A true Love Story [THG] Cancelada

Primer Capitulo



Estoy en medio de la plaza, las tiendas, las pantallas y la gente me rodea. Veo brillar las columnas de mármol del Edificio de Justicia con el sol. De repente todos parecen desconcertados, puedo sentir su miedo y no entiendo que esta pasando. Entonces su mirada se cruza con la mía, el también esta asustado.
-¡________! ¡_______!- me grita desde donde esta, no entiendo lo que esta pasando y de repente despierto en mi cama, mi madre trata de despertarme quitándome las cobijas de encima y apurándome con regaños.
-no quiero- me quejo aun adormilada cuando mi cabeza da un giro y me doy cuentade que la almohada donde planeaba ocultarme pero mi madre, ya me la quito- ¿tengo que?
-¡CLARO QUE TIENES QUE!- me grita indignada- es el dia de la Cosecha tienes queestar presentable.
Eso explica mi sueño ¿o pesadilla? como sea, hoy eligen a los tributos para los Juegos del Hambre, tengo un mal presentimiento. Digamos que la suerte no suele estar de mi parte.
Mi madre abre las cortinas y me sega con la luz del día, mis ojos siguen sin quererse abrir del todo- pero tengo que ir al entrenamiento antes- le digo tratando de buscar una excusa, se siento en el borde de mi cama y abro y cierro los ojos para volver a acostumbrarlos a estar abiertos, creo que no tuve un buen descanso esta noche.
-hoy no habrá entrenamiento, les darán una platica de preparación o… algo como eso- dice lanzándome una toalla blanca que acaba de sacar de mi armario y que apenas logro atrapar- no tienes motivo para no parecer una niña-concluye sacando un vestido, tendiéndolo en mi cama y saliendo de mi cuarto con un portazo.
No se por qué sigue fingiendo que esto le causa emoción, a ninguno de mi familia le agrada la idea de los Juegos, incluyéndome. Por un lado mi padre es técnicamente un rebelde, si se desatara la revolución, el la aprobaría, pero por otro lado nos llevaal Centro de Entrenamiento, él lo ve como una oportunidad para que, si somos elegidos, sobrevivamos. Pero mi distrito lo ve diferente… ganar significa un gran honor y una increíble oportunidad de volverte rico y famoso, traer “honor” a nuestro distrito. Nacemos para morir o para matar.
Tocan a mi puerta y una cabecita se asoma en el espacio que acaba de abrir-puedo entrar ______?- me pregunta mi hermanito de 12 años, parece menor, en mi familia no somos muy altos asi que eso no nos ayuda en nada.
Doy golpecitos en mi cama para indicarle que se siente conmigo- ven Clyde.
Entra corriendo dejando que sus despeinados cabellos negros reboten en su frente y subiendo de un salto- ¡hoy es tu oportunidad!
-si eso parece- le digo sonriendo- tal vez hoy por la noche este en el Capitolio- si, estoy actuando como mi madre pero es la primera vez que su nombre entra, no quiero asustarlo.
-¡o yo!- me reclama mi hermanito emocionado.
-¿no eres muy pequeño para ir?-le pregunto para que recapacite- tal vez dentro de 3 o 4 años.
Se queda pensado y asiente- dentro de 3 o 4 años, esta bien.
-buena idea- le digo revolviéndole los cabellos hasta que el empuja mi mano con la suya- aun eres pequeño pero, para entonces hasta podrías ganar.
Voltea a verme y sonríe- si, aun tengo que aprender a lanzar cuchillos como tu.
-entonces yo no querría tenerte de rival- le digo entre risas y él se ríe también.
-¡_____!- me grita mi madre que debe estar en la cocina, desesperada por verme limpia.
-¡YA VOY!- le respondo y Clyde empieza a reírse- muévete- le digo levantándome y dándole la mano para ayudarlo- no querrás verte como un vago en la cosecha ¿o si?
-no, pero mamá dice que tu si- me dice riéndose.
-pues cambie de opinión y ¿sabes que?-le digo en tono desafiante- estaré lista antes que tu.
-hecho-me dice Clyde tendiéndome la mano y hago lo mismo, las agitamos y antes de que me de cuenta el ya salió corriendo de mi cuarto directo al baño.
Eso es normal entre nosotros, nos desafiamos en todo y competimos siempre que podemos hasta en las ocasiones más ridículas. Tal vez eso es lo que impide las peleas entre nosotros ya que a parte de eso nos llevamos “tranquilamente”. Adoro a mi hermanito.
Recuerdo la primera vez que pude ser elegida para los Juegos, mis padres tenían miedo, Clyde me felicitaba, pero creo que en cierto punto se dio cuenta de lo que podía pasar si… perdía. Entrenábamos, según el, todos los días, me levantaba antes de ir a la escuela para correr y hacer ejercicios, lo que me cansaba después de 1 mes- quiero que ganes- me decía siempre que me detenía, para tomarme la mano y jalarme hasta la casa trotando, gracias al cielo el año pasado dejo esa costumbre de ejercitarme como si no fuera suficiente el Centro de Entrenamiento, a donde llegaba casi muerta.
Al salir del baño encuentro mi vestido blanco con listones rosas a la cintura tendido en la “no puede ser en serio” pienso para mi, pero el tiempo no me deja sacar otro “parezco de 12 con esto” pienso poniéndolo frente a mi para verme en el espejo. Ya no hay nada que hacer, me pongo el vestido y me recojo el cabello en una cola de caballo haciendo rizos con el cabello aun húmedo.
Salgo corriendo por el pasillo y bajo las escaleras, encontrándome a mi hermanito a pleno camino y tratando de huir de mi; lo empujo a un lado y lo dejo atrás y recorro toda la casa en una carrera desesperada hasta la cocina, mi mamá parece enojada y me detengo frente a ella- ¿Qué estas haciendo?- me pregunta.
-la pregunta correcta seria: ¿Qué estamos haciendo?- le digo mientras me volteo a atrapar a mi hermanito por el cuello de la camisa y jalándolo frente a mi. El me ve por encima del hombro y le devuelvo la cabeza al frente- el empezó.
-traidora- me dice mi hermanito tratando de voltear la cabeza de nuevo.
-los castigare cuando regresemos- nos advierte nuestra madre y sonreímos inocentemente- a ti- empieza señalando a Clyde- por revoltoso- ahora se dirige a mi- y a ti… por seguirle el juego y “traidora”- termina imitando a mi hermano, este deja salir una risita burlona- ahora siéntense.
-¿y papá?- pregunta Clyde como si nada.
-en el trabajo- le responde mamá llevando nuestros platos a la mesa, llenos de verdura y carne, pensar que vienen de tan lejos, del distrito 10 y 11, no soy experta pero no creo que se den la buena vida comiendo.
-¿en las canteras?- le pregunto. Mi papá tiene 3 trabajos que parecen 9, el primero como minero en las canteras de plata y el segundo arreglando la maquinaria del centro o en El Fuerte con el alcalde Evans. El Centro de Entrenamiento no se paga solo.
-si, vendrá por nosotros y después ira con el alcalde Evans- nos dice mamá sentándose con nosotros.


Segunda Parte
El alcalde me agrada pero su esposa… no me quiere. Tuve un problema con su hijo, Cato, el año pasado y desde entonces (o tal vez desde antes) me ve como nuestros tributos a los niños que son menores en el entrenamiento, no es nada lindo.
Me acabo toda la comida en poco más de 5 minutos, estoy nerviosa, no puedo evitarlo. Cundo llega papá, mi madre se apresura para arreglarse y le da unos ajustes a mi peinado, aun me siento con mi look de niña pequeña, pero no me da tiempo de verme al espejo y salimos corriendo, cruzamos 2 calles hasta llegar al tranvía que conecta a nuestra montaña con el centro.
En el centro se concentra todo, las escuelas, los bancos, las tiendas y los empleos importantes. La montaña de en medio o “El Fuerte” es el centro de control militar del Capitolio, a un lado del Centro de Entrenamiento esta la escuela militar, donde educan a los agentes de la paz que envían a los demás distritos, eso le da al 2 una buena posición ante el gobierno. Entre mas cerca del centro vives mejor, y aunque el dinero casi siempre es suficiente, no todos vivimos igual, tal vez solo la mitad de los niños vamos al Centro de Entrenamiento, solo hay voluntarios cuando el elegido no va a nuestra escuela.
Bajamos del tranvía que nos deja en frente del Centro de entrenamiento, el edificio de columnas de mármol negro se levantan 12 metros sobre mi cabeza, nunca deja de impresionarme, los balcones dejan caer banderines con el símbolo de nuestro distrito y una frase en oro se lee sobre la entrada: Saciamos nuestra hambre con orgullo, es nuestra frase.
Mamá y papá se despiden de nosotros y nos desean buena suerte, Clyde y yo nos quedamos en la entrada, él se levanta de pintitas u desciende impaciente-¿nervioso?- le pregunto.
-si- me responde mordiéndose los labios.
-no creo que sea tu año- le digo para animarlo- es 1 papeleta contra miles-le digo tranquila pero hay algo que me pone ansiosa “8 de esas son mías” pienso.
-pero ¿y tu?- me pregunta el como leyéndome la mente- ¿y si vas y…?
Su pregunta es interrumpida por el timbre, lo abrazo para tranquilizarlo- no tengas miedo todo va a estar bien- me despego del el y la doy un empujoncito para que vaya con su grupo. Se lo que iba a decir: “¿y si vas y pierdes?” y si muero en el intento.
Me dirijo caminando al gimnasio, cada grupo tiene un horario especial en la cosecha, esta vez a mi grupo le toca conocer a nuestros posibles mentores. Llego y me siento con mis amigos Cristel y Demian- ¿nerviosa?
-es un año cualquiera y no planeo ser voluntaria- le respondo a mi amigo.
-ni yo- me apoya Cristel.
-pues yo si- dice el con aire superior y nosotras volteamos a verlo confundidas- ¿que? Podría ganar
-Claro, con tu maravilloso umbral del dolor- le digo burlona y mi amiga estalla en una carcajada mientras el me ve enojado- es la verdad, no durarías 4 días si te lastimas.
-tienes miedo de que te deje sola-me responde el.
-¿y yo?- reclama mi amiga.
-Clove odia a las mujeres, se realista Cristel, a quien le dolería es a ella- le dice el y yo lo empujo, nuestra platica se ve interrumpida por el director Wood que trae con el a los mentores de este año, son 2, Lyme Wood y Brutus Lendrex, no creo que se lleven muy bien a decir verdad, parecen siempre enojados el uno con el otro en las entrevistas.
Al terminar la hora y sonar el timbre, vamos a otra parte del gimnasio, donde revisamos los cuchillos y un chico de ultimo grado nos da consejos y tips especiales, yo copio todos sus movimientos perfectamente, el entrenador dice que soy la mejor en toda la escuela, incluyendo los últimos grados.
Suena el timbre y cambiamos de salón, nos unen a los del siguiente grado para el entrenamiento cuerpo a cuerpo de todos los viernes, solo que hoy será diferente, solo nos darán consejos y dirán nuestras “calificaciones” en combate, del 1 al doce como si estuviéramos en los Juegos.
Cristel recibe un 8, Demian un nueve y yo un 10, siguendo con la lista de los del siguiente grado- ahora feliciten a nuestra mejor calificación, un 11 de Cato Evans- termina el entrenador felicitándolo y todos aplauden, algunas chicas gritan, el publico lo ama.
Cato es el mejor de la escuela, era mi amigo cuando era pequeña pero no recuerdo mucho de él, solo que siempre fue fuerte y era muy nervioso. Desde hace 4 años que casi no le hablo y desde que me lastimo en un entrenamiento hace un año, mucho menos. Es un gran guerrero y yo soy la única chica con la que puede competir, cada quien con armas claro, sin mis cuchillos no tendría oportunidad contra nadie.
Después de los consejos de los entrenadores el timbre vuelve a sonar. Es la hora de la cosecha- suerte- nos dice Demian abrazándome y siguiendo con Cristel.
-suerte- le digo mientras lo veo desaparecer entre los chicos, mi amiga me ve nerviosa y nos damos la mano para darnos valor, caminamos por los pasillos que llevan directo a la plaza de muros blancos con adornos dorados, todo esta cubierto de banderines de colores y 2 pantallas colocadas a los lados del escenario.
Al llegar a mi lugar me levanto de puntitas para buscar a Clyde, no soy muy alta y tantas personas no me ayudan en nada pero veo que el se levanta de puntitas también y me saluda agitando la mano desde enfrente y le respondo haciendo lo mismo. Cristel saluda a su hermana mayor de 17 y el menor de 13, cruzamos la vista y ambos asentimos para indicarle a la otra que los hemos encontrado.
En el escenario Lyme, Brutus y el Alcalde Evans esperan sentados en mullidos sillones, entonces entra Olenka Hunter directa desde el capitolio y dando traspiés con sus monumentales tacones azul cielo, su falda entubada naranja fluorescente y una peluca que combina con su calzado, no puedo evitar reír cada vez que la veo y Cristel secunda mi opinión dejando ver una sonrisa burlona en medio de su manojo de nervios.
El Alcalde nos da la bienvenida y cuenta la historia de Panem, nuestro país, el día en que los 13 distritos se revelaron contra el gobierno del Capitolio desencadenando la revolución y acabando con miles de vidas y un distrito entero, el trece. Para apaciguar al pueblo el Capitolio creo los Juegos del Hambre, manteniéndonos controlados bajo un gobierno que poco le falta para ser tiránico; pero en el 2 solo vemos la competencia y no por qué peleamos. “Panem et circenses” recuerdo, mi abuelo solía decirme eso, era historiador y conocía demasiado las culturas que vivían en este mundo antes de la inundación, el tema siempre me fascino, la frase era Romana decía que mientras el pueblo tuviera entretenimiento y comida no se revelaría contra el gobierno, al pueblo pan y circo.
-Bienvenidos- dice Olenka fingiendo su sonrisa y su entusiasmo- la hora ha llegado para el Distrito 2, y estoy muy emocionada de representarlos un año mas- voltea hacia Brutus y Lyme y evita poner los ojos en blanco, ellos parecen divertidos con ella- ahora- continua dando una palmadita con sus manos y poniéndose derecha- elijamos a nuestros tributos, primero las señoritas- se dirige con sus ridículos pasitos hacia la urna de cristal a un par de metros, que con sus tacones parecen toda una odisea, mete la mano y entonces noto que el miedo y los nervios me abruman como todos los años y me muerdo los labios, con la mirada fija en la capitoliana que vuelve al micrófono, puedo oír la respiración de mis compañeras, entonces abre el papel y lo escucho, mi nombre resuena en los altavoces dela plaza y vuelvo como de una pesadilla, sigo aturdida y volteo a todos lados, Cristel me ve sorprendida y asustada- Clove Maverik- repite- ven acá.
Avanzo tambaleante por entre las chicas y después por el pasillo central hasta el escenario, sobre el las nauseas de mis nervios aumentan pero intento mantenerme sonriente cuando los aplausos me aclaman. Estoy a un paso de la gloria eterna o la muerte segura.
Desde arriba todo se ve como en mi sueño, todos los jóvenes de mi distrito están aquí esperando, nerviosos. Olenka me felicita y pide voluntarios, nadie se ofrece. Me dirijo a mis mentores y al Alcalde que también me felicitan emocionados.
-continuemos con los caballeros- dice la capitoliana, repite su viaje a las urnas de los hombres, ya nada me puede sorprender, solo debo saber el nombre de uno de mis nuevos contrincantes y esto se acaba- Clyde Maverik.
“no puede ser” pienso dando un par de pasos hacia atrás para evitar desmayarme. Pero desde donde estoy ahora puedo leer la papeleta, ahí esta mi apellido y el nombre de mi hermanito, tendré que matarlo si quiero volver

HOLA ROSE SOY TU PRIMERA LECTORA TIENES QUE SEGUIRLA PORFIS AME EL CAP SOY DEBA XOXO ATTE DEBA

Ya la cancele, esque la tengo en otro foro, lo siento no volverá a pasar :)

INA ME PODRIAS DAR EL LINCK PLIS XOXO ATTE DEBA

Okay solo deja lo encuentro

GRACIAS