THEY DONT KNOW ABOUT US (LOUIS TOMLINSON Y TU)

"jamás imaginé que, viviría las cosas que viví en Londres. Ni tampoco que mi vida cambiaría tan drásticamente. Ni mucho menos, que conocería a una persona que lo cambiaría todo. Jamás imaginé que conocería a Louis. a ese chico que se convertiria en el amor de mi vida..."

hola a todos!! soy diana y esta es mi nueva nove espero que les guste aqui les dejo el primer cap... comenten!!

Capítulo 1:


(Narra maddie)
Llegué a Londres en la madrugada. Hacía muchísimo frío, pero practicamente ni lo noté, ya que finalmente había llegado. Tomé el bus, que me llevaría a mi hotel, que para mi mala suerte quedaba a 1 hora y media de la ciudad. Me iba a hospedar allí, ya que los hoteles en la ciudad eran muy caros, y yo estaba corta de fondos.

Había decidido venir a Londres en mis vacaciones de verano. Estudiar medicina era exhaustivo y mucho más si era medicina en un idioma diferente a mi lengua materna, el español. El vuelo de Alemania a Inglaterra no había durado mucho, pero estaba cansada de todos modos.

Después de un largo viaje, el bus terminó su ruta y me dejó en lo que era las fueras de Londres. Era muy acogedor y quedé encantada al instante. Encontré mi hotel con facilidad. Este se encontraba frente a un café, poco concurrido. Entré al hotel y me encontré con una cansada, pero amigable recepcionista. Me dio la llave mi habitación, que sería mi hogar por las próximas 2 semanas.

Entré en mi habitación, dejé mis maletas, me puse la primera camiseta cómoda que encontré, un pantalón de pijama y me eché en la cama. Observé mi habitación detenidamente. Era bonita. No era de primera , pero eso no importaba.
Cerré los ojos y sonreí: no podía creer que estuviera en la misma ciudad en la que vivía One Direction.


(Narra Louis Tomlinson)

Las últimas 2 semanas habían sido las peores de mi vida. Estaba confundido, triste y molesto conmigo mismo, furioso en realidad. Sabía que ella no estaba lista, pero...¡Yo la amaba demasiado, y tenía que pedirle que se casara conmigo! ..¿Es que acaso Eleanor no me amaba?
Siempre decía que me quería y que quería pasar el resto de su vida conmigo...¿entonces porqué me rechazó cuando le pedí matrimonio?

Esas malditas preguntas rondaban por mi cabeza desde hacía 2 semanas. ¿Porqué? ¿Porqué me había hecho esto? ¿Qué hice mal?¿Fui acaso un mal novio?¿Cometí algún error? O tal vez ella no me amaba de la forma que yo la amaba a ella. Tal vez solo me que quería como un amig...

Tocaron a la puerta.

-¿Quién es?- contesté algo molesto, cortante

-Soy yo, Lou- dijo abriendo la puerta Liam- es hora de almorzar....¿vas a bajar hoy?

-Hm....hoy no Liam..- contesté seco.

-De acuerdo-masculló cerrando la puerta y se fue.

A lo lejos lo escuché decir:

- La misma respuesta, chicos: "Hoy, no."

Bufé. Sabía que los chicos se preocupaban por mí, y que querían que yo siguiera con mi vida, pero siendo sinceros, no podía. Simplemente no podía.

No había salido de mi habitación desde "aquella noche", en la que le había pedido a Eleanor que se casara conmigo, y ya ni recordaba la última vez que había sonreido. Mi vida se había vuelto un desastre. Un maldito desastre sin remedio alguno.....

Y de repente me quedé dormido lamentando mi mala suerte.

Desperté con la adrenalina corriéndome por las venas. Miré el reloj, eran las 6 pm. Me levanté de la cama de un salto y me di una ducha rápida. Me puse unos jeans y un polo a rayas, uno de mis favoritos. Luego recordé que Eleanor amaba ese polo y me lo quité. El solo recuerdo de su rostro me partía el alma en dos. Agarré la primera camiseta que vi en mi armario y me la puse.

Luego agarré una casaca, lentes oscuros, mi iPhone y mi billetera. No se que me pasaba, pero estaba decidido a salir. Bajé las escaleras como un rayo y tomé las llaves de mi auto.

-Oye Louis, ¿adónde v...?- gritó Niall, que estaba tocando su guitarra en la sala, pero no le tomé atención alguna.

Solo sabía que debía salir de allí y rápido. No tenía idea adonde ir, ni porqué, solo sentía un impulso, que hacía que mi corazón se acelerara. Conducía como un loco y ni siquiera me fijaba por donde iba.

Después de un rato me di cuenta que me encontraba a las afueras de Londres, con un terrible dolor de cabeza y una indescriptible impotencia. Entré en un cafe y me senté en la primera mesa que vi.

La adrenalina y el frenético impulso habían abandonado mi cuerpo, para ahora ser reemplazados por la depresión y la tristeza. ¡¿Eleanor porqué me hiciste esto?!

(Narra maddie)

Mis tres días en Londres habían sido maravillosos. Hasta ahora había conocido algunas de las principales atracciones de la ciudad, como el Big Ben. La ciudad era simplemente hermosa.

Además había creado mi propia rutina: todo el día me la pasaba en la ciudad paseando y visitando lugares y en la noche iba al café, al frente de mi hotel, que resultaba ser también algo así como un karaoke. Allí iba con mis libros de medicina a estudiar un poco y a pasar el rato.
Que estuviera de vacaciones no significaba que debía olvidarme del estudio.

Crucé la calle y me senté en la misma mesa, en la que me venía sentando desde hacía 3 días. La mesera, Annie, de quien me había hecho amiga, vino a saludarme con mi café en la mano. Me preguntó que había visitado hoy y se lo conté con todo detalle.

-Debió de ser muy emocionante...- dijo amenamente

-Lo fue- le respondí yo, sonriente

Llegaron clientes, así que haciendo ademán de irse, dijo:

-Bueno, me voy. Oye, ¿te había mencionado, que tu acento británico es bastante bueno?

Reí con ganas.

-Gracias- dije alagada- en serio, gracias.

Me guiñó en ojo y se fue.

Aún sonriendo, abrí el libro y comencé a leer y a hacer apuntes. Estaba leyendo sobre el corazón: mi tema favorito. Comencé a leer un poco sobre su funcionamiento, pero habían muchas palabras que no entendía. Dejé caer mi lapicero con frustración. Levanté la mirada y comencé a observar el café un busca de algo que me distrajese. Estaba ligeramente vacío. Solo algunas parejas y un grupo de amigos conversando despreocupadamente. Seguí mirando con detenimiento el establecimiento.

Tan tranquila me encontraba, que me sobresalté al notar un par de ojos azules observándome con expectación.


(Narra Louis Tomlinson)

Después de haber entrado al café y haberme sentado en la primera mesa libre que vi, me dediqué por un buen rato a observar el lugar. El café resultaba también ser un karaoke. Algunos subían a cantar con su guitarra y otros simplemente cantaban con las canciones de la rocola.

Después de un rato me vi obligado a comsumir un café y una galleta ya que tarde o temprano me iban a botar y tendría que encontrame otro lugar donde pasar el rato, lo cual no sería agradable en lo absoluto, ya que el lugar no estaba nada mal.

Y sí. Allí me quedé.

Estaba totalmente absorto mirando al suelo, que cuando sonó la campanilla de la puerta ( que sonaba al salir o entrar alguien) me sobresalté. Levanté la mirada y la vi entrar.

Era una hermosa chica de unos 20 años, no muy alta y de piel ligeramente bronceada. Vestía muy bien y tenía un cuerpo esbelto. Su cabello de color negro, descansaba en su hombro en una trenza. Entraba con libros en la mano, muy pesados para mi parecer.

Se sentó en la mesa frente a la mía, pero aún así no se había dado ni cuenta de mi existencia. La mesera se le acercó y la saludó con un beso. Al parecer ya se conocían. ¿Acaso vivía por aquí? Hablaron por un rato (ella hablaba en perfecto inglés) hasta que la mesera se fue, dejándola sola. Me quité las gafas para verla mejor y me quedé mirándola mientras leía sus libros y hacía apuntes. ¿Eran...eran libros de medicina? No estaban en inglés de eso estaba muy seguro. ¡Wow, linda e inteligente!

Repentinamente frunció en ceño. y dejó caer su lapicero en la mesa con frustración. Levantó la mirada y comenzó a pasear su mirada por el café.
De repente nuestras miradas se encontraron y ella se sobresaltó ligeramente. Bajó la mirada ¿Me habría reconocido?