más.
Salí de la ducha y comencé a hacer mis cosas rutinarias.
[ººº]
—¿Cómo está Louis?—Preguntó mi madre mientras ponía cereal frente a mí.
—Bien—Murmuré, ella frunció su ceño, y se sentó frente a mí suspirando.
—¿Qué te esta sucediendo, Harry?—La mire confundido.
—¿De qué hablas?—Susurré.
—Admite por favor, que no estás bien—Apreté mis labios, tratando de callar todo este dolor que cada vez se hacía más grande, y más doloroso para mí.
—Estoy bien—Susurré con la voz quebrada, apunto de romperme, pero me contuve, cerré mis ojos por un momento, y cuando los abrí ella me estaba viendo con lástima, con tristeza, con preocupación.
Me levanté y salí de la casa dando un portazo, al caminar unos cuantos pasos, saqué mi celular y marque el número de la casa de Louis.
—¿Louis?—Pregunté cuando me contestarón.
—Soy yo, ¿Quién habla?—Dijerón tras el telefono.
—Iré a casa de Madison, me perdere el instituto, pasaré por ti en veinte minutos, espero estes arreglado y listo—Colgé el celular, y lo guarde en mi bolsillo, caminando más rápido.
[ººº]
Toqué la puerta tres veces, y rápido Louis apareció frente a mí, lucía arreglado y asustado.
—Hace mucho que no te veía así—El asintió, y luego me sonrió, para salir por la puerta.
Nos giramos y comenzamos a caminar entre el frío.
—¿Sabes donde vive Madison?—Asentí.
—Varias veces Summer lo menciono.
[ººº]
Era una casa rustica y con grandes ventanales, nos paramos frente a la puerta y toqué.
La puerta se abrió minutos después, hasta pensé que no había nadie en casa, una señora de cabello rubio y ojos verdes nos abrió, pero se oculto tras la puerta.
—¿A quién buscan?—Preguntó al vernos, inspeccionandonos con el ceño fruncido.
—¿Se encuentra Madison Johnson?—Asintió.
—Soy su madre, ¿Para qué la buscan?—Abrió más la puerta, dejandose ver más.
—Queremos hablar con ella, somos amigos de Zayn Malik y Niall Horan, ya sabe, hablar sobre... em...—Carraspeé incomodo.
—Summer Black—Terminó de decir Louis.
—Pasen, por favor—La señora nos abrió paso, y luego fuimos hacía el living, ahí nos sentamos en grandes sillones de piel café.
—¿Por qué quieren hablar con ella sobre la chica?—Preguntó en un susurró, pareciendo misteriosa.
—Es sobre la carta—Susurré.
—Estabién, pueden ir a verla solo les aviso que se encuentra un poco mal, la hemos tenido que llevar al psicologo cuatros veces, y el ha dicho que tiene que entrar a un centro psquiatrico—Tragé duro, y vi como Louis fruncía el ceño apretando sus labios.
—¿Centro psiquiatrico?—Ella asintió.
—Mi hija tiene problemas—Susurró, luego se paró, y nos hizo una seña con su mano para que la siguieramos, cuando la seguimos, nos llevó hacia el segundo piso hasta estar frente a una puerta color azul, ella con expresión asustada y preocupada abrió la puerta despacio como procurando no asustar a la chica que se encontraba tras esta.
—¿Madison?—La señora preguntó abriendo un poco la puerta.
—Ah, aquí estas—Nos sonrió, y luego nos hizo señas para pasar, luego ella murmuró algo y salió por la puerta cerrandola.
Tragé duro al ver a Madison sentada en una esquina de la habitación con su cabeza entre sus rodillas y sus brazos rodeando sus piernas, meciendose de un lado a otro.
—Madison—Le hablé mientras trataba de acercarme muy lento a ella, ella rápido levanto su cabeza, y pude notar unas grandes ojeras y un rostro muy delgado, mi corazón se detuvo un momento, mirandola con dolor y mucha preocupación.
—¿Harry?—Preguntó en un susurro, mirandome con admiración, me aleje más de ella, mientras Louis estaba parado en la puerta con su mirada llena de miedo.
—¿Eres Harry Styles?—Asentí mientras retrocedía cada vez que ella se me acercaba más.
—¿Qué haces aquí?—Dejo de caminar hacía mi, para luego mirar en dirección a Louis y fruncirle el ceño.
—Vine a hablar—Tragé—Sobre Summer—Ella abrió grandes sus ojos, y luego las lágrimas aparecierón.

Tomó mi mano la cual estaba mojada por limpiar sus lágrimas, mi corazón latía fuertemente que hasta podía jurar que el pecho me dolía, me sentó al borde de su cama, y ella se sentó junto a mí, fijo su vista a Louis y le sonrió debilmente, parecía que su sonrisa estaba quebrada.
—Sientate, Louis—Ella señaló la silla de su escritorio, el asinitó y tomó asiento frente a nosotros, ella volvió a mirarme, podía ver el dolor reflejado en sus ojos, algo oscuro.
—Summer nunca fue la chica que solías ver—Susurró, miré a Louis de solsayo y el tragó duro.
—Lose—Susurré.
—No, Harry, no tienes ni la menor idea de lo que hablo—Fruncí el ceño, ¿Más secretos?.
—¿A qué te refieres?—Ella tapó mi boca con su dedo indice, y con su otro dedo lo puso en su boca, susurrando un "Shhh".
—Ella puede oírte, habla más bajo—La sangre se me enfrío, Louis se removío incomodo en su silla.
—¿Quién?—Pregunté en un susurró casi inaudible.
—Summer—Ella fijó sus ojos hacía tras de mí, hacía la puerta y mi cuerpo se estremecío.
—Harry—Louis se paró de inmediato, lo tomé de la mano y lo obligue a que se sentará.
—¿Está aquí?—Ella negó, mientras volvía su vista a mí.
—Está tras la puerta, puedo oírla susurrar cosas, te esta llamando—Mis pulmones se vaciaron derrepente dejandome sin respiración, asfixiandome.
—Siempre está Harry—Golpeó con su dedo su cabeza—Ella controla mis pensamientos—Susurró.
Harry, Harry, mirame, Harry, te amo, siempre serás el único, eres tan especial, Harry, Harry...
—Ella dice Harry—Dice Madison y por un momento creo escuchar su voz, está en mi cabeza, quiero que se aleje.
—Harry, te quiero, no creas en lo que te dicen—La puedo escuchar, pero no quiero, ella me ha fallado, tapo mis oídos con las palmas de mis manos.
—Ella dice que estoy loca—Madison comienza a reír.
—Harry—Escuchó a Louis pero su voz se asemeja a la de Summer, esto no está pasando, quiero irme de aquí, ahora, tengo miedo de lo que pueda haber tras la puerta, tengo miedo de todo.
—Ella dice que no creas en la chica nueva, que le preteneces, que...
—¡Cállate!—Explotó poniendome de pie, la tomó de ambas muñecas y se las aprieto con fuerza, ella chilla.
—¡Me lástimas!—Las lágrimas comienzan a salir de sus ojos.
—Ella me lástima más—Murmuró con los ojos llorosos, me estoy desmoronando, necesito, la necesito—¡Dile que se vaya!—Le gritó a Madison, ella cierra sus ojos con fuerza—¡Diselo!
—¡No puedo!, ella me está diciendo que no te escuche—La suelto bruscamente de las muñecas, y Louis se me acerca a abrazarme y le correspondo pero el nudo de la garganta no se va, sigue ahí atormentandome, el hueco sigue ahí, la oscuridad sigue ahí, estoy aterrado como un pequeño niño de cinco años y esto es patetico, ¿Ella está aquí?.
Me separó de Louis, y me le acercó a la rubia.
—¿Cómo sabe de Destiny?—Le preguntó, y ella me mira con temor.
—Te ha visto con ella.
—¡Ella no existe!—Le gritó a Madison, se sobresalta y trata de irse, pero la detengo y la empujo contra la pared.
—Harry calmate—Louis toma mi hombro, y lo aprieta con fuerza, pero no funciona.
—Quiero la carta—Habló entre dientes, ella niega con la cabeza.
—No puedo dartela—Subó mis manos hasta su cuello y lo aprieto.
—Harry—Louis vuelve a advertir, pero no funciona.
—Damela—Susurró, mientras las lágrimas salen de mis ojos, odio ser débil, y que me vean llorar, odio esto.
—Esta bien—Muy apenas puede hablar, la suelto, y caí al suelo de rodillas, gatea por el piso, y llega a una caja bajo la cama, la abré y saca la carta, me la extiende con manos temblorosas, la tomó bruscamento, y la examinó.
—Vamonos—Murmuró a Louis y el asiente, tomó la perilla de la puerta, y me giró dandole una última mirada a Madison.
—Si lees la carta, no la leas solo—Murmura mientras se abraza a si misma, en la misma posición como la encontramos.
—Entrarás a un pozo sin salida, Harry—Susurrá.
—Yo ya estoy ahí.
Me giró a la puerta, con mi respiración entre cortada, mi mano tiembla, y la giró, pero cuando la abró nadie está tras la puerta, mi corazón late aliviado, y Louis y yo, salimos por la puerta, el cierra la puerta tras el, y caminamos, pero antes, me giró y miró hacia la puerta, pero no veo nada.
Quizás Madison está loca, quizás los fantasmas existen, quizás Summer volvió para hacerlos pagar, pero eso suena tan estúpido, pero Madison mencionó a Destiny, y esto es una locura, que me confunde, como si alguien tratara de enloquecerme, y lo está logrando.
Las escaleras las bajamos rapido, me siento desesperando, asfixiado, siento que el aire me falta, siento que estoy ardiendo en llamas, veo a la Señora Johnson, pero salgó rápidamente por la puerta, escucho como Louis le murmura algo, y supongo es el adios.
Mis pasos son rápidos por la acera, Louis me sigue desesperado tras mío, me alcanza por el brazo y me detiene.
—¿¡Qué mierda te pasa!?—Me sueltó de su agarre y salgo corriendo, dejandolo varado en medio de la calle.
No se ha donde me dirijo, mis pies me llevan solos, siento que necesito algo, no, necesito a alguien, depronto estoy parado en medio de la calle de Destiny, comienzó a mirar las casas, sin saber cual es la suya, la necesito, ahora, la veo de lejos, es ella, estoy seguro, está sacando la basura creo, corró hacía ella.
Estoy tan cerca, me detengo cuando la tengo en frente.
—Destiny—Susurró, mi voz muy apenas se escucha, ella me mira sorprendida.
—¿Harry, que hac...?—La tomó entre mis brazos, y escondo mi cara en su cuello, dejandome ir, desmoronandome, llorando, y sollozando fuertemente, como un pequeño niño con temor, con temor de todo, de la oscuridad en la que se encuentra, ella me corresponde unos segundos después, y siento sus brazos rodearme, y me siento protegido, aspirando su olor a vainilla, la aprieto más contra mí, solo... no quiero separarme de ella.
[ººº]
Estamos en su habitación, tengo un vaso de agua en mi mano, ella está a mi lado, tomando mi otra mano entre sus dedos, puedo notar de reojo que me mirá fijamente, pero yo tengo mi vista centrada en su espejo que esta frente a mí, inspeccionandome, tengo ojeras, y los ojos rojos, al igual que mis mejillas y nariz, paresco una persona loca, desquiciada, chiflada, pero solo estoy un poco roto.
Le doy el vaso de agua, y me recuesto en su cama, mirando el techo, es azul, tiene nubes pintadas en el, como si estuviera viendo el cielo, se ve tan real, suspiró, y siento como ella se recuesta a mi lado, derrepente, siento su respiración en mi cuello y eriza mi piel, cierro mis ojos con fuerza y luego los relajo, se acerca más a mí, y nuestras manos estan etrelazadas.
—I remember tears streaming down your face,When I said, I'll never let you go,When all those shadows almost killed your light,I remember you said, Don't leave me here alone,But all that's dead and gone and passed tonight—Ella comenzó a cantar por medios de susurros, la piel se me erizaba al contacto de su aliento contra ella, me estremecía, mientras continuaba con su sútil melodía.
—Just close your eyes,The sun is going down,You'll be alright,No one can hurt you now,Come morning light—Y eso hice, cerre mis ojos, pensando que todo estaría bien, depronto deje de pensar en todo lo demás para concentrarme en su delicada voz, cantandome.
—You and I'll be safe and sound—Sanos y salvos, estaríamos los dos, sanos y salvos del dolor.
—Don't you dare look out your window darling,Everything's on fire,The war outside our door keeps raging on,Hold on to this lullaby,Even when the music's gone, gone—Abrí los ojos mirando el techo, y me imagine el cielo... estoy flotando.
—Just close your eyes,The sun is going down,You'll be alright,No one can hurt you now,Come morning light,You and I'll be safe and sound—Se detuvo, y aspiró en mi oido, volviendome loco con su delicado acto, quisiera poder...
Me giré quedando frente a frente, y la miré, tan hermosa.
Me acerqué un poco, rozando sus delicados, y suaves labios, delirando ante el tacto, disgustado por querer más, cerré mis ojos, disfrutando aquello, pero cuando los abrí, la vi frente a mí, me estaba sonriendo.
—Summer—Susurré.
Me aleje de inmediato de ella, mientras mi pulso se aceleraba, sentía como me estaba faltando el aire otra vez, ella tomó mi mano, pero ya no era Summer, era Destiny.
—¿Harry?—Preguntó con evidente miedo en su voz, me sentí depronto muy mareado, necesitaba aire.
—Me tengo que ir—Ella aferro su agarre, negando con preocupación.
—Dejame ir—Me soltó, y así, salí corriendo por la puerta, buscando una liberación de las sombras que me acompañaban atormentandome, Summer poseía mi cuerpo, mi mente y mi corazón, tengo muy presente que nunca la olvidaré, y que la tengo marcada en la piel, ¿Cómo borrar algo que tengo impregnado en todo mi ser?.

La única luz que iluminaba la habitación era la de la luna, la ventana estaba abierta por la cual el aire se colaba causandome escalofrios, las sabanas se encontraban en el suelo, al igual que mi autoestima; mis labios estaba secos, y mis ojos desprendían pequeñas lágrimas, tenía la ligera sensación de estar muerto.
Las palabras de Madison rondaban en mi cabeza, me acuchiban, cuando ya no podía estar más acuchillado; las pequeñas cosas que pase junto a Summer me atormentaban, cuando ya no podía estar más atormentado, sentía como algo me mataba cada día más, cuando yo en realidad ya estaba muerto.
Mi cuerpo se sentía pesado, no quería pararme de mi cama, la vista la mantenía en el techo, oscura habitación, silencio sepulcral, solo, completamente solo.
"Si lees la carta, no la leas solo"
Pero aunque esté con alguna persona a mi lado, luego estaré solo, y las palabras escritas me atormentarán, me matarán un poco más.
Me levanté despacio de la cama, el viento revolvía mis rizos, y secaba cada vez más mis labios al igual que las lágrimas.
Pase la vista por toda la habitación, topandome con sombras y otras cosas que para la imaginación parecían escalofriantes, sabía que lo que Madison dijo era falso, los muertos no regrasaban, o eso es lo que creo yo.
Me paré de la cama, sientiendo un peso en mí, algo no quería que leyera esa carta; fuí hacia mi suetér y la saque, estaba arrugada, maltratada, la abrí despacio, era de color rojo, como la sangre.
Me volví a sentar en la cama, pero ahora me cubrí con las mantas, prendí la lampara de mi lado, y abrí la hoja en blanco, noté algo extraño al verla, esta letra me parecía algo extraña.
"Madison:
Como decirte exactamente lo que siento, como decirte todo lo que tengo guardado ahora en el pecho, como decirte que gracias a ti, mi vida esta cada vez más fría, más oscura, una vida sin vida, ¿Ironico no?, como decirte que me estoy muriendo, y todo por tú culpa.
Las palabras correctas para decirtelo, serían Te Odio, y si en parte, te odio, te odio con toda mi alma, si tuviera un deseo, desearía que estuvieras muerta, ¿Pero, estás muerta?, No, claro que no, Yo soy la que estoy muerta.
Si hubieras visto la hermosa sangre que emanaba de mis heridas cada vez que tú me insultabas, quizás te hubieras arrepentido, pero el hubiera no existe, y el perdón de mi parte nunca lo obtendrías, y nunca lo obtendrás.
Espero verte pronto a mi lado, quizás muerta, quizás viva, o quizás un poco de las dos.
Todas esas burlas, todas esas estupideces que alguna vez me hiciste, te las haré, pero tres veces peor, aún después de mi muerte haré que te arrepientas de todo este daño, estoy quebrada por tú culpa, estoy cubierta en sangre, estoy muerta.
Quizás pensaste que te daría una estúpida carta de Te perdono, pero todo eso lo he mandado a la mierda, tú eres mierda, ojala estuvieras muerta, ojala sintieras lo que yo, ahora.
Apuesta a que esperas las razones d emi muerte, tú eres una razón de está muerte, pero eres tan curiosa, tan egocentrica, tan egoísta y estás tan sola, que siempre ocupabas tú vida, haciendo la mía un infierno, saldré de un infierno, ¿Para entrar a otro?
He escondido mi diario debajo de mi cama, debajo de ella, hay un cajón secreto, si quitas la alfombra con lo que lo tengo tapado lo encontrarás, solo abrelo, ahí está.
Es un diario de mi sucido, un diario donde tú estas presente, donde sabrás cuanto daño me causaste, y quizás te arriepientas, o quizás no, no eres tan fuerte ahora, ¿No?.
Las palabras matan Madison, quiero que sepas eso, y ahora quizás solo quizás te odies a ti misma, espero haberlo logrado, espero que ahora estés sola, como una idiota, sola, como yo en algún momento lo estuve, sola, tú siempre estuviste sola, nunca tendrás nada, lo cual yo tampoco tuve, ojala nunca encuentres el amor, eso yo si lo tuve, pero tú, tú me das lástima, y por eso ahora después de mi muerte, te haré sufrir, ojo por ojo, querida Madison.
Te veo en el infierno, perra.
Con Amor y mucho odio.
Summer Perfecta Black."

Tiré la carta después de acabar de leerla, dejandola volar por el viento que emanaba de la ventana abierta, me tiré a la cama, fijando mi vista al techo, soltando toda mi frustración con un sonoro suspiró, llevé las palmas de mis manos a mi cara, dejandolas un rato ahí, mientras mis mente estaba en blanco, pero no duraba mucho así, luego de un tiempo los recuerdos volvían, y todo volvía a empezar, pasé mis manos a mis desordenados rizos, jalandolos con fuerza, necesitaba algo mejor que esto.
Me paré de la cama con cansancio, divise de lejos el reloj en la mesa de noche, 3:00 en punto se notaba con números grandes y rojos, mordí mis labios desesperadamente, caminando de un lado a otro por aquella muerta habitación, mis piernas dolían por alguna extraña consecuencia, pero quizás solo era mi imaginación.
Abrí la puerta de mi baño, y entre a el, cerrandola despacio, sutilmente, como si quisiera que nadie notara el pequeño delito que estaba apunto de cometer, solo quería saber que se sentía, mi mente lo pedía a gritos, pero mi corazón me hacía razonar impiendomelo.
Mi respiración se hizo más profunda, encendí la luz, y pico en mis ojos, haciendolos más pequeños, acostumbrandolos a la luz cuando ya estaba acostumbrado a las sombras, fije mi reflejo en el espejo, sorprendiendome de mi estado, me notaba más delgado, más pálido, más, ¿débil?, las ojeras se pronunciaban, y mis labios estaban rojos e hinchados a causa de mi acto reciente, mis ojos estaban rojos escondiendo el color esmeralda que siempre tenían, ¿Qué había sucedio conmigo?.
Apreté mis puños fuertemente, y la furia se apodero de mí, levanté lentamente mi puño derecho, grité con todas mis fuerzas, estrellando mi puño en el espejo, rompiendo mi reflejo, rompiendome en mil pedazos como me encontraba ahora mismo, la sangre empezo a salir de mis nudillos, una sonrisa de satisfacción se formo en mi rostro, y por primera vez sentí como toda la frustración se iba, me abandonaba y me fundía en la paz, me senté en el suelo, enterrando en mi piel varios vidrios, pero no me importo en lo absoluto, no me importo nada mientras veía como la sangre salía, escurriendo por mi mano, llegando al suelo, machandolo, dejando marcas de guerra.
La puerta de pronto me empujo un poco, ya que me encontraba recostado en la puerta del baño, me moví lentamente cerrando mis ojos por el dolor, y de ahí entro mi madre, su rostro expresaba preocupación, y al verme se llevó una mano al pecho y la otra hacía su boca.
—¡Dios, Harry!—Exclamó asustada al verme, se agacho un poco a mí.
—Jesús, Harry, ¿Qué sucedió?—Sus manos quisierón tocar mi herida, pero me aleje.
—No, ven, tengo que curarte, ¡Mirate, por dios!, mirá este desastre—Paseó su vista por todo el baño, y luego la volvió a mí.
Era cierto, soy un desastre.
—Ven—Extendió su mano, pero aleje mi vista de ella, apretando mi mano herida contra mi pecho, como si fuera lo más importante—Hijo, por favor, estás preocupandome—Tomó mi cara e hizo que la mirara.
—No estás bien cariño, por favor, ven—Su voz era aguda, llena de angustía, hablandome lento, como si de un niño se tratasé.
Negué con la cabeza, e hice un puchero.
—Mamá—Hablé con las lágrimas saliendo, ella me ayudó a pararme y salimos de ahí, me sentó en la cama, y ella fue en busca al baño de -supuse- el botiquin de primeros auxilios.
Ella volvió, y me miró, llena de lágrimas, se sentó junto a mí y me sostuvo entre sus brazos, balanceandome como si fuera un pequeño, eso me sentía ahora, un pequeño.
—Todo, está bien, ahora, todo está bien.
¿Todo está bien?."

|Destiny|
Dí una última mirada a mi reflejo, unos jeans rosas, junto a un suéter tres tallas más color morado, mis converses morados, y mi cabello suelto, hice una mueca y salí de mi habitación con el celular en mi mano.
—¿A dónde Des?—Llamó mi padre, sentado en una silla del comedor, con sus anteojos, y su vista fija en el periodico, suspiré.
—Iré a ver a un amigo—Frunció su ceño, pero no me miró, mi madre quien lavaba los trastos me miró con picardía, haciendo que mis mejillas tomarán un color carmín.
—Bien, llamamé si llegas más tarde, o si pasa algo—Me miró y luego me sonrió—Ten—De su bolsillo del pantalón, saco unos cuantos dolares y me los extendió, me acerque sigilosamente a el, y con gusto los acepte, sonriendole devuelta.
—Prometo que llegaré temprano—Murmuré, el asintió, y volvió su atención al periodico.
Salí casi corriendo de la cocina, y antes de salir mi madre me gritó.
—¡Divierteté, cariño!
El frío me azoto al salir, me estremecí y camine por la acera, saqué mi celular, buscandolo entre mis pocos contactos.
—¿Hola?—Apreté mis labios.
—¿Zayn?
—¿Destiny?
—Emm, si soy, yo, emm, te hablaba porque iba a buscar a Harry a su casa, pero no se donde vive exactamente, supongo que tú lo sabes, ¿No?—Mi voz sonó temblorosa, y me golpeé mentalmente por eso.
—Oh, sí—Se escuchó un poco decepcionado, pero centré mi atención en otra cosa.
{ººº}
Mi respiración era entrecortada, obviamente estaba nerviosa, llevaba tres minutos devatiendomé, en tocar o no la puerta, pero si no lo hacía la preocupación seguiría ahí, atormentandome.
Con pasos torpez me acerque a la puerta, toque tres veces, y espere, hasta que una chica unos cuantos años mayor que yo, me abrió.
—Hola—Me sonrió, y le regrese el gesto, algo -muy- nerviosa.
—¿Está Harry?—Tan solo pronunciar su nombre, algo revolvía mi estómago, haciendome sentir como una total estúpida.
Ella me miró con picardía, y luego asintió—Sí, pasa, está arriba.
Me hizó pasar, y luego hizo una seña guíandome.
—Mamá, alguien a venido a visitar a Harold—Solté una pequeña risilla, al escuchar como la chica lo había llamado, por el gran parecido, supuse sería la hermana de Harry.
Una señora de cabello negro, y jóven a mi parecer salió de una puerta, me miró de arriba a abajo, inspeccionandome, intimidandome, odiaba que me mirarán, no importa el tipo de mirada, odio que se fijen en mí.
—Hola, Soy Anne, la mamá de Harry—Me extendió su mano, no sin antes secarla con el madil que tenía puesto, le tomé la mano, estrechandsela, mientras en mis mejillas volvía el tonto color rojizo.
—Destiny Miller, compañera de clases de su hijo—Su mirada expreso ternura, y me sonrió.
—¿Trabajo?—Negué con la cabeza.
—Vine, solamente a...—Carraspeé— a visitarlo, si no le molesta, yo...
—¡Oh, claro que no!, ¡Adelante!—Sus manos señalarón las escaleras, y la chica la cual el nombre desconocía, tomó mi mano, haciendome subir las escaleras.
Pasamos por un pequeño pasillo, y frente a mí, apareció una puerta color marrón, ella tocó varias veces.
—¡Vete, Gemma!—La voz de Harry se escuchaba desganada y ronca, ella suspiró negando con la cabeza, haciendo una mueca, y supe que algo andaba mal.
—¡Alguien a venido a visitarte!—Gritó ella.
—¡Dile que se large!—Exigió el, "Gemma" bufó, dandome una rápida mirada llena de pena.
—Ahora abré, solo espera—Susurró, tratando de abrir la puerta, pero obviamente estaba cerrada con seguro.
—¡Es Destiny!—Pasarón unos cuantos segundos, donde se escuchó como algo se caía al suelo, y varias cosas moverse de lugar cuando la puerta se abrió.
Un Harry desaliñado, con ojeras, y con palidez extrema se presentó ante mí, con una sonrisa tímida trató de acomodarse sus desordenados rizos, y bajo un poco más su camisa, la cual se encontraba levantada dejando ver su abdomen, sus mejillas se tiñeron de rojo, al igual que las mías, Gemma soltó una risilla, y luego se alejo, bajando las escaleras.
—Hola—Murmuré apenada.
—Hola—Su voz sonó ronca por lo cual carraspeó—Pasa—Se hizo aún lado, dejandome entrar, su habitación también era color azul con un enorme ventanal adornado con una cortina color negro, una típica habitación de chico adolescente, se encontraba desordenada y con restos de comida, y ropa sucia o quizás limpia por todos lados.
—Sientaté—Miró alrededor—Donde haya lugar—Reí, y el me sonrió, bonita sonrisa.
Tomé asiento en el borde de su cama, el se sentó muy cerca junto a mí, incomodandome un poco, poniendome sonrojada.
Mi vista viajó hasta sus manos, una venda cubría su mano derecha, el jugaba con la venda mirando fijamente hacía el frente, tomé su mano, y la miré.
—¿Qué te paso?—Fruncí el ceño, el encogío sus hombros, mordiendo sus labios.
—¿Estás bien?—El soltó un pequeño bufido.
—¿Acaso te importa?—Solté su mano, sonrojandome.
—Por supuesto que sí—Susurré, el me miró, pero giré mi cabeza, apenada.
—No debo importarte—Susurró, y luego tomó mi mano, pero la aleje, no quería que el supiera, quizás se alejaría de mí, pensando que estoy loca—Lo siento.
—¿Por qué?—Fruncí mi ceño, mirandolo, mientras nos hablabamos por susurros, como si quisieramos que nadie escuchara esta extraña conversación, que de alguna manera en vez de hacerme sentir incomoda, me revolvía el estómago.
—Por tomarte la mano, fue... fue un impulso—Solté una risilla, y el me sonrió.
—Esta bien—Suspiré—¿Por qué no debes importarme?—Dije retomando sus palabras.
—No somos nada, apenas me conoces, y creo que lo mejor sería que te alejarás de mí—Bajo su mirada.
—No te entiendo—Dije confundida—Eres mi nuevo amigo, Harry—El me miro—No se que te suceda, no se tú historia con esa chica, pero solo... tengo la enorme necesidad de estar a tú lado y protegerte cuando lloras, esa vez te veías muyr frustrado y solo se me ocurrió cantarte al oído, como las mamas a sus hijos, solo se me ocurrió abrazarte y acurrucarme a tú lado, porque sentía la necesidad de estar contigo y hacerte sentir bien, decirte que todo estaría bien.
El se mantuvo callado un momento, mirando al suelo, y luego fijo su vista en mí.
—También sentí eso, la necesidad de estar a tú lado—Mis mejillas tomarón color, pero no lo deje de mirar—Pero, todo esto es tan prepaturo, y no quiero apegarme demaciado a ti, eso sería meterte en mis problemas, solamente quiero que te alejes, Destiny, no soy bueno para ti.
—No busco algo más que no sea amistad—El se sonrojo.
—Sabemos que esto no va para ese punto, no tenías porque decirlo—Dijo, apenado.
—Solo no quiero que confundas las cosas—Me sentí una estúpida.
—Creeme que no las confundiré—Me miró—Nunca te podría amar.
Auch, sentí algo contraerse en mi interior, y mi garganta dolió, baje la mirada.
—¿Qué esta mal, entonces?—Las lágrimas las podía sentir venir, no era fuerte pero podría fingir que lo soy, almenoz por unos minutos más. Me dolía aquella sensación del rechazo de las personas.
—Solo... no lo se, no quiero hacerte daño.
—¿De qué forma me lo harías?—Pregunté.
—Eres muy inocente, linda, y tierna, Destiny, y yo soy todo lo contrario, tengo problemas—Lo miré, mientras las lágrimas corrían por mi rostro.
—También los tengo—Me paré de su cama, pero el tomó mi muñeca.
—No quiero que llores, apenas nos conocemos, esto es estúpido, lo sabes—Limpié mis lágrimas, y me traté de soltar, pero el me tomó aún más fuerte.
—Sueltame—Hablé con la voz débil, se paró de la cama y me abrazó a el.
—No te vayas—Susurró conra mi oído—Olvidaté de esa mierda que te he dicho—Me abrazó más fuerte—Te necesito.

Se encontraban acostados en la cama, Harry miraba el techo, mientras Destiny respiraba en su oído, haciendolo estremecer, ella depronto se paró, pero el sujeto su mano.
—No te vayas—Susurró Harry, ella le sonrió tímidamente.
—Le dije a mi padre que llegaría temprano—Hizo una mueca—Debo irme.
Harry soltó su muñeca sutilmente, y también se paro de la cama, viendo como ella tomaba su celular, y acomodaba su despeinado cabello.
Ella se giró topandose con la mirada esmeralda de aquel chico misterioso, el fijo su mirada a los ojos de ella, perdiendose un rato en un mundo sub real.
—Adiós—Murmuró ella, el se paró de la cama, y fue a su lado, poniendose justo en frente.
—Sí, adiós—Las miradas chocaban, y el silencio decía mas que las palabras, pero el no se atrevía, y ella simplemente ya no quería volver a sufrír, Destiny se acercó lentamente a el, con la mirada puesta en su mejilla, queriendo despedirse como unos amigos cualquieras.
Harry pareció comprender lo que ella quería hacer, así que también se acerco, un poco, la acercanía hacía que sus corazones latieran con fuerza, y el ambiente se pusiera más tenso, algo había en esa chica que lo atraía demasiado, pero no físicamente, había algo en sus ojos que hacían que el quisiera saber su pasado, algo ocultaba, pero no le importaba, o quizás no quería descubrirlo, no quería ser decepcionado, otra vez.
El beso fué lento, lleno de sentimientos, ¿Crees en el amor a primera vista?.
—Adiós—Destiny le sonrió, y abrió la puerta, saliendo por ella, con su corazon golpeando fuertemente en su pecho, y todos sus vellos erizados, se sentía una tonta, bajo rapidamente las escaleras, nadie se encontraba ahí, así que solo se dispuso a irse, abrió la puerta, pero al salir se topó con un chico.
—Oh—El se sorprendió, era castaño de ojos azules, y piel pálida.
—Lo siento—Murmuró Destiny, quedando frente a el, sonrojada, mientras a el, también se le teñian las mejillas.
—¿Está Harry?—Preguntó apenado el, bajando la mirada.
—Sí, creo que su mamá no, pero supongo que puedes pasar—Ella se hizo aún lado, dandole espacio para que el chico pudiera pasar.
—Sube, adiós—Dijo ella rapidamente, saliendo por la puerta, ya era algo tarde, y seguro su papá, la mataría.
{ººº}
Harry miraba fijamente el techo de su habitación, pensando en Summer.
Louis lo veía fijamente a el, devatiendose en si preguntar o no.
—¿Cómo se llama la chica con la que me tope?—Harry lo miró rapidamente, mientras los pensamientos se disolvían, haciendolo olvidar completamente de aquel tema.
—Destiny, ¿por qué?—Su voz pareció a la defensiva, pero Louis la ignoró.
—Curiosidad—Susurró, Harry frunció su ceño, sabiendo a donde llegaría esto.
—¿Te gusto, no?, apenas la acabas de ver—Harry bufó.
—Si, como sea, solo preguntaba, es linda—Comentó el castaño, jugando con sus dedos algo nervioso.
—Lo es—Afirmó Harry.
—¿Sales con ella?—El rizado se levantó algo aturdido de su cama.
—Claro que no, sería como faltarle el respeto a Summer—Louis quizó revolver los ojos pero se contuvo, Harry se aferraba a una ilusión.
—Quizás yo deba salir con ella, ¿No?—Louis solo buscaba algún tipo de reacción por parte de Harry hacía esa chica.
—Haz lo que quieras.
—¿De dónde la conoces?—Volvió a preguntar un muy interesado Louis.
—Del instituto, es nueva, ahí la conocí, no creo que tenga novio, es linda, tierna, e inteligente, se donde vive, y no tiene hermanos al parecer, no tendrás problema en invitarla a salir, a exepción de su padre que al parecer es muy estricto, es muy extraña y creo que esconde algo, así que si no te molesta qusiera estar solo y dormír un rato, así que adiós.
—¿Tienes su número?—Harry cerró fuertemente sus ojos, desesperado por el interés de Louis hacía Destiny.

Escuche como mamá cerro la puerta se su habitación y rápidamente me levanté de la cama, en penumbras me agache debajo de ella, y metí mi mano debajo buscando el pequeño libro, cuando lo encontré volí a recostarme, enncendiendo la luz de la lámpara en la mesa de noche, le dí una pequeña mirada al reloj que también se encontraba ahí, 11:30, no era tarde, Louis se había ido tarde, la verdad ya no lo soportaba solo haciendo preguntas sobre Destiny y eligiandola como si fuera la chica más hermosa de la tierra, sin contar que lo tuve que soportar hasta la hora de la cena que fue cuando luego se marcho, queria un tiempo a solas para poder pensar en Summer, y este ahora era el momento.
Abrí el diario buscando la hoja en la que me había quedado la última vez, y cuando la encontre, comencé a leer.
19 de Noviembre del 2012.
"Querido Diario:
Ahora ya no se como expresarme aquí, todo lo que tuve lo he perdido, todo lo que alguna vez me hizo feliz, lo he perdido, todo.
Hoy, Zayn y Niall tuvieron una pequeña pelea, claramente por mi culpa, pero eso no ha sido lo que me ha dejado destruida, más bien, fue el hecho de que pensé que Niall era el correcto, pero al parecer le importó mas su amistad con Zayn y la popularidad que eso llevaba, a mí, el, que me prometió amor eterno, que me secó las lágrimas, que no me juzgo por mis cortes, todo eso lo mando a la mierda, pero no lo culpo, todos me mandan a la mierda.
¿Dónde mierda estará Eleanor?, me llevo preguntando eso por días, ya casi no la veo, y cuando la veo, se aleja de mí, otra promesa rota, otro corazón roto.
Así es mi vida, marcada de tragedías, marcada con oscuridad.
Solo espero que algo bueno pronto llegue, porque te juro, que ya no puedo más."

23 de Noviembre del 2012.
"Querido Diario:
Madison sigue jodiendome, estoy arta de esa pobre chica, no me deja empaz, sigue con sus estúpidas insinuaciones de que me he acostado con todo el maldito insituto, no se de donde mierdas saca todas esas mentiras, siempre ha sido la típica niña estúpida que me hace la vida imposible, con sus tontas mentiras e insinuaciones, y que ni se hable de su reciente acercamiento con Niall, al parecer el rubio se a olvidado completamente de mí, y ahora esta "saliendo" con esa rubia teñida, y claramente mi vida no podría ir peor."
Dí vuelta a la página, cuando escuche una puerta abrirse y luego pasos, apague la luz y me tape con la sabana hasta la cabeza, tiempo después la puerta volvió a cerrarse, y me destape encendiendo la lámpara de nuevo.
Pero me dí cuenta de algo, faltaban varias páginas, parecían estar arrancadas, fruncí el ceño, ojeando el diario pero no encontre nada, no había mas ojas sueltas, ni rotas, creo que faltaban unas cinco o cuatro páginas.
30 de Noviembre del 2012.
"Querido Diario:
No se como definiría hoy mi día, quizás fue bueno, quizás fue una completa mierda.
Me he cortado en el baño, pero eso no ha sido lo peor, el chico nuevo me ha encontrado cortandome, ese extraño chico que hace poco entro me ha visto, vió como la sagre brotaba, y lloraba en silencio, me sentí estúpida, no se como me deje llevar por mis impulsos, al verlo, sentí como todo mi imperfecto mundo se derrumbaba, por ese pequeño simple error.
Pero, no, el no salió corriendo, el no se burlo de mi papetica vida, y de lo mierda que soy.
El solo se sentó a mi lado, tomo mis muñecas, y luego me enseño las suyas, donde también había marcas.
Su nombre es Louis Tomlinson, y no se si dios lo haya mandado para mi bien, o para mi mal, pero se que ahora tengo un nuevo amigo, que no me decepcionara como ella lo hizo."
Y supe que fue cuando encontró a Louis.
El también vio a la verdadera Summer, y luego pensé, ¿Qué diran las cartas de Niall y Zayn?, ¿A ellos también les dolerían sus palabras?.

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1 de Octubre del 2012.
"Querido Diario:
Un poco muerta, un poco viva, como saber si entraras al cielo, como saber si entraras al infierno.
¿Soy mala?
¿Merezco morir?
¿Acaso esto es vida?
He platicado un poco con Louis a la salida del Instituto, lo he visto muy feliz, me ha invitado a ir a su casa, a pasar tiempo, como amigos, de todas formas no pienso que entre nosotros pase otra cosa, ya he sufrido varias veces, y el parece un buen chico, es como un pequeño niño indefenso con una sonrisa quebrada, parece un ángel... con las alas rota, como su corazón."
Me levanté con demasiada, demasiada pereza de la cama, me fije en el espejo de cuerpo completo, me veía más pálido, y mi cara de recién levantado no ayudaba mucho, hice una mueca y tomé rumbo hacia al baño, abrí la regadera acomodando la temperatura perfecta para el agua, muy caliente, amaba la sensación de mi piel contra el agua caliente, pude escuchar como mi celular empezó a sonar, y fuí a buscarlo.
Louis.
Dude en contestar, seguro quería hablarme de algún tonto sueño que seguro tuvo con Destiny, bufé y conteste.
—¿Hola?—Dije tras el telefono.
—¡Hey!—Exclamo, se oía muy entusiasmado.
—¿Qué pasa Louis?
—¿Recién levantado?, se nos hará tarde para el Instituto, amigo—Fruncí el ceño, ¿Se nos hará?
—¿Qué?
—Iré al Instituto, mi familia cree que es una buena idea, así que pense que podríamos irnos juntos, ¿Qué dices?—Abrí mis ojos sorprendido.
—Em, mi madre me lleva—No era cierto, quería toparme con Destiny y llegar juntos, no quería a Louis en medio de nosotros, estorbando, con su tonta sonrisa plasmada en su torpe rostro.
—No es problema para mí—Genial, ahora tenía que ir al insituto junto a el, probablemente soportando sus estúpidas preguntas sobre Destiny, hice una mueca.
—Tampoco para mí—Hablé entre dientes.
—¡Genial!, pasa por mí en cuanto estes listo, adiós.
—Adiós—Colgué y arroje el telefono hacia la cama.
[ººº]
—¡Me alegro que te animes a asitir al colegio, Louis!—Mi madre y Louis hablando sobre su nuevo progreso, bufé.
—Lose, mi madre parece orgullosa, señora Anne—Mi madre sonrió por el retrovisor.
—Seguro lo está—Volví a bufar, mi frente estaba pegada a la ventanilla del auto, revolviendo los ojos cada vez que podía, mientras Louis y mi madre sonreían y reían sobre cosas sin sentido.
—¡Oh, mirá Harry, Destiny!—Me enderezé de inmediato viendo hacia la calle, cierto Destiny caminaba con unos cuantos libros en mano, y su mochila colgaba en su hombro, miré a Louis de solsayo quien tenía una enorme sonrisa en su rostro, y fue cuando lo supe.
Louis solo había decidido venir al insituto por Destiny.
—Le preguntare si quiere que la llevemos—Murmuró mi madre mientras yo fulminaba a Louis con la mirada.
—¿Qué?, ¡No!—Los dos me miraron raro, pero luego me quede en silencio, mientras mi madre trataba de hacercarce a ella para poder hablarle.
—¡Destiny!—Le girtó, ella la miró, y luego le regalo una sonrisa, de esas que te dejan atontado por varios minutos.
Destiny se acercó al auto.
—¿Quierés que te llevemos?, aún hay lugar para una más—Ella soltó una risilla, y a mi lado Louis soltó un suspiro, estúpido.
—No, seré una molestía, señora Styles—Modesta.
—¡Claro que no!, también llevamos a un amigo de Harry, tú sube—Mi madre hizo una seña con la mano, y Destiny asintió mientras abría la puerta de mi lado, al verme me sonrió, mientras sus mejillas se sonrojaban, maldita ternura que la chica desprendía, me hice aún lado, acomodandome mejor para que cupiera, se sentó y luego miró a Louis, juro que note que sus mejillas se tiñeron aún mas de rojo.
—Hola—Louis se sonrojo, ¡Oh, genial!
—Ho-hola—¡Perfecto!, tartamudeeó.
A el le gusta ella, solo espero que a ella el no.

El pequeño tramo que recorrimos para el insituto se trató de tontos alagos, risas, y suspiros de Louis, Destiny se sonrojaba a menudo, y mi madre sonreía ilusionada como si ya supiera que entre esos dos había algo, ¡Que rayos!, debería ponerme más atención a mi, y seguro se daría cuenta que estoy sufriendo por Summer, pero no ella prefiere ocuparse de otras cosas como la estúpida coquetería de Louis.
Mamá paro el auto, y los dos se despidireron de ella, baje del auto y por la ventanilla, me despedi con un beso en la mejilla.
Los dos chicos comenzarón a caminar a mis costados rumbo al edificio.
—Creo que debo decirle al director que ya estoy otra vez aquí—Asentí, Louis se acerco a mi oído.
—¿Por qué nos miran?—Susurró.
—Desde que volví a clases todos los días lo hacen, ya me he acostubrado—Louis hizo una mueca, lo entendía esto era tan extraño, paso de la noche a la mañana de un marginado a alguien a los que todos conocían, todos sabían su nombre, sus calificaciones, sus hobbies, seguro en las solicitudes de amistad de su facebook tenga unas mil quinientas o más de las que yo tenía, muchos creen que la popularidad es lo mejor tanta gente queriendo ser como tú, haciendo hasta lo imposible por hablarte, pero no lo era, no lo es, tienes que hacer todo perfecto para no decepcionarlos, y siempre tienes que dar una imagen sana, limpia, y perfecta, y se porque Summer se canso de tanta mierda como esta, yo, no lo hubiera soportado, esto es mucho, y se sera más dificil para Louis.
—¿Ya saben que fuistes amigo de Summer?—Asentí, creo que ellos sabían algo mas, pero no se atrevían.
—Iré a clases—Murmuró Destiny, también algo incomoda, asentí, mientras Louis y yo tomamos rumbo a la oficina del director.
[ººº]
—¿Y cómo has estado, Louis?—El director le preguntó mirandolo fijamente, me encontraba sentado aún lado de Louis, el parecía nervioso y tímido, su boca formaba una ligera sonrisa ocultando todo el temor.
—Bien—Susurró.
—Me alegro que te animaras a seguri viniendo a las clases, yo creo que no has perdido mucho tiempo así que pudes empezarlas de inmediato—El director le regalo una sonrisa, Louis se paró de su silla, y yo lo seguí, pero antes de salir el director me llamó.
—Em, Harry—Pare, y lo miré.
—¿Has visto a Madison?, hace tiempo que perdimos contacto con ella y con su madre—Negué con la cabeza, hace días que no iba a visitarla.
—Bien, gracias, pueden irse—Asentí, y salí junto a Louis.
Nos dirijimos hacía nuestra primera clase con una nota del director para que el profesor nos dejara pasar por la tardanza, al llegar tomamos hacientos uno alado del otro, y la aburrida clase comenzó.
El timbre para el almuerzo alfin sonó, me levante y Louis me siguió.
—¿Iremos con Destiny?—hice una mueca y asentí sin mirarlo.
Al entrar a la cafetería fuí a formarme para tomar mi almuerzo, paseando la vista en busca de Destiny, pero me encontre con algo realmente desagradable, y encontes recordé.
me arrojó a la cama, y comenzó a desnudarme y desnudarse mientras pasaba sus manos por mi cuerpo
me dijo que era la cosa más asquerosa del mundo, que era una zorra, una maldita perra, y me golpeó.
Una inmesa furia me atravesó, sentía como algo se apretaba en mi pecho, Zayn hablaba animadamente con Destiny, con una estúpida sonrisa, y depronto las palabras de Summer escritas en el dario llegaron a mí.
Me salí de la fila para dirijisrme hacia ellos.
—¡Harry!—Louis me gritó, pero eso no me detuvo.
me golpeó.
me arrojó a la cama.
Me paré frente a ellos dos, pero algo en mí estaba desconectado.
—Hola, Harry—Y lo hice.
—¡Por, dios Harry!, ¿¡Qué te pasa!?—Louis llegó a mi lado, tratando de detenerme pero no lo hice, lo necesitaba.
—¡Harry, basta!
y comenzó a desnudarme y desnudarse
—¡Basta, Harry, lo mataras!—Sonreí.
Yo ya estaba muerto.
me dijo que era la cosa más asquerosa del mundo
—¡Harry, mirame!—No.
—¡Harry, mirame!—No.
Ella tomó mi cara entre sus manos, y de sus ojos salían lágrimas a montones, estaba asustada, yo estaba asustado, y depronto solo me deje llevar.
La abrazé, dejando que mi miedo floreciera, todo estaba mal, yo estoy mal, esto esta mal, y Summer era una perra.

Me encontraba sentado en una de las sillas fuera de la oficina del director, la secretaría me miraba con lástima negando sutilmente con la cabeza, haciendome sentir peor.
Mis puños estaban llenos de sangre, y dolían.
—Ya puedes pasar—La chica me dijo después de que el director le dijera por telefono.
Al entrar fue casi como la vez en que nos dió las cartas, el ambiente tenebroso y algo oscuro, su expresión era seria, y algo fulminante, pero ya no me aterraba tanto, ahora tenía otro tipo de miedos, otros demonios con los cuales luchar.
—¿Por qué?—Dijo en cuanto me senté, sabía el porque, pero no le quería decir.
Carraspeé pensando en una respuesta coherente—Me provoco—Frunció su ceño.
—Todos los testigos dicen que tú solamente fuiste y lo golpeaste, ¿Qué paso Harry?
Lo miraba fijamente al igual que el a mí, no sabía que decir, no tenía que decirselo.
—Destiny la chica nueva, es ... es mi novia, el estaba coqueteandole y me enoje.
—¿Hasta llegar a ese extremo?—Preguntó sorprendido.
—Sí, desde la muerte de Summer ella es todo para mí—El asintió dandome la razón, y mi corazón comenzo a latir fuertemente, una mentira, ¿Era una mentira?.
—Me alegro mucho Harry, debes dejar atrás el pasado, Destiny parece buena chica, es muy inteligente y es perfecta para hacerte olvidar a —Acalaró su garganta, sí, para todos era dificil hablar de la muerte de Summer—A Summer—Me sonrió-sonrisa quebrada-
—Gracias.
—Harry, me gustaría que tú madre viniera a hablar conmigo—Fruncí el ceño.
—¿Por qué?
—Harry—Suspiró—Necesitas ayuda, creo que lo más conveniente es que vayas a ver a un psicologo, y antes de que lo digas, no, no estás loco, pero creo que necesitas ayuda—Lo miré confundido, ¿De que rayos habla? el no sabe lo que esta bien o mal para mí, nadie lo sabe.
—No creo que sea necesario, estoy bien.
—¿Por qué me mientes?—Entre abrí mi boca sorprendido.
—Usted claramente no sabe como me siento respecto a esto.
—No, y no puedo imaginarmelo, se que hay algo más detras de tu pelea con Zayn, se que Destiny no es tú novia, y se que estás mal, pero vamos no soy nadie para decirte que vayas en busca de ayuda, ¿No?.
Tragué duro, y mis manos empezarón a sudar.
—No, usted no es nadie.
Me levanté de la silla y salí de la oficina dando un fuerte portazo.

Al salír de aquel pasillo me encontré con Destiny y Louis esperandome.
—¿Qué paso?, ¿Estás bien?—Me preguntó inmediatamente Destiny, tomando mi mano, le sonreí y asentí.
—Necesito irme—Murmuré, ellos me miraron extrañados.
—¿Qué?, aún faltan clases, no puedes irte, ¿A dónde irás?—Dijo Destiny confundida.
—Iré con Madison, necesito preguntarle algunas cosas, hablar con ella, necesito verla—Ella me soltó la mano, alejandose un poco de mí.
—No puedes ir solo, Harry—Habló Louis extrañado.
—Sí puedo, adiós—Me giré y comencé a caminar hacia la salida.
[ººº]
Su madre me hizo pasar, toque la puerta de su habitación varias veces, pero ella negó con la cabeza y luego abrió la puerta dejandome pasar a la habitación, para luego cerrarla tras de mí.
—¿Madison?—Pregunté paseando la vista por la habitación, no había rastro de que ella estuviera aquí, fruncí el ceño, estaba un poco oscuro, las paredes estaban rayadas por dibujos extraños y la habitación era un desastre, una luz salía tras la puerta del baño, deje mi mochila en el suelo, y fuí a recibir con algo de temor, sabía que Madison no estaba del todo bien.
Abrí la puerta lentamente cuidandome de cualquier daño que ella pudiera hacerme, al no haber nada, la abrí completamente encontrandome con algo que me sorprendió.
—Dios, Madison...—Susurré asustado al verla en ese estado, ella tenía todas sus manos llenas de sangre al igual que su boca, no estaba llorando, parecía admirar toda esa sangre que brotaba de sus heridas, estaba sentada en el suelo con algunas pastillas, y vidiros rotos, al verme me sonrió, y luego me enseño sus manos como sis e tratara de la cosa más perfecta en el mundo, "perfecta".
Me agache a su altura, la tome de los hombros levantandola y luego la lleve a la cama, sentandola en el borde de esta, fuí otra vez al baño y busque algún tipo de vendas, o algo para limpiarle las heridas, al encontrarlas, tome también alcohol y toallas.
Me senté junto a ella, y tome sus manos, limpiandolas con las pequeñas toallas rosas que estaban en su baño, luego abrí el alcohol y lo vertí sobre sus heridas, ella gruño.
—Lo siento—Susurré, comencé a limpiarlas denuevo y luego a poner la venda sobre ellas, mientras sentía su mirada todo el tiempo.
—¿Te gusta mucho?—La miré.
—¿De qué hablas?—Pregunté confundido.
—Summer, ¿Te gusta mucho?—Me quedé callado un rato.
—Sí, estaba enamorado de ella—Murmuré, volviendo con mi trabajo.
—¿Aún la amas?—Paré en seco, y suspiré.
—Yo, no lo se, estoy confundido—Ella sonrió.
—¿Destiny?—Entre abrí mi boca, sorprendido.
—¿Cómo sabes que se llama Destiny?
—Summer me lo ha contado, todas las noches viene y me dice que es lo que haces tú, Louis, Zayn, Niall y aveces habla de Destiny—Ella comenzaba a asustarme, se acercó a mi oído.
—Ella dice que te hará pagar, a todos ellos, ella me hizo esto—Me separé al instante de ella con mi corazón pegando en mi pecho.
—Ella no esta viva Madison—Ella negó.
—Tú no estas muerto—Sentí como toda la sangre dejaba de circular, haciendome volver frío.
—No, pero ella no está viva, Summer se ha ido Madison, no puede hacerte daño—Ella volvió a negar, y luego tomo mi cara acariciandola.
—Harry, Summer viene todas las noches aquí y me lástima, me habla de ustedes y luego se va, ella dice que estoy loca y que debo morir, hoy a venido temprano y me ha cortado con los vidrios, me lanzo el vaso de agua que le dí para sus pastillas—Ella río—Dice que deberías alejarte de Destiny o que luego te arrepentirás—Tragué duro.
—¿Qué son todos esos dibujos?—Apunté hacia las paredes.
—Es ella, y las distintas formas en las que me hace daño—Su sonrisa no desaparecia y era tenebrosa, llena de misterio.
—¿Dices que viene en las noches?—Pregunté interesado, sea lo que sea quisiera verlo en persona, ¿Un fantasma?
—Sí, ¿Te quedarás?—Preguntó entusiasmada y asentí, me quedaría solo para ver que tan real era "Summer".

Eran las tres en punto de la mañana, me encontraba acostado en el suelo tapado con una sabana, Madison estaba despierta dibujando algo en una de las paredes.
—¿Falta mucho?—Dije en un bostezo, ella encogio sus hombros, suspiré.
Comencé a cerrar mis ojos, estaba cansado, bosteze, y luego cerré mis ojos, quedandome dormido.
—¿¡Cómo te atrevez!?, el no debe saber de mí.
—Yo solo...
—Callaté, mejor me voy antes de que despierte, ten, daselo—Podía escuchar algunas voces murmurar algo, entonces recordé, y abrí mis ojos de inmediato.
—¡Summer!—Grité, levantandome de golpe.
—Hola—Madison me sonrió, pase mi vista alrededor de toda la habitación pero no había nada, solo estaba Madison.
—¿Ella vino?—Asintió.
—¿Por qué no me despertaste?—Se encogió de hombros, y luego se acerco a mí, extendiendome algo, con el ceño fruncido lo tome.
Era una pequeña nota de una hoja rota y arrugada, la desdoblé, y la abrí.
"No creas en los fantasmas, Hazza"
Mi corazón comenzó a latir rápidamente, y me paré de golpe del suelo, dí una rápida mirada al reloj de la mesa de noche 5:30 de la madrugada.
—¿Cuanto tiene que se fué?—Dije poniendome los converses.
—Hace un segundo, después de que tú despertarás, ¿por qué?
—Por nada, ¿por donde salió?—Señalo la ventana, estaba abierta, corrí hacia ella, había una especie de enredadera por la que podía bajar, salí de la ventana, el viento me golpeó, realmente hacía frío, comencé a bajar, cuando estuve en el suelo, corrí, a la calle, miré hacia los dos lados y no se encontraba nadie en ella hasta que distinguí una silueta a lo lejos por la izquierda, así que comencé a correr, corría como si de ello dependiera mi vida, estaba muy lejos de ella, pero no quería detenerme, mi respiración se volvió entrecortada.
La extraña silueta se detuvo frente a un coche y se subió en el, lo encendió y fue cuando paré, mi pecho subía y bajaba rápidamente, me encontraba sin aliento, ví como el auto se dirijía hacia donde yo estaba, pense en detenerlo, pero sonó su claxón cuando estaba aún mas cerca aturdiendome, me hice aún lado, y vi como paso a mi lado, y lo único que pude distinguir fue que era una mujer y tenía el cabello color rubio, como Summer.
Pero lo más extraño de esto era que la chica que visitaba todas las noches a Madison no era un fantasma, y que Summer no sabía manejar.
"Habeces la imaginación te lleva a un tunel sin salida"