Witches of Providence Fall's. | Datos.

Las dos caras de la luna

Érase una vez dos hermanas que habitaban la tierra joven, Akane y Crome, las llamaban. Hijas de la naturaleza y hermanas del equilibrio, pertenecientes a la primera Legión de brujas de todos los tiempos. Tan idénticas como la lluvia en el exterior, diferentes en su interior. Akane era la epifanía de la benignidad, mientras que Crome, estaba dominada por la oscuridad.

Un buen día, durante una de las lecciones que Naturaleza les estaba dando a sus aprendices, Akane quedó prendada de la belleza de un joven venado. Tan encandilada como se hallaba, comenzó a caminar en pos del animal. El venado la condujo hasta un claro en el bosque, donde un arroyo que bajaba de la montaña reflejaba el cielo. Akane no podía evitar mirar a los ojos del animal, que poseían la profundidad del universo. En señal de paz, Akane realizó un encantadora reverencia y le dijo su nombre. El venado se acercó a ella y habló con solemnidad; «Yo soy el protector del equilibrio, de la naturaleza». A lo que ella, curiosa, respondió: «Yo formo parte de él y aprendo de la naturaleza». Akane creyó ver como las comisuras de la boca del animal se curvaron en una sonrisa.

Y así fue como protegida y protector, se hicieron amigos.

Otro buen día, Crome iba paseando por los acantilados rocosos que protegían el hogar de la brujas, enfadada porque la Naturaleza la encontraba desequilibrada. Allí fue, donde en uno de los afilados picos, encontró posada a un águila. Y ella le preguntó: «¿Quién eres tú?». A lo que el águila, planeando para situarse a sus pies, respondió: «Soy el encargado de impartir justicia». Ella, creyendo que era una embustera, pues la justicia la impartía el equilibrio de la naturaleza, dijo: «Imposible, no está en tu mano». Los ojos del águila tornaron oscuros y respondió: «Mi justicia trata de exterminar el injusto equilibrio de la naturaleza. Todo ser vivo tiene el derecho de decidir su destino, su equilibrio». Crome quedó fascinada por sus palabras.

Y así fue como cazado y cazador se hicieron amigos.  

El tiempo pasó y con él, el poder de las hermanas creció. Naturaleza informó en una tarde verano que dentro de poco se hallarían preparadas para que su poder se desplegara y junto con él marcharse para obrar el bien. Akane corrió feliz a contárselo al Venado, pues habían planeado marcharse para así vivir juntos, brindándose su compañía. Crome, con una oscuridad cada vez más densa y profunda en su interior, se reunió con el Águila y le informó de que pronto su plan se llevaría a cabo. Habían planeado matar el equilibrio y la naturaleza, para sí quedarse con el poder para sí y nunca tener que compartirlo.

Aquélla misma noche, mientras Naturaleza daba uno de sus paseos reflexivos, Akane y el Venado se cruzaron con ella. Mientras Crome y el Águila acechaban agazapados tras los frondosos árboles. «Es el momento», susurró el cazador.

Tal como acordaron, Crome realizó un hechizo para inmovilizar a Naturaleza. El águila aprovechó para acercarse a ella y desgarrarle la garganta. Akane profirió un grito de terror. «Ahora le ha llegado el turno al equilibrio», dijo el Águila.

Crome, libre de escrúpulos y de culpa, materializó una flecha envenenada para lanzar al cuello de su hermana. Pero el Venado, cumpliendo con su cometido, se interpuso entre Akane y la flecha para conservar el equilibrio, muriendo en su lugar. Akane huyó del bosque, acudiendo a las cuevas, donde le contó al resto de la Legión la atrocidad llevada a cabo por Crome. Sabían que no estaban a salvo y que debían buscar una solución.

Akane recurrió a la luna en busca de ayuda y ésta, le dijo que encerraría a Crome en ella. Pero como eran hermanas, Akane también quedaría presa. La joven bruja entregó su vida para salvar el orden y el equilibrio. El Águila huyó, proclamando venganza y jurando que no descansaría hasta que toda magia fue erradicada. El Venado murió, pero sus progenitores lo restituyeron, jurando con sus vidas que siempre protegerían el equilibrio.

Así nació la leyenda de Las Dos Caras de la Luna. El lado visible era Akane; a la que toda bruja buenavanagloriaba y de donde provenía su fuente de poder. El lado oculto era Crome: a la que solo las brujas que poseían la oscuridad que un día a ella perteneció rendían cuentas. Quedó establecido, que una vez las aprendizas llegaran a la edad adecuada deberían pasar por un ritual de iniciación. La noche en que las dos lunas fueran visibles, la aprendiza se congregarían a orillas del mar. Si al mirar el reflejo del agua, encontraban la luna brillando, Akane sería su guía. Pero si por el contrario, nada era reflejado, Crome sería su perdición. Quedando así revelada la verdadera naturaleza de su poder y de su alma.

Historia

Durante varios siglos, La Legión más poderosa de todos los tiempos habitó en Salem, conviviendo en armonía con los humanos. Guardar el equilibrio de la Tierra y la naturaleza, siempre fue su misión. Pero a medida que el progreso llegaba, la curiosidad de la humanidad se acrecentaba, queriendo saber cada vez más, tratando de dar una explicación lógica a todo lo que escapaba de sus manos. Por ello, para proteger su acometido, se vieron obligadas a salir de los bosques y a internarse en la civilización. Aprendiendo a vivir bajo las normas de la sociedad. Pero durante los «Juicios de Salem» en 1692 se vieron obligadas a marcharse para salvaguardar sus vidas. Viajaron por el país a pie, flanqueadas por la familia Patronus, quienes velaban por su seguridad.

Tras un año de duro viaje, del que no todas ni todos lograron salir con vida, llegaron a un pequeño pueblo de la costa. Allí se asentaron y empezaron de cero. Y así estuvieron durante muchos años hasta que en el siglo XVIII, cuando todos pensaron que el peligro se había ido, un traidor encontró la forma de infiltrarse en las filas de la familia Patronus.

Una noche en la iglesia, La Legión celebraba una de sus reuniones del consejo. La última de todas. En medio del ritual, el traidor junto con el resto de los Venator, rodearon el edificio con cenizas de "madera verde", inhabilitando los poderes de las brujas y dejándolas atrapadas dentro. Así fue, como desprovistas de toda su magia, finalmente, La Legión fue cazada y derrotada.

Sin embargo, las brujas, que llevaban años luchando contra los cazadores y muy conscientes de que su muerte podría llegar cualquier día, encerraron sus poderes en el Grimorio, por el que los protectores velarían generación tras generación. Hasta que un día, las descendientes de la Legión recitaran el hechizo en voz alta y retomaran el acometido de sus antepasadas.

Providence Fall's

Situación geográfica: Providence Fall's es el pueblo más pequeño que existe en el estado de Maine, situado en la costa, limitando con StoryBrooke por el lado Este . Su población está dedicada a la pesca.
Población: 4.356 habitantes.
Clima: Cielos siempre encapotados y lluviosos. Durante el invierno las temperaturas nunca son superiores a los 0º grados. En verano, sus máximas temperaturas oscilan entre los 10º y 15º grados.
Centros de enseñanza: The Pine Tree High School (internado privado). Providence Fall's High School (instituto público).
Lugares de reunión habituales: El Grill, situado en el centro de la ciudad al que acuden tanto adultos como jóvenes. El Parque Nacional, situado al lado de una reserva, al que suelen acudir las familias los domingos. La Bahía, una playa donde se reúnen los habitantes para hacer hogueras o fiestas.

Baltasar Patronus

Varox Venator