Conectarse
Últimos temas
miembros del staff
Beta readers
|
|
|
|
Equipo de Baneo
|
|
Equipo de Ayuda
|
|
Equipo de Limpieza
|
|
|
|
Equipo de Eventos
|
|
|
Equipo de Tutoriales
|
|
Equipo de Diseño
|
|
créditos.
Skin hecho por Hardrock de Captain Knows Best. Personalización del skin por Insxne.
Gráficos por y codes hechos por Kaffei e Insxne.
Gráficos por y codes hechos por Kaffei e Insxne.
Rêvere; L 98
O W N :: Originales :: Originales :: One Shot's (originales)
Página 1 de 1. • Comparte
Rêvere; L 98
título: Rêvere.
autor: Skulls.
adaptación: no.
género: Drama o lo que sea.
advertencias: no.
otras páginas: no.
Rêvere
Susurros, eso era lo único que escuchaba. Las voces apenas eran audibles, pero lograba diferenciar palabras y entender lo que las personas a su alrededor estaban hablando. Según lo que escuchaba, alguien estaba gravemente herido; algo así como una enfermedad genética en los riñones. ¿Infectados? no estaba tan segura. Estas personas hablaban demasiado bajo como para formar una oración concisa.
Luego, estas callaron de repente, y Lucy sintió por primera vez desde que se había levantado, o más bien despertado, miedo. Un miedo helado que se calaba hasta los huesos. Se quiso estremecer, pero el cuerpo no le respondía, y la visión todavía estaba oculta bajo un telar negro sin vida.
Estaba confundida, angustiada y desolada. ¿Qué rayos estaba ocurriendo? Una voz femenina habló firme e impotente sobre las demás.
–Señorita Lucila, ¿Cómo se encuentra hoy?– Ella trato de responder, pero sus labios no respondían–. Hay un sol esplendido allá fuera. Estoy segura de que le encantaría.
Trato de asentir, o por lo menos abrir un ojo, pero como en los otros intentos, todo fue en vano.
Al segundo, sintió una suave mano en sus caderas, y por más que estas no la dañaban, Lucy se alarmo aun más. Tenía ganas de gritar, de pedir que la suelte. De pedir ayuda. Pero el roce no era nada de lo que ella pensaba. Empezó a sentir alivio y también sintió las cobijas por sobre su cuerpo. No había notado que el aire acondicionado de la habitación le hacía poner la piel de gallina.
Una vez más quiso hablar y agradecer, pero a esas instancias ya estaba completamente rendida.
La voz femenina volvió a hablar:
–Le di un poco de morfina para el dolor, y le coloque una manta extra– ¿Quién era ella? ¿Con quien hablaba?–. Solo soy enfermera, de manera que soy una inútil con los aparatejos tecnológicos. Una dulce risa broto de los labios de la mujer.
Dejó de escuchar susurros, voces, o cualquier otro abismo de compañía. Volvía a sentirse sola, y aunque tenía los ojos cerrados, sintió que el peso de los parpados era mayor y se estaba por quedar nuevamente dormida entre el edredón y la manta extra.
No estaba segura, pero antes de caer inconsciente, escucho la voz de su amado.
Dos horas después, Lucy volvía a sentir aquellos murmullos; Una fuerte golpiza a lo que ella pensaba que era una puerta, la despertó de su trance. No abrió los ojos, ni hizo ningún movimiento pero sus orejas estaban encendidas y al todo escuchar.
– ¿Crees que saldrá adelante? La operación fue muy grave, está en estado de coma.
Se sorprendió al percibir tan bien la vos de su hermana, Lynn. Deseo escuchar la voz nuevamente.
–Es solo la morfina, Lucila se pondrá mejor.
Y ahí estaba la voz de su coqueta madre. La extrañaba horrores.
Aunque luego pensó: ¿Extrañaba?
Al minuto se dio cuenta que ella era la que estaba postrada en una camilla, a ella todos le hablaban y le miraban; sobre ella susurraban constantemente. Lucy era la enferma, la inconsciente, la muerta.
¿Muerta? No sabía afirmarlo con seguridad, pero el escuchar y estar presente le dio la esperanza necesaria para permitirse quedarse un rato más.
La puerta se cerro, y las palabras se borraron en segundos.
La puerta se abrí, y estas volvieron a tropezones.
–Lucila, oh, Lucila.
Ella lo reconoció de inmediato. Ludo.
Con todas las fuerzas que le quedaban trato en vano de hablar, de gritar, llorar o dar alguna señal de vida. Primero comenzó sin sentido a manipular las piernas, y estas no cedieron. Más tarde, con los brazos y algunos rasgos faciales, pero nada funcionaba. Quería demostrarle que seguía con él. Que no lo había abandonado solo en ese mundo tan absurdo.
–No sé si lo has notado, pero te traje centenares de lirios.
Lirios, flores, colores. Todo aquello que ella no podía ver.
–Y unas cartas de tu padre.
Gray, el padre de Lucy vivía lejos, en el continente asiático, y cómo no ganaba el dinero necesario no pudo hacer el viaje para ver a su hija enferma. Tenía la extraña sensación que todo era su culpa. El divorcio, la pobreza y la enfermedad de Lu.
–Si sales de esta prometo llevarte a verlo, sin importar tu mal humor.
Ella rio internamente y sonrió.
– ¿Lucy?
¿Qué?
–Creo que me estoy volviendo loco.
Ella repentinamente recordó la primera vez que habían salido juntos como pareja. Ludo estaba tan concentrado en hacer las cosas a la perfección que todo término saliendo de locura. Él se peleo con el camarero, Lucy se encontró a uno de sus ex novios y como cereza del postre, recibieron una multa por dejar el auto mal estacionado.
Esa noche, Ludo pronuncio las mismas palabras: Me estoy volviendo loco.
Sobre pensar demasiado hacia que sus defectos recaigan en él.
Sonrió de nuevo, esta vez con una risita improvisada. Y la oyó
– ¿Lucy? ¿Acabas de reírte?
Su entusiasmo lleno la habitación de buena vibra, y Lucy sintió la puerta abrirse.
– ¡Ya responde! Rosa, Ven rápido.
Eso la alegro hasta el cielo, tanto que se permitió abrir los ojos, apenas un poco, y espiar sus alrededores.
Ya era hora de volver.
Luego, estas callaron de repente, y Lucy sintió por primera vez desde que se había levantado, o más bien despertado, miedo. Un miedo helado que se calaba hasta los huesos. Se quiso estremecer, pero el cuerpo no le respondía, y la visión todavía estaba oculta bajo un telar negro sin vida.
Estaba confundida, angustiada y desolada. ¿Qué rayos estaba ocurriendo? Una voz femenina habló firme e impotente sobre las demás.
–Señorita Lucila, ¿Cómo se encuentra hoy?– Ella trato de responder, pero sus labios no respondían–. Hay un sol esplendido allá fuera. Estoy segura de que le encantaría.
Trato de asentir, o por lo menos abrir un ojo, pero como en los otros intentos, todo fue en vano.
Al segundo, sintió una suave mano en sus caderas, y por más que estas no la dañaban, Lucy se alarmo aun más. Tenía ganas de gritar, de pedir que la suelte. De pedir ayuda. Pero el roce no era nada de lo que ella pensaba. Empezó a sentir alivio y también sintió las cobijas por sobre su cuerpo. No había notado que el aire acondicionado de la habitación le hacía poner la piel de gallina.
Una vez más quiso hablar y agradecer, pero a esas instancias ya estaba completamente rendida.
La voz femenina volvió a hablar:
–Le di un poco de morfina para el dolor, y le coloque una manta extra– ¿Quién era ella? ¿Con quien hablaba?–. Solo soy enfermera, de manera que soy una inútil con los aparatejos tecnológicos. Una dulce risa broto de los labios de la mujer.
Dejó de escuchar susurros, voces, o cualquier otro abismo de compañía. Volvía a sentirse sola, y aunque tenía los ojos cerrados, sintió que el peso de los parpados era mayor y se estaba por quedar nuevamente dormida entre el edredón y la manta extra.
No estaba segura, pero antes de caer inconsciente, escucho la voz de su amado.
Dos horas después, Lucy volvía a sentir aquellos murmullos; Una fuerte golpiza a lo que ella pensaba que era una puerta, la despertó de su trance. No abrió los ojos, ni hizo ningún movimiento pero sus orejas estaban encendidas y al todo escuchar.
– ¿Crees que saldrá adelante? La operación fue muy grave, está en estado de coma.
Se sorprendió al percibir tan bien la vos de su hermana, Lynn. Deseo escuchar la voz nuevamente.
–Es solo la morfina, Lucila se pondrá mejor.
Y ahí estaba la voz de su coqueta madre. La extrañaba horrores.
Aunque luego pensó: ¿Extrañaba?
Al minuto se dio cuenta que ella era la que estaba postrada en una camilla, a ella todos le hablaban y le miraban; sobre ella susurraban constantemente. Lucy era la enferma, la inconsciente, la muerta.
¿Muerta? No sabía afirmarlo con seguridad, pero el escuchar y estar presente le dio la esperanza necesaria para permitirse quedarse un rato más.
La puerta se cerro, y las palabras se borraron en segundos.
La puerta se abrí, y estas volvieron a tropezones.
–Lucila, oh, Lucila.
Ella lo reconoció de inmediato. Ludo.
Con todas las fuerzas que le quedaban trato en vano de hablar, de gritar, llorar o dar alguna señal de vida. Primero comenzó sin sentido a manipular las piernas, y estas no cedieron. Más tarde, con los brazos y algunos rasgos faciales, pero nada funcionaba. Quería demostrarle que seguía con él. Que no lo había abandonado solo en ese mundo tan absurdo.
–No sé si lo has notado, pero te traje centenares de lirios.
Lirios, flores, colores. Todo aquello que ella no podía ver.
–Y unas cartas de tu padre.
Gray, el padre de Lucy vivía lejos, en el continente asiático, y cómo no ganaba el dinero necesario no pudo hacer el viaje para ver a su hija enferma. Tenía la extraña sensación que todo era su culpa. El divorcio, la pobreza y la enfermedad de Lu.
–Si sales de esta prometo llevarte a verlo, sin importar tu mal humor.
Ella rio internamente y sonrió.
– ¿Lucy?
¿Qué?
–Creo que me estoy volviendo loco.
Ella repentinamente recordó la primera vez que habían salido juntos como pareja. Ludo estaba tan concentrado en hacer las cosas a la perfección que todo término saliendo de locura. Él se peleo con el camarero, Lucy se encontró a uno de sus ex novios y como cereza del postre, recibieron una multa por dejar el auto mal estacionado.
Esa noche, Ludo pronuncio las mismas palabras: Me estoy volviendo loco.
Sobre pensar demasiado hacia que sus defectos recaigan en él.
Sonrió de nuevo, esta vez con una risita improvisada. Y la oyó
– ¿Lucy? ¿Acabas de reírte?
Su entusiasmo lleno la habitación de buena vibra, y Lucy sintió la puerta abrirse.
– ¡Ya responde! Rosa, Ven rápido.
Eso la alegro hasta el cielo, tanto que se permitió abrir los ojos, apenas un poco, y espiar sus alrededores.
Ya era hora de volver.
Ronan
O W N :: Originales :: Originales :: One Shot's (originales)
Página 1 de 1.
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.
Miér 20 Nov 2024, 12:51 am por SweetLove22
» My dearest
Lun 11 Nov 2024, 7:37 pm por lovesick
» Sayonara, friday night
Lun 11 Nov 2024, 12:38 am por lovesick
» in the heart of the circle
Dom 10 Nov 2024, 7:56 pm por hange.
» air nation
Miér 06 Nov 2024, 10:08 am por hange.
» life is a box of chocolates
Mar 05 Nov 2024, 2:54 pm por 14th moon
» —Hot clown shit
Lun 04 Nov 2024, 9:10 pm por Jigsaw
» outoflove.
Lun 04 Nov 2024, 11:42 am por indigo.
» witches of own
Dom 03 Nov 2024, 9:16 pm por hange.