Friendzone.

Capítulo 007

oh won't you please stop making me feel this way?

Summer Dunn.

¿Como es que siempre terminaba convenciéndome? Fran y yo estábamos en una pizzería llamada "Francescos", es literalmente su nombre pero en plural y masculino aunque básicamente la cosa es que no quería venir por que Fran sabe exactamente que mi tipo de comida no es la pizza... si, la mayoría de la gente me quiere golpear gracias a eso pero ¡me causa muchas nauseas! gracias al cielo vendían pastas así que no sufrí tanto como lo creí en un principio.

— ¿En que tanto piensas Summer? —me preguntó expectante mi mejor amiga.
— En como es que siempre acepto venir a comer pizza contigo cuando las dos sabemos que no es lo mío —le conteste con un pequeño puchero al final. Nunca podré superarlo.
— Aww Summer no te sientas mal, te amo mucho ignorando el horrible hecho de tu trauma con la pizza —se levanto de su asiento con la intención de abrazarme a lo que yo gustosa acepte. Los abrazos de Fran eran lo mejor del mundo, siempre te hacían sentir de una manera u otra querida, amada, protegida. Nos quedamos unos largos minutos en ese hermoso sello de amistad, nos encantaba mostrar el amor que nos tenemos ¡seremos mejores amigas por siempre! Después de nuestra pequeña escena fuimos por el postre y eso para mi significaba: helado de algodón de azúcar. No me gustaba la pizza pero si el helado de algodón de azúcar, creo que ahora ya entiendo por que Ian y Scar nunca quieren comer conmigo.

Por un momento me olvide completamente de Fran y pensé en el hermoso chico que me hizo la sesión de fotos el otro día... Alex. Es uno de los chicos mas lindos y apuestos que he visto en mis cortos 18 años. Sentí una extraña atracción hacia el y una parte de mi quería arriesgarse en pedirle su numero, ¡quería verlo de nuevo! y saber muchísimo mas acerca de el. El tratar de encontrarlo seria muy difícil así que definitivamente no seria una opción. ¡Tony! Oh dios mío Summer, eres un genio. Tony es muy amigo de Alex, era mi perfecta oportunidad para primero: agradecerle a Tony por la oportunidad que me ha dado ya que si no hubiera sido por el no conocería a Alex, y segundo: ¡salir con el! Sin pensarlo dos veces saque mi celular, sonriendo ampliamente hacia el mensaje que iba a enviar.

De Summer
Para Tony ❤️

¡Hola panquecito de caramelo! Haha ¿como amaneciste hoy? Espero que muy bien y si no, yo te tratare de contagiar mi felicidad hasta que sonrías y seas feliz de la vida. ¿Te apetece la idea de vernos en nuestro lugar de siempre? Necesito decirte algo urgentemente o bueno, no es tan urgente pero ¡lo necesito! Si no puedes no te preocupes pero enserio que me haría feliz tu presciencia, te quiero muchísimo mi bello Tony, cuídate mucho y besos xx.  

Pd: ¿Si vamos a hacer lo de mis lecciones en bicicleta? Me lo prometiste, pero tengo miedo :( si es que me enseñas ¿prometes cuidarme?

Muy segura de mi decisión le di un click al botón "Enviar" y espere pacientemente a su respuesta, la cual no me llego y mi estado de animo cambio drásticamente.


El siguiente día desperté con una hermosa melodía que puse como despertador, así ya no me daría tanta pereza y desesperación a la hora de despertarse, creo que es algo que todos deberíamos hacer para no estar de mal humor. Estire mi cuerpo entero sintiendo un ligero alivio al sentir como mis huesos crujían, amaba hacer eso en las mañanas. No tome una ducha pues había tomado una en la noche antes de dormir, me parecía mas cómodo de esa manera y no era algo que me diera flojera. Tome un vestido, unos zapatos y me peine antes de salir de mi bella morada para encaminarme hacia la escuela y tratar de hablarle a Tony sobre lo de Alex. Me gustaba ir caminando hacia la escuela así que como todos los días, hice mi camino hacia ese edificio que veía casi todos los días. Me encontré con mi graciosa amiga Scar y seguimos el camino juntas. Venia contándome sobre las locuras que hacia con Ian y como le había ido en su fin de semana, pero es que como amaba a ese par.

— Yo insisto en que algún día Ian y tu se van a casar.
— ¿Por que dices eso Summer? —note como sus mejillas comenzaban a tomar color, estaba nerviosa.
— Se me hacen una hermosa pareja, claro, si no fueran mejores amigos yo amaría verlos como novios.
— ¿Enserio lo crees? Pues yo pienso que Tony y tu tendrán algo aparte de ser mejores amigos algún día —¿Eh? ¿Tony y yo? ¡Imposible!— Summer ¿que no te has dado cuenta?
— ¿De que?
— De la forma en la que Tony te mira.
— ¿Porque? ¿Porque es la misma con la que tu miras a Ian? —le sentencie y las dos nos quedamos calladas, la verdad es que nunca me había puesto a pensar en eso y le reste mucha importancia a esa conversación lo que me restaba de tiempo en la escuela.



¡No lo podía creer! Pobre de Danna, realmente que me sentí demasiado mal por ella. Una parte de mi estaba sumida en el enojo y la rabia, la otra estaba triste y arrepentida por no haber hecho algo cuando tuve la oportunidad. Unos minutos después de cuando vi a Danna salir del salón, yo salí disparada en busca de mi rubia amiga esperando tener éxito, estaba segura que Danna necesitaba un abrazo. Luego pare en seco y recordé la relación que manteníamos en la escuela... ¡Al diablo con eso! Oh rayos, ¿yo dije eso? Me golpee mentalmente por la expresión que acababa de usar así que decidí cambiarla. ¡A quien le interesa! Es una de mis mejores amigas y no por una cosa tan tonta la dejare de apoyar.

Inicie mi búsqueda por todos los lugares posibles en los que podría estar y al final se me ocurrió ir a los baños. Me encontré con una imagen hermosa para mis ojos, Danna y Drew riéndose, Drew tenía su brazo rodeado en los hombros de Danna y decidí no interrumpir su momento. La rubia sintió mi mirada penetrante y yo solo sonreí, haciéndole entender que la apoyaba y que me sentía demasiado feliz por ella a lo que me correspondió con una brillante sonrisa que definitivamente hizo mi día entero. Amaba ver a mis amigos felices, no había mejor sensación que verlos sonriendo.



Anthony Edwards.

Amanecí con un dolor de cabeza insoportable, odiaba tanto cuando me pasaba eso. El día anterior me había hospedado en casa de mi mejor amigo Caden con quien comparto la misma situación. Nunca me ha gustado hablar sobre mi situación pero el castaño me regalo su confianza, amistad y amor, sonara muy gay pero es cierto, por una parte Caden salvo mi vida.

No quería hacer nada ese día, cuando yo me ponía de mal humor era para que nadie me hablara y todos lo sabían. Talle mis ojos suavemente y bostece dando a entender que aun tenia sueño. Como la persona sucia que soy decidí no darme una ducha, que al cabo estaría en la escuela donde jugaría basquetball y no tendría sentido bañarme si voy a sudar y oler mal otra vez ¿no?

A lo largo de mi aburrido día de escuela, trate de evitar encontrarme con Summer. Estaba de mal humor y una persona tan feliz como ella no merecía que le arruinara el día ni mucho menos que me desquitara sobre ella. Muchos no ven el por que Summer y yo somos mejores amigos pero ¿a mi que me interesa su opinión? Si yo soy feliz junto a ella y ella junto a mi entones ¿cuál es el bendito problema? Aunque ahí viene el problema, estaba enamorado de ella y nadie nunca cambiara eso, tenia que decirlo algún día de todos modos. Nadie logro entender como es que al solo escuchar su nombre, mi corazón late tan rápido como la entrega de tu hamburguesa en un establecimiento de comida rápida... Esa fue un muy rara comparación pero ¡vean como es que pongo cuando hablo de Summer! Me hace decir incoherencias y soy un completo estúpido cada vez que estoy con ella pero supongo que es el efecto que tiene en mi, la verdad nunca creí amar tanto a alguien,

Caminaba como zombie hasta que sentí una mano posandose sobre mi brazo. La primera impresión que me lleve fue que su cabello castaño era demasiado largo, así como el pelo de mi Summer y que sus ojos tenían un leve brillo como los ojos de mi Summer. ¡Madre purísima! ¡Era Summer! ¿Que podía hacer? No quería que notara mi mal humor. Diablos, diablos, diablos.

— Tony ¿Donde has estado todo el día? Oh no, espera ¿Como has estado? —me pregunto con su bella sonrisa que me ponía en las nubes.
— Estuve caminando, en clases, en los baños, ya sabes Summer. Y he estado muy bien, gracias por preguntar.
— No me suena a que estés bien Tony pero confió en ti, ¡quería decirte algo importante! Ayer te envíe un mensaje pero creo que no lo viste así que tengo que aprovechar mi oportunidad —¿Decirme algo? Sentí como mis manos comenzaron a sudar y sentí pena por mi mismo.
— Tu no te preocupes Summ, soy todo oídos.
— Primero que nada quería agradecerte por la sesión de fotos el otro día con tu amigo Alex —note como sus mejillas se encendieron salvajemente al mencionar el nombre de Alex y sentí cierta molestia en mi pecho. — Y es que bueno, no se como decirlo pero m-me gustaría salir con el, me pareció una persona muy interesante y enserio me gustaría conocerlo mas —no podía asimilarlo. Mis ojos se abrieron como platos y nada circulaba por mi mente. ¿Que? ¿Summer quería salir con Alex? Bendito seas Tony, perdiste la única oportunidad que tenias con la chica de tus sueños.
— Oh bueno, que genial Summer. Yo espero que puedas progresar con el y te deseo toda la suerte del mundo.
— Aww Tony, te amo demasiado ¿lo sabias? Eres el mejor amigo del mundo.

Mejor amigo. Mejor amigo. Mejor amigo.
Tienes que superarlo Tony, solo serias su mejor amigo.



Definitivamente mi día no podía marchar peor. En esos momentos me sentía la basura mas grande de este mundo. La única y simple persona que me ayudaría a sobrepasarlo seria Caden, mi castaño mejor amigo. Luego le mandaría algunos mensajes a Drew preguntándole consejos sobre coquetear, se que ya no me servían de nada pero aun valía la pena intentarlo. Después de la escuela camine lentamente hasta su casa pues me dio un poco flojera buscarlo en la gigantesca escuela. Me senté sobre las escaleras que estaban posicionadas al frente de su casa y espere unos minutos hasta que note una cabellera castaña y alborotada a lo lejos indicándome que efectivamente Caden había llegado. Me pare de las no tan cómodas escaleras y corrí hasta el buscando su apoyo, el solo me acaricio la espalda de arriba hacia abajo como si ya tuviera idea de lo que me había pasado. Entramos juntos a su casa y su amable mama nos ofreció comer. La casa de Caden era como un segundo hogar para mi, si no me sentía cómodo en mi casa podía venirme cuando quisiera y la familia de Caden siempre me aceptaría, son de esas familias que aman dar amor.

El resto de la tarde hicimos cosas que normalmente hacíamos como: ver películas mientras comíamos helado para calmar las penas, jugar videojuegos de cualquier tipo y platicar de cosas lo mas random posibles. Mis tardes con Caden eran lo mejor en todo el mundo y siempre terminaban sanandome de cualquier mal que me pasara, claro que siempre al próximo día algo me ponía mal y volvía a casa de Caden. Ahora que lo noto casi todos los días voy a casa de Caden ¿ósea que me sentía casi todos los días? Solo me quedaba decir una cosa.

Summer Dunn, todo esto era tu culpa.