Re: 18: We´re ready to run

por **zayngirl.** Jue 28 Ene 2016, 1:22 pm

Capitulo 1

Dulce Valerie

Valerie Jane Hudson| Zayn J. Malik

Inclusive si la vida me sonriera, sonreírle a la vida, al paso de los años, me era más difícil, me convertía en alguien viejo e infeliz, sin nada que me enorgulleciera; observe el viejo árbol de navidad frente a mí, parecía más un árbol de otoño que otra cosa, decaído y sin color, como yo; suspire y termine de acomodar mi corbata; año nuevo y debía trabajar, ¡genial!, de paso me liberaban de ver la cara de infelicidad en los ojos de Jordan, esos ojos azules que me acusaban cada noche y cada mañana su miserable vida, su falta de lujos y sus kilos de más. No me culpaba más de lo que yo me culpo a mí mismo, mi vida era una cadena de malas decisiones que solo me formaban un suave y pavimentado camino al infierno que actualmente vivía. Vi la sombra de mi esposa pasar por la habitación, me miro de reojo y gruño, saco algo de su mesa de noche y volvió a salir, no sin antes hablar para lo único que servía en esta vida, pedir dinero.

—Debo pagar la cuenta del agua, no quiero volver a bañarme en casa de la vecina, esa vieja decrepita me tiene harta con sus animales chillones, un día de estos comprare veneno para ratas y lo colocare en un pan que aventare a su jardín a ver si así logro liberarme de esos ladridos cada mañana— rodee los ojos mientras me colocaba mi chaleco color vino-tinto, hoy debía servir para la casa de Bourbon, la agencia de eventos que organiza el evento de año nuevo más grande de la ciudad, un lugar lleno de ricachones presuntuosos y despampanantes mujeres hechas con maquillaje y silicona.

—Cuando me paguen te daré el dinero que necesites— le respondí sin mirarla y agarre las llaves de mi casa para salir

—Si es que te pagan, no sea como la última vez que fuiste tan estúpido de dejarte estafar por una imb…— sin pensarlo, había estallado

—¡Cállate malditacea! Me tienes cansado con tus quejas, si tanto te molesta vivir conmigo ve y véndela tu cuerpo a otro ingenuo que caiga en tus mentiras. Pero ya déjame en paz por una vez en tu vida— aunque en un inicio su mirada temerosa me recorrió el rostro, esta misma cambio a una mirada felina de odio

—Ojala pudiera huir del desastre y vergüenza que eres Zayn, lastimosamente mi hijo y yo estamos condenados a hundirnos con tu fracaso— apreté la mandíbula para intentar relajar mis sentimientos

—Tú y tu mocoso me hundieron en este fracaso— de inmediato me arrepentí de haber utilizado ese término para mi hijo, él no tenía la culpa de todos mis errores y los de la mujer frente a mí. Sin esperarlo sentí el golpe en mi mejilla, me la merecía si era sincero.

—Matthew es tu hijo, maldito imbécil, como puedes hablar de esa forma de él— bien, ahora lloraba, haciéndome sentir peor de lo que ya me sentía, suspiré frustrado, no tenía cabeza para más problemas, observe a Jordan y salí de mi casa antes de agarrar el rifle en la cómoda y dispararme directo en la cabeza.

(…)

Pocas calles antes de llegar pase por aquel edificio, aquel del cual la había visto salir hace unas noches, cerré los ojos unos minutos, como si quisiera inhalar y sentir su aroma volar por mi nariz una última vez, como si pudiera apreciar su tacto o saborear su dulce aroma, mi dulce Valerie, quien lastimosamente mía había dejado de ser hace años. Al abrir mis ojos observe el lugar a unos metros de distancia, lujoso en toda su aura, con las limosinas instaladas en la entrada y los paparazzis azotando sus flashes el la cara de todos, yo me desvié una calle antes para entrar por el callejón de la puerta trasera. El tipo de personas como yo no merecen ingresar por la gran puerta, sin por el contrario debemos permanecer lo más ocultos posible en las sombrar de un basurero.

Al entrar a la cocina de inmediato me encontré con el señor Montomery, jefe de camareros, mi jefe.

—Casi no llegas— me miro con firmeza para luego aventarme en el rostro un delantal blanco, lo agarre y lo coloque alrededor de mis caderas, luego la balletiya en mi antebrazo, suspire, sorprendido de la falta de mal trato por parte de mi jefe, sin duda no era su mejor empleado, como en todo en mi vida, era un fracaso en esto igualmente.

Camine fuera de la cocina con una charola repleta de champagne Moët & Chandon y bocadillos de la casa de Dalloyau traídos directamente de Paris, camines por toda la estancia ofreciéndole a todos recibiendo dos escasos “gracias” murmurados entre dientes y de mala gana. Observe a Luke, compañero de ya bastante tiempo quien me hacia señales para que fuera a la cocina, lo seguí y allí adentro me encontré con un enorme pastel que costaba más de lo que fuera a ganar en meses.

—Él señor Newman fue muy específico, antes de la media noche el pastel debe estar frente a su esposa y el anillo en sus manos— el señor Montgomery o como todos le dice, Gordon levanto entre sus manos una caja con un anillo que sin duda ni trabajando en esta vida y en otra me alcanzaría para pagar un cuota inicial de su costo.

—¿Y que se supone que están celebrando? — hablo una de las chicas nuevas, rodeé los ojos al ver el brillo en sus ojos, una chica ingenua sin duda, sobre-arreglada con el dobladillo más arriba de lo establecido, rizos de peluquería y manos temblorosas, una novata que cree que uno de los hombres en la fiesta se fijaría en una básica mesera que no tiene nada de raro más que una capa de maquillaje más gruesa que la primera capa del pastel; una novata, de ellas había visto muchas aquí, igual que los hombres, que creen poder ligar una heredera de piernas largas, hueca hasta las entrañas y con un relleno de billetes, joyas y autos de alta gama. Pero al final terminan aceptando nuestra posición en la pirámide social, todos allí afuera estaban arriba, y nosotros hasta el fondo, invisibles. Mírenme por ejemplo, con 40 años y nunca salí de ser un fracasado camarero que aspira a un salario mínimo cada mes.

—15 años de casados— la chica sonrió, leí en su gafete el nombre de Kaytlin, ilusa Kaytlin soñando con que algún día le entregaran un regalo como ese. —¡Zayn! — me llamo Gordon, di un paso adelante.

—Dígame señor—

—Tu estas encargado de ir a el señor Newman y entregarle el anillo ¿esta bien? — recibi la pequeña caja transparente con cojín color azul marino, en el que reposaba un anillo de esmeralda pulida en oro blanco; curiosamente me recordó a Valerie, eran sus joyas preferidas, pero jamás podría haberle comprado uno de estos, el cual, curiosamente era exactamente como ella describía el de sus sueños.

La extensa noche por fin llegaba a su fin, me acerque a la mesa principal, donde no vi a nadie parecido a el supuesto señor Newman, aun así permanecí allí; de momento todos fijaron su vista en quienes llegaban, no pude ver por la multitud, que estaba aplaudiendo como si alguien hubiera ganado un premio, lentemente la multitud dio paso a un hombre con las características que me habían dado de aquel supuesto señor Newman, alto, un poco más que yo, rasgos nórdicos muy marcados, contextura fuerte y un traje de corte ingles con zapatos italianos, probablemente de mi edad, un poco más. La gente lo felicitaba, como si hubiese tenido un gran éxito laboral últimamente o al menos eso alcance a escuchar; Newman sonrío a una persona más y se devolvió a la multitud de donde saco de la mano una mujer, con vestido en encaje hasta las caderas pegado a su cuerpo y un velo suelto hasta el suelo. El aire se me detuvo en los pulmones y la saliva se me fue por el mal camino, mi dulce Valerie sonreía con vehemencia a los invitados y agradecia con carisma en la mirada, una mirada que a pesar de los años y las pocas marcas de la edad que sostenían seguían inocentes tal cual como la primera vez que la vi.

Todo en mi mente encajo como un rompecabezas, se había casado hace 15 años, con seguramente sería su novio e la universidad, un hombre de cuna que la trataría como ella merecía ser tratada, como reina; sentí un nudo en m garganta, un dolor en el pecho, un sentimiento puro de aquellos que hace años no me permitía sentir, el pecho me ardía, mi mandíbula y dientes se partirían de seguir apretándolos de esta forma, pero no podía evitarlo, él tenía todo lo que yo alguna vez había soñado compartir con el amor de mi vida; yo no había cumplido ninguno de mis sueños, pero al menos ella si los había traído al mundo real, pero no conmigo.

La pareja se acercó y los ojos de mi dulce Valerie chocaron con los míos, espere odio, tristeza, rencor, pero aquellos eran valsamos para mi dolor que se aumentó al notar que sus ojos solo fueron indiferencia, fui un adorno más del lugar para ella, otro mesero más, no el hombre que había amado hace 22 años atrás.

Como se había planeado, el anillo fue entregado y el pastel sacado de la cocina lanzando chispas por todos lados, me deleite observándola, sonriendo, agradeciendo; sorprendida y enamorada, besando a otro hombre mientras yo me imaginaba en su lugar, abrazándola por la cintura, susurrándole palabras en el oído que la hacían sonrojar y mirándola como si todo su mundo, mi mundo, fuera ella. Por unos segundos, creía ver una mirada de reojo en mi dirección, tal vez un producto de mi imaginación, la cual volaba en este momento soñando que fuese yo allí en la mesa decorada con platería importada y comida Francesa.

La vi pedir permiso y salir de allí, sin controlar mis impulsos la seguí, curiosamente hasta la puerta trasera, afuera, antes de hacer notar mi presencia la oí suspirar y observar su anillo con la mirada perdida, cuando la puerta se cerró a mis espaldas se sobresaltó y me observo, su mirada sorprendida cambio a indiferente en segundos.

—Dígale a mi esposo que entro en unos segundos— desvió la mirada y habló como si fuese otro camarero más del lugar

—No vengo de parte de tu esposo— me acerque un poco más, quería sentir su aroma embriaganteuna vez más, pero ella se alejo tan rápido que no me dejo ni siquiera apreciarlo

—Entonces por favor retirese, no veo necesidad de que este aca— se abrazo a si misma, el invierno estaba chocando con su piel descubierta.

—¿Enserio fingirás que no me conoces? — me acerque a ella y pretendi acercarme para colocar mis brazos a su alrededor, como anteriormente lo hubiese hecho en un invierno tan cruel como este. —Soy Zayn ¿Ya no me recuerdas? — sus ojos se fijaron en mi, filosos, como navajas, navajas que se enterraron en mi cuerpo de un solo tiro

—No me intresa saber nada que tena que ver contigo Zayn Ackless, ni hoy, ni nunca— dijo con una voz fría y sin emociones para luego entrar en silencio. Me quede de una pieza, más frío que la nieve bajo mis pies, eso había ido directo a la vena en mi cuello, un golpe de muerte letal. Sentí como terminaba de vaciarse mi vida.
De la nada, un golpe en la espalda me tumbo en el suelo, quejándome me incorpore para encontrarme con un demonio más. Pedir dinero prestado a hombres de mala fama seria uno de los tantos errores en mi vida, errores que se guiaron por da desesperación y la inmadurez.
—Así quería encontrarte cobarde— John me sonrio y junto a sus acompañantes terminaron con mi pocas fuerzas en unos segundos, mi autoestima, mis ganas de luchar y todo lo poco que había quedado vivo después de las palabras de mi dulce Valerie.
Golpeado y derrotado me quede en el suelo helado del callejón a ver si moria de hipotermia o desangrado de una vez por todas, con pocas fuerzas me arrastre contra una pared y observe como los fuegos artificiales brillaban en el cielo anunciando un año nuevo, un nuevo maldito año.
Cerré mis ojos y suspire, inhalando en férrico olor de mi sangre. Dicen que en año nuevo los sueños se cumplen, porque no soñar despierto como niño pequeño antes de rendirme una vez mas.

“Otra oportunidad, como desearía corregir mis errores y dejar de cagarla”

zayngirl

por Invitado Jue 28 Ene 2016, 1:45 pm

BONY!!! SUBISTEEE!! DIOS MIO Y FUE PERFECTO!!!! Estoy colapsando ante tanta perfección, no, me muero Zayn pobre, me rompio el corazon, su vida, sus sentimientos.. Me dejaste los feels por el piso. Yo... Yo no se como seguir despues de esto xd fue genial. Valerie lo trató re mal y me dolió todo, pero algo habrá hecho, seguro que si, pobre chica... Me encantoooo <3 mi drama queen fav <3

por **changkyun.** Vie 29 Ene 2016, 6:52 am

ay, lo leí anoche pero tenia tanto sueño que no daba mas. Me da lastima Zayn, pero al parecer la hizo sufrir mucho a ella entonces como que me dio que se me pasa (?) pero a la vez me duele su sufrimiento, creo que es demasiado, casarte con alguien que no amas y seguir amando a la otra mujer después de tantos años. Espero ansiosa el desarrollo de tu historia, por cierto, gracias por los comentarios de mi prologo, no tuve tiempo de contestarlos aun, pero lo hago por acá, besos.

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